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DR. PABLO ELPIDIO GARCÍA GRANJA
Cardiólogo responsable de la Unidad de Cardiología del Deporte del centro médico Recoletas Jardín Botánico de Valladolid
Cada año mueren en España alrededor de 30.000 personas por muerte súbita de origen cardiovascular. En muchos casos los factores son la diabetes, la obesidad, el tabaquismo, el sedentarismo…, pero también suceden muertes en personas jóvenes, sanas y deportistas. En España se estiman dos casos de muerte súbita del deportista anuales por cada 100.000 personas menores de 35 años y uno por cada 18.000 personas hasta los 75 años, lo que supone aproximadamente 350 muertes al año en personas jóvenes. A pesar de esta realidad, el Dr. Pablo Elpidio García Granja, cardiólogo de Recoletas con formación específica en arritmias cardiacas, cardiopatías hereditarias y cardiología del deporte, considera que la mayoría de los trastornos asociados con un incremento del riesgo de muerte súbita cardiaca se pueden sospechar o identificar mediante la realización de un completo reconocimiento cardiológico o screening cardiovascular.
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Por ello precisamente, el centro médico Recoletas Jardín Botánico de Valladolid acaba de crear una Unidad de Cardiología del Deporte desde la que se realizan diversas pruebas y estudios a los deportistas profesionales y aficionados para la detección precoz de cardiopatías implicadas en la muerte súbita y la evaluación y mejora del rendimiento deportivo. El Dr. García Granja, que es quien dirige la unidad, asegura que además de la historia clínica y una exploración física inicial, las pruebas indicadas para una evaluación completa son un electrocardiograma para analizar la actividad eléctrica cardiaca, técnica imprescindible por su alta sensibilidad para detectar muchas de las cardiopatías implicadas en la muerte súbita de
los deportistas más jóvenes; un ecocardiagrama para la evaluación morfológica y funcional de las estructuras cardiacas (cavidades, aorta, espesor de las paredes, válvulas cardiacas, etc); y una ergoespirometría o prueba de esfuerzo con análisis de intercambio de gases, en la que se realiza un ejercicio físico controlado máximo en cinta rodante o bicicleta y permite la evaluación cardiovascular y respiratoria, así como la determinación de parámetros de rendimiento deportivo (umbrales de esfuerzo, consumo máximo de oxígeno, economía de carrera…). El objetivo es aumentar la seguridad del deportista mediante la detección temprana de situaciones de riesgo y la evaluación del rendimiento deportivo