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Zoo San Diego
C omo es de conocimiento general, el zoológico de San Diego lleva décadas siendo reconocido como el mejor del mundo. No es sólo su gran dimensión, su extensa diversidad de los animales que allí viven y su inigualable belleza, si no también su dedicada vocación tanto a sus habitantes locales como a toda la fauna del mundo; incluso buscan la protección de árboles que ya solo puedes encontrar o dentro de sus parques o en sus alrededores por estar estos extintos en otros paisajes del globo.
Al San Diego Zoo el concepto de zoológico le queda corto, es toda una organización internacional sin fines de lucro que busca la conservación del Reino Animal y que opera principalmente mediante dos parques: el San Diego Zoo y el San Diego Zoo Safari Park. Éste último, aunque me- nos conocido, es igual de espectacular. Al adentrarse a este espacio natural, no solo te transportas a otro lugar con inusuales escenarios, sino que te empapas del amor y dedicación de los colaboradores con los animales y su entorno. Quienes trabajan ahí se consideran una familia que comparten un fin. Desde entrenadores, expertos, así como investigadores y científicos en diferentes temas, pero cuya meta es ayudar y mejorar las condiciones tanto de los animales como de sus ecosistemas. Para ellos, no basta con tratar bien a los suyos, buscan trascender hacia los hábitats más necesitados. Toda esa pasión se ve reflejada en un lugar mágico y lleno de vida.
Y, después de postergarse por la pandemia un par de años, por fin el pasado marzo del 2022 el San Diego Zoo abrió sus puertas al Denny Sanford Wildlife Explorers Basecamp. Un nuevo espacio enfocado para todas las edades, pero sobre todo para los más pequeños, ya que éstos podrán jugar e interactuar de más cerca con la vida silvestre. Ambientado con un piso que hace alusión a la arena, pero de textura suave y segura, y con un ambiente rodeado de instalaciones interactivas para que adultos y niños se sientan auténticos exploradores, la “Base de Campo” es un lugar idílico para divertirse y aprender; realmente un must y una excelente excusa para volver a visitar o hacerlo por primera vez, el zoológico de esta ciudad californiana.
EL BASECAMP ES UN LUGAR IDÍLICO PARA DIVERTIRSE Y APRENDER; REALMENTE UN MUST Y UNA EXCELENTE EXCUSA PARA VOLVER A VISITAR O HACERLO POR PRIMERA VEZ.
Lo más interesante es que dentro del Basecamp, además de poder encontrar animales muy tiernos como los búhos de madriguera, los osos perezosos o el zorro miniatura conocido oficialmente como Zorro del Desierto, hacen mucho énfasis en reptiles e insectos que es común encontrarse cuando se sale a acampar, pero los cuales no son siempre los más queridos, sino más bien temidos. Más la forma en que los presentan y los reconocen y apapachan dentro de este recinto, vuelven empático y seguidor a cualquiera que los visite. Tarántulas, alacranes, boas y muchas otras especies son expuestas con amor y devoción, haciendo mucho énfasis en que su belleza radica en el importante papel que cumplen dentro de la naturaleza de nuestro planeta y que son ellos los más afectados por nuestras acciones o por nuestra falta de acción para conservarlos. Incluso gran parte de los seres que aquí habitan fueron rescatados por haber sido considerados erróneamente como mascotas.
Un lugar de innovación recreativa para todos lo sentidos y que contiene el principal ADN del San Diego Zoo: la conservación en su mayor apogeo hace del Basecamp y de todos los espacios de la alianza del San Diego Zoo Wildlife, una joya fundamental para el futuro de nuestro planeta.
# zoo.sandiegozoo.org
Instagram: @sandiegozoo
Facebook: /San Diego Zoo