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UN GRITO de Independencia
Hay gritos de alegría, sorpresa o miedo, los hay también de angustia, enojo, dolor o estímulo, pero indudablemente, el grito más audible y de larga duración es sin duda, para muchos países en América Latina que vivieron el colonialismo, que resuena en la historia y lleva implícita la fuerza de muchos pueblos, el grito de independencia en América latina y sobre todo con las diferentes luchas que cada país tomó para ser libre. Abriendo un largo camino de luchas contra la corona española que se conmemora cada año como fiesta patria. Estos países tienen en común 200 años de libertad.
Venezuela: 19 de abril de 1810
Argentina: 25 de mayo de 1810
Colombia: 20 de Julio de 1810
México: 16 de septiembre 1810
Chile: 18 de septiembre de 1810
Uruguay: 28 de febrero de 1811
Paraguay: 14 de mayo de 1811
Perú: declaró su independencia el 28 de Julio de 1821.
Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador, Costa Rica: comparten el 15 de septiembre de 1821
Panamá: el 28 de noviembre de 1821.
República dominicana: 27 de febrero de 1844
Cuba: la última colonia española en el continente, decidió independizarse de España el 10 de octubre de 1868, lo que llevó a décadas de guerra y lucha hasta el 12 de agosto de 1898, cuando España se retiró oficialmente de Cuba.
Aunque Brasil no comparte el mismo idioma, es un vecino imponente en la región y sí comparte una historia como colonia portuguesa. Brasil logró su independencia de Portugal el 7 de septiembre de 1822 con el grito de Ipiranga.
En Puerto Rico hubo varios in tentos por la libertad, pero al final fue cedida a los Esta dos Unidos por parte de España el 10 de diciem bre de 1898 mediante el tratado de Paris. ¿Cada País con su bandera se levantan con el grito de independencia y tu como cristiano te has levantado a dar el grito de independencia del enemigo que te impulsa a pecar?
La palabra nos presenta diferentes recursos para ayudarnos a vencer nuestros errores y pecados. En esta vida, nunca seremos perfectamente victoriosos sobre el pecado.
1 JUAN 1:8: Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Pero esa debe ser nuestra meta. Con la ayuda de Dios, y siguiendo los principios de Su palabra, podemos progresivamente vencer el pecado y llegar a ser más y más como Cristo. El primer recurso que la Biblia menciona para ayudarnos a vencer el pecado es el Espíritu Santo. El Espíritu Santo es un don que Dios nos ha dado para ser victoriosos en el vivir cristiano.
En GÁLATAS 5:16-18: 16 Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. 17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis. 18 Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.
Dios hace un contraste entre las obras de la carne y el fruto del Espíritu, somos llamados a caminar en el Espíritu. Todos ya poseen el Espíritu Santo, pero necesitamos caminar en él, dejando bajo Su control nuestra voluntad. Esto significa que deberíamos llevar a la práctica lo que el Espíritu Santo nos induce a hacer en nuestras vidas, en lugar de seguir los deseos de la carne.
Y Así como cada País grito y se independizo, hoy es el momento de levantar tu voz y vencer cada lucha y batalla personal por la que estas pasando, y de corazón independizarte de todo lo que te arrastra a herrar, pecar y a equivocarte una y otra vez.
¿Y hoy es tu día de independencia?
Con Amor
Pst. Claudia Trebilcock @entremujeres_col