Textos seleccionados en el II Concurso provincial de microrrelatos by educacion malaga

Trabajos seleccionados en el Segundo Concurso provincial de microrrelatos educativos “Cuéntanos una historia” 3 de mayo de 2016 Sala Iniciarte 11:30 horas 2

EDUCACIÓN PRIMARIA

Don Quijote en la playa En un lugar de la costa, de cuyo nombre no quiero acordarme, vivía un hidalgo pescador llamado Don Quijeto que cabalgaba en su moto con la caña en ristre, en busca de una merluza. Lo acompaña su amigo Sancho Pinza a lomos de su bicicleta. Cuando llegó a la playa, los bañistas le parecieron tiburones y empezó a darles caña con la caña. Los socorristas les echaron de la playa. A lo lejos, un gigante con un solo ojo brillante se acercó con su moto y empezó a tirarle piedras al ojo. Cuando le dio empezó a gritar: “¡Le he dejado cegato!”. Entonces Sancho le dijo: “señor, ¿está tonto?, ¡se ha cargado la bombilla del faro!”. El farero se mosqueó, salió pegando gritos con una escoba en la mano y decía: “como los pille…” Don Quijeto le dijo a Sancho Pinza: “pues va a ser que sí”, y salieron corriendo. Y esto fue su día en la playa.

Andrea García Navarro 3º de Primaria C.E.I.P. Manuel Fernández de Churriana Mi abuelo Alonso Germán empezó a leer “Don Quijote de la Mancha” en clase. La seño les contó cómo era este personaje y entonces se dio cuenta 5

de que se parecía mucho a su abuelo. ¿Por qué? Pues su abuelo, que además se llamaba Alonso, siempre había ido en moto a todas partes y la cuidaba como si estuviera viva, ¡tenía ya un montón de años y seguía como nueva! La llamaba “Rocinante”. Alonso tenía un amigo que se llamaba Pancho, regordete y bajito, simpático y campechano, y desde que los dos se habían jubilado iban juntos a todas partes. Pasaban mucho tiempo en la biblioteca, ¿Y sabéis cuáles eran sus libros favoritos? ¡Los de Caballería! El abuelo de Germán tenía hasta su propia Dulcinea, su abuela Aldonza, a la que había conocido en un tren que atravesaba Castilla La Mancha, cuando sus familias habían partido de Andalucía para empezar una nueva vida en Madrid. Desde entonces no se habían separado. Algunas personas decían que Alonso estaba un poco loco porque siempre estaba fantaseando, pero Germán sabía que no era así. Era su mejor amigo, con el que leyendo libros de caballería imaginaba vivir grandes aventuras.

Clara García Castañeda 5º de Primaria C.E.I.P. Clara Campoamor de Málaga Don Quijote y la máquina del tiempo Un día Don Quijote y Sancho recorrían unas tierras extrañas, 6

cuando se encontraron con niebla espesa.  Señor - dijo Sancho - se está haciendo tarde, deberíamos encontrar un lugar para pasar la noche.  Buena idea Sancho - contestó Don Quijote. - Allí se ve una casa. Pediremos cena y cama para hoy. Llamaron a la puerta y apareció un hombre muy alto y flaco, vestido con una túnica negra.  ¿Qué quieren? - Preguntó con voz profunda. Sancho Panza tragó saliva y dijo:  Queríamos alojamiento para mi señor y para mí, y si es posible cuadra para estos animales.  Pasad. Justo hay sitio para todos. Cenaron y se fueron a dormir. A la mañana siguiente se despertaron con mucho ruido. Se asomaron a la ventana y vieron un pájaro gigantesco que volaba a mucha altura. Las casas eran tan altas que tocaban el cielo y había carrozas raras.  Sancho, esto es obra del mago, que nos ha embrujado - dijo Don Quijote. En una farola había una fecha:  Señor, ahí pone que estamos en el año 1990 - dijo Sancho.

Asustados volvieron a la cama y quedaron dormidos de nuevo, despertando en su tiempo. Martín Barreira Montesanto 5º de Primaria CEIP Clara Campoamor de Málaga Don Quijote y los lobos Érase un día caluroso y soleado, en el que Don Quijote y Sancho se dirigían hacia el monte con su caballo Rocinante y su burro Rucio. Al cabo de unas horas, divisaron un conjunto de árboles y Sancho dijo:  ¡Vamos a descansar, llevamos mucho camino recorrido! Don Quijote fijándose en aquel bosquecillo creyó ver unos lobos salvajes y hambrientos que los amenazaban, agarró fuerte las riendas de Rocinante y su lanza preparada para el ataque, pues pensó que esas fieras les podrían hacer daño y no llegarían al castillo donde le esperaba su amada Dulcinea. Don Quijote se abalanzó a galope contra los árboles que creía lobos y su lanza quedó enganchada en la rama de uno de los árboles y el caballero cayó al suelo. Sancho acudió a levantarlo y se dijo:  ¿No le he dicho a vuestra merced que eran árboles y no lobos? Sancho sacó unas viandas de las alforjas de Rucio, y bebieron agua, se refrescaron y sentados a la sombra comieron. 8

Don Quijote cansado y magullado se quedó dormido con una sonrisa soñando aventuras de caballeros andantes e imaginando a Dulcinea esperándole en la puerta del castillo.

Jaime Elicegui Huertas 6º de Primaria CEIP Clara Campoamor de Málaga Las increíbles aventuras de Don Quijote y los marcianos Así, como Don Quijote y su escudero Sancho viajan a Marte en su nave Rocinante XII. Cuando llegan, Don Quijote le dice a Sancho:  Sancho, la aventura va guiando nuestras cosas mejor de lo que esperábamos a desear porque ves allí, amigo Sancho Panza, a esos marcianos con quien pienso hacer batalla y quitarles a todos sus vidas.  ¿Qué marcianos? – dijo Sancho Panza –  Aquellos que allí ves – respondió su amo - de dos cabezas y ocho brazos.  Eso no son marcianos – dijo su escudero - es un volcán, y te recomiendo que no lo ataques…  Tonterías - dijo Don Quijote - eso es un marciano, y si tienes miedo, quítate de ahí, que yo me pondré en fiera y desigual batalla.  ¡Don Quijote! – dijo Sancho Panza – eso es un volcán.

Cuando Don Quijote se dio cuenta de que eran volcanes, no los atacó. Don Quijote volvió con Sancho Panza, y ambos se fueron en su nave Rocinante XII.  Sabes, Sancho Panza – dijo Don Quijote – Algún día encontraré a personas que luchen contra mí. Rubén Serichol Piédrola 4º de Primaria Colegio Cerrado de Calderón de Málaga La biblioteca Una noche, Miguel se despertó con una rara sensación. Fue a su biblioteca para leer como siempre que se encontraba así para relajarse e imaginar ser el protagonista. Pero esta vez cuando entró sus libros no estaban. Tal fue la impresión que se desmayó. Al día siguiente llamó Sancho, el aguacil del pueblo, que era un hombre regordete, bajito y bonachón. Miguel le explicó todo lo ocurrido la noche anterior e indignado y algo enfadado le exigió que debía encontrar al ladrón inmediatamente. El aguacil le dijo que lo investigaría y se marchó dejando a Miguel muy decepcionado por no haberle hecho mucho caso. Su hija Galatea y sus sobrinos Rinconete y Cortadillo intentaron animarlo pero era imposible, así que decidió acostarse y esperar noticias. Esa noche tuvo sueños rarísimos de cárceles, molinos y aventuras. 10

Cuando se despertó fue a su biblioteca para ver sus estanterías vacías donde antes estuvieron sus libros y cuando entró, sorprendentemente la biblioteca estaba como siempre, con todos sus libros en su sitio. ¿Había sido una pesadilla o se estaba volviendo loco? Se preguntaba. Una vez se tranquilizó, decidió escribir todo lo que había soñado esa noche, pero eso, es otra historia…

Marta Gallego López 5º de Primaria C.E.I.P. María Teresa León de San Pedro Alcántara Don Quijote va a la perrera Don Quijote fue a la perrera a comprarse un perro. Él quería comprarse un perro porque le gustaban mucho y hacían compañía. Tenía pensado comprarse uno grande pero cuando llegó y vio al chihuahua tan pequeño y tan bonito no pudo resistirse y se lo compró. Estaba muy contento con su perro porque era muy cariñoso. Dulcinea fue a casa de Don Quijote y vio el chihuahua y dijo: 

¡Qué bonito¡ ¿Cómo se llama?



-Se llama Roberto.

¡Ay, qué bonito es ese nombre! Don Quijote le dijo gracias y se puso colorado. Luego lo sacó de paseo y a todo el mundo le gustó el chihuahua Roberto.

Un día de los que lo sacaba a pasear, se encontró con Sancho Panza que iba con su burro. De pronto se puso a llover y tuvieron que correr a meterse en un molino que vieron a lo lejos. Cuando llegaron, llovía mucho y no pudieron salir en un buen rato. Se pusieron a contarse historias mientras que el burro y el perro se hicieron amigos. A partir de ese día salieron siempre juntos a pasear y el burro y el chihuahua se lo pasaban bomba con las historias que contaban sus amos. Miriam Haltout Ocaña 3º de Primaria C.E.I.P. Manuel Fernández de Churriana La gran aventura Érase una vez un pequeño pueblo llamado Alcalá de Henares, en Madrid, donde nació un niño llamado Miguel de Cervantes, en una familia pobre. Este niño quería ser caballero andante, pero su padre lo llevó a la escuela para aprender. Así que no le quedó más remedio que escribir las aventuras que quería vivir y se inventó al caballero don Quijote y al escudero Sancho para que tuviesen aventuras. Cuando ya había escrito las historias de don Quijote y Sancho, se le ocurrió viajar con su hermano Rodrigo en barco para vivir las mismas aventuras que las de don Quijote. La gran aventura comenzó con una tormenta, que hizo que el barco se hundiera y que todos los marineros murieran, menos 12

Cervantes y Rodrigo, que acabaron capturados y siendo esclavos del malvado Rey de la Oscuridad Eterna, que vivía en la isla Pesadilla. El Rey los obligó a excavar en la isla buscando oro hasta que, de tanto excavar, hicieron un túnel que llegaba hasta otra isla donde había dos barcos del malvado Rey de la Oscuridad. Al escaparse, otro barco los persiguió, pero al final ganaron Cervantes y su hermano. Y así vivieron su gran aventura. Sofía Bravo Reina 4º de Primaria C.EI.P. Almudena Grandes de Málaga Mario de “La Mancha” Un día, Mario estaba leyendo “Don Quijote de la Mancha” con su padre y le preguntó si él también podía imaginarse cosas que en realidad no existen si leía mucho. Su padre le contestó que eso era imposible, que no se preocupara. Pero esa noche, cuando Mario se quedó dormido, soñó que él también se había vuelto loco de tanto estudiar para su examen de matemáticas. Soñó que salía a la calle y veía gigantes que en realidad eran farolas y preciosas Dulcineas del Toboso que eran señoras mayores que venían de comprar. Se imaginó también al Quijote, con un enorme libro de matemáticas del que se escapaban los números y salían a correr detrás de él. El “dos” le cogía de los pies, el “cinco” le tiraba del pelo y el “cuatro” le lanzaba puntos y comas. 13

Una coma se le metió a Mario en el ojo. Como iba corriendo y no podía ver, tropezó con una señora mayor y le tiró la compra que había comprado en el supermercado. Él empezó a decirle piropos porque la veía como a una chica guapa, y la señora se enfadó porque pensó que se estaba riendo de ella, así que empezó a pegarle con su bolso.  ¡¡¡¡¡¡Mariooooo Despiertaaaa!!!!!! Su padre lo despertó la mañana siguiente, porque estaba a punto de llegar tarde a su examen de matemáticas. Rocío Ontiveros Ubago 4º de Primaria C.E.I.P. María Teresa León de San Pedro de Alcántara

EDUCACIÓN SECUNDARIA OBLIGATORIA

Las aventuras de Cervantes Érase que se era, en un gélido atardecer de diciembre, un hombre sin inspiración alguna, una pluma sin tinta y unas doscientas toneladas de papel desaprovechado tirado por las esquinas de la amplia alcoba. El sueño invadió el ser de nuestro escritor falto de ideas. Amaneció en un campo de trigales, en el que un flaco caballo blanco y un hidalgo caballero parecían esperar su llegada. En lo más alto de un molino, una bella muchacha ansiaba su rescate, a lo que el hidalgo y su flaco caballo salieron a su rescate, mientras Cervantes tomaba notas mentales de todo lo sucedido. Tras esta hazaña, el caballero se creía completamente invencible, lucharon con gigantes, otros caballeros y campesinos, que lo deshonraban, o bien, deshonraban el honor y la belleza de su querida Dulcinea. Luchó, ganó y perdió batallas mentales, hasta perder el norte y el sentido común, todo había sido un sueño producto de su imaginación. Tal vez Cervantes consiguió la inspiración en un sueño ¿un sueño de un sueño? Elena Lozano Núñez 1º de E.S.O. I.E.S. Los Boliches de Fuengirola

El deseo escuchado Los dioses se encontraban reunidos. Había llegado el momento de tomar una gran decisión, que cambiaría por completo las rutinas de los mortales. Se levantaron de sus asientos rojos aterciopelados y Letra dijo:  Daré la posibilidad de que sólo pueda escribirme un humano, quien ya sabemos todos. Sus oraciones me han conmovido y, por eso, nos entregaremos a él en cuerpo y alma. Palabra, Frase, Capítulo y Libro asintieron solemnemente.  Estos seres han perdido la capacidad de imaginar, de pensar con el corazón y expresar sus sentimientos; pierden el tiempo copiando textos inútiles o escribiendo cartas a sus señores ignorantes. Bufó Capítulo.  Entonces, sin más dilación, hagámoslo. Miguel de Cervantes, pensador loco, humano incomprendido, objeto de los Literarios, serás recordado como el primer hombre capaz de plasmar la fantasía en una simple hoja de papel.

Rubén González Gómez 3º de E.S.O. I.E.S. Huelin de Málaga

El misterio Estoy cruzando la calle, y… ¡Boom!  ¿Adriana? No contesté al móvil. Un coche me había atropellado mientras volvía a casa. Oí voces alertando del accidente, todo se oscureció. Desperté en una habitación decorada de manera excesiva. Escuché la dulce voz de una joven que me preguntaba cómo me encontraba. Me contó que estábamos a finales de 1596, que había sufrido un accidente y que un tal M.C.S me había auxiliado. Sin salir de mi asombro, me vestí y puse rumbo hacia él. Agradecí los cuidados y marché. Descubrí que bajo esas iniciales, se escondía Miguel de Cervantes. Me puse en contacto con él y comenzamos una buena amistad. Me contó que era recaudador de impuestos y tras saber que nos apasionaban los libros, me expresó la idea de escribir uno de caballerías. Me fascinaba la idea. Me acogió en casa y le ayudé a recabar información, por lo que me recompensó con un anillo, pero esto pronto acabó porque fue encarcelado. Tras recibir la noticia, me desmayé y desperté en una umbría habitación del hospital sin éste. Me contaron que me habían atribuido la autoría del libro, de cuyo nombre no quiero

acordarme y Cervantes, hasta entonces mi amigo, se lo había llevado…

Marta Romero Gago 4º de E.S.O. I.E.S. Profesor Gonzalo Huesa de Ronda ¿Yo loco? ¡Jamás! Cuentan, amigo Sancho, que he servido de inspiración para crear una historia fabulosa. Que luché contra molinos, que defendí a los menesterosos... ¡Así somos los hijos de La Mancha! Nos enfrentamos a los enemigos aunque, a veces, salimos descalabrados. Cuentan que me volví loco leyendo historias de caballerías. ¡Que me volví loco! ¡Nadie más cuerdo que yo! Pero dejemos que sigan teniéndome por loco, pues como dice el dicho castellano: “solo los niños y los locos dicen verdades”. Isabel Martín Mateos 1º de E.S.O. I.E.S. Valle del Genal de Algatocín “Locura” Y aquí, en mi lecho de muerte, solo soy capaz de acordarme de ella, mientras las lágrimas surcan mis mejillas. Esa dama penetró en mis más profundos adentros y cambió todo mi ser. Desterró toda la monotonía de mi mundo e invitó a las emociones. Robó mis deseos para convertirlos en realidades. Me 20

acompañó en mis más felices episodios y en tiempos de llanto incontrolable. Y aunque es cierto, se llevó mi vida sin ni siquiera preguntar, valió la pena lo que me ofreció a cambio. Un solo segundo de aquella aventura, en la que mi mente apenas recuerda a la hermosa Dulcinea y a mi fiel compañero Sancho, valdría más que todo el oro de este maldito mundo. ¡Cómo extraño a esa dama, de nombre locura! Y si he de pasar a la otra vida habiendo pecado, lo haré con la cabeza alta, pues es mejor lo que ofrece una muerte llena que una vida vacía. Porque sé que cuando los gorriones anuncien el crepúsculo, se llevará mi último suspiro a un lugar en el que ella será la única reina. Un mundo donde la felicidad será plena. Lucía Lorente Montero 3º de E.S.O. I.E.S. Torre del Prado de Campanillas Memorias Octubre: Batalla de Lepanto, año 1571; viajo en un barco y de repente divisamos un galeón; este es otomano. Después de largas horas de batallas han matado a casi toda la tripulación excepto a mí y a otro marinero: Miguel. Él no corrió tanta suerte como yo que salí ileso perdió su mano derecha. Por desgracia, era la mano con la que manejaba su espada. Septiembre del año de 1575: 21

Nos han hecho prisioneros y nos han encerrado en una cárcel de Argel. Durante nuestro cautiverio descubrí que mi compañero Miguel es un gran escritor. Ha tenido la idea de escribir un libro. Debido al altercado que tuvimos en nuestro barco, a causa del cual su mano le fue arrebata, decidimos que yo iría escribiendo mientras él me contaba su historia. Septiembre del año de 1580: Después de cinco años encerrados damos por acabado este libro. Un confidente nos informa de que España va ganando la guerra; confiamos en que pronto nos saquen de esta cárcel lúgubre. Las tropas españolas vienen a rescatarnos. Volvemos a España. Abril del año de 1616: Mi amigo Miguel ha muerto sin saber que su libro será el más importante de la historia literaria. Javier Aguilar Méndez 1º de E.S.O. I.E.S. Valle del Genal de Algatocín Sin título Miguel de Cervantes escribió las aventuras de “El ingenioso hidalgo Don Quijote De La Mancha”, donde criticaba la influencia de los libros de caballería. Si Cervantes tuviera que escribir un libro de crítica en la actualidad, lo llamaría “Las aventuras del ingenioso tronista de mhyv (mujeres, hombres y viceversa). El protagonista sería un chico, cuyos esteroides le hacen perder 22

la cabeza, y manejado por su vigorexia, va recorriendo los platós de televisión, contando sus historias por los bares del pueblo y buscando en sus bolos a su “Dulcinea”, o al menos, a su chica de esa semana. Nuestro héroe estaría acompañado de difíciles situaciones, donde se jugaría la vida enfrentándose a terribles “pretendientas” que intentarían evitar que encuentre a su amada y extraños seres que se harían llamar “ganchos”, que bajo un terrible embrujo, intentarían separarle de su objetivo. Y todo esto, para dedicarse a su cuerpo mientras le pagan más que a un ingeniero. ¿Hay algo más ingenioso?

Lourdes Amigo Barrutia 4 de E.S.O. I.E.S. Monterroso de Estepona A quien le pueda interesar mi adiós Yo, Don Quijote de la Mancha, quisiera expresar las razones de mis escritos. Durante mi vida, he sido un caminante sin brújula. En mis delirios he creído ver cosas que no eran. Creía ser un buen caballero acompañado por un escudero, mi único amigo, mi hermano, Sancho Panza, quien nunca me miró como a un loco. Siempre llevé una armadura de hierro, pero no me fortaleció. De no haber retenido mis lágrimas, hubiera vestido una 23

armadura oxidada. ¡Oh, Dios mío! ¿Por qué no lloré más? He pasado toda mi vida enfrentado a todos pero me reconozco profundamente cobarde, porque he huido de mí mismo. ¡Qué dolor! ¡Qué angustia! Pero de todas mis locuras, la mejor, Dulcinea. ¡Oh mi Dulcinea!, ¿Cómo no nombrarte, si a ti debo este desatino de vida que he tenido? Sabiendo que lo haría hasta la eternidad, admito mi debilidad por ti y por ende mi tropiezo. Por todo esto estoy aquí, quebrando mi cabeza, torbellino de pensamientos, almacén de molinos de viento. ¿Abandono o continúo con esta locura? Anunciado está el final: Si habiendo luchado, no luché; si habiendo buscado, no encontré; y habiendo creído que amaba, no amé, ¿cómo recojo esto que siento?, ¿cómo prepararme para hacer las maletas de mi vida? Emeline Berlanga Viamontes 3º de E.S.O. I.E.S. Valle del Genal de Algatocín Una vez más Una vez más me ha dejado sola, y todo por irse con el impresentable ese de su amigo. Vuelvo a ser su segundo plato y quizás tenga que acostumbrarme a una vida sin tenerlo a mi lado. 24

Tantas noches sola a la espera de una simple señal de su tan deseado regreso. Siempre marchándose sin fecha de vuelta y yo, sola en casa. Y todo por acompañar a su amigo en sus absurdos viajes de los que siempre regresan cansados y siempre alguno de los dos heridos. Quizás sea menos importante para él de lo que pienso. Incluso quizás nuestra historia deba acabar antes de lo esperado. Quién sabe, a lo mejor no estamos hechos el uno para el otro... Oh, querido Sancho, esto lo aclaramos a tu regreso. María Carrillo Núñez 3º de E.S.O. I.E.S. Valle del Genal de Algatocín Miscelánea En un molino de la Mancha, pasa sus últimos días Miguel de Cervantes, cuidado por Dulcinea del Toboso que presta sus cuidados al que fue su creador. Mientras Dulcinea va a por agua para saciar la sed de Miguel, llegaron Rinconete y Cortadillo, con la intención de llevarse a su autor a Sevilla, donde ellos viven. Tienen la intención de venderlo junto con la bella Leonisa a los moros. Cuando se lo están llevando llega D. Quijote con Sancho Panza y se encuentran con el rapto de Miguel y empiezan a luchar. Pero D. Quijote escucha hablar a los perros y se pone a gritarles y a batallar con ellos. Mientras tanto, cargan a Miguel en un carro y se lo llevan. Al 25

llegar Dulcinea se encuentra el lecho de Miguel vacío y Sancho Panza le explica lo ocurrido. Ella acude al Licenciado Vidriera para pedirle ayuda y deciden salir en su búsqueda. Los pícaros deciden parar en una venta. Allí se encuentra una moza llamada Costanza que se hace cargo de los cuidados del enfermo. Al día siguiente, al reanudar su camino, divisan a lo lejos una procesión de personajes cervantinos dispuestos a socorrer a Miguel...

María López Macías 1º de E.S.O. I.E.S. Valle del Genal de Algatocín A los ojos de Sancho Nos disponíamos a salir en busca de nuevas aventuras para añadir al grandioso listado de hazañas de Don Quijote. Fue entonces, cuando en esa inmensa explanada cubierta por un gran manto de verde y fresca hierba en la cual pastaba la fiel montura de mi alunado compañero, Rocinante, y junto a él, mi leal asno, Rudo, vimos cómo se alzaban con gran majestuosidad unos esbeltos cuerpos hechos de piedra impenetrable, con grandes aspas que no hacían más que girar en sentido de las agujas de un reloj. Era una experiencia inenarrable, nunca antes había estado tan cerca de un artefacto de tan desmesurada envergadura, pero al parecer mi trastornado compañero los interpretó de una manera diferente, pensó que eran gigantes y se dispuso a librar una 26

batalla contra ellos únicamente con Rocinante y una lanza, la cual los molinos hicieron añicos nada más encontrarse con ella. Y ahí estaba él, tirado en el pasto, con Rocinante a su lado, abatido por la embestida que recibió de las aspas de su gigante; en ese momento, llegué a la conclusión de que por una vez, yo tenía que ser el héroe y salvar a mi perturbado amo. Elena Morales García 2º de E.S.O. I.E.S Santiago Ramón y Cajal de Fuengirola

BACHILLERATO / CICLOS FORMATIVOS

La expedición de Sancho Panza No sabía a ciencia cierta cuánto tiempo llevaba vagando por los poblados que se iba encontrando en su camino. Iba sin rumbo, junto a su leal y viejo asno, sin más enseres que una manta raída y una pequeña escudilla con la que pedía en alguna calle y, con suerte, comía algo. Se había convertido en un anciano nocherniego, menesteroso y curtido que estaba, además, ahogado por la soledad de sus tediosos días desde que su más fiel amigo, Don Quijote, murió. Desde entonces, todas las noches le lloraba y lo veía reflejado en todos los hombres que veía pasar a su alrededor. Cuando hacía alguna parada, solía acordarse de sus aventuras junto a él. Rememoraba cómo amaba a Dulcinea y cómo le gustaba montar sobre Rocinante. Todo ello le creaba un sentimiento de melancolía del que no podía deshacerse. Además, sabía que el dinero se le acababa, que su asno cada vez comía menos y que se le veía más débil y enfermo. Sabía que él mismo también moriría pronto. Nada podría evitar la desaparición de su vida y, con ella, la de todas las historias y experiencias que había vivido, y que ahora quedarían en el olvido.

Mario Guerrero González 2º de Bachillerato I.E.S. Portada Alta de Málaga

Conversación de dos molinos  Ese hidalgo... ¡menos buscar en libros cómo ser un caballero y más trabajar para lograr ser un honrado campesino!  Desde luego, está hecho todo un holgazán. ¡Vergüenza le tendría que dar tener así al bonachón de Sancho! — comenzó a decir —. Además, ayer tan solo consiguió atenuar y manchar nuestras blancas paredes con su espada sin haber mediado palabra alguna.  Miedo me da el momento en el que el amo nos vea así... ¿pensará que la calidad de nuestro trigo ha empeorado? — preguntó con tono preocupado.  Lo dudo mucho fiel compañero, pues nosotros no tenemos contingencia alguna de defendernos.  Cierto es...  ¡Alerta! ¡Cállate! ¡Que ahí viene de nuevo cabalgando!  ¡De acuerdo, detén las astas! Trata de no moverte y no se detendrá en nosotros... Marina Vegas Muñoz 2º de Bachillerato I.E.S. Litoral de Málaga

RELATOS GALARDONADOS Categoría Educación Primaria. Primer Premio: Mi abuelo Alonso Clara García Castañeda C.E.I.P. Clara Campoamor. Málaga Segundo Premio: Don Quijote y la máquina del tiempo Martín Barreira Montesanto C.E.I.P. Clara Campoamor. Málaga Categoría Educación Secundaria Obligatoria. Primer Premio: A quien le pueda interesar mi adiós. Emeline Berlanga Viamontes I.E.S. Valle del Genal. Algatocín Segundo Premio ex aequo: Una vez más. María Carrillo Núñez I.E.S. Valle del Genal. Algatocín Memorias. Javier Aguilar Méndez I.E.S. Valle del Genal. Algatocín Categoría Bachillerato y Ciclos Formativos. Primer Premio: La expedición de Sancho Panza. 33

Mario Guerrero González I.E.S. Portada Alta. Málaga Segundo Premio: Conversación de dos molinos Marina Vegas Muñoz I.E.S. Litoral. Málaga Categoría Educación Permanente. Primer Premio: Declarado desierto Segundo Premio: Declarado desierto

Agradecimientos La Delegación Territorial de Educación de Málaga agradece la colaboración en el desarrollo de este Concurso a los docentes integrantes de las “Tertulias Literarias del Buñuel” Ana José Díaz, Mª José García, Rosa Andreu, Valle Cotelo, Mar Cantos, Manuel Ramos, Juan López, Inmaculada Fórmica y Lola Gregori. Este Segundo Concurso provincial de Microrrelatos educativos ha sido posible gracias a su contribución desinteresada.

CONSEJERÍA DE EDUCACIÓN Delegación Territorial Málaga