LA DESGRACIA DE JULIANA Victor Issaka Kpandja (Oficina Regional de la IE para África)
La educación es un instrumento que nos permite construir sociedades. Según mi conocimiento, la esencia de la educación es promover valores relacionados con las habilidades, la paz, el desarrollo, la justicia, la equidad, la prosperidad, etc. En este sentido, comúnmente se dice: “La educación es la clave para el desarrollo”. Por lo tanto, es recomendable que todos los niños y niñas tengan la oportunidad de aprender y, de igual manera, que todo docente pueda enseñar sin temor en su lugar de trabajo, para sacar lo mejor de sí mismos. Desde mi perspectiva como Asistente Profesional en mi organización, me di cuenta de que hay muchos desafíos para hacer de la educación lo que deseamos que sea. Uno de estos desafíos que impacta negativamente en nuestras escuelas es la Violencia de Género en el Ámbito Escolar (VGAE). Como muchas personas, antes de tener la oportunidad de participar en las Sesiones de Aprendizaje entre Pares sobre la VGAE, pensaba en la VGAE como acoso sexual o violación perpetrada por un maestro contra una estudiante. A través de la participación en las sesiones de aprendizaje entre pares, descubrí otras realidades: de casos en que la VGAE fue perpetrada por un estudiante contra una compañera o por un maestro contra su colega. La VGAE también trata sobre el castigo corporal o el abuso verbal. Uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), especialmente el ODS 4, llama a los gobiernos a promover una educación inclusiva y de calidad. Creo que 113