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EU plantea acciones enérgicas; México pide humanismo
REDACCIÓN redaccion@ejecentral.com.mx
Las estimaciones más conservadoras calculan en 150 mil los migrantes que a lo largo de los tres mil kilómetros de frontera de México esperan poder ingresar a Estados
Unidos una vez que pierda vigencia el Título 42. Ese número de personas, sumado a las oleadas que se reportan desde Centroamérica, ha hecho que el gobierno estadounidense mantenga intensos acercamientos con sus socios latinoamericanos, especialmente nuestro país.
Y es en este contexto de alerta ante la crisis fronteriza que podría alcanzar niveles nunca antes vistos, que el presidente Jose Biden le pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador medidas enérgicas, aunque el mexicano insistió en atender el fenómeno desde una visión humanista.
De la reunión a distancia que sostuvieron hoy poco se conoció. Y si la Casa Blanca fue escueta en su reporte, el gobierno mexicano lo fue aún más.
Desde Palacio Nacional el presidente López Obrador reiteró su deseo de ayudar al desarrollo en Centroamérica, al humanismo y buena amistad entre ambos países. Mientras que, desde Washington apelaron a “fuertes medidas de cumplimiento” para frenar el tráfico ilegal de personas, armas y drogas.
CERCA del fin del Título 42, Joe Biden anticipa que el flujo migrante en la frontera “será caótico” sus fueros, ahora con el apoyo del Poder Judicial”, acusó.
Pero el mandatario ya tiene un “Plan C” que consiste en llamar a los ciudadanos a otorgarle el voto a su movimiento, no sólo al candidato o la candidata presidencial, sino a los legisladores para poder obtener la mayoría calificada y en 2024 impulsar nuevamente la reforma constitucional en materia electoral y la reforma al Poder Judicial, para que sean aprobadas sin que la oposición le cause conflicto.
López Obrador aprovechó y también expuso a los ministros que votaron en favor de invalidar su propuesta, como Alberto Pérez Dayán o Javier Laynez Potisek, a quienes llamó “sus altezas serenísimas”. Sin embargo, el voto del expresidente Arturo Zaldívar, que también abonó al freno al Plan B, consideró que se debió a las presiones del bloque conservador.
Mauricio Flores @mfloresarellano
Economista especializado en mercados bursátiles; colaborador en medios impresos, radio y televisión.
La Suprema Corte y el nearshoring
El riesgo legal es uno de los tantos riesgos de operación que habitualmente tienen en consideración los planes de negocio de empresas multinacionales, adecuándose a los marcos legales de los países a los que arriban en busca de ventajas de localización, acceso a materias primas, mano de obra o fiscales. Sin embargo, cuando el marco legal nacional e internacional, como advierte Moody’s Investors Services, se modifica, se genera tal incertidumbre que los inversionistas optan por esperar mejores tiempos… o buscar otros sitios, como lo demuestra el nearshoring de China hacia América.
De ahí la relevancia que tienen las recientes decisiones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), encabezada por Norma Lucía Piña, para invalidar diversas iniciativas de reforma del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, manteniendo la coherencia del marco legal y, lo más relevante, mostrando que pese a la gran concentración de poder en la persona del Presidente, existe una rigurosa separación de contrapesos propios de una democracia incluyente.
Ciertamente que lo más conveniente en un horizonte de inversiones de largo plazo es que no haya cambios abruptos de leyes y que sean procesadas de manera clara y firme para que se mantengan estables; y que exista un poder judicial capaz de procesar de manera expedita las inevitables controversias entre particulares y entidades de gobierno.
El hecho que la mayoría de ministras y ministros de la SCJN rechazaran el llamado “Plan B” debido a la violaciones al proceso parlamentario al omitir la discusión en comisiones en la Cámara de Diputados y de Senadores, ha enviado una poderosa señal de una autonomía y apego al marco legal que tanto aprecian empresas nacionales y multinacionales por igual.
EN BUSCA DEL ALLY-SHORING PERDIDO
Luego del llamado “Viernes Negro” en que sin la debida discusión los senadores de Morena y sus aliados aprobaran nueve reformas, el Consejo Ejecutivo de Empresas Globales (CEEG) que encabeza Alberto de la Fuente expresó su honda preocupación ante cambios que impactarían en la actividad minera, energética, de transporte aéreo, logística, comercial y de innovación.
“Estas modificaciones contienen elementos que van en contra de prácticas comunes a nivel global sobre inversiones y negocios. Ponen en peligro el cumplimiento de los compromisos que el Estado mexicano ha adoptado con sus socios internacionales, tanto en la región de América del Norte como en el resto del mundo”, expresó el CEEG donde se agrupan las 62 multinacionales más importantes en México, que representan 20 % del PIB y que luego de la aprobación senatorial convocaron a un diálogo con los tres poderes de la República.
Festividad y tristeza
MADRES INTEGRANTES de la Agrupación de Mujeres Organizadas por los Ejecutados, Secuestrados y Desaparecidos de Nuevo León y Tamaulipas exigieron seguimiento en la búsqueda de sus familiares Foto: Cuartoscuro
La reunión entre los mandatarios se da a sólo un día de que llegue a su fin el Título 42, norma sanitaria impulsada por el gobierno de Trump que facilita la deportación inmediata de indocumentados, y que representa un reto para ambos gobiernos.
Al respecto, la administración de Joe Biden recordó que cuando esto ocurra se implementará el Título 8. Dicha ley sólo contempla atender solicitudes de migrantes que comprueben ser perseguidos o víctimas de tortura, de lo contrario pueden quedar imposibilitados por cinco años para ingresar a territorio estadounidense. Está por verse. Será caótico por un tiempo”, expresó el líder demócrata.
A ello, Biden refirió la “exitosa iniciativa conjunta” que representa el programa de solicitud de asilo vía internet, el cual se puede hacer desde cualquier país del continente. Dicho proyecto “logró una caída del 95 % en los encuentros fronterizos de personas de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela en la frontera”, aseguró.
Si bien el conflicto legal no es el más conveniente para ninguna empresa, es mucho mejor para los planificadores de empresa saber que cuentan con un poder judicial autónomo y deliberador, que no obstante ser objeto de las increpaciones de un Presidente especialmente poderoso, tomará decisiones apegadas a la ley.
Así que más que nearshoring, la reubicación de inversiones como un evento económicamente inercial, lo que se empieza a configurar en México es un ally-shoring. El US-Mexico Foundation que dirige Enrique Perret destaca que existe una oportunidad única para fortalecer los lazos de manufactura, comercio e inversión del T-MEC donde los elementos democráticos y de gobernanza son fundamentales.
“El ally-shoring describe el proceso mediante el cual los países reelaboran cadenas de suministro críticas y obtienen materiales, bienes y servicios esenciales entre socios y aliados democráticos confiables, con un enfoque en invertir en las relaciones a corto y largo plazo que protegen y mejoran la economía conjunta y seguridad nacional común”, describe la fundación.
Es decir, las ministras y ministros Ana Margarita Ríos, Alberto Pérez Dayán, Juan Luis González Alcántara, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Arturo Fernando Zaldívar Lelo de Larrea, Luis María Aguilar, Alfredo Gutiérrez Ortiz, Javier Laynez Potisek y Norma Lucía Piña fortalecieron la posibilidad de lograr el ally-shoring… aunque habrá que ver sí López Obrador está dispuesto a ello en los próximos 16 meses.