La Biblia relata que Jesús, a pesar de ser Dios mismo, se hizo hombre y habito entre nosotros, que nos amó tanto que entrego su vida para que todo aquel que en Él crea pase una eternidad apartada de Él en el infierno, sino que tenga una vida eterna al lado de Dios en el cielo. Está historia nos relata de a modo de ejemplo como Dios nos dio Todo por Amor a través de su Hijo Jesucristo.