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Vivamos con fe la Semana Santa 2023
Pensamiento del pastor
Con entusiasmo el pueblo creyente inicia la Semana Santa con la conmemoración de la entrada triunfal de Jesucristo en Jerusalén. En esta fiesta participa toda la familia, especialmente los niños y jóvenes, tal como lo hicieron en el primer Domingo de Ramos. Acompañamos a Jesús para manifestarle nuestro amor. Nos unimos así a todos los hombres y mujeres que lo siguen por los caminos de la vida, porque solo en Él ponen su esperanza. Junto a ellos le decimos: “¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosana en el cielo!”.
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Después de la Eucaristía, llevemos los ramos benditos a nuestros hogares, para que cada vez que los veamos nos recuerden que solo Jesucristo es nuestro Rey y Señor, que no queremos ofenderlo y esperamos, con su ayuda, vivir la ley del amor y la misericordia en el seno familiar.
La victoria de Cristo, que simbolizan las palmas a Jesús para manifestarle nuestro amor. y plantas bendecidas, también la conseguiremos nosotros si llevamos con alegría nuestra cruz de cada día, realizando bien el trabajo encomendado, los deberes escolares, el servicio a los pobres, la compasión y el perdón de corazón. El Jueves Santo celebramos en la catedral metropolitana, Iglesia madre de la Arquidiócesis, la Misa
Pascua de Resurrección es la celebración más importante que tenemos los cristianos, es el centro de toda la liturgia. Fiesta de la alegría, de la luz, de la vida y de la libertad. Caminemos guiados por el Señor.
Nuestra solidaridad
LA ARQUIDIÓCESIS de Cuenca invita al pueblo católico a vivir con mucha fe las celebraciones religiosas de Semana Santa.
Este periodo iniciará con la conmemoración de la entrada triunfal de Jesucristo en Jerusalén.
“Acompañamos a Jesús para manifestarle nuestro amor. Nos unimos así a todos los hombres y mujeres que lo siguen por los caminos de la vida, porque solo en Él ponen su esperanza. Junto a ellos le decimos: Bendito el que viene en nombre del Señor.
¡Hosana en el cielo!”.
Estas son las celebraciones religiosas que se llevarán a cabo durante la Semana Santa, en la Catedral de la Inmaculada Concepción de Cuenca. El 2 de abril se conme-
Creer en Cristo crucificado significa trabajar por la vida, comprometerse a no ser causa de muerte para nadie y aliviar el dolor del hermano.
Crismal, solemne liturgia en la que se reúne el clero junto al arzobispo para renovar las promesas sacerdotales. La liturgia evidencia la fidelidad con la que los presbíteros debemos ejercer nuestra misión. El Crisma que se consagra este día es signo de la unción del Espíritu Santo que se derrama sobre quienes lo reciben.
Hoy también la Iglesia realiza un gesto simbólico, lleno de expresividad, quien preside la celebración lava los pies a 12 personas, imitando así el gesto de Jesús con sus discípulos en la Última Cena. Gesto impresionante para el mundo de hoy, donde no se entiende ni acepta la llamada a la humildad y al servicio. Es evidente la lección que el Maestro quiere darnos para pulir nuestra fe y hacer que nuestro servicio cotidiano sea manifestación de un verdadero compromiso cristiano.
El Viernes Santo conmemoramos la muerte de Cristo, contemplamos a Aquel que muere para dar-
Noticias
Misa Crismal
nos la vida: “Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos” (Juan 15, 12). Su dolor sigue resonando entre aquellos que sufren a causa de tantas injusticias y mueren en la soledad y abandono.
Creer en Cristo crucificado significa trabajar por la vida, comprometerse a no ser causa de muerte para nadie y aliviar el dolor del hermano. Quien apuesta por la vida no solo denuncia los horrores del aborto, la guerra y la muerte de tantos inocentes, sino que también se entrega con amor al cuidado y atención a quienes carecen de alimento, trabajo y medicina para vivir con dignidad.
Pascua de Resurrección es la celebración más importante que tenemos los cristianos, es el centro de toda la liturgia. Fiesta de la alegría, de la luz, de la vida y de la libertad. “No somos cristianos por el hecho de creer en el pecado, en la cruz, en el sufrimiento y en la muerte; somos cristianos porque creemos en el perdón, en la alegría, en la liberación, en la resurrección y en la vida” (Andrés Pardo). El corazón de nuestra fe es Jesús resucitado.
Como Iglesia peregrina, caminemos unidos, guiados por el Señor. Con Jesús recorramos el camino de la pasión para llegar a la luz de la resurrección.
¡Felices Pascuas de Resurrección 2023!