SUPLEMENTOS ESPECIALES EL PAIS
Un sector pujante de la economía que capta inversiones, incorpora tecnología y genera empleos
FORESTACIÓN Y LA MADERA
TAL.
RES O F L A ER
ENES.
DE BI GEN N R Ó O I T C C DIRE PORTA L X E E D R E A U LIDER ENFOQ A A D ESAFIA D A S ALES. T S CELULO E R RES FO O T C U OD LOS PR
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l año pasado fue muy problemático ante la crisis sanitaria. ¿Qué balance puede hacer del arranque que tuvo la gestión? — El 2020 fue un año complejo por todo lo que implica una administración nueva y lo que influyó el Covid-19 en el funcionamiento, sin embargo, se trató de mantener la respuesta y la atención en la gestión de los bosques que lleva adelante la DGF. Todos se tuvieron que adaptar a la nueva realidad, los administrados ser más pacientes y los funcionarios modificar su sistema de trabajo. — ¿Cuáles son los principales desafíos? —El principal es llegar a conformar una carrera profesional dentro de la estructura técnica forestal, que permita acompasar los ritmos del desarrollo del sector. Por otro lado, la DGF deberá modernizarse en la gestión; es por eso que se está en un proceso de digitalización del Sistema Informático dentro de la DGF, lo cual tendrá un impacto de cara al administrado, facilitando trámites que nos acercan al productor. La extensión es un área que debemos recuperar, tratando de llevar conocimiento a los diferentes actores sociales relacionados a los bosques, mostrando su importancia y servicios eco sistémicos que aportan los mismos. Fortaleceremos también el banco de germoplasma y el Vivero de Toledo como referente en la ejecución de planes de restauración de nuestros Bosques Nativos e incrementar áreas o recuperar áreas degradadas. —¿En qué proyectos concretos trabaja actualmente la DGF? —Se está finalizando con la fase de preparación del proyecto REDD en conjunto con el Ministerio de Ambiente, el cual tiene como objetivo principal la búsqueda de reducir las emisiones producto de la deforestación y la degradación del bosque nativo, luego se pasará a una fase de implementación con una estrategia definida. También se está trabajando con la Sociedad de Productores Forestales, la Dirección de Servicios Agrícolas del MGAP y el INIA, en la vigilancia fitosanitaria para bosques. Se elaboró un proyecto en el marco de la Iniciativa del Rio Negro, llevada adelante por el gobierno con la participación de los Ministerios de Ambiente (MA), Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y la finlandesa UPM. Nuestro proyecto busca generar la línea base del estado de situación del bosque nativo ripario de la parte alta de la Cuenca del Rio Negro. Un área que permanentemente está aportando información al sector es la relacionada al monitoreo y cartografía, actualmente se está realizando la Cartografía Forestal Nacional 2021, lo cual nos permite evaluar
Carlos Faroppa DIRECTOR GENERAL FORESTAL
“HACIA UNA MEJOR GESTIÓN DE CERCANÍA AL PRODUCTOR” Las tareas de la Dirección General Forestal (DGF) están enfocadas en el control y vigilancia de los bosques, buscando el manejo sustentable de los mismos, entre otros temas. Faroppa destacó la necesidad de promover la construcción de viviendas de madera.
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“EN BREVE SE VA A INAUGURAR UNA PLANTA DE TABLEROS EN EL NORTE DEL PAÍS, CON UNA INVERSIÓN DE 35 MILLONES DE DÓLARES”.
trabajo, tales como el polo de desarrollo académico, en el edificio del ex frigorífico Anglo, del LATU y la UTEC. Es de esperar que esta nueva planta implique un fuerte impacto social y económico porque Paso de los Toros y Pueblo Centenario son lugares de poca actividad. —¿Este nuevo complejo hará crecer de manera significativa la cantidad de productores forestales? —Creemos que en los próximos años va a seguir la misma tendencia que había, las plantaciones crecen a un ritmo de un 1.5% por año, todo área que se cosecha anualmente se vuelve a plantar, mejorando la genética, resultando en una mayor producción. El potencial de crecimiento establecido en las áreas de prioridad forestal nos indica, que el sector tiene margen para continuar desarrollándose, los desafíos están en la capacidad industrial y las limitantes en la logística. En cuanto a la cantidad de productores forestales, la realidad de los últimos años nos muestra que se han incorporado al sector más de mil productores uruguayos que tiene otra actividad productiva y ven en la forestación un rubro complementario, que le permite diversificar y disminuir riesgos. —A más de tres décadas de la ley Forestal, ¿hace falta complementar la norma con otra iniciativa legislativa? —La ley tiene 33 años, pero nunca fue estática, por el contrario ha ido teniendo actualizaciones por vía de resoluciones ministe-
riales y de decretos, se han modificado los benéficos, los tipos de suelos y se han incorporado marcos regulatorios municipales y ambientales. El sector es de los rubros con mayor regulación y restricciones, creemos que cualquier modificación debe ser fundamentada por principios técnicos sólidos. La fortaleza del Estado en mantener sus políticas y sus normativas han dado respaldo y seguridad a las nuevas inversiones. Otro ejemplo de ello es que en breve se va a inaugurar una planta de tableros en el norte, en Tacuarembó y Rivera, con una inversión de 35 millones de dólares. —¿Qué acciones se realizan para un manejo sostenible del bosque nativo? — La ley prohíbe su corta, salvo autorización de manejo por parte de la DGF, para ello se debe realizar un plan, el cual es estudiado por técnicos de la institución, el resto del proceso implica guías de tránsito, inspección de barracas e inspecciones en terreno. El mayor impacto sobre el bosque nativo no está en la sobreexplotación. El impacto que en verdad nos preocupa es el efecto en la pérdida de biodiversidad producto de la dispersión de las especies exóticas invasoras; buscar mecanismos que permitan su restauración y apostar a la resiliencia y a la restauración de nuestros bosques en conjunto con la educación de los beneficios parecen fundamentales para preservar nuestro patrimonio.
ENGENEERED SUCCESS
geográficamente el avance de nuestros bosques, aportando información a los tomadores de decisión locales y/o nacionales. Por otro lado, a través de la Ley de Presupuesto la Dirección integra y preside la Comisión Honoraria de la Madera junto a los ministerios MVOT, MA, MIEM, además del INIA, LATU y la UDELAR. Se trata de promover la construcción de viviendas de madera, hay mucha investigación hecha. En Finlandia el 90% de las casas individuales se hacen con este producto, que aquí puede ser una tendencia a futuro ya que se pueden construir muchas viviendas con un costo menor y un bajo impacto ambiental. Además, se pueden construir en tiempos más breves que las tradicionales, generando una inversión en tecnología de infraestructura y trabajo de calidad. —¿Qué expectativas genera la próxima puesta en marcha de la nueva planta de celulosa? —Un proyecto de estas dimensiones genera expectativas, ya que posibilita la aparición de polos de desarrollo. En el caso de la planta de Fray Bentos, se generó un impacto importante porque no solo se trató de la instalación de una planta de celulosa, sino que implicó la creación de industrias satélites asociadas o de productos secundarios a la industria. Ejemplos de ello son la planta de productos químicos y la planta productora de oxígeno y otros gases. Además se generaron impactos sociales muy importantes adicionales a las fuentes de
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FUERTE CADENA DE VALOR QUE DERRAMA ACTIVIDAD El sector forestal en Uruguay está compuesto por distintas actividades que van desde la obtención de semillas y plantas hasta el transporte final de los productos elaborados. Cada emprendimiento tiene sus propias caracteríticas según el siguiente detalle: La cadena celulósico-papelera (incluye madera rolliza sin tratar, chips, pasta de celulosa, papel y cartón, etc.), que es la de mayor peso dentro del
sector, y en la cual participan empresas reconocidas mundialmente. En la etapa de transformación mecánica: la cadena de productos de madera elaborada (madera rolliza tratada, madera aserrada, tableros, carpintería de obra, madera de embalaje, muebles, molduras, etc.). se identifica por la coexistencia de empresas extranjeras y nacionales. En tanto, el sector forestal también está asociado a la generación energética (leña, pellets, electricidad producida a partir de biomasa, entre otros.). La fuente energética genera energía a base quema de licor negro (plantas de celulosa) y a partir de la quema de biomasa sólida (chips y aserrÍn).
Celulosa busca ser el principal producto de exportación M
ientras avanza la construcción de la segunda planta de celulosa de la empresa finlandesa UPM en Uruguay, como resultado de una inversión de US$ 3.000 millones, la celulosa se posicionará como el principal producto de exportación del país en los próximos años, de acuderdo con el último informe de Uruguay XXI sobre el sector forestal. Esta nueva planta de UPM, que está previsto el inicio de sus actividades para el segundo semestre de 2022, incrementará las exportaciones anuales en promedio en US$ 1.155 millones, aproximadamente un 12%. En consecuencia, la nueva planta consolidaría a la celulosa como el principal producto de exportación del país en los próximos años, y a Uruguay como el segundo exportador mundial de celulosa de fibra corta, con una producción de 4,7 millones de toneladas por año, afirma el reporte de Uruguay XXI. Se estima que UPM2 consumirá 7,5 millones de toneladas de madera por año, produciendo 2,1 millones de toneladas de pulpa. En conjunto las tres plantas de celulosa consumirían un total de
17 millones de toneladas por año para alcanzar una producción de 4,7 millones de toneladas de celulosa. La nueva planta de UPM se localizará en el límite entre los departamentos de Durazno y Tacuarembó, más específicamente en Pueblo Centenario, promoviendo el desarrollo local en la zona y alrededores. Los departamentos en los cuales tendrá más impacto serán Durazno, Tacuarembó, Cerro Largo y Rivera, que registran las menores tasas de empleo del país, peores indicadores de educación y pobreza. De esta forma, se espera que con la instalación y posterior operativa de la planta producirán un mayor dinamismo en una región relevante.
Desarrollo.
El sector forestal ha sido uno de los sectores más dinámicos en la economÍa nacional en el presente siglo. Con posterioridad a la Ley Forestal de 1987, las plantaciones forestales se multiplicaron en el país y dieron base al desarrollo de otras industrias, como los aserraderos y las plantas de celulosa. La forestación genera retroalimentaciones con otros sectores, ya que funcio-
na en integración con ellos. Tradicionalmente, la actividad forestal lo ha hecho con la ganaderÍa extensiva, lo que permite aumentar la producción contemplando una mayor eficiencia del uso de los recursos naturales. Actualmente, el sector representa cerca de 0,5% del Producto Interno Bruto (PIB), con un franco CON TRES crecimiento desde hace PLANTAS años, y las exportaciones del complejo fores- URUGUAY tal (madera, celulosa y PASARÁ A papel) representan cer- PRODUCIR 4,7 ca de una quinta parte del total de las exporta- MILLONES DE ciones de bienes del TONELADAS paÍs. ANUALES DE De acuerdo a datos del BCU, el PIB de la CELULOSA. fase primaria (silvicultura, extracción de madera y servicios conexos) ha mostrado una trayectoria creciente, exhibiendo una tasa promedio de crecimiento de 7,7% anual en la última década. La participación de esta fase en el PIB global de la economía ha per-
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HAY 1.700 EMPRESAS Y 17.000 EMPLEOS
manecido relativamente constante en el periodo, al rondar el 0,5%.
Cadena de valor.
Por su parte, el valor agregado en la fase industrial también ha mostrado una trayectoria fuertemente creciente, fundamentalmente a partir del comienzo de actividades de la planta de celulosa de UPM sobre finales de 2007 y de Montes del Plata a mediados de 2014. En efecto, la fase industrial ha tenido un crecimiento de 6,5% promedio anual en la última década, señala el informe de Uruguay XXI. En el último año, la baja en el precio de la celulosa y menos volúmenes de éste y otros productos forestales por una menor demanda como consecuencia del COVID-19 hicieron que la participación se retraiga a valores similares a los de hace 5 años.
Exportaciones. En 2020 las exportaciones del complejo forestal (madera, productos de madera, celulosa, papel y cartón) se ubicaron en US$ 1.473 millones, lo que representa un 18% del total de bienes exportados del país. El complejo forestal se reafirma como uno de los rubros más importantes de exportación del paÍs, pese a la caída de 23% en las colocaciones de 2020 en comparación interanual. La pasta de celulosa es el principal insumo para producir papeles y cartones. Las ventas externas de celulosa el año pasado totalizaron US$ 1.101 millones, cifra 28% inferior a la de 2019. La celulosa fue el segundo producto de exportación de Uruguay y, a la vez, representa un 75% del valor de la corriente exportadora del sector forestal. De acuerdo con el informe de Uruguay XXI, las exportaciones de madera mostraron un leve descenso (-3%) en 2020 respecto año anterior, mientras que las ventas de papel y cartón experimentaron una retracción similar a la celulosa (-27%) en el mismo perÍodo, aunque estas últimas representan tan solo el 1,6% de las ventas externas del complejo forestal. En 2020, las exportaciones de made-
ra y subproductos alcanzaron los US$ 347 millones, Por su parte, las colocaciones de chips medidas en volumen fÍsico cayeron un 80%, de casi un millón de toneladas exportadas en 2019 a 186.000 toneladas en 2020. En el conjunto del año las exportaciones de chips totalizaron US$ 21 millones, Las ventas al exterior de madera en crecieron fuertemente a partir de 2016 producto de un aumento de la demanda de China. El pino ocupa en general una participación mayoritaria en este flujo; en 2020 fue 91% del volumen, y el resto correspondió a eucalyptus. Parte de estas salidas están vinculadas a los ciclos de cosecha de las plantaciones y las pocas alternativas a nivel local para procesar. El total exportado en 2020 fue de US$ 153 millones, un crecimiento de 50% en términos interanuales. Por su parte, el volumen colocado fue de 2,2 millones de toneladas, siendo el mayor volumen en los registros. China se mantuvo como principal destino, con 57% del total, 59% del pino y 36% del eucalyptus. Por su parte, la madera aserrada es uno de los productos que incorporan mayor valor agregado. En 2020, este producto explicó el 30% de las exportaciones uruguayas de madera. Las exportaciones de estos productos totalizaron US$ 104 millones en 2020, y las exportaciones superaron las 200 mil toneladas. Un 58% de las ventas externas correspondió a madera aserrada de pino, y se dirigió principalmente a Estados Unidos (38%), China (30%) y Vietnam (16%). En tanto, el restante 42% correspondió a eucalyptus y tuvo como principales destinos Estados Unidos (15%), China (13%) e Indonesia (13%). También los tableros de madera constituyen otro de los productos con importante valor agregado, indica el informe de Uruguay XXI. En 2020, las exportaciones de tableros contrachapados sumaron US$ 67 millones, cifra 21% superior a la del año anterior. Este aumento se explica tanto por el factor precio, como por un aumento en el volumen exportado.
De acuerdo a datos de la Dirección General Forestal, en base al Banco de Previsión Social (BPS), el personal ocupado en el sector suma 16.800 trabajadores. Esta cifra no incluye los empleos indirectos que genera el sector, que abarcan actividades de transporte y logística, así como servicios conexos. En Uruguay existen más de 1.700 empresas vinculadas al complejo forestal, según datos del BPS. De éstas, el 93% son micro y pequeños emprendimientos con menos de 20 empleados16. Dentro de las empresas exportadoras, las productoras de pasta de celulosa UPM y Montes del Plata son las principales, entre ambas representan 75% del valor exportado por el sector en 2020.Dentro del tejido empresaril, hay 77 aserraderos relevados en el país. Los cuatro más grandes consumen entre 100.000 y 500.000 metros cúbicos de madera rolliza por año. Actualmente, el fuerte desarrollo silvícola ha generado un volumen muy importante de materia prima disponible. En este sentido, Uruguay está tra-
bajando en la promoción y el desarrollo de construcción en madera, lo que genera espacios para nuevas empresas que apunten a producir insumos para esta actividad.
IMPULSO PARA LA ENERGÍA RENOVABLE Dentro de las actividades relacionadas a la fase industrial se encuentra la generación de energía a través de subproductos forestales (biomasa forestal y subproductos de la transformación mecánica y química), que ha cobrado relevancia y posee una importante perspectiva debido al aumento de la oferta de materia prima y a políticas de Estado en la materia. En 2020, aproximadamente el 8% de la energía eléctrica generada para satisfacer la demanda del país, tuvo como origen residuos de biomasa forestal.
En tanto, la participación de la biomasa en la matriz primaria —o también llamada matriz de abastecimiento—, se ubicó en el 42%, según reflejó el Balance Energético Preliminar 2020 publicado por el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM). Los emprendimientos del sector forestal tienen una capacidad instalada de 378 MW, mientras que la segunda planta de UPM en Paso de los Toros generará un excedente de energÍa firme, predecible y renovable de más de 110 MW, de acuerdo con el reporte de Uruguay XXI.
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ara las empresas del sector forestal, la crisis sanitaria causada por la pandemia del coronavirus tuvo “un duro impacto” en la actividad, aunque ésta muestra síntomas de recuperación en estos primeros meses del año. El 2020 “ha sido un año de grandes incertidumbres, con demanda nula para algunos productos, como los chips por ejemplo, y/o con baja o intermitente demanda para otros productos, combinados con una baja en los precios internaciones de los commodities”, sostuvo el presidente de la Sociedad de Productores Forestales, Nelson Ledesma. “Para todos el 2020 ha sido un año muy especial debido a pandemia que sufre toda la humanidad. En el sector forestal se ha logrado mantener la producción, lo que no es algo menor”, sostuvo el dirigente de la gremial empresarial. Uno de los factores que posibilitó el continuar con la actividad a pesar de la pandemia, “fue el hecho de contar con un sector que maneja altos estándares en lo relativo a la salud y seguridad ocupacional, por lo cual seguir determinados protocolos es un trabajo de todos los días”. También ha contribuido el hecho de ser una actividad que se desarrolla, en gran parte, al aire libre, agregó Ledesma.
Productos forestales también son clave para las industrias químicas, textil, alimenticia y construcción.
El sector forestal estimula la reactivación de la economía Nueva planta.
La nueva planta de celulosa que UPM está construyendo en pueblo Centenario “es una importante inversión que seguramente va a abrir posibilidades de desarrollo al país, ya que sigue mostrando a Uruguay como un destino serio y atractivo para inver tir consolidándonos como país forestal”. Con la aper tura de la segunda planta de UPM, según estimaciones de la Consultora Exante en diciembre de 2020, la celulosa será el principal rubro de exportación de bienes de Uruguay, con ventas externas por US$ 2.500 millones anuales y el sector forestal en su conjunto tendrá un impacto total en la economía de casi 6% del PBI. Que haya mercado para la madera pulpable hace también más competitivo el sector de producción de madera sólida, ya que permite un mejor aprovechamiento del árbol apoyando
6%
SERÍA LA PARTICIPACIÓN DEL SECTOR FORESTAL EN LA ECONOMÍA, SEGÚN ESTIMAN ANALISTAS.
7%
ES LA SUPERFICIE PRODUCTIVA DEL PAÍS QUE ES OCUPADA POR EL TERRITORIO FORESTADO.
la producción de madera de alta calidad para la industria de transformación mecánica, estimó el dirigente empresarial. Sobre los desafíos del sector, Ledesma expresó: “Si bien tenemos un sector maduro como el de la producción de celulosa, conformado por la presencia de tres grandes plantas de última generación en el mundo, el sector tiene un potencial enorme de crecimiento en la industria de transformación mecánica de la madera, ya que hay muchos proyectos forestales orientados a la producción de madera para este tipo de industrias (aserraderos, plywood, vigas laminadas para construcción -CLT-, otros). Sin dudas que el desarrollo que pueda tener esta área de actividad, generará una importante dinámica en la creación de nuevos empleos dentro del sector, y una contribución considerable a los ingresos de divisas para el país, en la medida que estos proyectos, por su
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CRECER A LA SOMBRA DE LOS ÁRBOLES
escala, sólo pueden consolidarse con el mercado de exportación”.
Diversificación.
La base forestal coloca a Uruguay en una buena situación para el desarrollo de otros usos de la madera. Hoy los productos forestales son clave para las industrias químicas, textiles, alimenticias y construcción, entre otras. “Esto permite sustituir materiales no renovables por componentes y derivados de la forestación con notorios beneficios para el ambiente”, apuntó el dirigente gremial para agregar que “la forestación sostenible es un pilar clave de la bioeconomía que está ganando espacio a nivel global”.
Producción y ventas. Al analizar el impacto que ha tenido la pandemia en la producción forestal en 2020, el presidente de la Sociedad de Productores señala distintas realidades de acuerdo a los diferentes productos exportados. “Por ejemplo, en el caso de los rolos de pino, las exportaciones fueron de casi 2 millones de toneladas, surgiendo India, con un 42%, como un
destino alternativo a China, donde se exportan un 58% de los pinos. En lo que tiene que ver a los rolos de Eucapyptus, en 2020 se exportaron un 45% más que en 2019, llegando a 140.000 metros cúbicos y con precios muy similares a 2019”. “A partir del último cuatrimestre del 2020 comenzó a verse una suba importante en el precio del flete por contenedor, lo cual impactó fuertemente en la rentabilidad de las empresas debido a que no se pudo trasladar este costo al precio final. En el caso de los productos con transformación mecánica (tablas, paneles, etc.). Los principales destinos fueron Vietnam (49%), China (24%) y Camboya (24%)”. “En lo relativo a la celulosa, a pesar de un aumento en el volumen de venta con respecto al 2019, el ingreso se redujo en un 28% por la fuerte caída del precio en el mercado internacional. Esto también afectó de forma muy importante a la exportación de chips. Éstas cayeron un 75% con respecto al año anterior. Esto significó que desde abril de 2020 las dos plantas de chipiado tuvie-
STAFF Esta publicación fue realizada por la Gerencia Comercial de El País S.A. Por consultas a Suplementos Especiales comunicarse al teléfono 29020115 internos 137 y 138. COORDINACIÓN PERIODÍSTICA: Raúl Soares Netto. TEXTOS: Marcelo Martorelli. DEPARTAMENTO DE DISEÑO: Ezequiel Pérez Medeiros (Editor), Raquel Rodríguez (Subeditora), Noemí Koyounian. TRATAMIENTO DE IMÁGENES: Fernando Mesa. CORRECCIÓN: Mario Jauregui. FOTOGRAFÍA: Diario El país y Archivo Diario El País. Se imprimió en la Planta Industrial de El País S.A. Ruta 1 y Camino Cibils. Tel. 29017115. Montevideo, Uruguay. Mayo 2021. Depósito Legal N° 370.085
En el actual escenario económico, el presidente de la Sociedad de Productores Forestales, Nelson Ledesma, no poyecta crecimientos significativos en las áreas plantadas para este año. “Seguramente se planten tasas similares a los últimos años. Actualmente el territorio forestado ocupa sólo el 7 % de la superficie productiva del país y seguramente se mantenga en ese porcentaje por mucho tiempo más”, expresó. En cambio, un fenómeno en crecimiento está marcado por la incorporación de la forestación por parte de productores agropecuarios, en diversos sistemas asociativos con las empresas forestales. “El productor agropecuario quiere diversificar su actividad para disminuir sus riesgos, cubrir los costos fijos de su establecimiento, aumentar sus ingresos, y, además, aprovechar los beneficios que las plantaciones forestales le otorgan al ganado a través de la sombra y el abrigo”, destacó el presidente de la Sociedad de Productores Forestales.
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ran que detener sus actividades hasta enero de este año”. El dirigente empresarial sostuvo que “toda esta situación ha comenzado a cambiar en el 2021, siendo el primer trimestre muy favorable para el sector en general”. “Sería esperable que a medida que la vacunación contra el Covid-19 vaya avanzando en todo el mundo, las economías comiencen también un proceso de recuperación y la demanda de los diferentes productos aumente”, subrayó Ledesma.
Precios.
El sector forestal está registrando un primer trimestre del año “mucho mejor” respecto a igual período de 2020, dijo el presidente de la Sociedad de Productores Forestales, Nelson Ledesma. “Al igual que el resto de las materias primas, la demanda de productos forestales da señales de mayor dinamismo que en 2020, y ello va traccionando lentamente los precios de venta, aunque con velocidades diferentes para los distintos productos (rolos, chips, celulosa, madera aserrada, etc.), y los distintos mercados (EE.UU., Europa, Asia, etc.)”, sostuvo Ledesma. En el caso de los rolos de pino, se ha visto una fuerte demanda de China, con aumento de precios en destino. “Dada la alta demanda mundial por fletes marítimos, éstos han subido de manera importante, lo cual en muchos casos ha conspirado contra la posibilidad de capturar el mayor precio en destino”. En lo relativo a la celulosa cuenta con un crecimiento en el precio que está siendo sostenido. La suba del precio internacional desde fines de 2020 a fines de abril se sitúa en el orden del 40 a 50%. “Claro está que este commodity venía arrastrando una caída muy fuerte en el precio desde 2019”, apuntó. Con respecto a los chips, “muy afectados durante el año pasado, la recuperación del precio de exportación, quizás recién se pueda ver durante el transcurso del último trimestre de este año”, indicó Ledesma.
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l desarrollo del sector forestal hoy es el resultado de una política de Estado bien planificada y aplicada por más de 30 años y además sostenida por gobiernos de todos los partidos políticos, dijo el presidente de la Sociedad de Productores Forestales, Nelson Ledesma. Es propósito de la gremial empresarial de productores forestales que “siga habiendo certidumbre en la política forestal, que se continúe trabajando en la mejora de las condiciones de competitividad (infraestructura, costos energía, combustible) para favorecer que haya más inversión en el sector, para que éste siga creciendo y brinde más oportunidades de trabajo y desarrollo para las personas que vivimos en este país”. Esa política de Estado “ha brindado estabilidad y previsibilidad a los inversores y es un activo país que se debe mantener”, agregó Ledesma. “Los hechos demuestran que la apuesta que ha realizado el país y la sociedad en su conjunto han dado resultado y lo más importante, es que el sector recién está despertando. Debemos tomar conciencia que, en tan solo treinta años, lo que es nada en la vida de un país, se ha podido generar el desarrollo de un sector agropecuario no tradicional, con un potencial enorme de seguir creciendo en el futuro, dada las tendencias y el aumento de consumo en el mundo y la necesidad de alinear ese crecimiento con el cuidado del ambiente. Esto abre enormes posibilidades para desarrollar productos innovadores, aplicar nuevas tecnologías, ampliar los usos de las fibras, sustituir productos de origen fósiles, y todo en total armonía con el ambiente”. Por otra parte, destacó que este desarrollo se llevó adelante en los suelos de menor productividad del país, donde por las características de los suelos (baja fertilidad, fragilidad estructural, poca profundidad) no es factible desarrollar otras actividades productivas. En el sector forestal, las inversiones, son muy importantes dada la necesidad de generar economías de escala, por el proceso biológico que implica el crecimiento de los árboles. “Quien toma la decisión de invertir, sabe que va a tener que esperar largo tiempo para ver los frutos, y si hoy es difícil saber lo que va a pasar en los próximos meses, imaginemos que certidumbre podremos tener de lo que pasará dentro de 10 o 20 años”, afirmó Ledesma para agregar que “en los 33 años que llevamos de la ley, algunos bosques destinados a la producción de madera sólida tuvieron sólo una cosecha”.
Productores forestales
POLÍTICA DE ESTADO EN EL SECTOR FORESTAL “ES UN ACTIVO PAÍS QUE SE DEBE MANTENER”
Aseguró que el país logró optimizar el uso de sus recursos naturales, para desarrollar un sector productivo y económico, no tradicional, con inversiones y horizontes de muy largo plazo, con innumerables beneficios ambientales (captura CO2, calidad de agua, protección de los suelos, energía renovable), y sociales (oportunidades laborales, de desarrollo personal y profesional de las personas, descentralización, condiciones de seguridad), que en los próximos años se convertirá en el principal sector exportador del país, y ocupando sólo un 7% de la superficie del país. “El éxito alcanzado hasta el momento en el desarrollo forestal país, ha sido gracias a este pilar fundamental. El claro marco jurídico que dio la ley forestal 15.939 de 1987, y el sostenimiento de la política forestal por parte de todos los gobiernos que han administrado el país desde entonces,
1987
FUE EL AÑO QUE SE APROBÓ LA LEY N° 15.939 QUE IMPULSÓ EL DESARROLLO FORESTAL.
fueron la base fundamental para atraer importantes inversiones que posibilitaron el desarrollo actual del sector forestal”, señaló el presidente de la Sociedad de Productores Forestales. “Quienes hoy quieren innovar, promoviendo leyes para restringir el desarrollo del mismo, sosteniendo que es momento de realizar un balance y hacer ajustes a la legislación, muestran su profundo desconocimiento sobre el sector forestal, y por ende, también desconocen que a lo largo de estos años, existieron diferentes normativas que fueron modificando algunos de los aspectos (suelos, temas tributarios, regulaciones ambientales) relacionados al sector, así como también incorporando más controles sobre la actividad forestal (Dirección General Forestal, Direccion Nacional de Medio Ambiente, Ley de Ordenamiento Territorial)”, concluyó Ledesma.