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Jesús de Candelaria: 400 años de Devoción
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Índice
Foto: David F. Meléndez
La Cuaresma, camino a la Semana Santa
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Semanas de Cuaresma
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Jesús de Candelaria: 400 años de Devoción
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Vivencias de cucurucho, escritas por Cucuruchos
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Directorio Encargado de Edición: David F. Meléndez Redactores: Ana María Xoy, Carlos Solares, Hugo Archila, Juan Carlos Espinoza Fotografía : Julio Gomez, Juan Carlos Espinoza, David F. Meléndez Arte y Diagramación : David F. Meléndez Corrector: Ana María Xoy peregrinocuaresmal@gmail.com - Km. 4.5 Carretera a Chinautla Altos de San Angel casa # 5 Zona 2 - http://www.elperegrinocuaresmal.co.cc
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El Peregrino Cuaresmal
Editorial Cuaresma y semana santa en Guatemala, única en el mundo en nuestro tierra la semana santa está enraizada en las almas de los devotos cucuruchos y devotas cargadoras que año con año hacen su respectiva cola para obtener la cartulina (tan deseada en esto dias por muchas personas) para llevar en hombros a la imagen que hace su corazón latir más y más aprisa y luego con ansia esperar la entrega de la misma para saber que turno y mas o menos a que hora será para estar preparado. Se descuelga la túnica y se le plancha al igual que al capirote, y al cinturon, se buscan los guantes que como siempre el par está incompleto y nos hace comprar un par nuevo para tener el uniforme completo. Se aproxima el día y con el, nuestro turno, turno que dedicamos para hablar con el Señor y contarle tantas cosas e implorarle aun más. Ser cucurucho es más que sólo tradición, es un sentir es saber que la sangre que le corren en las venas es morada de la penitencia y que el aroma a corozo e incienso es el perume que añoramos todo el año, es tener la convicción de sacrificar tiempo salud y vida con tal de estar cerca del Jesús o de Nuestra Señora con tal de poder dedicarle una oración o talvez escuchar una marcha como La Fosa o Una Lágrima y sentir una paz como ninguna otra. Pero siempre hay “cucuruchos” que lo son sólo por serlo por tradición no por que en verdad sientan el nexo que se crea al llevar en hombros un anda, sino es sólo un cumplir con el hecho de cargar, estos hermanos que no viven en serio los cortejos procesionales son los que vemos en lugares no apropiados para un católico revestido de túnica y dan una mala imagen de la devoción que muchos profesamos. Hermanas y hermanos católicos esta cuaresma y semana santa vivamosla con el corazón en alto y con arrepentimiento puro para así cada día seguir los pasos del redentor, Dios les bendiga hoy y siempre. Paz y bien El Peregrino Cuaresmal
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La Cuaresma, Camin Invitación a la penitencia 1. Nos encontramos hoy en el primer día de Cuaresma, Miércoles de Ceniza. En esta jornada, al comenzar el de cuarenta días de preparación a la Pascua, la Iglesia nos impone la ceniza sobre la cabeza y nos invita a la penitencia. La palabra penitencia se repite en muchas páginas de la Sagrada Escritura, resuena en la boca de tantos profetas y, en fin, de modo particularmente elocuente, en la boca del mismo Jesucristo: «Arrepentios, porque el reino de los cielos está cerca» (Mt. 3,2). Se puede decir que Cristo introdujo la tradición del ayuno de cuarenta días en el año litúrgico de la Iglesia, porque Él mismo «ayunó cuarenta días y cuarenta noches» (Mt 4,2), antes de comenzar a enseñar. Con este ayuno cuadragesimal, la Iglesia, en cierto sentido, está llamada cada año a seguir a su Maestro y Señor si quiere predicar eficazmente su Evangelio. El primer día de Cuaresma –precisamente hoy– debe testimoniar de modo especial que la Iglesia acepta esta llamada de Cristo y que desea cumplirla.
por el pueblo de la Antigua Alianza. Pero al mismo tiempo somete a crítica el modo puramente externo del cumplimiento de estos actos: limosna, ayuno, oración, porque ese modo es contrario a la finalidad propia de los mismos actos. El fin de los actos de penitencia es un más profundo acercarse a Dios mismo para poderse encontrar con Él en lo íntimo de la entidad humana, en el secreto del corazón. «Cuando hagas, pues, limosna, no vayas tocando la trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas... para ser alabados de los hombres... ; No sepa tu izquierda lo que hace la derecha, para que tu limosna sea oculta, y el Padre que ve lo oculto te premiará. Cuando oréis, no seáis como los hipócritas..., para ser vistos de los hombres..., sino... entra en tu cámara y, cerrada la puerta, ora a tu padre que está en lo secreto; y tu Padre que ve en lo escondido, te recompensará.
Cuando ayunéis no aparezcáis tristes, como los hipócritas..., (sino)... úngete la cabeza y lava tu cara para que no vean los hombres que ayunas, sino tu Convertirse a Dios Padre que está en lo secreto; y tu Padre, 2. La penitencia en sentido evangélico que ve en lo secreto, te recompensará» significa sobre todo conversión. Bajo (Mt. 6,2). este aspecto es muy significativo el Por lo tanto, el significado primero y pasaje del Evangelio del Miércoles de principal de la penitencia es interior, Ceniza. Jesús habla del cumplimiento espiritual. El esfuerzo principal de la de los actos de penitencia conocidos y penitencia consiste en entrar en sí mispracticados por sus contemporáneos, mo, en lo más profundo de la propia
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El Peregrino Cuaresmal
entidad, entrar en esa dimensión de la propia humanidad en la que, en cierto sentido, Dios nos espera. El hombre exterior debe ceder –diría– en cada uno de nosotros al hombre interior y, en cierto sentido, dejarle el puesto. En la vida corriente el hombre no vive bastante interiormente. Jesucristo indica claramente que también los actos de devoción y de penitencia (como el ayuno, la limosna, la oración) que por su finalidad religiosa son principalmente interiores, pueden ceder al exteriorizan corriente, y, por lo tanto, pueden ser falsificados. En cambio, la penitencia, como conversión a Dios, exige sobre todo que el hombre rechace las apariencias, sepa liberarse de la falsedad y encontrarse en toda su verdad interior. Hasta una mirada rápida, breve, en el fulgor divino de la verdad interior del hombre, es ya un éxito. Pero es necesario consolidar hábilmente este éxito mediante un trabajo sistemático sobre sí mismo. Tal trabajo se llama ascesis (así lo llamaban ya los griegos de los tiempos de los orígenes del cristianismo). Ascesis quiere decir esfuerzo interior para no dejarse llevar y empujar por las diversas corrientes exteriores, para permanecer así siempre ellos mismos y conservar la dignidad de la propia humanidad. Pero el Señor Jesús nos llama a hacer aún algo más. Cuando dice «entra en tu cámara y cierra la puerta», indica un esfuerzo ascético del espíritu humano que no debe terminar en el hombre
no hacia La Pascua
Foto: www.cuaresma-pazybien.com El Peregrino Cuaresmal
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mismo. Ese cerrarse es, al mismo tiempo, la apertura más profunda del corazón humano. Es indispensable para encontrarse con el Padre, y por esto debe realizarse. «Tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Aquí se trata de recobrar la sencillez de pensamiento, voluntad y corazón, que es indispensable para encontrarse con Dios en el propio yo interior. ¡Y Dios espera esto para acercarse al hombre interiormente recogido y, a la vez, abierto a su palabra y a su amor! Dios desea comunicarse al alma así dispuesta. Desea darle la verdad y el amor que tienen en Él la verdadera fuente. Liberación espiritual 3. Así, pues, la corriente principal de la Cuaresma debe correr a través del hombre interior, a través de corazones y
conciencias. En esto consiste el esfuerzo esencial de la penitencia. En este esfuerzo, la voluntad humana de convertirse a Dios es investida por la gracia proveniente de conversión y, al mismo tiempo, de perdón y liberación espiritual. La penitencia no es sólo un esfuerzo, una carga, sino también una alegría. A veces es una gran alegría del espíritu humano, alegría que otros manantiales no pueden dar. Parece que el hombre contemporáneo haya perdido, en cierta medida, el sabor de esta alegría. Ha perdido además el sentido profundo de aquel esfuerzo espiritual que permite volver a encontrarse a sí mismo en toda la verdad de la intimidad propia. A esto contribuyen muchas causas y circunstancias que es difícil analizar en los límites de este discurso. Nuestra civilización –sobre todo en Occidente–, estrechamente vinculada con el desarrollo de la ciencia y de la técnica, entrevé la necesidad del esfuerzo intelectual y físico; pero ha perdido notablemente el sentido del es- fuerzo del espíritu, cuyo fruto es el hombre visto en sus dimensiones interiores. En fin, el hombre que vive en las corrientes de esta civilización pierde muy frecuentemente la propia dimensión; pierde el sentido interior de la propia humanidad. A este hombre le resulta extraño tanto el esfuerzo que conduce al fruto hace poco mencionado como la alegría que proviene de él: la alegría grande del descubrimiento y del encuentro, la alegría de la conversión (metanoia), la alegría de la penitencia. La liturgia austera del Miércoles de Ceniza y, después, todo el período de la Cuaresma es –como preparación a la Pascua– una llamada sistemática a esta alegría: a la alegría que fructifica por el esfuerzo del descubrimiento de sí mismo con paciencia: «Con vuestra paciencia compraréis (la salvación) de vuestras almas» (Lc. 21,19). Que nadie tenga miedo de emprender este esfuerzo. Ciudad del Vaticano, 7 de febrero de 1979
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¿Por qué Miércoles? ¿Por qué la ceniza?
Foto : doshermanas-religiosas.blogspot.com Texto : http://www.poraccioncatolica.com.ar
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a duración de la Cuaresma -el tiempo de preparación a la PASCUA, la fiesta de las fiestas- sufrió muchas variaciones hasta quedar fijada en cuarenta días. Como se los contaba “desde” el Domingo de Pascua, los cuarenta días caían en domingo (ese domingo se llamaba precisamente domingo de “cuadragésima”).
En la Biblia se la utiliza como símbolo de lo efímero, de lo precario, de lo transitorio, de lo que pasa rápidamente (ver Job 13, 12). Por lo mismo adquiere un significado de dolor, llanto y sufrimiento y pasa a ser una “señal”, un símbolo del reconocimiento del propio pecado y de la consiguiente voluntad de penitencia.
La Iglesia -antiguamente- acostumbraba reconciliar a los “penitentes públicos” el Jueves Santo. Por eso, seguramente, “alguien” pensó que ese día debían concluir las rigurosas penitencias que realizaban. Entonces, para que siguieran siendo “cuarenta días”, el comienzo del ayuno se remitió al miércoles previo a ese primer domingo. En una palabra: cuarenta días previos al Jueves Santo caen en día Miércoles.
La ceniza que se emplea el Miércoles de Ceniza, se hace con los ramos bendecidos el año anterior el Domingo de Ramos. Antes de aplicársela en forma de cruz sobre la frente (también se puede esparcir un poquito de ceniza sobre los cabellos) se bendice con una fórmula que se refiere a nuestra condición pecadora y a la conversión; a la vez se pide la gracia necesaria para que los cristianos -mediante la práctica cuaresmal- nos preparemos con esmero a celebrar la PASCUA DE JESÚS.
¿Y por qué la Ceniza? Porque con ella eran rociados los penitentes públicos como parte del rito de reconciliación. Al desaparecer la penitencia “pública”, la Iglesia conservó ese rito penitencial. El Papa Urbano II, a fines del siglo XI, lo extendió a toda la cristiandad. La ceniza es el símbolo “natural” (no inventado por el hombre), de “lo que fue” y “ya no existe”, desde un papel, un carbón... hasta los restos del ser humano. La ceniza es el “residuo”, lo que queda después de que algo se destruye por el fuego. Este elemento natural, casi impalpable, que desaparece “al menor soplo”, siempre tuvo para el hombre resonancias y evocaciones muy profundas.
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El Sacerdote, al aplicarla, dice una de estas dos fórmulas. “Acuérdate que eres polvo y al polvo volverás” (Gn. 3, 19) o “Conviértete y cree en el Evangelio” (Mc. 1, 15). Las dos se complementan, mientras la primera nos recuerda “cómo se pasa la vida”, la otra apunta a la actitud de conversión interior, a la vuelta de Cristo. El simbolismo de la ceniza es denso, profundo, conmovedor. Todo se convertirá en ceniza: mi casa, mi ropa, mi televisor, mi dinero, el perro que me acompaña, los hombres que he amado y aquellos que he temido. Lo que sobre la tierra me ha parecido grande y lo que me ha parecido pequeño... todo será ceniza.
Pero por encima de esta condición débil y caduca del hombre que nos provoca pensamientos de honda reflexión y humildad, por encima de nuestra condición pecadora y frágil que reclama arrepentimiento, penitencia y conversión interior, la Iglesia nos recuerda que la Cuaresma es el itinerario hacia la PASCUA.
no quiere la muerte del pecador sino que se arrepienta y viva”, porque él “es la Resurrección y la Vida”. En cada “signo” de la Cuaresma debemos descubrir la voz amorosa de Jesús, exclamando: “No rechazaré a nadie que venga a Mí”.
Penetrándolo todo está la fuerza salvadora y sanadora de Cristo que “vino para que tengamos vida y la tengamos en abundancia”, ya que “él
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Semanas
de
Texto: www.buenasnuevas.com Foto: sxc.hu
PRIMERA SEMANA CUARESMA
DE vergiendo hacia la noche de la vigilia mismo y la solidaridad.
pascual. Para así llegar a dibujar en el horizonte de este año jubilar, una lu- No es cuestión de elegir solamente uno NO HAY PASCUA SIN CUARESMA de ellos. Necesitamos recurrir a los tres, minosa cruz del sur. La cuaresma es un tiempo de peregricomo lo veremos más adelante. No nación hacia la meta de la Pascua. No SEGUNDA SEMANA DE olvidemos que los grandes problemas y es un fin absoluto, sino un trampolín CUARESMA malentendidos de la vida espiritual se que nos sumerge en la alegría de la rehan producido cuando se ha acentuaLA ESPIRITUALIDAD DEL PEREGRINO surrección y del resucitado. El camino cuaresmal es un camino de do uno en detrimento de los otros. fe, por eso al caminante que lo recorre TERCERA SEMANA DE se lo llama peregrino. Y todo peregrino CUARESMA tiene que ajustarse a una serie de pautas EL OXIGENO DEL ALMA espirituales, que le garantizarán dentro de los imprevistos del camino, arribar a No se podría concebir una peregrinación hacia una santuario, que no la meta pascual. estuviera jalonada por la oración. Otro Durante el recorrido, tendremos tanto tendríamos que decir de nuestro que pensar en que nuestro Dios no peregrinar cuaresmal. Sin la oración, es un Dios de bolsillo. Dios no nos nos faltaría aire para respirar la vida de “retribuye” por los esfuerzos realizados la fe. Permaneceríamos inermes y sin durante la peregrinación. Él nos “rega- poder avanzar hacia el horizonte pasla” las ganas y las fuerzas para convertir cual. Tenemos que recordar también que nuestros esfuerzos en realidad. Por eso el peregrino busca intensificar este caminar cuaresmal presenta una Ahora si podemos pasar a enumerar los su intimidad con Dios. Procura respidimensión solidaria. Desde los cuatro tres componentes espirituales básicos rar “boca a boca” con el Señor dador puntos cardinales, la humanidad cre- que ocupan “la mochila” del peregrino. de vida. A él recurre, necesitado de reayente se ha puesto en camino, y va con- Ellos son: la oración, el dominio de sí nudar una comunicación que lo sane Las semanas que ella abarca, no son un simple trago amargo que debemos beber y descartar con una mueca de desagrado. Al contrario, aunque nos resulte difícil el comprenderlo, la cuaresma es un sacramento, una fuente de bendiciones y de gracias, que nos introduce de forma gradual, en un mejor conocimiento del misterio de Cristo. Y desplazando el pecado de nuestras vidas, nos va “gota a gota” humanizando y cristianizando.
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de Cuaresma de su postración espiritual.
En nuestra vida espiritual ocurre otro tanto. Tendremos que ir entrenándoLa oración tiene también un invalo- nos durante la cuarentena cuaresmal, rable poder curativo. En una longitud a fin de conseguir un dominio sobre de onda distinta, pero real y efectiva, la nosotros mismos, que nos permita con oración en el nombre del Señor Jesús, la gracia de Dios, practicar las virtudes atraviesa tiempos y distancias. cristianas y combatir los vicios que nos El cristiano, al utilizarla con hu- deshumanizan. mildad, estará cumpliendo con un El ayuno en el camino, no consiste en verdadero ministerio de la oración. una mera acrobacia de autocontrol. Cabe preguntarnos qué pasaría con la De ninguna manera. Todo ayuno crishumanidad, continuamente acunada tiano debe ser personal y personalizapor la oración de los creyentes, si estos dor. Personal, porque busca seguir a la algún día dejasen de orar... persona de Cristo pobre y despojado.
CUARTA SEMANA DE CUARESMA CON CORAZON DE ATLETA
Afrontar una larga peregrinación sin tener en cuenta nuestro estado físico, resultaría un despropósito, y correríamos el riesgo de quedar a mitad de camino, o de hacer el resto del recorrido en una ambulancia.Por eso, se hará necesario evaluar nuestras posibilidades para afrontar el desafío y poder asumirlo con corazón de atleta.
Personalizador, porque el peregrino, en la medida que siga a Cristo, se irá él mismo cristianizando.
QUINTA SEMANA CUARESMA
un solo bautismo, y una misma fe. Hoy estamos sumergidos en una cultura subjetiva y egoísta, alejada de los criterios evangélicos de la fraternidad. Sin embargo, estos nos recuerdan, que nuestra propia vida depende nuestro hermano. Las grandes carencias de nuestro mundo actual, se generan en la falta de participación a todo nivel. Al no compartirse la abundancia de los bienes materiales, intelectuales y espirituales, se producen las grandes injusticias que claman al cielo.
En la sociedad de nuestros días, son pocos los que se quedan con mucho, y son muchos los que reciben cada vez DE menos.
Por eso, tendremos que aprovechar estos cuarenta días de entrenamiento, La Cuaresma es un tiempo fuerte que para aprender a compartir. Sabiendo hay que revivir en comunión y en par- que cuando se comparte sobra. ticipación. Las peregrinaciones se realizan habitualmente en grupos solidarios, y estos proclaman a un solo Señor, GLOBALIZAR LA SOLIDARIDAD
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Cuatro Siglos de
Devoción Fotos: David F. Meléndez Texto: www.candelaria.org.gt
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ablar de Jesús de Candelaria es hilvanar historia y leyenda, es hablar de una tradición de fe que se vive en Guatemala desde hace más de 400 años. Jesús de Candelaria identifica nuestra nacionalidad criolla, nuestra religiosidad popular, nuestra historia, nuestro catolicismo. Muchos han sido los intentos por ubicar a la consagrada imagen de Jesús de Candelaria, a través de las distintas épocas, siempre durante el periodo colonial, pero muy variadas en cuanto a las teorías que diversos historiadores han manejado. Una de las más recientes, basándose en los libros de inventarios existentes, proponea Juan de Chávez como su autor en el año de 1825. Pero otros datos históricos rápidamente echan por tierra tal pensamiento. El Arzobispo e historiador Francisco de Paula García sugiere a Mateo de Zúñiga, de quién sí se sabe hizo a Jesús de la Merced, como el escultor de Jesús de Candelaria por el año de 1640. Pero los rasgos escultóricos entre ambas imágenes demuestran lo contrario. Sin embargo y más acertadamente, el historiador Víctor Miguel Díaz, lo atribuye al insigne Juan de Aguirre originario de málaga, España; quién llego a Guatemala por el año 1554, procedente del Perú, conocido por su fama en la habilidad y destreza en el arte de la escultura,
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y quien recibió la inspiración divina del Espíritu Santo, al brotar de sus manos la imagen de Jesús hacia el año de 1563; Juan de Aguirre murió en el convento de San Francisco. Esta teoría es la más aceptada por que hay pruebas que así lo van confirmando. Aparece Jesus:La primera es una bella historia del ilustre obispo Francisco Marroquín, defensor de los indígenas y precursor en la defensa de los derechos humanos, que corre paralela a la aparición de Jesús de Candelaria entre los guatemaltecos, ya que Por encargo del Obispo Marroquín, Juan de Aguirre realiza magistralmente la imagen perfecta del hijo de Dios. Se cuenta que precisamente en 1563, el Viernes de Dolores, los seguidores del Obispo, acudieron a rezarle, porque prácticamente el Obispo agonizaba, y fue tal su impresión de ver a Jesús derramando lágrimas de dolor tpor el Obispo; que fueron por todos los pueblos aledaños a propagar la noticia, que Jesús de Candelaria lloraba por el Obispo Marroquín. Fue mayor el asombro cuando a los pocos días, el Viernes Santo, murió el jerarca de la iglesia.
Su tez morena de sangre criolla, sus labios a perpetuidad entreabiertos, sus ojos verdes, su mirada hacia el frente y su abnegación abrazando el pesado madero, describen al Nazareno de la Serena Mirada, que ha sido inspiración de artistas, músicos, pintores, artesanos y del pueblo guatemalteco, que cada Jueves Santo acude a recibir sus santas bendiciones, durante sus 17 horas de trayecto procesional. Se tienen datos de la bendición de la imagen de Jesús en el año de 1628, por el Obispo de Mira Fray Ángelo María, de la Orden de Nuestra Señora de la Merced. Este era un acto especial, por lo que la imagen debió haber sido venerada muchos años antes, para que se pudiera realizar. Al referirnos a fechas importantes, ubicamos dos datos muy reveladores y contrastantes con aparentes hallazgos definitivos: Uno de ellos, el breve pontificio del Papa Inocencio XI del año de 1677, que resuelve un viejo
conflicto entre las cofradías de indios de la Iglesia Santa María la Candelaria y de los nobles o españoles de la iglesia de nuestra señora de la merced, cuya dispocisión deja la procesión de Jesús de Candelaria en día Jueves Santo, el día eucarístico, por ser una imagen mística. Mientras que por mostrar Jesús de la Merced la agonía de la pasión de cristo camino al calvario y su perfección escultórica, lo asigna para seguir saliendo el día viernes santo.Desde entonces quedó delimitado el día de procesión de ambas hermandades o cofradías. En este documento Papal se menciona que la procesión de jueves Santo sale desde tiempos inmemorables, lo que implica que si los devotos mayores no recordaban de cuando databa la procesión, aún por tradición oral contada por sus abuelos.
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Esto quiere decir que Jesús de Candelaria salía ya en procesión por lo menos 100 años atrás, lo que refrenda su hechura a mediados del siglo XVI, como decíamos muy cerca de 1563. Otro dato posterior, es la procesión de rogativa de 1733, en la cual Jesús de Candelaria sale a recorrer las calles empedradas del valle de Panchoy en la Antigua Guatemala, para pedir que cesara la terrible enfermedad de la viruela que había cobrado ya muchas víctimas. Esta es de las contadas ocasiones en que Jesús de Candelaria históricamente ha salido en procesión en un día que no sea Jueves Santo. Lo cual ubica a Jesús de candelaria con una gran devoción de muchos años atrás y no de unos pocos años como para haber ido burilado en 1825. Los terremotos de 1773, obligan la traslación de la capital al Nuevo Valle de la Virgen, y la mejor manera de hacer que los pobladores dejen su tierra, es llevándose a las imágenes de su devoción. Es así como tras largo peregrinar, y con enormes dificultades se traslada a la imagen de Jesús, junto a la de la virgen de los dolores del cerro , otras imágenes entre ellas probablemente la de la patrona, la Santísima Virgen de Candelaria, junto a cálices, copones, coronas y las varas de cofradía de Jesús Nazareno, cuya inscripción o grabado junto al quinto real de su autenticidad, así lo demuestran, al igual que las coronas de la virgen de candelaria que revelan su hechura justo en el año 1700. No cabe duda que el traslado debió haber costado mucho, y la procesión de jueves santo no se pudo organizarse nuevamente sino hasta el año 1820. Pero desde entonces empieza cobrar
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una gran fuerza entre los devotos, siendo una de las principales imágenes a la llegada del siglo XX. Tanto se había extendido su devoción popular, tanto se hablaba de su milagros, y tanto era admirada su belleza escultórica que en el año de 1917 el Arzobispo de Guatemala decide Consagrarlo, en ceremonia especial la tarde del sábado 3 de enero de 1917. Solo 10 años habían transcurrido, cuando su santidad el Papa Pío XI, declara Universal la Fiesta de Cristo Rey, nombrándose a Jesús de Candelaria en Guatemala, bajo tal advocación; que lo ha identificado así ya por mas de 70 años.
Datos Históricos de Jesus
• Su aparición entre los guatemaltecos data del siglo XVI. Aunque sin documentos que lo comprueben, varios historiadores coinciden en señalar a Juan de Aguirre, Fraile Franciscano, como su escultor en el año de 1563. • En 1733 Jesús de Candelaria, sale en procesión de rogativa en el Valle de Panchoy, Hoy la Antigua Guatemala, para pedir por el cese de la Viruela que azotaba el país y que había cobrado muchas muertes. • El 19 de febrero de 1784, las Imágenes de Jesús de Candelaria, Nuestra Señora de Candelaria y la Virgen de los Dolores del Cerro fueron trasladados a la nueva Guatemala de la Asunción.fusionándose con la ya existente parroquia de La Asunción, pero tomado el nombre de Parroquia de Candelaria. • En 1820 se reorganiza la procesión de Jueves Santo.
• El 3 de febrero de 1917 se convierte en la segunda Imagen en la Historia en ser Consagrada. • En 1927 recibe la advocación de Cristo Rey. • Manuel Enrique Móraga Compuso a finales de los años 20 la marcha que para 1934 sería ya la oficial titulada “Una Lágrima”. • En 1963, se celebra el cuarto centenario de Jesús de Candelaria, mediante una peregrinación conmemorativa, visitando en procesión la Ciudad de Antigua Guatemala, cuatrocientos años después. • En 1968 Miguel Ángel Asturias, recién nombrado premio Nóbel de Literatura, obsequia a Jesús una túnica Morada bordada en oro, que mando a confeccionar a España. • A principios de los años 70´s se introducen al cuerpo de la procesión los 14 pasos del Vía crucis, traídos desde España y portados por Palestinos a la usanza antigua, que antes fueron cucuruchos encapuchados con amplias capas, según registros gravados. • En 1972 se estrenan sus nuevas andas de 80 brazos, que para los años 80 se ampliaron a 100 cargadores hasta llegar a 116 que actualmente tiene. • La procesión del Jueves Santo de 1982 se amplia su recorrido, tomando por la avenida Juan Chapín, para circundar el Cerrito del Carmen, para lo cual es necesario salir a las 8:00 de la mañana, en lugar de
las 10:00 como se acostumbraba. • En 1992, el domingo 9 de febrero, sale Jesús de Candelaria en procesión extraordinaria, conmemorando sus 75 años de consagración. • Ese mismo año se modifica su recorrido de Jueves Santo para ingresar al barrio moderno zona 2, y retornar al templo ya no a las 11:00 sino a las 12:00 de la media noche. • En el 2000 la procesión se inicia a las 7:00 de la mañana, constituyéndose en el cortejo más grande con 17 horas de recorrido. • Ese mismo año estrena cruz laminada en plata con cantoneras y parra de oro, a la inversa de su tradicional cruz dorada que data de los años 50. • El cortejo actualmente cuenta con 12,996 cargadores o cucuruchos y 7,400 devotas cargadoras. • Actualmente se recorren 114 cuadras en turnos de 116 cargadores, en un itinerario que inicia a las 7:00 horas y concluye a las 24:00 horas. • Para la organización del cortejo hacen falta 340 inspectores o celadores y 85 celadoras. • Acompañan la procesión de Jesús 60 maestros de música.
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FE EVANGELIZACIóN y
Por Juan Carlos Espinoza
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ablar de la Semana Santa Guatemalteca no es solo hablar de procesiones, olor a corozo, de las interminables filas de curuchos con el morado penitente o con el negro de luto, lo colorido de las alfombras y de los vendedores que anteceden las procesiones, platos típicos de la epoca. La Semana Santa en nuestra Guatemala es mistica, es expresion de fe, una forma popular de evangelizacion, es unica.
Soy cucurucho porque Jesús me llamo a ser cucurucho y acepte el llamado. ¿Qué me mueve a ser cucurucho? Me mueve ser curucho el amor a Jesús, el poder acompañarlo en su evangelizacion por la calles de nuestra Guatemala, pero mas que nada me mueve ser cucurucho las muestras de amor y fe del pueblo, las lagrimas que brotan de los ojos al ver el paso solemne de las andas que portan a la bellisimas imágenes de aquel que dio la vida por nosotros, del arrepentimiento que llama a la conversión de la feligresía.
Una anécdota de estas demostraciones de fe y la que más me ha impactado en el tiempo que Jesús me ha permitido acompañarle, se dio en un Sábado del Consuelo, cuando Jesús del Consuelo iba en paso procesional por la 13 avenida y callejón del judío, había un papá con su hija en hombros, el papá no pudo ver la expresión de la niña, pero de los ojos de la niña brotaban lagrimas inocentes y tiernas, porque sin lugar a dudas Jesús inspiro en ella ese sentimiento de dulzura y consuelo, fue algo tan especial en mi vida ver ese rostro infantil que comprendía el dolor que Jesús sufrió por nuestros pecados, son muestras de fe que te dan fuerzas y animos de seguir adelante, que le dan sentido al llamado que Jesús nos hace a ser cucuruchos.
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Foto: David F. Meléndez
Al Encuentro de mi Amado
Por Carlos Solares
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al vez no tenga la experiencia de un escritor y no pueda plasmar en lo siguiente una experiencia única que me haya pasado, trataré de escribir mi vivencia anual cada Sábado del Consuelo.
el año, entre ansiedad y alegría a duras penas logro conciliar el sueño. Muy temprano en la mañana ya del Sábado del Consuelo alisto mis contraseñas para iniciar el tradicional recorrido a cada una de las iglesias por los turnos de la nueva Semana Santa.
perdiendo de mi pensamiento de que estoy a pocos momentos de verlo nuevamente.
Nos repartimos por iglesias junto a mi hermano para terminar nuestro recorrido rápido y poder estar lo más Es la noche del Viernes de Dolores y temprano posible en el Templo Reen el ambiente se empieza a sentir la Junto a mi hermano, mi compañero coleto, ya en el templo una multitud víspera del día más esperado de todo de tantas hazañas cuaresmales. Jamás inmensa espera ansiosamente en el El Peregrino Cuaresmal
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Adorable Jesús del Consuelo
atrio para poder ingresar y estar en el inolvidable momento en que se levanten las andas. Se abren las puertas y es casi imposible llegar hasta dónde está El, mi ansiedad por verlo nuevamente, hace que mi corazón lata mucho más fuerte, trato la manera de acercarme lo más que puedo, al fin junto a mi hermano logramos encontrar un espacio para poder presenciar la salida del cortejo y cumplir con mi tradición de entonar el canto Jesús del Consuelo.
No logramos ver su rostro desde nuestra ubicación solamente podemos verlo a Él abrazando el madero. Los minutos transcurren y la hora cero ha llegado, la ansia se apodera de mi, se escucha el permiso concedido para poder levantar las andas, y casi en un parpadeo inicia el toque del silencio, todos los presentes al unísono ponemos rodilla en piso e imploramos una plegaria hacia el Creador, inicia el toque de timbales, inmediatamente se escucha el timbre y empiezo a vivir el momento anhelado, las notas de la marcha oficial Jesús del Consuelo se impregnan por todo el Templo y una mezcla de sentimientos dominan mi ser, la emoción es tan grande que no puedo controlarla, al pasar Él frente a mi hermano y a mí, lagrimas de alegría caen por mi ojos, dándole gracias por otro año más y así atrás de Él acompañarlo durante sus trece horas de recorrido. El tiempo ha transcurrido y estoy en la cuadra que inicia mi turno –la espera se hace interminable- tanto que contarle a Él quien es mi confidente y guía. Estando allí esperando por Él vienen a mi tantos sentimientos, alegría, porque nuevamente tendré la oportunidad de llevarlo en hombros, tristeza, porque yo sé que al terminar
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El Peregrino Cuaresmal
fuente eterna de paz y bendición nuestras almas indignas del cielo otra vez te suplican perdón.
el turno tendré que esperar otro año más para gozar de este privilegio. Estando Él a tan solo unos pasos de mí, veo su rostro y desaparecen de mí mis penas y angustias y me dejo llevar por el amoroso peso de sus andas y por el vaivén de su paso cadencioso. Mi cabeza en el bolillo, mis ojos cerrados, las notas de la marcha en curso sonando, todo se conjuga para que en el momento que lo estoy llevando en hombros se quede en mi durante todo el año y me ayude en la espera de vivirlo nuevamente. Es casi medianoche ya, y el día está por terminar. Estoy a pocos metros de terminar el recorrido iniciado trece horas atrás, ya el cansancio es notable, la tristeza me embarga, puesto que tendrá que transcurrir un año más para poder volver a vivir estos momentos, pero al mismo tiempo en mi corazón se siente una gran alegría y un agradecimiento hacia Él por haberle cumplido, por haber estado con Él en todo su recorrido. En la esquina de la 3ra. Avenida y 3ra. Calle, es el punto en que pasa frente a nosotros por última vez ese día y una plegaria nace de mi hermano y de mí, pidiéndole que por favor nos permita estar el próximo año junto
a Él, otro Sábado del Consuelo más. Jesús del Consuelo tu quien eres mi guía y mi fuerza, quien me alienta en los momentos difíciles y comparte mis alegrías y mis triunfos. Tu quien me espera en cada visita a tu capilla en aguardo que te cuente lo acontecido de la semana, pero que realmente ya lo sabes y escuchas amorosamente lo que te expreso. Tu quien al verte, mi corazón se alivia y se consuela. El tiempo ha transcurrido inexorable y recuerdo como si fuese ayer como doce años átras en el Turno 43 me diste el privilegio de llevarte en hombros por primera vez y que a partir de ese momento, cada día ha ayudado a que me enamore más y más de Tí. Hoy escribo estas palabras, pidiéndote en esta espera anhelante que nos permitas a mi hermano y a mi compartir este y más Sábados del Consuelo junto a Ti y año con año vivir estos momentos nuevamente.
Foto: Juan Carlos Espinoza
HASTA NO VIVIR LA SEMANA SANTA… Por Ana Maria Xoy
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ice un dicho muy conocido “Hasta no ver no creer” y vaya que pude comprobar por propia experiencia el significado de la misma con mi poco conocimiento acerca de la Semana Mayor, que para mi, era tan solo un espacio de tiempo en el cual se descansa, y por supuesto se dedica tiempo completo al esparcimiento y diversión con amigos o familiares. Aunque el tiempo en familia y con amigos es necesario para conservar las buenas relaciones, no debemos olvidar el maravilloso universo lleno de religiosidad, cultura, arte, leyendas y tradiciones que nos ofrece esta temporada, recordando que hay actividades para todas las edades, que bien aprovechadas, estrechan los lazos familiares y fraternales. Que mejor fortuna que ver la Semana Mayor desde el punto de vista de un devoto, del cucurucho incansable que no deja pasar un cortejo hasta poder participar en el y que por ningún motivo abandona sus tradiciones por actividades mundanas.
Foto: David F. Meléndez
cotagian su amor de alguna manera y conforme el paso de los dias, nos hace entender su dedicación pese al cansancio, y el desvelo. Dichas enseñanzas que despiertan nuevamente el valor y la ilusión que de niños sentiamos al ver una procesión o al compartir las tradiciones relgiosas tan propias de nuestra Guatemala. Como nos podemos llamar verdaderos guatemaltecos si no conocemos de lo nuestro, y es que en mi caso, hasta que “viví por primera vez” la semana santa pude admirar por cuenta propia la belleza y complejidad que maravilla a los devotos y al mundo. Cada detalle, desde las alfombras, la vestimenta y las comidas dejan muchas ganas de informarse aún más comprobando nuevamente que solo se puede amar lo que se conoce.
No dejemos nuevamente que nos cuenten y nos traten de enseñar de que se trata la Semana Mayor porque de esta manera la conoceremos a través de experiencias ajenas, en cambio, VIVAMOS por nosotros mismos lo que nos han contado para poder CREER realmente la belleza, mistiAdemás de compartir su devoción, el cucurucho, comparte cismo, fascinación y esperanza que difunde en el devoto leyendas historias y anécdotas de su conocimiento que nos guatemalteco esta mágica temporada. El Peregrino Cuaresmal
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VIVENCIAS CUARESMALES Por Hugo Guillermo Archila Flores
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omo si nada, el tiempo ha transcurrido y el calendario nos marca la llegada de una nueva cuaresma. ¡¡Gracias a Dios!! En el ambiente, los árboles de jacarandas así como las flores de bouganvilias, nos anuncian que el morado penitente engalana el cortinaje de los templos, y tiñe las casullas sacerdotales, recordándonos que es tiempo de penitencia y conversión. El inconfundible aroma a corozo, se deja sentir en el interior de los templos. Las imágenes de pasión lucen ataviadas con hermosas túnicas, rodeadas por los tradicionales huertos y el inconfundible sonido de las notas de las marchas fúnebres se dejan escuchar, invitándonos a revivir los momentos más dramáticos de la vida, pasión, muerte y gloriosa resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.
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El Peregrino Cuaresmal
Fotos: Julio Gomez/ David F. Meléndez
Las calles del centro histórico, revivirán nuevamente el paso de los majestuosos cortejos procesionales. Lugares como el parque de San Sebastian, donde se ve pasar a Jesús del Consuelo, la primera avenida a Jesús de los Milagros, la avenida de los árboles a Jesús de las Tres Potencias, el callejón del judío, la avenida Juan Chapín o la catorce avenida por la noche, que bajo la luz de la luna de Nissan, retorna a su templo Jesús de Candelaria o al despertar el alba el día Viernes Santo, alfombras multicolores adornan la once avenida el paso del Señor de la Merced. Y qué decir por la tarde y noche de ese mismo día, el paso de los tres Santos Entierros, allá por la cuarta avenida, ver a los Cruzados del Santo Sepulcro, flanqueando el paso del Señor Sepultado de la Recolección
o por el barrio moderno, ver a los pasos dominicos precediendo el paso del Cristo del Amor, que descansa en su urna de cristal, o allá por el parque concordia ver el retorno del Santo Cristo Yacente rumbo al Calvario. Y podríamos seguir enumerando más anécdotas y recuerdos, que cada uno guardamos en la memoria. Y qué decir cuando vemos a los niños participando con alegría en las procesiones infantiles, recordando nuestra niñez cuando nos llevaban a cargar a los cortejos infantiles de la Merced, Candelaria, la Recolección o Santo Domingo, o cuando éramos adolescentes y participamos como sanjuaneros, allá en San José, Candelaria o la Merced. Pidamos con fe a Dios, que esta Cuaresma y Semana Santa 2009, no la vivamos como algo meramente folklórico y tradicional, sino como la época que el Señor nos pide para convertirnos, para enmendar nuestra vida y seguir su camino, pues él nos pide un corazón arrepentido y humillado. Ese es el auténtico camino de la salvación. A Dios no le interesa saber cuántos turnos extraordinarios o comisiones de honor cargamos, o cuántas cuadras o comisiones llevamos en las procesiones. Eso es terrenal y efímero. A Dios le interesa conocer cuán dispuestos estuvimos a cambiar nuestras actitudes inapropiadas por una auténtica y sincera conversión. Propongámonos pues en esta época, hacer un auténtico y profundo examen de conciencia y acercarnos más a Él, a través de los sacramentos de la Penitencia y la Eucaristía. Ello nos ayudará a vivir mejor y meditar más a profundidad el misterio de la Redención del Señor, a través de estas bellas manifestaciones. Dios nos regale más vida para vivir muchas cuaresmas y semana santas más.
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Ilusión A
Por David F. Meléndez
ño con año se vuelve a vivir aquella ilusión que parece ser la misma de la primera vez que nos pusimos la túnica morada y el capirote. Esta ilusión en mi caso como para muchos más cucuruchos de mi generación inició con el cortejo del niño de la Demanda, no olvido mi primer turno recuerdo lo nervioso que estaba, pero aun asi al abrazar el bolillo me sentí nuevo y diferente, estaba entrando a ser cucurucho ¡Que Dicha! Y a partir de ese momento cambió mi forma de ver la época de Semana Santa.
Poco a poco fui adentrándome en este maravilloso universo que me ha cautivado y que aun hoy estoy orgulloso de decir ¡Soy Cucurucho! La devoción de llevar en hombros una imagen es algo muy personal y cada cucurucho la vive distinta, se puede hablar con confianza y tranquilidad con el Señor y sentir en minima cantidad el peso de la cruz. Comparo la ilusión que siento cuando llega la cuaresma con una amplia expectativa como el abuelo que espera el nacimiento de su nieto en la sala de espera del hospital, como un niño espera las 12 de la noche para destapar el regalo mas grande bajo el árbol, la ilusión es un esperar y añorar el tiempo del calor, los chupetes, las granizadas, el corozo, incienso y las alfombras tan solo para compartir con Jesús unas horas que a veces parecen ser un instante. El ser cucurucho es tener la convicción que un cortejo procesional no es un espectáculo sino una herramienta de esperanza y evangelización; es tener nerviosismo ansioso de estar presente en una salida en el paso por el parque o en la entrada del cortejo, es correr para llegar al tan anticipado y deseado turno, es escuchar los acordes de una marcha que deleita los oídos, es llorar de emoción, es llorar de tristeza, es caminar en la fila orando, es querer estar con Jesús o la Virgencita, es saber que la fé no solo es participar, es tener la esperanza de estar el siguiente año presente en el cortejo. Es esa ilusión la que nos mantiene cada año pendientes de las fechas de inscripción, haciendo cálculos para saber si la cuaresma va a caer temprano o tarde, hablando con los de la foto para estar todos presentes en la iglesia ese dia, preparando los uniformes para el cortejo. La ilusión se contagia de generación en generación pues se puede ver en las procesiones infantiles, el llamado semillero, donde ellos en sus rostros sin decir palabra expresan su sentir. Deseo que esta ilusión que cada Domingo de resurrección renace con nuevos brillos, se quede con todos nosotros mis hermanos cucuruchos y que esta cuaresma y semana santa sea de conversión, bendición y paz para todos.
Foto: David F. Meléndez
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Gracias Dios Mio, por este amanecer, por tenernos con vida en esta Santa Cuaresma... Dedicado a mi padre y a todas las personas que de una o de otra forma contribuyeron para que este proyecto sea hoy una realidad.