Un Mundo de Aventuras
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Primera Edición, Bogotá, Octubre de 2008
ISBN 958-97667-1-4
Ilustración: María de Pilar Rodríguez Duplat
Diagramación: Terry Escobar G.
Contenido Pedagógico
Halloween y El tiempo
Por Luis Fernando Isaza Robledo Un Mundo de AventurasAquella mañana de Domingo, Petra y Matra amanecieron con mucha hambre.
Pero se había acabado el chocolate, su único alimento, por lo que para poder comer, deberían esperar hasta la próxima noche de luna llena, cuando podrían salir a atrapar niños desobedientes para convertirlos en aquel delicioso manjar.
- Falta una semana - dijo Petra preocupada.
- No señora - contestó Matra
desde el sofá - faltan sólo 7 días -
Era tanto el hambre que sentían las dos niñas brujas, que peleaban por todo.
Una obra de ShowPlace
En medio de su discusión, inesperadamente, regresó Frida, aquella vieja bruja que hace ya un año, las había atrapado y llevado al castillo para convertirlas en chocolate.Una obra de ShowPlace
Desde el día en que la habían dejado por fuera del castillo, achicharrándose bajo la luz del sol, Petra y Matra pensaban que Frida se había desvanecido y que jamás volvería.
Pero allí estaba, parada justo frente a ellas, achicharrada por el sol, pero viva.
Las niñas huyeron del susto
- Las atraparé - les gritó Frida, mientras comenzaba a volar en su escoba hacia ellas.
Pero Petra y Matra, que durante el último año habían aprendido muchos poderes, también tomaron sus escobas y desaparecieron.
- Convertíos en cucarachas mal olientes - gritó Frida furiosa, pero su embrujo tampoco tuvo efecto pues las niñas también habían aprendido como enfrentarlos.
- Ya sé que voy a hacerdijo Frida riendo - y contra esto no tendrán como defenderse -
Entonces salió volando rápidamente y desapareció sin que las niñas pudieran saber donde estaba.
Pasaron segundos, minutos, horas. El sol, que ya había cruzado su punto más alto en el cielo, daba vida a una hermosa tarde. Pero aún, la bruja Frida no aparecía.
Solamente, al llegar la noche, después de mucho buscar, la encontraron escondida en un rincón de la biblioteca, detenida sobre unas páginas del libro de los mil poderes.
- ¿Qué estará leyendo? - preguntó susurrando
Petra a Matra.
- Es el libro de los mil poderes - contestó Matraseguro está buscando alguna nueva magia.-
De pronto, la vieja bruja, al sentir la presencia de las niñas, arrancó unas páginas del libro y mientras salía volando por una de las grandes ventanas del castillo comenzó a pronunciar fuertemente unas palabras mágicas que las niñas jamás habían escuchado.
- Oh tempora, oh tempora moris, parara o moris o tempora mis -
- Oh tempora, oh tempora moris, parara o moris o tempora mis -
Frida había desaparecido y Petra y Matra pronto se dieron cuenta que el tiempo se había detenido. Las manillas de los relojes que marcaban las 6:00 pm en punto ya no se movían y el sol, que pronto debería haber caído en el atardecer, permanecía inmóvil en el horizonte. No habría noche ni nuevos días y si esto persistía, jamás volvería a
salir la luna llena.
- Moriremos de hambre - dijo Petra mientras una araña gigante subía por su escoba.
- Si no logramos evitar este maleficio moriremos de hambre, pues jamás volverán las noches de luna llena -
- Vamos tras Frida - gritó Matra.
Pero Petra le recordó que de salir, el sol las quemaría, así como había quemado a Frida. Aún más, como eran apenas unas niñas, con piel suave y delicada, seguramente las mataría.
- ¿Entonces qué hacemos?- se preguntaron.
Las niñas decidieron consultar el libro de los mil poderes. Con ayuda del candelabro, corrieron a la biblioteca y después de algunos minutos encontraron en su índice general, el Capítulo llamado "Los cuatro poderes para manejar el tiempo”
I. Sobre cómo regresar el tiempo.
II. Sobre cómo detener el tiempo.
III. Sobre cómo adelantar el tiempo.
IV. Sobre cómo normalizarlo.
Sin embargo, cuando fueron a las páginas de cada tema, sólo encontraron un pequeño trozo de papel donde apenas se alcanzaba a leer el primero de los tres grandes poderes: como regresar el tiempo.
- Pero si regresamos en el tiempo de pronto no aguantamos el hambre que tenemos - dijo Matra.
- Ensayemos - dijo Petra.
Entonces, tomaron la página en sus manos y simultáneamente comenzaron a leer en voz alta:
- oh tempora, oh tempora pasatus, preteritus, próximuscomenzaba a viajar lentamente hacia el oriente.
Pronto, comenzaron a ver como el reloj empezó a retroceder y también como el anochecer se aclaraba mientras el sol
- Detenedlo - gritó Matra.
- No puedo hacerlo - gritó Petra desesperada.
- No tenemos el poder para detener el tiempo.-
El reloj continuaba retrocediendo, minuto tras minuto. Tanto, que pronto vieron como Frida regresó de espaldas, por la ventana por la que había escapado, se sentaba de nuevo en la biblioteca y leía de nuevo el conjuro para detener el tiempo. Y de nuevo, lo detuvo. Con la repetición del conjuro,
Frida logró de nuevo detener el tiempo.
Las niñas se miraron y miraron a Frida, quién estaba exactamente frente a ellas sin entender muy bien lo que estaba sucediendo. El tiempo estaba detenido.
Rápidamente mientras Petra y Matra intentaban regresar el tiempo un poco más, para deshacerse de la vieja bruja, Frida trataba de detenerlo de nuevo.
Trataron de quitarse los poderes mutuamente. Frida agarró el papel del libro que tenían las niñas y las niñas lograron tomar uno de los papeles de Frida. Nerviosa por lo que las niñas pudieran hacer invocó el poder que aún le quedaba en sus manos. Pero resultó ser el poder equivocado: el poder de adelantar el tiempo, por lo que el tiempo empezó a correr rápidamente. En pocos instantes el reloj empezó a marcar, horas, luego días, luego meses y luego años. Los años comenzaron a pasar muy rápidamente.
Petra y Matra, confundidas, sin saber exactamente qué estaba pasando vieron como en el suelo estaba uno de los poderes. Se apresuraron a cogerlo y rápidamente gritaron:
- Oh tempora, oh tempora normatus, normatus, normatus.-
El tiempo se detuvo y de nuevo comenzó a correr normalmente.
- Nos salvamos - dijo Petra - desapareció FridaPero cuando se miraron al espejo ellas habían cambiado. Ahora eran dos viejas brujas, iguales a ella.
Buscaron a Frida por todas partes, pero no la encontraron. Y los demás poderes para manejar el tiempo, desaparecieron con ella.
Por el resto de sus días, tendrían que vivir como dos viejas.
Una obra de ShowPlace
Aprendieron una gran lección.
El tiempo es un don de Dios con el cual no se juega.
El tiempo debe ser nuestro aliado, para bien o para mal, pues sólo con el tiempo,llegaremos a ser lo que seremos, sólo si bien lo manejamos.