1 minute read
La Ribera, un paseo obligado que guarda su propia historia
Escenario de acontecimientos que marcaron a fuego al distrito y a la Argentina en general, es uno de los sitios emblemáticos de la ciudad. El de Quilmes supo ser el balneario con mayor concurrencia del país, con una obra que fue inaugurada en 1915
La Ribera tiene, como todos los lugares emblemáticos del distrito, una historia propia que sin duda merece ser contada, a punto tal que en sus épocas no tan lejanas de esplendor se convirtió en el balneario más multitudinario del país. Tampoco está de más mencionar que es visitada durante todo el año por personas de todas las edades y de diferentes zonas, tanto de la región como del Área Metropolitana y de otros sitios del Conurbano. Es uno de los paseos por excelencia de la ciudad, para los locales y visitantes ocasionales, para disfrutar en soledad o en familia a orillas del Río de la Plata. Otro de los sectores donde conviven las tradiciones, el desarrollo, lo antiguo y lo moderno, un privilegio para cada quilmeño.
Advertisement
Quilmes llegó a ser el centro balneario más importante desde los tiempos de su consagración como ciudad, con una masiva concurrencia incluso antes que Mar del Plata: para ajustarse a una reseña fidedigna, hay que destacar que mantuvo la supremacía sobre otros paseos balnearios bonaerenses.
La construcción del primer balneario del país se registró en 1911, con la instalación de la rambla y de la ya emblemática pérgola que fuera adquirida, como ya se reflejara en otras ediciones especiales, en la Feria del Centenario argentino por la familia Fiorito, por esos años recientemente radicada en la ciudad y fundadora del Balneario Quilmes Sociedad Anónima. Las obras fueron inauguradas oficialmente en 1915 y contaba con: una rambla de madera, una pileta de natación y dos espigones. No fue todo: en 1917 se creaba el primer cine sonoro al aire libre de la Argentina y una década después las piletas de agua salada sobre el propio río, con vestuarios individuales, una maravilla de la época que causó furor.
Es sin temor a equivocarse un lugar que ha visitado al menos una vez cada habitante de la Zona Sur, que ha encontrado un sitio para el esparcimiento, la diversión y el sosiego. Un centro que se renueva y que ha sido escenario de momentos históricos, punto de inflexión para la República Argentina.
En la actualidad el paseo sigue siendo elegido por miles de personas, con instituciones centenarias y sitios gastronómicos de renombre que hacen que La Ribera siga siendo ese lugar digno de visitar que tiene su propia historia en cada sector de la costanera, tan cara al sentimiento de cada quilmeño.