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Ciudad de México
Del 10 al 16 de octubre de 2022
Edición No. 31
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¡SON SEIS CÁRTELES! Pedro Daniel Rodríguez Hernández \ Director General
*Los que controlan el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, de acuerdo con información de la DEA (la agencia antidrogas de Estados Unidos), el cual es el principal centro de operaciones de grupos criminales en la capital del país, misma que ya es asiento de grupos criminales aunque las autoridades sólo reconocen que existen bandas dedicadas al narcomenudeo *Las organizaciones con presencia en la capital son Unión Tepito, Anti-Unión Tepito, Sinaloa, Cártel de Jalisco, cártel de Tláhuac y la Familia Michoacana, que además de Michoacán también cuenta con una base de operaciones en el Estado de México, principalmente en Ecatepec, el municipio más grande del país
*El narcotráfico opera abiertamente y frente a las autoridades capitalinas, pues todos estos grupos trabajan al menos con 25 tipologías delictivas; las más socorridas son el secuestro, tráfico de drogas de todo tipo, incluidas las de diseño, así como el cobro de derecho de piso Ricardo Ravelo/Corresponsalías Nacionales/ Grupo Sol Corporativo/Segunda y última parte Ciudad de México.- La dinámica del narcotráfico en la Ciudad de México se ha incrementado, sobre todo, en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde operan unos seis cárteles, según información de la DEA (la agencia antidrogas norteamericana). El AICM es clave en el transporte de enervantes que provienen de centro y Sudamérica, así como para el envío de dinero y precursores químicos que son traídos de Alemania o Asia y que sirven para elaborar drogas químicas, como el fentanilo, que el año pasado causó la muerte de más de cien mil personas en Estados Unidos. Las autoridades norteamericanas han alertado que la terminal aérea de la capital del país está controlada por grupos criminales que operan el narcomenudeo en la ciudad y que, además, mueven cuantiosos cargamentos de drogas hacia Estados Unidos.
PAG. 7 NARCOTRÁFICO
YUCATÁN
COLIMENSES: REHÉNES DE LAS HUESTES DEL SE DESTAPA LA CLOACA CHAPARRITO Y LA BESTIA, AÚN ESTANDO PRESOS José Sánchez López /Corresponsalías Nacionales/Grupo Sol Corporativo *Habían sellado una “pax narca” que se rompió cuando mandaron asesinar a la gobernadora Indira Vizcaíno Silva *Antes de la captura de ambos, la declaración de guerra entre el CJNG y el CIC por el control del Estado, había dejado ya un saldo de más de 200 personas ejecutadas en la entidad *La detención de los capos originó narcobloqueos, incendios de camiones, tráileres y demás vehículos para cerrar carreteras en el Estado, cierre de comercios y una situación de pánico entre la población
*Representantes de diversos ejidos de Yucatán tuvieron una segunda reunión con funcionarios de la Secretaría de Gobernación para detener el despojo de tierras en el estado *Los campesinos destaparon la cloaca durante la segunda reunión, al exhibir la corrupción y complicidad que impera en dependencias como Pemex, SCT, Semarnat, Profepa y el INAH *Entre los puntos que se abordaron, destaca el grave problema que representa el abogado Rafael Acosta Solís, a quien señalaron por vender tierras de los ejidatarios a través de asambleas amañadas
laopiniondemexico.mx Ciudad de México, del 10 al 16 de octubre de 2022
¡SON SEIS CÁRTELES!
Ricardo Ravelo/Corresponsalías Nacionales/Grupo Sol Corporativo/Segunda y última parte
Ciudad de México.- La dinámica del narcotráfico en la Ciudad de México se ha incrementado, sobre todo, en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, donde operan unos seis cárteles, según información de la DEA (la agencia antidrogas norteamericana). El AICM es clave en el transporte de enervantes que provienen de centro y Sudamérica, así como para el envío de dinero y precursores químicos que son traídos de Alemania o Asia y que sirven para elaborar drogas químicas, como el fentanilo, que el año pasado causó la muerte de más de cien mil personas en Estados Unidos. Las autoridades norteamericanas han alertado que la terminal aérea de la capital del país está controlada por grupos criminales que operan el narcomenudeo en la ciudad y que, además, mueven cuantiosos cargamentos de drogas hacia Estados Unidos. Aunque las autoridades siempre han negado la operación de cárteles en la Ciudad de México, lo cierto es que, al menos, seis cárteles ya tienen amplia actividad en la capital del país y dominan municipios completos, donde mueven droga a granel, cobran el llamado derecho de piso, secuestran y trafican con personas. El mes pasado, la Secretaría de Seguridad Pública Ciudadana, a cargo de Omar García Harfuch, desmanteló una célula del grupo “Los Chapitos” que estaban afincados en Tlalpan, particularmente en la zona conocida como Topileo. En esa zona, que conecta a la ciudad de Cuernavaca por la carretera libre, “Los Chapitos” habían alquilado una casa de seguridad donde escondían a personas privadas de su libertad. En la región, los habitantes los detectaron y los denunciaron a raíz de que perpetraron varios secuestros. Según los vecinos del lugar, el grupo criminal se movía a deshoras de la noche, portaban pasamontañas y andaban fuertemente armados. En la casa de seguridad había tres personas plagiadas en el momento en que la propiedad fue cateada por parte de la Policía. En concreto, la zona de Topilejo, en Tlalpan, se había convertido en una extensión del cártel de Sinaloa, el más poderoso de América Latina, de acuerdo con datos de la DEA, la agencia antidrogas norteamericanas. El Gobierno de la Ciudad de México presume que la capital del país cuenta con la mejor Policía de todo el territorio nacional; también pregona que no hay cárteles en la principal urbe de la República. Sin embargo, en la ciudad de México no sólo se refugian
los líderes y operadores de los principales cárteles: también han extendido sus redes criminales y cuentan con amplios mercados para la distribución de todo tipo de drogas, desde cocaína y heroína hasta las llamadas drogas de diseño, que han causado explosión en el mercado de consumo. De acuerdo con reportes oficiales, en la ciudad de México operan seis cárteles. Estos son Unión Tepito, Anti-Unión Tepito, Sinaloa, Cártel de Jalisco, cártel de Tláhuac y la Familia Michoacana, que además de Michoacán también cuenta con una base de operaciones en el estado de México, principalmente en Ecatepec, el municipio más grande del país. Estos grupos de la delincuencia organizada se disputan el enorme mercado de consumo; tienen operadores en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), hasta donde arriban los cargamentos de droga que, después, son guardados en bodegas clandestinas y distribuidos en bares, cantinas, antros de todos los niveles, casas de juego, prostíbulos, “table dance” y discotecas de colonias, tanto populares y de postín, como Polanco, Las Lomas, El Pedregal de San Ángel, Santa fe, entre otras. Todos estos grupos criminales operan, además, el cobro de piso, la venta de protección, la prostitución a través de mujeres traídas del extranjero que son explotadas en el negocio sexual; de igual forma manejan la piratería y todas sus actividades se realizan, según las fuentes consultadas, con el apoyo de la Policía de la Ciudad de México, la misma que según es una de las más eficaces del país.
*Los que controlan el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, de acuerdo con información de la DEA (la agencia antidrogas de Estados Unidos), el cual es el principal centro de operaciones de grupos criminales en la capital del país, misma que ya es asiento de grupos criminales aunque las autoridades sólo reconocen que existen bandas dedicadas al narcomenudeo. *Las organizaciones con presencia en la capital son Unión Tepito, Anti-Unión Tepito, Sinaloa, Cártel de Jalisco, cártel de Tláhuac y la Familia Michoacana, que además de Michoacán también cuenta con una base de operaciones en el estado de México, principalmente en Ecatepec, el municipio más grande del país *El narcotráfico opera abiertamente y frente a las autoridades capitalinas, pues todos estos grupos trabajan al menos con 25 tipologías delictivas; las más socorridas son el secuestro, tráfico de drogas de todo tipo, incluidas la de diseño, así como el cobro de derecho de piso
CDMX, TERRITORIO DE CÁRTELES Durante más de una década, las autoridades de la Ciudad de México –la más poblada de América Latina y una de las más grandes del mundo– han negado la presencia de los cárteles de la droga. En las calles de la capital del país, en bares, prostíbulos y cantinas, muchos de ellos localizados en zonas exclusivas como las colonias Roma, Polanco, Condena o Zona Rosa, con frecuencia ocurren asesinatos, secuestros y extorsiones, pero todo se le atribuye a la delincuencia común cuyos líderes habitan en zonas y ba-
rrios violentos, una suerte de submundo donde todo huele a ilegalidad. En gran medida, la clave de las autoridades capitalinas ha consistido en voltear hacia otro lado, a la provincia, donde los líderes criminales se disputan el mercado de consumo y los territorios,
pero en la Ciudad de México siempre se ha negado no sólo la presencia, también las operaciones de los más importantes cárteles del narcotráfico, una realidad que ya no puede ocultarse. En la medida en que los grupos criminales fueron creciendo en el país, antes y después del sexenio de la
guerra que encabezó Felipe Calderón, los jefes de los cárteles utilizaron a la Ciudad de México como un refugio seguro. En la gran metrópoli no había ajustes de cuentas, tampoco persecuciones y menos balaceras al estilo Tamaulipas o Sinaloa. Esta suerte de “pax mafiosa” permitió que los grandes capos del narcotráfico adquirieran fastuosas mansiones para vivir o pasar algunos días en lo que se enfriaban sus plazas de la violencia. En la Ciudad de México vivió Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”, cuando era jefe del cártel de Juárez. Antes, en 1988, estuvo preso en el reclusorio Sur, acusado de uso de arma prohibida. Permaneció tres años preso, recobró su libertad y, en unos cuantos meses, se entronizó en la jefatura del cártel juarense luego del asesinato de Rafael Aguilar Guajardo. En Chimalhuacán, al norte de la ciudad, vivía Eduardo González Quirarte, “El Flaco”, publirrelacionista del cártel de Juárez y hombre de confianza de Carrillo Fuentes. Otros que habitaron en la ciudad de México fueron los hermanos Beltrán Leyva, jefes de una de las células más poderosas del narcotráfico. Luego, Arturo Beltrán, “El Barbas”, se mudó a Cuernavaca y se instaló en un lujoso departamento frente a la zona militar. Dámaso López, el famoso “Licenciado”, socio de Joaquín Guzmán Loera, fue detenido en un departamento de la ciudad de México mediante un operativo coordinado por Omar García Harfuch, quien fue atacado a balazos en la ciudad de México, según él mismo reconoció, por el Cártel de Jalisco Nueva Generación. Durante el gobierno de Miguel Ángel Mancera, la presencia del narcotráfico siempre fue negada en la capital del país. El exjefe de gobierno y actual senador de la República por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), aceptó que en la Ciudad de México había delincuencia, bandas dedicadas al narcomenudeo y a otros delitos, pero negó que hubiera cárteles de la droga. Sin embargo, la realidad ya no puede ocultarse. Ante la narcodinámica que enfrenta la Ciudad de México, el gobierno local reconoció: “Siempre ha habido presencia de estos cárteles en la
Ciudad de México, el problema es que no había violencia, el problema es que se les dejó crecer mucho y nos toca controlar eso y entrega una ciudad segura. Una cosa era que declarativamente se decía que no había cárteles, pero otra es que se les creyera”. Con cárteles o delincuencia común, lo cierto es que la violencia ha crecido en la Ciudad de México. Ahí está el caso, por ejemplo, del asesinato de Roberto Ronquillo, estudiante de la Universidad de “El Pedregal” y de Leonardo Avendaño, alumno de la Universidad Intercontinental, así como el ataque armado que dejó al menos dos personas muertas, dos lesionados y varios detenidos en calles de la colonia Héroes de Padierna, ocurridos en el perímetro de la alcaldía de Tlalpan. RADIOGRAFÍA CRIMINAL De acuerdo con informes oficiales tanto federales como de la Secretaría de Seguridad Pública Ciudadana de la Ciudad de México, los cárteles locales han aumentado, y también los delitos cometidos por sus operadores. Su portafolios de actividades incluyen el narcomenudeo. Se ofertan todas las drogas, desde marihuana, cocaína, crack, piedra, metanfetaminas, drogas sintéticas variadas hasta heroína, incluso de la negra, la más cara y la más adictiva. Todo esto ofrecen los cárteles que operan en la Ciudad de México –y que están enfrentados por el control territorial y el mercado de consumo– que son Tláhuac, Unión Tepito, Los Manzanares, Neza, Los Cambrones y Fuerza Anti-Unión. A estos se suman amplias redes criminales de los cárteles de Sinaloa y Cártel de Jalisco Nueva Generación, que encabeza Nemesio Oseguera y cuyos tentáculos se han extendido a lo largo y ancho de la capital del país gracias a la sociedad que establecieron con el cártel Unión Tepito, uno de los más violentos. De acuerdo con informes de la Secretaría de la Defensa Nacional, en la zona metropolitana –que incluye el Estado de México y sus municipios más grandes –Ecatepec y Cuautitlán Izcalli –operan cárteles michoacanos y guerrerenses. Se trata de Los Caballeros Templarios, La Familia Michoacana y células del cártel del Milenio, que está representado por la familia Valencia. Según una fuente consultada, que solicitó el anonimato por temor a represalias, en la periferia de la Ciudad de México y en el corazón de la capital del país también tienen gran operación los cárteles de Los Rojos –su territorio de asiento es Morelos– y Guerreros Unidos, cuya base de operaciones es el estado de Guerrero.
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¡ESTADO FALLIDO! Chetumal, Q. Roo, del 10 al 16 de octubre de 2022
José Sánchez López/ Corresponsalía Nacionales/ Grupo Sol Corporativo
Chiapas.- “Hoy en día, el estado de Chiapas es un Estado fallido; el gobierno de Rutilio Escandón Cadenas muestra incapacidad para controlar su territorio, sufre crisis política de seguridad y humanitaria, no es autoridad con mando ni operación, es sólo autoridad protocolaria o de imagen y el gobernante es parte del problema, por negligencia, omisión o complicidad”, dice un artículo que acompaña una entrevista con Alejandro Encinas Rodríguez, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación. En esta, el funcionario morenista reconoce que en Chiapas existe ya un gran tráfico de drogas, de armas, de personas, de extorsión a gente de bien, de trabajo. “Y escuchar las explicaciones de funcionarios chiapanecos sólo permite confirmar el profundo desconocimiento y distancia que tienen sobre los pueblos indígenas y la indolencia que exhiben con sus tareas”, señala el texto. El argumento esgrimido por el gobierno chiapaneco, ante su incapacidad de respuesta, es que debido a la penetración del crimen organizado, las comunidades están siendo abastecidas con armas largas y aventuran un sombrío vaticinio en el sentido de que algunas de esas disputas territoriales se terminen resolviendo con violencia, repitiéndose incluso masacres como la de Acteal. Redacción/ La Opinión de México Sinaloa.- En agosto del 2016, Eduardo Guerrero, custodio del exlíder del Cártel de Sinaloa, “El Chapo” Guzmán, entró a la celda del capo para mostrarle un video y soltarle la noticia de que dos de “Los Chapitos”, Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, habían sido levantados en Jalisco, tierra de Nemesio Oseguera, “El Mencho”. La reacción de “El Chapo” fue de enojo mientras veía a sus hijos arrodillados frente a un comando fuertemente armado. Uno de los secuestradores le propina una patada en las costillas al mayor de “Los Chapitos”; Guzmán Loera pregunta: ¿Dónde están los escoltas?, no hay respuesta. Tras siete meses de estar a la espera del juicio de su padre, “Los Chapitos” continuaron al frente de una de las células más poderosas del Cártel de Sinaloa, que cuenta con brazos armados como son “Los Salazar” y “Los Ninis”. Sin embargo, tras la caída de “El Chapo”, aunque aparentemente todos los integrantes del Cártel con-
Encinas Rodríguez reconoció la existencia de un enorme tráfico de estupefacientes y de personas por zonas de difícil acceso en la frontera con Guatemala, como la Selva Lacandona, por donde llegan cargamentos de droga y buen número de migrantes de países tan lejanos como Congo, Eritrea de África, Pakistán, que arriban al continente a través de Panamá y Brasil. Investigaciones de la SEGOB señalan que en la zona Altos sobresalen los conflictos y las disputas por el control territorial en los municipios de Pantelhó, Chenalhó, Aldama, Chalchihuitán, una parte de San Andrés Larraínzar, y San Cristóbal de Las Casas; en la Región Centro, Tuxtla Gutiérrez y Venustiano Carranza. El subsecretario también reconoció que la violencia generada por la guerra entre los cárteles de Sinaloa, Jalisco, El Golfo y Los Chamulas, está provocando en algunas regiones el desplazamiento forzado de más de 850 familias. La permanente lucha entre esos grupos del crimen organizado por el control de territorios ha dejado sin bienes y sin vivienda a más de 4 mil chiapanecos en la entidad, principalmente, en las comunidades La Trinitaria y Frontera Comalapa. A través de un documento difundido en medios locales, representantes de más de 20 localidades informaron: “Debido a la inseguridad en La Trinitaria y Frontera Comalapa, más de 850 familias, integradas por
*El gobierno de Rutilio Escandón Cadenas muestra incapacidad para controlar su territorio, sufre crisis política, de seguridad y humanitaria, no es autoridad con mando ni operación, es sólo autoridad protocolaria o de imagen *Los cárteles con mayor presencia en el estado son los de Sinaloa y el de Jalisco; con menor fuerza figura el del Golfo, luego Los Zetas y el más reciente, pero no de menor peligro, es el Cártel de los Chamulas, que emergió de entre las comunidades indígenas de Chiapas *El Cártel de Chamula tiene entre su diversificación de ilícitos la trata de niñas y jovencitas indígenas, que son enviadas desde Chiapas al centro del país, el tráfico de indocumentados, la apertura de antros y burdeles con la consabida explotación sexual y el pago de piso al menos cinco personas cada una, tuvieron que abandonar sus viviendas”. Al respecto, el obispo de la diócesis de San Cristóbal, Rodrigo Aguilar Martínez, dijo que los católicos y sa-
cerdotes que trabajan en esa región fronteriza con Guatemala le reportan la constante situación de riesgo y las amenazas de que les arrebaten lo poco que tienen. “Váyanse, llévense lo que
quieran y no los matamos”, les ordenan pero solamente los dejan sacar su ropa y algunos trastos y cuando quieren regresar por otras cosas ya no los dejan. Los delincuentes ya se apropiaron de sus casas y sus bienes. Esa región es escenario de constantes balaceras entre los grupos del crimen organizado que se disputan el territorio e, incluso, han llegado a enfrentarse también con elementos de las Fuerzas Federales con resultado de elementos caídos de uno y otro bando. Los cárteles con mayor presencia en el estado son los de Sinaloa y el de Jalisco; con menor fuerza figura el del Golfo, luego Los Zetas y el más reciente, pero no de menor peligro, es el Cártel de los Chamulas que emergió de entre las comunidades indígenas de Chiapas. Un inédito y único cártel del narcotráfico que se comunica en lengua tsotsil y que ya participan en todas la facetas del crimen organizado: tráfico de armas, drogas, trata de personas, extorsiones, pornografía infantil y prostitución, entre otros. “Es el primer cártel indígena en toda la República mexicana y es el nuevo fenómeno delictivo que muestra cómo penetró la delincuencia organizada en comunidades y organizaciones indígenas en el estado”, dijo Encinas Rodríguez. Algunos indígenas comenzaron como sirvientes de los grandes grupos y paulatinamente fueron escalado niveles, hasta que decidieron separarse, independizarse y adiestrar a sus
CUANDO “EL MAYO” ZAMBADA SALVÓ A “LOS CHAPITOS” *En la madrugada del 15 de agosto, un grupo armado de al menos 50 integrantes irrumpieron en el establecimiento donde festejaban el cumpleaños número 35 de Iván Guzmán. Uno de los sicarios lo pateó en las costillas, pero además de esto, el secuestro fue limpio, sin un solo disparo *Se unieron a las negociaciones “El Mayo” y sus jefes de plazas, de igual forma el fundador del Cártel de Guadalajara, Rafael Caro Quintero, “El Narco de Narcos”. Y más tarde, cuando las negociaciones entre capos se estancaron tuvo que intervenir también el gobierno mexicano *El CDS apostó todo a amenazar al líder del CJNG, “El Mencho”, advirtiéndole que si mataba a “Los Chapitos”, el cártel respondería con la ley de “ojo por ojo, diente por diente” y su hijo “El Menchito”, preso en ese entonces en el penal federal número 13 de Oaxaca, correría la misma suerte sideraban al “Mayo”, socio y amigo de “El Chapo” como el nuevo y único líder del Cártel de Sinaloa (CDS), el más poderoso del país, todo parece indicar que las tensiones entre los cabecillas de la organización militar aumentaban. “El Mayo” no confiaba en “Los Chapitos” precisamente por sus actitudes imprudentes que podían poner en riesgo al cártel y, esto quedó confirmado el 14 de agosto de 2016, cuando a pesar de las adverten-
cias de “El Mencho”, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), principal enemigo el CDS, de no acercarse a su territorio, “Los Chapitos” decidieron celebrar el cumpleaños de Iván Archivaldo, “El Rey de la Cocaína”, en La Leche, un lujoso restaurante ubicado en Puerto Vallarta, Jalisco. En la madrugada del 15 de agosto, un grupo armado de al menos 50 integrantes irrumpieron en el estableci-
miento donde festejaban el cumpleaños número 35 de Iván Guzmán junto con familiares y amigos, al menos 16 personas. Afuera sometieron rápidamente a los escoltas de los jóvenes capos e ingresaron alrededor de 15 sicarios que no necesitaron más de dos minutos para someter a los hijos de “El Chapo”. Efectivamente, tal y como lo vio Guzmán Loera en el video, uno de los sicarios pateó en las costillas al cumpleañero, pero además de esto,
el secuestro fue limpio, sin un solo disparo. Los secuestradores levantaron a varias personas esa noche: Iván y Alfredo Guzmán Salazar; Juan Daniel Calva Tapia; Josías Nahuali Rábago Borbolla; Víctor Galván Ureña. EL MENCHO Y EL CJNG, ENEMIGOS NÚMERO UNO DE "EL MAYO" Y DEL CDS A finales de los 90, Nemesio Oseguera, “El Mencho”, se desempeñó como agente de policía en Cabo Corrientes y Tomatlán, Jalisco. Pero poco tiempo después abandonó la policía para unirse al Cártel del Milenio, un grupo aliado del Cártel de Sinaloa, donde trabajó bajo las órdenes del capo Ignacio Coronel Villarreal y Nacho Coronel (tío de Emma Coronel), miembro del Cártel de Sinaloa que fungía como mano derecha de “El Chapo”. Sin embargo, hacia 2010 y tras la muerte de Nacho Coronel y la captura del líder del Cártel del Milenio, Óscar
congéneres; una vez agrupados cientos de indígenas de diferentes comunidades, principalmente de San Juan Chamula, nació el citado cártel. A la fecha la nueva organización criminal conocida como “El Cártel de San Juan Chamula”, cuenta incluso con varios “narcocorridos” en la plataforma de Youtube, con más de 200 mil reproducciones por video. “No nada más en Durango existen hombres chingones, en el estado de Chiapas también hay varios cabrones que usan botas y sombreros y traen sus buenos fogones, no le temen a la muerte y mucho menos al diablo, cuando se quieren matar, se matan como los perros”, reza una de las estrofas del narcocorrido. El municipio de Chamula, es actualmente el epicentro de la criminalidad en el estado de Chiapas, al tomar el control de su propio territorio y de la zona Altos el Cártel de San Juan Chamula, con la particularidad de que lo mismo negocia con el cártel de los Zetas que con el CJNG, que opera además en Guatemala y empieza a penetrar también en la República de El Salvador. Entre la diversificación de su cadena de ilícitos destaca la trata de niñas y jovencitas indígenas que son enviadas desde Chiapas al centro del país, el tráfico de indocumentados, la apertura de antros y burdeles con la consabida explotación sexual y el pago de piso. Leer reportaje completo en laopiniondemexico.mx
Orlando Nava Valencia, “El Lobo”, el Cártel del Milenio se dividió en dos facciones: “Los Torcidos” y “La Resistencia”. Estas dos divisiones iniciaron una batalla por el control del narcotráfico en Jalisco, y “Los Torcidos” derivaron en lo que actualmente es el CJNG, con “El Mencho” como su líder. Al principio, el Cártel de las cuatro letras tenía su zona de control en Jalisco y parte de Michoacán, pero con el paso del tiempo y sus intenciones de expansión iniciaron los roces con el Cártel de Sinaloa. El CJNG es hoy en día el segundo cártel más poderoso del país. Incluso, el Departamento de Justicia lo considera una de las cinco organizaciones criminales trasnacionales más peligrosas del mundo, responsable del tráfico de muchas toneladas de cocaína, metanfetamina y heroína con fentanilo a Estados Unidos, así como por la violencia y la pérdida significativa de vidas en México. “El Mencho” se ha distinguido por hacer alarde del poderío armamentista que posee su organización criminal.
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¡ESTADO FALLIDO! Del 10 al 16 de octubre de 2022
Ciudad de México
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Pedro Daniel Rodríguez Hernández \ Director General
QUINTANA ROO
¡PROSTITUCIÓN VIP!
*El gobierno de Rutilio Escandón Cadenas muestra incapacidad para controlar su territorio, sufre crisis política, de seguridad y humanitaria, no es autoridad con mando ni operación, es sólo autoridad protocolaria o de imagen
*En la Ciudad de México existen centenares de mujeres que siguen siendo víctimas de esclavitud y explotación sexual, situación que se realiza en, al menos, 44 prostíbulos situados en zonas exclusivas del sur de la capital del país *Una de las premisas de los explotadores es someter a la víctima de manera brutal y violenta para quebrantar su voluntad hasta convencerla de que esta es de su propiedad, así como amenazarla de muerte si quisiera rebelarse
*Los cárteles con mayor presencia en el estado son los de Sinaloa y el de Jalisco; con menor fuerza figura el del Golfo, luego Los Zetas y el más reciente, pero no de menor peligro, es el Cártel de los Chamulas, que emergió de entre las comunidades indígenas de Chiapas *El Cártel de Chamula tiene entre su diversificación de ilícitos la trata de niñas y jovencitas indígenas, que son enviadas desde Chiapas al centro del país, el tráfico de indocumentados, la apertura de antros y burdeles con la consabida explotación sexual y el pago de piso José Sánchez López/Corresponsalía Nacionales/Grupo Sol Corporativo
CAMPECHE
Chiapas.- “Hoy en día, el estado de Chiapas es un Estado fallido; el gobierno de Rutilio Escandón Cadenas muestra incapacidad para controlar su territorio, sufre crisis política de seguridad y humanitaria, no es autoridad con mando ni operación, es sólo autoridad protocolaria o de imagen y el gobernante es parte del problema, por negligencia, omisión o complicidad”, dice un artículo que acompaña una entrevista con Alejandro Encinas Rodríguez, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación. En esta, el funcionario morenista reconoce que en Chiapas existe ya un gran tráfico de drogas, de armas, de personas, de extorsión a gente de bien, de trabajo. “Y escuchar las explicaciones de funcionarios chiapanecos sólo permite confirmar el profundo desconocimiento y distancia que tienen sobre los pueblos indígenas y la indolencia que exhiben con sus tareas”, señala el texto. El argumento esgrimido por el gobierno chiapaneco, ante su incapacidad de respuesta, es que debido a la penetración del crimen organizado, las comunidades están siendo abastecidas con armas largas y aventuran un sombrío vaticinio en el sentido de que algunas de esas disputas territoriales se terminen resolviendo con violencia, repitiéndose incluso masacres como la de Acteal.
CONTRATACIÓN ABUSIVA
*Mientras los pobladores en municipios como Tenabo sufren por el desabasto de agua potable, el titular de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Campeche, Álvaro Miguel Gutiérrez Castro, aprovecha su poder para dejar un contrato millonario en manos de “ABC Constructora e Inmobiliaria S.A. DE C.V.”
CUANDO EL “MAYO” ZAMBADA SALVÓ A LOS CHAPITOS *En la madrugada del 15 de agosto, un grupo armado de al menos 50 integrantes irrumpieron en el establecimiento donde festejaban el cumpleaños número 35 de Iván Guzmán. Uno de los sicarios lo pateó en las costillas, pero además de esto, el secuestro fue limpio, sin un solo disparo *Se unieron a las negociaciones “El Mayo” y sus jefes de plazas, de igual forma el fundador del Cártel de Guadalajara, Rafael Caro Quintero, “El Narco de Narcos”. Y más tarde, cuando las negociaciones entre capos se estancaron tuvo que intervenir también el gobierno mexicano *El CDS apostó todo a amenazar al líder del CJNG, “El Mencho”, advirtiéndole que si mataba a “Los Chapitos”, el cártel respondería con la ley de “ojo por ojo, diente por diente” y su hijo “El Menchito”, preso en ese entonces en el penal federal número 13 de Oaxaca, correría la misma suerte
Redacción/La Opinión de México
Sinaloa.- En agosto del 2016, Eduardo Guerrero, custodio del exlíder del Cártel de Sinaloa, “El Chapo” Guzmán, entró a la celda del capo para mostrarle un video y soltarle la noticia de que dos de “Los Chapitos”, Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, habían sido levantados en Jalisco, tierra de Nemesio Oseguera, “El Mencho”. La reacción de “El Chapo” fue de enojo mientras veía a sus hijos arrodillados frente a un comando fuertemente armado. Uno de los secuestradores le propina una patada en las costillas al mayor de “Los Chapitos”; Guzmán Loera pregunta: ¿Dónde están los escoltas?, no hay respuesta.