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La Poesía es un diálogo íntimo: Beatriz Pérez
Beatriz Pérez Paredes
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Julio González/ ENFASIS Monterrey
Una poesía capaz de decir, de emocionar, pero que también haga al lector cuestionarse sus ideas, creencias, su lugar en el mundo y en la vida es lo que buscó construir la escritora Beatriz Pérez Pereda con su libro “Persona no humana”, con el cual ganó el Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín 2022, uno de los más importantes a nivel nacional.
Pérez Pereda, originaria de Villahermosa, Tabasco, construyó este poemario en el que reúne dos mundos que han sido constantes en su vida: la literatura y el derecho.
La historia o motivo central de su libro “Persona no humana”, es el caso de Sandra, una orangutana que vivía en Argentina en cautiverio; ambientalistas tomaron este caso y lo llevaron a los tribunales, la misión era sacar a Sandra de su prisión y trasladarla a un santuario con otros de su especie.
El jurado estuvo integrado por Carlos Vicente Castro, Claudia Hernández de Valle Arizpe y Esther M. García.
El jurado decidió premiar dicha obra por considerar que es una propuesta versátil que pone en perspectiva la idea de persona a partir de variados registros tonales y de género, de gran naturalidad expresiva.
El Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín 2022 es organizado por el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León y está dotado con una bolsa económica de 75 mil pesos y la publicación de la obra.
La poeta Beatriz Pérez Pereda concedió una entrevista para Conarte. Estas son sus respuestas.
¿Cuál es su sentir luego de saberse ganadora del Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín 2022?
Es un premio importante por varias razones, primero, porque lleva el nombre de una escritora con una obra y personalidad muy contundente dentro de la literatura mexicana, como lo es Carmen Alardín. Además, el espíritu o esencia que este premio ha venido tomando, es el de premiar obras de temáticas y estructuras distintas a lo tradicional, obras arriesgadas y de temas muy contemporáneos, prueba de esto son algunos autores premiados con esta distinción, como Yolanda Segura, Balam Rodrigo, Esther M. García, Sergio Pérez Torres.
¿Cómo surgió la idea de realizar el libro Persona no humana?
Yo estudié la Licenciatura en Derecho, luego también estudié literatura, pero lo primero que estudié fue Derecho. Sin embargo, mientras estudiaba la licenciatura nunca dejé de leer y escribir, entonces, a lo largo de toda mi vida, siempre he tenido la inquietud de “hacer algo” con el conocimiento que me dejó el hecho de ser abogada, es decir, juntar esos dos mundos que han sido constantes en mi vida: la literatura y el derecho. Y luego un día, vi la noticia de un juicio que estaba realizándose en Argentina, un juicio para declarar a una orangutana persona no humana, y en ese momento sentí que justo en esa noticia, en esa situación, había mucha poesía, me interesé muchísimo en el tema y empecé a imaginar el libro que ahora recibió el Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín.
¿Por qué el título “Persona no humana”?
“Persona no humana” es un concepto del derecho contemporáneo, hasta hace poco sólo existían personas físicas y personas morales; pero la realidad nos ha rebasado y el derecho ha avanzado, por fortuna, en algunos aspectos, y nuestra relación con los animales y la naturaleza, tiene ahora un peso, una connotación diferente, la crisis climática nos ha llevado a este momento. Es una paradoja muy absurda que justo para “liberar” a algunos animales de su cautiverio y otras formas de crueldad, tengan que enfrentar un juicio, ser declarados personas no humanas, con ello obtener los mínimos derechos de dignidad y protección de la vida, y ya luego poder ser llevados a santuarios para reintegrarlos a una vida más acorde a su naturaleza.
Es otro de los síntomas de nuestra sociedad, del capitalismo y en general de nuestra forma de organización, que sucedan historias así.
¿Qué temas toca en su libro?
La historia o motivo central es el caso de Sandra, una orangutana que vivía en Argentina en cautiverio, ambientalistas tomaron este caso y lo llevaron a los tribunales, la misión era sacar a Sandra de su prisión y trasladarla a un santuario con otros de su especie, en todo el mundo hay defensores de animales que están intentando hacer lo mismo, no solo con los grandes simios sino con otras especies animales en cautiverio. Esta es la historia central, pero al documentarme sobre la vida de Sandra, surgieron otras ideas, otras preocupaciones que intenté tratar en el libro, el especismo, el Antropoceno, las formas de explotación del capitalismo, las relaciones interespecies, pero también temas de género, porque tristemente la situación de muchas mujeres en el mundo es también así, carecen de los derechos mínimos como persona, son explotadas, silenciadas, asesinadas. Entonces, el libro sobre Sandra, la orangutana, terminó siendo también un libro sobre otras cosas.
¿Cómo fue le proceso en la construcción de este poemario?
En mis últimos dos libros, previo a la escritura, he tenido un proceso de documentación sobre el tema, sobre el que quiero escribir, en este caso, consulté muchas notas en línea, libros de derecho ambiental, ecológico o animal, leí sentencias sobre casos similares al de Sandra. También leí libros de ficción que tuvieran como protagonistas a animales, o que de alguna manera la historia estuviera relacionada con algún animal, vi muchos documentales. Fue una especie de saturación del tema para poder abordarlos desde diferentes puntos de vista, porque otra preocupación creativa que tenía al escribir este libro era poder trasladar algunos “formatos” del Derecho a la poesía, es decir, ¿un documento jurídico puede también ser un poema? A partir de estos supuestos fue que construí, escribí, “Persona no humana”.
¿Cómo describiría la poesía que encontramos en “Persona no humana”?
No sé, no podría decir cómo mis hipotéticos lectores recibirán este libro, qué juicio tendrán sobre él; con relación a mí y a mi obra anterior, creo este es un libro más arriesgado, tanto en el tema como en la forma. Persona no humana también es el segundo libro que escribo donde el sujeto poético no está tan cercano a mi historia personal, es decir, estoy dejando de hablar tanto de mí para hablar sobre los otros, para contar las historias de otros, en mi proceso La poesía ha representado siempre una especie de válvula de escape. A veces la vida se torna muy compleja, todos pasamos por diferentes procesos dolorosos, difíciles, a lo largo de nuestra vida; la poesía me ha servido para pasar mejor esos momentos, a través de la poesía he podido conocerme mejor, escucharme, poner sobre papel mi dolor o mi alegría.
como escritora esto me parece importante, es parte de reinventarse para seguir escribiendo poesía que intente comunicar algo, que intente decirle algo a los demás.
Los integrantes del jurado del Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín 2022 afirmaron sobre “Persona no humana”, que el libro es en sí mismo un cuestionamiento profundo del orden establecido, ¿qué nos puede comentar sobre esto?
Esa parte del dictamen fue muy especial para mí, porque en mis preocupaciones y ocupaciones creativas actuales está justo eso, escribir, apostar por una poesía que pueda emocionar, pero también cuestionar desde la inteligencia, desde la reflexión, pero sin ser moralizante ni regodearse en conceptos muy complejos, o tratados de manera complicada. Una poesía capaz de decir, de emocionar, pero que también haga al lector cuestionarse sus ideas, creencias, su lugar en el mundo y en la vida. Agradezco mucho la generosa lectura del jurado, que, dicho sea de paso, fue un jurado estupendo, estoy muy contenta y orgullosa por ese dictamen.
¿Cómo fue su acercamiento a la poesía y que la motivó a escribir poesía?
Soy del sur y la tradición poética aquí es muy fuerte, tenemos poetas cuya figura es casi eclipsante, solo en Tabasco están Pellicer, Gorostiza y Becerra, pero tenemos muy presente la influencia de Sabines, Castellanos, Garduño, Oliva, es decir, es cierto, el meridiano poético pasa por el sur del país. La poesía ha estado presente siempre en mi vida, además, fui una niña lectora, desde siempre me gustaron los libros, desde muy pequeña tuve mi credencial para préstamos de libros en la biblioteca de mi colonia. El tránsito de ser lectora a ser escritora no fue difícil, una cosa me llevó a la otra, y en la literatura encontré una vocación, una forma de ser en el mundo.
¿Por qué necesitamos la poesía?
Te puedo decir para qué necesito la poesía yo, en mi caso, la poesía ha representado siempre una especie de válvula de escape. A veces la vida se torna muy compleja, todos pasamos por diferentes procesos dolorosos, difíciles, a lo largo de nuestra vida; la poesía me ha servido para pasar mejor esos momentos, a través de la poesía he podido conocerme mejor, escucharme, poner sobre papel mi dolor o mi alegría, con eso he logrado hacer más llevaderos ciertos duelos, pérdidas, transiciones. La poesía es un diálogo íntimo que a su vez nos sirve para comunicarnos con otros, porque al leer poesía descubrimos que las palabras de otros también pueden ayudarnos a no sentirnos solos. Para eso me ha servido a mí la poesía.
¿Qué les diría a los jóvenes o a cualquier persona para motivarlos a leer poesía?
Que se acerquen sin pretensiones y sin prejuicios, que prueben sin remordimiento ni culpa, es decir, si toman un libro de poemas y no les gusta, que prueben con otros, no tienen que gustarnos los mismos libros a todos, sin embargo, creo que sí existe un libro de poemas necesario, vital, para cada uno de nosotros. La mejor manera de encontrarlo es leyendo, y en esa búsqueda estoy segura que encontraremos cosas interesantes.
¿Ha incursionado en la narrativa, escrito cuentos, novelas?
No, pero me gustaría, soy una gran lectora de narrativa, me gusta mucho leer cuento y novela, de hecho, justo ahora, la poesía que más me gusta leer es la que incorpora elementos tradicionalmente vinculados con la narrativa, me gusta que me cuenten historias. No es algo que ahora busque de manera intencionada, pero ojalá algún día pueda saltar a la escritura de otros géneros. E