Movimiento 727 by rafael parrado

Manifiesto 727 ÂŠ Copyright

Autor: freewind. Portada y maquetaci贸n: freewind. Creado en el a帽o 2013.

Nada ni nadie podrá impedir que seas autodidacta la esencia del arte es la libertad……….manifiesto 727. Muchos nos ven como advenedizos de la cultura, por no consagrar ningún culto o describir nuestra carta de natalidad artística. Por este motivo somos tratados de “subcultura”... como sustantivo peyorativo y alienante en un intento de relegarnos a puestos a los que ellos jamás tendrán la gloria de ocupar. Y entonces me pregunto si la cultura pertenece en exclusiva a ese capital bien pertrechado detrás de paredes de universidades corporativistas y gobiernos elitistas. Volvemos a lo mismo. A una cultura manejada y enajenada desde los centros de poder. Una cultura previamente establecida para ser utilizada por políticas interesadas en la uniformidad. Todo este universo cultural, no es más que el servilismo a esos poderes que detestan no controlar lo que pasa en el ámbito que sea. ¡Pues no!... No para el “Movimiento 727”… Nuestra cultura y nuestro movimiento, se desliga de las políticas burocratizadas y falsamente subvencionadas por centros de poder demagógicos, obedeciendo a la moda que convenientemente se estile, según las oportunidades de mercado y condicionadas por plusvalías. Vivir del arte es lícito si eres artista. Pero parece estar reservado para doctos academicistas y especuladores de ocasión. Al otro lado estamos los “lumpen del arte”, aquellos a los cuales está vetado todo acto de rebeldía, somos los “sin-techo” de la cultura porque no nos amparados en los paraguas burocráticos. Somos “undreground” porque nos cobijamos en la oscuridad del túnel para buscar nuestra propia luz. No tenemos miedo de clase porque no somos clase. Pero la clase, nos teme... No amparamos revoluciones para situarnos en cotas de poder. Detestamos el poder, venga de donde venga. Humanistas... creemos en el derecho de las personas a su libertad. Vitalistas... respetamos la rebelión de la locura. *Nos hemos emancipado de todo lo que huela a sumisión y poder. *No estamos por encima de todo, ni por debajo de nada. *No servimos a ningún tipo de negocio que no sea el nuestro. *Nosotros queremos dominar nuestro espacio y mandar en nuestro arte. *No creemos en la envidia como primera forma para desacreditar a lo diferente. *Reivindicamos el arte libre. Libre del condicionamiento académico y de la contaminación burócrata. Nuestro arte es como la guerra de guerrillas, sorprendente e incendiario.

727 - 1º Manifiesto A diestra, a siniestra... La guerra que se libra en Europa, es la de un gobierno criminal, cuyo único fín es el asesinato de toda estructura democráticamente establecida. Pasando a un gobierno de títeres de un “fascismo sonriente”. El mayor robo del siglo lo han hecho con nuestros votos. La democracia ha muerto, ahora sólo sirve al gran circo global. Desahuciados de nuestro propio sistema, miramos con ojos estupefactos las carcajadas diseñadas en el fondo de aquellos armarios. Luego… nos hablan de patria. Es vergonzoso que se hable de cultura y artistas, cuando se han convertido en pervertidas endogamias, paraísos particulares de hedonismo académico. Que miedo da cuando estos profesionales de la política crean algo llamado “Plan estratégico”... desprovisto de moral... El arte se vuelve una forma de embellecer el envoltorio, de la sociedad del eterno espectáculo. A los seres humanos solo les queda la esperanza de que, en un futuro, la realidad de sus hijos se torne del lado de la -justa justicia-. La mediocridad con que somos gobernados hace que las personas estén más despiertas. Revolucionar algo, es mover y zarandear ese algo e incluso cambiarlo de espacio, precipitarlo hasta remplazar su estado en un tiempo concreto. Sea en el ámbito que sea, esas realidades se cumplen. Y este es el motivo por el que, en la vida cotidiana de cada uno, nadie quiera la revolución. Nadie quiere una implosión en su vida. En la cultura sucede lo mismo, nadie quiere que otro tome el poder, que otro te robe la iniciativa. Es utilizada como propaganda desde la posición en que se encuentre. Siempre tendremos en cada puesto un fiero luchador por los intereses ajenos al Arte. El Arte es huérfano, no tiene quien vele por él. Por ser espontáneo, no necesita nada más que el canal por el que construir y fluir esa creatividad. Los canales podemos ser nosotros mismos., esa espontaneidad, es la que revela ese carácter que la desvincula del tedio de la vida ordinariamente ordenada.

La emancipación de los espacios conquistados por el arte, frente a una burguesía que los pasea con fines lucrativos. El arte ha de romper las cadenas de dependencia y exigir su emancipación de esta realidad espectacular. Pactada por esos grandes monopolios del saber, que forma las nuevas corrientes mediáticas y limitan el espacio de creación a meros modelos y a la madre del cordero. En el reverso de la moneda se encuentra el: ácrata, el hostil, el autodidacta, el creador en esencia y en potencia. Emancipado del conductismo productivo. Enajenado a simple vagabundo del universo artístico. Los movimientos vanguardistas demostraron que el arte está más allá de esos universos burgueses, políticos, de educación y comercio. Pero se morían de hambre entre las carcajadas de los eruditos. El arte como nuevo forma de producción decorativa y estilismo burgués, al servicio de la economía productiva y la sociedad piramidal. Llevar el arte a una simple imagen corporativa conlleva su degradación por la servidumbre a una sociedad capitalista, como simple reto del comercio de las varietés, como fórmula para el éxito personal y conjuro para los nuevos productos que el comercio despliega en la generalidad hedonista. Por este motivo hay que reclamar una nueva “vanguardia” que corresponda a nuestra modernidad y a nuestro siglo, a nuestros nuevos muertos de hambre. No los toquéis! Son nuestros muertos!. El arte debe ser la denuncia de nuestra contemporaneidad enferma -de un hedonismo clínico, de un fetichismo alienante- envenenada de un sistema técnico que ha limitado nuestras vidas a simples experimentos sociales de estadística sociológica. El arte debe revelar la impotencia social hacia esa violencia ejercida por los estados convertidos en mercenarios del corporativismo económico y social, que aliena todos los espacios de poder del ciudadano social. Emancipando el poder económico por encima de cualquier regulación legislativa y llevando a la sociedad a una pobreza cultural y dependiente de sistemas conductistas de consumo. El arte debe gritar…¡¡¡basta!!! . En nombre de todo lo que significa un nuevo paradigma de construcción, de modelos diferentes que hagan superar la tragedia de una utopía muerta en sí misma. Debe descifrar estos nuevos estadios distópicos. Debe estimular la figura del “antihéroe” como nuevo paradigma de lo que ha de venir y luchar contra la irracionalidad de un sistema encarnado en el Saturno mítico.

727 - 2º Manifiesto El despertar Prometeo nos ha despertado para realizar nuestra única y vital esencia, nos ha animado a ser libres en un mundo esclavizado. En un mundo donde a voluntad de ir más allá ha dejado de ser una forma artística de burlar a los Dioses. Los Dioses imponen sus leyes y restringe la voluntad a los seres humanos mediante la ocultación de los misterios de la vida, que hacen al hombre independizarse de su condición esclava. Necesitamos antihéroes que roben a los Dioses la panacea de su poder. Los héroes se han muerto de vulgaridad, efímeros y predecibles. Amamos a nuestros héroes ya fallecidos, habitantes del mudo del Hades. Aquellos que nos sirvieron para caminar por el mismo mundo que hoy nos ofende. Prometeo se sublevo al poder, nada más y nada menos… que al poder de los Dioses en un acto de rebeldía humana. La oscuridad era la esencia del poder y el nos trajo la luz, tanto el calor vital como el poder de la sabiduría… dio luz a nuestro conocimiento. El antihéroe es el símbolo que representa a una humanidad sana y no subyugada a sus propias vanidades. Nuestra humanidad esta sucumbiendo a sus propias debilidades y a su propio objetivo. Advertir de esto… ya no es novedoso... pero el miedo sigue ligando a millones de seres al ostracismo… mientras otros se benefician del silencio que mantiene su impunidad. Hay que arrebatarles el fuego del poder que les hemos otorgado... traspasando los límites de las diferencias impuestas. El mundo acabará tal y como lo conocemos: unos más ligados a la debacle y otros queriéndose independizar de esta pretendida esclavitud. El sueño de nuestra realidad se antoja inquietante, el dominio de las fuerzas negativas... de los fascismos sonrientes, están a las puertas de Atenas y Roma… Prometeo seremos todos… y todos debemos despertar de nuestra horrible pesadez de nuestro conformismo digital… de nuestro clasismo idealista y social…. Las fuerzas negras están a las puertas y necesitamos el fuego que nos guíe... ¡¡YA!!

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727 - 3º Manifiesto. La antorcha de Prometeo… De acuerdo a la desobediencia de nuestro primer ser, emancipándonos del poder de los “Dioses” y de acuerdo con nuestros postulados, exigimos: *La destrucción de nuestros panópticos sociales, como espacios de reclusión para desheredados del consumo. *Su conversión a espacios para la reflexión, donde la conexión entre la realidad y la voluntad, confluyan en un cauce hacía la humanización. *El decrecimiento como forma racional, frente a la barbarie del consumo. *La emancipación del tiempo, como fórmula para una calidad de vida realmente humana. *Utilización de la tecnología exclusivamente a favor de la humanidad y la conservación de la naturaleza. Desde la visión creativa del "humanismo social", se diluye la frontera entre la normalidad racional y la libertad consecuente, basada en el conocimiento y la cultura y no basar sus cimientos en el terreno de la política. La nueva organización social basará su fórmula en la conquista del un espacio social desahuciado de su misma función, y alienando bajo esas forma proyectadas en el miedo y la desesperación. La misión plástica que reivindicamos de dicha acción, será para que todos los medios de expresión, sean destinados a la desprogramación de ese subconsciente individual y colectivo, alienado por la irracionalidad neurótica de la actual sociedad de consumo. Como buenos insumisos del poder de “los dioses”, ahora, encarnados en estados y políticas del espectáculo, Nos desvinculamos de todo propósito conductista de nuestro intelecto y abogamos por un espacio liberado de aranceles y aduanas sistémicas. No rendimos culto, ni a la masa, ni a sectarismo. Propagamos como virus mortal nuestro amor a la “humanidad”, como vinculo con el cosmos, como luz que se expande en esa oscuridad inmaterial, creando la realidad. Nuestros signos crean principios y ensoñaciones, crean destinos más allá de nuestro presente, alumbrando el camino a nuevas generaciones, despojándonos de toda vanidad y protagonismo, diluyéndonos como simples portadores del conocimiento a través de la emancipación del “espacio y el tiempo”.

Seremos peligrosos desde el primer momento que nuestras acciones vayan dirigidas a despertar ese otro lado de la realidad. Sólo entonces tomaremos conciencia de nuestro tiempo y espacio, ahora “*distópico”, verdadero origen de nuestro caos humano, personal y social. A través de nuestra independencia, sostenemos que nuestro verdadero oficio es el trabajo en nosotros mismos, superando nuestra ceguera racional y experiencia en el conocimiento de nuestro propio “ser”. Alimentando a éste de esa virtud que nos emancipa de la “esclavitud moderna” en toda su diversidad. * Distópico: aquel donde el individuo ha dejado de ser tal para convertirse en un mero espectador de una castración a través del miedo pavor a una autoridad anónima y la desesperación que esta dependencia provoca.

727 - 4º Manifiesto. Los herederos Somos hijos de Prometeo, ese gran desobediente. Hemos dejado de ser amantes de los dioses (del estado). Somos los hijos del s. XXI, herederos de las vanguardias del siglo anterior, y nuestro furor se despliega contra esa multitud callada, preñada de su propia cobardía que solo pide ser hedonista y fría… adoptados por la varieté, abducidos por el marketing, hacia el escapismo de su mundo superficial. Somos herederos del sueño analítico del inconsciente social que sobrevive en las cloacas de los hediondos panópticos trans-humanos. Somos el progreso y la antorcha de la nueva realidad, las almas despiertas, desbocadas e insultantes… somos otro nuevo destino que sucumbirá entre sus brazos aburridos, somos Prometeos, desobedientes y crueles con la mediocridad. La libertad nos pertenece, la exigimos, porque es nuestra vida y nuestra autonomía como individuos. Hemos despertado y ya no somos perros del amo. Nos preguntamos: ¿Quiénes son ellos, para cualificar y cuantificar todo? Su realidad no es la nuestra, somos universos paralelos. No concebimos un mundo sumiso, un estercolero hediondo de espectáculo televisado. Una sociedad aburguesada, acomplejada, mediocre y soez; en su propia realidad. Enajenada. Unos tiranos disfrazados de humanistas, que violentan el mundo con su perversidad económica. No somos constructores de burbujas, de satinados y refinados conocimientos de cocina, somos desobedientes, beodos y alucinados; nuestro mundo no habita en su mediocridad infame. No queremos ser cómplices de su crimen. -Venga de donde venga-. Tampoco queremos ser esos adormecidos “estilistas del estilo”, que se regocijan en su insufrible sentimentalismo, han perdido la pieza de un puzzle que no encaja con ellos. Ni romanceros, ni secretarios, ni funcionarios con vigor artístico; reuma para el arte creador y emancipador… ni jubilado a tiempo parcial, ni beodos historiadores de resentidas vivencias.

“Conócete a ti mismo” y así conocerás el mundo que te rodea, que te ahoga, que te exprime; y con una sonrisa sarcástica te bendice como gran pagador de impuestos, para los dioses. Desde nuestro visón, mil años más profunda que la de los mediocres, vemos como el mundo se perpetúa bajo un engaño generacional... sin más remisión que cortar sus nobles y corruptas cabezas de “Cancerberos”. El arte nos sirve para despertar ese espíritu que ha dejado de vivir su realidad. Sin fronteras ni mecenas que perviertan bajo su dinero cruel la realidad de la creación, que no pertenece a nada ni a nadie sino a ella misma. Subjetivamente es la frontera que nos pertenece, es la realidad y la independencia de ese otro modo mezquino de ver el mundo. El arte ya no es una cápsula de hedonismos y figürismo dentro de los panteones del arte especulativo. El arte es la protesta, es el enfado contra esta realidad acomplejada y somnolienta en sus propios límites, en sus propias instituciones del dinero fácil; no es la obra… es el producto contable lo que interesa. Una mezquina vida, Probablemente no signifiquemos nada para un mundo moribundo que vive su realidad, sin existir. Han muerto en su propio espectáculo, en su propia ceguera que sólo les lleva a la hoguera de su vanidad. El fuego de Prometeo también sirve para quemar esos destinos agónicos de autómatas miedosos, que se esconden tras su mezquindad y ven el mundo con su pequeño ojo mediocre y envidioso… También nuestro amado antihéroe Prometeo, nació para ello. © Copyright

27 - 5º Manifiesto El tiempo Prometeo en busca del tiempo perdido. *El tiempo es esa estación donde el individuo como objeto, crea la frontera entre éste y el espacio. *El espacio se define como aquel lugar que ocupa el tiempo. *El tiempo y el espacio es la afirmación empírica de nuestra realidad material. *La conciencia, es tiempo y espacio en un mismo límite. *El tiempo y el espacio no existen son atemporales, solo la materia cuantifica y cualifica estas medidas ficticias. *La realidad es un marco inconmensurable, ya que su subdivisión fractal nos lleva a un abismo de tiempo y espacio. *El ser humano quiere conquistar el tiempo, ese espacio material que crea por sí mismo, quiere adelantarse a su realidad. *La normalización del tiempo, no es más que la racionalización material del espacio conquistado. *Tiempo de trabajo y tiempo de consumo. *La exclusividad del tiempo como objeto medible del espacio de producción. La producción como objeto cuantificable del tiempo y entre estos dos el ser humano encarcelado en la ilusión del tiempo de vida y el espacio de libertad. *Con el domino del tiempo el ser humano se siente excluido de su propia realidad. Al alienar su tiempo con la matriz de la producción, este desaparece en beneficio del objeto producido el ser humano es estructurado en tiempos. *El hecho de haber secuestrado el tiempo, nos deja en una posición deficitaria hacia nosotros mismos, hacia el espacio de individualidad, a la muerte espiritual en beneficio de la materia. *El hecho de que el ser humano haya cedido su tiempo a la materia, ha producido en éste, el desconocimiento de su propio espacio, y en consecuencia, de su propia integración dentro del universo. *El ser humano encarnado en materia, toma conciencia de ella misma. *El poder sobre la materia, le proporcionará cierto control sobre el tiempo y el espacio, ya que esta primera está ajustada a estos dos parámetros. *La materia como símbolo del progreso es el fin último como dominio de estos dos parámetros inmateriales… el tiempo de producción, ahora racionalizado crea el producto o la materia… La materia como producto del tiempo en el objeto que se define así mismo en la ocupación del espacio. *El espacio es la medida determinada, cuya escala es definida por el objeto que lo ocupa. © Copyright

727 - 6º Manifiesto Del poder Tal vez el miedo actual, construido por el hombre, sea un fracaso absoluto e irremediablemente acabado. Vivir en esta sociedad significa, con suerte, morir de aburrimiento. A los dotados de mente para vivir sólo nos queda una solución, eliminar el sistema monetario e instaurar la automatización total El mundo construido según la visión rampante del hombre está en decadencia, sus símbolos de poder no quedan en más que acciones violentas, experimentando así su incompetencia ante la vida. La sociedad se ha convertido en un muerto viviente. (V. Solana) El único fin se convierte en el último espectáculo, el ofrecer con un bello trabajo de artesanía a una aturdida y aburrida audiencia que sufre con indolencia los mismos ritos estériles, repetidos una y otra vez, por esas sociedades creadas por y para la violencia. El género masculino ha retardado toda realidad real, toda la esencia humana, la ha transcrito en acciones de poder, violencia y competencia contra todo aquello que demuestre más carácter y empatía por la vida misma. El sometimiento espiritual, la figura mesiánica, en realidad la figura sádica que se construye alrededor del miedo y sentimiento de inferioridad. Así es tratada la sociedad, como una indefensa e ignórate mujer a la que hay que querer pero en realidad dice “sodomizar”. Las guerras se convierten en esa deficiencia emocional de”sacar la pistola”. Su miedo a la castración, a su complejo de inferioridad, le hace transcender por medio de la violencia a escala masiva. Su miedo a la compasión, a la empatía y al amor, antepone su necesidad de afirmar su virilidad. Los códigos sociales son una clase de lenguaje no explícito, en el que muchas de las realidades esenciales son obviadas para la protección del egoísmo machista, del odio y el desprecio que el hombre muestra hacia los demás en su fuero interno. El género masculino ha justificado el dinero y el trabajo, manteniendo así al ser humano en una dependencia desigual frente a los recursos.

Una sociedad donde el trabajo automatizado diera la liberación del dinero, el ser humano podría obtener lo mejor de la vida. Y esa necesidad de continua sumisión, con la que el género masculino ha pretendido crear la vida, se ha convertido en todo lo contrario (muertos vivientes). El género humano necesita disponer de la mayor parte de su tiempo. La tecnificación de la sociedad exige que a los seres humanos no se nos utilice como maquinas que realizan trabajos para otros, no creativos y embrutecedores. Debemos emancipar el tiempo en pro de una sociedad más cívica. El dinero como patrón de poder y manipulación humana por parte del género masculino. Con el dinero sustituye toda carencia emocional y real. Nuestro sistema “zombificado” no es más que el producto de esa manipulación forzosa de los recursos.

727 - 7º Manifiesto …………Futuro Para poder acceder a la libertad, debemos liberarnos hasta del “hambre” que pudiera surgir en estos estados de independencia. El arte debe deducirse como una profunda protesta ante los estereotipos del nuevo capitalismo”trans”, que en su último sacrificio engullirá a sus propios hijos como un Saturno, en una orgía de seducción de consumo “sin, fin”. Debemos denunciar pues el crimen organizado como un plan y una estrategia en contra de los ciudadanos por parte de estos fríos y corruptos gobiernos, que son la bestias negras de esos magnates del esclavismo, que pululan a sus anchas por el globo, acompañados por ejércitos de mercenarios “Black Wáter” adueñándose de todos los recursos y perpetuando la extrema pobreza como nueva arma del s. XXI. Las guerras se libraran ante los propios ciudadanos, ellos y sus hijos son los nuevos enemigos del capitalismo mutante. El milagro tecnológico, es la ilusión vital del fascismo sonriente, esa es su virtud, cual mito de un nuevo Olimpo, una realidad de ilusión tecnológica a través de estos soportes. Costumbres beatas mezcladas con estas imágenes trastocadas una y otra vez por esas herramientas del diseño de la realidad, creando la ilusión vital. Se nos hace creer que el mundo está a nuestro alcance, una mentira más, sólo es la ilusión de ese pretendido mundo apto para comerciantes del mega- comercio de las “especias vitales”. La realidad de nuestro mundo se asemeja a una fría distopía donde la injusticia forma parte normalizada de la realidad, y la ecuanimidad es atacada y tratada como atentado a estas formas extremas de realidad. La muerte de la civilización y las nuevas guerras del hambre a modo de espectáculo… una nueva y sofisticada representación del fascismo sonriente. El mundo convertido en una orgía espectacular, el consumo su nuevo mito; un Titán capaz de engullir aquello último que queda del hombre: su forma transcendental. Un nuevo concepto de humanidad se adelanta. Es la meta-humanidad, el “súperhombre”, transformando en todas sus facetas naturales, desligado de sí mismo por un principio y fin, “felicidad y consumo”. El consumo como herramienta conceptual de formas sostenibles y estandarizadas, que se puedan modificar y predecir fácilmente.

La felicidad como esa libertad donde los hombres libres, sin moral ni conciencia , estarán dispuestos a ser manejados por la herramienta para encajar dentro de esa maquinaria social que es lo que se espera de “ella”. Estos serán guiados sin recurrir a la fuerza, sin líderes, sin finalidad alguna.

Anexo *Los gobernantes están para servir a los ciudadanos, y no al revés. *La fuerza el miedo y la exclusión como armas de intimidación social deben estar penadas legislativamente. *El abuso de poder debe ser penalizado. *La historia moderna de la humanidad ha pertenecido a: Coronas, Dictaduras, *Logias, partidos políticos, monopolios y ahora al mercado. *El poder reside en la humanidad. *El hombre ha perdido su espacio dentro del espacio y su pertenencia a sí mismo. *Los poderes que están por encima del hombre han dejado de cumplir su papel para ser simples ejecutores de la desigualdad y el abuso de poder.