Marcelito Número 63. Alas y Raíces a los Niños

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No.63 29 de abril de 2017 Año 5

PEIDA - UAZ

Alas y raíces a los niños


2 Con la finalidad de impulsar a la población infantil a crear historias y expresarlas mediante la escritura, La Jornada Zacatecas inició en 2013, con motivo del Día del Niño, su Concurso de Cuento Corto, mediante el cual ha mostrado el interés que los niños tienen por dar a conocer hasta dónde puede llegar su imaginación. En esta ocasión, realizó la quinta edición de este certamen y, ahora, presenta a los lectores del suplemento infantil Marcelito, el chavito preguntón los cuentos ganadores.

DICTAMEN El jurado calificador, integrado por escritores, destacó, en general, respecto al quinto Concurso de Cuento Corto, realizado por La Jornada Zacatecas con motivo del Día del Niño, la sensibilidad y la agudeza de los participantes para abordar temas actuales y para desbordar su imaginación y desarrollar personajes fantásticos. Asimismo, resaltó el tema de la amistad, o de aceptar a los otros, a los diferentes, y la inclusión de animales en las tramas y el tema de lo económico. Dicho eso, determinó como cuentos ganadores: PRIMER LUGAR: La princesa que no se podía tocar, de Elisa De Wit Santoyo

La princesa que no se podía tocar

Hace mucho tiempo nació una princesa embrujada, que si la tocaban directamente con la piel se convertiría en piedra. Los reyes y toda la servidumbre del reino debían usar guantes para atender a la princesa. Sus padres le permitían todo y le daban permiso de hacer lo que quisiera, solamente tenía prohibido dejar a la gente que la tocara. Cuando creció, conoció un príncipe fuera del castillo que paseaba por el bosque; platicaron, pasearon y se rieron mucho. Se vi-

eron otras veces y siempre era lo mismo: pasear, platicar y reír. Se volvieron muy buenos amigos hasta que se enamoraron, y en uno de sus paseos el príncipe se dejó llevar por el amor y la tomó del brazo al mismo tiempo que le dio un beso, y la princesa le correspondió mientras se iba convirtiendo poco a poco en una estatua de mármol. El príncipe, asustado, llamó al Rey, y éste fue por la estatua al bosque, exilió al príncipe y se encerró en su castillo. Los reyes lloraron muchos días porque no sabían cómo romper el hechizo y,

finalmente, comprendieron que su hija fue feliz hasta el último momento de su vida, ya que en la estatua estaba sonriendo. El Rey colocó a su hija en el patio real y le llenó con flores. Todos pasaban y veían la estatua, pero aunque muchos querían tocar aquel mármol tan blanco, brillante y liso, el rey lo tenía prohibido y puso un letrero junto al monumento que decía: ¡NO TOCAR! Fin

Autora: Elisa De Wit Santoyo / Edad: 8 años / Institución: APAC / Guadalupe, Zacatecas

Pasando fronteras Hace mucho tiempo, en un estado de México, estaba una señora llamada Bernardina, pero le decían Nina. Un día, ella decidió emigrar a Estados Unidos. Ella viajó hasta Ciudad Juárez, a donde llegó acompañada de su primo Javier. Caminaron y caminaron por muchos pueblos pequeños que llegaron a una casa horrible y antigua; en ella se encontraron a una persona que les indicaría el camino para llegar, al cual le decían Coyote. Salieron de ahí y empezaron a caminar nuevamente, hasta que llegaron a una vivienda donde sólo había vagos. Después caminaron junto con otras 15 personas; llegaron a un gran muro en el que había unos faroles grandes y demasiados policías.

Cuando había oscurecido, para que los policías no los detuvieran, ellos escarbaron y se enterraron. Mientras estaban ahí, un bebé lloraba, no guardaba silencio y su madre, por estrés a que los atraparan, quiso asesinarlo, pero Javier lo evitó tranquilizando al bebé. Luego continuaron escarbando hasta que llegaron al otro lado del muro. Empezaron a ir de rodillas para que no los atraparan. Se les abría el pantalón, se raspaban y sangraban mucho de sus rodillas. Una señora muy viejita les dijo que se quedaría ahí porque no podía más, pero Javier la tomó y la subió en sus hombros; se turnaba con un señor, pues era muy pesada y no la podían cargar tanto tiempo.

Luego llegaron a un lugar donde supuestamente alguien los recogería, pero nunca llegó esa persona, por lo que se quedaron en el frío por muchas horas, todos juntos abrazados para entrar en calor. Decidieron caminar para llegar a un hotel. El señor del hotel no los dejó pasar y dijo que si no se marchaban llamaría a las autoridades, por lo que prosiguieron su camino. Después de caminar muchas horas más, subieron en el camarote de un tráiler, donde los taparon con mantas y los llevaron hasta una ciudad donde se encontraron con una amiga de Javier, la cual les dio asilo por 15 días, ya que estaban muy heridos por las espinas, las ampollas por caminar y raspones de cuando se tiraban al piso. Después de eso, ellos pudieron caminar e ir a buscar una nueva vida.

SEGUNDO LUGAR: Pasando fronteras, de Janna Karelia Vacio Garay

Autora: Janna Karelia Vacio Garay / Edad: 10 años / Escuela Primaria Adolfo López Mateos / Zacatecas, Zacatecas

TERCER LUGAR: La niña que vivía en un calcetín, de Ana Paola Guerrero Escobedo

La niña que vivía en un calcetín

CUARTO LUGAR: Los dos hombres, de Alejandro Ibarra Cossío QUINTO LUGAR: Hazel y los duendecillos, de Arely Pérez González

ACLARACIÓN

En algunos casos, el texto original tuvo algunas faltas de ortografía (comprensible, tomando en cuenta el rango de edad de los participantes), por lo que para su publicación, se decidió hacer corrección de estilo, sin que esto afecte el contenido gramático y, en especial, la imaginación y la creatividad plasmadas en el cuento.

AVISO Todos los cuentos participantes en este quinto Concurso de Cuento Corto serán publicados hoy en la página web de La Jornada Zacatecas (www.ljz.mx) y en las redes sociales de Facebook (www.facebook.com/ LaJornadaZacatecas) y Twitter (@lajornadazac) del mismo medio, mientras que, en cuanto a los premios sorpresa, se les avisará vía telefónica a los ganadores.

Había una niña que era muy pero muy muy pequeña, era del tamaño de un ratón. Ella no tenía hogar, así que buscaba alguno en cada casa que veía. Se metía a las casas e inmediatamente llamaban su atención los agujeros en los muros; eran las ratoneras. Ella corría para ver si podía resguardarse ahí, pero rápidamente los ratones que ahí vivían se enojaban muchísimo al verla como una intrusa y la corrían fuera de ahí. En otra ocasión, entró a casa de una señora de muchos años con la cabeza blanca, pero ella inmediatamente al verla se disgustó muchísimo. Con todo lo que había pasado, ella no perdía la esperanza de que encontraría una casa.

Una tarde, una niña casi tan pequeña como ella le ofreció vivir en su casa de muñecas. Ella aceptó emocionada; pensó que por fin tendría una casa de verdad. Al principio, estuvo feliz, ya que la niña que le ofreció un hogar amablemente también le ofrecía pan de comer, pero con el paso de los días se dio cuenta de que no podía estar ahí por mucho tiempo, ya que el pan diario que la niña le daba y que al principio disfrutaba terminó por aburrirle al grado de no querer ni siquiera sentir su olor. Aun así, ella nunca perdió la esperanza y el ánimo de encontrar un verdadero hogar, un hogar que fuera completamente suyo, un hogar que fuera acogedor y que ella pudiera decorar como quisiera,

además en el que pudiera buscar su propio alimento. Por mucho tiempo, buscó en muchos lugares, sin descanso. Una tarde, al caminar cerca de un basurero, encontró por casualidad un calcetín viejo. Era un calcetín pequeño, pero era muy acogedor, calientito y de un color muy bonito. Ella pensó que el calcetín era un hogar perfecto, pero que estaba en un lugar que no era adecuado, así que decidió llevarlo cerca de un río; era un lugar rodeado por flores y tierra fresca con frutas y plantas que ella conoció durante su búsqueda. La niña lo llevó a ese lugar, donde pudo vivir feliz por tener un lugar donde vivir con tranquilidad y seguridad, además de poder buscar por sí misma su comida y agua.

Autora: Ana Paola Guerrero Escobedo / Edad: 8 años / CEI Roberto Cabral del Hoyo / Guadalupe, Zacatecas

Los dos hombres

Había una vez, en un mismo pueblo, dos personas: una que era rica y avariciosa, y la otra, pobre y humilde. Eran dos personas muy diferentes en todos los sentidos. En ese lugar, se rumoraba una leyenda muy antigua que decía: “En medio del pueblo hay una casa vieja y abandonada. Al entrar, se ve hasta el fondo un tesoro, pero antes de llegar a él, tienes que pasar por tres difíciles pruebas que sólo alguien bueno lo podría conseguir”.

Los hombres escucharon el antiguo relato y fueron a probar suerte. Cuando llegaron, platicaron y se pusieron de acuerdo para tomar esta leyenda como un reto. El primer desafío fue el de armar un rompecabezas, en el cual la persona rica resultó victoriosa, ya que, en sus ratos libres, le gustaba practicar con este pasatiempo. El segundo desafío consistía en atrapar un colibrí, en donde ganó el hombre pobre, ya que él se dedicaba a atrapar y vender aves para poder mantener a su familia,

y el tercero fue una carrera en el que sucedió lo siguiente: Los dos hombres llegaron al mismo tiempo, pero uno sólo sería quien podía llevarse el tesoro. Al ver tanta riqueza, decidieron dividir el premio, pero en ese momento apareció una gran serpiente que resolvería quién iba a ser el ganador. Después de unos segundos, dijo: “el ganador es el hombre pobre”, pero como este señor era muy bueno, decidió compartir, dándole la mitad del tesoro a su compañero, y fueron felices por el resto de sus vidas.

Autor: Alejandro Ibarra Cossío / Edad: 10 años / Escuela Primaria Francisco I. Madero / Tejones, Valparaíso, Zacatecas

Hazel y los duendecillos En un pequeño pueblo vivía una niña llamada Hazel, ella vivía con su familia muy feliz, sin ningún problema; todo era bonito en el pequeño pueblo, ya que todas las personas practicaban un valor muy importante, El Respeto. Hazel tenía una familia enorme, pero había una persona en especial, su hermano Eidan, de 3 años. Un día, Hazel asistió a la escuela un poco tarde; cuando llegó a su clase, se dio cuenta de que la maestra y sus compañeros estaban platicando de un tema que le pareció importante, “Los duendecillos”, unas criaturas malas y horribles, según los compañeros; a la mayoría de sus compañeros le daban temor. Siguió poniendo atención a la plática y se enteró de que éstos iban en la noche por los niños pequeños, se los llevaban a sus cuevas y de ahí ya nadie sabía que ocurría con estos niños. A Hazel le dio miedo que cuando dieron el toque de salida en su escuela de inmediato se fue para su casa, ni siquiera esperó para despedirse de sus amigos como acostumbraba hacerlo. Llegó a su casa, buscando a su hermano, pero él ya no estaba. Corrió con su madre y le dijo: -¿Dónde está Eidan?-, a lo cual la madre le respondió preocupada: -No lo sé,

no lo he visto en un buen rato-. Hazel, de inmediato, salió de su casa recorriendo cada calle, buscándolo y gritando ¡EIDAN,EIDAN! La mayoría de los habitantes le respondían muy enojados y fastidiados por sus gritos: -Ya vete, él no está aquí-. De tantos insultos, Hazel se sintió mal porque sabía que ellos no eran así >¿Dónde había quedado el respeto de los habitantes?< Salió corriendo sin rumbo, y de un momento a otro, ya estaba en el bosque, sola. Hazel, de tanto correr, se sentó en una piedra junto a un arroyo y se puso a pensar lo de los habitantes, pero se dio cuenta que ella tenía la culpa por gritar desesperada buscando a Eidan, pero, por otra parte, estaba bien hacerlo, ya que así le daría oportunidad de encontrarlo. Comenzó a llorar y sintió como si alguien le hubiese abrazado el pie; miró hacia abajo y vio a un duendecillo; dio un pequeño salto del susto, pero el duendecillo le dijo: –Mantén la calma, no te haré daño. Hazel tuvo curiosidad y lo comenzó a tocar haciéndole preguntas tontas; hubo un momento en el que Hazel le preguntó: -¿Se llevan a los niños pequeños? El duendecillo no respondió, la tomó del brazo y la llevó a una cueva que quedaba en la cima de una pequeña montaña; al inicio, ésta se veía fea, pero entraron y Hazel se sorprendió,

pues había cristales que hacían que la luz pareciera un arcoíris; más al fondo, había mucho niños jugando con duendecillos por todos lados y ahí estaba él. -¡EIDAN!- gritó Hazel. Eidan corrió dándole un caluroso abrazo. Hazel comenzó a llorar de la alegría diciéndole al duendecillo: –Gracias-. Éste sólo sonrió, pero Hazel tenía una duda y no esperó para preguntarle: -¿Para qué los traen aquí?- El duendecillo le respondió: –A veces nosotros necesitamos a alguien que nos quiera como a ustedes-. Hazel le preguntó: -¿Pero por qué a ellos? Y el duendecillo le dijo: –Porque ellos son los únicos que nos dan cariño y felicidad, los únicos que no se asustan al vernos, los únicos que saben apreciarnos-. Hazel puso una sonrisa de oreja a oreja, dándole un fuerte abrazo al duendecillo y agradeciéndole por mostrarle ese maravilloso lugar y dejar que se llevara a Eidan. Hazel se despidió de todos los duendecillos y los niños de ese lugar, y partió camino a casa. Cuando llego a ésta, su madre lloraba de felicidad porque Hazel lo había encontrado. Al día siguiente, les contó a sus amigos lo sucedido, pero éstos no le creyeron porque todo esto había sido un sueño, el mejor sueño que había tenido.

Autora: Arely Pérez González / Edad: 12 años / Internado No. 9 J. Trinidad García de la Cadena, CEBAARE / Sauceda de la Borda, Vetagrande, Zacatecas

Carmen Lira Saade / Dir. General Raymundo Cárdenas Vargas / Dir. La Jornada Zacatecas

Coordinación del suplemento: Magda Collazo Fuentes / Marcelito “El niño preguntón” / Martín Letechipia Alvarado / José Antonio Sandoval Jasso /

Consejo Editorial: Jael Alvarado Jáquez / Arte, lecturas y otras aventuras Verónica Santoyo García / Buzón azul Mariana Saldivar Frausto / Nehua y la salud Saúl Antonio Villalpando Dávila / Cine


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NO. 63

¿Cómo cocinar tus propios átomos? ¿Tienes curiosidad por saber cómo se hacen los átomos. Pues ¡has venido al lugar indicado! Los átomos se formaron con el Bing Bang y las estrellas gigantes y nosotros intentaremos cocinar uno.

Ilustración: Jonatan Aarón Piña García

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ANA KASSANDRA ZAMARRÓN DÍAZ

CESAR K. MORALES GUANDINANGO CAMILA MIRNADA ARREDONDO FLORES

FERNANDO

FRIDA SOFÍA DOMÍNGUEZ

SANTIAGO DE JESÚS GARCÍA MEDELLÍN

JIMENA DÍAZ JOSEFINA FLORES GUERRERO


NO. 63

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Como parte del proyecto regional de “Alas y Raíces”, desarrollamos un taller de estimulación musical que buscaba, mediante la técnica de percusión corporal, explorar todas las posibilidades sonoras del cuerpo humano. El trabajo se desarrolló en tres comunidades: Francisco E. García (Los Rancheros), San Ignacio y Tacoaleche. Este proyecto de la Coordinación Nacional de Desarrollo Cultural Infantil “Alas y Raíces”, denominado “El arte y la resiliencia como herramientas para el trabajo con niñas, niños y adolescentes jornaleros agrícolas y migrantes”, se desarrolló en colaboración con el Instituto Zacatecano de Cultura “Ramón López

Velarde” y la Escuela Popular de Arte “La Luz” del PEIDA de la UAZ. Coordinó el proyecto Cristina Silva Jiménez, asistida por Alejandro Gámez González. Además, estuvieron invitadas al taller las instructoras Marissa Valenciana y Selene Silva, quienes impartieron actividades complementarias de artes plásticas y artes escénicas, respectivamente. El taller permitió atender a casi 60 niños de las tres comunidades. Como parte de las actividades de clausura, el pasado 7 de abril en la Casa Grande de Tacoaleche, se realizó una muestra del trabajo realizado, que incluyó exposición de esculturas y pinturas y un recital de percusión corporal en ensamble, conformado por 45 niños.

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LA FANTASÍA Funciones de la fantasía en la obra de Melanie Klein por Eréndira Casarrubias 1.- ANTECEDENTES Melanie Klein ha realizado numerosos descubrimientos que le han permitido elaborar una teoría de la personalidad que difiere de las teorías freudianas, sobre todo en lo referente a la cronología del desarrollo psicológico del niño, y a las características de su mundo interno. Aunque inició sus estudios en las teorías de Freud, se separó en lo que respecta a la importancia que da a las tempranas relaciones objetales y a la riqueza de la fantasía inconsciente subyacente de múltiples formas en las mismas (Grinberg, 1974). El concepto de “fantasía” es un punto clave dentro de la teoría Kleiniana, y está implícito en los restantes conceptos. En este trabajo sólo me ocuparé de la fantasía, dejando a un lado conceptos clave también de mucha importancia. 2.- CONCEPTO DE FANTASÍA La fantasía es considerada como “expresión de los instintos”. Aunque también constituye una defensa ante la ausencia del objeto gratificante. El concepto de fantasía fue ampliado por Klein, resaltando su importancia en el funcionamiento del psiquismo. Las concepciones Kleininas acerca de la fantasía implican que ésta se encuentra siempre presente y activa en todo individuo y que ello no es índice de enfermedad mental ni falta de sentido de realidad. Cuando Freud hablaba de fantasías inconscientes se refería a aquellas que surgen después del segundo o tercer año de vida. En cambio Klein considera que dichas fantasías son la expresión de los instintos y por consiguiente existen, como éstos, desde el principio de la vida. Por definición los instintos son buscadores de objetos. En el apartado psíquico se experiencia al instinto como vinculado a la fantasía de un objeto adecuado a él. De este modo, para cada impulso hay una fantasía correspondiente. Así, por ejemplo, al deseo de comer le corresponde la fantasía de algo comestible que satisfará ese deseo: el pecho. Lo que Freud describe como “realización alucinatoria de deseos” se basa, según Klein, en que una fantasía inconsciente acompaña y expresa el impulso instintivo (Segal, H., 1972). 3.- FUNCIONES DE LA FANTASÍA Freud consideraba a la fantasía como un mecanismo defensivo para escapar de la realidad externa. Klein considera que la fantasía tiene diversas funciones, que son las siguientes: 3.1.- DEFENSA CONTRA LA REALIDAD EXTERNA Como el objetivo de la fantasía es satisfacer impulsos instintivos prescindiendo de la reali-

dad externa, se puede considerar que la gratificación proveniente de la fantasía es una defensa contra la realidad externa de la privación. 3.2.- DEFENSA CONTRA LA REALIDAD INTERNA La fantasía es algo más que una defensa contra la realidad externa. También es una defensa contra la realidad interna. Algunas fantasías pueden utilizarse para no experimentar emociones internas desagradables, como la ira. Cuando el sujeto hace una fantasía de realización-de-deseos, no está evitando solamente la frustración y el reconocimiento de una realidad externa displacentera. También está defendiéndose contra la realidad de su propia hambre y de su propia ira, lo cual es mucho más importante. Así, podemos ver la importancia que Klein otorga a la realidad interna como fuente de diversas emociones, y el papel preponderante señalado por la fantasía como defensa contra la propia realidad interna. 3.3.- DEFENSA CONTRA OTRAS FANTASÍAS Es también factible que unas fantasías se utilicen como defensa contra otras fantasías. Así, por ejemplo, las fantasías maniacas tienen como finalidad principal el impedir que aparezcan las fantasías depresivas subyacentes. Una

típica fantasía maniaca es la de que el Yo contiene un objeto ideal devorado cuyo “resplandor” cae sobre el yo. Esta es una defensa contra la fantasía subyacente de contener un objeto irreparablemente destruido y vengativo cuya “sombra” cae sobre el yo. 3.4.- EXPRESIÓN DE LOS INSTINTOS La fantasía no sólo es una defensa. También es una función del Yo. En este sentido Klein considera que la fantasía es la “expresión mental de los instintos”, y existe desde el nacimiento, sin construir un aspecto patológico ni un indicio de apartamiento de la realidad. Más bien se le considera como un aspecto normal de la personalidad. 4.- FANTASÍA Y MECANISMOS DE DEFENSA Al considerar la utilización de la fantasía como defensa, surge la duda de cuál es su relación con los mecanismos de defensa. Segal (1974) señala que la diferencia reside entre el proceso real y su representación mental. Por ejemplo, señala, se puede decir que en un momento dado una persona usa como mecanismo de defensa los procesos de proyección e introyección. Pero la persona misma experimentaría dichos procesos en función de fantasías. Y en esas fantasías se expresa lo que ella siente que está incorporando dentro de sí o poniendo fuera de

sí, la forma en que lo hace y los resultados que atribuye a estas acciones. Es decir, que lo que un observador puede describir como mecanismo, la persona misma lo siente y describe como una fantasía detallada. 5.- FANTASÍA Y ESTRUCTURA MENTAL Al considerar la relación entre la fantasía y los mecanismos de introyección, y proyección, se aclara la relación existente entre fantasía inconsciente y estructura mental. 5.1.- INTROYECCIÓN DE OBJETOS: PARCIALES Y TOTALES Freud describió al yo como un precipitado de catexias de objeto abandonadas. Este precipitado está compuesto por objetos introyectados: El primero de dichos objetos descritos por Freud mismo es el Yo. Existen fantasías de objetos introyectados en el yo desde la temprana infancia. Cuanto más temprana es la introyección, más fantásticos son los objetos introyectados, y más distorsionados están por lo que se ha proyectado en ellos. A medida que prosigue el desarrollo y se acrecienta el sentido de la realidad, los objetos internos se aproximan más a las personas reales del mundo exterior.


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NO. 63

MURAL “MIGRACIÓN”

ZARA HERRERA LANDA

TALLER DE BURBUJAS Durante el Festival Cultural Zacatecas 2017, se destinó la Plazuela 450 como un espacio dedicado a los niños; ahí, se ejecutó el proyecto “Acercamiento a las artes a través del fenómeno migratorio”, de la mano de la Asociación Alas y Raíces; el promotor es Francisco Juárez. Durante la semana que se impartieron, los talleres permitieron que los niños se introdujeran en un mundo de colores sin límites y pudieron conocer diferentes expresiones del arte: pintura, grabado, origami, marmolado en arcilla, decoración de morrales y creación de tarjetas mágicas; además, se les dio la oportunidad de conocer el Museo de Arte Abstracto Manuel Felguérez con visitas guiadas.

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TALLER DE GRABADO El taller de pintura,impartido por Rito Alejandro Espinoza y Bernardet del Río, atendióa cerca de 250 niños al día; aprendieron jugando y representaron el fenómeno migratorio a partir de distintas técnicas: pintura acrílica, burbugrafía, transferencia de color con papel china y gis pastel.El objetivo principal del taller de pintura es estimular la creatividad e impulsar al niño a perder el miedo por crear y hacer. La importancia de este proyecto es que brindó la oportunidad a muchos niños de conocer cosas ajenas a su imaginación y creatividad; pero no sólo a los pequeños ,ya que los padres de familia disfrutaron del taller de tallado de jabón.

TALLER DE BURBUJAS

DECORACIÓN DE MORRALITOS


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¡Hola, amigos! En este número les compartimos la historia del doctor Pascual Santoyo, Pediatra y Neurólogo en el hospital San Agustín. La historia que narra está inspirada en el cuadro que hizo, a sus 8 años, Juan Antonio Rodríguez Zavala de la comunidad de San Jerónimo en los talleres de la EPA. Esta pintura fue adquirida por el doctor durante el evento “Movimiento por un Arte Sano” en octubre de 2012.

Pintura: sin título Autor: Juan Antonio Rodríguez Zavala Edad: 8 años Recuerdo que entró temeroso al consultorio, mirando hacia los diferentes espacios y caminando con cautela, como cuidando que saliera un pequeño monstruo o un enorme fantasma. Interrogando a sus padres supe que se llama Manuel, que tiene 8 años y que tenía un par de días con una tos que no dejaba descansar a nadie. Al empezar a revisar a Manuel me preguntó si no le haría daño, si le picaría con alguna aguja, si le sacaría sangre de sus venas. Le explique como pude que los médicos no somos esos monstruos que a veces los niños nos piensan, ni tenemos colmillos, ni hay cuervos volando alrededor nuestro en el consultorio. Al regresarlo a su asiento, se quedó más tranquilo cuando supo que no habría inyecciones en su manejo y acepto de buen grado tomar el

jarabe que recomendé en la receta. Me prometió entonces que encerraría la imagen que tenía de los médicos en una pintura para que ahí se quedara y nunca pudiera salir. Un par de semana después regreso Manuel, ya aliviado, al consultorio. Me entregó la imagen del Médico Malvado para que yo cuidara que nunca escapara, que nunca dañara a ningún niño. Desde entonces vigilo que ahí se mantenga y cada vez que lo miro me recuerdo a mí mismo que nunca debo, de ninguna manera, asustar a mis pequeños pacientes.

Tu también puedes mandarnos las historias que te cuente un dibujo o una imagen, enviálos a buzon_azul@gmail.com trar mucho en el tema; sin embargo, es de vital importancia dentro del cine: el guión. El guión es un elemento importante en el cine, tanto que en el caso de los Óscar se suelen premiar dos categorías del guión: el original y el adaptado. Pero ¿en qué consiste exactamente el guión? Como podrán imaginar, se refiere a una guía, escrita, en la que se desarrolla la historia; además debe presentar elementos que ayuden a crear el ambiente en que se desarrolla cada una de las ideas. A su vez, contiene los diálogos que los personajes desarrollarán y plantea la forma en que se desarrolla la historia a filmar. De esta manera tenemos que los guionistas son escritores que presentan historias pensadas para plasmarse en la pantalla, de ahí que se distingan entre guiones originales, que son los que se crean específicamente para un filme, y los guiones adaptados, que son novelas, obras de teatro o versiones actualizadas de alguna otra película que antes Hola a todas y todos los que una vez más nos se había realizad. Una vez escritos, los guiones leen en este espacio dedicado al séptimo arte, pasan por el director y se acomodan como guiel enorme y genial mundo de la fantasía y la ones técnicos, ya con todos los señalamientos imaginación de la cinematografía y sus curicorrespondientes para la filmación. osidades. Al igual que en el número anterior, Los guionistas suelen ser esos grandes olvime gustaría platicarles sobre un elemento que dados, ya que muchas veces suelen quedar de en algunos momentos he mencionado sin en-

lado ante los actores o directores, quienes se llevan las miradas y ovaciones finales. En algunos casos, los guionistas son los directores, actores o productores, de ahí que algunos ganadores de premiaciones al respecto nos suenan familiares, como Quentin Tarantino, Woody Allen, Ben Affleck, Oliver Stone, los hermanos Coen o Stanley Kubrick. Lo que queda claro es que se debe tener mucha imaginación y creatividad para dicho trabajo, y como se suele decir dentro del mundo del cine “se puede hacer una mala película teniendo un buen guión, pero nunca se hará una buena película con un mal guión”. A la otra que vean una peli, recuerden que todo lo que aparece ahí surgió primero como la idea de algún guionista que después se vio reflejada en un guión y al final en la pantalla. Ahora sí, a ver más cine y menos tele. ¡Hasta la próxima!


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