Artículo Equo. Agosto

Page 1

Artículo Agosto 2020

El secreto del optimismo La mayoría de personas tienden a ser optimistas y esa mentalidad positiva es clave para llevar una vida feliz, saludable y exitosa. Normalmente, cuando una persona se muestra muy optimista respecto al futuro, se le tilda de soñadora o idealista, pues sus pensamientos están ligados a su imaginación y no a la dura realidad. Pero pocos saben que en la vida una buena dosis de optimismo es necesaria como impulso para lograr las metas que cada cual se propone. Esta es la teoría que sostiene Tali Sharot, autora de un nuevo libro titulado El sesgo del optimismo, en el que se revelan las causas biológicas por las que las personas suelen pensar positivamente con miras al futuro, y cómo esto influye de forma determinante en sus vidas. Con frecuencia, salen a la luz múltiples estudios científicos que buscan determinar por qué la gente siente felicidad. La respuesta, de ante-

mano, parece ser obvia: gozar de buena salud, tener armonía con su pareja, un trabajo estable con buen salario y poder satisfacer los gustos particulares. Sin embargo, dichas investigaciones han revelado que para ser felices y tener buena calidad de vida, la clave está en ser optimistas. Creer firmemente en la posibilidad de que el futuro va a ser mucho mejor que el pasado y el presente se conoce como el sesgo del optimismo. Este fue el concepto en el que se basó Sharot, una de las neurocientíficas más reconocidas de la actualidad, para investigar sobre esta tendencia y sus orígenes. Formada en la Universidad de Nueva York y miembro actual de la University College de Londres, en el Reino Unido, Sharot estudió durante los últimos seis años las razones por las cuales


mientos del pasado, sino que los pensamientos y proyecciones sobre el futuro son fundamentales para su desarrollo.

la gente tiende a ser optimista. Para ello, realizó varios experimentos con un grupo de voluntarios a quienes les pidió que imaginaran diversos escenarios y situaciones cotidianas que les podían suceder en el futuro, unas positivas y otras negativas, como por ejemplo obtener buenos resultados en el trabajo o quedar atascados por el tráfico en la ciudad. Para su sorpresa, la mayoría eligió las opciones positivas o trató de verles el lado bueno a los eventos negativos. “Encontramos que las personas tienden a ser más detallistas cuando se trata de proyectar eventos positivos, por muy banales que sean. El 50 por ciento de los pensamientos de los encuestados fueron positivos, mientras que el 30 fueron negativos”. Aunque muchos de los posibles eventos no sucedieron tal y como los imaginaron, los estudios sirvieron para confirmar que la mayoría de personas son proclives a ser optimistas, y que ese pensamiento positivo se origina en el cerebro. Así lo evidenció al hacer una revisión de la actividad cerebral de las personas de la muestra y observar que ciertas zonas de dicho órgano se activan más cuando hay pensamientos positivos. “El lóbulo central está conectado con dos regiones del cerebro que están relacionadas con la motivación y las emociones. Dichas estructuras generan optimismo y predicciones positivas”. Adicionalmente, se logró confirmar que el cerebro no se forma por los aconteci-

Al descubrir el origen biológico del sesgo del optimismo, Sharot llegó a la conclusión de que aquellos a los que no les funcionan normalmente esas regiones del cerebro tienden a ser pesimistas y depresivos. De hecho, un estudio del cual había sido coautora demostró que un 80 por ciento de la gente tiende a ser optimista, sin importar el género, la edad, la raza o el país de procedencia. Por eso, en condiciones normales, la gente proyecta imágenes y pensamientos positivos sobre el futuro. “Para progresar en la vida, la gente necesita tener la capacidad de imaginar realidades alternas mejores que las que vive. Esa motivación ayuda a las personas a lograr sus metas”. Aunque guardar esperanzas sobre un futuro mejor es vivir en un mundo de ilusión, el optimismo puede traer muchos beneficios en el presente. Varios estudios han demostrado que las personas optimistas se estresan menos y gozan de mejor salud que aquellas que son pesimistas. De acuerdo con un trabajo realizado por economistas de la Universidad de Duke, en el Reino Unido, los optimistas por lo general son personas trabajadoras, ganan más dinero que los demás e incluso son mejores ahorradores. Los pesimistas, en cambio, son personas que ven cualquier suceso positivo como algo casual, temporal y que ocurre por suerte y nada más. Además, son proclives a sufrir de depresión. Si bien es cierto que son más realistas que los optimistas, y que son mucho más acertados al hacer predicciones, su calidad de vida no es la mejor. Es evidente que ser optimista es una buena apuesta para cualquiera, pues reúne todo lo necesario para vivir en plenitud. A pesar de que es irracional, y en exceso puede llegar a ser perjudicial, los experimentos y estudios realizados Artículo EQUO Agosto 2020


por Sharot y otros investigadores demuestran que está ligado directamente a la evolución de la especie humana. “Sin optimismo, nuestros ancestros jamás se hubieran aventurado a formar tribus y la gente viviría todavía en cavernas”, dijo Sharot. La evidencia científica de que en el cerebro está la clave para que la gente sea optimista puede ser una pieza fundamental en el rompecabezas de esta tendencia. Sin embargo, aún quedan algunas dudas por resolver, como el hecho de que sea una facultad innata o que se aprenda en el transcurso de la vida. Por ejemplo, estudios recientes han revelado que existe un gen de la felicidad, y no todas las per-

sonas corren con la suerte de poseerlo. “Es tentador pensar que es una facultad innata. Sin embargo, la clave está en el aprendizaje, porque las personas no nacen siendo conscientes de que son optimistas o pesimistas”, señaló Sharot. Lo que sí queda claro es que el estudio del optimismo, y la prueba de su importancia en la vida de las personas, está abriendo una nueva puerta para conocer más a fondo el funcionamiento de la conciencia humana. Después de todo, como dice Calderón de la Barca, la vida es sueño.

Artículo EQUO Agosto 2020


Test de optimismo El optimismo es una cualidad que te permitirá ver las cosas de la manera más favorable posible. No queremos decir con ello, que las personas optimistas vivan en la felicidad y en la alegría eterna, simplemente tienen la capacidad de adaptarse y afrontar las situaciones de la mejor manera posible. Asumen los fracasos con otro talante, de tal manera que no se desequilibran con la misma intensidad con que lo haría una persona pesimista. El optimista siempre luchará por resolver las situaciones y generar soluciones. Por contra, el pesimista se conformará con aquello que le suceda no generando cambios o nuevas expectativas e ilusiones en su ambiente. A continuación te animamos a contestar un test para que sepas si realmente eres una persona optimista o más bien tus respuestas encajan con un perfil de pesimista.

Deberás sumar los puntos de tus respuestas bajo el siguiente criterio:

3. Llevas tiempo buscando trabajo y finalmente te llaman para una entrevista, pero no eres la persona seleccionada. ¿Qué piensas?

Por cada respuesta a, suma 2 puntos.

a. Ese puesto no era para mí y sé que algo mejor vendrá b. El puesto era superior para mi formación y sé que debo seguir formándome. c. ¡Qué mala suerte! No doy nunca el perfil, no valgo.

Por cada respuesta b, suma 1 punto. Por cada respuesta c, suma 0 puntos. 1. Te levantas de la cama sintiéndote extraño/a, un poco cabizbajo/a pero no encuentras motivo que lo justifique. Comienzas tu jornada y en el trabajo alguien te pregunta que te ocurre. ¿Qué responderías? a. Estoy raro/a, pero seguro que pronto se me pasa. b. Estoy en la lucha de cada día c. Estoy fatal 2. ¿Cómo tiendes a ver el líquido de un vaso? a. Medio vaso lleno b. Un vaso con la mitad medio lleno y otra medio vacía c. Medio vaso vacío

4. Has quedado con algún amigo o con tu pareja y parece retrasarse. ¿Qué piensas? a. Seguro que llega en breve, no me voy a desesperar b. Te pones nervioso/a pero finalmente consigues tranquilizarte c. Piensas que algo malo ha sucedido 5. Vas al bingo y pierdes la primera ronda, ¿qué piensas? a. Voy a seguir jugando, quizás más adelante tenga suerte b. Vaya, debo concentrarme más a ver si sale mejor c. Que mala suerte tengo siempre, no juego más Artículo EQUO Agosto 2020


6. Te encuentras un problema en la vida que parece tener difícil solución. ¿Qué haces?

9. ¿Piensas que es posible conseguir las metas que te propones en la vida?

a. Intentas buscar soluciones pues sabes que probablemente existan b. Intentas solucionarlo, pero terminas rindiéndote tras pocos intentos c. No intentas buscar soluciones porque de primeras crees que es imposible resolver el conflicto

a. Por supuesto, lo importante es luchar y hacer todo lo posible por conseguirlas b. En algunas ocasiones sí, en otras no c. Es muy difícil conseguir aquello que te propones

7. ¿Crees que cuando una puerta se cierra otras se abren? a. Por supuesto que sí b. A veces sí a veces no c. Nunca

10. ¿Prefieres no generar muchas expectativas sobre las cosas para así no decepcionarte? a. Claro que no, debo tenerlas para luchar por ellas b. Creo que no, solo se debe generar algunas c. No tienes que tener expectativas sobre nada, si no sufrirás muchas desilusiones.

8. Si no tienes éxito en alguna actividad o experiencia importante para ti, ¿cómo reaccionas? a. Vuelvo a intentarlo una y otra vez b. Lo intentas una vez más c. Abandonas

RESULTADOS Más de 20 puntos

Eres bastante optimista y valoras con objetividad las oportunidades que la vida te brinda. Eres capaz de transformar lo negativo y ver lo positivo de la situación adversa. Destacas por tu lucha para conseguir tus objetivos y no te sueles rendir hasta llegar a tu meta. Nada te limita, siempre lo intentas, y a pesar de que las circunstancias no sean las más favorables posibles, tu intentas cambiarlas.

Entre 5 y 14 puntos

Te mantienes en una situación donde en ocasiones te dejas llevar por tu optimismo, pero en otras circunstancias que percibes como más difíciles dudas sobre si arriesgar o no. Controlas tu parte emocional y si no tienes el día adecuado, puedes caer en el pesimismo, aunque no suele ser lo frecuente. Por norma general eres optimista, pero es cierto que ante determinadas situaciones muy negativas no siempre encuentras los recursos para transformarlas al lado más favorable.

Menos de 5 puntos

Tu tendencia es a ser pesimista. No generas expectativas ni tienes ilusión porque los acontecimientos de tu vida puedan tener un carácter positivo. Te limitas continuamente, pues predices erróneamente que todo irá mal, haciéndote perder oportunidades en la vida. Vives en un mundo negativo y temes decepcionarte con la vida, cuando en realidad no le das una sola oportunidad. Artículo EQUO Agosto 2020


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.