Queda hecho el dep6sito que prevee la ley llJ ., Š 1997 Talleres Graficos Condor Sarmiento 138,Junin, endoza
"Dedicado a lamemoria lej(lJUl Sll
de mi Padref quien desde alguna
y ethea di-mensi6n seguirci por sieJupre proyectando
ejcmplo."
" A mi esposa Patricia, quien me alent6 desde el principia, cU<H'ldo este trabajo era solo parte de una vaga idea. A mis hijos: Manuel (7) y Florencia (5), can qUlenes cohdianamente aprendo que siempre hay un lugar en el mundo donde construir alga. A "Chichi" Capdevila de Palmieri, mi mmna, todo un fel1l:nnenode mujer, y a mis hennanas Alejandra y Viky, porque siempre estan. Al eSCfitor Alberto Labrador, y a su esposa "Coca", LjllltTH='S
son Inis sue gras, y nunca retacearon en regalarnos parte
de su espacio y de su tiempo. A Gisella Cansio, quien con mucha paciencia corrigi6 los errores en que incurri. Al amigo y escritor Eduardo Gregorio, quien despues de haher lefdo el primer borrador me convenci6 de que valla la pena.
A Carlos BrizueIa, otro gran amigo, quien me facilit6 su P.e. y soport6 con hidalguia cada envestida de mi ignorancia al respecto. A Rizziero Catapano, con quien juntos intentamos mejorar el estilo dentro de las Iimitaciones que ofrece este trabajo. Pero fundamentahnente
por ser un amigo, mas alIa del tiempo.
Al Colegio Secundario N째 4-134, con quien compartimos durante 1994 una experiencia educativa inoIvidabie. Al e.E.N.s.
3-418 y a todos sus trabajadores
de Ia
educaci6n, que me brindaron el ambito propicio y Ia solidaridad para el desarrollo personal. Finalmente a Inis aiumnos, quienes supieron contenerme en muchos momentos de angustia."
Por su colaboraci6n,
ya sea desde
sus empresas
0
sim.plemente en sus actitudes solidarias, hicieron posible esta edici6n: Julio Odar, Raul "Pato" Bernabe y Adrian Mignini. Carlos Crotta,
Eduardo
Laurenti,
Aldo
Perez,
Osvaldo
"Valdi"
Rodriguez y Pedro Carricondo. A Ruben Tejeda, y Edgardo Spuri, por sus gestiones en fclVorde este libro. Tmnbien a todos aquellos, que desde
el anonimato,
alentaron y creyeron que esta propuesta podria configurar un hecho culturahnente valido.
En nuestro pais el Estado Nacional recien se consolido en 1880. Sin embargo, como todo producto de las acciones humanas, ~
el proceso fue mucho mas sinuoso que esta simple afinnaci6n. Estado y Sociedad confonnaron una Argentina compleja en la que los avances fortalecieron los valores de la delnocracia, la igualdad y el progreso, mientras que los retrocesos dejaron mano~asque aun duran en el tejido social. Con los avances logramos la ampliaci6n de la ciudadania politica, la escuela publica y el hospital
publico, partidos
puliticos y elecciones, movilidad y seguridad social.
Con los
retrclIo°t:'SOS y desencuentros se sucedieron las crisis politicas, los golpes de estado, las proscripciones a los partidos politicos, las persecuciones alas represi6n.
organizaciones obreras, la intolerancia y 1ÂŁ1
Los actores sociales y politicos fueron definiendo
reglas t.acitas de juego, muchas
de las cuales se han do
modificando en estos catorce¡ mos de ejercicio de 10s derechos deU"lOCl'Clticos. Pero el aprendizaje social y el aprendizaje politico no siempre marcharon juntos y eso se expreso en
Iff
labilidad de
n llestm cultura democnitica, en el fnigil equilibrio de poderes y It)S
l'onsiguientes avances de un Poder Ejecutivo fuerte sobre el
resto de 1asinstifuciones dell"lOCraticas.
En estos tiempos, en los que el credo de un economicismo ('\busivo conlleva el sacrificio y la exclusion de muchos para el beneficio y la participacion de pocos. Hoy, cuando las fuerzas neoconcervadoras abogan pOl'un Estado desertor y minimo cuyo correlato
inevitable
es
una
democracia
elitista,
cuando
propugnan una vision puramente instrumental de la politica despojandola
de valores
como la justicia, la igualdad,
solidcHidad.
Hoy cuando una "eficiencia" mal entendida
la y
pxdtlyente produce una progresiva y destructiva fragmentacion ell
nllestra sociedad, es imprescindible recuperar a la politica
La historia de la humanidad demuestra que el espiritu de
In denlocracia y los ideales de la tolerancia y la libertad han sido siempre superiores a toda dictadura. mas tarde
0
Tambien demuestra que
mas telnprano los progralnas neoconservadores son
programas sin futuro, porque ni siquiera pueden cumplir con los fines para los que se fonnularon.
No solo son insolidarios,
llwquitativos y amorales. Son, para medirlos con el rasero de sus \'pigonos, ll1eficientes pOl' naturaleza.
Porque no se puede
gobernar, no se puede crecer, no se puede vivir en sociedad si esa sociedad no existe como comunidad pluralista, igualitaria en sus posibilidades, participativa, con el mercado como mecanismo prim<'lJ'iode distribuci6n de bienes y servicios perotambien
con
Ul1
Estado que priorice el interes general pOl' enCllua de las
pcuticularidades.
Clportesque estimulen la discusi6n de ideas, de interpretaciones sobre nuestro pasado, nuestro futuro y nuestro presente.
Y es
desd e esta perspectiva que, mas alIa de Las caincidencias a diferencias con lo expuesta en este libra, el mismo constituye un nuevo aporte peHd
la discusi6n y la revalorizaci6n de la politica como una
adividad
~I JI
humana y social.
reprimida,
0
defenestrada,
l'onstituir,
desde
una
Una actividad que aun negada, resurge siempre con fuerza para
perspectiva
etica, una
voluntad
de
intenrenci6n que haga posible todo 10 necesario para una vida
"... EI ahora es el momento en que el presente se esta convirtiendo en elfutllYO. No podemos limita11los a estlldiar el pasado. Sabemos que omrri6 en el pasado, pero sOlo pod,'emos comprobar los resultados, companindolos con el preseute y el fllbtro proximo ..."
El objetivo de la presente obra, lejos de querer demostrar algunas verdades relativas, es intentar que el lector desnude aquellos postulados, que a juicio personal, nos ubican ante la presencia, much as veces, de mentiras evidentes.
Todo ello
partiendo desde el consenso que implica el sIstema democnitico. La importancia
de
la politica como ciencia se ha
desvalorizado a traves del tiempo, 10 que dio lugar ala aparici6n de fen6menos socio - politicos, econ6micos y culturales que negaron el valor etico e intrmseco de esta disciplina. La economia, sin olvidar su importante sentido en la busqueda integral del hombre, lleg6 a monopolizar todos los
aspectos de la vida cotidiana, conviertiendose en una institucion pOl'
demas axial. La delnocracia
COlno sistema,
las autocracias
como
antisistemas, la educacion como practica de la libertad, en l'ontraposicion al concepto de adoctrinamiento;
la solidaridad
l'Ulno an::ion superadora del individualismo exacerbado; como tiS!
tambien aspectos de la globalizacion economica y los partidos
politicos, de quienes creemos, son el vehiculo natural de la deullxracia, senin algunos de los teulas que abordarelnos con el noble proposito de seguir buscando la concrecion del hombre con10proyecto, a su vez principio y fin de su propia existencia.
1. La Democracia:
un
sistema imperfecto pem perfectible.
2. AutoritaTismo y totalitarismo: Los antisistemas.
Muchos han sido los intentos de querer aproximarnos a Llnd
definici6n del concepto de democracia. Desde los pensadores griegos, hasta las revoluciones que
luego plasmaron el constitucionalismo moderno, todo el espectro ideo16gico se organiz6 en torno a el para irradiar las bondades que se supone trae consigo la aplicaci6n pnictica de este concepto. Sin embargo, existen desviaciones que atenmn contra el siste1l1.ay minan el camino hacia la cristalizaci6n de 10 que pod riamos llamar el afianzamiento del estilo democnitico de
Hay aspectos filos6ficos inherentes a este problema como In moral y la etica que escaparian a nuesb'o analisis si 10 nbordaramos acercarnos
en profundidad. mediante
sus
No obstante,
correlatos
trataremos
politicos,
sociales
de y
econ6micos con el fin de esclal'eccr un poco mas 10 relativo al telna que nos ocupa. Asi e11tonces podemos decir que la Democracia, nuis alla lie
nmmciar una forma de estado, supone Laconstrucci6n de un sistema
/Jn~ndoen eLconsenso minimo garantizado, Laparticipaci6n activa de Los
Con todo ello no podelllos dejar de hacer mencilin nlgunC1 d ius d ishntos tipos de democracias que surgieron a partir Lie lC;
La primera de ellas, Democracia directa
0
pura, se encuentra
pnkticamente extingtlida; ya que su ambito de aplicaci611estaba reselvado a pequeftas comunidades dande la tatalidad de
105
\'iudadanos participahan activamente en la toma de decisiones del estado.
Como antecedente hist6rico mas lejano, encontramos a la Polis griega como el ejemplo clasico, donde 5610los ciudadanos,
que eran el sector social dominante, se reunlan en "Asamblea" para decidir cuestiones fundamentales del quehacer polItico. En la actua.lidad, 5610en algunos cantones suizos persiste <,sm n1.odalidad, mas como un slmbolo de sus tradiciones \'ulturales y polIticas, que como una realidad tangible; ya . sistema polItico moderno,
'.:/.1.11'
el
debido a su propia complejicldJ,
requiere de una mayor actividad en las ftmciones del estado. Democracia indirecta
0
representativa: Con la evoll ~i6n
1 .
ideas y de las instituciones polIticas, este tipo de d( 1.'1011 :.I consolida
fundamentalmente
a
partir
de
las
"
revolucione~,
americana (1776) y la francesa (1789), ambas puramente liberales; cuyo antecedente fue el Bill de Derechos de la revoluci6n inglesa de 1688. Es el modelo imperante en la mayoria de los paises m
lsh'ializados, en donde las falencias propias de ellas son
: - illl
dodas por
105
altos niveles socio econ6micos.
oce como sistemas Demo - liberales.
Tambien se
Democracia semidirecta:
Esta es una combLf1aci6n0 resulta
ser una smtesis de los dos anteriores; es decir que a 路los elementos de la democracia
indirecta
(Poder Ejecutivo, Legislativo, y
Judicial) se les incorporan algunos propios de la democracia pura' o
directa
como
el
referendum,
la
iniciativa
popular,
la
revocatoria popular, etc., cuyo objetivo es hacer que el pueblo participe con mayor protagonismo en la toma de decisiones. Particularmente creo que esta ultima es la alternativa mas "d emocratica", ya que en instancia superadora, perfecciona las fallas intrinsecas que tiene la democracia representativa, y a su vez, factibiliza en tenninos concretos los aspectos ideales de la delnocracia pura
0
directa; y
10
que es aun mas, se convierte, en
funci6n de su pro pia dialectica, en la base de 10 que la evoluci6n ha dado en llamar: La Democracia Social.
Esto, debe hacerse
extensivo a los pIanos econ6mico y politico, cuya condici6n fundamental es la existencia de un estado no dependiente, pues de 10 contrario la aplicaci6n de este criterio democrati:.:.oy social no
traspasara los limites precarios de la formalidad. A proposito de esto, Maurice Duverger (1) dice: " ... La democracia
pluralista
industrializaci6n.
corresponde
a un grado
elevado
de
Afinnar que los pueblos libres son ricas
expresa, con una formula brutal, pero apenas exagerada, una verdad fundam~ntal.
Aplicar un sistema pluralista a naciones
.
cuya mayor parte de la poblacion se haya casi famelica y es inculta y analfabeta, pnkticamente resulta imposible. Bajo la apariencia de los procedimientos modernos, los viejos regimenes de la autocracia feudal, continuan funcionando en
la pnktica.
procedimientos
Lejos de democniticos
ayudar pueden
a
derribarlos,
incluso
estos
servir
para
prorrogarlos pOl'medio de la simulacion". De esta forma, 10 eArpresadopOl'Duverger nos da la idea de como un concepto puede
ser relativisado
a partir
de
situaciones en donde el sistema politico no sea capaz de contener plenamente a todos sus miembros. Es pOl' ello que la izquierda mmxista radicalizada, ve a la delnocracia social solo COlnoLill i:1Spt:'l'tO encubierto de la burguesia capitalista, y desde el otro extremo ideologico, la ultraderecha conservadora, encuentra en el
pluralislno
de
esta
vertiente
democnHica
al
enemlgo
disimulado: El comuniSlno. Personalmente creo que quienes intentan jaquear a la democracia singulares
social se encuentran
en alg-un punto
filosofias, circunstancialmente
rdzunes diferentes.
de
jlilltos, aunque
sus pOl'
Esto tal vez nos indique, que la delnocracia
so('ial, atm con sus imperfecciones, resulta ser el camino mas [c)Vurc1 hie hade. la concrecion integral y superadora del hombre,
Muchos autores utilizan como equivalentes los h~rminos alltol'ital'ismo y pertenezcan
totalitarismo.
a
la
esfera
del
SUl embargo,
sistema
y
aunqlle
autocratico,
existen
carClctel'isticasque 10 diferencian, algunas de ellas se potencian y en <:-1111hos casos, el objetivo a desb'uir y con metodologias diversas
aunque
concurrentes,
sielnpre
es el mismo:
La
Oemocracia. El autoritarismo y el totalitarismo no necesariamente son privativos de un sector ideologico detennulado; se puede dar, y de hecho la historia asi 10 demuestra, que tanto uno conlO otro sean
representantes
extremistas.
de
los
nuevos
La Alemania nazi de Hitler,
fundamentalismos la Italia fascista de
Mussolu,i, la Espai1.ade Franco, La ex UR.S.S. - sobre todo en hpmpos del dictador Stalin -, la ChUla de hoy, como asi tambien 1<1J11<1yuriade
los paises
latinomnericanos,
se debatieron
pendulannente
entre autoritarismos y totalitarismos.
de
bien
Cuba,
si
categorizacion,
hay
no
seria
factores
apropiado que
deben
eximirla ser
En el caso de
esta
analizados
cuidadosamente para poder comprender la verdadera dimension de
"lm
pais que posee uno de los mejores sistemas de salud del
plcmeta y a su vez, soporta un bloqueo internacional salvaje, que 10 aisla inhumanamente de la comunidad internacional. En cuanto alas
diferencias entre estos dos conceptos,
sl1rgiran seglin la intensidad
de la penetraci6n
del ideal
autocnitico en el conjunto social. En un estado totalitario, tanto la propaganda
como el
aparato oficial - linica opci6n de prensa -, juegan un papel fundamental, yaque introducen en el cuerpo socialla idea de la existencia de un enemigo publico latente. Par ejemplo: los judios ;->11 tel
Alemania nazi. En el autoritarismo, los niveles de dominaci6n hacia la
sociedad son mas debiles, 10 que permite, no pOl' acci6n dem.ocnitica del sistema, un minima de oposici6n tangible que se puede advertir en la sociedad, aunque de manera desorganizada. En ambos casas - autoritarismo y totalitarismo -, el papel de
critica
1ÂŁ1
esm
controlado
a
censurado;
siendo
el
antiintelectuahsmo otra caraderistica de estos modelos. Asimismo,
se
dntisistema autoritario, lrnunpe.
destaca
como
rasgo
importante
del
el mOlnento socioecon6mico en que
Las crisis econ6micas han sido siempre el puente
natll1'al que conduce a ellos.
A esto debemos agregarle la
aceptacion entusiasta de la clase media, que en este contexto, ve Si a 10 expuesto, sumamos la
peligrar su ascenso social.
existencia de un partido politico nazional fundamentalistas Seguridad
0
que
se exprese
Ser Nacional",
de caracteristicas
en tenninos
de
/I
Orden,
obtendremos el marco ideal para la
concrecion de este sistema
0
modelo.
Entonces, es evidente que si recordamos 10 expresado en el punto referido a la democracia, y por definicion negamos sus ab'ibutos basicos, solo este simple esfuerzo intelectual nos pondra en teoria, ÂŁrente a
10
que denominamos antisistemas
0
enemigos del sistema democratico. Resulta necesario aclarar que las diferencias mencionadas enb'e autoritarismo
y totalitarismo de ninguna manera nos
acercan a posiciones tan radicalizadas como las sustentadas por la Nueva Derecha.
Muy por el conb'ario, creemos que esta
corriente de pensamiento de la cual Norman Podhoretz y Guy Sonnan(2), son sus representantes mas conspicuos en los pIanos social, politico y economico, constituye la justificacion teorica que impulso la puesta en march a de los autoritarismos practicados en Latinoamerica,
donde
los golpes de estado, siguiendo
los
postulados de la Doctrina de Seguridad Nacional, significaron el mal menor frente al mal mayor que representa marxista, entendida como el -(micosistema totahtario.
la amenaza
3. Educaci6n
y Politica: los olvidos conscientes del modelo conservador
1. LA SOLIDARIDAD: una acdon para el cambio. El hombre
en
su
aspecto
biopsicosocial,
logra
su
\'onl'1'eci6ncuando libera esta energia en funci6n del otro. S6lo poclentos l'ealizarnos a partir de la realizaci6n con el otro, imverativo
etico que constituye
la puesta
en marcha
que
m.otoriza el funcionmniento de Ids instituciones. Estas, no son la suma de voluntades individuales que indiferentes achian en forma mconexa;
pOl' el contrario, la
\'j'lstdlizaci6n de un objetivo comienza a lograrse a partir de la tomClde conciencia critica de la realidad, que en cadena solidaria propone pennanentelnente la acci6n para el cmnbio. Este hecho tiene su correlato en los pIanos politico, social y econc'nnico. Anterionnente,
y desde una perspectiva estrictamente
cn1to16gi\.'d, deciamos que el hombre s6lo logra realizarse con el ntro,
Pues bien,
transitando
los distintos
pdrli\'lpal:i6n social, encontrmnos
que
estadios
modelos
de
la
y sistelnas
respond en por definici6n alas caracteristicas anunciadas. Asi, el conservadurismo fundmnentalmente
como sistema hace hincapie
en el eficientismo econ6mico, aislando al
hombre de su compromiso con el todo,
0 10
que es mas grave,
desintegrando su verdadera dimension etico - valorativa. En otros tenninos, un modelo basado en la maximizacion de
la eficiencia y
inexorablemente dutoritario,
al
en
la
umbral
economicamente
1/
gula" de
mercantilista,
un
destino
concentrador
nos
lleva
politicamente y
socialmente
excluyente. Es por ello que a 10 expuesto debemos confrontar un modelo que sea capaz de contenernos a todos, y pOl' extension, construir un sistema cuya" base sustancial encuentre en la solidaridad a la racionalidad del Poder del Estado. Un estado llue
no sea axiologicamente neutral, pOl' el contrario, debe
reconocer como parte fundamental de su propia naturaleza y existencia el compromiso etico que sintetiza la legitimacion de la libertad y de la igualdad como resultante de la linea de acci6n que impone la justicia.
hombre de su compromiso con el todo,
0 10
que es mas grave,
desintegrando su verdadera dimension etico - valorativa. En orros terminos, un modelo basado en la maxin"lizacion de
la eficiencia y
inexorablemente
al
en
la "gula"
umbral
C1utoritario, economicamente
de
mercantilista,
un
destino
concentrador
nos
lleva
politicamente y
sociahnente
excluyente. Es pOl' ello que a 10 expuesto debemos confrontar un modelo que sea capaz de contenernos a todos, y pOl' extension, consb'uir un sistema cuya base sustancial encuentre en la solidaridad a la racionalidad del Poder del Estado. Un estado ll"ue
no sea axiologicamente neutral, por el contrario, debe
reconocer como parte fundamental de su pro pia naturaleza y existencia el compromiso etico que sintetiza la legitimacion de la libertad y de la igualdad como resultante de la linea de accion que impone la justicia.
Raul Alfonsln, (3) en una aguda revision socio politica, distingue tres tipos de estados: d.
El estado justo: correspondiente a los sistemas que extreman su
fundcnnentalismo, como pueden
ser el comunismo
y
los
fdscism.os, e1evando al Estado a 1a categoria de deidad, y al hombre, al de la mera uniformidad. h. E1 estado legitimo: basado en los principios rectores del constitucionalismo democnitico y, pOl' 10 tanto, a la democracia como
sistema
y
continente
de
1as re1aciones humanas,
perfectibilizando e1estado de bienestar. Co
E1 estado del realismo politico: cuyo soporte ideologico es e1
mode1o neoconservador, el cual escondido tras e1 antifaz de una dpmocracia formal,
desnaturaliza
dt'lnunAtico
esencia1, para
eficientismo
economicista
mercado.
En
postmodernismo
este
al
hombre
introducirlo de
contexto,
inmediatamente
1a estricta SI
como
mecanicmnente competencia
intentaramos
surgiria
sujeto
con
del
definir
certeza
a1
al
cierta
prob1ematica conceptual: 1a confusa idea acerca de que todavia no encontrmnos 10s autenticos 1imites de la modernidad, 0 mas aun, si reahnente fonnmnos parte de ella.
En
sus
diferentes
versiones
reaCl:ionaria - el pastmadernisl1w wSlI/ouision
una cultura
"Light"
-
la
y
la
amenaza instalar de acuerda a su en tada Las manifestacianes
!Luwana, hacienda que este per11lanezca expectante ncriticidad.
progresista
deL ser
en su pasividad
y
Busca en definitiva provocar el triunfo de 10 estetico
subre 10etico Este hecho necesariamente 10libera del compromiso con el todo.
As!, COlno una generacion pennanente
de conducms
mL1 iv ill nales y aisladas, el poshnodernismo -version actualizada dt' lit-'rto anarquismo individualism - minim.iza al hombre desde
sus centros de poder.
De este modo, ya transfonnado
en una
simple l.midad de conSUlno, comienza su march a inconsciente hacia la despolitizacion, alejandose velozmente de la filosofia y acercandose peligrosmnente a la tecnocracia.
ilddfCl en tenninos Inuy concretos la ilnportancia que tielleeel
Lllc1d6ncomo subsistema totalizadof para la evoluci6n ~-
fl111ddnwnialm,ente a partir sUl'icddd,
Aquel sistema que expulsa alas
f"lliJlulmesy qut'
del sistema
pOl'
que
contiene
grandes mayorias
consiguiente, deposita los beneficios en una elite
nunca f,wOl'eCen1el cambio, instala la desigualdad
"L n conceFcIOIl bancaria de Ia educaci6n
".'killil!O,
-
Iladie educa a nadic, ni tampoco nadie se educa a sf mismo,
dd
[S pOl' <;l1t'lkwdCl
lUi
educador
',::,il{)} d collfrario, Ios homhres se educan entre sf en comuni6n !J/[l!lil(fl)/l
y let
es For definicion
yn que en Ia contradicci6n
de 0l'resi6n,
ili:-ldlllll'l/to
a 1a
es
Illllildo"
y COil
(5)
ello que en los sistemas 0pl'esores la palabra prioritaria
de
un
mundo
pasivo,
pues
el
hdlll'cHismo, que se traduce en deposito informativo, l'uega e1 dijlClgo que es la expresi6n democratizada de la pa1abra,
"Es preciso que 1£1educaci6n este en su contenido, en sus \ll'llgnllnC1sy en sus metodos, adaptadC1s £11fin que se persigue: pern-litir al hOlnbre llegar C1ser sujeto, construirse contO persona, trcH1sfonn,n allnundo,
entablar con 105oh'os hombres relC1ciones
A todo ello podemos
agregar que en esC1blisqueda,
ld
l'ielKia dejara de ser oficial y desh'uira su neutrC1lidm'lideol()gil'd, En oh'as
palabras,
pero
con identico
sentido
Exequiel Ander Egg (6), afinna que la dominaci6n
critico,
culturC1l se
denomind colonizaci6n pedag6gica, que sirve pC1rC1 adornwcer y trcmq1I ilizar IlltekdudL
£11 colonizado
en
su
dependenciC1 culhHC1l e
Se h'ata de un modo de educar para 1£1resigndci6n y
el inmovilismo. El miS111,0 Adanl. Smith - padre delliheralismo k dsigna un 1'01imporhulte
econcnnico -
£11estado en 1£1funci6n educativa,
espel'i£icamente a 1£1escuela publica, como consecuencia de las distorsi6n del sistema, ya que 1£1supuesta excelencia que ofrece und enseii.anza rentada, da origen a un esquema desigual en el
En este sentido,
se observa claramente
lh.'Clsiunado par el neoconservadurismo
el desprestigio
a 1£1filosofia liberal, ya
que usurpa los aspectos mas progresistas de esta doctrina con el
proposito
de
lograr
intrinsennnente,
el
alg{tn eonsenso eonservadurislno
,H1tenticamente demoenitico. pcll"tirdel predetermiIlismo
social nunea
Esta afinnaci6n
debido fue,
a que
n1 10 es
se corrobora
a
hist6rico de este modelo, donde 1a
propiedad privada, la libertad restringida y la inmovi!idad SO(i211 sun los indicadores esenciales para la construcci6n de un Estado l,1I1ilLlSenteC01nodesertor de las necesidades del hombre. De Tomas Hobbes a L. Strauss, como en la actualidad r\()ht'rt Nozik y Guy Sonnan, han trabajado en perfecta sintonlc, pMd
log1"i:H10 que en Sl 1nisma es hoy una conhofH.hlyi6n
,"orKephwl:
La revoluci6n
conservadora
mnericana.
Ronald
Reagdll, figura emblematica de esta cbrriente de pensamiento dlHdl1te 10s altos /80 !idero con dureza inusitada Jll
la ofensiva
'onl pitCllista. En la Argentina desde 1989, en un provoeativo ataque de
ll"clVl'stiS1110politico,
el
iusll,i,dismo poshnoderno,
"lnenelnislno",
una
suerte
de
corporiza el ideario neoeonservador
!l(I,"wndodbandono de Ias hist6rieas banderas del peronismo y ,),mdi,'dndo la etiea en aras del pragtnatislno. Finalmente
tanto
E. Fromm
(7)
como
("rislalizcm desde
sus
respeetivas
obras,
la
Paulo
Frein),
ach1i:l1izacic)n
illdndolOgica a seguir; el primero, a partir de la alienaci6n de la
que es vidima
el hombre en 10s paises desarrollados conlO
l~onsecuenciade la sociedad de Lonsumo, y el segundo desJe un l'ontexto latin.oamericano, sobre la base de las desigualdades polibnls, sociales y econ6micas.
2. LClglohalizaci6n
econ6mica:
La infonnaci6n resh:iI1.gido.
como valor
Se ha dicho y con raz6n, que los partidos politicos son el vehiculo natural de la Democracia. Aunque
no
es
ml
intenci6n
liberanne
de
las
especificaciones hist6ricas del caso, ya que el presente trabajo tiene pOl' finalidad aproximar generalidades de cada tema para lograr una comprensi6n relativamente global, respecto de los partidos politicos, seria casi imposible intentar enumerarlos y clasificarlos sobre todo en su aspecto cuantitativo. De tal modo, nos renLitiremos a algunos estudiosos y politologos como punto de partida.
Asi, Carlos Fayt (8), dice: " Los partidos politicos
son la potestad publica institucionalizada t'sm
".
En otras palabras,
asombrosa capacidad de sintesis nos ubica nipidamente
frente a uno de los conceptos anteriormente estudiados:
La
DelTIocracia. Veamos entonces. Como potestad publica entendemos el poder que emana del pueblo - soberania popular -, par medio de mecanismos
electorales
acci6n
de
votar
-,
que
se
:institucionaliza,es decir se convierte en gobierno. Tmnbien, aunque ya sin profundizar en el tema, podemos decir que los partidos politicos respond en a una evoluci6n t"tapas,
0
a rasgos generales y a concepciones multidisciplinarias,
que 10 interpretan
desde una visi6n
psico16gica, hist6rica y
politica; incluyendo su naturaleza socio16gica- juridica.
De aqui
podemos inferir que como control social, 105 partidos politicos constituyen el conflicto social organizado. Desde otra perspectiva
Maurice Duverger
(9)
en un
sentido mas amplio 105clasifica segu.n:
h. Me1nbrecia: Partidos de cuadros donde 10importante es la
calidad de sus miembros -partidos conservadores pOl'ejemplo la U.ce.de ...
miembros determina la amplitud de la base participativa, pOl'ejemplo el Partido Socialista Frances 0 La Uni6n Civica Radical. Ahora bien, hasta aqui muy sinteticamente hemos hecho menci6n a 1a op01路tunidad que tienen los partidos politicos de
(1l'ceder al gobierno, posibilitando la alternancia en el po del',
Sin embargo, si retomamos algunos de los conceptos i:ul.terionnente
tratados,
la
duda
se
nos
presenmn:'i 51
ocasionalmente
algunos
de
los partidos
de
los extremos
fundamentalistas - Comunismo, Fascismo, Nazismo - todos ellos pertenecientes al sistema autocnitico, llegara al poder mediante procedimientos democniticos - esto es a traves de elecciones libres -, LCwil seria el desenlace?
Probablemente la respuesta la
eI1lxmtmrlamos en la dictadura de partido tinico. La Alemania nazi de Hitler fue un doloroso ejemplo, y la Argentina peronista d t'
105
ClTIOS '40, un frustrado intento. Tambien debemos aclarar que 10spartidos, pOl'su canicter
relativamente permanente, se diferencian de las facciones politicas, las que como gl'UpOSinestables persiguen un interes politico 0 economico, propio de la sociedad estamental. Atin aSl, es cierto que 1as facciones existen dentro de los partidos politicos; e induso 1a historia observa que ellas pueden devenir en partidos politicos. En este sentido el conflicto entre Unitarios y Federales fue un ejenl.p10de ello.
Entonces, para aproximarnos a una definicion podemos decir:
II
un partido politico esta formado par un conjunto de persulln~
que con una base organizativa y jerarquizada, unidos par el mismo ideaL, y compartiendo los mismos objetivos politicos, intentan, mediante LacOlllpetencia electoral, llegar aLpoder y desarrollar el plan de gobierno anunciado" .
Pues bien, hasta aqui nos hemos ocupado en sintesis de 10 que pod riamos llt~_mar10spartidos politicos en su forma c1<isica0 tradicional. En la actualidad, ya superado el conflicto Este - Oeste, la maquinaria
propagandistica
neoconservadora
se esfuerza por
convencernos de que ha llegad 0 el fin de Ias ideoIogias. Nada mas alejado a la realidad 0, para utilizar un tennino mas proximo a la era tecnologica, nada mas cercano a la realidad virtual. Este abrupto
final
que
para
el neoconservadurismo
poshnodernista es traducido como la muerte de las ideologias, y pOl'
pxt~nsion de la politica, inaugura sobre la base del supuesto
h'iLmfocapitalista, un nuevo concepto antropologico:
que lllaximiza el utilitarismo,
El sujeto
inmerso en Ia probIenuitica de un sistema
t!ulldl' la propia pasividad proyecta Ios aspectos inconclusos
de una
rea/idad fragmentada. Yes a partir de esta vision que aparecen en escena nuevos cKtoresque pondran en funcionamiento un aparato que intentanl reemplazar
el sentido etico del sistema politico de sustento
democnitico. Nos estalnos refiriendo a un hecho particulannente peligroso: los "out-siders" de la politica 0 aquellos politicos sin partido.
ElIas creen no necesitar la estructura organizativa de w, ~"'.-r~ 0
politico; es mas, el personalismo que representan esta en
.1:m alian
homogenea
,¡01 â&#x20AC;˘.. -entl'aci6n
con
el
autorital'ismo
econ6mica del poder.
politico
y
Su predica pennanente
la -
d'ltfnsa mezcla de populismo y valores inalcaltzables- que a la I'0stn>se transfonnan en alttivalores, consiste en hacer apal'ecel' a L¡ "mrupci6n y al estancamiento, como hijos dilectos de las h'(llll,'iones clemocraticas. ..
'1
:';l.l
1 e'
Esta hip6tesis llega al absul'do en
,dleg6l'ica y casi simulh~nea con la puesta en marcha de 10
pod rian'los llamal' "su politica del olvido social". 5610 y a
m,lllerElde conclusi6n, si pensamos en los ejemplos de Collor de "\ldo en Brasil, Fujimol'i en Peru, el intento de Ross Perrot en Estcidos Unidos, y Berlusconi en Italia, podremos verla de esta abstracci6n axio16gica.
ficcian
:. L-\ GLOBALIZACION \ d lor restringido. Todo
ECONOMICA: la informacion como
10 anterionnente
expuesto
a
partir
de
una
~~t"rspeehvapolitica, y en 10 que se refiere a los sistemas que pOl' ~1.1
nahll'aleza alejan al hombre de su compromiso con el todo,
El neocapitalismo, "lue se ve como unico gigante que ha <..;(
)brt-'vivido al
conflicto
sistemico,
asegura
que
una
vez
.'llll1l1ldLltl1a competencia mayor -lease socialismo-, el l'esultado U1nl~'d ialo es la globalizaci6n de la economia. Asi, en un in.tento pOl' deÂŁinil'la, podemos decir ,... 'h7li:.ncicll1 econcJ11lica resp01uie (/ un nuevo modclo , 'I/(('lifmcicin
:.>, :llc/c)
de la economr'a,
((11/10n:sultante
, liins aptos.
:./ ,ie' {Ill sistellIa politico
~- 11
ill/placahle
de
que S{lPOI/C d predominio
de paralelismo
cn.racterizado
Iii
sistellIa en dOJUic
bnsada en la rigurosidad
fa selecci6nnaturaL
Esta suerte
0
qUI'
darwi11.iano es posihle
por La ofensiva
autoritaria
n. en
t'slos hem pos, uno de 10s aspectos Inas signified tivos
,J tncl111ieapolitiea, es la velocidad
con Llue hdcen su
:l ft:'n0111enOS, que por su ilnportancia dentro del sislt'l1ld, lll.odifiean IdSrelaciones de poder.
El avance tecno16gico, y
pOl'
extensi6n la infonnatizacion
Lll'l plnneta, hace que la comunicaci6n
a h'cwes de 105 medios
Ahora bien, penselllos pOl' un 1110illentoen la verdadera d inwnsi6n etico social que reviste el conocimiento como valor y
herramienta
en
la
formClci6n llltegrc11 del
hombre.
Ese
conOl"i1l1ientoque deberia ser mulhdnecclol1ClI ,- ClbcHcativo, V l"Oml)hi!, patrimonio
de todos, esti hoy sole; Cldisposici6n de
gru pos
internacionales,
financieros
qmenes
rubllslt'cen el sistema, e invariablemente
privndos
globales
Contrariamente,
se convierten
y
alejan a la gente pOl' el
del 1l1undo, y COlno tales son quienes
<111si050S pOl' nueva informaci6n, financieros
potencian
esmn mas
105 mercados
en 105 \.1nicos realmente
general,
de
la
graved ad
que
representa
la
infonnaci6n
unie!il'eccional. En forma mas critica,
Jose Maria Pasquini Duran (11),
prestigioso analista politico opina: " ...tal como esrn.n dadas las cOlnunicaciones, en el contexto de la economia globalizada, provoca
enonnes
informaci6n
desigualdades,
en megacorporaciones
mercae!o es la rentabilidad,
pues
se
concentra
la
cuya unica meta en el
haciendo que esta 16gica econ6mica
deJe fuerClcuestiones tan importantes como la integraci6n social y
territorial. .." . Desde la perspectiva de las sociedades desarrolladas, Jean Fnulcois Lyotard (12), dice: " ...5e sabe que el saber se ha convertido en 10s ultimos tiempos en la principCl-lfuerza de proe!ucci6n..."
y
continua:
" ...en
su
forma
de
Inercancia
infonnacional,
el saber ya es y sera aun mas, el envite Inas
im.portante en la competici6n mundial por el poder ...". Todo ello nos dice imperativamente que los paises en via de
desarrollo como el nuestro deben instrumental' politicas
l'01l1.1Ul.icacionales e integradoras, basad as en el consenso entre 10sdiferentes sedores de la sociedad. Los politicos tienen esta asignatura
pendiente
con el
conjunto social y con los tiempos que corren, pero volviendo a
Pasquini Duran: " ...Es muy dificil que sean ellos quienes la llnpulsen ya que aceptan y viven del sistema de comunicaci6n
Sin embargo y mas alla de la inevitabilidad economia globalizada, tambien es posible que
105
de la
beneficios de
este nuevo orden se hagan extensivos prioritariamente a quienes
.
permanecen fuera de el como simples espectadores de su propia marginalidad. Aunque para ello es preclso que quienes ostentan el poder,
en
todas
sus
formas,
comprendan
solidaridad tambien se logra la rentabilidad,
0 10
que
desde
la
que es aim mas,
se instala un principio de justicia de alcance universal, en la busqueda del desarrollo de una econOlniaa escala humana.
Por analogia interdisciplinaria, aunque sin rigurosidad estricta, podemos decir que en la busqueda irracional de la c:ntropin !"
(oj
se puede caer, involuntariamente
que lesione la homeostasis
(cj
0
no, en un iatrogenia
del sistema; principio fisico
-luuni(o que seguramente no compartiran quienes adhieren con ic> l"asi l'eligiosa al neocapitalismo extremo. (Asi, aquellos que
~lIITn-coque seguramente no compartiran quienes adhieren con :e casi religiosa a1 neocapitalismo extremo)
As!, aquellos que
-efienden esta ultima posicion corren el riesgo de cometer el crilegio cientllico de negar leyes de validez universal.
"
=-
ÂŁJ1
llS
trap ia:
parte de la energia. de un cuerpo
ormada en tra.bajo.
0
de un sistema. de cuerpos que no puede ser
De esto resulta que la. tota.lida.d de La.energia. disponible, tiende a
u ••• la revolttci6n no es la sublevaci6n conlu. el orden exislenle, sino la implanlaci6n de un orden que tel:giversa el tradicional ..." Jose Ortega y Gasset (Larevoluci6n de las mas as)
1. REVOLUCION Y GOLPE DE ESTADO: la violencia en la politica. Es muy frecuente encontrar, ya sea en los medios masivos de eomunicacion, como en cierta literatura que se dice ser espeeifica, a los rerminos "revoluci6n y golpe deestado" utilizados en forma equivalente
0
indistinta.
No solo es erronea
esta aplicacion, sino que ambos
criterios se hallan en conflicto,
Aclarado
Revoluci6n,
esto
desde
0
podemos
una
vision
mas aUn, la existencia de uno,
comenzar
diciendo
histOrica, supone
que
un
la
cambio
estructural, es decir total del sistema politico y como consecuencia de eIlo de los subsistemas econ6mico y social. j
Este es el caso de las revolueiones del siglo XX como fueron por citar algunos ejemplos, la de Rusia d.e 1917 y la cubana de fines de la decada del '50, euyo marco teorico fue el comunismo de Karl Marx, y su metodologia la aceion directa, vale acotar, el enfrentamiento dietadura del proletariado.
armado, en la busqueda
de la
En contraposici6n a la revoluci6n aparece el concepto de
CoIpe de Estado,
al cual podriamos intentar definir como una
irrupci6n vioIenta de Ios sectores miIitares en el poder.
Este hecho
produce un quiebre en el orden institucional; pros~ribiendo no s610 a 10s partidos politicos, sino a todas las instituciones del sistema
democnitico,
como
asi
talnbien
el
consecuente
Es importante reconocer el clima sociopolitico en donde acman estos dos fen6menos. dandestinidad
La revoluci6n 10 hace desde la
en medio de la corrupci6n generalizada y de
enonnes desigualdades politicas, sociales y econ6micas, pOl'10 que considera a la acci6n violenta como la u.nica garantia de snperar el conflicto. El golpe de estado, en cambio, violenta la democracia abortando
los mecanismos previstos pOl' ella, que son los
encargados de controlar y superar la crisis. Tambien resulta importante detenernos pOl'un momento en el contexto internacional
As! el /I
comunismo
como factor decisivo en
tuvo
pOl' premisa
exportar las revoluciones" mediante
la
fundamental
diferentes formas de
fu,anciamiento y adoctrinamiento. fue la encargada
de
En este sentido la ex D.R.S.S.
diagramar
el mapa
geopolitico que
u,variablemente reemplazaba estas revoluciones, en ocasiones consolidadas, por la acci6n e>.rpansionista 0 simplemente por conversi6n escler6tica. En
relaci6n
a
los
golpes
de
estado,
los
paises
latlllomnericanos, ricos en esta tragica e>.rperiencia,debieron dlepl:ar 10 que se denomin6 la Doctrina de Seguridad Nacional, IdeddCl
por el Pentagono norteamel'icano, con el pl'op6sito de
justificar estos golpes y frenar el avance del marxismo en el continente. Unos y otros se vieron fortalecidos a partir de las consecuencias politicas de la segunda guerra mundial.
LCl
posterior guerra fria y la "detante", y por supuesto, los tratados de Yalta y Postdam
firmados
dividieron
en una realidad
al mundo
por los paises beligerantes, dual
0
bipolar con
diferencias irreductibles, a las que llamaron con trivialidad eufelnistica "coexistencia pacifica".
En ciencia politica existen tenninos que por su orden
0
ubicaci6n gramatical refieren conceptos distintos. Hacemos
esta
aclaraci6n
en
virtud
de
la
relaci6n
tennino16gica y conceptu.al que guardan con el presente capitulo. Los conceptos a los que aludimos son:
Respeeto del terrorismo
de estado, Julio Cesar de la Vega
(13) nos dice: "...ef terror como instrumento gohicrno;; rouservndor,
para
mantenerse
en
pues su funci6n
cUl1lquier cuestiona11liento
el poder,
al que recurren
es siempre
105
de canicler
es 11lantener el status - quo, y elimi/1.nr
pOl' parte de grupos conlestatarios,
los hombres que ejercen la autoridad
0
ya sean
al orden que elios represelltan ... "
De este concepto podemos inferir que la metodologiCl del tprl"orismo de estado es utilizado como forma de conb-ol social, Jwdw que se verifica con facilidad en la mayoria de 105 pai5es ldtinomnericanos. Ese conb-ol es tan amplio que llega a todos 105 niveles de la sociedad.
Junto a la propaganda,
1'1 ac... 'i6n
psico16gica y la tecnologia a disposici6n de quienes gobiernan. logrii una eficacia Sill precedentes, regulando
la dosificacil'>n
nl'~'esaria para la total dominaci6n del cuerpo social.
Por su parte el estado terrorista, como otro aspecto del tc'rruriSHlO internacional,
a
diferencia
del
anterior,
hal'e
referencia casi con exclusividad al extremismo de izquierda i..nstaladoen el poder, ya sea Inediante acci6n revolucionaria
0
por aeci6n expansionista de una potencia hegemonica. Sin embargo, en la actualidad y con la incorporaci6n cd escenano
internacional
del
fundamentalismo
islci11lico, est
concepto se ha hecho extensivo a algunos paises arabes, tal el l'<iSO
de Libia e Iran. Debemos aclarar que en nuestra intenci6n
de ser objetivos, y en virtud de nuestra cultura occidental es que en 10s paises musuhnanes, las consideraciones de tipo religiosils cH:kjuieren una significaci6n mayor en la busqueda
de
105
objetivos de la naci6n islamica. En tal sentido, se puede presentar cierto relativismu :
d
que hay aspectos de la vida que mientras para la cultura c1 rilbe resultan ser trascendentales, para la visi6n occidental pueclen ser interpretados como valores llevados a la categoria de fanahsll1l'. En este orden, oriente y occidente configuran diferenl-ias
Lite
dificil superaci6n. Retomando nuestro tema, la desaparici6n de la C.RS:=:. como superpotencia, y por ende del comunismo como sist",~::'.:que competia con el capitalismo, ha hecho que el
mar''.;,::;:-
residual existente, -caso Cuba-, sea identificado negativamente como estado
terrorism,
especialmente
pOl' cierm prensa
y
literatura tendenciosa en alianza con grupos de presi6n y fadores de
podel', tanto
politicos
como
econ6micos
dependientes
obvimnente, de los Esmdos Unidos.
Los salvajes atenmdos contra la embajada de Israel y conha la AMIA (Asociaci6n Mutual Israelita Argentina) hicieron una vez mas que la irracionalidad descendierlOlhasta los limites pato16gicos del fanatismo.
Si bien algunos de los indicadores
seii.alan al Gobiel'no Irani como uno de los responsables de estos crnnenes, que en definitiva
son crnnenes conha
el pueblo
argentino, este caso de terrol'ismo intel'nacional encuentra hasta el momento una derivaci6n que altera la metodologia tradicional <'11
lei
nahualeza violenm de esta.sacciones. Y es que en el caso de la AMIA, algunos resabios del
C1paratorepresor del terrorismo de estado que actu6 en la ultilna dictadura Inilitar argentina, han selvido como en una alianza diab6lica, a los fines enfermizos de un estado terrorista.
Esta brutal amistad -entre terrorismo de estado y estado It'rrorista-, supone mucho mas que una combinaci6n explosiva al Sl'fvi,'iu
del terror y de la muerte; es probablemente la resultante
nociVa de la il'ldiferencia e meficacia de un gobierno cuyos sigI'loS de corrupci6n, impunidad y ajuricidad Ie allanan el cammo a la violencia en todas sus fonnas.
1. Ld am bivalencia de la religi6n: la contradicci6n liberaci6n -
opresion.
1. LA AMBIV ALENCIA DE LA RELIGION: la contradicci6n liberaci6n - opresi6n. Existe una ambiva1encia en e1 fen6meno religioso que relCltivizae1 concepto de Marx acerca de que " ... 1a religi6n es e1
hombre en un sentido parcial, ya que 1a religi6n posee aspectos que pueden contribuir a movi1izar a 1a gente en contra de la La experiencia 1atinoamericana a partir de 1a TeoLogia
opresi6n.
de La Liberaci6n es un ejemp10 de ello. Tmnbien,
aunque
ya
sm
va10rar
1as
cuestiones
programaticas
de 10 que es e1 proyecto social, 1a revo1uci6n
anticapitalista
en Iran, nos demuestra
POl'
1a importancia
de 1a
otra parte y desde una perspectiva estrictamente
llll.tll!6gicCI, Exequie1 Ander Egg, distingue 1a ideo10gia religiosa de la ido - Logia religiosa,
es decir 1a religion que crea ido10s y en
la cua1 el hombre se somete a ellos. En la misma linea, Erich Fronnn
interpreta
a1 ido10 como una
cosa en 1a que nos
proyectamos, sOlnetiendonos a nuestra creaci6n y cosificandonos en una re1aci6nenajenante. Es
pOl'
ello que 1a verdadera alienaci6n 1a encontramos
l'llcllldo la religi6n y la moral hacen del hombre un sujeto pasivo
de
1a realidad,
incapaz
de
transformarla
y
negando
1a
posibilidad de construir su historia, con 10 cua1, como deciamos antes, e1sujeto se convierte en objeto. La farsa de encontrar Ia felicidad en respuestas metafisicas e i1usorias a 10s problelnas reales y concretos, no hace mas que favorecer al fortalecimiento
de un
sistema basado
en las
La pobreza como estigma, hace que 1aresignaci6n ante 1as u,justicias convenza al hombre de que Dios, en su u,fu,ita
bondac\ celestial, 10 recibira en su remo. Por ello es que la religi6n institucionalizada
en la Iglesia Cat6lica, hizo que en
tiempos de la edad media, se convirtiem en e1soporte ideo16gico del feudalismo. Hector Ruiz Nunez (14) dice: "...La caracteristica que se ha Jlwntenido constante
en La historia de La Iglesia ha sido su alianza con
los poderosos, con aquellos que establecen Las regLas de juego aentro de
Un hecho que refuerza 10 expresado fue el escandalo financiero del Banco Ambrosiano, en donde el obispo Paul Mmkcincus aparece como uno de los mayores responsab1es del "affaire", notablemente uwestigado por David Yallop en su obm "~Por vaLuntad de Dias ?".
_-,;:~\'lt>rc)S e intereses politicos y econ6micos en casi todo el _l1~l:Idu,es oho ejempl0 que contrasta con la idea liberadora de la >"li~iun de los humildes. L:)s contradicciones
en que ha caido groseramente
la
19h"路,il1 Cat6lica a 10 largo de su existencia, ha hecho que mud'los de
sus
seguidores
se
desplazaran
a
otras
religiones
-;implen1ente renunClasen a su catolicismo para seguu
0
en el
('nsticHlism.o. Tambien hay quienes responsabilizan a la jerarquia lylesii.istica porIa proliferaci6n de sectas religiosas diseminadas
En el caso espedfico de la Argentina, a diferencias de d1'llS pdises como Brasil 0 Chile en donde el comprom.iso social y Li llf'(il111pOl' 10s pobres es mayor,
Es
pOl'
Ll,>fine muy
la Iglesia Cat6lica ha sido un
ello que el autor de "La cam oculta de la Iglesia" acertadamente
el
pensamiento
i.nstitucloI"wl
\un asi, debemos aclarar que no es in.tenci6n nuestrC\ 'lll)('er el trabajo y compromiso etico de quienes encuenhan
en Is Doctrina Social de la Iglesia un marco adecuado para la acci6n eVaI'lgelizadora. Simplemente creemos que la religi6n cucmtimtivamente mas importante del planeta dista muchas veces, como instituci6n terrenal, rigida y jerarquizada, de la â&#x20AC;˘ VC1l1h'Llardia
libt->rddoL
que debiera imponer su destino transformad01' y
1.1 El estilo politico de los notables. 1.2 El estilo radical: el comienzo de una participaci6n 1.3 1.4 1.5 ~
1.6
mas arnplia. El estilo peronista: los a~10S140. Menem: el gran simulador. El unipartidismo: paTtido unico y partidu dominante. La conupci6n: del acto de conupci6n a 1ÂŁ1 cleptocracia.
Los estilos politicas
politicos,
el 1l11ipartidismo .y las fuerzas
e11U?I'gelltes,son temas que deliberadamente
a/Jordar en la parte final del'presente lie
la corrupcioll y de la politica Circunscriptos
al ambito
he decidido
trabajo, como asi tambien aspectos en su relacion can el sistema social.
nacional,
aparecen
105
estilos y las
fllL'r:ns politicas en un in.temo por develar algunas de las causas que nos l?(lstagaron his t6rica11len te. Ell
cua1lto
l'.lcl/lsivnJllente
al
unipartidismo,
su
n la original experiencia
tratamiento
se
del pueblo mexicano
remite durante
gran parte de este siglo. R.especto de los militares, pol itica y se
fI
apoderaron
quzenes tambien
lrrU11lplerOn en la
de todo un estiLo", no haremos
11layores
coJlsideraciones ya que nuestra Labor abarca s6Lo a Los partidos poLiticos, pOl' lIuis que algunos, incorrectamente, tld 111ilitnrismo argentino,
En Catolica
taL caso,
y
dcnominados:
IDS
en llamar a gran parte
EL Partido Militar.
tanto
silldicatos
insistan
las fuerzas
armadas,
corresponden
a la orbita especifica de Los
factores de poder, quienes junto
como
la Iglesia
a Los grupos de presi6n
senin objeto de estudio en el futuro. POl' ultimo
resulta
necesario
aclarar respecto de los partidos
polfticos, que si bien a cada partido Le corresponde un estilo, pOl' razones
Izisfrjricu
-
idcllt~ficnnm
facticas,
s6Lo entenderemos
como vciLidos aquellos que se
can un tiempo y un proceso, resultando
sa protngonistas
permnnente
de Las marchas
en consccuencia,
y contra11larChafi de
Iwcsh'a historia,
La realidad politica de
LU1
pais genera hechos que en
forma aislada pueden ser interpretados como producto de esa dinamicfl a la que nos hemos estado refiriendo en algunos
Sin embargo, y pOl' casual que estos parezcan, siempre fonn,m parte de un universo mucho mas complejo. Asi como La collducta de Los individuos
es el resultado de factores externos e intenLOs
en eI proceso de socializaci6n,
los partidos
cstiLos, for11las propias y diferenciadas, tnwhen fundamentan
politicos
son dueiios
de
en donde estas organizacionefi
la base de su existencia.
Es pOl' eso que a traves de nuestra
historifl politica
<lparecen clarainente estilos que pOI'sus caraderisticas hacen de n'f(-'rt->nte a gran pfll'te del espectro ideo16gico. Enos son:
3.
El estilo peronista, tambien llalnado Fhurer Principen
0
principio del fhurer, correspondiente al peronismo de los aiios
'40.
Respecto de este ultimo, por tratarse de un movimiento heterogeneo en el que convivieron dentro del mismo algunos subestilos antag6nicos entre si, tambien de dificil comprensi6n, es que 10 abordarelnos haciendo alguna referencia s6lo a manera de infonnaci6n general.
Tambien llalnado estilo conservador, ambos terminos notable y conservador- aluden invariablelnente a condiciones de privilegio social, politico y econ6mico de las minorias en su relaci6n con el poder. Desde sus comienzos, uno de los rasgos distintivos de este estilo ha sido su capacidad
de adecuaci6n alas
diversas
circunstancias socio - politicas
y econ6micas, con la misi6n
ulterior
call1bios que
de
oponerse
a
los
suponen
una
tmnsfonnaci6n de la sociedad. Te6ricos del conservadurismo hay pocos debido a que no existe un sistema filos6fico que comprenda
0
interprete al
conservadora, que encuentra en Edmundo Burke (1729 - 1798) a su m.aximo exponente y hasta podriamos llamarle refundador de esta corriente de pensamiento, en virtud de que quienes siempre encarnaron el poder fueron hostiles a los cambios.
El estilo
conselvador tanto en Argentina como en muchos paises del
democniticos mientras que las instituciones y sus privilegios esten garantizados, e incluso pueden adherir con fervor a los golpes de estado en caso de que el sistema democnitico haga tambalear el orden establecido.
j1wgmatico, motivo pOl' el cual tal vez, jamas se constituy6 en una fuerza mayoritaria que este en condiciones de competir con oh'as fuerzas la alternancia democratica en el poder . En nuestro pais ha sido notoria la participaci6n de estos sectores en gobiernos autoritarios.
Esto ha llevado a que j1ULtO
con muchos liberales, de reaccionaria extracci6n conselvadora, fonnen alianzas que, apelando al populismo intental1.reivindicar nna imagen que siempre estuvo demasiado alejada del sistema democratico.
la globalizacion de la economia. reduce
a
compo rtamiento s
De este modo la polltica se
postmodernistas,
siendo
10s
"yuppies" quienes se erigen en abanderados del exito. En la Argentina del descontrol privatizador, el estilo de Ius
notables supo, como consecuencia de su 16gica pragmatica,
~,~~sE-.-'Z..,~ ~'~'Z...~\..~""" ~~ """~\..~~~\..~~
~~"""'~~~'V
,") "Q~~, ~~",~~
'\.'Q't,
sombras, recuperar parte del protagonismo perdido a causa de su unpopularidad. En la historia de nuestro pais, una modalidad excluyente del estilo conservador durante mucho tiempo, fue la de recurrir a las pnkticas de fraude electoral para ganar las elecciones. Esto que tambien forma parte de su estilo, aunque mas no seClen su aspecto hist6rico, Ie signific6 a los notables, sobre todo Cl
los menos reaccionarios, tener que ser identificados como
11lit'mbros de
organizaciones
que
desprecian
el
sistema
dem<.xrclticoy en consecuencia, aspiran al modelo tecnocratico au toritario. En tal sentido ulternacional,
y pOl' ende
neoconservadurismo potencial.
y como resultado
del nuevo
orden
de la economia globalizada,
descarg6
en
1989
todo
su
el
virulento
Una nueva modalidad en el estilo de los notables
l'eemplazaria
a
la vieja: y
siempre
decadente
concepci6n
filugolpista, haciendo del pragmatismo un nuevo intento pOl' aniquilar las ideologias. El golpe de estado, al igual que "La hora de La espada"
de
Leopoldo Lugones, tenia sus minutos contados; era el tiempo de asestar otro tipo de golpe, aunque igualmente certero: EL goLpe de mercado, a goLpe de estado econ611lico. 2. EI estilo radical: el comienzo de una participaci6n
mas
amplia. Es dificil comenzar a definir el estilo que dio forma al partido
politico mas antiguo de America Latina, sin antes
menciOnar algunos aspectos de su origen, que inevitablemente 10 ubican a fines del siglo pasado, como un desprendim.iento natural de sectores conservadores. En aquellos ailos y hasta 1916 en que asumi6 la pnmera presidencia Hip6lito Yrigoyen, la politica argentina giraba en tOl'no al modelo conservador,
quien en sentido verticalista
digitaba todos los puestos politicos. Asi Julio Cesar de la Vega (15) expresa: "... Quizris sea esta una de Las causas fundanlentaLes
de La
('SCIba participaci6n
en La
nctividad
poLitica,
que ha tenido La mayoria y mas
de Los argentinas
a~ln del bajo grad a de politizaci6n
caracteriza a la mayoria de Los ciudadanos
... " .
que
Tanto la inmigraci6n masiva (rica en experiencias de lucha polltica y sindical) como la divisi6n internacional del trabajo,
con
Argentina
jugando
un
secundario
rol
agroexportador, e Inglaterra reasegurando su dominio a traves de la penetraci6n econ6mica, contribuyeron a la formaci6n de l.illa conciencia participativa
que si bien no se desarroll6
plenamente, estableci6 de igual modo las bases tanto del radicalismo como del socialismo argentino. El estilo radical en su aspecto policlasista experimenta en base a esta condici6n, contradicciones que los llevan a ser revolucionario en sus comienzos como primer movilniento hist6rico,
hasta
convertirse
en
un
partido
perdiendo su condici6n de mayoritario.
aburguesado,
Este hecho Ie abre las
puertas al peronismo, quien se erigini en eI nuevo protagonista de la politica argentina. La
composici6n
heterogenea
de
los
dirigentes
del
radicalismo, en donde militaban tanto representantes de la oligarquia - terrateniente - conservadora, como asi tambien y sobre todo, hombres de una clara concepci6n progresista, tal vez hiciera que la historia de este partido se debatiera entre rupturas tanto ideol6gicas como doctrinarias.
Incluso la modalidad del
" dicntelis11lo", corpor:i-zadaen la figura del "puntero radical", fue UIla
pnktica frecuente.
Sin embargo, no se puede negar que la historia de este j1artido centenario esrn estrechamente ligada a la historia del pais, fundmnentalmente A II/pliar la participaci6n
social, proponer
:iClltido nacional, privilegiar IlItcrnacional,
haber
consLlstanciarse
en los aspectos mas innovadores.
la justicia
c01itribuido
a
una politica econ6mica
con
social, practicar la neutralidad la
con los derechos humanos,
reforma
universitaria,
y
son algunos de estos
aspectos que sumados a la acci6n de hombres de innegable honestidad intelectual y publica como Alem, Yri~oyen, Balbul, Illia, Alfonsm y muchos otros, hicieron del estilo radical una pennanente refonnulaci6n de la etica Kraussiana. A pesar de esto, existen aspectos muy criticables en el estilo radical, especialmente en 10 que hizo a la participaci6n de ()lgunos de sus dirigentes
en golpes de estado,
como
0
IUlIl'ionariosde gobiernos autoritarios, mas alIa que los motivos hay em tenido par finalidad la transici6n democratica en su forma menos tramnatica. E1
espiritu
conservador
de
algunos
hombres
del
radicalismo haria opacar el sustento democratico del partido. E1 mismo Julio Cesar de la Vega recurre a Gabriel del Mazo, quien en su obra "El Radicalismo" asegura
que
la infiltraci6n
conservadora en la Uni6n Civica Radical es hist6rica. sentido el autar
En tal
cita una carta del dirigente conservador
Justiniano Posse dirigida
al doctor Ernesto H. Celesia: "...
Nosotros Ios viejos conservadores no nos haremos radicaIes, saIvo, es claro excepciones; particularmente,
pero Los menos arraigados de nuestro partido y
cierta morralla que nunca falta, si Io hara, y entonces
Ie aguaran el espiritu al vino, y el radicalismo perdera su fuerza proveniente de Loshombres probados, particularmente de Ios probados de epocas heroicas. Asi se aquietara y se infiltrara el espiritu conservador, y ese sera eLtriunfo nuestro ... // Hombres como Marcelo T. de Alvear, tal vez, reflejaron dentro del radicahsmo ese espiritu conservador. Hip6lito
Yrigoyen,
llegani
por
segunda
vez
a
la
presidencia, pero la proyecci6n de la crisis del /29 entre otras causas y el golpe de estado del 6 de setiembre de 1930 encabezado por Jose F. Uriburu, un general de clara tendencia gennan6fila, pondnin fin a los objetivos transformadores de la U.CR..
ASl dara comienzo una serie de contratiempos,
induyendo momentos hist6ricos de excepci6n como 10 fue el peronismo, en donde la interrupci6n del orden constitucional por 10s golpes de estado postergara, como en una constante, el
afianzamiento del u.nico sistema capaz de contenernos a todos: La democracia.
Seria casi una simplicidad intentar establecer un perfil que Jineahnente nos diera como resultado el estilo del peronismo;
0
mas min, seriClun reduccionismo si quisieramos encasillar al peronismo en un estilo detenninado.
De 10 que si podemos estar
seguros es que nos encontramos en presencia de algo que va mas alla de los limites y caracteristicas de un partido politico, donde los aspectos sociol6gicos de un pais, producto de un momento hist6rico mundial, seran las bases en donde se construira un inedito fen6meno nacional: EI movimiento,
cuya relaci6n lider -
pueblo inaugurara una nueva forma de hacer politica, antes inexistente en nuestra historia. La inteligencia y el pragmatismo de un lider carismatico como 10 fue
el general
Juan Domingo
Per6n, hizo que
aprovechara cada circunsmncia y momento hist6rico en favor de posturas, muchas veces contradictorias, que 10 alejaron de las personalidades de su tiempo.
Mientras algunos se preparaban
para ser competentes como politicos, el se erigia como conductar. EI escenario internacional de la decada del /40 mostraba daramente
tres ideologias en conflicto:
el capitalismo, el
comunismo y el nazi - fascismo, aunque por circunstancias
especiales los dos pnmeros
se aliaron en contra del tercero
durante la segunda guerra mundial. Per6n, quien habia estado en Europa como agregado militar argentino luego del golpe de estado a Yrigoyen, asimi16 ll1l1y dt:' cerca la concepci6n politica de Mussolini, la que en ll1lKhusaspectos reforzaria 10que despues se denomin6 La tercera po_-ici61l del 1JWvi111iento peronistn:
Ulla equidismncia entre el
indiyidualismo capitalista y el colechvismo marxism. Aqui seria -onveniente adarar que la T erce-ra Posicion el /V'louilJliento de Paises No ALineados,
nada hene que vel' con
de surgimiento posterior, el
l-lwl Sllstenta fundamentalmente una actitud en bloque ÂŁrente a las desigualdades impuestas pOl'las potencias hegem6nicas. POl'otro lado, la concepci6n corporativista del fascismo uifluy6 susmnciahnente en Per6n, sobre todo en 10 que hizo a la mgaruzaci6n Inovimiento.
de
los
sindicatos
como
brazo
politico
del
Desde el poder, el general multiplic6 la idea -
fuerza de un estado omnilnodo que intentaria transfonnar los aspectos de las estructuras sociales y econ6micas que hasta su llegada, expulsaron alas grandes mayorias populaTes, ya que el radicalismo habia perdido movilizaci6n.
su capacidad
de convocatoria y
La propaganda
oficialista, los medios de comunicaci6n
masivos adictos al peronismo, como as! tambien la exclusi6n y persecuci6n de los sectores progyesistas opositores, sumados a la ll,disimulada simpatia del Lider por las fuerzas del eje, fonnaron parte de una campana, que desde la maqumaria
del poder
estatal, poco tuvo de democratica y mucha de auto ritar ia. Este y otros aspectos del movimiento, hizo que muchos autores viesen al peronismo como una extensi6n continental del Fhiirer Prmcipen
0
prmcipio
del fhiirer de aquellos anos.
Precisamente en tiempo de la post - guerra, los salvoconductos y pasaportes ap6crifos otorgados a jerarcas nazis, como tambien 1ÂŁ1 contrataci6n de investigadores de muy dudoso intelecto cientllico fueron un ejemplo de ello. AtlTI
asi, es preciso reconocer que gran parte de 1ÂŁ1
1egislaci6n laboral
- de
mspiraci6n
radical
conh<ibuy6 a reivmdicar con relativa dignidad
y
socialista los derechos
sociales y politicos de los trabajadores postergados hasta ese
surgieron a la vida politica trantando de convalidar la doctrina justiacialista. Estas extremistas posturas van desde la patria socialista montonera
hasta el nacionalismo inspirador del G.O.D. (Grupo
de Oficiales Unidos), el nazi - fascismo de la alianza nacionalista y la triple A (Alianza Anticomunista Argentina), pasando por un neoperonismo
0
peronismo sin Peron, que se manifesto en la
decada del '60 durante el exilio del Lider. Precisamente Augusto T. Vandor
y
algunos
partidos
provinciales
peronistas fueron quienes, en acci6nconjunta
tambien
neo
con la c.G.T.,
contribuyeron a desestabilizar al gobierno radical del Dr. Illia. El comienzo de los mos '70 encontrani a un peronismo sediento pOl' gobernar en sus distintas versiones eleCtorales: "la del no", con aquel significativo lema: "Campora al Gobierno, Per6n al Poder"; y posteriormente la "remake" "Peron - Peron". Sin embargo los protagonistas ya no senin los mismos; el Lider, d ism.inuido fisicamente, no volveni a ser el que fue, y su esposa lsabel Martinez no poseia el menor rasgo que la acercara a Eva Duarte. Los extremos violentos, del cual el mismo Peron fue gestor, ya habian despertado,
y el terrorismo de estado se
encargaria de instalar la pesadilla.
A partir de 1983, y hasta 1989, el peronismo cambi6 su rol en el protagonismo
politico argentino.
Si bien no estaba
preparado para ser gobierno, su concepci6n del poder aunque debilirnda por la orfandad heredada, se limit6 a una oposici6n obstruccionista "democratico"
en
forma
sistematica.
Incluso
el
intento
de renovar las estructuras del Justicialismo a
partir de la derrota electoral de 1983, no fue otra cosa que 1a aventura ilustrada de rearmarse en un sentido monolitico, hecho tan
fiel
a
su
desestabilizadora
esencia.
El
traducida
comienzo en
14
de
paros
una
marcha
generales
e
innumerables huelgas sectoriales, se erunarc6 en la ofensiva ,utegorica de recuperarel
poder.
Tambien el ahogo financiero
g,jshonado en el exterior por algunos referentes de 10 que es el menem.ismo, contribuy6 eficazm.ente, como factor de tension, a sentar las bases de una economia con exclusi6n social. Sin emba rgo, y a pesar de la lejania doctrinaria con aquel peronism.o de los aiios '40, existe una convergencia conductal que perdura en el tiempo: " el fanatismo psicosocial pOl'mantener el poder", induso al costo de debilitar las institucicnes democraticas. Como hemos visto a modo de smtesis, seria imprudente encuadrar al peronislno en un estilo. En tal caso, podemos decir que p1 Inovimiento iniciado por Per6n es una suma de estilos que se JlOIll'l/
dl' manifiesto seg~ln circunstancias hist6ricas, politicas, sociales
y
eco11.611licasy en Las que, como nadie, su Lider supo llenar eL vacio de pocier dejado por La tradicionaL dirigencia poLitica. Un apartado esperial mereceria el tratamiento de la figura, hay
transformada
~'anvicci6n
el
en
-lito, de quien
esp .ritu
movim.iento obrero:
combativo
Eva Per6n
0
y
fuera
por acci6n y
revolucionario
del
simplemente Evita para las
ll1ayorias populares. Por razones estrictamente tcmaticas no vamos a ocuparnos de
S11
que
labor. Sin embargo, y s6lo a manera de ucronia, creemos dificilmente
Pere
hubiera
logrado
esa
dimensi6n
trascendental, de no hab路 r sido por el protagonismo politico de esta mujer.
Hoy, y
1
is aHa de los odios y diferencias
irreductibles de las que fue objeto, su figura permanece inc6lume ala erosi6n en la memc,ria colectiva de todo un pueblo.
4. Menem: El gran simulador. Pocos han sido 10s politicos capaces de generar en 1a Argentina
sentimientos
que
recorran
tan
definidamente
1a
dn,hiva1encia sensitiva de su pueblo. La aventura de pretender definir a un lider como Menem, resu1taria
ill,
esfuerzo que seguramente se agotaria en el mismo
intento, de no ser por el auxilio de otras disciplinas, ademas de la politica. Antiinte1ectua1 por antonomasia,
e indefinido casi pOl'
definicion, Menem es para e1mundo de 1a imagen, 10 que 1a luz pel rCl e1prisma:
Varialad concentrada.
Sus comienzos en La Rioja hicieron que acunara 1a figura del ccHldillo, mezcla insa1ubre de mesianismo
autoritario
y
11i:1ll-'lTwlismo populista y a la que el propio Peron definiera con ircmica l'apidez, de "pintoresca" Una vez iniciado su transito hacia e1 poder fue dejando a t'ada paso, junto con su aut6ctono ropaje feudal, 1a insatisfaccion que produce 1asimulacion y 1afrivolidad. Ya 1egitimado por accion del voto popular, (-~nCLlentraen
esta
transferencia
su
propia
vision
Menem de
la
l. "Establishment". Incluso su renuncia
拢11
Islam y su desvio casi
esoterico al cristianismo cat6lico, configura un oportunismo de dificil asimilaci6n cultural,
sobre todo para quienes entienden
que los valores religiosos son irrenunciables, y mucho menos, intercambiables como simples productos del mercado. Probablemente
el aspecto mas resistido de este estilo
U1J10Vador sea el referido al nepotis11lo desenfrenado en el manejo dt' cdgunos resortes del Estado.
Desde algunos miembros de Ia Corte Suprema de Justicia, hasta embajadas de distinto peso en la gravitaci6n del concierto internacional, Menem premia; especialmente
siempre premia la "leal tad",
si ella cohabita en forma entmfiable con la
La march a hacia una路 democracia restringida, tuvo sus l'Olll.it'HZOS en 1989, apareciendo nuevmnente en el horizonte, n)])l.Ouna revelaci6n de su conciencia magica, la grotesca idea de un nuevo mandato.
5. El Unipartidismo: partido imico y partido dominante. El unipartidismo
reconoce dos modalidades: el partido
l-lnico y el partido dominante. Denominamos
partido
U11lCO
a aquel
que
instala
la
dictadura correspondiente a los extremos ideo16gicos ( fascismos y COIHt.mismo del siglo XX), caraeterizados por la concentraci6n absoluta y el continuismo perpetuo del poder. El partido dominante,
cuyo ejemplo mas elocuente estuvo
representado por el P.R.I. - Partido Revolucionario Institucional surgido a principios de siglo en apoyo ala revoluci6n mexicana, es tambien el u.nico partido, pero a diferencia de la modalidad anterior, no pennite que sus gobernantes puedan ser reeleetos, prohibici6n que se hace extensiva a los funcionarios de cada administraci6n.
Esta particularidad
proporciona
al partido
dominante un imagen mas democratica que puede oscilar entre posturas moderadas tanto de derecha como de izquierda, que si bien ofrecen en el orden interno cierta estabilidad
politica,
favorecen igualmente la propagaci6n y el fortalecimiento de la ,:orrupci6n.
En terminos
e1ementa1es y coincidiendo
con e1 Dr.
Mariano Grondona (16) podemos decir que La corrupci6n siMt'1Jta politico
surge cuando
eL interes
privado
de un
de Los juncionarios
irru11lpe en el recinto sagrado deL interes pubLico. De
tal
l11.odo observamos
que
e1 fen6meno
de
1ÂŁ1
('orrupci6n tiene una re1aci6n directa con 10s sistemas politicos. LI ,mrupci6n
siempre existi6, Y probab1emente existini siempre,
en tt'nd idClno eOlno un estigIT1.aen su re1aci6n con 1a pobreza, situcKi6n que debe ser modificada, sino pOl' aquella acertada percepci6n de James Wilson acerea de que a1hombre ordinario JlOl1t'ante tentaciones
Sf
10
extraordinarias.
Todos 10s paises se encuentran frente a 1a inevitabilidad de hechos 0 aetos de corrupci6n, sin embargo, mientras que pard algunos
son s610 eso: Aetos, -que
nnltrolados
par
pOl' ser aislados-
el sistema, en paises como e1 nuestro,
son 1a
,()rrll~xi6n se insta1a en forma endemica, haciendo a1 sistemcl lurru pto. En tal caso la "Cleptocracia" - que es pOl'definici6n el gobierno
de
10s ladrones-,
emerge
inexorable
negando
1a
dim.ensi6n etica del Estado, y pOl'extensi6n, de sus instituciones. En 1a Argentina, 1a corrupci6n tiene nombres, y pOl' sol-me' tudo, Clpellidos.
E1 mapa geopolitico de nuestro
pais y su
consecuente organizaci6n
econ6mica y social, responde
en
muchos casos a verdaderos feudos, 10 cual supone obviamente, estructuras de fuerte arraigo precapitalista, las que se valen del temor como forma de control social. La idea de encontrar a la corrupci6n generalizada, es decir sistemica, como un mal tipicamente latino, esgrime una certeza relativa, ya que en sus origenes este fen6meno fue privativo de sistemas
latifundistas,
los que negaron
transformar
la
realidad
sistematicamente
posibilidad
de
social, politica
econ6mica.
En este sentido la Ley de Enfiteusis
la y
configur6 su
marco juridico. En la actualidad asistimos absortos a la singular generosida.d
lnenemista que hace publico el endeudamiento y privatiza la rentabilidad,
haciendo
que el modelo, tal como 10 hemos
concebido, proyecte las falacias de una no tan nueva forma de corrupci6n: econ6mico.
La exclusi6n social par la concentraci6n del poder
En una democracia representativa, puede ocm'rir que el sistema de partidos politicos esre estructurado
a partir del
predominio de dos 0 mas partidos. En el primero de los casos, se denomina bipartidismo, y como 10 indica el termino, a la existencia de dos partidos mayoritarios que serm
las alternativas de poder. Esto no
significa que no existan otras fuerzas politicas en competencia, s6lo que estas no alcanzan una importante gravitaci6n electoral. Es el caso de paises como Estados Unidos, donde el Partido Republicano (conservador), y el Partido Dem6crata (liberal) han monopolizado a traves del tiempo la representaci6n exc1usiva de los ciudadanos, mientras que las diferencias de dmbas fuerzas se reducen a cuestiones metodo16gicas
0
de
matices -estilos-, pero siempre dentro del sistema capitalista. En el segundo caso, es decir, cuando hay mas de dos partidos politicos con posibilidades de acceder al gobierno, el sistema se denomina pluripartidista a multipartidista,
como son los
ejemplos de Belgica, Holanda y los paises escandinavos.
En la Argentina, a traves de su historia la condici6n bipartidista fue sensiblemente modifiCada debido a la aparici6n, seglln el momento hist6rico, de fuerzas politicas a la que podemos llamar emergentes. Asi, el peronismo hace su aparici6n en la escena politica, en gran parte debido al vacio dejado por la vieja dirigencia dividida entre conservadores y radicales. primeros pOl' carecer de sensibilidad
En el caso de 10s
social y vergonzosas
pnicticas politicas como el fraude electoral, y en el de los segundos, la proscripci6n, la orfandad politica y su consecuente falta de organizaci6n, como cierto olvido doctrinario, hicieron que las demandas del pueblo no fueran interpretadas seg6.n 10s tiempos que conian. Un hecho que refuerza 10 exrpresado fue la disoluci6n en 1945 de la agrupaci6n F.O.R.J.A.-Fuerza de Orientaci6n Radical de la Joven Argentina- y eI posterior desplazamiento de sus miembros, ya en libertad peronista.
de acci6n, hacia el movimiento
Arturo Jauretche (17), uno de los pensadores mas
agudos de su epoca, fue inspirador y uno de los dirigentes de dicha organizaci6n. Mas recientemente
podemos
mencionar
las alianzas
politicas - tan circunsmnciales como efimeras - que en la elecci6n
del ano 1973 representaron un conjunto de fuerzas denominadas de centro -aunque su verdadera ubicaci6n fue la derecha- y que lograron un caudal de votos considerable. Con la recuperaci6n de la democracia en 1983, tanto la U.Ce.De. como el P.I. -ambos fagocitados por el menemismotam.bien sorprendieron a propios y extranos. Incluso el MO.DIN, l'Olnandado
por
el
"CUltisistema" Aldo
Rico,
tuvo
su
representaci6n popular como nunca antes 10 imagin6, aun en bt'm.pos
en que la "cosmetica" era su hernunienta para hacer
politica. Bondades del sistema. Pero sin lugar a dudas las elecciones generales de 1995 encontraron peronistas radicales,
en el Fre.Pa.So. -una disidentes,
alianza
socialistas, cristianos
e independientes-,
a
la fuerza
compuesta
por
progresistas,
ex
que
el
rompi6
bipartidismo hist6rico practicado en la Argentina, logrando un sorprendente segundo lugar, que desplaz6 a la U.CR.. Entonces y a manera de perspectiva hist6rica, entendemos ,1 IdS
fuerzas politicas elnergentes como una resultante natural en el
desgaste politico de aquellas tradicionalmente desgaste
concurren
factores
que
acabada1l1ente en su dimension
mayoritarias.
interpretan cultural,
En este
al fen6meno
mas
sociopolitica, economica,
hist6rica y psicoL6gica; cuya c011lpLejidad escapa aL analisis de nuestra obra. Sil, embargo, hay una pregunta que estas fuerzas deben hc1Cerse,y esta referida a la continuidad en el tiempo de su propia existencia e identidad para evitar caer, COlnoen casos cmtt'riores, en eso que Inuchos han llalnado "el sindro11le de La tercera fuerza" .
1. Una aproximaci6n al sigI"lificadode la politica.
2. La apoliticidad: un peligroso signo de nuestro tiempo
Existen terminos pertenecientes al lenguaje cotidiano que llevan consigo una gran carga emocional.
Es por ello que al
l.'oncepto de Politica resulta dificil precisarlo, mas aun si en este intento queremos lograr cierto rigor en alcance de su significado. La raiz etimol6gica de la palabra politica es de origen griego - polis: Ciudad - Estado -, sin embargo procuraremos completar el concepto con algunos de los diferentes usos que derivan del tennino. As! entonces cuando hablamos de politica podemos hacer referencia tanto a la filosofia politica como a la ciencia politica; d
0
In politica en su faz tecnico - practica, es decir, a la politica
lomu <-ute. En tal sentido Ezequiel Ander Egg (18) nos explica algunas
de las derivaciones
semanticas del vocablo: ..."La
Politica (en femenino) hace alusi6n a una actividad humana, mientTas que 10 politico (en neutro) es una elipsis referida a la cosa politica, que tiene su correlato en expresiones como 10 econ6mico, 10 social, ya que como estas, designa una realidad interhumana, si bien su ambito se reduce a todo aquello que se crea, mantiene
0
transfonna
pOl' medio
de
la actividad
Sin caer en reduccionisluos que arriben a un destino sinlplista de este caso, podemos asegurar
que 10 cotidianu
tdlllbi~'n supone una dimensi6n politica, ya que el hombre en relaci6n con ob-os hOlubres, despierta al mundo como el nahual
Con la evoluci6n de 105sistemas vemos la importancia que ddql1iere la politica, la cual no puede ni debe ser ignorada, ya Lj Lit'
d tc' t'l1a su rgiran decisiones que afecta.nin la convivencia
Slh-l"d
en todos los niveles
V -'
anlbitos a 105cuales el hOlnbre se
Es pOl' todo ello que en el intento de aproxinlarnos a una definicion que darifique el problema, diremos: La politica filosofia,
ciellcia
alltollolllias cstwtio
praxis
com:eptltales
cielltifico
ttel potier
0
social;
glllJCnUlmentales,
desigJUl - COil valoraciou - el ftl1ldmnellto
tie Los fellolllellos todo
esto,
1Il0dificalldo
tie SitS ell el
ell relacioll COil la tiimilllicil
ell el marco 0
axio16gico
COULD
tie Las estmctllrllS
no el ordell tie couvivellcia.
lUt'lWionado:"La politica es la ciencia y el arte de 10concreto, de 10concreto total en orden al bien comun".
Entendida
la apoliticidad
como neutralidad
reviste caracteristicas de ignorancia,
irresponsabilidad
politica,
y c011lplicidad.
Un peligroso signo de nuestro tiempo es la forma en que los
llcunados "apoliticos" bastardean y defenestran el concepto
dv poIitiG:l. Esta abstencion -
de
lC1
0
purismo cUiico- aleja al hombre
dimension etica que impregna 10 politico, alentando el
descompromiso y la despolitizacion. Asi, la ignorancia
se hace presente cuando se desconoce
que la pmblematica sociopolitica y economica nos at:ailea todos. T48mbien decimos que es una actitud irresponsable
al
observar la apatia de quienes depositan interes en un mundo red ucido solo a los lunites egoistas de su propia existencia; in.<.1 ividualismo que crea pOl' otro lado la imagen falsa de ser t'LJuidismntey objetivo respecto de la realidad. Finalni.ente, insolidaria
la
c011lplicidad
de la neutralidad
emerge
como
y la apoliticidad,
resultante siendo
pasividad posicion tomada a favor del orden establecido.
la Asi,
10s apoliticos se convierten en aliados inconscientes de un sistema que profundiza la injusticia y la desigualdad.
Sill eUlbargo y ya a modo de conclusion, creemos que el l'dificio de una realidad distinta solo se consITuye a partir del ndvenimiento de un hombre nuevo, solidario, participativo y critico.
Aunque
tambien
10 suficientemente
ingenuo
t'speranzado como para pensar que el cambio es posible.
y
Esta obra, que ha sido concebida desde el respeto que lll.ereCe todo
lector, y mas
alla
de
las limitaciones
que
seguramente se encontraran en ella, tiene pOl' {mica firwlidad Clcercaralgunos aspectos elementales referidos a la teoria y a la ~'ienciapolitica, ya que debido a la magnitud y complejidad que t-'ncierran estas disciplinas, seria imposible pretender abarccnlas en
SLl
totalidad. POl'0:.1"0 lado, es probable que
certeza relativa
La dinamica
10
que hoy nos muestra con
del fen611leno politico,
maiiana sea
objeto de l.Ulacritica mas elaborada y profunda. Muchos autores con sensibilidad y compromiso aseguran que quienes
escriben
0
intentan
desarrollar
intelectual 10 hacen desde la angustia,
una
actividad
ambito natural de las
imposibilidades del hombre. Sin embargo, tambien creo que es ,'ierlo
que
esa
angustia
debe
general'
conductas
sistema politico, logre el desarrollo pleno del hombre. creer que este h'abajo buscara enconh'ar ese sentido.
que
Quiero
Pr610go. Introducci6n. Capihtlo I:
1. La democracia; un sistema imperfecto pero perfec tibIe. 2. Autoritarismo y totalitarismo: Los antisistemas.
C'pihdo II:
1. La solidaridad: una acci6n para el cambia. 2. El posbnodernismo: una aventura del neoconservadurismo. 3. Educaci6n y Politica: Los olvidos conscientes del modelo conservador.
(,lpill.llo III:
1. Los partidos politicos: Los vehiculos de la demoCl'acia. 2. La globalizacion econ6mica: La informaci6n como valor restringido.
Capitulo IV:
1. Revoluci6n y golpe de estado: la violencia en la politica.
Clpitl.llo V:
1. La ambivalencia de la religi6n: La contradicci6n liberaci6n - opresi6n.
Capihllo VI:
1. Los estilos politicos: el caso Argentino 1.1 - El estilo politico de los notables. 1.2 - El estilo radical: el comienzo de una pal'ticipaci6n mas am plia. 1.3 - El estilo peronista: los aiios '40. 1.4 - Menem: el gmn simulador 1.5 - El unipartidismo: partido unico y partido dominante. 1.6 - La corrupci6n: del acto de cOlTupci6na la cleptocracia.
(','pitulo
VII:
1. Las ÂŁUerzaspoliticas emergentes: el sll,drome de la tercera fuerza.
Capitulo VIII: 1. Una apro>..imaci6nal significado de la politica.
2. La apoliticidad: Un peligroso signa de nuestro tiempo.
INDICE Pag. Pr6logo.
13
In trod ucci6n.
17
Capitulo I:
20
Capitulo II:
30
Capitulo III:
40
Capitulo IV:
54
Capitulo V:
64
Capitulo VI:
70
Capitulo VII:
92
Capitulo VIII:
98
Palabras Finales.
104
2. Sonnan Guy
3. Alfonsin
"La revoluci6n conservadora americana" "La soluci6n liberal" - Edit. "Atlantida" Buenos Aires, 1985. "El estado minimo"
Raul
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ESTA PRIMERA EDICION DE 2.000 EJEMPLARES DE LA POLITlCA u "'de HUMBERTO ANTONIO PALMJERI SE TERMINO DE IMPRIMIR EN JUNIN, MENDOZA EN ELMES DE AGOSTO DE 1.997
HUMBERTO ANTONIO PALMIERI Naci6 en Gra/. San Martin, Mendoza, el 16 de Noviembre de 1961. Es casado .con Patricia M. Labrador (34), Psic6loga, y
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tiene dos hijos: Manuel (8) Y Florencia (6). Estudi6 Ciencias Politicas en Buenos Aires y su pensa-
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miento ha sido rejlejado
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tanto en articulos de diarios capitalinos como en los de nuestra provincia. En la actualidad alterna su actividad comerdal (6ptica) con la docencia, desempeiiandose como projesor de historia y sociologia en ~l nivel secundario. La "Politica en Breve", su primer trabajo de importancia, sera el comienzo de un nuevo desafio.