Iglesias en solidaridad mundial. En camino hacia una mayor sustentabilidad by Fundación Hora de Obrar

Iglesias en solidaridad mundial

EN CAMINO HACIA UNA MAYOR SUSTENTABILIDAD

QUERIDAS HERMANAS, QUERIDOS HERMANOS

PRÓLOGO

LO QUE SOSTENEMOS

NUESTROS PAÍSES PROMOCIONADOS

ENFOQUE Ecoteología

IN SITU Uruguay

IN SITU Argentina

IN SITU Hungría

IN SITU Rusia

NUESTROS PROMOCIONADOS

Durante la preparación de este cuaderno, COVID-19 dio vuelta a nuestras prioridades y a nuestras vidas tal como las conocíamos. La pandemia y las medidas para su contención han provocado trastornos sanitarios, económicos y sociales. Las respuestas de los gobiernos a esto han variado en cuanto a efectividad y responsabilidad. Sin embargo, personas valientes, iglesias y otras organizaciones de todas partes, que respondieron con rapidez, compasión y profesionalidad, han demostrado que la solidaridad y la consideración hacia las poblaciones más débiles son posibles. En Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen), también tuvimos un contacto intenso con las instituciones hermanas. Aprobamos nuevos proyectos o modificamos los existentes en corto plazo para que las instituciones hermanas puedan apoyar mejor a sus comunidades en crisis. En Guinea, nuestra iglesia hermana proporcionó capacitación para ayudar a contener la epidemia. En el Líbano y en Ucrania, los pastores apoyaron a las familias más necesitadas y marginadas con paquetes de alimentos y artículos de higiene. Y en América Latina se aprobó un proyecto regional de y prevención por parte de las iglesias. Por supuesto, a pesar de la pandemia del coronavirus, Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) continúa trabajando en otros temas. En los últimos años, las iglesias han abordado cada vez más cuestiones de sustentabilidad, tanto en el plano teológico como en el práctico. Hemos consultado a nuestras instituciones hermanas respecto de sus actividades y estamos orgullosos de poder presentárselas. El formato de este cuaderno ha cambiado en comparación con los informes anuales de años anteriores. En lugar de un informe anual, en el futuro publicaremos cuadernos a intervalos de varios años, cada uno centrado en un tema importante, como aquí el tema de la ecoteología y la sustentabilidad de las iglesias. La sección financiera del hasta ahora informe anual se ha separado y se seguirá produciendo y distribuyendo de manera anual. Los proyectos que les presentamos en este cuaderno sólo son posibles de realizar gracias a sus contribuciones, colectas y donaciones. ¡Muchas gracias por su apoyo! Su

CRÉDITOS EDITORIALES

Pastora Dra. h. c. Cornelia Füllkrug-Weitzel Presidenta de Pan para el Mundo 3

LO QUE SOSTENEMOS

SOLIDARIDAD INTERECLESIAL

Durante más de 60 años el programa de ayuda de las iglesias protestantes ha apoyado a iglesias, organizaciones eclesiásticas e instituciones ecuménicas de todo el mundo en sus esfuerzos por ayudar a las personas necesitadas, dar testimonio de la fe cristiana en palabras y obras e intercambiar ideas con los hermanos y hermanas de la comunidad ecuménica. Iglesias de todo el mundo dependen de ayuda solidaria. A menudo tienen que consolidarse en condiciones políticas y económicas difíciles. Cuando las estructuras estatales no existen o no alcanzan, las iglesias y las diversas organizaciones eclesiásticas a menudo participan activamente en el trabajo social y diaconal. De esta manera cumplen una importante función en la comunidad, por ejemplo, en la atención de la salud, el cuidado de los ancianos y las escuelas. Llaman la atención sobre cuestiones y problemas importantes y se comprometen por el cambio social. En muchas iglesias la gente se compromete de manera impresionante por el testimonio cristiano y los débiles de su sociedad. Los programas eclesiales de educación les ofrecen a laicos y laicas así como al clero nuevos impulsos para el servicio en las congregaciones. Las ofertas educativas para niños, niñas y jóvenes abren perspectivas para un futuro mejor. Los proyectos ecuménicos exigen un intercambio entre las iglesias y las denominaciones.

CÓMO TRABAJAMOS Junto con las iglesias regionales protestantes de Alemania, Iglesias Ayudan a Iglesias proporciona apoyo financiero a proyectos dirigidos por las instituciones eclesiales hermanas, realiza consultas con ellas y ayuda en la formación de redes. Nuestro enfoque regional es apoyar a las iglesias y organizaciones eclesiásticas en Europa Oriental y Sudoriental, donde muchas personas se enfrentan a pobreza y otras dificultades. Las esperanzas de los años noventa de que se produjeran procesos de transformación económica socialmente equilibrados se vieron defraudadas en muchos lugares. Las instituciones socialmente comprometidas apenas tienen acceso a promociones.

Principios de Financiación Un principio básico importante de la promoción es la orientación ecuménica. De esta manera queremos contribuir al diálogo, entendimiento y cooperación entre las iglesias y las denominaciones. En especial, también apoyamos aquellas iniciativas que tienen poco acceso a otras fuentes de promoción. El fondo para pequeños proyectos permite, por ejemplo, una asistencia flexible y a corto plazo para las iglesias más pequeñas. Al hacer sus promociones, Iglesias ayudan a Iglesias sigue una estrategia de promoción desarrollada conjuntamente con sus iglesias patrocinantes alemanas. Nuestra política se puede encontrar en: www.kirchen-helfen-kirchen.de

Desde 2012, Pan para el Mundo ha sido responsable de Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) como programa independiente. El trabajo de nuestra organización es supervisado por una subcomisión del Comité de Servicio de Desarrollo y Ayuda Humanitaria (AEDHH [por sus siglas en alemán]). UNIDOS, REFORMADOS Y ECUMÉNICOS Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) es apoyado por muchas iglesias unidas y reformadas con sus presupuestos y colectas. El grupo de trabajo Iglesias Cristianas, la Federación de Iglesias Evangélicas Libres y las iglesias luteranas también están comprometidos con el programa. Como resultado, Iglesias ayudan a Iglesias tiene un perfil unido y reformado, pero pone gran énfasis en la cooperación ecuménica. Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) apoya a los consejos cristianos nacionales tanto como a proyectos con patrocinio ecuménico y hermanos eclesiales de la Ortodoxia.

portantes e impulsar cambios. Por medio de una encuesta a nuestras iglesias hermanas de todo el mundo, hemos reunido mucho material valioso, tanto sobre el aspecto teológico como sobre la práctica de la ecoteología. También preguntamos a las iglesias hermanas respecto de qué hacen en concreto para apoyar el desarrollo sustentable. En este cuaderno les presentamos los resultados de la encuesta. No queremos evaluar las distintas iniciativas. Con relatos de los proyectos seleccionados de Hungría, Rusia, Argentina y Uruguay, le ofrecemos una mirada en profundidad al trabajo de algunas de nuestras organizaciones hermanas. A pesar de que las iglesias hermanas viven en contextos diferentes y se encuentran en distintas etapas de reflexión y ejecución de las actividades referidas al tema, hay muchas similitudes. Estamos convencidos de que el intercambio y la generación de redes entre las instituciones hermanas y otros actores interesados pueden abrir mejor el camino del discurso hacia la acción concreta en el sentido de la sustentabilidad.

PROYECTOS SELECCIONADOS Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) apoya a iglesias y a organizaciones eclesiásticas, también de manera social y política, con el fin de llamar la atención sobre cuestiones im-

NUESTROS PAÍSES PROMOCIONADOS RUSIA

UCRANIA En la “Casa de la Misericordia”, las personas mayores con discapacidades encuentran un alojamiento de emergencia, donde reciben una cama, comida y atención médica para que no tengan que vivir en la calle. Voluntarios les ayudan a recuperar sus papeles para que puedan solicitar jubilaciones y beneficios sociales.

BULGARIA La fundación “Diaconía y Misión” apoya el desarrollo de la teología práctica de la Universidad y de la Diócesis de Veliko Tarnovo. El compromiso de los estudiantes y los laicos implicados beneficia a los grupos socialmente desfavorecidos, como por ejemplo las personas mayores, los presos y los miembros de la minoría romaní. CUBA

LITUANIA

POLONIA

BIELORUSIA

UCRANIA

REPÚBLICA CHECA ESLOVAQUIA

RUMANIA Con una exposición itinerante sobre el tema “Soy un extraño extraños en la Biblia”, en especial para los jóvenes, y la generación de una red de información de actores cristianos, la Iglesia Evangélica A.B. de Rumania sensibiliza respecto de la situación de los refugiados en el país.

HUNGRÍA

ITALIA

RUMANIA SERBIA BULGARIA

KIRGISTÁN

GRECIA LIBANO PALESTINA

SIRIA

PAKISTAN

INDIA

GUATEMALA EL SALVADOR

NICARAGUA

GUINEA

BURKINA FASO

VENEZUELA COLOMBIA

REPÚBLICA RUANDA DEMOCRÁTICA DEL CONGO TANSANIA

BRASIL

KIRGISISTÁN La tradición del secuestro de novias y de los matrimonios forzados ha vuelto a aumentar en Kirguistán desde la caída de la Unión Soviética. Debido a la gran pobreza, las jóvenes generalmente no ven otra alternativa y se someten a ello. La iniciativa “¡Detengan la violencia!” de la Iglesia Evangélica Luterana de Kirguistán las apoya. La iglesia ofrece seminarios a las alumnas de 15 a 17 años de edad, así como al personal docente y de trabajo social para proporcionarles información sobre la situación jurídica y los servicios de asesoramiento.

LITUANIA El abuso de drogas es todavía un fenómeno reciente en Europa oriental. Casi no hay estructuras para ayudar a los afectados. La Asociación Diaconal Lituana ayuda a hombres jóvenes con problemas de adicción a formarse para el mercado laboral primario por medio de proyectos residenciales supervisados, con el apoyo profesional de Diakonie Schleswig-Holstein.

PERÚ SAMBIA BOLIVIA

EL SALVADOR El centro ecuménico Esteban trabaja con niños, niñas y jóvenes en riesgo social. Se les ofrecen oportunidades de formación y trabajo social juvenil a lo largo de la ruta de huida a los EE.UU.

Países en los que Iglesias ayudan a Iglesias promocionaron proyectos durante 2019 y 2020. 6

ZIMBABWE

URUGUAY

ARGENTINA

PERU El “Instituto de Investigaciones Colectivas y Solidarias”está empoderando a las mujeres mediante una campaña de capacitación en teología feminista y capacidades de liderazgo para que puedan desempeñar un papel más activo en sus comunidades.

BRASIL El Consejo Nacional de Iglesias Cristianas (CONIC) contribuye a la integración de los y las migrantes haitianos y venezolanos con una campaña de sensibilización contra el racismo en las iglesias evangélicas, en especial en el sur del Brasil, y con ello responde al hecho de que el extremismo conservador está cobrando fuerza en el Brasil.

SUDÁFRICA

SUDÁFRICA El centro universitario ecuménico UJAMAA trabaja en campañas antidiscriminatorias con víctimas de la violencia de género. Además organiza iniciativas de sustentabilidad con los líderes comunitarios de las municipalidades.

PALESTINA El centro ecuménico de teología de la liberación Sabeel apoya a los miembros comunitarios, en especial a las mujeres y a las jóvenes adultas en un diálogo democrático con los líderes de la iglesia para influir en sus decisiones.

“Dios les ha dado a los seres humanos una responsabilidad por la tierra”.

ENFOQUE

“NECESITAMOS UN PROFUNDO CAMBIO EN LOS CORAZONES“ Sustentabilidad en la Teología y la Práctica de Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen).

La cuestión de la responsabilidad por la creación en vistas de los cambios dramáticos causados por el cambio climático se refleja a menudo en las iglesias y las congregaciones bajo el término de ecoteología. Se trata de un movimiento de reflexión teológica que anima a los cristianos y las cristianas, pero también a las instituciones eclesiásticas de todo el mundo, a repensar y actuar en el sentido de preservar la creación. Sólo en 2019 ha tenido lugar un número impresionante de eventos y acciones tanto de la Iglesia Evangélica de Alemania como de las iglesias regionales, las agencias misioneras y las congregaciones sobre el tema. Esto dio lugar a nuevos procesos y llamamientos públicos, como por ejemplo el proceso internacional de la conferencia y el llamamiento de Wuppertal “Kairos de la Creación”1. El tema es aún más conmovedor en un contexto ecuménico: en 2019, la Iglesia Evangélica Luterana de Baviera colocó el tema de la ecoteología en el centro en su consulta con sus iglesias hermanas del Brasil. El país que aparece regularmente en los titulares debido al ritmo vertiginoso de la destrucción de los bosques y de los medios de vida de las personas. En octubre de 2019 se celebró también una conferencia internacional, con el apoyo de Pan para el Mundo y la participación de las iglesias hermanas de Iglesias ayudan a Iglesias (KhK [por sus siglas en alemán]), sobre “Las iglesias de África meridional como agentes de la sociedad civil para la sustentabilidad ecológica”. La conferencia sirvió de llamada de atención sobre si el papel

de las iglesias debe cambiar y cómo debe hacerlo. En vistas de los enormes desafíos del cambio climático, y decidió compromisos concretos para los años venideros. Las iglesias pueden desempeñar un papel crucial y hacer una importante contribución a un mundo más respetuoso con el medio ambiente: ofrecen orientación y asesoramiento de manera teológica y moral, se encuentran cerca de la gente en la práctica y la apoyan en la ejecución de iniciativas y proyectos. Invitamos a nuestras instituciones hermanas a participar de una encuesta sobre el enfoque teológico de las cuestiones ecológicas y les preguntamos cómo abordan de manera bien práctica estos desafíos. La mayoría de las respuestas procedieron de las instituciones hermanas de América Latina. También hubo una buena respuesta de África, con pocas respuestas de Europa oriental y el Oriente Medio. El nivel de actividades sobre el tema en las regiones ocurre en la misma proporción. Como suele ocurrir, la falta de respuesta o las respuestas vacilantes también resultan significativas.

Aspectos teológicos y relevancia de la sustentabilidad Las fuentes teológicas, que ofrecen orientación para las actividades en la lucha contra el cambio climático, para la sustentabilidad y para la integridad de la creación, son múltiples.

El primer libro de la Biblia, el Génesis, es un importante punto de referencia para muchos, incluyendo a las instituciones hermanas de Iglesias ayudan a Iglesias. Los relatos bíblicos de creación pueden interpretarse en términos de una teología de mandato: “Dios les ha dado a los seres humanos una responsabilidad por la tierra”. También pueden ser entendidos en el sentido de una crítica teológica del antropocentrismo: “El ser humano y todo el medio ambiente son parte de la creación, y por lo tanto el ser humano no debe ubicarse por encima de lo creado.” La primera interpretación se refleja en el Consejo de Iglesias de Cuba (CIC), que escribe en vista del Génesis: “Lo que el Creador evidentemente pretende es el ejercicio de la economía, es decir, el cuidado y la correcta distribución de los bienes que están al alcance de las manos humanas, y destinados a la alimentación y al bienestar de todos los seres creados”. La Iglesia Anglicana de Ruanda (IAR) infiere de ello, que los desafíos del cambio climático y de la pérdida de biodiversidad son un fracaso de los seres humanos en el cumplimiento de su papel como administradores de la creación de Dios. En las respuestas de las instituciones hermanas de Europa oriental también se hace hincapié en la responsabilidad humana por la creación. La Iglesia Ortodoxa de Bulgaria se refiere a la tradición ortodoxa en la que el término oikonomia (economía doméstica) nos recuerda que el ser humano es responsable por la naturaleza y el mundo.

La segunda interpretación proviene de la respuesta de la Fundación Hora de Obrar (FHdO) de Argentina. FHdO nos invita a “abandonar la visión antropocéntrica para entender que estamos en comunión con toda la naturaleza, que la creación divina es una e indivisible, que todo se encuentra íntimamente relacionado y en equilibrio”. La Asociación Boliviana Uniendo Mano por la Vida (UMAVIDA) en Bolivia recoge esta idea y añade, “que no se trata sólo de teología y no es sólo espiritual, se trata de cuidar la tierra, el medio ambiente, vivimos bajo un techo común que Dios ha creado”.

Un punto de referencia importante para la ecoteología son los relatos bíblicos de la creación.

La Biblia pide que se cuide el Jardín del Edén

Balázs Acsai pone tierras a disposición para el proyecto de refugiados “Granja Barak”. El objetivo es un establecimiento administrado de manera ecológica.

En Paraná, Argentina, se utilizan semillas por lo general modificadas genéticamente y grandes cantidades de plaguicidas. En esta chacra Gustavo Erbe está probando la agricultura ecológica como una alternativa. 10

La Comisión Ecuménica para el Desarrollo Humano (ECHD) en el Pakistán, una de las pocas instituciones hermanas de Iglesias ayudan a Iglesias en Asia, sitúa la labor ecuménica en la creación como una totalidad y el imperativo bíblico de la justicia, prestando especial atención a los pobres y su empoderamiento. Pensadores y teólogos anteriores en la historia de las iglesias han formulado de manera similar una base teológica para las actividades ambientales de la iglesia: Francisco de Asís, por ejemplo, alabó a Dios por toda la creación - sol, estrellas, aire, tierra, agua, y “tus criaturas” - en su Cántico del Sol. Encontramos interpretaciones similares entre los importantes patrocinadores evangélicos y ecuménicos en Alemania y en todo el mundo: El Consejo Mundial de Iglesias (CMI) dice sobre el tema: “La Biblia nos enseña a entender a la humanidad como parte de la única creación y nos llama a cuidar del Jardín del Edén (Génesis 2:15). El Dios de la Biblia es un Dios de justicia que protege, ama y cuida a la más vulnerable de sus criaturas”2. La publicación de Wuppertal “Kairos para la creación” mencionada arriba va un paso más allá: “En el corazón de la transformación ecológica se encuentra la necesidad de la conversión ecológica (metanoia), un profundo cambio en los corazones, las mentes, las actitudes, los hábitos y las acciones (Rom 12:1-2). Este cambio tiene implicaciones

para todos los aspectos de la vida cristiana: la liturgia y la adoración, la lectura de la Biblia, la predicación y los sacramentos, para las congregaciones y su vida de fe, la oración, el ayuno, la espiritualidad, la enseñanza, la ética, la educación, el arte, la música, los ministerios y los proyectos misioneros. En esta reforma ecológica de toda la cristiandad, hemos sido y seguimos siendo alentados por nuestros padres y madres en la fe cristiana, por los ejemplos de nuestros hermanos y hermanas creyentes de todo el mundo, y por los líderes de la iglesia de todo el movimiento ecuménico."3 Por lo tanto, el objetivo es también ampliar y profundizar la reflexión ecológica sobre la responsabilidad en teoría y práctica de la iglesia y la diaconía.

La ecología y la sustentabilidad de las iglesias en la práctica Las actividades y las ideas de las instituciones hermanas de Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) sobre el tema de la sustentabilidad son múltiples. Intentamos dar una visión general de las tendencias en los diferentes continentes.

> América Latina En muchos países de América Latina, se observan, desde los cambios de gobierno de los últimos dis-

En América Latina, como por ejemplo aquí en el Perú, la población sufre las consecuencias de la explotación de materias primas.

cursos cada vez más nacionalistas-conservadores y el fundamentalismo religioso está ganando cada vez más influencia en la política, la economía y la sociedad. Desde el punto de vista económico, desde mediados de los años 1990, muchos países de la región han recurrido cada vez más a un modelo de desarrollo conocido como “neoextractivismo”: a menudo en forma de una variante dirigida por el Estado del modelo económico clásico basado en las materias primas, orientado hacia las exportaciones, mientras que la industria de los procesamientos disminuye de manera proporcional. Así pues, los efectos ambientales y sociales negativos de la explotación de los recursos persisten y, en la mayoría de los casos, las poblaciones indígenas sufren las graves consecuencias. En este contexto, las iglesias hermanas de Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) en América Latina ofrecen un camino alternativo y valiente y se convierten en agentes de cambio socio-ecológico y defensores de la integridad de la creación. Especialmente allí donde las congregaciones y la sociedad se ven amenazadas en su ser y actuar por prácticas insostenibles, hay ejemplos alentadores de las iglesias. Además de los consejos de iglesias, las iglesias luteranas, metodistas, valdenses y reformadas están promoviendo enfoques ecológicos y ponen en práctica ideas de proyectos innovadores (pág. 16).

> África Hemos recibido información de instituciones hermanas de Ruanda, Burkina Faso, Guinea y Sudáfrica. La situación política y económica de los países y las regiones participantes de África apenas se puede comparar: se cubre todo el espectro, desde los estados democráticos hasta los autoritarios y las situaciones de guerra. La situación económica de los países varía desde situaciones de economías de subsistencia con pocos recursos, como por ejemplo en Burkina Faso, hasta economías emergentes con una elevada producción industrial pero una gran desigualdad interna, como en Sudáfrica. En África meridional y oriental en particular, la mayoría de la población es de fe cristiana, las iglesias desempeñan un papel importante, sobre todo en la labor diaconal, y también han adoptado una postura proactiva en materia de sustentabilidad ecológica. En el África septentrional y en algunos países del África occidental, por ejemplo Burkina Faso, Malí y Guinea, los cristianos y las cristianas son una minoría y se ven parcialmente perseguidos. Por consiguiente, las actividades en el área de la sustentabilidad son más bien modestas: “L'Organisation Chrétienne d'Appui au Développement” de Burkina Faso (OCAD [por las siglas en francés]) describe sus enfoques ecoteológicos, como la formación de ecoteólogos, la integración del desarrollo sustentable en el contenido de la formación de las pastoras y las medidas de sensibilización a nivel local. Al mismo tiempo, faltan los recursos para transformar estos enfoques en actividades.

“L'Association Chrétienne pour le Développement Communautaire“ (ACDEC [por sus siglas en idioma francés]) de Guinea entiende que la iglesia es una autoridad importante en cuestiones de comportamiento, lo que tiene una gran influencia sobre los miembros de la comunidad. Por lo tanto, la iglesia organiza capacitaciones, da sermones sobre el tema de la sustentabilidad, establece redes con otros actores y difunde buenos ejemplos para un uso cuidadoso de los recursos a través de pequeños proyectos. En África meridional, el compromiso de las iglesias en el área temática es mayor, pero no es el foco de atención de las actuales instituciones hermanas de Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen).

> Países en crisis de Europa oriental y del Oriente Medio

La institución hermana de Iglesias ayudan a Iglesias, “House of Mercy” de Ucrania trabaja principalmente con personas mayores sin hogary surgió del entorno de una congregación de la iglesia bautista de Kiev. Entre tanto, se ha establecido una estrecha cooperación y un vínculo personal con la congregación evangélica luterana de San Martín de Kiev. La institución hermana aclara que la ecología y la sustentabilidad son vistas como algo que encuentra muy poco espacio en tiempos de crisis: “La guerra en el este del país, la corrupción total, la imperfección de la legislación vigente en todos los ámbitos, la atención concentrada en la supervivencia de las familias pobres... En realidad, casi no hay sermones sobre este tema en Ucrania, ni seminarios, ni conferencias...”

Las instituciones hermanas de las Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) informan de manera uniforme que la sustentabilidad como tema recibe muy poca atención en sus regiones. La organización ecuménica Sabeel de Palestina escribe: “Lamentablemente, en nuestro contexto, cuestiones como el cambio climático, la ecología y la sustentabilidad no son relevantes para la mayoría de las iglesias ni una No obstante, algunas instituciones hermanas tratan de prioridad para la sociedad cristiana”. “House of Joy”, dar ejemplos con algunas acciones: En Siria, por ejemplo, un centro diaconal bajo el paraguas de la Arquidióce“House of Joy” organiza una exposición con material sis Ortodoxa de Homs/Kattina de Siria, agrega que reutilizado, los jóvenes o las iglesias locales recogen resien la situación actual del país devastado por la guerra, duos en conjunto y analizan el tema de la sustentabilidad. cuestiones como la seguridad alimentaria, la vivienda, >Europa sudoriental y la Federación de Rusia el empleo y la salud son primordiales, dejando poco espacio para las cuestiones de ecología. La situación aquí es muy diferente. Las institucio-

La fe bíblica asume que Dios permanece fiel a su creación.

nes hermanas de Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) en algunos países de Europa sudoriental tienen muy presentes este tema. Las iglesias ortodoxas de Bulgaria y Grecia confirman la relevancia de la cuestión. La Iglesia de Grecia ofrece cursos y estudios bíblicos. Los sermones retoman el tema y se alientan y apoyan actividades como el reciclaje, la plantación de árboles o el uso de fuentes de energía alternativas. La institución hermana de Iglesias ayudan a Iglesias, Naomi, está comprometida con la producción sustentable de textiles. La situación es diferente en países autoritarios como la Federación Rusa y Hungría: aquí, el cambio climático por lo general es negado o minimizado por los gobiernos. Al mismo tiempo, se realiza una explotación despiadada de los recursos. Las protestas apenas se toleran y todos los actores sociales, incluidas las iglesias, deben tener cuidado para no poner en riesgo su trabajo. En este contexto, las instituciones hermanas tratan de atraer poca atención política directa sin dejar de crear impacto, como el proyecto “Granja Barak” de nuestra institución hermana húngara Kalunba (pág. 22) o la labor de la Iglesia Evangélica Luterana en la rusa Volgogrado (pág. 24).

Perspectivas El programa Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) apoya exclusivamente a las iglesias necesitadas. Levantan la voz en función de la cuestión de sus propias posibilidades y fuerzas, la importancia del tema en cada región y las amenazas a las que se enfrentan las sociedades fuera del mismo, como guerra, violencia, dificultades existenciales o represión. Pero incluso en los casos en los que actualmente predominan otras prioridades, las respuestas de las instituciones hermanas en muchos lugares revelan una diversidad de ideas y el deseo de profundizar en el tema de la sustentabilidad y la ética de la creación. Se ven señales de un movimiento de aprendizaje hacia un nuevo tipo de ecodiaconía, hacia el trabajo diaconal de orientación ecológica.4 ¿Cuáles son las implicaciones para Iglesias que ayudan a Iglesias? Nos gustaría realizar esta discusión con ustedes, queridos lectores y queridas lectoras. Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) al día de hoy ya promueve la creación de redes de las instituciones hermanas. Queremos ayudar a compartir recursos de conocimientos y a que se realicen intercambios sobre proyectos innovadores en cuanto a cómo se puede implementar la sustentabilidad en términos concretos. La cooperación ecuménica internacional puede conducir a una mayor apertura a los discursos sobre la sustentabilidad.

En segundo lugar, a través de nuestra conexión con Pan para el Mundo, podemos asesorar a las instituciones hermanas en el desarrollo de estrategias de sustentabilidad y transmitir los hallazgos y soluciones del campo de las instituciones hermanas a la obra y a los distritos eclesiásticos alemanes. No es raro que las iglesias hermanas estén muy avanzadas en la reflexión y la aplicación de medidas porque ya están teniendo que hacer frente a consecuencias más duras del cambio climático en sus regiones. Pueden mostrar las complejas interrelaciones que implican la sustentabilidad y la ecología. La situación y el espacio de acción de las iglesias dependen mucho del contexto. En algunos países con regímenes autoritarios, por ejemplo en Siria y Cuba, las iglesias tienen mayor margen para maniobrar que otras organizaciones civiles de la sociedad porque se las considera neutrales, leales y pacifistas. En otros Estados autoritarios, las comunidades cristianas se encuentran amenazadas y tienen que adaptar sus estrategias. En otros países, por ejemplo en el sur de África y en América Latina, donde la mayoría de la población es cristiana, las iglesias pueden marcar una gran diferencia con su mensaje. Iglesias ayudan a Iglesias seguirá tratando con sensibilidad estas condiciones muy diferentes y, siempre que sea posible, contribuirán a crear nuevos espacios de acción y a fortalecer a las instituciones hermanas mediante la solidaridad y el establecimiento de redes ecuménicas.

Aunque la crisis climática se ha convertido en algo más que una amenaza y conlleva el potencial de una catástrofe de proporciones bíblicas, nuestras instituciones hermanas confirman su voluntad por la vida y el cambio, por la transformación ecológico-social. A pesar de las profundas heridas de la creación debido a la arrogancia y el pecado de la humanidad, la fe bíblica parte del hecho que Dios no abandona su mundo, sino que le permanece fiel a toda la creación, de modo que compartimos con nuestras instituciones hermanas la esperanza de que Dios estará con nosotros en la preservación y la sanación de la creación. Pan para el Mundo, Consejo Mundial de Iglesias, Iglesia Evangélica en Alemania y la Misión Evangélica Unida [Vereinte Evangelische Mission]: Kaíros for creatíon: Confessíng Hope for the Earth, 2019 2 www.oikoumene.org/de/was-wir-tun/bewahrung-der-schoepfungund-klimagerechtigkeit 3 www.oikoumene.org/de/resources/kairos-for-creation-confessing-hopefor-the-earth-the-wuppertal-call 4 El término “ecodiaconía” se utiliza en el nuevo documento de estudio de políticas del CMI respecto del tema “Llamados a la acción transformadora - Diaconía ecuménica”, que fue preparado para la próxima asamblea del CMI.

IN SITU

OASIS VERDE PARA LA VIDA

Uruguay: Las iglesias protestantes promueven la agricultura orgánica

Cuando dejamos la pequeña ciudad uruguaya Colonia Valdense en dirección suroeste, el camino atraviesa interminables pasturas verdes y pasa por alguna que otra casa. Poca agricultura entre todas las pasturas. En algún momento vemos de repente, a la izquierda de la ruta, un cartel “Predio certificado orgánico por la Red de Agroecología del Uruguay”. Queremos ir a la pequeña granja de María*. Nos recibe con una gran sonrisa. En su rostro se percibe una profunda calma. María heredó la tierra de sus padres y desde entonces es una granjera y su propia jefa, dice. Al principio se ocupó sola de las chacras, a la vez que criaba cuatro hijos. Su marido en ese momento trabajaba además en una fábrica. Fue un tiempo muy duro. En particular por la competencia con los grandes agricultores. Ellos generan grandes rendimientos con el cultivo convencional, en especial con el monocultivo, y pueden ofrecer sus frutas y hortalizas a los compradores a un precio más bajo que María y otros pequeños agricultores. Y hacer todo este duro trabajo sólo para el autoconsumo no resulta rentable. Además, son cada vez menos los que lo hacen, se queja María. Y así fue que a finales de los 90, María y su familia fundaron un grupo de agricultura ecológica. Desde entonces, la demanda de vegetales orgánicos locales ha ido creciendo. Hoy en día, María y otras agricultoras y agricultores cuentan con el apoyo y el

asesoramiento del “Centro Emmanuel”, fundado en 1959 por una pastora suiza con el objetivo de difundir opiniones ecuménicas respecto del cuidado de la creación. El centro apoya a mujeres agricultoras como María durante el cambio de la agricultura convencional hacia la ecológica. Los propios agricultores suelen sorprenderse de lo productiva que puede ser la agricultura sin plaguicidas, tanto para alimentarse, pero también para vender frutas y verduras. Para ello, el Centro tiene su propia venta de productos agroecológicos. La conversión hacia la agricultura ecológica no fue fácil. Había que planificar nuevas rotaciones de cultivos, limpiar el suelo de pesticidas y fertilizantes químicos. En ese momento, María aprendió y adoptó métodos de fertilización alternativos. Hoy en día sabe cómo luchar contra las plagas sin usar productos químicos. Durante los últimos tres años, sus hijos y sus familias han vuelto de la ciudad a vivir con ella en la granja. Esto los hace felices y les da esperanza. Juntos quieren abordar y seguir desarrollando el proyecto de la agricultura orgánica. María nos lleva a un edificio hecho de troncos que han cortado ellos mismos, cubiertos con polietileno, que según el clima pueden abrirse o cerrarse. El invernadero que han construido ellos mismos está lleno de macetas y jardineras, huele a tierra húmeda y a vida que brota. Dos viejos tachos para juntar agua de lluvia llaman la atención, están cu-

Teoría y práctica van de la mano.

El “Grupo de Ecoteología” está planificando.

Los jóvenes estudian la Biblia: La ecoteología también es cuestión de las bases.

Grupo de estudio durante la visita en terreno.

La leche se transforma en queso. Victoria les muestra a los niños y a las niñas, como se hace.

IN SITU

EN BUSQUEDA DE UN CAMINO JUSTO

Argentina: Fundación diaconal apoya la reconstrucción ecológica

En la mañana del 20 de noviembre de 2018, alrededor de 40 invitados internacionales se reúnen en la pequeña capilla de la sede de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP) en Buenos Aires. Se trata de una ocasión especial la que los reúne aquí. Quieren revisar los tres primeros años de un proyecto piloto de la iglesia lERP y su fundación diaconal “Fundación Hora de Obrar” - (FHDO), por medio del que se puso en marcha un programa de atención pastoral para los agricultores de soja y mate de la región, el “Programa Pastoral de Promoción para el Cuidado de la Creación” (PPCC).

biertos y hay un palo de madera en cada uno. Esto es el fertilizante fermentado que producimos nosotros mismos, y se puede aplicar a todos los tipos de plantas, explica María. En el fondo de la propiedad, María nos muestra una novedad más de su negocio familiar: el secadero. Aquí pueden secarse frutas y verduras al aire y luego venderse como infusiones o los llamados superalimentos. María y sus hijos tienen muchos más proyectos en mente. Junto con el Centro Emmanuel y otros pequeños agricultores, ahora abastecen a los supermercados locales con frutas y verduras orgánicas, organizan un mercado semanal junto con las iglesias de la Colonia Valdense y están en proceso de establecer una red nacional de agroecología. María también apoya a otras mujeres pequeñas agricultoras en la conversión de sus campos. “A menudo”, dice, “son las mujeres las que se atreven a tomar un nuevo camino”. Como despedida, María nos presenta un plato con frutos disecados que ha caramelizado según una receta familiar. Fue el gran éxito de ventas en el puesto del mercado de la semana pasada. Y también a sus nietos puede darles mucha alegría con ellas. * Nombre modificado por la redacción.

Centro Emmanuel El Centro Emmanuel es una organización ecuménica desde hace 60 años, fundada por la Iglesia Metodista en Uruguay, la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP) y la Iglesia Evangélica Waldense, las que siguen patrocinándolo hasta hoy en día. Desde sus inicios, el Centro ha apoyado a las comunidades de fe en la educación teológica y desde 1987 fomenta la producción agroecológica desde su granja modelo. Así pues, colaboró en el surgimiento del movimiento agroecológico del Uruguay, que reúne la agroecología y la teología bajo el lema “Cuidar la vida”. Hoy en día, el Centro Emmanuel de la Colonia Valdense es un oasis verde en medio de la agricultura convencional, un lugar de espiritualidad, educación e intercambio de experiencias prácticas con la agricultura ecológica.

Hay tensión en el aire, y no sólo por las temperaturas excepcionalmente altas del comienzo del verano argentino. Además de los patrocinadores internacionales y los hermanos de la red, también se encuentran entre los invitados pastores, pastoras, así como agricultoras y agricultores. Representan a sus comunidades del así llamado cinturón de la soja de la Argentina, el Paraguay, el Uruguay y el Brasil, que son las más afectadas por el monocultivo y sus consecuencias. Son precisamente estas las personas a las que la fundación diacónica y sus 45 congregaciones miembros quieren oír en los próximos dos días. En las regiones en las que se cultivan plantas en monocultivos y se utiliza más intensamente el glifosato, la población se enferma de cáncer a un ritmo superior a la media y los bebés a menudo presentan malformaciones. Un médico informa de un

estudio que relaciona las consecuencias para la salud y el uso de glifosato en las comunidades estudiadas del cinturón de la soja: en 2013, los agricultores y las agricultoras informaron que utilizaban tres kilogramos de glifosato para una superficie constante por año como herbicida. En 2018, ya eran 13 kg por año. Una de las razones es que las plantas se están volviendo resistentes y además es necesario aumentar los rendimientos para mantener el negocio. El médico advierte contra las pequeñas máquinas de hélice que llevan el veneno a los campos y, según la ley, sólo tienen que mantenerse a una distancia de 500 metros de las escuelas rurales, que están situadas en medio de los campos de soja. Con cada aporte de los participantes, una pieza del rompecabezas se añade al cuadro general de esta compleja situación: reservado y algo tímido, un hombre, el granjero Julio*, pide la palabra. Hace poco que es parte de la red y del programa PPCC. Comenta que al principio había sido muy escéptico, y había que tener en cuenta que durante los últimos 30 años los pueblos de la región han sido abandonados cada vez más. Ya nadie quería vivir allí. La gente prefería ganar su dinero en la ciudad. La soja ha traído una nueva dinámica a la región. ¿Cómo culpar a la gente por querer hacer buen dinero? El hecho de que el beneficio y la ganancia juegan un papel importante también queda demostrado por la declaración final de los participantes de la consulta del PPCC: “Reconocemos la tensión en la

El agricultor Adolfo Weber (izq.) no esquiva los desafíos de la agroecología.

En la iglesia de Viale, los agricultores y las agricultoras no sólo hablan de su fe.

La pastora Estela Anderson (der.) está comprometida con su congregación por la agricultura sustentable.

que viven muchos pequeños productores, que tratan de sobrevivir como tales y se encuentran en un círculo que les lleva a debatirse entre la fascinación, el miedo y la culpa, sin ver una salida para ellos y sus familias. Queremos animarles a que trabajen juntos para encontrar alternativas productivas que sean superiores al modelo de la agroindustria”, dice el llamamiento. El coordinador del programa del PPCC explica que a menudo son incluso las propias congregaciones las que se benefician del cultivo de monocultivos, ya que los grandes agricultores con sus monocultivos de soja pagan más contribuciones y donaciones como miembros de la congregaciones que las familias de pequeños agricultores y, por lo tanto, las propias comunidades eclesiales registran mayores ingresos que en las regiones sin monocultivo. En sus comentarios finales a la consulta, el agricultor Julio añade pensativamente: “La iglesia predican el cambio, un ‘nuevo mundo’. Necesitamos palabras que todos podamos entender. ¿Cómo se supone que vaya a convencer a mi vecino de plantar un árbol que tiene que crecer durante 300 años antes de que dé beneficios?” La directora del Centro Emmanuel, Raquel Malán, responde: “Como cristianos, nos comprometemos a dedicarnos, día a día, a la meta de cuidar la creación. Y si supiera que el mundo se va a acabar mañana, seguiría plantando un árbol”

Diego Fernández dirige una granja orgánica con su esposa. Les cuenta a otros miembros de la comunidad sus experiencias de años.

* Nombre modificado por la redacción.

El programa pastoral de la fundación diaconal Fundación Hora de Obrar para afectados por el monocultivo (Programa Pastoral para el Cuidado de la Creación - PPCC) es un modelo de reflexión teológica para el cuidado de la creación. Se invita a los miembros de las comunidades a que compartan sus preocupaciones y dificultades para sobrevivir como agricultores y agricultoras y en relación con su salud. Son escuchados y asesorados por el equipo de PPCC. Además, se hace hincapié en el intercambio de experiencias entre los agricultores y las agricultoras. Se organizan visitas de experiencias de agricultura orgánica. Es en particular la generación joven, la que es involucrada en medidas de capacitación sobre métodos agrícolas alternativos. Junto con niños, niñas y jóvenes, las mujeres son vistas como “agentes de cambio” que son particularmente fuertes impulsores del cambio. Más enlaces: https://www.horadeobrar.org. ar/quienes-sonamos-con-un-mundo-mejor-no-queremos-volver-a-una-normalidad/. Declaración pública de los participantes en el programa: www.biodiversidadla. org/Documentos/Declaracion-Publica-del-PPCC-sobre-agronegocios.

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UNA GRANJA PARA REFUGIADOS

Hungría: Iglesia en camino hacia una mayor sustentabilidad

Como de la nada, aparece un gran estadio de fútbol entre praderas y campos en el trayecto de 50 kilómetros desde el centro de la ciudad de Budapest hasta el pueblo de Tabajd. El primer ministro húngaro, Victor Orbán, lo mandó construir para su club de fútbol favorito en su ciudad natal de Felcsút. Según Balázs Acsai, se puede manejar bien en la ruta modernizada. En cuanto deja atrás el estadio, en lo siguiente el camino presenta cada vez más baches, el paisaje se vuelve idílico. Son sólo unos pocos kilómetros desde el estadio hasta la casa de sus padres en Tabajd, donde todavía vive hoy. Aquí, la familia tiene una granja desde hace varias generaciones. En la aldea todos se conocen. Aquí Balázs fue a la escuela, tal como sus hijos ahora. Más tarde estudió agronomía. Después de que la Iglesia Reformada de Hungría interrumpiera su propio trabajo con los refugiados ante el trasfondo del creciente populismo de derechas, Balázs Acsai junto con dos colegas del servicio para refugiados fundó Kalunba en 2014. La organización, que sigue recibiendo el apoyo de la iglesia, se ocupa de ayudar a los refugiados en su centro comunitario en el centro de Budapest. Además de los servicios de asesoramiento y los cursos de idioma húngaro, hay una distribución gratuita de alimentos y un programa de vivienda para las familias de refugiados con riesgo especial de quedarse sin hogar.

Desde el verano de 2018 la organización viene luchando para sobrevivir. El partido gobernante de Hungría, Fidesz, apenas provee fondos estatales para el aprovisionamiento de los refugiados. El gobierno también ha cortado el acceso a la financiación por la UE a las organizaciones húngaras, en particular del Fondo de Asilo, Migración e Integración (AMIF [por sus siglas en el idioma original]). Por esa razón, Kalunba necesita de manera urgente fuentes de ingresos adicionales para continuar su labor.

El emprendimiento sin fines de lucro Kalunba Ltd. fue fundado en 2014 a partir de una iniciativa de voluntarios de la Iglesia Reformada de Hungría. El objetivo es apoyar a los refugiados en su integración en la sociedad húngara. El enfoque del trabajo es la implementación práctica, en la vida real, de los valores cristianos, por medio de la ayuda a los refugiados en su vida cotidiana. Desde 2011, la Iglesia Reformada se ha comprometido con la protección de la creación y ha participado en el programa del “Movimiento Ecocongregacional” sobre la sustentabilidad en teología e iglesia. En 2015, participó en la conferencia de “Peregrinación Ecuménica” respecto del Acuerdo de París sobre el Clima y el circuito “Ciclismo para tu vecino”. Más información sobre el “Movimiento Ecocongregacional” en idioma húngaro bajo: www.okogyulekezet.hu/

Finalmente, Balázs Acsai y su colega Dóra Kanizsai-Nagy tuvieron una idea: ¿Qué tal si usaban sus conocimientos agrícolas para ayudar a los refugiados? Desde hace mucho tiempo venían con la idea de construir un emprendimiento según criterios sustentables. Ahora veían la oportunidad de construirlo junto con los refugiados. El trabajo debe ser remunerado de manera justa y los ingresos deben servir para apoyar el trabajo en Budapest. Sin embargo, los cálculos iniciales mostraron que se necesitarían grandes inversiones para la compra de equipos agrícolas y el arrendamiento de tierras agrícolas, sumas de las que la organización no disponía. Por eso Acsai decidió poner parte de la tierra de la familia en Tabajd a disposición de Kalunba. Es cierto que había que arrendar más tierra, pero el comienzo ya estaba hecho. La institución crediticia polaca TISE se convenció de la idea y concedió un préstamo de 360.000 euros en el verano de 2019. Algunas iglesias alemanas, así como el programa Iglesias Ayudan a Iglesias, que apoyan a Kalunba desde hace dos años, cubrieron los últimos huecos financieras. El proyecto debe ser socialmente sustentable desde el principio, por medio de la integración en la comunidad de la aldea. Kalunba invita regularmente a la gente a eventos que buscan aumentar la conciencia por la agroecología y generar empatía por el tema de los refugiados. Los responsables de Kalunba tienen la esperanza de una actitud abierta frente a su proyecto y a los refugiados, porque una familia local está apoyando

Balázs Acsai y Dora Kanizsai-Nagy proyectan cultivar orgánicamente.

el proyecto. Durante el primer año, Dora y Víctor, que dirigen el proyecto, todavía debían recortar su sueño de la agricultura ecológica. “Por ahora, lo importante es obtener buenos resultados. Lamentablemente, no podríamos hacer eso con el cultivo según las estrictas bionormas en este momento. Pero en cuanto podamos permitírnoslo, cultivaremos verduras orgánicas”, dice Balázs. Para ello, son muy bienvenidas las buenas ideas. Un refugiado afgano que trabajaba en la agricultura en su país de origen este año ya quiere cultivar melones en una parcela de prueba. “Las condiciones climáticas de Hungría y de Afganistán son muy similares, dijo. Entonces, ¿por qué no habría de funcionar?” dice Balázs. En el país en el que los refugiados y las personas que los apoyan se ven muy presionados, queda una esperanza para el futuro.

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LEVES ESPERANZAS EN EL JARDÍN DE LA IGLESIA Rusia: protección del medioambiente bajo observación

“Nos preocupa la salud de nuestros feligreses, en especial de los niños y los ancianos”, dice Oleg Stulberg, párroco de Volgogrado y preboste de seis parroquias en el bajo río Volga. En el barrio donde se encuentra su iglesia, hay muchas plantas fabriles, justo en medio de las zonas residenciales. La calidad del aire es mala, las enfermedades respiratorias y el cáncer se multiplican cada vez más. Durante la Copa del Mundo de 2018, cuando una plaga de mosquitos y moscas golpeó la región, se rociaron sin más insecticidas sobre la ciudad. Se debían cerrar las puertas y ventanas, los niños pequeños y los ancianos no debían salir a la calle, aconsejaban en esos calurosos días de verano. La protección del medioambiente y el clima no representan un papel demasiado importante en Rusia. Es cierto que, después de algunas dudas, se firmó el acuerdo climático de París. Sin embargo, junto con China, los EE.UU. y la India, Rusia es uno de los cuatro mayores productores de CO2 del mundo. Hasta ahora, el pulmón verde de Siberia ha equilibrado el balance, pero no seguirá así. Los incendios devastadores son signos alarmantes del cambio climático, y los hielos eternos también comienza a descongelarse. La dependencia de las energías fósiles impide un replanteamiento y un debate público sobre este tema urgente. En los medios de comunicación rusos se ridiculiza el movimiento “Viernes para el futuro”, apenas hay protestas climáticas en el país. Por último, la gente sabe muy poco acerca de las consecuencias del cambio climático, se alegra de inviernos ligeramente más cálidos y de

una modesta prosperidad. Pero al menos surgen protestas ambientales locales por causas concretas: cuando los ríos están contaminados o se importan desechos nucleares a Rusia. Además, la escena de la protección del medioambiente está cada vez más interconectada en red a nivel internacional. Hasta ahora, sin embargo, la mayoritaria iglesia ortodoxa rusa ha apoyado la política del estado porque teme que de otra manera perdería sus privilegios. La pequeña Iglesia Evangélica Luterana, iglesia hermana de las iglesias regionales alemanas y sus agencias misioneras, en cambio, toma en serio su responsabilidad cristiana por la integridad de la creación y orienta sus acciones en ello. Sin embargo, siendo una pequeña iglesia con contactos internacionales y financiación del extranjero, es estrictamente observada y debe sopesar cada palabra. El pastor Oleg Stulberg aborda frecuentemente el tema de la “protección del medioambiente” en sus sermones. También juega un papel importante en el trabajo con niños, niñas y jóvenes, durante las reuniones regulares de la comunidad. Esto ha dado lugar a la creación de muchos pequeños proyectos que utilizan consejos simples para animar a la gente a repensar y dar forma a su trabajo comunitario. Bajo el lema “Dale a las cosas una segunda vida” se organizan mercados de pulgas para los necesitados. De la ropa usada se cosen bolsas reutilizables para evitar el uso de plástico y los jóvenes se reúnen para recoger la basura en las orillas del Volga.

En la comunidad hay una caja para recoger las pilas viejas y los desechos electrónicos, que, debido a la falta de conocimientos y alternativas, a menudo terminan en los residuos domésticos y contaminan las aguas subterráneas. La iglesia está planeando una campaña pública en ese sentido. Un proyecto ecológico en el jardín de la iglesia con un invernadero, plantas necesitadas de protección y pequeños animales, donde se puedan llevar a cabo eventos con clases escolares y grupos de jardín de infantes es el sueño para el futuro. Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) patrocina seminarios y pequeños proyectos que fortalecen y abren las congregaciones. El jardín de la iglesia es ya ahora un pequeño oasis verde.

En el mercado de pulgas, a las prendas de vestir se les regala una segunda vida.

La Iglesia Evangélica Luterana en Rusia y otros países post-soviéticos Las raíces de la Iglesia Evangélica Luterana en la región se extienden hasta la inmigración durante la colonización alemana en Rusia y Ucrania a finales del siglo XVIII. Se formaron grandes asentamientos alemanes en el Volga y en el Mar Negro. Al comienzo, en la Unión Soviética, a los alemanes del Volga se les dio su propia república. Sin embargo, tras la invasión alemana a la Unión Soviética en 1941, fueron perseguidos y deportados a Kazajstán y Siberia. Aunque los alemanes fueron rehabilitados en 1956, la República del Volga no fue restaurada. Debido a las dificultades económicas que siguieron al colapso de la Unión Soviética, más de dos millones de ruso-alemanes emigraron a Alemania a principios de la década de 1990. Lo que quedó eran pequeñas congregaciones evangélicas luteranas organizadas en la Federación de la Iglesia Evangélica Luterana de Rusia, Ucrania, Kazajstán y Asia Central (ELKRAS [por sus siglas en el idioma original]). Las estructuras nacionales son la Iglesia Evangélica Luterana en Rusia (ELCR [por sus siglas en el idioma original]) y la Iglesia Evangélica Luterana Alemana de Ucrania (DELKU [por sus siglas en el idioma original]).

Los jóvenes recogen basura a orillas del Volga. 24

CRÉDITOS EDITORIALES

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Iglesias ayudan a Iglesias (Kirchen helfen Kirchen) Pan para el Mundo Evangelisches Werk für Diakonie und Entwicklung e. V. [Trabajo evangélico por la diaconía y el desarrollo] Caroline-Michaelis-Str. 51 - 10115 Berlín Tel.: 030 65211 0 khk@brot-fuer-die-welt.de www.kirchen-helfen-kirchen.de

ALEMANIA DEL NORTE IGLESIA EVANGÉLICA REFORMADA

BREMEN

OLDENBURG

BERLIN-BRANDENBURGO Y ALTA LUSACIA DE SILESIA

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WESTFALIA ALEMANIA CENTRAL KURHESSENWALDECK

RENANIA

HESSE Y NASSAU

Iglesias miembro de la Unión de Iglesias Protestantes (UEK [por sus siglas en el idioma original]). Iglesias con condición de invitadas.

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Edición: Michael Billanitsch, Ilonka Boltze (Responsable en sentido del Derecho de Prensa - V.I.S.d.P [por sus siglas en el idioma original]), Helle Dessing, Sabine Erdmann-Kutnevic, Kim Kwibuka, Franziska Reich, Sabine Schwirner, Carolin Sonnabend, Andreas Wagner, Dietrich Werner. Fotos: Kathrin Harms (P. 1, 2,1 0 todos a la izquierda, 15, 20, 27, 28), Hermann Bredehorst (P. 3), Alexey Kuchapin, Fundación “Diakonia und Mission”, Erika Klemm, Instituto Esteban, ISAIS, CONIC (P. 6), AIDS Healthcare Foundation, SABEEL, Mariia Bekker, Mindaugas Kairys (P. 7), Thomas Lohnes (P. 9,13), Sabine Schwirner (P. 10 derecha, 23), Raquel Malan (P. 17), Oleg Stulberg (P. 25). Diagramación: Herden. Design, Stuttgart Impreción: Pinguin Druck Septiembre de 2020 Art.-N.° 119 109 400 Versión en español Fundación Protestante Hora de Obrar Sucre 2855, piso 1. Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. fundacion@horadeobrar.org.ar www.horadeobrar.org.ar Traducción al español: Ruth Schwittay Diagramación en español: Andrés Nieto, Four Communication.

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