La autoridad pedagógica en cuestión Berenice Greco
Que la autoridad en cuestión se halla hoy interrogada no es una novedad. Se la piensa ausente en ocasiones, debilitada y derrumbada en otras; no reconocida, en crisis, impotente, devaluada, desarmada, violentada, desencarnada. es que hablar de autoridad es también hablar de lazos, de relaciones, de dos o más de dos y de lo que entre ellos ocurre en el espacio del “vivir juntos”. Nuestro primer análisis recorrerá así, la posibilidad de pensar a la autoridad ya no como un ejercicio individual, como la tarea de uno en particular o como aquel mandato que se dirige desde uno –que decide, determina, exigea otro que acepta, obedece, responde (o se rehúsa a todo esto). Situaremos a la autoridad en una trama de encuentros, allí donde al menos dos –en relación asimétrica- entrelazan sus subjetividades en un tiempo y espacio cultural, histórico, social en común, para perpetuarlos y recrearlos. En este sentido, entendemos que la autoridad puede y debe ser puesta en cuestión, criticada, revisada y pensada de otra manera Una autoridad pedagógica que se haga cargo de la recepción de las nuevas generaciones, del trabajo de inscribir, nombrar y reconocer, proteger la vida y autorizar lo nuevo. Es así como la autoridad en cuestión, la autoridad pedagógica en particular, pensada de otra manera, nos lleva más allá de ella misma, nos conduce a otros pensamientos como el de la transmisión, la igualdad, el reconocimiento, la confianza y la emancipación. Unas reflexiones iniciales abren el debate acerca de la crítica actual de la autoridad, reconociendo las condiciones de nuestra época: tiempos de insignificancia, de desamparo por ausencia de significaciones que otorguen un mejor “vivir con otros” a cada sujeto en su particularidad, una protección de la vida humana Compartir tiempos y espacios con otros es ese continuo trabajo de decir “yo” y “nosotros” a la vez, de abrirse intersubjetivamente para transformarse junto a otros, sin perder de vista una subjetividad singular que nos hace reconocibles
¿es posible vivir, convivir, educar sin autoridad y si pensamos que no lo es, de qué manera ir construyendo otras formas en el mismo momento en que la ejercemos?
la igualdad es la gran meta social que será alcanzada por vía del conocimiento explicado, “de arriba para abajo”, de los sabios a los ignorantes y se confirma por medio de este modo de educar, su desigualdad estructural de sabios explicadores e ignorantes explicados