Reencontrándome maternidad durante la

Por: Angy Cartagena

Ser mamá te cambia. Te cambia para bien. Muchas mujeres lo han dicho ya antes que yo. No soy la primera y no seré la última. Definitivamente le he tomado otra vista a la vida dice una paciente que, desde que nació Santiago. Se ha vuelto más fuerte. Refiere diciendo: “Mi alma se ha vuelto más fuerte, mi niña interior se ha vuelto más fuerte y segura. Claro que hay mejores días que otros pero en general sí te vuelves más fuerte”

A lo largo de la vida me han sucedido muchas cosas y he postergado tantas y tantas más. Nunca había tenido la confianza en mí para poder emprender cualquier idea por mi misma y sobre todo mantenerla. Siempre pensé que algo externo debía suceder para que mi vida cambiara.

El cambio viene de dentro

Un día en el que estaba en la casa y estaba empacando (Santiago estaba con sus abuelos) de pronto me cansé horrible porque empacar una casa tu sola es extremadamente agotador. Me acosté en la cama, abrí Pinterest y comencé a leer por enésima ocasión sobre abrir un blog, solo que esta vez fue diferente, dije: lo hare.

Como alguna vez dentro de estos cursos de liderazgo del multinivel en el que estaba escuché, en el momento no hay miedo. El miedo se genera justo antes cuando pones en duda mil cosas y nos hacemos ideas en la cabeza, así que simplemente lo hice y ¡bum! aquí estoy sin miedo contándolo.

Me siento plena. Yo sé que no soy la mejor pero sé que lo disfruto y sé que me da otra perspectiva de la vida, me pone metas y lo mejor de todo LAS ESTOY CUMPLIENDO. Mis propias metas y mis propias satisfacciones. Y no hubiera logrado nada de esto si no me hubiera vuelto mamá.

Redescubriendo a mi antiguo yo

Al principio de la plática con mi psicoterapeuta Angy Cartagena, decía que redescubrí a la mujer que era gracias al blog, me doy cuenta que todo pasa. Las dificultades se van. El desamor se cura. Que yo sé que he mejorado en muchas cosas y he crecido. Esa mujer que era la dejé atrás no para enterrarla u olvidarla si no para darle su lugar y dejarla crecer. El poder sentirme me hace darme cuenta que en verdad he crecido mucho y que soy muy feliz.

Me he dado cuenta que he sobrepasado muchas cosas, muchos momentos que creí no podría superar, que cada situación, mal de amores o pérdida me trajo hasta donde estoy hoy y esto lo agradezco.

La maternidad me ayudó a reencontrarme, me ayudó a dejar miedos infundados y temor al que dirán atrás. Y comprender por fin, todo lo que mi madre me decía.

«En el momento no hay miedo»

Durante muchos años me preocupé de más por el que dirán, hoy poco a poco voy concentrándome en mi que es lo que importa y en ser mamá no me impide ser Yo, primero yo para poder ser todo para alguien más. Mi familia.

A las mamás, ¿En que las ha ayudado la maternidad? A los que no son mamás ¿Les ha pasado algo parecido? ¿Están postergando su felicidad?

Si tienen algún comentario no duden en dejarlo por aquí que me encantará leerlos, correo electrónico: cartagena165@hotmail.com