La región cerrará el año asignando más de 13.000 subsidios de reconstrucción que sumados a los del año anterior suman más de 26.000 subsidios. De estos, 20.000 corresponden a construcción o adquisición de nuevas viviendas y algo más de 6.000 son reparaciones. Quedan aún por revisar cerca de 2.000 postulaciones que mantienen observaciones, principalmente acerca de la real condición de los arrendatarios o allegados de una vivienda destruida. Resulta difícil dimensionar estas cifras, pero se puede entender mejor el tamaño del desafío comparando el problema con algo conocido. En nuestra región, una ciudad intermedia, como por ejemplo Santa Cruz, tiene algo más de 12.000 viviendas (según datos del INE). La exigencia es por tanto equivalente a reconstruir o reparar una por una y absolutamente todas las viviendas de esta ciudad más de 2 veces seguidas. Cabe entonces reflexionar sobre cuánto tardaría la reconstrucción completa de una ciudad de
ese tamaño (San Vicente y Machalí sirven también como ejemplos) y se tendrá una primera referencia. También se puede comparar con las casi 26.000 viviendas que suman todas las comunas de Cardenal Caro: Pichilemu, Litueche, Navidad, La Estrella, Paredones y Marchigüe. Desde abril de 2010 y hasta diciembre de 2011, SERVIU ha atendido a más de 26.000 familias damnificadas, pero que no pertenecen a una sola ciudad sino que se encuentran dispersas en las 33 comunas de esta región. Al mismo tiempo, este servicio debió atender a más de 7.000 familias que postularon a los programas regulares de vivienda durante el mismo periodo, llegando a superar los 33.000 subsidios asignados. La producción, la productividad neta por asignación de subsidios y la productividad neta por gasto ejecutado aumentaron considerablemente, permitiendo a SERVIU superar por primera vez en su historia los $100.000 millones de presupuesto este año. Por otra parte, el avance de obras de
construcción es muy satisfactorio. Se han iniciado más de 16.000 obras en la región y poco más de 10.000 de ellas serán nuevas viviendas. Esto significa que sobre el 70% de los subsidios ya está en ejecución. No hemos podido avanzar más simplemente porque la industria carece de capacidad de oferta, es decir, faltan más empresas y constructores. Una prueba evidente de esto y que está muy relacionada con la reconstrucción, ha sido la caída de la tasa de desempleo que bajó a un 6% durante el último trimestre y justo antes de la temporada agrícola, lo que significa que la región está acercándose al pleno empleo. Sin embargo, a pesar del esfuerzo titánico que se ha llevado a cabo, la reconstrucción aún no logra mejorar su evaluación en la opinión pública y SERVIU debe enfrentar frecuentes críticas contra su trabajo, muchas de ellas
desproporcionadas. Tal vez no sea muy distinto a lo que ocurre con la situación de la economía: este año se han vendido cerca de 1.000.000 de automóviles, las ventas navideñas siguen creciendo, prácticamente todos los indicadores del comercio y del trabajo han mejorado y, a pesar de todo, las encuestas en 2011 no fueron muy positivas. ¿Pesimismo? ¿Desinformación? ¿Falta de un punto de referencia adecuado? ¿Todas las anteriores? Juzgue Usted.
Antes de recibir su nueva casa el pasado 12 de diciembre, la dirigenta Paola Díaz me dijo que se cambiaría cuanto antes porque quería empezar una nueva vida junto a su familia. La espera fue muy recompensada para ella y para las 141 familias del conjunto habitacional “Compañía Real”, que inauguró el Presidente Sebastián Piñera para los primeros damnificados de la devastada y emblemática Villa Cordillera, en Rancagua. Paola es una de las miles de familias que están siendo beneficiadas con el plan de reconstrucción. Tenemos que reconstruir o reparar 220 mil viviendas para 880 mil chilenos, más que todas las viviendas de Rancagua, Talca, Concepción y Talcahuano juntas, y que tienen la complejidad de estar dispersas en seis regiones, 600 kilómetros de extensión y más de mil localidades Frente a este escenario hemos innovado permanentemente, buscando las mejores soluciones para agilizar al máximo la construcción y entrega de las viviendas. En la Región del Libertador General Bernardo O’Higgins estamos avanzando con fuerza. Al 30 de noviembre hemos asignado 22.586 subsidios de reconstrucción, iniciado casi 16 mil obras -de las cuales 10 mil son nuevas viviendas-, y terminado casi tres mil. A nivel nacional, en tanto, se han asignado 190 mil subsidios, iniciado 129 mil obras y terminado 68 mil. Pero mientras trabajamos en la reconstrucción no hemos olvidado a las familias del programa regular, de campamentos, de sectores emergentes y clase media que han esperado durante años tener un techo digno. En los dos primeros años del Gobierno del Presidente Sebastián Piñera entregaremos 400 mil subsidios habitacionales que beneficiarán directamente a 1,6 millones de chilenos, equivalente al 10% de toda la población. Son cifras que muestran un compromiso real, auténtico y sostenido de apoyo a la familia chilena. Quiero desearles a todos los habitantes de mi querida Región un muy próspero Año Nuevo. Sabemos que aún hay compatriotas damnificados que viven en situación de vulnerabilidad, de allegados o de arrendatarios, pero queremos decirles que seguiremos trabajando con toda nuestra fuerza para devolverles la dignidad que se merecen. Juntos vamos a reconstruir un Chile mejor. Rodrigo Pérez Mackenna Ministro de Vivienda y Urbanismo
Optimizar la gestión interna para mejorar también la atención a las familias ha sido parte de la labor en la cual enfocó sus esfuerzos el equipo de Serviu O’Higgins, dirigido por su Director, Fernando Fondón, durante 2011. Tras el terremoto, el servicio impulsó diversas iniciativas innovadoras para mejorar su operatividad, resultados que se vieron traducidos en la entrega de subsidios habitacionales y viviendas. HORA PARA POSTULAR ONLINE Como una forma de hacer más eficiente y expedita la postulación a los subsidios habitacionales que entrega el Minvu, este año se puso a disposición de las personas un sistema más rápido de reserva de hora para realizar este trámite, el cual operó a través de internet. La opción de resera de hora está disponible en el sitio web del servicio y se sumó a la reserva presencial tradicional. “Es una herramienta fácil de utilizar que beneficia a nuestros usuarios, porque así optimizan su tiempo. No es necesario que vengan al servicio para pedir la hora de postulación”, destacó el Director Regional de Serviu, Fernando Fondón. MÁS SUPERVISORES DE OBRA El aumento de construcciones de viviendas trajo consigo no sólo un incremento en el empleo de obreros, también fue necesario que Serviu dispusiera de una mayor cantidad de supervisores de obras para fiscalizar que las faenas se ejecutaran bajo los estándares establecidos. Fue así como la dotación de supervisores de obra aumentó en un 50%, permitiendo potenciar el trabajo que se realiza para entregar viviendas
de calidad a las familias de la región. NUEVAS OFICINAS DE SERVIU Porque mejorar la atención a los usuarios es el plan de acción de Serviu O’Higgins y éste conlleva un mayor acercamiento a las familias, el servicio implementó en 2011 nuevas oficinas en las comunas de Santa Cruz y Pichilemu. Ambas dependencias se suman a la oficina central en Rancagua y la delegación provincial en San Fernando. Cuentan con equipos de profesionales dispuestos a atender dudas, consultas y postulaciones a subsidios. NUEVAS Y MEJORES MÁQUINAS Un equipamiento de primera línea, que ha permitido mejorar de forma continua el servicio hacia la comunidad, es el que incorporó el Departamento Técnico de Serviu O’Higgins a su trabajo. Con él se puede medir la cobertura del hormigón sobre las barras de fierro, así como también la localización, la orientación y el tamaño de las barras. El nuevo equipamiento fue calificado como un verdadero laboratorio portátil, pues gracias a él se pueden verificar las estructuras construidas sin necesidad de hacer ensayos destructivos. El equipamiento debutó en la comuna de San Fernando. Sus funciones se pueden controlar sólo a través de 4 teclas y está diseñado para resistir al agua. Plan digital Un nuevo sitio web de Serviu O’Higgins, más completo y amigable, debutó este 2011. Se trata de un portal 2.0, que incorpora un moderno diseño y ofrece a los usuarios un lugar virtual más interactivo, con información actualizada y datos de interés a la mano, entre otras muchas ventajas. El nuevo portal que reemplaza al anterior 1.0 se suma a la presencia de Serviu
O’Higgins en las redes sociales, como Twitter y Facebook, donde también las personas pueden mantenerse informadas. GESTIÓN DOCUMENTAL El gran sismo no sólo dejó casas destruidas, también el movimiento se reflejó en los archivos históricos de Serviu O’Higgins, los que terminaron literalmente en el suelo. Documentos de subsidios asignados, libretos de ahorro y planes, por ejemplo, cayeron, hecho que impulsó que hace un año el servicio reorganizara sus bibliotecas. Gracias al trabajo de una persona especialmente encargada de llevar el orden de los archivos, Serviu O’Higgins logró convertirse en el primero de todo el país en traspasar documentos históricos al archivo nacional de Santiago. Hoy se cuenta con un 50% de avance en esta reorganización. De esta forma, en Rancagua se mantiene la documentación más reciente y utilizada, es decir, la del año 2000 en adelante. NUEVA UNIDAD DE PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA En el mes de marzo se oficializó la creación de una nueva Unidad en Serviu O’Higgins. Se trata de Planificación Estratégica, cuya función es asesorar a la Dirección y apoyar a los otros departamentos del servicio para lograr los objetivos comunes, pues la entrega de subsidios aumentó cuatro veces respecto de antes de la catástrofe. Principalmente, la Unidad de Planificación Estratégica –que está compuesta por un equipo multiprofesional de 12 personas- se encarga de la coordinación del programa de reconstrucción, la gestión de la venta de terrenos de Serviu y el plan de gestión de la calidad (contratación de personal). En términos
concretos, se pasó de entregar de entre 3 mil y 4 mil subsidios anuales a 13 mil sólo en reconstrucción, cifra que aumenta a 17 mil si se considera la modalidad regular. La creación de esta unidad –que también se materializó en la región Metropolitana- implicó variaciones en el organigrama completo de Serviu. “Hicimos la reestructuración para trabajar bien en la reconstrucción, porque nos dimos cuenta que con el funcionamiento normal no deba abasto para todo el trabajo que tenía que hacer. Entonces hubo que cambiar algunas funciones, agregar algunos departamentos y unidades”, comenta Miguel Mora, Encargado de la unidad.
El trabajo realizado durante 2011 estuvo centrado mayoritariamente en devolver sus hogares a las familias damnificadas del terremoto, entregándole especial importancia a las zonas patrimoniales. De ahí que Serviu LGB O’Higgins haya entregado este año 364 subsidios habitacionales para recuperar las zonas de conservación histórica y típicas. Junto con entregar los certificados también se trabajó en la ejecución de las obras. Fue así como en las comunas de Chépica, Chimbarongo, La Estrella, Lolol, Peralillo, Placilla, Quinta de Tilcoco y Rancagua se iniciaron las obras de reconstrucción de 72 viviendas, trabajos que en 10 de ellas –Chépica y Quinta de Tilcoco- ya finalizaron.
A la fecha, además, se han visto beneficiadas con estos subsidios familias de las comunas de Codegua, Coinco, Doñihue, Graneros, Las Cabras, Malloa, Marchigüe, Mostazal, Olivar, Paredones, Peumo, Pichidegua, Pumanque, Rengo, Requínoa, San Vicente de Tagua Tagua y Santa Cruz. Los subsidios patrimoniales financian obras para reparar o reconstruir un mínimo de 50 metros cuadrados, ya sea de viviendas nuevas o existentes, del los programas DS40, Fondo Solidario de Vivienda I y PPPF. El objetivo es recuperar el inmueble que forma la fachada urbana de la localidad y su habitabilidad, proyectando dar la bienvenida a 2012 con todos los subsidios habitacionales patrimoniales asignados.
Alrededor de un 25% más funcionarios se sumaron al proceso que se lleva adelante en la región. Se trata principalmente de trabajadores que se integraron al Departamento Técnico. También este año se fortalecieron los programas de habilitación social. La reconstrucción en la Región LGB O’Higgins continúa avanzando a paso firme para sacar adelante a las familias damnificadas del terremoto del 27F. De ahí que Serviu esté fortaleciendo sus equipos, a través del incremento de profesionales que están trabajando para agilizar el proceso y devolver
la tranquilidad a quienes perdieron sus hogares. En este contexto, es que a la fecha se han sumado 76 personas al equipo de Serviu LGB O’Higgins, tanto en las oficinas de Rancagua, San Fernando, Santa Cruz y Pichilemu, incrementándose así la dotación regional respecto del año 2010. De este total de trabajadores nuevos que se sumó a la reconstrucción en la región, la gran mayoría –sobre un 70%- , corresponde a profesionales que se incorporaron al Departamento Técnico, área que aumentó la cantidad de inspectores de obras para hacer
frente a la gran cantidad de faenas que se están ejecutando. Así también, este año se trabajó en potenciar profesionalmente el área social, fomentando los programas de habilitación. El incremento en la dotación de profesionales en Serviu LGB O’Higgins tiene relación con la etapa del proceso de reconstrucción que se está desarrollando. Si tras el terremoto en 2010 los esfuerzos estuvieron orientados a trabajar en la planificación, 2011 es el año del “manos a la obra”, de la ejecución de obras, de la
construcción de sueños. “Nos comprometimos a devolver la tranquilidad a las familias que perdieron sus hogares producto del terremoto, y en eso estamos trabajando responsablemente. Para que la reconstrucción avance y tenga los resultados que esperamos todos, es necesario contar con una mayor cantidad de profesionales en terreno que se encarguen de fiscalizar que las obras cumplan con todos los requisitos técnicos para asegurar el bienestar a las familias”, destacó el Director Regional de Serviu, Fernando Fondón.
La reconstrucción de la región y del resto del país ha traído consigo importantes condicionantes en la ejecución de soluciones habitacionales para las familias damnificadas del terremoto del 27F. Por un lado se busca levantar viviendas de gran calidad y, por otro, ejecutar este proceso de la forma más rápida y eficiente posible. de construcción de vivienda tipo en sitio residente se presenta como una excelente alternativa para devolver la tranquilidad a las personas que viven en sectores distantes uno del otro, pues esta modalidad promueve la innovación constructiva de casas precertificadas y agiliza los tiempos y procedimientos operativos de postulación. Actualmente se trabaja con dos sistemas de viviendas tipo: las construidas de albañilería armada, que tardan alrededor de 3 meses en ser levantadas, y las prefabricadas, que demoran entre 20 días y un mes en ser armadas, pues utiliza panales ensamblados. Estos tiempos, claro está, se refieren a plazos promedios y dicen relación con condiciones ideales de construcción. A ellos deben sumar otras faenas previas necesarias para el emplazamiento de una buena vivienda. “Si no había sistema de alcantarillado, la constructora tiene que hacer un alcantarillado particular, o bien habilitar el terreno, o demoler la casa
anterior que estaba en condiciones inhabitable”, dice Vanessa Cornejo, Coordinadora del Proyecto Vivienda Tipo de Serviu O’Higgins. La profesional explica que “la construcción con vivienda tipo es la más rápida del proceso de reconstrucción”, ya que “incluso –manifiestahay algunas casas que las traen armadas desde la fábrica y la instalan”. Sin embargo, aclara que los plazos van a depender de cuántas casas estén levantando las constructoras de forma simultánea, ya que el trabajo que se realiza es paralelo en diversos sectores de la región. Viviendas tipo prefabricadas Pero más allá de los plazos breves de construcción en relación al levantamiento de otro tipo de casas, las viviendas tipo construidas con paneles tienen muchas ventajas. “El hecho de que sean levantadas con este sistema y que los tiempos de construcción sean menores no quiere decir que también sean de menor calidad”, destaca Vanessa Cornejo. Y es que las viviendas tipo levantadas con el sistema de paneles son entregadas a las familias con diversas terminaciones dependiendo del modelo elegido. Por ejemplo, algunas de ellas incluyen cerámica, piso flotante o alfombra en los dormitorios. “Al final la esencia, lo que a nosotros nos interesa, es que sea funcional”, subraya la Coordinadora del
Programa, comentando además que la elección del modelo de la vivienda tipo es decidida por cada familia, según sus necesidades y características del terreno donde se ubicará. Aprobación técnica Independientemente de si la vivienda tipo construida es de albañilería o prefabricada, y al igual que los otros programas de reconstrucción del Minvu, se somete a constantes revisiones técnicas por parte de los equipos especializados, con el fin de entregar un hogar digno a las personas beneficiadas. De hecho, ambos sistemas constructivos pasan por la aprobación de la normativa térmica, acústica y contra el fuego, pues pese a que la materialidad es distinta, cumplen las mismas funciones. “Durante la ejecución, la obra, que es inspeccionada y supervisada por Serviu, está garantizada por una boleta de garantía de la empresa constructora. Cuando la obra se termina, a la empresa no se le paga si no tiene todas las observaciones subsanadas, por lo tanto la casa queda totalmente terminada”, resalta Vanesa Cornejo. Agrega que “sin
embargo, hay una segunda boleta de garantía que tiene una duración de un año a partir de la recepción. Así pasa por todas las condiciones climáticas la casa para poder ver si realmente está hermética”. Posibilidad de ampliación Las viviendas tipo del proceso de reconstrucción que lleva adelante el Minvu cumplen con toda la normativa antisísmica e incluyen también modernas técnicas de construcción, como la utilización de poliestireno expandido, material impermeable que permite la aislación térmica. Así también, explica, Diego Pérez, Ejecutivo del Programa de Vivienda Tipo, muchas de estas viviendas están proyectadas para una ampliación si las familias lo desean. “Si bien la ampliación no está en la casa, sí están dibujada en el plano, entonces la persona no tiene que pedir permisos municipales y puede postular a subsidios de ampliación posteriormente”.
Este 2011 el Gobierno sorprendió a las familias pertenecientes a la clase media y emergente con un importante anuncio —que les permitirá adquirir una vivienda a través de un subsidio habitacional—, el subsidio DS1. Así, un total de 1.386 familias de la Región LGB O’Higgins accedieron al beneficio en dos llamados realizados durante el año. Y es que el subsidio “A tu medida” busca precisamente premiar el esfuerzo y la capacidad
de ahorro de las familias pertenecientes a la clase media chilena. Esto, a través de la entrega de un beneficio que les permite adquirir una vivienda cuyo valor oscile entre las 600 y 2 mil UF, lo que determina el tramo de postulación (títulos I y II). Tras la primera postulación, realizada en el mes de junio, resultaron beneficiadas 866 familias, siendo el 72% de ellas provenientes de la provincia de Cachapoal. En tanto, el
segundo llamado, cuyos resultados fueron dados a conocer recientemente, favoreció a 520 familias de diferentes comunas. Si se trata de una propiedad de entre 600 y 1.000 UF, se requiere la Ficha de Protección Social, ya que ésta da puntaje, y se exige un ahorro de 30 UF. La mencionada ficha no es solicitada para las personas que pretendan comprar una vivienda de entre 1.000 y 2.000 UF, pero se entregará más puntaje si en el
radical, al 100%”, subraya el dueño de casa, explicando que “siempre lo esperé, porque en el departamento tuvimos problemas de incomodidad por la cantidad de personas que somos”.
- La mitad de las familias de este barrio de Rancagua, al igual que aquellas de Paniahue en Santa Cruz, dejarán atrás la vida en los edificios. Disfrutarán ahora de un 36% más de espacio del que tenían y celebrarán que son dueños de sus terrenos entre otras ventajas. Para nadie es un secreto que las dos mil familias que vivían en los departamentos de Villa Cordillera en Rancagua han pasado una verdadera odisea con respecto a sus hogares, incluso antes del gran terremoto de febrero de 2010 que azotó a la Región LGB O’Higgins y a gran parte del país. Sin embargo, gracias al programa “Chile unido reconstruye mejor” del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) estas familias retomarán su vida en nuevos hogares. Alrededor del 50% de ellas -al igual que los damnificados del sector de Paniahue, en la
comuna de Santa Cruz- se mudará a casas, con los consiguientes beneficios que conlleva esto después de haber vivido en los edificios perjudicados. Así lo explica el Jefe del Departamento Técnico de Serviu LGB O’Higgins, Luis Padilla, quien destaca que “cambiarse de esos departamentos al estándar de casas que estamos construyendo post terremoto tiene una ventaja importante”, refiriéndose específicamente a los proyectos Don Horacio IV (Santa Cruz), Don Mateo I, II, III y IV; Los Parques I y II, y Compañía Real I y II (Rancagua), cuya primera etapa fue inaugurada por el Presidente Sebastián Piñera. Juan Muñoz es uno de los cinco beneficiados que recibió las llaves de su nueva casa de manos del mandatario. Según lo que comenta su familia está muy contenta. “Es un cambio
Y es que simplemente las familias que residirán en estos conjuntos habitacionales tendrán, por un lado, un lugar con mayores condiciones de seguridad –en los antiguos departamentos se filtraba el agua y estaban forrados con lata por el exterior, pues la humedad traspasaba los muros si llovía-, y por otro, un mayor espacio interior habitable, pasando de los 38 metros cuadrados de los departamentos a alrededor de 52 que tienen las actuales casas, es decir, un 36% más de espacio. Junto con ello, las familias podrán contar ahora con patio, antejardín, estacionamiento para vehículos, espacio para macotas y mayor privacidad con respecto a los vecinos, lo que en consecuencia mejora la convivencia en el barrio. “Los espacios interiores están mucho más establecidos que en un departamento pequeño, como pasaba en los departamentos de Villa Cordillera”, afirma Luis Padilla, añadiendo que las familias además de ser propietarias de sus viviendas, también serán dueñas de los terrenos donde se ubican éstas.
grupo familiar existe un adulto mayor o una persona con discapacidad, y también si el ahorro supera el mínimo establecido que, en este caso, es de 50 UF. En el caso de los subsidios para sectores emergentes se contemplan viviendas de entre 600 y 1.000 UF, y para la clase media de 1.000 a 2.000 UF. Los montos de los subsidios varían entre 500 y 100 UF, y a mayor grado de vulnerabilidad de la familia, mayor es el subsidio.
Nuevo subsidio orientado a la clase vulnerable debutará en 2012 El beneficio modifica el actual Fondo Solidario y permitirá fortalecer la focalización y simplificar los procesos para acceder a una vivienda. 2012 será el año en el que debutará el nuevo subsidio que busca beneficiar a las familias más vulnerables del país. Se trata del DS49 que permitirá fortalecer la focalización y simplificar los procesos, ampliando las posibilidades de elección de las personas de los distintos segmentos socioeconómicos, y otorgando un apoyo mayor a quienes se encuentran en situación urgente de necesidad habitacional. En la práctica, el nuevo subsidio modifica el actual Fondo Solidario y apunta a cuatro ejes más importantes. El primero de ellos se refiere principalmente a empoderar a los beneficiarios de los subsidios que hayan postulado a viviendas sin deuda, pues dejará de ser obligatorio que las familias postulen a través de las entidades de gestión inmobiliaria social (EGIS) y podrán acudir directamente al Serviu. Así se pondrá fin a la cuestionada intervención forzosa. Con el nuevo decreto tampoco será obligatorio postular con un proyecto armado, y el subsidio se entregará de forma tal que permitirá a las personas escoger con mayor libertad las características de sus viviendas. El segundo eje de acción, en tanto, es tender hacia una mejor focalización de las ayudas, y en este tema, el hacinamiento es uno de los principales temas por resolver. Otro punto importante es que si en el hogar hay una persona discapacitada que requiere silla de ruedas, el fondo crecerá en 80 UF para ampliar pasillos o dar espacio para los giros. La tercera novedad es que habrá incentivos al ahorro adicional que hagan las familias, por sobre las 10 UF mínimas que se piden. Si añaden 10 UF más, el Estado las premiará con 15 UF. Y si el aporte extra de los hogares es de 20 UF, el premio será de 25 UF. Por último, el cuarto eje apunta a evitar la especulación con los terrenos y fomentar la construcción en zonas rurales, donde los costos son más altos.
El proceso de reconstrucción en la Región LGB O’Higgins no sólo ha permitido levantar viviendas para las familias damnificadas, también ha generado más de 5.000 nuevos puestos de trabajo. Esto ha repercutido directamente en la disminución del desempleo en la zona, que llegó durante el trimestre septiembre-noviembre a un 6%, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es el lado B de la reconstrucción que está llevando adelante el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) en la zona, una de las más afectadas por el terremoto del 27 de febrero de 2010. Es la otra cara de un proceso, que en cuanto a cifras se traduce en una caída de 2,5% del desempleo respecto de igual periodo de 2010 y de un 1,2% en comparación al trimestre anterior, es decir, junioseptiembre de 2011. “La reconstrucción no sólo nos está permitiendo que familias que perdieron sus hogares tengan nuevamente sus viviendas. También de forma indirecta se están viendo beneficiados otros grupos familiares que pueden mejorar su calidad de vida a través del trabajo que realizan”, destaca Fernando Fondón, Director Regional de Serviu O’Higgins,
recalcando que finalmente se crea una cadena de trabajo, porque también existen otras empresas y personas que se encargan de brindar los insumos para las faenas. Los 5.000 nuevos empleos se refieren exclusivamente a la construcción de viviendas –casas y departamentos- en nuevos terrenos, proyectos que se traducen en conjuntos habitacionales que benefician directamente a unas 3.900 familias de diferentes comunas de la región que residirán en ellos. José Bernardo Sepúlveda, más conocido como “Don Beño”, quien tiene 58 años y vive en Peralillo. Según explica, gracias a la reconstrucción el trabajo ha aumentado en más del doble en comparación a lo que sucedía antes del gran sismo. “Gracias a Dios nunca me ha faltado la pega, pero con el tema de la reconstrucción ha aumentado harto, en más de un 100%, y eso significa que gano un poquito más. Ha sido bueno para mí”, afirma Sepúlveda, quien proviene de una familia de obreros. Añade que “con la pega tengo para rato. Ahora son tres casas las que estoy haciendo, y ya tengo ocho más que me pidieron”.
En Rengo, a su vez, unas 300 personas accedieron a un nuevo empleo en el proyecto San Francisco II, III y IV; 200 más en Bicentenario I, II y II de Santa Cruz, y otros 150 trabajadores que están emplazando Nancagua I, II, III, y Nuevo Nancagua I, ambos de esta comuna; El Progreso de Pichilemu; Don Horacio IV de Santa Cruz, y Villa La Paz de Paredones. “Antes del terremoto la empresa trabajaba con alrededor de 70 obreros, pero después del 27 de febrero aumentamos casi en un 120%”, manifestó Francisco Donoso, gerente general de la constructora Los Acacios, que está a cargo de estos proyectos, los cuales acogerán a 730 familias en total y estarán terminados durante 2012. De forma similar, Orlando Villarroel, Gerente Técnico y Profesional de Obras de Constructora Vipalco que ya ha construido más de 200 viviendas tipo y trabaja en el emplazamiento de otras 300 en ocho comunas de la región, destaca que “cuando que iniciamos las obras de reconstrucción en noviembre de 2010 teníamos alrededor de 60 personas estables. El incremento ha sido un 200%
aproximadamente a la fecha, entre trabajadores directos y subcontratados”. El aumento en el empleo en la región se ha visto traducido en mayor cantidad de puestos de trabajo de distintas especialidades, como albañiles, carpinteros y gásfiter entre otros. Sin embargo, según las empresas constructoras, los jornales o mano de obra no calificada ha sido el grupo más solicitado, y se ha contratado en cada comuna, hecho que además permite que las personas no deban alejarse de sus hogares para optar a una alternativa de trabajo.
En Rancagua, por ejemplo, sólo en los proyectos Don Mateo etapas I, II, III y IV; Álamos de la Cruz I y II; Doña Gabriela; Ilusión y Futuro, y Nuevo Horizonte I y II, se han generado alrededor de 880 empleos. Se suman, en esta misma comuna, otros 300 trabajadores que están levantando las villas Los Parques I y II, y Compañía Real I y II.
18 Cientos de familias ya han recibido subsidios a septiembre del 2011.
18 Cientos de familias ya han recibido subsidios a septiembre del 2011.
Este 2011 el Gobierno sorprendió a las familias pertenecientes a la clase media y emergente con un importante anuncio —que les permitirá adquirir una vivienda a través de un subsidio habitacional—, el subsidio DS1. Así, un total de 1.386 familias de la Región LGB O’Higgins accedieron al beneficio en dos llamados realizados durante el año. Y es que el subsidio “A tu medida” busca precisamente premiar el esfuerzo y la capacidad
de ahorro de las familias pertenecientes a la clase media chilena. Esto, a través de la entrega de un beneficio que les permite adquirir una vivienda cuyo valor oscile entre las 600 y 2 mil UF, lo que determina el tramo de postulación (títulos I y II). Tras la primera postulación, realizada en el mes de junio, resultaron beneficiadas 866 familias, siendo el 72% de ellas provenientes de la provincia de Cachapoal. En tanto, el
segundo llamado, cuyos resultados fueron dados a conocer recientemente, favoreció a 520 familias de diferentes comunas. Si se trata de una propiedad de entre 600 y 1.000 UF, se requiere la Ficha de Protección Social, ya que ésta da puntaje, y se exige un ahorro de 30 UF. La mencionada ficha no es solicitada para las personas que pretendan comprar una vivienda de entre 1.000 y 2.000 UF, pero se entregará más puntaje si en el
radical, al 100%”, subraya el dueño de casa, explicando que “siempre lo esperé, porque en el departamento tuvimos problemas de incomodidad por la cantidad de personas que somos”.
- La mitad de las familias de este barrio de Rancagua, al igual que aquellas de Paniahue en Santa Cruz, dejarán atrás la vida en los edificios. Disfrutarán ahora de un 36% más de espacio del que tenían y celebrarán que son dueños de sus terrenos entre otras ventajas. Para nadie es un secreto que las dos mil familias que vivían en los departamentos de Villa Cordillera en Rancagua han pasado una verdadera odisea con respecto a sus hogares, incluso antes del gran terremoto de febrero de 2010 que azotó a la Región LGB O’Higgins y a gran parte del país. Sin embargo, gracias al programa “Chile unido reconstruye mejor” del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) estas familias retomarán su vida en nuevos hogares. Alrededor del 50% de ellas -al igual que los damnificados del sector de Paniahue, en la
comuna de Santa Cruz- se mudará a casas, con los consiguientes beneficios que conlleva esto después de haber vivido en los edificios perjudicados. Así lo explica el Jefe del Departamento Técnico de Serviu LGB O’Higgins, Luis Padilla, quien destaca que “cambiarse de esos departamentos al estándar de casas que estamos construyendo post terremoto tiene una ventaja importante”, refiriéndose específicamente a los proyectos Don Horacio IV (Santa Cruz), Don Mateo I, II, III y IV; Los Parques I y II, y Compañía Real I y II (Rancagua), cuya primera etapa fue inaugurada por el Presidente Sebastián Piñera. Juan Muñoz es uno de los cinco beneficiados que recibió las llaves de su nueva casa de manos del mandatario. Según lo que comenta su familia está muy contenta. “Es un cambio
Y es que simplemente las familias que residirán en estos conjuntos habitacionales tendrán, por un lado, un lugar con mayores condiciones de seguridad –en los antiguos departamentos se filtraba el agua y estaban forrados con lata por el exterior, pues la humedad traspasaba los muros si llovía-, y por otro, un mayor espacio interior habitable, pasando de los 38 metros cuadrados de los departamentos a alrededor de 52 que tienen las actuales casas, es decir, un 36% más de espacio. Junto con ello, las familias podrán contar ahora con patio, antejardín, estacionamiento para vehículos, espacio para macotas y mayor privacidad con respecto a los vecinos, lo que en consecuencia mejora la convivencia en el barrio. “Los espacios interiores están mucho más establecidos que en un departamento pequeño, como pasaba en los departamentos de Villa Cordillera”, afirma Luis Padilla, añadiendo que las familias además de ser propietarias de sus viviendas, también serán dueñas de los terrenos donde se ubican éstas.
grupo familiar existe un adulto mayor o una persona con discapacidad, y también si el ahorro supera el mínimo establecido que, en este caso, es de 50 UF. En el caso de los subsidios para sectores emergentes se contemplan viviendas de entre 600 y 1.000 UF, y para la clase media de 1.000 a 2.000 UF. Los montos de los subsidios varían entre 500 y 100 UF, y a mayor grado de vulnerabilidad de la familia, mayor es el subsidio.
Nuevo subsidio orientado a la clase vulnerable debutará en 2012 El beneficio modifica el actual Fondo Solidario y permitirá fortalecer la focalización y simplificar los procesos para acceder a una vivienda. 2012 será el año en el que debutará el nuevo subsidio que busca beneficiar a las familias más vulnerables del país. Se trata del DS49 que permitirá fortalecer la focalización y simplificar los procesos, ampliando las posibilidades de elección de las personas de los distintos segmentos socioeconómicos, y otorgando un apoyo mayor a quienes se encuentran en situación urgente de necesidad habitacional. En la práctica, el nuevo subsidio modifica el actual Fondo Solidario y apunta a cuatro ejes más importantes. El primero de ellos se refiere principalmente a empoderar a los beneficiarios de los subsidios que hayan postulado a viviendas sin deuda, pues dejará de ser obligatorio que las familias postulen a través de las entidades de gestión inmobiliaria social (EGIS) y podrán acudir directamente al Serviu. Así se pondrá fin a la cuestionada intervención forzosa. Con el nuevo decreto tampoco será obligatorio postular con un proyecto armado, y el subsidio se entregará de forma tal que permitirá a las personas escoger con mayor libertad las características de sus viviendas. El segundo eje de acción, en tanto, es tender hacia una mejor focalización de las ayudas, y en este tema, el hacinamiento es uno de los principales temas por resolver. Otro punto importante es que si en el hogar hay una persona discapacitada que requiere silla de ruedas, el fondo crecerá en 80 UF para ampliar pasillos o dar espacio para los giros. La tercera novedad es que habrá incentivos al ahorro adicional que hagan las familias, por sobre las 10 UF mínimas que se piden. Si añaden 10 UF más, el Estado las premiará con 15 UF. Y si el aporte extra de los hogares es de 20 UF, el premio será de 25 UF. Por último, el cuarto eje apunta a evitar la especulación con los terrenos y fomentar la construcción en zonas rurales, donde los costos son más altos.
El proceso de reconstrucción en la Región LGB O’Higgins no sólo ha permitido levantar viviendas para las familias damnificadas, también ha generado más de 5.000 nuevos puestos de trabajo. Esto ha repercutido directamente en la disminución del desempleo en la zona, que llegó durante el trimestre septiembre-noviembre a un 6%, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es el lado B de la reconstrucción que está llevando adelante el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) en la zona, una de las más afectadas por el terremoto del 27 de febrero de 2010. Es la otra cara de un proceso, que en cuanto a cifras se traduce en una caída de 2,5% del desempleo respecto de igual periodo de 2010 y de un 1,2% en comparación al trimestre anterior, es decir, junioseptiembre de 2011. “La reconstrucción no sólo nos está permitiendo que familias que perdieron sus hogares tengan nuevamente sus viviendas. También de forma indirecta se están viendo beneficiados otros grupos familiares que pueden mejorar su calidad de vida a través del trabajo que realizan”, destaca Fernando Fondón, Director Regional de Serviu O’Higgins,
recalcando que finalmente se crea una cadena de trabajo, porque también existen otras empresas y personas que se encargan de brindar los insumos para las faenas. Los 5.000 nuevos empleos se refieren exclusivamente a la construcción de viviendas –casas y departamentos- en nuevos terrenos, proyectos que se traducen en conjuntos habitacionales que benefician directamente a unas 3.900 familias de diferentes comunas de la región que residirán en ellos. José Bernardo Sepúlveda, más conocido como “Don Beño”, quien tiene 58 años y vive en Peralillo. Según explica, gracias a la reconstrucción el trabajo ha aumentado en más del doble en comparación a lo que sucedía antes del gran sismo. “Gracias a Dios nunca me ha faltado la pega, pero con el tema de la reconstrucción ha aumentado harto, en más de un 100%, y eso significa que gano un poquito más. Ha sido bueno para mí”, afirma Sepúlveda, quien proviene de una familia de obreros. Añade que “con la pega tengo para rato. Ahora son tres casas las que estoy haciendo, y ya tengo ocho más que me pidieron”.
En Rengo, a su vez, unas 300 personas accedieron a un nuevo empleo en el proyecto San Francisco II, III y IV; 200 más en Bicentenario I, II y II de Santa Cruz, y otros 150 trabajadores que están emplazando Nancagua I, II, III, y Nuevo Nancagua I, ambos de esta comuna; El Progreso de Pichilemu; Don Horacio IV de Santa Cruz, y Villa La Paz de Paredones. “Antes del terremoto la empresa trabajaba con alrededor de 70 obreros, pero después del 27 de febrero aumentamos casi en un 120%”, manifestó Francisco Donoso, gerente general de la constructora Los Acacios, que está a cargo de estos proyectos, los cuales acogerán a 730 familias en total y estarán terminados durante 2012. De forma similar, Orlando Villarroel, Gerente Técnico y Profesional de Obras de Constructora Vipalco que ya ha construido más de 200 viviendas tipo y trabaja en el emplazamiento de otras 300 en ocho comunas de la región, destaca que “cuando que iniciamos las obras de reconstrucción en noviembre de 2010 teníamos alrededor de 60 personas estables. El incremento ha sido un 200%
aproximadamente a la fecha, entre trabajadores directos y subcontratados”. El aumento en el empleo en la región se ha visto traducido en mayor cantidad de puestos de trabajo de distintas especialidades, como albañiles, carpinteros y gásfiter entre otros. Sin embargo, según las empresas constructoras, los jornales o mano de obra no calificada ha sido el grupo más solicitado, y se ha contratado en cada comuna, hecho que además permite que las personas no deban alejarse de sus hogares para optar a una alternativa de trabajo.
En Rancagua, por ejemplo, sólo en los proyectos Don Mateo etapas I, II, III y IV; Álamos de la Cruz I y II; Doña Gabriela; Ilusión y Futuro, y Nuevo Horizonte I y II, se han generado alrededor de 880 empleos. Se suman, en esta misma comuna, otros 300 trabajadores que están levantando las villas Los Parques I y II, y Compañía Real I y II.
El trabajo realizado durante 2011 estuvo centrado mayoritariamente en devolver sus hogares a las familias damnificadas del terremoto, entregándole especial importancia a las zonas patrimoniales. De ahí que Serviu LGB O’Higgins haya entregado este año 364 subsidios habitacionales para recuperar las zonas de conservación histórica y típicas. Junto con entregar los certificados también se trabajó en la ejecución de las obras. Fue así como en las comunas de Chépica, Chimbarongo, La Estrella, Lolol, Peralillo, Placilla, Quinta de Tilcoco y Rancagua se iniciaron las obras de reconstrucción de 72 viviendas, trabajos que en 10 de ellas –Chépica y Quinta de Tilcoco- ya finalizaron.
A la fecha, además, se han visto beneficiadas con estos subsidios familias de las comunas de Codegua, Coinco, Doñihue, Graneros, Las Cabras, Malloa, Marchigüe, Mostazal, Olivar, Paredones, Peumo, Pichidegua, Pumanque, Rengo, Requínoa, San Vicente de Tagua Tagua y Santa Cruz. Los subsidios patrimoniales financian obras para reparar o reconstruir un mínimo de 50 metros cuadrados, ya sea de viviendas nuevas o existentes, del los programas DS40, Fondo Solidario de Vivienda I y PPPF. El objetivo es recuperar el inmueble que forma la fachada urbana de la localidad y su habitabilidad, proyectando dar la bienvenida a 2012 con todos los subsidios habitacionales patrimoniales asignados.
Alrededor de un 25% más funcionarios se sumaron al proceso que se lleva adelante en la región. Se trata principalmente de trabajadores que se integraron al Departamento Técnico. También este año se fortalecieron los programas de habilitación social. La reconstrucción en la Región LGB O’Higgins continúa avanzando a paso firme para sacar adelante a las familias damnificadas del terremoto del 27F. De ahí que Serviu esté fortaleciendo sus equipos, a través del incremento de profesionales que están trabajando para agilizar el proceso y devolver
la tranquilidad a quienes perdieron sus hogares. En este contexto, es que a la fecha se han sumado 76 personas al equipo de Serviu LGB O’Higgins, tanto en las oficinas de Rancagua, San Fernando, Santa Cruz y Pichilemu, incrementándose así la dotación regional respecto del año 2010. De este total de trabajadores nuevos que se sumó a la reconstrucción en la región, la gran mayoría –sobre un 70%- , corresponde a profesionales que se incorporaron al Departamento Técnico, área que aumentó la cantidad de inspectores de obras para hacer
frente a la gran cantidad de faenas que se están ejecutando. Así también, este año se trabajó en potenciar profesionalmente el área social, fomentando los programas de habilitación. El incremento en la dotación de profesionales en Serviu LGB O’Higgins tiene relación con la etapa del proceso de reconstrucción que se está desarrollando. Si tras el terremoto en 2010 los esfuerzos estuvieron orientados a trabajar en la planificación, 2011 es el año del “manos a la obra”, de la ejecución de obras, de la
construcción de sueños. “Nos comprometimos a devolver la tranquilidad a las familias que perdieron sus hogares producto del terremoto, y en eso estamos trabajando responsablemente. Para que la reconstrucción avance y tenga los resultados que esperamos todos, es necesario contar con una mayor cantidad de profesionales en terreno que se encarguen de fiscalizar que las obras cumplan con todos los requisitos técnicos para asegurar el bienestar a las familias”, destacó el Director Regional de Serviu, Fernando Fondón.
La reconstrucción de la región y del resto del país ha traído consigo importantes condicionantes en la ejecución de soluciones habitacionales para las familias damnificadas del terremoto del 27F. Por un lado se busca levantar viviendas de gran calidad y, por otro, ejecutar este proceso de la forma más rápida y eficiente posible. de construcción de vivienda tipo en sitio residente se presenta como una excelente alternativa para devolver la tranquilidad a las personas que viven en sectores distantes uno del otro, pues esta modalidad promueve la innovación constructiva de casas precertificadas y agiliza los tiempos y procedimientos operativos de postulación. Actualmente se trabaja con dos sistemas de viviendas tipo: las construidas de albañilería armada, que tardan alrededor de 3 meses en ser levantadas, y las prefabricadas, que demoran entre 20 días y un mes en ser armadas, pues utiliza panales ensamblados. Estos tiempos, claro está, se refieren a plazos promedios y dicen relación con condiciones ideales de construcción. A ellos deben sumar otras faenas previas necesarias para el emplazamiento de una buena vivienda. “Si no había sistema de alcantarillado, la constructora tiene que hacer un alcantarillado particular, o bien habilitar el terreno, o demoler la casa
anterior que estaba en condiciones inhabitable”, dice Vanessa Cornejo, Coordinadora del Proyecto Vivienda Tipo de Serviu O’Higgins. La profesional explica que “la construcción con vivienda tipo es la más rápida del proceso de reconstrucción”, ya que “incluso –manifiestahay algunas casas que las traen armadas desde la fábrica y la instalan”. Sin embargo, aclara que los plazos van a depender de cuántas casas estén levantando las constructoras de forma simultánea, ya que el trabajo que se realiza es paralelo en diversos sectores de la región. Viviendas tipo prefabricadas Pero más allá de los plazos breves de construcción en relación al levantamiento de otro tipo de casas, las viviendas tipo construidas con paneles tienen muchas ventajas. “El hecho de que sean levantadas con este sistema y que los tiempos de construcción sean menores no quiere decir que también sean de menor calidad”, destaca Vanessa Cornejo. Y es que las viviendas tipo levantadas con el sistema de paneles son entregadas a las familias con diversas terminaciones dependiendo del modelo elegido. Por ejemplo, algunas de ellas incluyen cerámica, piso flotante o alfombra en los dormitorios. “Al final la esencia, lo que a nosotros nos interesa, es que sea funcional”, subraya la Coordinadora del
Programa, comentando además que la elección del modelo de la vivienda tipo es decidida por cada familia, según sus necesidades y características del terreno donde se ubicará. Aprobación técnica Independientemente de si la vivienda tipo construida es de albañilería o prefabricada, y al igual que los otros programas de reconstrucción del Minvu, se somete a constantes revisiones técnicas por parte de los equipos especializados, con el fin de entregar un hogar digno a las personas beneficiadas. De hecho, ambos sistemas constructivos pasan por la aprobación de la normativa térmica, acústica y contra el fuego, pues pese a que la materialidad es distinta, cumplen las mismas funciones. “Durante la ejecución, la obra, que es inspeccionada y supervisada por Serviu, está garantizada por una boleta de garantía de la empresa constructora. Cuando la obra se termina, a la empresa no se le paga si no tiene todas las observaciones subsanadas, por lo tanto la casa queda totalmente terminada”, resalta Vanesa Cornejo. Agrega que “sin
embargo, hay una segunda boleta de garantía que tiene una duración de un año a partir de la recepción. Así pasa por todas las condiciones climáticas la casa para poder ver si realmente está hermética”. Posibilidad de ampliación Las viviendas tipo del proceso de reconstrucción que lleva adelante el Minvu cumplen con toda la normativa antisísmica e incluyen también modernas técnicas de construcción, como la utilización de poliestireno expandido, material impermeable que permite la aislación térmica. Así también, explica, Diego Pérez, Ejecutivo del Programa de Vivienda Tipo, muchas de estas viviendas están proyectadas para una ampliación si las familias lo desean. “Si bien la ampliación no está en la casa, sí están dibujada en el plano, entonces la persona no tiene que pedir permisos municipales y puede postular a subsidios de ampliación posteriormente”.
La región cerrará el año asignando más de 13.000 subsidios de reconstrucción que sumados a los del año anterior suman más de 26.000 subsidios. De estos, 20.000 corresponden a construcción o adquisición de nuevas viviendas y algo más de 6.000 son reparaciones. Quedan aún por revisar cerca de 2.000 postulaciones que mantienen observaciones, principalmente acerca de la real condición de los arrendatarios o allegados de una vivienda destruida. Resulta difícil dimensionar estas cifras, pero se puede entender mejor el tamaño del desafío comparando el problema con algo conocido. En nuestra región, una ciudad intermedia, como por ejemplo Santa Cruz, tiene algo más de 12.000 viviendas (según datos del INE). La exigencia es por tanto equivalente a reconstruir o reparar una por una y absolutamente todas las viviendas de esta ciudad más de 2 veces seguidas. Cabe entonces reflexionar sobre cuánto tardaría la reconstrucción completa de una ciudad de
ese tamaño (San Vicente y Machalí sirven también como ejemplos) y se tendrá una primera referencia. También se puede comparar con las casi 26.000 viviendas que suman todas las comunas de Cardenal Caro: Pichilemu, Litueche, Navidad, La Estrella, Paredones y Marchigüe. Desde abril de 2010 y hasta diciembre de 2011, SERVIU ha atendido a más de 26.000 familias damnificadas, pero que no pertenecen a una sola ciudad sino que se encuentran dispersas en las 33 comunas de esta región. Al mismo tiempo, este servicio debió atender a más de 7.000 familias que postularon a los programas regulares de vivienda durante el mismo periodo, llegando a superar los 33.000 subsidios asignados. La producción, la productividad neta por asignación de subsidios y la productividad neta por gasto ejecutado aumentaron considerablemente, permitiendo a SERVIU superar por primera vez en su historia los $100.000 millones de presupuesto este año. Por otra parte, el avance de obras de
construcción es muy satisfactorio. Se han iniciado más de 16.000 obras en la región y poco más de 10.000 de ellas serán nuevas viviendas. Esto significa que sobre el 70% de los subsidios ya está en ejecución. No hemos podido avanzar más simplemente porque la industria carece de capacidad de oferta, es decir, faltan más empresas y constructores. Una prueba evidente de esto y que está muy relacionada con la reconstrucción, ha sido la caída de la tasa de desempleo que bajó a un 6% durante el último trimestre y justo antes de la temporada agrícola, lo que significa que la región está acercándose al pleno empleo. Sin embargo, a pesar del esfuerzo titánico que se ha llevado a cabo, la reconstrucción aún no logra mejorar su evaluación en la opinión pública y SERVIU debe enfrentar frecuentes críticas contra su trabajo, muchas de ellas
desproporcionadas. Tal vez no sea muy distinto a lo que ocurre con la situación de la economía: este año se han vendido cerca de 1.000.000 de automóviles, las ventas navideñas siguen creciendo, prácticamente todos los indicadores del comercio y del trabajo han mejorado y, a pesar de todo, las encuestas en 2011 no fueron muy positivas. ¿Pesimismo? ¿Desinformación? ¿Falta de un punto de referencia adecuado? ¿Todas las anteriores? Juzgue Usted.
Antes de recibir su nueva casa el pasado 12 de diciembre, la dirigenta Paola Díaz me dijo que se cambiaría cuanto antes porque quería empezar una nueva vida junto a su familia. La espera fue muy recompensada para ella y para las 141 familias del conjunto habitacional “Compañía Real”, que inauguró el Presidente Sebastián Piñera para los primeros damnificados de la devastada y emblemática Villa Cordillera, en Rancagua. Paola es una de las miles de familias que están siendo beneficiadas con el plan de reconstrucción. Tenemos que reconstruir o reparar 220 mil viviendas para 880 mil chilenos, más que todas las viviendas de Rancagua, Talca, Concepción y Talcahuano juntas, y que tienen la complejidad de estar dispersas en seis regiones, 600 kilómetros de extensión y más de mil localidades Frente a este escenario hemos innovado permanentemente, buscando las mejores soluciones para agilizar al máximo la construcción y entrega de las viviendas. En la Región del Libertador General Bernardo O’Higgins estamos avanzando con fuerza. Al 30 de noviembre hemos asignado 22.586 subsidios de reconstrucción, iniciado casi 16 mil obras -de las cuales 10 mil son nuevas viviendas-, y terminado casi tres mil. A nivel nacional, en tanto, se han asignado 190 mil subsidios, iniciado 129 mil obras y terminado 68 mil. Pero mientras trabajamos en la reconstrucción no hemos olvidado a las familias del programa regular, de campamentos, de sectores emergentes y clase media que han esperado durante años tener un techo digno. En los dos primeros años del Gobierno del Presidente Sebastián Piñera entregaremos 400 mil subsidios habitacionales que beneficiarán directamente a 1,6 millones de chilenos, equivalente al 10% de toda la población. Son cifras que muestran un compromiso real, auténtico y sostenido de apoyo a la familia chilena. Quiero desearles a todos los habitantes de mi querida Región un muy próspero Año Nuevo. Sabemos que aún hay compatriotas damnificados que viven en situación de vulnerabilidad, de allegados o de arrendatarios, pero queremos decirles que seguiremos trabajando con toda nuestra fuerza para devolverles la dignidad que se merecen. Juntos vamos a reconstruir un Chile mejor. Rodrigo Pérez Mackenna Ministro de Vivienda y Urbanismo
Optimizar la gestión interna para mejorar también la atención a las familias ha sido parte de la labor en la cual enfocó sus esfuerzos el equipo de Serviu O’Higgins, dirigido por su Director, Fernando Fondón, durante 2011. Tras el terremoto, el servicio impulsó diversas iniciativas innovadoras para mejorar su operatividad, resultados que se vieron traducidos en la entrega de subsidios habitacionales y viviendas. HORA PARA POSTULAR ONLINE Como una forma de hacer más eficiente y expedita la postulación a los subsidios habitacionales que entrega el Minvu, este año se puso a disposición de las personas un sistema más rápido de reserva de hora para realizar este trámite, el cual operó a través de internet. La opción de resera de hora está disponible en el sitio web del servicio y se sumó a la reserva presencial tradicional. “Es una herramienta fácil de utilizar que beneficia a nuestros usuarios, porque así optimizan su tiempo. No es necesario que vengan al servicio para pedir la hora de postulación”, destacó el Director Regional de Serviu, Fernando Fondón. MÁS SUPERVISORES DE OBRA El aumento de construcciones de viviendas trajo consigo no sólo un incremento en el empleo de obreros, también fue necesario que Serviu dispusiera de una mayor cantidad de supervisores de obras para fiscalizar que las faenas se ejecutaran bajo los estándares establecidos. Fue así como la dotación de supervisores de obra aumentó en un 50%, permitiendo potenciar el trabajo que se realiza para entregar viviendas
de calidad a las familias de la región. NUEVAS OFICINAS DE SERVIU Porque mejorar la atención a los usuarios es el plan de acción de Serviu O’Higgins y éste conlleva un mayor acercamiento a las familias, el servicio implementó en 2011 nuevas oficinas en las comunas de Santa Cruz y Pichilemu. Ambas dependencias se suman a la oficina central en Rancagua y la delegación provincial en San Fernando. Cuentan con equipos de profesionales dispuestos a atender dudas, consultas y postulaciones a subsidios. NUEVAS Y MEJORES MÁQUINAS Un equipamiento de primera línea, que ha permitido mejorar de forma continua el servicio hacia la comunidad, es el que incorporó el Departamento Técnico de Serviu O’Higgins a su trabajo. Con él se puede medir la cobertura del hormigón sobre las barras de fierro, así como también la localización, la orientación y el tamaño de las barras. El nuevo equipamiento fue calificado como un verdadero laboratorio portátil, pues gracias a él se pueden verificar las estructuras construidas sin necesidad de hacer ensayos destructivos. El equipamiento debutó en la comuna de San Fernando. Sus funciones se pueden controlar sólo a través de 4 teclas y está diseñado para resistir al agua. Plan digital Un nuevo sitio web de Serviu O’Higgins, más completo y amigable, debutó este 2011. Se trata de un portal 2.0, que incorpora un moderno diseño y ofrece a los usuarios un lugar virtual más interactivo, con información actualizada y datos de interés a la mano, entre otras muchas ventajas. El nuevo portal que reemplaza al anterior 1.0 se suma a la presencia de Serviu
O’Higgins en las redes sociales, como Twitter y Facebook, donde también las personas pueden mantenerse informadas. GESTIÓN DOCUMENTAL El gran sismo no sólo dejó casas destruidas, también el movimiento se reflejó en los archivos históricos de Serviu O’Higgins, los que terminaron literalmente en el suelo. Documentos de subsidios asignados, libretos de ahorro y planes, por ejemplo, cayeron, hecho que impulsó que hace un año el servicio reorganizara sus bibliotecas. Gracias al trabajo de una persona especialmente encargada de llevar el orden de los archivos, Serviu O’Higgins logró convertirse en el primero de todo el país en traspasar documentos históricos al archivo nacional de Santiago. Hoy se cuenta con un 50% de avance en esta reorganización. De esta forma, en Rancagua se mantiene la documentación más reciente y utilizada, es decir, la del año 2000 en adelante. NUEVA UNIDAD DE PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA En el mes de marzo se oficializó la creación de una nueva Unidad en Serviu O’Higgins. Se trata de Planificación Estratégica, cuya función es asesorar a la Dirección y apoyar a los otros departamentos del servicio para lograr los objetivos comunes, pues la entrega de subsidios aumentó cuatro veces respecto de antes de la catástrofe. Principalmente, la Unidad de Planificación Estratégica –que está compuesta por un equipo multiprofesional de 12 personas- se encarga de la coordinación del programa de reconstrucción, la gestión de la venta de terrenos de Serviu y el plan de gestión de la calidad (contratación de personal). En términos
concretos, se pasó de entregar de entre 3 mil y 4 mil subsidios anuales a 13 mil sólo en reconstrucción, cifra que aumenta a 17 mil si se considera la modalidad regular. La creación de esta unidad –que también se materializó en la región Metropolitana- implicó variaciones en el organigrama completo de Serviu. “Hicimos la reestructuración para trabajar bien en la reconstrucción, porque nos dimos cuenta que con el funcionamiento normal no deba abasto para todo el trabajo que tenía que hacer. Entonces hubo que cambiar algunas funciones, agregar algunos departamentos y unidades”, comenta Miguel Mora, Encargado de la unidad.