LÍDERES DE LA MONTAÑA
Guía metodológica para la formación en Liderazgo, Derechos y Ambiente
Líderes de Montaña: Guía metodológica para la formación en Liderazgo, Derechos y Ambiente
Proyecto “Fortalecimiento a los actores sociales del territorio mancomunado del pueblo cañari”, con el financiamiento de la GIZ-Cooperación Alemana en Ecuador, y ejecutado por SENDAS, octubre del 2022 a noviembre del 2023
Elaborada por:
Marcelo Ordóñez Rodas
Contenidos modulares:
Ma. Isabel Cordero
Alexandra Vásquez
Melva Mendieta
Carmen Ortiz
Marcelo Ordóñez Rodas
Coordinación territorial:
Mariana Solano
Marcelo Ordóñez Rodas
Revisión Técnica:
Ma Isabel Cordero
Edición:
Tatiana León Alvarez
Financiado por:
GIZ – Cooperación Alemana Ecuador
Ecuador, mayo del 2023
La presente publicación puede ser reproducida y difundida de forma libre siempre y cuando reconozca la autoría y se asegure un uso ético de la información que favorezca la promoción y difusión de los derechos humanos
Esta publicación ha sido producida con el financiamiento de la GIZ, su contenido es responsabilidad exclusiva de Sendas, no necesariamente es un reflejo de los puntos de vista de la GIZ.
Presentación
Sendas es una organización no gubernamental del sur del país con impacto a nivel nacional y regional, que aboga por la construcción de una sociedad justa, igualitaria y digna. Para lograr este objetivo, entre otras estrategias, implementa programas y proyectos de desarrollo y derechos humanos.
Desde octubre de 2022, en colaboración con la Cooperación Alemana GIZ, lleva a cabo el proyecto “FORTALECIMIENTO AL TERRITORIO MANCOMUNADO
DEL PUEBLO CAÑARI Y SUS ACTORES”, cuyo objetivo general es contribuir al fortalecimiento de las capacidades individuales, organizativas y estratégicas para el desarrollo sostenible de la Mancomunidad del Pueblo Cañari.
La fundación Sendas considera que los procesos de formación continua son esenciales para su acción práctica, ya que se preocupa por mejorar constantemente las capacidades y la participación de las mujeres y los jóvenes, especialmente en áreas rurales. En este sentido, como parte de su iniciativa “Escuela de Liderazgo, derechos y ambiente”, se desarrolló un proceso de formación dirigido a jóvenes de organizaciones sociales en los cantones Cañar, El Tambo y Suscal. La escuela se llevó a cabo en colaboración con el proyecto “Siembre y cosecha de agua”, liderado por el Gobierno Provincial de Cañar, el MAATE y la Universidad Católica de Cuenca. La universidad otorgó un aval académico a la escuela, que se ejecutó entre diciembre del 2022 y abril del 2023.
Como resultado, surgió “Líderes de la Montaña: Guía Metodológica para la formación en liderazgo, derechos y ambiente”. Esta guía constituye una herramienta valiosa para fortalecer el liderazgo y la defensa de los derechos humanos y naturales en procesos formativos con jóvenes y mujeres del área rural con quienes trabaja Sendas y sus aliados. La guía puede ser replicada total o parcialmente según sea necesario.
El modelo pedagógico propuesto busca lograr los aprendizajes a través de la participación activa en acciones intencionales, planificadas y sistemáticas. El objetivo es construir aprendizajes significativos y duraderos, útiles para la vida. Esto requiere una constante motivación, reflexión y enfrentamiento de desafíos durante el proceso de aprendizaje.
Es fundamental tener en cuenta que el estudio pasivo y centrado únicamente en la memoria no genera un verdadero aprendizaje. Por el contrario, cuando la actividad es motivadora, problematizadora y plantea desafíos, se pueden establecer conexiones entre conceptos y hechos relevantes. De esta forma, se favorece un aprendizaje significativo que permite comprender, aplicar, interpretar, generalizar, contextualizar y descontextualizar los conocimientos adquiridos, logrando su retención a largo plazo.
Una actividad problematizadora implica generar rupturas o conflictos cognitivos y psicoemocionales que estimulen una reflexión activa por parte del estudiante. Esto facilita la expresión de ideas y habilidades adquiridas durante el proceso de aprendizaje. En resumen, este modelo pedagógico tiene como objetivo promover aprendizajes significativos y duraderos a través de actividades motivadoras e intencionales que involucren la participación activa de las y los participantes.
El diálogo de saberes busca reconocer que todos los procesos de aprendizaje ocurren entre personas con diferentes tipos de saberes y visiones del mundo. Se reconoce que estos saberes son igualmente valiosos, e incluso pueden ser más ricos, que los saberes tradicionalmente valorados en la cultura occidental. Por lo tanto, los procesos de formación no deben concebirse como un mecanismo unidireccional en el que se transmite conocimiento o se deposita saber útil, sino como una sinergia entre el conocimiento técnico, científico y ancestral.
El siguiente gráfico ilustra esta sinergia, destacando que cada tipo de conocimiento tiene algo importante que aportar. Al integrar estos tres tipos de saberes, se pueden alcanzar soluciones más integrales y efectivas para abordar los desafíos contemporáneos en diversas áreas.
Elementos pedagógico-metodológicos para potenciar el aprendizaje
Es esencial tener en cuenta que el diálogo de saberes implica reconocer que todos tienen algo relevante que aportar al proceso educativo, independientemente de su nivel académico o cultural. Esto promueve una educación diversa, inclusiva y con soluciones más completas y efectivas para los retos actuales.
El ciclo de aprendizaje desde una visión de construcción de saberes
La educación es un proceso continuo que implica la participación activa, tanto de las y los participantes como de las personas responsables de facilitar el aprendizaje. Su objetivo es el desarrollo y la adquisición de competencias, que incluyen conocimientos, habilidades, destrezas y valores.
Desde esta perspectiva, se privilegian los elementos de la educación popular y del modelo experiencial de aprendizaje, otorgando importancia a la experiencia directa y activa como fuente de aprendizaje significativo.
En este sentido, se sigue un enfoque basado en cinco momentos interrelacionados que buscan maximizar los resultados del proceso de aprendizaje, como son: compartir, procesar, generalizar, aplicar y vivenciar. Estos momentos son fundamentales para la generación de competencias.
Compartir, se trata de crear espacios para el intercambio de ideas, experiencias y perspectivas, lo que enriquece el aprendizaje a través de la diversidad de opiniones y aportes. De esta manera, se establece una base común para el
proceso de aprendizaje y se pueden identificar las fortalezas y debilidades del grupo en relación con el tema a tratar. La participación activa y el diálogo entre los estudiantes contribuyen a la construcción colectiva del conocimiento.
Procesar, permite a los participantes examinar en profundidad la información y las experiencias compartidas, establecer conexiones significativas y construir un entendimiento más sólido del contenido. Se fomenta el pensamiento crítico, la evaluación de diferentes perspectivas y la generación de significados propios, lo que contribuye a una comprensión más profunda y duradera.
Generalizar, la generalización en el proceso de aprendizaje consiste en identificar patrones o regularidades entre los conceptos clave, comprender su significado en un contexto más amplio y fortalecer la capacidad de aplicar y transferir el conocimiento a nuevas situaciones. Es una fase que promueve el pensamiento abstracto, la identificación de principios generales y la adaptabilidad en diversos escenarios.
Aplicar, en este momento, se promueve la aplicación práctica de los conocimientos y las habilidades adquiridas. Las y los participantes, tienen la oportunidad de utilizar el conocimiento en situaciones reales, resolver problemas, tomar decisiones y enfrentar desafíos auténticos. La aplicación activa y significativa del aprendizaje refuerza la comprensión y la retención del contenido.
Vivenciar, se busca que las y los participantes experimenten y reflexionen sobre las implicaciones y los efectos de su aprendizaje en su vida y en su entorno. Se les brinda la oportunidad de relacionar el conocimiento adquirido con su realidad, sus valores y sus experiencias personales. La vivencia y la conexión emocional fortalecen el sentido de pertinencia y la motivación intrínseca para seguir aprendiendo.
En conclusión, el enfoque basado en estos cinco momentos busca maximizar los resultados del proceso de aprendizaje, promover las interrelaciones para la construcción conjunta de conocimientos, habilidades, destrezas y valores de manera significativa, conjugando la reflexión crítica, la aplicación práctica y la conexión con la realidad.
Tejiendo una red de contenidos
Se plantea una malla curricular que permita a las y los participantes profundizar en los temas esenciales del liderazgo, los derechos y el medio ambiente.
A través de una variedad de recursos pedagógicos y actividades prácticas, se pretende fomentar una comprensión completa y significativa de estos temas, estimulando la reflexión crítica, la participación activa y el desarrollo de habilidades relacionadas con la identidad, autoestima y autonomía. Asimismo, se busca fortalecer la gestión comunitaria de los ecosistemas de montaña, promover la organización comunitaria, influir en las políticas públicas y promover iniciativas y emprendimientos productivos para lograr la autonomía financiera.
El proceso de formación “Líderes de Montañas” se divide en 3 módulos, cada uno consta de 2 sesiones. La duración total estimada del curso es de aproximadamente 42 horas. La organización de las jornadas de trabajo dependerá de las características del grupo y de los acuerdos establecidos. Es crucial asegurar el logro de los resultados de aprendizaje propuestos en cada módulo para garantizar el éxito del curso.
Objetivos General
La implementación de la Guía Líderes de Montaña, apunta a que las y los jóvenes que hacen el proceso formativo cuenten con destrezas para defender sus derechos, articularse con las iniciativas de conservación y cuidado de las montañas y sus recursos, y liderar sus comunidades y organizaciones para garantizar el recambio generacional y la paridad de género en las dirigencias.
Específicos
• Valorar la riqueza de la diversidad y sus propias identidades, comprendiendo los conceptos relacionados con la discriminación de género, las diversidades sexuales y la violencia basada en género.
• Apropiarse de las experiencias de cuidado y gestión de los recursos naturales en su zona de residencia, conocer el marco jurídico e institucional del agua y el ambiente, y proponer alternativas para el cuidado de los ecosistemas locales.
• Comprender los conceptos y metodologías relacionados con la organización, liderazgo y los procesos de incidencia en políticas públicas, así como recomendar procesos de incidencia en su localidad.
Contenidos a trabajar
Módulo 1. Desarrollo Personal
SESIÓN 1 Identidad, género, autoestima y autonomía.
SESIÓN 2 Género y cambio climático.
Módulo 2. Gestión comunitaria de los ecosistemas de montaña
SESIÓN 1 Marco normativo e institucional de la gestión de los recursos en el Ecuador.
SESIÓN 2 Iniciativas locales de conservación, el proyecto montañas y otras iniciativas locales.
SESIÓN 1 Liderazgo y organización.
SESIÓN 2 Lo público, el problema público, la política pública.
SESIÓN 1 Emprendimientos productivos y la cadena de valor.
SESIÓN 2 Educación financiera y marketing digital.
Cada módulo se concibe como una construcción temática integral que busca fortalecer las capacidades de liderazgo juvenil. Estos módulos pueden ser aplicados de manera sistemática como parte de un proceso continuo, pero también es posible utilizarlos de forma autónoma en talleres puntuales según las necesidades y objetivos específicos.
Con el objetivo de garantizar una evaluación precisa de las competencias planificadas, se ha diseñado un instrumento para levantar un diagnóstico, que nos permita tener una línea base, y que debe ser aplicada al inicio y al fin del proceso. Esta línea base nos permite, entre otros puntos, observar y analizar el nivel de conocimiento del grupo, los cambios generados en el logro de los resultados de aprendizaje y finalmente, frente a esos logros, retroalimentar las estrategias y recursos de formación.
Perfil de los facilitadores y facilitadoras: habilidades y competencias
Si bien la guía proporciona una descripción detallada del desarrollo de cada sesión, es importante considerar ciertos requisitos mínimos del perfil de las personas encargadas de la facilitación en el proceso de aprendizaje, las mismas que se describen a continuación:
1. Si bien este fue un módulo ejecutado en el proceso del que esta guía tiene origen, el presente manual no recoge el mismo, dado que es decisión de Sendas la de producir una guía específica para el tema sobre le que el acumulado institucional tiene muchísimos insumos.
• Manejo de técnicas y herramientas para la conducción de grupos de jóvenes, hombres y mujeres, que promuevan la participación activa en el logro de aprendizajes significativos.
• La crisis climática, el género, la diversidad y la interculturalidad requieren, sin duda alguna, un profundo involucramiento por parte del facilitador o facilitadora, así como un dominio de los enfoques teóricos y políticos relacionados. Sólido compromiso con la temática a trabajar.
• Conocimiento previo de los temas que se abordarán en las sesiones. Se recomienda evitar la “todología”, que es la actitud poco ética de creer que se puede facilitar todos los temas para todos los públicos, únicamente en virtud del manejo de los modelos de “educación popular o modelo experiencial de aprendizaje”.
La guía proporciona metodología y contenidos, pero no sustituye la formación específica que el o la facilitadora debe tener previamente para llevar a cabo la sesión de manera efectiva.
• Es deseable y necesario contar con un buen conocimiento del entorno en el que se llevan a cabo las sesiones, así como tener una comprensión del perfil del grupo. En este sentido, resulta fundamental, antes de cada taller, tener un diagnóstico del grupo, que nos brinde información y elementos clave.
Módulo 1. DESARROLLO PERSONAL
Objetivo
Valorar la riqueza de la diversidad y sus propias identidades, comprendiendo los conceptos relacionados con la discriminación de género, las diversidades sexuales y la violencia basada en género.
MÓDULO
1. PRIMERA SESIÓN
DESARROLLO PERSONAL, IDENTIDAD Y GÉNERO Tiempo sugerido: 6 horas con 30 minutos.
Resultados de aprendizaje
Al final de la sesión, los y las participantes deberán alcanzar los siguientes resultados de aprendizaje:
• Reconoce la importancia de la autonomía, autodeterminación, y autoestima.
• Reflexiona sobre los elementos que conforman nuestra identidad, lo que nos hace diversos y únicos.
• Desarrolla habilidades para valorar y respetar la diversidad de personas con las que convivimos.
• Comprende el género como concepto, categoría y enfoque a través del análisis del contexto y de prácticas cotidianas.
• Plantea estrategias para superar las inequidades y la discriminación desde un liderazgo que respeta los derechos humanos.
Estructura de la sesión
La sesión se compone de tres bloques:
• En la primera parte se trabaja de manera vivencial los conceptos de autoestima, autonomía y autodeterminación.
• En una segunda instancia, se comparten y discuten los conceptos alrededor del género.
• Finalmente, se acuerdan estrategias para promover prácticas que combatan la discriminación y ayuden a construir sociedades respetuosas de la diversidad.
hora
Inscripciones Establece unos minutos para el registro de participantes.
Ficha de inscripción
Papelotes y marcadores
Dinámica de presentación
¿Cómo me veo?
Análisis de autoestima, autodeterminación y autonomía.
El cerillo: Para comenzar nuestro taller, es fundamental que todos y todas podamos conocernos.
Trabajo individual: En esta fase, se les solicitará a las y los participantes que reflexionen sobre un dibujo que representa su propio cuerpo. Deberán considerar lo que aman y lo que les disgusta de sí mismos.
Reflexión grupal sobre los resultados del trabajo. Presentación de los conceptos clave de autoestima, autodeterminación y autonomía, destacando su importancia en el desarrollo personal y en las relaciones con los demás.
Identidad y discriminación
Dinámica grupal: Mi nueva identidad. En esta dinámica grupal, exploraremos la construcción de nuestra identidad y cómo ciertas variables pueden generar discriminación y miedo.
Reconocimiento de las variables que componen la identidad, nos ayudará a comprender mejor la diversidad y complejidad de nuestras identidades individuales y colectivas.
Tarjetas de la dinámica
“Mi Nueva Identidad“.
Género: concepto, categoría y enfoque
Revisión de conceptos: dedicaremos tiempo a revisar los conceptos que el grupo no tiene claros. Si hay alguna terminología o ideas que no comprenden completamente, aprovecharemos esta oportunidad para aclararlas.
Trabajo en grupos: reconocer situaciones en donde exista desigualdad de género.
Una vez que los grupos hayan identificado diversas situaciones de desigualdad de género, nos reuniremos en una discusión grupal para compartir y analizar los hallazgos.
Refuerzo conceptual sobre género como concepto, categoría y enfoque. Esta actividad busca aumentar la conciencia sobre las desigualdades de género, fomentar la reflexión crítica y promover la igualdad de género.
2 horas
Evaluación
Tarea post taller
Desarrollo de la sesión:
Dinámica de presentación
En esta dinámica de presentación, hay que enfocarse en conocernos mejor y establecer expectativas claras para el taller. Recuerde contar con una caja de fósforos para llevar a cabo esta actividad.
Solicite al grupo que formen un círculo, de manera que todos estén visibles y puedan escucharse entre sí. Como responsable de la facilitación, toma
30 min
un fósforo y enciéndelo. Mientras el fósforo se consume, cada participante debe presentarse y compartir su nombre, comunidad a la que pertenece, organización en la que participa y qué expectativas tiene para el taller. Cada persona debe intentar completar su presentación antes de que el fósforo se apague.
Asegúrate de tomar en cuenta las expectativas expresadas por cada participante, tenlas en cuenta para adaptar y ajustar el desarrollo del taller según sea posible.
¿Cómo me veo? Análisis de autoestima, autodeterminación y autonomía
Se entrega a cada participante una hoja en blanco y dos marcadores o lápices de colores. Solicitar que se dibujen a sí mismos de cuerpo entero. No importan que no sean buenos dibujantes, la intención es que se sientan identificados.
Una vez que su dibujo esté listo, deberán responder a las siguientes preguntas, sobre o junto, a la parte de su cuerpo que corresponda:
– ¿Qué es lo que más amo de mi cuerpo?
– ¿Qué es lo que más detesto de mi cuerpo?
– ¿Qué es lo que los otros aman de mi cuerpo?
– ¿Qué es lo que no les gusta a otros de mi cuerpo?
– ¿Dónde me duele cuando lastiman mis emociones?
– ¿Dónde se siente bien cuando me miman?
Una vez que han terminado el ejercicio, promueva la participación e intercambio de opiniones a través de las siguientes preguntas: ¿cómo se sintieron?, ¿fue difícil el ejercicio?, ¿por qué no reflexionamos sobres sus respuestas?
Es importante recordar que no hay respuestas correctas o incorrectas en este ejercicio. Cada persona tiene su propia percepción y valoración de sí misma. El objetivo principal es fomentar la reflexión sobre la autoestima, la autodeterminación y la autonomía, y promover una visión positiva de cada persona.
Luego de estas preguntas, de forma voluntaria, las y los participantes ponen en común los resultados del ejercicio, respetando a quienes no quieran hacerlo.
Finalmente, quien facilita deberá reflexionar en grupo sobre los siguientes puntos:
• Nos cuesta reconocer lo que nosotros y otros aman de nuestro cuerpo debido a que nos han inculcado la idea de que debemos ser modestos y no destacar nuestras propias cualidades. Sin embargo, esta creencia es un error del sistema cuando hablamos de la importancia de la autoestima.
• ¿Qué podemos hacer respecto a lo que no nos gusta de nosotros mismos? Es una pregunta relevante que nos lleva a reflexionar sobre nuestra relación con nuestro cuerpo y nuestra autoimagen. Es válido querer hacer cambios en aquello que no nos gusta y que podemos cambiar. Si existe la posibilidad de realizar modificaciones que nos hagan sentir más felices y seguros con nosotros mismos, está bien explorar esas opciones. Sin embargo, es esencial recordar que estos cambios deben ser para nuestro propio bienestar y satisfacción personal, no para complacer a terceros o ajustarnos a estándares externos.
Identidad y discriminación
En el paquete que fue entregado para la facilitación, consta un juego de tarjetas para la realización de esta actividad.
Entrega a cada participante un juego de tarjetas con características propias de la identidad de una persona, como sexo, edad, clase económica, religión, lugar de residencia, orientación sexual, identidad de género, condición de salud, entre otros. Estas tarjetas no pueden ser vistas ni compartidas hasta que quien facilita el taller lo indique.
Se pide al grupo que cierre los ojos y se les explica que jugarán a “nacer otra vez”. Se les solicita que recuerden momentos como su primer día en el colegio, el primer día de escuela, su primer recuerdo de la niñez, mientras mantienen los ojos cerrados durante la retrospectiva.
Luego se les invita a tomar una respiración profunda y a abrir los ojos al exhalar. En ese momento, se les permite ver las tarjetas que tienen en la mano, las cuales representan su nueva identidad y les permite visualizar quiénes son en ese contexto.
Una vez que cada participante tiene clara su nueva identidad, el facilitador plantea que tienen la opción de devolver una de las tarjetas que les tocó. Sin embargo, para hacerlo, deben presentar un argumento sólido que respalde la devolución de la tarjeta. Será el grupo quien decida si acepta o no la devolución de la tarjeta, en un proceso de decisión colectiva.
Con este ejercicio se abre la oportunidad de discutir en grupo diversos aspectos relacionados con la valoración y discriminación de elementos de la identidad de una persona. Algunos de los temas a abordar son:
• Elementos que comúnmente son menos valorados o discriminados frente a la identidad de una persona.
• Las razones para ello.
• El desconocimiento y los mitos como motivos de discriminación y prejuicios.
• ¿Cómo enfrentamos y trabajamos nuestros propios prejuicios?
Género: concepto, categoría y enfoque
Se divide al grupo en subgrupos según el número de participantes. Se solicita que en cada grupo se designe a alguien como vocero o vocera, quien tomará nota de la discusión para luego exponerla al grupo completo.
Dentro de cada subgrupo, se propone reflexionar sobre situaciones personales o cercanas en las que hayan sido testigos o hayan experimentado desigualdades basadas en el género. Por ejemplo, podrían analizar experiencias relacionadas con asistir a una fiesta, estudiar una carrera, ocupar un empleo o un puesto de liderazgo, entre otros. Los participantes deben discutir estas experiencias y reflexionar sobre las razones que creen que subyacen a estas desigualdades, así como las estrategias que han utilizado para enfrentarlas.
Posteriormente, se expondrán los resultados de cada grupo. Quien facilita, deberá tomar nota de las principales formas o mecanismos a través de los cuales se manifiesta la desigualdad de género, así como de los mecanismos que los participantes han empleado, en caso de haberlos, para superar estas situaciones.
Se concluye la actividad con las siguientes reflexiones:
• Las desigualdades de género son resultado de constructos socioculturales y, por lo tanto, es posible cambiarlos. Esto requiere tomar conciencia de estas situaciones y cuestionarlas de manera activa.
• Las desigualdades de género se ven agravadas cuando se cruzan con otras condiciones, como la edad, la condición social, la etnia, entre otras. Es importante reconocer cómo estas intersecciones pueden intensificar las desigualdades y abordarlas de manera integral.
• Es fundamental reconocer que las desigualdades de género generan relaciones de poder asimétricas que afectan todos los aspectos de nuestra vida. Estas dinámicas desequilibradas impactan tanto a nivel individual como a nivel colectivo.
• Las expresiones de desigualdad de género son frecuentes en nuestra vida cotidiana y abarcan manifestaciones como el machismo, la violencia, la discriminación y el uso de un lenguaje excluyente. Estas expresiones suelen estar naturalizadas en nuestra sociedad, por lo que es necesario desafiarlas y transformarlas.
• Las relaciones de poder desiguales generan brechas para las mujeres en diversos ámbitos, como la educación, los cargos directivos, el trabajo y las oportunidades en general. Reconocer estas brechas y trabajar para cerrarlas es esencial para promover la igualdad de género.
Se finaliza la actividad con una presentación sobre los conceptos clave de género, abordándolos tanto como un concepto, una variable y un enfoque.
Esta presentación ayudará a consolidar los conocimientos adquiridos durante el ejercicio y proporcionará una base sólida para seguir explorando y trabajando en temas relacionados con género y equidad.
Cierre del taller y evaluación
• Se cierra la jornada agradeciendo la participación.
• Se pide que llenen una rápida evaluación respecto al taller . La tarea para el grupo será:
• Hacer un listado de las razones o situaciones por las que alguna vez han sido discriminados.
• Identificar las posibles causas de esta discriminación.
• Definir estrategias para superar esta discriminación de forma personal y colectiva
Contenidos conceptuales a profundizar
Autoestima y autodeterminación2
El concepto de autoestima se remonta a mediados del siglo XIX. William James, en su obra “Los Principios de la Psicología”, estudió el desdoblamiento del Yo global en un Yo conocedor y un Yo conocido. A partir de esta división, de la cual todos somos conscientes en mayor o menor grado, surge la autoestima.
El ser humano se percibe a sí mismo a través de sus sentidos, reflexiona sobre sí mismo y sus comportamientos, se evalúa y experimenta emociones relacionadas consigo mismo. Todo esto genera pensamientos, percepciones, evaluaciones y sentimientos. La autoestima, en sí misma, es la percepción evaluativa de uno mismo.
La importancia de la autoestima radica en que está relacionada con nuestro ser, nuestra forma de ser y el valor que le otorgamos a nuestra persona en general. Por lo tanto, inevitablemente afecta nuestra forma de estar y actuar en el mundo, así como nuestras relaciones con los demás.
Nada en nuestra forma de pensar, sentir, decidir y actuar escapa a la influencia de nuestra autoestima. Nadie puede dejar de pensar en sí mismo y evaluarse. Todas las personas desarrollamos una autoestima que puede ser suficiente o deficiente, positiva o negativa, alta o baja, y esto depende de muchos factores individuales, familiares y sociales. Sin embargo, siempre es posible descubrir los recursos personales para apreciarlos y utilizarlos adecuadamente, así como aceptar y superar las diferencias en la medida de nuestras posibilidades personales.
Si una persona no valora su propio valor, si no reconoce y aprecia las cualidades y talentos que posee, si no acepta con serenidad sus limitaciones, puede caer en la inseguridad y desconfianza en sí misma. Esto dificulta afrontar y superar los problemas de la vida cotidiana, y casi resulta imposible emprender proyectos.
Lo opuesto a la autoestima es la desestima, un rasgo característico del estado de suma de sentimientos negativos que conocemos como depresión. Las personas que se desestiman se menosprecian y se malquieren, y generalmente no encuentran la felicidad.
2. Sendas, 2015. Haz futuro ahora: guía de proyecto de vida para adolescentes.
Las Aes de la autoestima (Alcántara, 2002)
Las “Aes” de la autoestima describen las características que posee una persona con una autoestima suficiente. Estas características son las siguientes: aprecio, aceptación, afecto y atención.
Aprecio y Aceptación: es el genuino aprecio por uno mismo como persona, independientemente de lo que pueda hacer o poseer. Se considera igual, aunque diferente, a cualquier otra persona. El aprecio incluye reconocer lo positivo que hay en uno mismo, como talentos, habilidades y cualidades corporales, mentales y espirituales.
Afecto: implica tener una actitud positivamente amistosa, comprensiva y cariñosa hacia uno mismo. Esto permite sentirse en paz con los pensamientos, sentimientos e imaginación, así como con el propio cuerpo.
Atención: se refiere al cuidado de las necesidades reales, tanto físicas como psíquicas, intelectuales y espirituales. Una persona con autoestima no se expone a peligros innecesarios.
Estas características de la autoestima presuponen un buen nivel de autoconocimiento y autoconsciencia por parte de las personas. En resumen, la autoestima se basa en el razonamiento de que una persona es apropiada para la vida, es competente y tiene valía.
Los seis pilares de la autoestima (Branden, 2003)
1. La práctica de vivir conscientemente
Vivir de manera consciente implica ser consciente de las acciones, propósitos, valores y metas, al máximo de nuestras capacidades, sean cuales sean, y comportarnos de acuerdo con lo que vemos y conocemos. Vivir conscientemente implica ser responsable frente a la realidad y reconocerla tal como es, sin dejarnos influir por deseos, temores o negaciones.
2. La práctica de la aceptación de sí mismo
La autoestima es imposible sin la aceptación de uno mismo. Este concepto tiene tres niveles de significado:
a) Aceptarse a uno mismo implica estar de tu propio lado, estar contigo. Es una forma de egoísmo natural que constituye un derecho innato de todo ser humano, orientado hacia la valoración y el compromiso con uno.
b) Aceptarse a uno, implica estar dispuesto a experimentar plenamente tus pensamientos, sentimientos, emociones, acciones y sueños. No los ves como algo separado o ajeno a ti, sino como parte de tu esencia. Permites que se expresen y no los reprimes.
c) La aceptación de uno también implica la idea de compasión y ser amigo o amiga de uno. Te tratas con amabilidad y comprensión, reconociendo que eres un ser humano y que mereces amor y respeto, tanto de ti como de los demás.
En resumen, la práctica de la aceptación de uno implica reconocer y abrazar todos los aspectos de tu ser, valorarte, cuidarte, y cultivar una relación positiva contigo.
3. La práctica de la responsabilidad de sí mismo
Para sentirme competente para vivir y digno de la felicidad, necesito experimentar una sensación de control sobre mi vida. Implica tener un sentido de control sobre mi vida y estar dispuesto a asumir la responsabilidad de mis acciones y metas. Así, me hago responsable de mi vida y bienestar. Esta responsabilidad personal es esencial para fortalecer mi autoestima y se manifiesta como un reflejo de esta.
4. La práctica de la autoafirmación
La autoafirmación implica respetar mis deseos, necesidades y valores, y buscar formas adecuadas de expresarlos en la realidad. No se trata de ser beligerante o agresivo de manera inapropiada, ni de pisotear a los demás para obtener lo que quiero. Tampoco implica afirmar mis derechos sin tener en cuenta a las otras personas.
Simplemente, significa estar dispuesto a valerme por mí mismo, actuar con autenticidad y tratarme con respeto en todas mis relaciones humanas. Es una negativa a falsificar mi persona para complacer a los demás.
5. La práctica de vivir con propósito
Vivir con propósito es utilizar nuestras facultades para conseguir las metas que hemos elegido. Estas metas pueden abarcar diversos aspectos de nuestra vida, como estudiar, formar una familia, organizar nuestros archivos, ganarnos la vida, emprender un nuevo negocio, hacer ejercicio y dedicar tiempo a nuestros seres queridos. Son nuestras metas las que nos motivan, nos desafían a emplear nuestras habilidades y dan energía a nuestra vida.
6. La práctica de la integridad personal
La integridad se refiere a la coherencia entre nuestros ideales, convicciones, normas y creencias, por un lado, y nuestra conducta, por otro. Cuando nuestra conducta está en línea con nuestros valores declarados, cuando hay concordancia entre nuestros ideales y nuestra práctica, es cuando demostramos integridad.
Género: historia, concepto y categoría de análisis
Historia de género
El papel de las mujeres en la historia ha sido protagónico desde siempre, aunque ha sido invisibilizado debido al enfoque androcéntrico de la historia, que coloca al hombre como el centro de la humanidad y desconoce el papel de la mujer.
Este enfoque está relacionado con el sistema patriarcal, que busca mantener las estructuras de poder y control, y establece la superioridad de lo masculino sobre lo femenino como algo natural. Sin embargo, este sistema no se aplica a cualquier figura masculina, sino a aquellas con prestigio y valoración diferenciada en la sociedad, considerando características como clase, etnia, religión, educación, entre otras.
El movimiento feminista ha destacado la importancia de desarrollar el concepto y la categoría de género, que va más allá de las dicotomías sexuales y de género, reconociendo a las mujeres como impulsores del desarrollo y la historia de los pueblos y comunidades. Además, el sesgo androcentrista en las ciencias contribuye a profundizar las diferencias de género, justificando y protegiendo la supremacía masculina como algo normal, a través de complejas relaciones de poder en el contexto de las diferencias socioculturales.
Entre los avances destacados en este ámbito, es importante reconocer la necesidad de sacar a la mujer de su papel exclusivamente reproductivo, utilizando el término “mujeres” para reconocer su diversidad, y promover el estudio de los roles socioculturales de mujeres y hombres más allá de las simples diferencias biológicas.
El trabajo con enfoque de género implica un esfuerzo consciente y riguroso para visibilizar las relaciones de poder entre hombres y mujeres. Esto nos permite comprender que estas relaciones no son naturales ni fluidas dentro de esta dicotomía, sino que son construcciones socioculturales resultado de las relaciones de género y de la reproducción de un sistema basado en clases sociales.
Se evidencian mecanismos y dinámicas sociales que perpetúan la diferenciación entre hombres y mujeres, lo que naturaliza la desvalorización de lo femenino. Estas reflexiones han llevado a grupos de mujeres en todo el mundo a expresar su inconformidad con esta realidad y a señalar que la asignación de roles, códigos y espacios diferenciados, desde los cuales surgen relaciones inequitativas e injustas, contribuye a la perpetuación de la desigualdad de género.
A partir de estos grupos, surgió el feminismo como un movimiento humanista que lucha contra la desigualdad de oportunidades. A través del feminismo, las mujeres comenzaron a cuestionar y reaccionar frente a las normas que antes eran impuestas e indiscutibles. Se buscó el acceso a una educación completa, empleo remunerado, seguridad social, derecho al voto, entre otros aspectos que previamente eran considerados exclusivos para los hombres.
Concepto de género
En la década de los años 70, surgieron los estudios de la mujer en la academia, los cuales cuestionaron la falta de análisis y visibilidad que las mujeres habían tenido en disciplinas como antropología, literatura, historia y psicología. Estos estudios identificaron al patriarcado como una forma de pensamiento e ideología que valora lo masculino, otorgando prestigio social, reconocimiento, acceso al espacio público y al papel productivo, en detrimento de lo femenino.
Con el tiempo y el análisis continuo, se criticó el hecho de referirse a “la mujer” como si fuera un sujeto único, y surgió la necesidad de hablar de las mujeres en plural, reconociendo su diversidad en términos de edad, orientación sexual, identidad de género, etnia, religión, cosmovisión, entre otros.
El concepto de género fue acuñado a partir de estudios en psicología sobre disfunciones sexuales, problemas de salud relacionados con la vida sexual de una persona, realizados por Robert Stoller y John Moner. Sus investigaciones evidenciaron que lo que se entiende como “ser hombre” o “ser mujer” se basa en un aprendizaje sociocultural más que en características biológicas. Esto llevó a diferenciar entre sexo y género, y se desarrollaron los siguientes enunciados:
• Género es el conjunto de características y roles que se le asignan social, cultural y simbólicamente a una persona en relación con el sexo con el que nace.
• Género es el conjunto de características que se reconocen socialmente como feminidad o masculinidad, es decir, todo lo que se considera propio y natural de la mujer o del hombre.
• Género son modos de relación que con frecuencia incluyen una subordinación socioculturalmente construida y naturalizada entre uno y otro sexo.
En la actualidad el concepto más trabajado y cercano a las ciencias sociales nos dice que Género es una categoría de análisis y de construcción social, que refiere la forma en que la sociedad organiza los modos de vida, de pensamiento, comportamientos, entre otras cuestiones, preestableciendo el lugar que le corresponde a cada individuo según el sexo con el que nacen.
Según Casares (2008), la conceptualización de género a lo largo de la historia tiene como objetivo principal desnaturalizar los roles asignados a las mujeres y las relaciones de poder que surgen de esta naturalización: la desigualdad social entre hombres y mujeres no era consecuencia de la naturaleza, sino que estaba ligada a factores culturales (Casares, 2008; 37).
Al reconocer cómo se configura el entendimiento de género, se enfatiza la importancia de abordar la sexualidad como un elemento clave en las relaciones de género y, por lo tanto, en las relaciones de poder. Los roles de género, las sexualidades y las identidades no son naturales, esenciales ni universales, sino que se construyen a través de discursos y procesos sociales. (Roscoe, 2000; 5, en Casares, 2008; 56).
Género como categoría de análisis
El género es una categoría de análisis y una construcción social que se utiliza para comprender cómo la sociedad organiza los modos de vida, pensamientos, comportamientos y otras cuestiones, estableciendo el lugar asignado a cada individuo según su sexo de nacimiento. No se limita solo a la diferencia biológica entre hombres y mujeres, sino que también abarca cómo la sociedad y la cultura asignan características y roles a cada sexo.
Es importante destacar que el género no es algo natural o biológico, sino que es una construcción social, histórica y cultural que se desarrolla en diferentes contextos y períodos de tiempo. Cada cultura tiene sus propias concepciones de lo que es “femenino” y “masculino”, y estas concepciones cambian con el tiempo y pueden variar entre sociedades.
El género está estrechamente relacionado con las relaciones de poder. Las ideas sobre lo que es femenino y masculino no son neutrales, sino que tienen implicaciones en la distribución de recursos, el acceso a derechos y oportunidades, la toma de decisiones y el ejercicio del poder. Por ejemplo, la idea de que los hombres son más fuertes y agresivos que las mujeres, y, por lo tanto, están más capacitados para ocupar posiciones de poder, ha
sido utilizada para justificar la discriminación contra las mujeres en el ámbito laboral y político.
De igual manera, está fuertemente relacionado con la sexualidad. Los roles de género, las sexualidades y las identidades no son naturales ni estáticos, sino que se construyen socialmente y están en constante evolución. Las expectativas culturales sobre cómo deben comportarse las personas según su género tienen un impacto en su expresión sexual y en sus relaciones con los demás.
El género, como categoría de análisis en las ciencias sociales, permite identificar y cuestionar las desigualdades y discriminaciones que surgen de las construcciones sociales de género y de las relaciones de poder que se establecen en torno a ellas. A través de los estudios de género, se pueden identificar las causas de la discriminación y la desigualdad de género, y se pueden proponer soluciones y políticas públicas para promover la igualdad de oportunidades y el respeto de los derechos humanos de todas las personas, independientemente de su género.
Relaciones de poder en el marco de las relaciones de género
Las relaciones de poder en el marco de las relaciones de género se manifiestan a través de la discriminación, la violencia, el acoso y la exclusión que experimentan las personas en función de su género. Estas dinámicas de poder son construcciones sociales que se refuerzan a través de normas, valores, instituciones y prácticas culturales.
En la mayoría de las sociedades, existe una jerarquía de género que sitúa a los hombres en una posición de poder y a las mujeres en una posición subordinada. Esto se refleja en la brecha salarial de género, la escasa presencia de mujeres en puestos de liderazgo, la violencia de género y la falta de reconocimiento de las tareas de cuidado, que son mayoritariamente realizadas por mujeres.
Estas relaciones de poder de género también tienen un impacto significativo en el desarrollo. Cuando las personas son excluidas o discriminadas por su género, se les niegan oportunidades y recursos que podrían contribuir a su desarrollo individual y colectivo. Las mujeres y las niñas enfrentan barreras para acceder a la educación, la salud y el empleo, lo que limita su participación plena en la sociedad.
Además, las relaciones de poder de género también tienen consecuencias económicas negativas. Las economías que excluyen a las mujeres y a otros grupos marginados limitan su potencial económico y restringen su capacidad para contribuir plenamente al desarrollo económico y social. Las empresas
que no promueven la igualdad de género también desaprovechan el talento y la creatividad de las mujeres, lo que podría mejorar su capacidad para innovar y competir. En resumen, las relaciones de poder de género son un tema crítico para el desarrollo sostenible. Es fundamental trabajar hacia la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de todas las personas, independientemente de su género, con el fin de construir sociedades más justas, equitativas y prósperas.
MÓDULO 1. SEGUNDA SESIÓN GÉNERO Y CAMBIO CLIMÁTICO3
Tiempo sugerido: 2 sesiones de 6 horas.
Objetivos
Al final de la sesión, los y las participantes deberán alcanzar los siguientes resultados de aprendizaje:
• Comprende de manera crítica el carácter sistémico del cambio climático desde la perspectiva del ecofeminismo y feminismo comunitario.
• Reflexiona sobre los impactos diferenciados del cambio climático.
• Examina los conceptos y evidencias sobre la interconexión entre género y cambio climático.
Estructura del taller
La sesión se compone de tres bloques:
• En la primera parte se profundiza en los temas abordados en el taller anterior, pero con un enfoque específico en género y desigualdades, territorio e intersectorialidad.
• En un segundo bloque, se comparten, discuten y profundizan conceptos fundamentales relacionados con el cambio climático.
• Finalmente, se debate y se fortalece la comprensión de las relaciones entre cambio climático y género. Se ofrecen alternativas para enfrentar sus efectos.
3. Esta sesión se realizó en dos días con los y las participantes.
Agenda Bienvenida e introducción del taller: objetivos, metodología y agenda
Tema Metodología Recursos
Exposición Presentación
Dinámica para retomar los principales temas de la primera sesión.
Dinámica del nombre y el animal.
Retroalimentación del taller y tareas de la primera sesión.
Presentación de contenidos (parte 1) Género, interseccionalidad y desigualdades
Cuerpo, Territorio y Género.
Dinámica caminata de los privilegios.
Dinámica
Tarjetas con roles para la caminata.
Dinámica: mi cuerpo Papelotes marcadores Lápices de colores
Propuestas feministas. Exposición dialogada Presentación
El cambio climático, conceptos clave y análisis desde una visión sistémica.
Impactos del cambio climático.
Exposición inicial
Trabajo en grupos
Presentación
Preguntas para trabajos*
Exposición dialogada Presentación
* Video: https://youtu.be/kcr-Ryq6Nrk
Tema Metodología Recursos
Presentación de contenidos (parte 2) Género, interseccionalidad y desigualdades de género.
Vulnerabilidad frente al cambio climático
Trabajo en grupos y plenaria
Preguntas para grupos
Interconexión entre género y cambio climático
Análisis de la vulnerabilidad: amenaza climática, sensibilidad, capacidad adaptativa, riesgo e impactos.
Exposición dialogada: Evidencias sobre la mayor vulnerabilidad de mujeres y niñas frente al cambio climático
Cuento de los 3 cerditos y el lobo.
Presentación
Desigualdades, género y cambio climático.
Trabajo en grupos: Juego Clima y Sociedad
Plenaria para compartir el análisis y determinar el personaje que tiene mayor riesgo frente a la inundación.
Análisis de factores de sensibilidad y capacidad adaptativa de 5 personajes
Hoja con explicación del juego e instrucciones.
Conclusiones y evaluación del taller.
Trabajo en plenaria y llenados de fichas.
Fichas de evaluación