Rina Lazo Mensaje social y muralismo

Rina Lazo Mensaje social y muralismo

Una de las pocas mujeres que representa al muralismo latinoamericano, como reporta Oswaldo J. Hernández, es pieza clave del arte guatemalteco.

Magacín

Magacín es una publicación de SigloXXI Texto. Oswaldo J. Hernández ohernandez@sigloxxi.com Foto. Briss Milián briseidaml@gmail.com Retoque de imágenes. Briss Milián Diseño. Alexander Mérida

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Son las 6 de la mañana de un día frío de sep-

antes de la mitad del siglo XX con el muralismo

tiembre. Es 1947 y entérate: estamos en la

de mensaje social”. Llevaba, entre todo, su pro-

Alameda Central, ese parque emblemático a

pia carga, una conciencia de su propio contex-

unas cuantas cuadras del zócalo capitalino de la

to: “Guatemala era una dictadura desbaratada y

ciudad de México. Y ya se sabe que a esa hora

daba los primeros pasos de una revolución, la

inician los gritos de los voceadores, las boci-

Revolución de Octubre”, dice.

nas, y aunque siempre suene raro, los cantos

La beca con la que llegaba, la que obtuvo

de algunos pájaros. Sin embargo, no es un día

gracias a una pintura figurativa de bodegones,

común y corriente. Más bien tiene un aire de

le permitía optar y estudiar en cualquier escuela

importancia, aun si todavía apenas amanece y

de arte mexicana. Optó por la más interesante:

casi nada sucede. Cerca de aquí se encuentra el

la academia de arte Esmeralda, donde artistas

Hotel del Prado, aún en construcción y que ya

como Frida Kahlo o Diego Rivera impartían

destaca de entre las otras arquitecturas sobre la

clases. Lo que encontró en México fue también

avenida. En el vestíbulo del Prado, esta mañana

“intelectualidad, cultura y teoría tratando de

hay un pequeño grupo de gente conformado por

explicar las situaciones y las realidades latinoa-

maestros de obra, artistas y algunos estudiantes

mericanas”. Así se recuerda Rina, desde aquella

de arte. Entre todos ellos hay una chica de nariz

mañana de 1947, asistiendo el trabajo de Rivera,

pequeña, un poco respingada, una barbilla en

inevitablemente rodeada de poetas, periodistas,

forma de V, que responde al nombre de Rina

científicos y otros artistas.

Lazo. Su pasaporte guatemalteco indica que es

“En cuanto estaba lista una nueva etapa para

estudiante y que tiene menos de un año de resi-

dar continuidad a un escena en algún mural,

dir en la ciudad de México gracias a una beca, y

Diego, con casi 60 años, sentado, obeso, enca-

este día, premiada por el esmero que presentó

ramado sobre los andamios, era visitado por

en sus clases de pintura, es recompensada con

infinidad de intelectuales. Las charlas se ponían

ayudar a uno de los maestros más importantes

teóricas y fundamentales, y el maestro, por

de la plástica latinoamericana: Diego María de

más debate que existiera a su alrededor, jamás,

la Concepción Juan Nepomuceno Estanislao de

¡jamás! quitaba la vista de sus trazos sobre el

la Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez.

mural. Para mí resultaba imposible, con sólo

Diego Rivera, a secas.

hacer presencia, no drenar una ideología a

De aquel 1947, la memoria de Rina Lazo es

partir de todas esas conversaciones entre escri-

viva y se parece bastante a la ansiedad:

tores, críticos y ex presidentes”.

“Lo recuerdo como una figura inmensa, una sombra gigantesca con sombrero. Recuerdo

El comunismo es un lienzo

ese primer día de contacto, pero recuerdo más

Rivera, acompañado por Frida Kahlo, claro, y al

la emoción y el hecho de que un artista de su

lado de David Alfaro Siqueiros, Xavier Guerrero,

talla (Rivera) le diera a esta chamaca el saludo

José Chávez Morado y Olga Costa, todos miem-

de estilo francés: un beso en la mano”.

bros del Partido Comunista Mexicano (PCM),

Todavía no acabaría aquel día que ha durado

llevaron a Rina Lazo a incorporarse al PCM.

más de 60 años en la mente de Rina Lazo, cuan-

“Eran años interesantes para México. La edu-

do acota otro pincelazo a la escena: “Me dejó

cación, el arte, la manera de convivir de los

pintar parte del mural que estaba trabajando

mexicanos podía entenderse con ideas socia-

(Sueño de una tarde dominical en la Alameda

listas”, explica Lazo. Con esta instancia, aunque

Central), y ese detalle, Rivera no lo tenía con

Rina menciona que no se trataba de una moda,

cualquiera”.

era popular que los artistas dejaran murales

Rina Lazo, con 17 años, no podía haber llega-

en diversas instituciones. “El Muralismo mexi-

do en mejor momento a la ciudad de México.

cano tiene su inicio puntual con el filósofo

Ella lo cree así: “Si a principios de 1900, Francia

José Vasconcelos. Sus encargos empezaron

era considerada el epicentro de las vanguar-

a introducirse en instituciones cuando fungió

dias, México cumplía la misma función un poco

como Secretario de la educación pública: una

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de las ventajas del muralismo de este tipo era

ideas capitalistas… “Imagina lo que era poner

que estaba avalado por el gobierno y no había

la idea de un comunismo avanzando intempes-

ningún tipo de persecución contra el artista. Se

tivamente desde la sede central del capitalismo

respetaba mucho entonces y estos proyectos,

como Nueva York, desde EE.UU.”, indica Lazo.

como el caso mío o el de Rivera, se costeaban

Agrega que a partir de esa fecha, 1934, se inicia

muchas veces con los trabajos individuales

un plan maestro de desactivación por parte de

producidos en caballete”, defiende.

Estados Unidos, muy interesado en desarticular

De ese contexto existen todavía varios mura-

el muralismo y su mensaje. Dice que la década

les en los que el trazo de Lazo se unió al de

de los 50 fue una época muy difícil: “los museos,

Rivera. Allí se pueden mencionar Gloriosa

las revistas, todo el circuito del arte empezó a

victoria, en el hospital de La Raza; los murales

tratar de expulsar cualquier mensaje social en

en el Cárcamo del Río Lerma; los relieves del

el arte latinoamericano. El muralismo lo sufrió

Estadio Olímpico de la Ciudad Universitaria, en

y su contenido, poco a poco, fue abandonando

México. “El maestro era muy simpático a veces.

instituciones y encargos. Aun con la muerte

Yo aparezco en varios de sus murales, era una

dolorosa del maestro Rivera, en 1957, hubo un

manera especial de demostrar su aprecio”.

grupo de artistas que nos resistimos y seguía-

Fueron más de 10 años como asistente de Diego Rivera, una época que definió puntual-

mos introduciendo mensajes con preocupaciones sociales a nuestras obras”.

mente la vida y la obra de la artista guatemal-

A pesar de todas las dificultades, Rina Lazo

teca Rina Lazo. Al nomás entrar en el Partido

consiguió pintar murales en varios espacios

Comunista Mexicano, gracias a la mezcla de

públicos. Uno de ellos lo realizó en Guatemala.

arte y política, también conocería al grabador

Tiene por título Tierra fértil, fue hecho en 1954,

mexicano Arturo García Bustos, su esposo

“la época de derrocamiento de Árbenz”, para el

desde hace más de 50 años. Es inevitable men-

Instituto Italiano. Hoy, esta pieza se encuentra

cionar que son inseparables. Si Rina va a una

en el Museo de la Universidad de San Carlos,

entrevista, Arturo está presente. Si Arturo debe

en el Centro Histórico de Guatemala. En 1964

ir a dar una conferencia, Rina le acompaña sin

se presentó la oportunidad de participar en el

chistar. Si uno de ellos no recuerda un dato, el

proyecto del Museo Nacional de Antropología

otro saldrá a su rescate: “Nos conocimos en una

de México que incluía, en la etapa final, la deco-

protesta política organizada por Frida Kahlo en

ración mural de las salas. Suyos son los murales

contra del Plan Clayton, que luego fue impuesto

que reinterpretan el fresco maya de Bonampak,

como el proyecto de libre comercio, donde los

en una construcción facsímil ubicada en el jar-

países jóvenes apenas destacan como indus-

dín anexo del Museo Nacional de Antropología,

tria y se mantienen en constante dependen-

en el paseo de Chapultepec. En 1996, en el

cia”, comenta Arturo, sonriente, tomando de la

mismo museo, su mural Venerable abuelo maíz

mano a Rina.

inauguró la remodelación de varias salas.

Bustos es fundador del Taller de Gráfica

Hoy, Rina Lazo sigue comprometida con el

Popular de México; fue estudiante de Frida

mensaje social y el muralismo. Trabaja, como

Kahlo y dirigía la mayor parte del arte –gra-

a ella le gusta decir, “desde la casa más antigua

bados sobre todo– empleado durante las pro-

del Distrito Federal, la casa donde Hernán

testas y actividades con factura política. “Eran

Cortés y la Malinche concertaron”. Tiene, en la

grabados que defendían la causa por un mundo

actualidad, la tarea de pintar un enorme lienzo

más justo y más hermoso”, recuerda Lazo, y

acerca de Xibalbá, el inframundo de los mayas.

juntos, no dejan un segundo de sonreír.

Luego de casi 6 décadas de aquella fría mañana sobre la Alameda Central, aún logra subirse

Declive del mensaje

a los andamios, mostrar su quehacer pictórico

Es bien conocido el caso en el Rockefeller

y trazar una preocupación social inacabable, el

Center con uno de los murales de Diego Rivera:

mismo mensaje que ha dejado durante tantos

El hombre en el cruce de caminos. El retrato

años en muros de México e inevitablemente en

de Lenin, la destrucción, la incomodidad de las

Guatemala.

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venceremos El mural que se presenta todo el mes en Guatemala fue realizado por Rina Lazo en 1962. El contexto de aquel entonces tocaba el tema de los inicios de la Guerra Fría, la intervención de la CIA en Guatemala, así como la invasión de Estados Unidos y su guerra perdida en Vietnam.

Venceremos “representa la agresión del imperialismo a Corea y a Guatemala, al mismo tiempo porque ambas son similares”, comenta Lazo.

El trabajo de la guatemalteca se encuentra en el Salón de Banquetes del Palacio de la Cultura. Se puede visitar hasta el 31 de octubre. De lunes a domingo, de 9:30 a.m. a 4 p.m.

Entrada libre. Palacio Nacional de la Cultura, zona 1. Más información: galeriakilometrocero@hotmail.com y 22395000 extensión 1717

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“Luego de casi 6 décadas ...aún logra subirse a los andamios, mostrar su quehacer pictórico y trazar una preocupación social inacabable”.

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GLORIOSA VICTORIA Muchos se han preguntado por el momento exacto en que Diego Rivera pintó un mural que retratara una realidad política de Guatemala. La obra es una caricatura de la sangrienta invasión que hizo Estados Unidos, a través de la United Fruit Company, de una plantación bananera en Guatemala a comienzos de la década del 50.

Rivera lo pintó poco después de la muerte de Frida Kahlo, y fue muy conmemorativo debido a que 8 días antes del fallecimiento de la artista mexicana, Diego la había acompañado en una manifestación en contra de lo que sucedía en Guatemala. Frida ya sólo podía moverse en silla de ruedas. Existen fotografías de aquella manifestación que marcaría la temática del mural Gloriosa victoria.

La obra permaneció más de 5 decenios guardada en las bodegas del Museo Push-kin, de Rusia. Se cree que cuando Rivera necesitó de un tratamiento por el cáncer que padecía optó por ir a Rusia, a probar un tratamiento novedoso con la bomba de cobalto. El pago consistió en un mural que incluía una escena llena de personajes que protagonizaron la historia reciente de Guatemala: Allen Dulles, primer director de la CIA; John Dulles, secretario de Estado de Estados Unidos en ese momento y quien impulsa la invasión norteamericana; John Peurifoy, embajador americano, quien nombra a Castillo Armas como presidente de Guatemala; Jules Dobois, un agente encubierto de la CIA y que se hacía pasar por corresponsal del Chicago Tribune para América Latina; Élfego Monzón, parte del triunvirato que derrocó a Árbenz, y Dwight Eisenhower, Presidente de EE.UU. en 1954.