EN PRIMERA PERSONA
BRANDON DAVIES “Rambo es un nombre que me gusta y con el que me identifico"
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a vida me ha enseñado que hay que luchar y darlo todo en cada momento. Y es por ello que actualmente disfruto de mi día a día en Barcelona, una ciudad magnífica con una comida brutal y con gente muy cercana que me ha acogido con mucho cariño desde el primer día. Era el 4 de julio y cogí un vuelo directo desde Uganda, donde estaba con la selección, para vivir mi primer día como azulgrana. ¡Y qué día! Ya pude sentir el calor de los aficionados y de los más pequeños en el parqué del Palau. Desde entonces solo trabajo para intentar alcanzar los objetivos del equipo. Me gusta hablar con el entrenador para mejorar y no perder la ética de trabajo y me quedo después de los entrenamientos tirando a canasta. Tenemos grandes jugadores, pero lo que más valoro son las enormes personas que siempre están ahí para ayudarte. Sabemos que con nombres no se ganan títulos, tenemos que ir todos a una. Con quien más
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REVISTA BARÇA
comparto sensaciones y comentarios sobre movimientos, jugadas y acciones de los partidos es con Nikola Mirotic, qué pedazo de persona... Siempre tiene tiempo para todos. Para vosotros soy Rambo, un nombre que me gusta y me hace gracia. Quién lo iba a decir, cuando un miembro del staff me puso este nombre en la pretemporada, que terminaría sirviendo para que mucha gente me llamara así. Creo que es un nombre bien buscado porque me identifico con este alter ego en cuanto al espíritu de lucha constante. Y es que mi infancia no fue del todo fácil y este carácter luchador me lo mostró desde pequeño mi madre actual. Nací en Philadelphia y a los dos días de vida, mi madre biológica, que entonces tenía 16 años y de la que no he sabido nada nunca más, me dio en adopción a mi madre actual, Linda Kathleen. De mi madre biológica solo conozco el nombre, pero, al fin y al cabo, ella hizo lo mejor por mi vida. Linda es una supermujer, lo ha dado todo por mí y por mis dos hermanos, también
©FC BARCELONA / VÍCTOR SALGADO
Brandon Davies cuenta en primera persona su historia. Fue adoptado por Linda a los dos días de vida, tiene dos hermanos también adoptados, Heather y Shawn, de origen indio, y ahora disfruta de Barcelona con su mujer Lenzie y sus dos hijos
