REVISTA FUNDACIÓ - Nº07 - CASTELLANO by FC Barcelona

REVISTA OFICIAL FUNDACIÓ FC BARCELONA OCTUBRE-NOVIEMBRE DE 2017 NÚMERO 7

Fútbol y paz Descubrimos la historia de Rodrigo Jr, que nos adentra en lo que significa ‘FutbolNet’ para los niños y las familias que viven en las favelas de Río de Janeiro

LA CITA

SUMARIO

“La educación es el arma más poderosa que puedes usar

04 SAMUEL ARANDA

para cambiar el mundo -Nelson Mandela Político sudafricano

Prevención de la violencia

esulta complicado asimilar que algo tan unánimemente rechazable como la violencia requiere ciertos mecanismos educativos para ser neutralizada. Jean Paul Sartre decía: “Desconfío de la incomunicación porque es la fuente de toda violencia”. Detrás de una persona que agrede, bien por imponer su criterio o bien para hacerse entender, hay una evidente frustración de quien no ha aprendido nunca a gestionar sus emociones. La prevención de la violencia es una apuesta firme de la Fundación FCB, un objetivo transversal en todos sus proyectos porque nuestra razón de ser es que los niños se desarrollen en entornos saludables física y psicológicamente. Entendemos que sólo dando apoyo incondicional a las generaciones venideras estaremos dejando el mundo en buenas manos. Rodrigo, protagonista del reportaje (que puede leer en este número) La favela que se aferra al fútbol, de Santiago Roncagliolo y Samuel Aranda, fue un adolescente que intentó vivir al margen del narcotráfico en la favela donde creció. Pero con 17 años fue despedido por un malentendido. Sus jefes, además, le acusaron de robar la bicicleta que le habían dejado para trasladarse. Esta falta de confian-

za, sin darle la oportunidad de ofrecer su versión, transformó a Rodrigo, un joven sensible y con inquietudes, en un delincuente. No hay abismo más profundo que la desconfianza. Veinte años después, alejado por fin del narcotráfico, celebra que su hijo Rodrigo Jr juegue al fútbol en esta misma favela “donde los niños de 11 años usan fusiles y donde hay un espacio en el que lo único que existe es el fútbol”, como explica Roncagliolo en su artículo, refiriéndose al programa de prevención de violencia juvenil de la Fundación con la metodología FutbolNet. En Catalunya estamos centrados en la lucha contra el bullying desde un enfoque muy amplio que implica intervenciones a todos los actores, porque consideramos que todos ellos son víctimas: en septiembre organizamos con la Universidad de Barcelona una conferencia sobre prácticas restaurativas de la mano de Terry O’Connell. Este enfoque se basa en la pedagogía de la comunicación, los afectos y la salud relacional. El resultado es enormemente poderoso, ya que se basa en restaurar los vínculos y reconocer los esfuerzos por mejorar. Una vez asumida la responsabilidad, el enfoque restaurativo prefiere trabajar en el restablecimiento de la confianza y el aprendizaje de la empatía. Después de todo, como decía Susan Sontag: “Nadie puede pensar y golpear a alguien al mismo tiempo”. n

Bienestar emocional pediátrico

Os presentamos a Pol, un nuevo robot muy especial

Jugadores y técnicos con corazón

Su aportación económica anual a la Fundación

Jornadas restaurativas contra el ‘bullying’’

El conflicto como oportunidad de aprendizaje

18 GERMÁN PARGA

“NO SE PUEDE PENSAR Y GOLPEAR A ALGUIEN AL MISMO TIEMPO “

Desde Río: ‘La favela que se aferra al fútbol’

Entrevista

Terry O’Connell, experto en la lucha contra el ‘bullying’ 20

‘FutbolNet’ en Latinoamérica

El Salvador y Colombia se suman al fútbol con valores 22

Actualidad Fundación

Noticias sobre la labor social que no te debes perder

FUNDACIÓ FCBARCELONA. Octubre - noviembre de 2017 EDITA Fundació FCBarcelona. Av. d’Arístides Maillol, s/n, 08028 Barcelona T 902 18 99 00 DIRECTORA GENERAL FUNDACIÓ FCB Mària Vallès JEFE DE MEDIOS CORPORATIVO Toni Ruiz COORDINACIÓN PUBLICACIÓN Ketty Calatayud REDACTORES Marc Parramon, Santiago Roncagliolo y Xavier Vilà REVISIÓN LINGÜÍSTICA Marina Àlamo, Amèlia Casas y Lourdes Julià COMPAGINACIÓN y MAQUETACIÓN Olga Amigó, Montse Chaure y Javier Rodríguez FOTO DE PORTADA Samuel Aranda FOTOGRAFÍA Archivo FCB, Germán Parga (FCB), Santi Garcés (FCB) y Samuel Aranda IMPRESIÓN Rotocayfo TIRAJE 117.200 ejemplares DEPÓSITO LEGAL B 21154-2016 PAPEL Estucado mate ecológico libre de cloro de 70 g.

La publicación no se responsabiliza de las opiniones expresadas en las colaboraciones externas. La redacción de este número se ha cerrado a 9 de octubre de 2017.

FC B RE CICLA

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CRÓNICA DESDE RÍO

La favela que se aferra al fútbol En una favela de Río de Janeiro donde los niños de 11 años ya saben usar fusiles, hay un espacio de paz en el que lo único que existe es el fútbol SANTIAGO RONCAGLIOLO FOTOS: SAMUEL ARANDA

n la cancha de fútbol de la Villa Olímpica de la favela de Maré, en Río de Janeiro, se construye un futuro más pacífico para cientos de hijos de la violencia y el tráfico de drogas. Mientras afuera silban las balas, adentro los niños pelotean y sonríen. Los amigos de Rodrigo usaban armas. Y no precisamente pistolitas: fusiles AKM O AK47, semiautomáticas UZI. El tipo de cosas que se llevan a la guerra. Los adolescentes de su barrio las portaban por debajo de la camisa, o al descubierto. Las armaban y desarmaban en sus casas, con sus hermanitos jugando alrededor. Las empuñaban por la calle, solo para pavonearse. Las armas de fuego les daban estatus. Esa es una palabra que Rodrigo usa con frecuencia. Estatus. Él prefería mantenerse al margen. Tenía un trabajo normal en una agencia de mudanzas. Su jefe hasta le prestaba una bicicleta para ir y volver de su casa. Hasta que se produjo un enfrentamiento entre las bandas del barrio: el Comando Rojo contra el Tercer Comando. La batalla se prolongó dos o tres días. Durante ese tiempo, Rodrigo no pudo salir de su casa a riesgo de recibir un balazo. Su jefe pensó que había abandonado el trabajo y, de paso, había robado la bicicleta. No sólo lo despidió. También lo denunció a la policía. -Me puse furioso -recuerda Rodrigo, veinte años después de eso-. Era tan injus-

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to... A los 16 años, no tienes cabeza para pensar. La rabia te gana. Se adueña de ti. Empecé a salir más con los chicos del crimen. Almorzaba con ellos. Fumaba marihuana con ellos. De vez en cuando, les echaba una mano en sus negocios. Llevaba un paquete a un lado u otro. Alertaba cuando la Policía llegaba al barrio... Un día, huyendo de una redada policial, a uno de sus amigos se le cayó un paquete de cocaína. Rodrigo lo recogió y lo entregó a los jefes del Tercer Comando. Así se ganó fama de confiable. La confianza es un capital valioso en un mundo donde muchos venden a sus camaradas. Rodrigo fue aceptado en la organización. Durante los siguientes diez años, se dedicó a lo que llama “el crimen”. Recibió un rifle FAL. Y se curtió en conflictos urbanos. Ganaba trescientos reales -poco más de cien dólares- por semana, y algunas primas por méritos especiales. Una vez, durante un tiroteo con la policía, Rodrigo se quedó después de que sus compañeros salieran corriendo. Salvó la vida de su jefe. Incluso salvó a otro jefe, al que no tenía por qué proteger. Lo ayudó a saltar un muro para escapar, y su valor fue recompensado con más responsabilidad. Y estatus. Sin embargo, él no estaba contento. Sabía que se estaba jugando el pellejo. Además, creía en Dios. Aún cree. Su fe le decía que no actuaba correctamente. Y entonces, llegó el tiroteo final. Para su último enfrentamiento contra el Comando Rojo, en el año 2006, Rodrigo se parapetó detrás de un muro, disparando hacia adelante. No vio que un enemigo se acercaba por el costado. Dieciséis balas

Rodrigo Jr es beneficiario de ‘FutbolNet’ en Río y asiste al proyecto animado por su padre, exnarcotraficante.

agujerearon su mochila y se incrustaron en las paredes. Otra le dio en el dedo que jalaba el gatillo. Una más, en el que sostenía el cañón. Perdió ambos. La tercera, le abrió la barriga en dos. La cuarta le entró por un lado, abajo de las costillas, y llegó hasta el otro. Aún está ahí. Uno puede tocar el metal del casquillo en su derecha, y ver la cicatriz por donde entró, a su izquierda. Después del tiroteo, de milagro, uno de sus amigos lo llevó al hospital. Rodrigo ingresó ensangrentado y aterrado, pero a tiempo. -Ese día, Dios me dio una nueva oportunidad. Una nueva vida. Muchos de sus compañeros acabaron huyendo después de ver la muerte de cerca. El jefe al que Rodrigo salvó, ahora es pastor evangélico en Bahía. El que llevó a Rodrigo al hospital, vive hoy en Suecia. Pero Rodrigo no podía irse a ninguna parte, porque ya tenía hijos. Debía ocuparse de ellos. Así que tenía dos problemas: ¿Cómo dejar atrás su pasado? ¿Y cómo evitar que sus hijos lo repitiesen en el futuro?

Marea roja

a mayoría de turistas de Río de Janeiro se alojan en las playas de Copacabana, Ipanema o Leblon. Desde ahí, Brasil es un país de caipirinhas, voley de playa y discotecas. Los más hipsters pueden optar por Santa Teresa, una zona antigua con azulejos de estilo portugués, donde acaba de inaugurarse un hotel diseñado por Phillipe Starck. Siguiendo por la costa, en los barrios con nombre de equipos de fútbol -Botafogo, Flamengo-, reside la extensísima clase media de la mayor potencia económica sudamericana. Pero más allá, en el centro, comienza el túnel Marcello Alencar. Y termina el sueño brasileño. Como si llevase a otro planeta, el túnel Alencar desemboca en Cajú, una zona de descascarados almacenes portuarios y plantas industriales. Entre las avenidas Brasil, Línea Amarilla y Línea Roja, se respira uno de los aires más contaminados del país. Ahí se encuentra la favela Maré. Para entrar en la favela, hemos recibido severas instrucciones de seguridad: no llevar jeans, polos negros o lentes oscuros, para no parecer policías. Bajar las ventanillas del carro, para que se sepa quiénes van adentro. No mencionar al Comando Rojo o al Tercer Comando. No permanecer ahí después de que oscurezca. Y en ningún caso, dirigir nuestras cámaras a los jóvenes armados que circulan por las calles. En Maré, hay más puestos de vigilancia de los que he visto en Palestina o en zonas de

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La favela de Maré es un conglomerado de viviendas que ha ido ganando terreno al mar, de ahí su nombre, ‘Marea’.

emergencia del Perú. Hombres con radios y chalecos antibalas se apuestan en las esquinas. Adolescentes con fusiles de asalto y pistolas circulan por las calles, caminando o en moto. Sin embargo, ninguno de ellos aparecerá en estas páginas. Si nosotros disparamos nuestros flashes, ellos dispararán los suyos. Maré significa Marea. Hace sesenta años, el mar cubría toda la zona. Los migrantes que llegaron a Río para trabajar en las infraestructuras, como el puerto o el túnel Alencar, instalaron palafitas sobre columnas de madera, como las amazónicas, y se quedaron a vivir ahí. Lo hicieron todo solos. Ganar espacio al mar, construir las casas, conectarse ilegalmente a los servicios públicos... Hoy, aunque el censo oficial registra 161 mil habitantes, los trabajadores sociales calculan por lo menos 200 mil. En total, Río cuenta con 763 favelas pobladas por 1,4 millones de personas. En los años sesenta y setenta llegaron a la Maré miles de guerrilleros angoleños que huían de la guerra. Sabían usar armamento pesado. Y entendían de organización social. En los ochenta, la cocaína entró en las grandes ciudades del Brasil, y con ella, la única actividad económica sostenible en las favelas. El Comando Rojo se convirtió en un Estado paralelo, a cargo de los servicios, los impuestos y la seguridad. En los noventa, una nueva banda, el Tercer Comando, comenzó a disputarle el terreno. Desde entonces, la edad de los soldados ha ido descendiendo. Hoy, niños de 11 años llevan armas de combate. Cuando caminas por las calles de la Maré, toda la gente que ves tiene que ver con el negocio. Por supuesto, los vigilantes armados. Y algún que otro adolescente, que se lía un cigarro de marihuana en una esquina. Pero también los niñitos, que corren de un lado a otro avisando si aparece algún extraño. Y la señora que juega a cartas en la vereda, que les da de comer a los bandoleros. Y la camarera del bar, donde ellos se reúnen para escuchar forró a todo volumen, luciendo sus enormes relojes dorados. Y el mecánico que arregla sus motos. La venta de drogas es aquí lo que la minería para el Perú o el turismo para España. El tráfico está tan integrado en la vida de la favela que incluso cumple ciertas normas para no perturbar a la comunidad. Por ejemplo, en la Maré se trabaja con cocaína y marihuana, pero no con crack. El crack vuelve demasiado locos a sus consumidores y altera la convivencia. Además, en la medida en que la bandas funcionan como el único estado real, sus miembros garantizan la seguridad: no hay asaltos ni hurtos, porque cada centímetro cuenta con vigilancia. En realidad, las batallas más violentas ocurren cuando llega la Policía. En la Maré

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entra con frecuencia la tropa de élite: el Batallón de Operaciones Policiales Especiales o BOPE. Sus efectivos llegan en vehículos abiertos, armados con fusiles, vestidos con uniforme de camuflaje y acorazados. Si se encuentran en las inmediaciones, los sistemas de alerta del barrio se disparan. Las radios echan humo alertando de sus movimientos. Los padres -sobre todo, las madres- corren a sacar a sus hijos del colegio. Las motos con gente armada zumban de un lado a otro. Cuando los BOPE desembarcan en el barrio, se desata una serie de sonidos que los pobladores conocen y distinguen. Primero, las bandas disparan fuegos artificiales para informar dónde es el ataque y llamar refuerzos. A continuación, los agentes abren fuego. En un tercer momento, las bandas responden con sus propios disparos. El sonido de las ráfagas cruza el aire al menos dos veces por semana. Pasear por la Maré es recorrer una zona de guerra. Abundan fachadas y coches agujerados por las balas como quesos Gruyère. En el tejado de Rodrigo, encuentro el casquillo de una bala perdida. Sin embargo, para mi sorpresa, los pobladores con que hablo se ponen masivamente del lado de los traficantes. Yo los llamo narcos pero la gente aquí los llama bandoleiros, una palabra de resonancias épicas. Estos pobladores -señoras, vendedores e incluso funcionarios que rehúsan ser identificados- sienten que el Estado solo entra en el barrio para disparar, y que los narcos son su única defensa. Según ellos, cuando la Policía asalta una “boca de humo”, como llaman a los puestos de venta de drogas, suele ser para hostigar a una banda y cobrarle sobornos. E incluso cuando no, es despiadada. El director de un colegio público afirma que los policías suelen usar los colegios como barricadas, porque saben que los traficantes no dispararán contra sus propios hijos. Me cuesta creer estas versiones. Temo estar siendo manipulado por una mafia. Sin embargo, uno de los días que pasamos en la favela, se produce un operativo policial. En la Maré, la gente se encierra en sus casas. En la Villa Olímpica, se interrumpe la fiesta de inicio de un curso deportivo. La maestra de ceremonias usa el micrófono para ir avisando hacia dónde se desplaza la batalla, y quiénes pueden salir. Se cierra la avenida Brasil. Al día siguiente, las noticias hablan de María Eduarda Alves, una niña de 13 años muerta a balazos mientras practicaba Educación Física a las puertas de su colegio. Por si me queda alguna duda, ese mismo día, la televisión enseña a los policías militares paseándose tranquilamente entre los heridos tras el enfrentamiento. No sa-

El censo oficial de Maré registra 161.000 habitantes, pero los trabajadores sociales calculan por lo menos 200.000 en total”

ben que los filma una cámara amateur, así que avanzan tranquilamente, paso a paso. Recogen del suelo un rifle y ejecutan a los heridos a sangre fría. Al divulgarse el vídeo, la Policía Militar tiene que comprometerse a investigar esos hechos. Pero solo en Río, los agentes mataron a más de 8.000 personas entre 2006 y 2015. Y la tasa de resolución de homicidios es del 8%. Como casi nunca hay cámaras, la mayoría de los muertos -y de los asesinos- son invisibles.

El oasis

engo dos edades. La verdadera y la mentirosa. Amaro Domingues nació hace 84 años. Pero nadie puede probarlo. Sólo cuando cumplió 5, le explicaron a su padre que debía inscribirlo en el registro civil. Como el señor Domingues no entendía de qué se trataba eso, registró como fecha de nacimiento el mismo día de la inscripción. La edad que aparece en los documentos de Amaro, 79 años, no es la de su llegada al mundo, sino la de su existencia legal. Desde entonces, Amaro siempre se ha debatido entre la vida real y la oficial. En su pueblo había colegio, pero no profesor, de modo que no tuvo educación formal. Ya adolescente, cuando decidió entrar en la fuerza aérea, resultó que los analfabetos no podían entrar. Sus amigos de otros pueblos le enseñaron a leer y escribir por las noches. Y aprobó los exámenes del certificado escolar sin ir a la escuela. En los años sesenta, trabajó como conductor de vehículos pesados, y entró en el sindicato de transporte urbano. Gobernaba

Brasil una dictadura, y Amaro siguió curtiéndose en conseguir cosas del Estado que parecían imposibles. Luchó por abrir un colegio en la Maré. Por desviar el estero para no vivir sobre el agua. Por remplazar las palafitas con casas. Ha sido un líder de la favela durante décadas. Caminar por las calles junto a él es imposible, porque la gente se le acerca a contarle sus problemas, pedirle trabajo, o intercambiar bendiciones. -No sé ni por qué estoy aquí -confiesa-. Ni siquiera vivo aquí. Además, estoy jubilado. Pero supongo que Dios sí lo sabe. Y si lo sabe Él, a mí me basta. Amaro es evangélico. Todas sus palabras, especialmente sus discursos públicos, vienen acompañadas por celebraciones de la divinidad. La religión forma parte esencial de la organización social de la Maré. En cada calle hay un salón de belleza, un colmado y un templo. Católicos, evangélicos y practicantes de cultos africanos articulan movimientos que interactúan y conviven entre sí. Hasta los bandoleros son creyentes. Por las noches, mientras hacen guardia, pequeñas procesiones transitan entre los puestos de vigilancia y rezan con ellos. Sin duda, la religión le da al Señor Amaro la fuerza que necesita para seguir luchando. Durante el gobierno de Fernando Henrique Cardoso, cuando el ministro de deportes era Pelé, Amaro viajó a Brasilia. No paró hasta entrevistarse con el exjugador y convencerlo de que la Maré necesitaba con urgencia un centro deportivo, algún lugar donde los chicos pudiesen pasar el día lejos de las drogas y de las armas, entretenidos en actividades más sanas.

Pasear por Maré es recorrer una zona de guerra. Abundan fachadas y coches agujereados por las balas como quesos Gruyère. A los otros traficantes no se les llama ‘narcos’, sino ‘bandoleiros’.

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La Villa Olímpica, además de un centro deportivo es un espacio donde se celebran reuniones de la comunidad.

Así nació la Villa Olímpica. La Villa Olímpica de la Maré no es solo un centro deportivo. Es el lugar de las asambleas políticas: cuando vino el alcalde, dio su discurso acá. También es el local comunal donde se realizan fiestas y eventos sociales. Y es la academia de artes. Cuando llueve, en la cancha techada se realizan simultáneamente los cursos de artes marciales, baloncesto, ballet y samba. La Villa está situada precisamente en el límite territorial entre el Comando Rojo y el Tercer Comando, la frontera más tensa del barrio. Pero se considera zona liberada. Está prohibido entrar en ella con armas. Ni siquiera se debe entrar con mala cara. En su interior, la gente puede bañarse en la piscina, jugar a algún deporte, incluido el tenis, o simplemente dar vueltas alrededor de la cancha de fútbol. En la Maré no hay más zonas verdes ni espacios para caminar, de modo que todos están de acuerdo en preservar este santuario. Hasta los narcos guardan a sus caballos ahí: ocho hermosas bestias que pastan en la cancha de fútbol, y que no sobrevivirían en otro lugar de la favela. Cuando Rodrigo salió vivo del tiroteo, y decidió llevarse a otro lado sus cicatrices y los dedos que le quedaban, acudió a la Villa. Pidió trabajo. Por suerte, había un cupo libre. Desde entonces, se ocupa del mantenimiento: corta el césped, limpia la piscina, pinta paredes, esas cosas.

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El presupuesto público de la Villa alcanza los 210 mil reales, unos 70 mil euros, con los que hay que pagar el mantenimiento y a unos ochenta trabajadores. Después de los Juegos Olímpicos del año pasado, la ciudad terminó en quiebra. A veces, los trabajadores pasan tres meses sin cobrar. Aún así, para Rodrigo, es mejor que lo que tenía antes. Ahora solo le queda el problema de que sus hijos no repitan sus errores. Y no es un problema menor.

Fútbol contra la guerra

ace poco, el director de un colegio expulsó al hijo de un bandolero. El comportamiento del chico era intolerable, violento y prepotente. Al saber la noticia, el padre del alumno se presentó en el colegio con su fusil de asalto al hombro. El personal le recordó que no podía ingresar en las instalaciones armado. Lo dejó con uno de sus guardaespaldas y se dirigió al despacho del director. -No puede expulsar a mi hijo -explicó. -Su comportamiento es lamentable -se defendió el director. -Ya. Pero este colegio está cerca de nuestra casa. Si tiene que ir a otro, será en moto. Y si lo ven en una moto, lo van a matar. El director aceptó readmitir al niño con una condición: el padre debía involucrarse en su educación para mejorar su conducta. Eso incluía tratar de no decir malas pala-

bras frente a él ni disparar. De momento, parece que el chico mejora. Pero en la Maré, un chico tiene otros problemas, problemas que nadie puede imaginar afuera. Desde su terraza, Rodrigo me enseña la única placita de su barrio, un laberinto de túneles y casas a medio construir, por donde ni siquiera pueden pasar los carros. -Un niño en la plaza es un niño en peligro -dice-. Las cosas malas ocurren en segundos. Parpadeas y tu hijo puede estar ya vendiendo drogas, o usándolas, o disparando en una esquina. Aquí, todos los padres ahorramos para comprar playstations, los únicos juguetes que mantienen a los niños encerrados en casa. Al aire libre, sólo hay una actividad infantil sana y atractiva: el fútbol, que para Brasil, es mucho más que un deporte. En el país de las cinco Copas del Mundo, es la verdadera cultura nacional. Hay canchas en todos los barrios, y en muchas de estas se juega literalmente las 24 horas. En las favelas, particularmente, el fútbol representa la posibilidad de una vida mejor. Los chicos no tienen muchas posibilidades de ir a la universidad. Ni hablar de emigrar. Pero saben jugar a fútbol. Para ellos, Neymar o Marcelo son más que ídolos: encarnan la mayor esperanza de triunfar sin dinero ni formación, ni fusiles, con lo único que todos tienen, que son piernas. Cada día, al salir del colegio, Rodrigo Junior asiste a la Villa Olímpica a jugar a fútbol. Cuando no puede ir, se pone de muy

mal humor. Por suerte, casi siempre puede. A sus 10 años, es un chico tímido y no exterioriza muchas emociones. Pero mientras juega, no deja de sonreír. No juega un fútbol cualquiera. En la Villa Olímpica, muchas instituciones internacionales habilitan programas de formación deportiva, como la NBA y el club Flamengo. El proyecto más grande está a cargo de la fundación FC Barcelona, y se llama FutbolNet. FutbolNet nació de la violencia. En el Mundial USA 94, el defensa colombiano Andrés Escobar metió un gol en propia puerta que le costó a su país la eliminación. Como venganza, de vuelta a su país, fue asesinado a balazos. A raíz de su muerte, un grupo de paisanos suyos de Medellín formó un movimiento para usar este deporte como herramienta de transformación social. Por su propia dinámica, el fútbol requiere trabajo en equipo, humildad, esfuerzo y ambición ¿Por qué no usarlo para transmitir esos valores, en vez de los contrarios? La experiencia, llamada originalmente Futbol3, tuvo tanto éxito que fue exportada a Alemania, donde se desarrolló una metodología específica. A continuación, la Fundación FC Barcelona la adoptó, y hoy la utiliza en alrededor de cuarenta países con contextos sociales difíciles: refugiados en Costa de Marfil, adolescentes de un reformatorio en Nepal o mujeres discriminadas en Oriente Medio aprenden que son más fuertes cuando defienden a los más débiles. -El deporte tiene un lenguaje universal -confirma la subsecretaria de deporte y ocio del municipio de Río de Janeiro, Patricia Amorim, que promueve veinte villas olímpicas en Río-. Aunque no hables el mismo idioma ni compartas la misma religión, puedes

Esto es, en suma, el tiki-taka del Barça, el juego de equipo total, convertido en filosofía de empoderamiento social”

comunicarte con él. Y alcanza a todo el mundo, porque sus reglas son muy simples. Por eso, puede servir como herramienta para motivar a los chicos a estudiar y adquirir valores. Y si salvas a un chico, salvas también a su familia. Para comprobarlo, un día participo en la sesión de FutbolNet de la Villa Olímpica. Comenzamos haciendo un ejercicio, una especie de pilla-pilla, en que los pillados se van tomando de la mano. Uno a uno, forman una red para ir capturando -y sumando- a los restantes. La idea de estos ejercicios no solo es calentar músculos, sino sobre todo, construir el sentido de equipo entre los participantes. A continuación viene el partido. Se organiza el típico torneo triangular con tres equipos que se van turnando a cada gol, pero con reglas especiales: los jugadores que ya han hecho un gol, no pueden hacer otro. Si lo hacen, pierden. Con ese sistema, ya no tiene sentido monopolizar el balón. Los buenos tienen que contar con los demás. Otra regla anula los goles si no se han hecho después de un pase. Si quieres lucirte llevándote solo a todo el equipo contrario, tu gol no vale. Esto es, en suma, la vieja filosofía del tikitaka del Barça, el juego de equipo total, convertido en filosofía de empoderamiento social. Y con un añadido: jugando así, nadie se queda sin jugar. Hasta yo, un viejo torpe, hice dos goles, porque las estrellas de mi equipo no tenían más opción que pasarme la pelota. El tercer paso de la sesión es una reflexión: guiados por los monitores, los chicos analizan lo que han aprendido en el partido, destacando los aciertos del juego colaborativo y criticando los excesos individuales. No hay pruebas de selección para el FutbolNet. Todos pueden participar. Chicos y

chicas, niños y adolescentes, buenos y malos. Y mientras juegan, saben que nada va a ocurrirles, que están a salvo de la violencia del mundo exterior. Además, llenan su tiempo con una actividad sana. Matheus Jackson, de 17 años, es portero de las divisiones inferiores del Flamengo. Cada día, se levanta a las seis de la mañana y se desplaza en autobús dos horas para llegar a los entrenamientos. Sale de ahí a las once y regresa al barrio para encerrarse en la Villa Olímpica. Practica water polo, baloncesto, box y FutbolNet hasta la noche. Su sueño es jugar en el Barcelona. Estando aquí, entre las gigantografías de Messi, Neymar e Iniesta, es más fácil soñar que ahí afuera, entre cargamentos de cocaína y fusiles de asalto. -Estos chicos no solo están jugando a fútbol -dice Amaro-. Están jugando por el Barça. Eso les ayuda a creer que todo es posible. De hecho, en mi breve estadía en la Maré, se logran cosas imposibles. Al día siguiente de participar en el FutbolNet, todos los chicos me saludan como a uno más del grupo. El portugués de favela no es fácil de entender para un hispano, ni siquiera para un brasileño. Sin embargo, aún sin intercambiar una palabra, ellos y yo formamos parte de lo mismo. Nos entendemos en la cancha. Y nos reímos mucho juntos. Muchos de esos chicos son hijos de traficantes. A menudo, sus padres se disparan unos a otros. Por eso, en esta cancha de fulbito se construye un futuro más pacífico para la favela. Pero el proyecto FutbolNet valdría la pena incluso sin eso. Mientras afuera silban las balas, aquí dentro, los niños sonríen. Todo el tiempo que quieran. Y eso es el mejor regalo que pueden recibir. n

Rodrigo empezó haciendo mandados para criminales y por poco acaba muerto. Su motivación para dejar la violencia fueron sus hijos.

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Éric Abidal acompañó a Pol, de 13 años, durante una visita a los diferentes espacios del Estadio, como la sala de prensa.

Un gran fichaje El robot teledirigido que permite a niños hospitalizados visitar el Camp Nou llevará el nombre del primer niño que se benefició de este nuevo proyecto REDACCIÓN FOTOS: ARNAU PUIG

n recuerdo y homenaje a Pol, el primer niño que pudo disfrutar de la experiencia de visitar el Camp Nou Experience con un robot teledirigido, la Fundación FC Barcelona ha decidido poner su nombre a este widget que permitirá a muchos niños y niñas ingresados en centros hospitalarios experimentar la misma vivencia. Pol, que tenía 13 años y estaba ingresado en el Hospital de Sant Pau, murió semanas después de disfrutar de esta experiencia a causa de la enfermedad que padecía, pero

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pudo hacer realidad uno de sus últimos sueños: visitar el Camp Nou y el Museo del Barça acompañado del exjugador del FC Barcelona Éric Abidal, gracias a un robot teledirigido que controlaba desde su cama. Esta fue la primera prueba piloto de un proyecto de innovación social de la Fundación destinado a los niños y jóvenes de hasta 18 años de todo el mundo que sufren enfermedades muy graves y que, debido a su situación, están hospitalizados o no pueden desplazarse. Después de esta experiencia piloto, la Fundación pondrá en marcha este proyecto innovador, desarrollado

técnicamente por la empresa AWABOT, que permite encuentros virtuales que se llevan a cabo mediante un robot teledirigido, controlado por el niño mediante un ordenador con cámara y conexión a internet. Este widget se controla a distancia a través de un teclado y tiene dos cámaras, una en la parte de arriba y otra en la parte inferior, que ofrecen una visión completa. Dispone de siete micrófonos interiores que pueden aislar el ruido del alrededor. Esta acción se enmarca dentro del nuevo eje estratégico de la Fundación FC Barcelona de innovación social y generación de pensamiento. ■

Gracias a este proyecto de la Fundación FCB Pol pudo sobrevolar el césped del Camp Nou teledirigiendo un robot desde su cama en el hospital.

¿Quieres ver la experiencia de Pol? A través de este código podrás ver cómo funciona este nuevo robot que hará felices a muchos niños que pasan por momentos difíciles:

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La solidaridad del Club y de sus profesionales Desde 2010, los jugadores y los técnicos del FC Barcelona donan voluntariamente el 1% de su ficha a la Fundación FCB y al ABJ

XAVIER VILÀ

esde el año 2010 todos los jugadores y técnicos de todas las secciones profesionales del Club donan voluntariamente el 1% de su ficha a la Fundación FCBarcelona y la Agrupació Barça Jugadors. Esta iniciativa solidaria ha sido pionera en el mundo del fútbol, aunque actualmente haya acciones similares. Cabe destacar que desde entonces se han generado unos recursos de más de 20 millones de euros que se han destinado a causas solidarias, tanto de proyectos de la Fundación como de la agrupación de jugadores veteranos del Barça. Durante estos años ningún jugador o técnico ha pedido retirar

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esta donación voluntaria de su ficha, lo que describe muy bien la interiorización de los valores entre todos los profesionales componentes de las diversas secciones. Por otra parte, el Club destina el 0,7% de sus ingresos a los proyectos sociales de la Fundación, lo que también lo convierte en una de las entidades deportivas más solidarias por sus aportaciones fijas a temas sociales. Estas aportaciones han sido establecidas de forma habitual y ya forman parte de una práctica propia de la responsabilidad social corporativa del Club, que ha permitido el desarrollo de una actividad social estable por parte de la Fundación. Estos recursos de los jugadores, los técnicos y el Club se dedican a las diversas líneas de actuación de la Fundación.■

El Barça como entidad también destina el 0,7% de sus ingresos a los proyectos sociales de la Fundación FCB, un compromiso más con sus valores”

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Los jugadores del primer equipo están muy concienciados de que su colaboración es fundamental para ayudar a los niños.

LA FUNDACIÓN DE UN VISTAZO

Catalunya

LOCALIDADES

Partners Fundación Obra Social "La Caixa"

+421.000

Diputaciones Ayuntamientos

BENEFICIARIOS

Total

PAÍSES

+1.063.000

BENEFICIARIOS

Nuevos partners 2016/17 Fundación Stavros Niarchos Scottia Bank Fundación UEFA Konami

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10,5M

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Evoluciรณn de los ingresos

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La reparación del daño La Fundación acoge por primera vez una sesión de prácticas restaurativas para combatir el ‘bullying’ y la violencia filioparental REDACCIÓN

a Universidad de Barcelona, con la colaboración de la Fundación FC Barcelona, la entidad EDUVIC y los departamentos de Enseñanza y Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat de Catalunya, organizó a finales de septiembre unas jornadas sobre prácticas restaurativas para combatir el bullying y la violencia filioparental. Las prácticas restaurativas son procedimientos de resolución de conflictos en los cuales las personas se enfrentan a sus obstáculos relacionales potenciando la empatía y partiendo del convencimiento de que el conflicto también es una oportunidad de aprendizaje. Maria Teixidor, miembro de la directiva del FC Barcelona y vicepresidenta de la Fundación, destacó durante el acto inaugural, celebrado en el Auditori 1899 del Camp Nou, la implicación de la Fundación en la problemática del bullying y la capacidad que tiene el Barça para centrarse “en la prevención, a través de una herramienta tan potente como el deporte”. Reconectar con la empatía

Los expertos resaltaron la importancia que tiene el hecho de que entidades como la Fundación FCB se impliquen en esta problemática, y recordaron que las prácticas restaurativas proporcionan una base relacional sobre la cual las comunidades escolares fuertes y saludables son posibles. Se trata, por lo tanto, de ofrecer una visión que permita que el acoso escolar sea visto como una oportunidad para fortalecer las relaciones. Durante la sesión, Terry O’Connell, pionero de prácticas de justicia restaurativa en Australia, aseguró: “A diferencia de un enfoque culpabilitzador, la restauración es respetuosa,

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justa, repara el daño y construye relaciones”. Esta fue la tesis en la cual se basó esta jornada divulgativa destinada a educadores, maestros y trabajadores sociales. O’Connell es un policía veterano con más de 30 años de experiencia dirigiendo procesos restaurativos que ha contribuido al desarrollo de varias políticas en escuelas y organizaciones comunitarias de todo el mundo. Conocido por muchos como el padre de la Justicia Restaurativa, ha recibido numerosos reconocimientos, incluyendo un Doctorado Honorario por la Universidad Católica de Australia. También participó en estas jornadas Jean Schmitz, promotor desde el 2002 de la justicia juvenil restaurativa en el Perú. El trabajo que lideró en este país con la Fundación Terre des Hommes ha sido reconocido internacionalmente, puesto que fue ganador en 2010 del Premio Veillard Cybuslki, otorgado por la Asociación Internacional de Jueces y Magistrados de la Familia y Juventud. Después de la sesión inaugural estas jornadas continuaron hasta el 30 de septiembre en el Campus de Mundet de la Universidad de Barcelona con el objetivo de dar a conocer a docentes, mediadores y educadores herramientas que ayuden a restablecer las relaciones entre las personas que han sufrido bullying y violencia filioparental. En el marco de la línea estratégica de prevención de la violencia juvenil, la Fundación trabaja desde hace meses en materia de bullying. En el mes de junio impulsó el primer Simposio Contra el Bullying, celebrado con éxito en el Camp Nou, y en la actualidad también trabaja en la elaboración de una metología de erradicación de esta lacra que se pondrá en marcha en Catalunya durante los próximos meses. n

La jornada de prácticas restaurativas se celebró en el Auditori 1899.

Asistentes a la jornada, durante una de las confe

erencias.

Se trata de ver el conflicto como una oportunidad de aprendizaje en la que se potencia la empatía con los otros”

Maria Teixidor, con el experto en prácticas restaurativas Terry O’Connell.

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Terry O’Connell, especialista en prácticas restaurativas, durante la conferencia que ofreció en el Auditori 1899 del Camp Nou en septiembre pasado.

“El diálogo es básico para construir las relaciones” Terry O’Connell, conocido por muchos como el padre de la justicia restaurativa, acumula treinta años de experiencia canalizando conflictos con el objetivo de reparar el daño rehuyendo culpas y castigos XAVIER VILÀ FOTOS: GERMÁN PARGA

n vez de buscar la culpa y castigar, el enfoque restaurativo pregunta: “¿Qué sucedió? Quien ha sido afectado y de qué manera? ¿Qué debe suceder para que las cosas queden bien? “. A partir de la creciente conciencia de que este proceso es una forma eficaz de tratar los conflictos se ha extendido esta práctica en la educación y en la comunidad. El australiano Terry O’Connell es uno de los más importantes expertos en esta materia.

enfadado con todo y era propenso a tener actitudes violentas. Gary entendió que su comportamiento había hecho daño a la persona que más le importaba, su madre. Esto resultó ser un punto de inflexión en su vida. Quince años después volví a encontrarme con él y comprobé que la vida valía la pena. Estaba casado con dos hijos y, sobre todo, nunca volvió a hacer ningún daño. ¿Fue un buen aprendizaje para usted esta situación?

¿Influyó su trabajo como policía en el ámbito de la justicia restaurativa?

En 1973, atendiendo una pelea de jóvenes, recibí un golpe en la cara de un chico, Gary, y caí al suelo. Él ya había sido acusado en dos ocasiones más por asalto, pero estaba en libertad por buen comportamiento. Su nuevo delito le comportaba menos doce meses de detención. Su madre me contaba que el chico había cambiado después de la muerte de su padre. Estaba muy

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Aprendí mucho de mi encuentro con Gary. Lo más significativo de todo era comprender que lo que lo mantenía apartado de las relaciones era su vulnerabilidad desencadenada por la vergüenza. Gary se esforzó por saber cómo manejar este sentimiento que experimentó después de la muerte de su padre. Tendemos a ver la vergüenza como un sentimiento negativo, pero es fundamental la construcción de las relaciones.

OPINIÓN

La importancia del enfoque restaurativo

JEAN SCHMITZ, Experto en prácticas restaurativas

H ¿Cómo se trabaja en este tipo de actuaciones?

En 1991 desarrollé un proceso de diálogo basado en lo que he aprendido durante muchos años tratando con personas en conflicto. Empecé a encontrarme con infractores, víctimas y especialistas para hablar sobre lo que había pasado, el impacto que había tenido y lo que era necesario para hacer las cosas bien. ¿Qué método o proceso utilizó para estos encuentros?

La dinámica de las reuniones la creé a partir de una serie de preguntas “restaurativas” que se centran en “daños y relaciones” en lugar de “culpa y castigo”. ¿Cuáles serían los puntos clave del éxito de esta metodología?

Las preguntas restauradoras funcionan porque crean las condiciones que permiten a quienes experimentan vulnerabilidad (vergüenza) aprender a sentirse con sus incomodidades y molestias y estar abiertos a escuchar a otros. Mi interacción con Gary y su madre se construyó alrededor de un diálogo respetuoso y justo que creó una experiencia muy diferente para él, porque no se trataba de culpa y humillación. Desde la Fundación FCB estamos iniciando una línea de actuación en temas de ‘bullying’. ¿Cómo cree que una metodología como ésta puede ayudar?

Mi aproximación al bullying se centra en la creación de un entorno escolar inclusivo y respetuoso en el que el potencial de comportamiento inadecuado se reduzca considerablemente. Una comunidad restauradora es aquella que utiliza habitualmente círculos para compartir y generar relaciones, y si es necesario para hacer frente a comportamientos perjudiciales como el bullying. ■

ay un montón de tipos de conflictos que pueden ocurrir en diferentes entornos (familia, centros educativos, lugar de trabajo...). Cada uno de estos tiene su propio origen, las causas y consecuencias. En cambio, la forma en que se pueden abordar estos conflictos es limitada, y según cuál sea la elegida, no se puede asegurar que se llegue a solucionarlos. Hay dos tendencias en la visión y gestión de los conflictos, dependiendo de si nuestra visión de estos enfoca en las conductas o en las relaciones. En otras palabras, si nuestra visión es punitiva o restaurativa. Imaginemos situaciones que pueden ocurrir de vez en cuando en los centros educativos, como peleas, hurtos o el acoso escolar. ¿Cómo los podemos abordar? Enfoque punitivo - Conductual Este enfoque se centra sólo en la conducta inadecuada, en la transgresión de las normas sociales, apuntando a culpar y castigar al autor de los hechos para que reflexione, aprenda y no vuelva a reincidir. En general, es poco probable que esto suceda. Esta visión obvia a las personas afectadas por el incidente. Esta visión punitiva es simplista, estigmatizadora y generadora de pasividad por parte de todos los actores (víctimas, victimarios, y comunidad) involucrados en un conflicto. Enfoque restaurativo - Relacional Todo conflicto o acto violento genera daños y afecta las relaciones. Las malas conductas serán cotejadas, pero dentro de una perspectiva de respeto y apoyo, involucrando y apoderándose a todos los actores implicados en el conflicto. En el proceso restaurativo importa el diálogo y la persuasión más que la culpabilidad y el miedo, y generan mejores resultados, como la asunción de responsabilidad, la reparación del daño y la restauración de las relaciones. Los encuentros restaurativos, formales o informales, han permitido reducir las malas conductas, y han supuesto la mejora de los comportamientos y el empoderamiento de los actores para gestionar sus propios conflictos.

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El exazulgrana Simão Sabrosa atiende a una televisión colombiana durante la celebración del Festival FutbolNet en Bogotá.

‘FutbolNet’ amplía su alcance en Latinoamérica Los ‘legends’ Jesús Mariano Angoy y Simão Sabrosa apoyan la Fundación en la transmisión de valores entre los niños más vulnerables MARC PARRAMON FOTOS: FUNDACIÓN FCB

l Programa de Prevención de la Violencia, impulsado por la Fundación FCB, está ampliando notablemente durante los últimos meses su alcance en Latinoamérica con la puesta en marcha de la metodología FutbolNet en nuevos países. Entre los meses de agosto y septiembre se han realizado varias jornadas FutbolNet en El Salvador y Colombia gracias a la colaboración con Scotiabank, entidad financiera canadiense, patrocinadora del FC Barcelona en el continente americano. En El Salvador, las actividades se realizaron en las localidades de Santa Tecla y Guazapa, en la zona central del país. Bajo

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el patrocinio de Colpatria, filial del banco canadiense, y con la presencia del legend Jesús Mariano Angoy, un millar de niños pertenecientes a barrios vulnerables jugaron al fútbol bajo las reglas de FutbolNet con el objetivo de fomentar el diálogo, la reflexión sobre los valores y la resolución pacífica de conflictos. Hay que recordar que El Salvador tiene la tasa de homicidios violentos más alta del mundo, 81 por cada cien mil habitantes, según datos de este 2017. En Colombia, el otro país donde acaba de aterrizar la Fundación, las actividades se llevaron a cabo en Bogotá con niños de los barrios de la zona sur, que cuenta con altos índices de desplazados internos a causa del conflicto armado que sufre el país desde hace décadas. Durante cuatro días las sesiones de FutbolNet sirvieron para crear un clima de paz y convivencia, en una zona con una alta criminalidad y violencia juvenil vinculada a los grupos y al tráfico de drogas. El embajador del Barça en este país fue el exazulgrana Simão Sabrosa, que también participó en las sesiones. n

Los jugadores del primer equipo son prescriptores de valores en estas jornadas ‘FutbolNet’.

Río vive una nueva fiesta Gran éxito de la 6ª edición de esta jornada ‘FutbolNet’ abierta a todos los habitantes de la favela de Maré MARC PARRAMON FOTOS: FUNDACIÓN FCB

ás de 500 niños y jóvenes de entre 8 y 14 años participaron en la sexta edición del Festival FutbolNet de Río de Janeiro, que se celebró a finales de septiembre en la ciudad carioca con la colaboración de la Fundación MAPFRE. Una vez más la comunidad de la favela de Maré se sumó a esta fiesta, en la que, además de fútbol, se pusieron en marcha otras actividades lúdicas, no sólo para los niños sino también para sus familias. n

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EMERGENCIA

Aportación de 200.000 euros para México

La Fundación FC Barcelona ha atendido la llamada de UNICEF para dar respuesta al estado de emergencia que han provocado los terremotos del 7 y el 19 de septiembre en México. Se calcula que en las zonas perjudicadas viven siete millones de niños y niñas, los más afectados por la tragedia, que han visto cómo cerca de 5.100 escuelas han quedado dañadas o destruidas. Por este motivo, la Fundación FCB y UNICEF han acordado destinar 200.000 euros con carácter inmediato para atender esta emergencia para establecer escuelas temporales y distribuir material educativo. Cabe recordar que la Fundación y UNICEF ampliaron su alianza en febrero de 2016 hasta 2020 con un aumento de la contribución económica anual del club azulgrana, que pasó de los 1,5 millones a 2 millones de euros, un incremento que se acuerda destinar a diferentes emergencias que afectan a la infancia, como la que vive México.n

De la donación anual de 2 M de euros que la Fundación hace a UNICEF se dedicará una parte a la emergencia provocada por los terremotos

Niños del estado de Morelos, México, uno de los más afectados por la tragedia.

SOLIDARIDAD

Donación de sangre en el Camp Nou La Sala Berlín del Estadio se convirtió por un día en un espacio sanitario bajo el lema #amicspersempre El 31 de agosto el Camp Nou acogió durante todo el día una jornada de donación de sangre que tuvo como objetivo hacer una recogida masiva para incrementar las reservas durante el verano, ya que en esta época del año bajan hasta un 30%. La iniciativa fue impulsada por el Banco de Sangre y Tejidos y contó con el apoyo de la Fundación FCB y el FC Barcelona con el objetivo de que todo aquel que lo qui-

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La Sala Berlín del Camp Nou recibió la visita de numerosos socios y aficionados.

siera pudiera donar sangre, especialmente los colectivos de socios y peñistas del Barça. Esta acción sirvió para cerrar la campaña #amicspersempre que lanzó este verano el Banco de Sangre y Tejidos. El punto reservado para las extracciones, perfectamente

equipado, fue la Sala Berlín, situada en la zona lateral del Estadio, y estuvo operativo de 09.30 a 21 horas. También se desplazó al recinto una unidad móvil del Banco de Sangre para reforzar la atención a los donantes y ofrecer información. n

FORMACIÓN

Alianza con la Cruz Roja Se impartirán talleres para niños protagonizados por títeres con el objetivo de reflexionar sobre la crisis de los refugiados La Fundación FCB y la Cruz Roja en Catalunya firmaron en septiembre un convenio de colaboración basado en los objetivos y valores que comparten y consistente en el desarrollo de un proyecto llamado No importa de dónde venimos. Talleres de educación en valores sobre la crisis de refugiados para niños y familias. La iniciativa, dirigida a niños de entre 4 y 8 años y a sus familias, consiste en el desarrollo de talleres de educación en valores de convivencia y humanitarios presentes también en el deporte, tales

Antoni Aguilera, presidente de la Cruz Roja, con Cardoner durante la presentación del proyecto.

como: el respeto, el compromiso, el esfuerzo, el trabajo en equipo, la humildad y la solidaridad, entre otros. Estos talleres tendrán como elemento central una representación artística en la que abordarán la actual crisis de refugiados, utilizando los títeres para contar historias y transmitir valores de manera sencilla

y cercana a los niños. Se prevé llevar a cabo 25 talleres en todo el territorio catalán, de diciembre de 2017 hasta junio de 2018, en centros educativos y otros espacios abiertos (ferias, fiestas mayores, etc.). También se realizarán actividades de reflexión y sensibilización que potenciarán la transmisión de valores. n

CÁNCER INFANTIL

Los Legends más solidarios Un Manchester United-Barça de veteranos (2-2) recauda fondos a favor de la investigación para luchar contra el cáncer infantil

Los Manchester United Legends y los Barça Legends empataron 2-2 en un nuevo parti-

do disputado en la ciudad inglesa que sirvió para recaudar fondos a favor de la investigación sobre el cáncer infantil. Exazulgranas como Davids, Abidal y Sergi Barjuan demostraron su clase en un partido que contó con jugadores de la talla de Van Nistelrooy, Yorke y Van der Sar por parte inglesa. n

Minuto de silencio por los atentados de Manchester, Barcelona y Cambrils, antes del inicio del partido.

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