APRENDIENDO A DESARROLLAR
MI BIENESTAR PSICOLÓGICO SERVICIO DE PSICOLOGÍA ABRIL 2017
En el Boletín del Servicio Psicopedagógico, queremos compartir contigo algunas pautas para que conozcas la importancia de desarrollar tu bienestar psicológico, el cual, te ayudará a ser un mejor alumno y ¡una mejor persona!
La voluntad es clave en el equilibrio emocional Mantener el equilibrio emocional no siempre es una tarea fácil, porque la sociedad es altamente competitiva y causa en las personas un gran desgaste psicológico, además la tecnología no ayuda a vivir y disfrutar del momento presente, ya que, siempre estamos pendientes de ser lo que los demás quieren que seamos. Encontrarse con uno mismo es una prioridad para el equilibrio emocional, y para conseguirlo, es recomendable adoptar una serie de hábitos.
Cuerpo sano para tener una mente sana
Identifica y conserva las relaciones sanas
El ejercicio regular y la dieta equilibrada van a influir positivamente en tu estado anímico y tu nivel de energía.
Para mantener un entorno sano, es necesario que identifiques y reconozcas a las personas que te ayudan a crecer, y aquellas que no.
Tómate un tiempo para reflexionar Unos minutos al día pueden ser buenos para ayudarte a minimizar los problemas que pueden surgir. Para ello, antes de acostarte puedes repasar cómo te ha ido en el día.
Conecta con la naturaleza
Observa tus palabras En las situaciones complicadas, es mejor darse un tiempo para respirar y volver al presente. Si has de decir algo, que no sea impulsivamente. Recuerda: no le hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti.
Márcate intenciones
Vivir en una gran ciudad puede causar estrés y puede provocar fatiga emocional. Pasear por un parque grande o pasar tiempo con tu mascota, puede ayudarte a sentir bienestar.
Busca un propósito en la vida y observa si tus acciones van en esa dirección.
Respira
Aprende a focalizar tu atención
Realizar ejercicios que trabajan la respiración te generará bienestar general y disminuirá tu ansiedad.
Relájate. Estabiliza tu conciencia en el momento presente.
Exprésate Encuentra una vía de escape creativa y practícala. Algunas personas pueden encontrar que escribir, dibujar o pintar los mantiene equilibrados.
Márcate intenciones Busca un propósito en la vida y observa si tus acciones van en esa dirección.
¿SABES QUÉ ES LA RESILIENCIA?
La resiliencia permite que las personas sean capaces de superar las adversidades que se presentan en sus vidas. Las personas resilientes lo son, entre otros aspectos, porque han pasado por alguna situación difícil que les ha movido a entrenarse en su propio manejo de emociones.
LOS 12 HÁBITOS TÍPICOS DE LAS PERSONAS RESILIENTES 1. Toman medidas para mejorar su autoestima
7. Están todo el día haciendo cosas
Son capaces de reconocer que las acciones que hagan hoy cambiarán la manera de percibirse a sí mismas el día de mañana. Por eso, orientan parte de sus acciones hacia la mejora de la autoestima y la autoconfianza.
Mantener una actitud activa les ayuda a centrarse y llegar a los objetivos deseados.
2. Se sumergen en tareas creativas La creatividad es una de las formas de hacer que todos nuestros pensamientos se enfoquen hacia la resolución de un reto novedoso.
3. Mantienen una actitud estoica cuando conviene... Detectar aquellas situaciones en las que es prácticamente imposible hacer que el contexto cambie, posibilita que no se planteen ilusiones vanas y que sus esfuerzos se centren en gestionar a su manera de vivir lo que ocurre en esta nueva situación.
4. ¡Pero no dejan de buscar metas!
8. Practican deporte y/o algún tipo de meditación La meditación promueve la aparición de pensamientos positivos y la reducción del estrés. El deporte, por su parte, sirve para relajarse y ganar autoconfianza.
9. Usan el humor para empoderarse Hacer bromas sobre algo relacionado con los problemas personales es saludable, teniendo en cuenta que se aborda el tema obteniendo una respuesta agradable y que les libra del peso del estrés.
10. Reservan momentos para pensar acerca de lo que pueden hacer a largo plazo
Las personas resilientes muestran propensión a sacarle partido a la atención selectiva: en vez de estar todo el día pensando en las cosas malas que les ocurren, se centran en los objetivos a desarrollar.
Enfrentarse a las adversidades significa mirar más allá del estrés o la tristeza que pueden experimentarse. Por eso, la persona resiliente planifica sus objetivos y hace que algunos de estos queden proyectados hacia el largo plazo.
5. Se rodean de personas con actitud positiva
11. Invitan a los demás a participar en sus proyectos
Envolverse en una comunidad apoya a sus miembros, es una buena manera de facilitar la gestión de emociones. Hacer que el optimismo y ansias de superación personal vayan desde el entorno hacia uno mismo hace que todo resulte más fácil.
6. ¡Pero también con todo tipo de seres humanos! Vivir la vida con normalidad incluye no estar limitado por una burbuja de amistades y conocidos que cumplan unas características muy determinadas.
El sentido de esto es contagiar la actitud positiva a los demás y, al mismo tiempo, hacer que esta actitud positiva vuelva a uno mismo a través de la satisfacción de los otros, como un eco.
12. Se empapan de cultura Para desarrollar resiliencia no hay nada como explorar formas de pensamiento y de acción alternativas. Y, para conseguir esto, vivir la cultura es fundamental; de este modo se descubren pensadores, autores que nos enseñan que la vida puede ser experimentada de muchas más formas de las que creímos en un principio.
Para reflexionar…
Cuento sobre resiliencia
Un hijo se quejaba con su madre acerca de su vida y de cómo las cosas le resultaban tan difíciles. No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencido. Estaba cansado de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema aparecía otro. Su madre le llevó a la cocina; allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre el fuego. En una colocó zanahorias; en otra, huevos; en la tercera, puso granos de café. Las dejó hervir sin decir palabra. El hijo esperó impacientemente, preguntándose qué estaría haciendo su madre. A los veinte minutos la madre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y las colocó en un tazón. Sacó los huevos y los puso sobre un plato. Finalmente, coló el café y lo sirvió en una taza. Mirando a su hijo le dijo: “¿Qué ves?”. “Zanahorias, huevos y café”, fue su respuesta. Le hizo acercarse más y le pidió que tocara las zanahorias, él lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera; al quitarle la cáscara, observó que el huevo estaba duro. Finalmente le pidió que probara el café; él sonrió mientras disfrutaba de su aroma. Humildemente, el hijo preguntó: ¿qué significa esto madre?. Es química, le explicó: los tres elementos se han enfrentado a la misma adversidad: agua hirviendo; pero han reaccionado de forma diferente en función de sus características.
• La zanahoria llegó al agua fuerte y dura; pero, después de pasar por el agua hirviendo, se ha puesto débil, fácil de deshacer. • El huevo ha llegado al agua frágil, su cáscara protegía un líquido interior; pero, después de estar en el agua hirviendo, su interior se ha endurecido. • Los granos de café, sin embargo, son únicos: después de estar en el agua hirviendo, fueron capaces de cambiar el agua y sus propiedades. “¿Cuál eres tú, hijo?. Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes?”, preguntó a su hijo. • ¿Eres una zanahoria, que parece fuerte, pero cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza? • ¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable, un espíritu fluido, pero tras una muerte, una separación o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera pareces el mismo, pero eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecidos. • O ¿eres como el grano de café? El café cambia al agua hirviendo, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición, el café alcanza su mejor sabor. Si eres como el grano de café: cuando las cosas se ponen peor tú reaccionas en forma positiva, sin dejarte vencer, y haces que las cosas a tu alrededor mejoren; que ante la adversidad exista siempre una luz que ilumina tu camino y el de las personas que te rodean. Esparces con tu fuerza y positivismo "el dulce aroma del café".
Y tú, ¿cuál de los tres eres?
HORARIOS DE ATENCIÓN Escuela Profesional de Ciencias de la Comunicación T: 513 6300 A: 2065 Lic. Jairo Ríos Peña Lunes a viernes de 8:30 a.m. a 2:30 p.m. Lic. Carlos Huamán Fernández Lunes a viernes de 2:30 p.m. a 8:30 p.m.
Escuela Profesional de Turismo y Hotelería T: 513 6300 A: 2045 Dra. Nieves Altamirano Peceros Lunes a viernes de 8:00 a.m. a 3:00 p.m. Lic. Gabriela Miranda Ognio Lunes a viernes 2:30 p.m. a 9:30 p.m
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