Murillo Naranjo, Miguel “Miguelín Murillo”

Maza, en una labor con altibajos pero muy voluntariosa. Si en este animal no acabó de encontrar el temple, se arrimó muchísimo ante el peligroso y manso cuarto, en una faena de gran mérito y culminada con un espectacular volapié. Paco Ureña, que había estado por encima del deslucido segundo, se la jugó en una faena de valor sereno frente al problemático y serio quinto de la tarde, al que mató superiormente de una sensacional estocada”. Poco después, el 28 de agosto, se presentó en la plaza de toros de Las Ventas, de verde y oro, con el novillo “Ligero”, negro, marcado con el número 25, de la ganadería de “Hato Blanco”, que adquirió antigüedad, y 502 kilos de peso. Alternó con Javier de la Concha y Javier López “El Javi”, también debutante en Madrid. No tuvo suerte Murillo en su debut madrileño, pues se silenciaron sus dos faenas escuchando sendos avisos. Tras el paseíllo se guardó un minuto de silencio en memoria de la muerte de Manolete. Murillo Márquez, aunque extremeño pasó cuatro temporadas en Sevilla, sin que en las últimas temporadas, sobre todo las dos últimas, torease suficientemente como para augurar una carrera de éxitos como matador de toros. Pese a todo, anunció su doctorado en su pueblo, Zafra, el 1 de mayo de 2008, de nazareno y plata, con toros de “Buenavista”. Fue su padrino Francisco Javier Corpas, otro joven matador que aunque con excelentes maneras, estaba esperando a que le llegara la soñada oportunidad. El testigo, Pérez Mota, también joven torero con excelentes cualidades. El toro de la ceremonia fue “Fermentado”, al que cortó una oreja, y las dos al que cerró plaza, saliendo a hombros con sus compañeros de terna. El toricantano Murillo Márquez que había llegado al doctorado con 45 novilladas picadas solamente toreó esta corrida de toros.

murillo nArAnjo, mIguel “MIGUELÍN MURILLO”

Matador de toros y banderillero de toros, nacido en Mérida (Badajoz), el 19 de mayo de 1984, cuando su padre Miguel Angel Murillo Moreno era novillero con caballos, y a partir de 1990, banderillero perteneciente a las cuadrillas de Óscar Higares, con quien estuvo seis años. Luego, en 2004 toreó suelto pero perteneciendo a la cuadrilla de Manuel Bejarano cuando este tenía fechas, y por último, desde 2004, con Antonio Ferrera las dos temporadas siguientes como tercero en sustitución de Eugenio Rodríguez. El 20 de enero de 2017, Miguelin Murillo hizo unas declaraciones al

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periódico digital de su pueblo, “Badajoz Taurina”, en las que prácticamente narraba su trayectoria torera desde sus inicios, a raíz de su decisión de hacerse banderillero: “En relación con el asunto de referencia quiero informarles que tras una afición a la Fiesta de los toros que comencé de niño a la edad de ocho años en mi ciudad natal Mérida, tras pasar por la Escuela Taurina del Patronato de Diputación de Badajoz donde fui perfeccionando lo que comenzó como un juego pasando a convertirse en el inicio de mi carrera profesional como torero, tras debutar con picadores el 29 de junio en la Feria de San Juan de Badajoz del año 2001 ante novillos de Espartaco, tomando la alternativa en Almendralejo el 31 de marzo de 2007 ante toros de Alcurrucén, de manos de Enrique Ponce con Antonio Ferrera de testigo, después de muchos años de lucha día a día y viendo las enormes dificultades, por cuestiones múltiples, entre ellas las casi nulas opciones de oportunidades en los últimos años, tanto en las Ferias taurinas de mi ciudad, como en mi tierra extremeña y en otros lugares, a pesar de creer que como matador de toros me encuentro en plenitud de facultades y con la madurez conseguida a lo largo del tiempo, desde la altura de mis 31 años me veo en la dolorosa pero por otra parte ilusionante situación de tomar la meditada decisión de cambiar el oro por la plata, es decir de pasarme al escalafón de banderilleros, escalafón al que respeto al máximo nivel pues siempre les traté en mis cuadrillas como el equipo fundamental en el desarrollo de la lidia que son y del que yo formaré parte a partir de este momento, esperando que este nuevo tiempo venga acompañado del reconocimiento que buscaré con profesionalidad y entrega a las órdenes de los matadores de novillos y/o toros que tengan a bien contar conmigo”. Así pues, y tal como dice, debutó con picadores en Badajoz, de turquesa y oro, el 29 de junio de 2001 con César Jiménez y Javier Solís, lidiando novillos del matador de toros Juan Antonio Ruiz Román “Espartaco”. El novillo de su debut fue el llamado “Loquero”, al que cortó una oreja, y otra al que cerró plaza, saliendo de la misma a hombros. Dos años estuvo toreando novilladas sin picadores, y en 2003 debutó en Las Ventas, el 25 de julio, de grana y oro, con novillos de “Navalrosal”, y Andrés Revuelta y Roberto Galán como compañeros de cartel. Andrés Revuelta también era debutante, y como dato anecdótico, diremos que tras el paseíllo se guardó un minuto de silencio por la muerte del diestro Miguel Mateo “Miguelín”. El novillo de su presentación se llamaba “Ciervo”, era negro, de 468 kilos, y estaba marcado con el número 16. Repitió el 28 de septiembre en el mismo coso, esta vez con novillos de Ramón Flores y Hnos.

(4), y 2 de Alejandro Vázquez (5º y 6º), acartelado con Francisco José Palazón e Ismael López, que cortó una oreja a su primero, tercero de la tarde y se erigió en el triunfador del festejo. A Murillo le silenciaron sus faenas. Continuó toreando varios años más escaso número de festejos hasta que en 2007 decidió tomar la alternativa en Almendralejo (Badajoz), de marfil y oro, el 31 de marzo en un cartel de verdadero lujo: Enrique Ponce de padrino y Antonio Ferrera como testigo. El toro de la cesión por parte de Enrique Ponce fue “Heredero”, número 268, de la divisa de “Alcurrucén”, con el que fue ovacionado, pero el triunfo le llegó en su segundo oponente al cortarle las orejas y salir a hombros de la plaza con sus compañeros de terna. Su padre vio la corrida desde el mismo ruedo, ya que figuraba como banderillero en la cuadrilla de Ferrera. Antonio Castañares que vio la corrida escribió al día siguiente la crónica de la misma de la que extraigo exclusivamente la parte correspondiente al toricantano: “Miguelín Murillo, muchos años de novillero, ha sido un ejemplo de constancia y amor a una profesión hermosa como ninguna otra. Que tenga mucha suerte en su nueva andadura le deseamos de corazón. Ayer, tras doctorarle Enrique Ponce, no lo tuvo fácil porque sus dos toros resultaron deslucidos. Con acusada querencia a los tableros su primero, con Ferrera alternó en banderillas, con alguna desigualdad al clavar pero con ganas de agradar. En la faena, firme y decidido, logró unas tandas ligadas y hubiera cortado algún trofeo si no hubiera sido por el mal uso del descabello. El sexto fue un toro con cuajo. Con éste tuvo mucho mérito todo lo que hizo Miguelín. Ya de salida, lo cuajó con el capote a la verónica, lances que le salieron limpios además de pasarse muy cerca al toro. Después, en banderillas, el de Alcurrucén se le vino con transmisión y fue un tercio muy brillante, especialmente con un muy arriesgado par al quiebro clavando al violín. Pero ahí se acabó el fuelle del astado, pues se paró en la muleta, aunque el torero, muy decidido, le sacó algunos muletazos con la premisa del aguante y la decisión. Cortó las dos orejas que le sirvieron para acompañar a Ferrera por la puerta grande”. En 2008 debutó en América, concretamente en la plaza de Bambamarca (Perú), el 20 de julio, alternando con Fernando Roca Rey y Paco Ureña en la lidia de reses de la ganadería de “La Viña”. También estaba anunciado el rejoneador Andrés Ruiz. Miguelin Murillo desorejó por partida doble al toro de su presentación y se silenció su labor en el segundo oponente. Tras siete años como matador de toros, pero toreando muy corto número de festejos y sin haber confirmado su alternativa en Madrid, decidió poner punto y final a su carrera de matador de toros

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en Entrerríos (Badajoz), el 12 de octubre de 2014, en una corrida en la que se corrieron toros de Luis Albarrán siendo sus compañeros de cartel Salvador Cortés e Iván Abásolo. Murillo fue ovacionado en su primer toro y premiado con las dos orejas y el rabo de su último toro. Hasta entonces había toreado 102 novilladas picadas y 32 corridas de toros en España. En enero de 2017, Miguelin Murillo anunció a los medios su decisión de cambiarse a la plata por las “casi nulas opciones de oportunidades en los últimos años”, inclusive en las plazas de Mérida y de Extremadura en general. Así pues, y en sus propias palabras, se vio obligado a tomar “la dolorosa, pero por otra parte ilusionante y meditada decisión de cambiar el oro por la plata y pasarme al escalafón de banderilleros al que respeto al máximo nivel y que siempre traté en mis cuadrillas como el equipo fundamental en el desarrollo de la lidia que son y del que yo formaré parte a partir de este momento, pese a creer que como matador de toros me encuentro en plenitud de facultades y con la madurez conseguida a lo largo de muchos años de lucha día a día y viendo las enormes dificultades en los últimos años”.

mArtín cámArA, rObertO, “jarocho” y “roberto mArtín jArocHo” Colección del autor.