EL ALEBRIJE
Fernando Murrieta
EL ALEBRIJE Autor, historia e ilustraciones: Fernando Murrieta Titulo original: El alebrije Primera edición: diciembre de 2013 D. R. © 2013 Comentarios sobre este libro a: fejemupe@hotmail.com Queda rigurosamente prohibida la reproducción total o parcial sin previa autorización por el autor y estará sujeto a las sanciones establecidas por las leyes y esto aplica a texto, historia e imágenes.
EL ALEBRIJE
Todos los días me gustaba salir al balcón y ver la gente pasar por la calle, pero desde hacía varios días había visto pasar a una viejita diariamente al mercado. Cuando regresaba traía las bolsas llenas de carne, frutas y verduras.
Cierto d铆a se me ocurri贸 seguirla para ver que hacia con tanta comida. Espere bajo su ventana mientras ella cocinaba. Ol铆a tan rico y al fondo se escuchaba la respiraci贸n de un animal feroz.
Al estar imaginando de que animal podrían tratarse esas respiraciones la viejita me descubrío espiando, pero en lugar de regañarme me invito amablemente a pasar, pues ella cocinaba para el Alebrije, su mascota que la había acompañado desde su infancia.
El Alebrije era un animal con cuernos, enormes alas y poderosos colmillos que hacĂan temerle al hombre mĂĄs fuerte. Era enorme pero muy amigable que deje de tener miedo al momento en que me vio.
Mientas el Alebrije comía placidamente le pregunte a la viejita porque el Alebrije nunca había salido a la calle y con una cálida voz me contesto: “puede ser peligroso, no porque el Alebrije sea malo, sino porque la gente puede hacerle daño a un animal desconocido para ellos”.
“Al contrario”, le conteste, a la gente le dará enorme gusto saber de él. “Lo querrán como un amigo pues el es incapaz de hacer daño aunque tenga garras de León, alas de dragón y dientes de tiburón, hay que intentar llevarlo a la calle”, exclame emocionado.
“Esta bien, sólo porque me convenciste” me contesto amablemente la viejita. “¿Sabes? él nunca ha salido a la calle y aunque temo que le hagan daño tu me ayudarás a decirle a la gente que el Alebrije no es malo porque es el mejor amigo de los niños”.
Y efectivamente, el Alebrije estuvo tan contento con los niños que jugaba con ellos, los montaba sobre su lomo para volar con ellos por los cielos. Y así fue como toda la gente vio que el Alebrije, a pesar de tener filosos colmillos no hacía daño ni a una mosca.
El Alebrije FERNANDO MURRIETA
El Alebrije FERNANDO MURRIETA
El alebrije posee filosos colmillos, enormes cuernos, y garras de león ¿será buen amigo o mal amigo? descubrelo leyendo este maravilloso libro