Creé en mí - Historias de Fe y Alegría
Noemí en el año 2006, en nuestra escuela en Embarcación, Salta Noemí hoy, 8 años después
“Nuestros jóvenes necesitan formación para el trabajo” Noemí Romero conoció a Fe y Alegría en 1998, con apenas 25 años. Nació en Fortín Dragones, un pequeño pueblo de Salta. Su padre era hachero y su madre empleada doméstica. Hoy es vicedirectora del nivel secundario en nuestro centro educativo ubicado en el barrio Solidaridad, Salta, e integra el Departamento de Educación de nuestra organización a nivel nacional. Aquí, su testimonio y sus anhelos con respecto al nuevo programa de FORMACIÓN PARA EL TRABAJO que busca facilitar a más de 4000 jóvenes en situación de pobreza, el acceso al mundo laboral. A Noemí Romero la conocen más como “Cori”. Siempre alegre, con una mirada transparente y un empuje singular lleno de esperanza, nació en una familia de ocho hermanos, hoy está casada y es madre de tres hijos. Nació en Fortín Dragones, un pueblito de la jurisdicción de Embarcación, ubicado al norte de Salta, a pocos kilómetros de la frontera con Jujuy y Bolivia. La mayoría de los habitantes allí pertenecen a pueblos originarios (guaraníes, tobas, wichí, entre otros) y viven en un contexto de alta vulnerabilidad socio-económica. “Mi padre era hachero y mi madre empleada doméstica – cuenta Noemí-. A los dos años de edad me trajeron a Embarcación, donde crecí y estudié hasta llegar ser Profesora de Geografía”. Fiel a su marcada vocación de servicio, a fines del año 1998 Noemí ya integraba un equipo de docentes voluntarios laicos de su Parroquia, San Roque, y brindaba apoyo escolar a chicos de barrios periféricos. “Fue en ese entonces donde con mis compañeros conocimos a Fe y
Alegría –recuerda-. Al siguiente año nos integramos a este hermoso Movimiento de Educación y Promoción Social con quien fundamos una escuela en Embarcación. Hoy la escuela recibe a más de 360 alumnos/as desde nivel inicial hasta secundario y brinda educación de calidad de manera totalmente gratuita, como en todos los centros educativos de Fe y Alegría”. Ubicado a las afueras del pueblo, cerca de un basural, recién el año pasado este centro comenzó a contar con agua potable. Las familias vecinas viven en condiciones muy precarias. Meses atrás la zona fue devastada por un ciclón. Noemí fue docente y luego Directora del nivel secundario de la escuela hasta fines del año 2013. Desde febrero de este año, se trasladó a vivir a Cerrillos (Salta) para ejercer como Vicedirectora del nivel secundario de la escuela Fe y Alegría 8171 en el Barrio Solidaridad, Salta, el centro educativo más grande de nuestra organización aquí en Argentina. Actualmente, Noemí continúa su formación para ser Licenciada en Educación y forma parte del