EDITOTIAL 103
BASTA DE RECICLAR EL PASADO, ¿LA VERDAD ESTARÀ AHÌ AFUERA? Lea este texto con la siguiente canción: THE X FILES THEME del compositor Mark Snow
Me pregunto cuántas y cuantos, de ustedes, queridos y queridas ficcionautas, han sentido los efectos de la catástrofe ecológico-cultural que ha provocado el reciclaje de productos culturales. Si aún no los sienten, hagan un rápido diagnostico en la oferta de sus streamings, revistas, publicaciones y novelas. Siendo honestos es muy poco lo que se produce actualmente, seguimos viendo las mismas cosas. Sobre esto se me viene un aforismo, una máxima, de Douglas Coupland, celebre autor de “Generación X, un mantra que debería ser puesto en práctica hoy día: “Basta ya de reciclar el pasado”. Mi preocupación comenzó cuando leí “Retromania” del crítico cultural Simon Reynolds, cuyo subtitulo expresa la causa de esta sintomatología: “la adicción del pop a su propio pasado”. En defensa de lo anterior puedo afirmar que tal vez no se ha hecho algo mejor que nos sorprenda como esas series que vimos en nuestra infancia o adolescencia; esa es la trampa, nuestra poca confianza en la innovación. Soy afortunado en haber crecido en esa transición cultural de la era eléctrica a la era electrónica. En mi infancia la televisión estaba llena de forajidos equipados con vehículos de alta tecnología, auspiciados por entidades no gubernamentales, que combatían el crimen y hacían justicia por su propia mano. En mi adolescencia, en los años 90 del siglo XX, la parrilla televisiva ofrecía viajes interestelares, renegados, agentes secretos y agentes federales que buscaban pruebas de la existencia de alienígenas. Parecía buen momento para Norteamérica de examinar sus instituciones al parecer. El FBI, la principal agencia de investigación criminal del Departamento de Justicia de Estados Unidos, estaba bajo la lupa de la opinión publica. Esto motivo al productor y guionista de televisión californiano Chris Carter - había leído un informe que decía que 3,7 millones de estadounidenses podrían a ver sido abducidos por extraterrestres - para cambiar el esquema y crear una serie en la que también pudiese incluir recuerdos del escándalo Watergate y el programa de terror Kolchak: The Night Stalker. En ese intersticio, esa interzona, como una iluminación profana, se le ocurrió esta premisa: ¿Qué pasaría si juntamos a un entusiasta creyente de la existencia de los extraterrestres con una escéptica incrédula de las pruebas circunstanciales en la búsqueda de la verdad? Lo que resulto en The X Files, Los Expedientes Secretos X.
En la época de los 60 la “X” sirvió para identificar a los mutantes, esos adolescentes que no encajaban en la normalidad impuesta por el sistema social. En los noventa la misma “X” identifica a los adolescentes nihilistas que son ajenos a los enredos del sistema, al afán de logro, no se inscriben en ninguna causa, solo intentan sobrevivir y mantenerse a flote cada mes. En ese ambiente Chris Carter nos presentara, por un lado, a Fox Mulder: un brillante investigador y perfilador del FBI formado en Oxford, asignado a una sección llamada The X-Files (Expedientes Secretos X) en la que acumula pruebas que confirman la existencia de extraterestres, con la esperanza de encontrar a su hermana que fue abducida años atrás; el devoto creyente. Por otro lado nos presenta a la doctora Danna Scully: comisionada por el alto mando de la institución para que examine de cerca lo que ocurre en The X-Files, envié reportes del comportamiento de Mulder y servir de, por decirlo de alguna manera, topo para determinar la existencia de dicha división; la escéptica incrédula. Desde su primer caso Scully y Mulder son puestos a prueba y en cada episodio comenzaran a desconfiar, a sospechar de los indicios, a tal grado que lo único cierto para ellos será que “la verdad está ahí afuera”. Sin duda una de las series mas queridas de aquellos años noventa que nunca volverán. A pesar de que la cadena Fox intento traerlos de vuelta, la mayoría coincide en que debió quedarse donde había culminado en las películas, esos son los riesgos de reciclar el pasado. Mas allá de este desliz, Los Archivos X demostraron ser, una vez más, la manera de explorar lo que ocurría en la cotidianidad norteamericana usando metáforas de la ciencia ficción, el ocultismo, la parapsicología y el terror; para exponer las problemáticas que pocos querían abordar y evadir. Esta entrega, la 103, la dedicaremos a repasar los aspectos esenciales de esta serie y una guía para quienes deseen convertirse en parte de los creyentes de la teoría de Mulder o ponerse de parte de Scully, las dos funcionan de todos modos. Ficciorama/ Agosto de 2020
FICCIROSEBUDD: EL PRIMER EXPEDIENTE
¿Quién es Chris Carter?
Nacido el 13 de octubre de 1956 en California, hijo de William y Catherine Carter, nació en Bellflowe; es un productor y guionista, conocido por ser el creador de la serie de televisión sobre fenómenos paranormales The X-Files.
Todo comenzó aquel viernes 10 de septiembre de 1993. Recien cumplia 16 años cuando se emitio el episodio piloto de The X-Files (Los Expedientes Secretos X), promocionada con esta imagen como “serie dramatica”. Chris Carter, su creador, habia escrito un guiòn de 58 paginas, En él se mostraban dos personajes. Mulder -dedicado, obsesivo, intuitivo- y Scully – seria, intensa y racional- que se encuentran por primera vez cuando ella es enviada para espiarlo y sabotear su trabajo en los X-Files. El propio Carter en algún momento los definió como las dos caras de su propia personalidad. Una escéptica que, a pesar de todo, quiere creer y la otra a la que le gustaría saber que hay muchas más cosas que existen por ahí y están por descubrir aún.
Estudió periodismo en la Universidad Estatal de California (California State University) y se graduó en 1979. Siendo adolescente, fue seguidor del programa Kolchak: The Night Stalker, protagonizado por Darren McGavin en el papel de un desafortunado periodista que era testigo de experiencias paranormales. La serie sólo duró veinte capítulos, pero dejaría una importante huella en Carter. Filmografía
The B.R.A.T. Patrol (1986) — Guionista Brand New Life - Creador/Guionista The X-Files (1993-2002) - Creador/Guionista/Director/Productor ejecutivo Millennium (1996-1999) - Creador/Guionista/Productor ejecutivo The X-Files: Fight the Future (1998) — Guionista/Productor ejecutivo Harsh Realm (1999–2000) - Creador/Guionista/Productor ejecutivo The Lone Gunmen (2001) - Guionista/Productor ejecutivo Inventing Grace, Touching Glory (2003) — Actor A Philosophical Investigation (2006) — Director/Guionista/ Productor ejecutivo The X-Files: I Want to Believe — Co-Guionista/Director
Antoni Roig / COMeIN 2016
La verdad está ahí atrás: el regreso de los X-Files y las nuevas formas del ‘revival’
Hace unas pocas semanas hemos podido asistir a uno de los retornos más esperados de la televisión reciente: la nueva ‘mini’ temporada de la serie clave de los años noventa The X-Files (Expediente X). El objetivo de este artículo no es tanto valorar este retorno -que también- como contribuir a la reflexión sobre la importancia otorgada a la noción de revival, utilizada explícitamente en este caso, pero aplicable a toda una serie de fenómenos culturales recientes y cercanos en el cine y la televisión contemporáneas. ¿Qué es realmente un revival? Literalmente, ”volver a la vida”; metafóricamente, que vuelva a tener vigencia, aceptación o popularidad algo del pasado, una costumbre, una moda, una tendencia. En el caso del audiovisual es exactamente lo mismo: así, a diferencia de otras estrategias habituales en la cultura contemporánea, no se trata -y esto es muy importante- simplemente de continuar, rehacer o reimaginar un producto de éxito para un público
objetivo fiel e interesado. Se trata de recuperar una emoción propia de otro tiempo, convirtiendo un fenómeno cultural clave para una generación y/o un país en, de nuevo, culturalmente significativo. De hecho, en inglés se utilizan términos como revivalismo para indicar la tendencia a revivir elementos o momentos que pertenecen al pasado y revivalista en relación con las personas que ponen en práctica una de estas tendencias. Y si bien en muchas ocasiones estos términos adquieren connotaciones negativas, como sinónimo de conservadoras y regresivas, son a la vez una muestra del eclecticismo cultural propio de la sociedad red, donde todo está disponible y se ponen en evidencia las convenciones -al fin y al cabo elitistas- sobre qué es aceptable y significativo y qué no lo es en un momento cultural determinado. De hecho, ya hemos hablado de algunos de estos temas vinculados a la nostalgia y la revitalización de franquicias masivas en otros artículos de COMeIN. En esta ocasión quiero centrarme en el revival, término que ha sido aplicado en la campaña que ha acompañado el retorno de The X-Files en una televisión muy diferente a la que abandonó en 2002. Hasta hace relativamente poco yo asociaba la palabra revival con la música: por un lado, al regreso a los escenarios o a los estudios de grupos o artistas que habían dejado atrás sus días de máxima popularidad; más recientemente, a grupos de jóvenes revivalistas que reproducen formas musicales e incluso estilos de vida propios del pasado. Pero dejando mi corazón de revivalista musical y volviendo al audiovisual, todavía resuena el ensordecedor éxito de Mad Max: Fury Road en la última edición de los Óscar, al igual que la fiebre transgeneracional de Star Wars, mientras comienzan las cuentas atrás por los retornos a las pantallas televisivas de Star Trek y Twin Peaks (ambas en plataformas de pago) o Blade Runner en los cines y crece el runrún sobre el revival literario y cinematográfico de Harry Potter-el personaje (el uni-
verso ya tiene a punto su repunte a través del spin off Fantastic Beasts and Where to Find Them). Y, por supuesto, The X-Files. Como ya apuntaba, hay muchos tipos de revival: en algunos casos el revival adquiere sentido por la implicación de parte del núcleo creativo original (Mad Max, Twin Peaks); en otros por la recuperación por parte de una figura de autoridad a quien se considere digna heredera (el caso de J.J. Abrams en Star Wars); en otros, el revival convierte no tanto la recuperación de un producto en concreto como la celebración de una manera de hacer identificable (es la estrategia de la cadena Syfy para revitalizar su marca como productora de ciencia ficción de prestigio, fundamentada sobre todo en otro revival, el de Battlestar: Galactica, y que se trata de recuperar a través de series como The Expanse o Dark Matter). La décima temporada de The X-Files, constituida sólo por seis episodios, se corresponde al primer grupo, al contar con el creador original de la serie, Chris Carter, sus actores principales, Gillian Anderson y David Duchovny, a parte del reparto secundario -como Mitch Pileggi- y algunos de los guionistas que ya contribuyeron a la larga travesía de la serie original. Quizás la característica más sorprendente, pero a la vez coherente con la lógica del revival, es que se haya mantenido la famosa cabecera original -con unos ligeros retoques diría que de carácter más bien contractual-, reencontrándose con aquellos Mulder y Scully de 1993 y la música original de Mark Snow. Y es coherente también con el planteamiento dado al revival, por cierto, muy mal recibido en general por los críticos. Si bien estoy de acuerdo con que los dos episodios iniciales son básicamente aceptables y que el capítulo final de la serie es abiertamente decepcionante, hay también dos adiciones más que notables al catálogo de la serie: el inquietante Home again (episodio 4) y, sobre todo, el magistral y divertidísimo Mulder and Scully meet the were-monster (episodio 3, dirigido por Darin Morgan, autor del celebrado episodio de la tercera temporada El reposo final Clyde Bruck-
man). La apertura y clausura de la serie retoman el arco mitológico clásico de la serie basada en las conspiraciones gubernamentales relacionadas con la existencia de vida extraterrestre, mientras que otros -como los dos mencionados- adoptan otra forma canónica, la del ‘monstruo de la semana’. En su conjunto, el revival de The X-Files es irregular, fragmentado, sobre-ambicioso, embarullado a veces, simplista en otras... Igual que la serie original, como apunta un interesante artículo sobre el tema de la imprescindible revista Pop Matters, que nos advierte de los peligros de idealizar la emoción que nos mueve al revival, para encontrarnos, no tanto con una decepción por no haber sabido ‘captar’ el espíritu original sino precisamente en reencontrarnos con lo mejor, pero también con lo peor de aquel mismo momento del pasado. Y lo puedo corroborar porque los nuevos episodios de The XFiles me han pillado en medio de mi propio revival de la serie original, concretamente en el inicio de la quinta temporada. Y lo más fascinante de la experiencia ha sido encontrarme, para bien o para mal, con los mismos aciertos y los mismos defectos de este gran icono de la televisión de los últimos veinticinco años. Y por mucho que en el fondo hubiera preferido una actualización o re-energización de la serie más centrada en las nuevas formas de control y poder de la era de las tecnologías móviles y el terrorismo global, aplaudo la osadía de optar por la postura de Fray Luís de León, retomando las clases universitarias tras pasar cinco años en prisión con su legendario... “decíamos ayer”. A veces parece que no queremos decir otra cosa.
Tomado de: https://comein.uoc.edu/divulgacio/ comein/es/numero53/articles/Article-Toni-Roig. html
POR: Lorenzo Mejino / 21-04-2017
Kolchak: The Night Stalker: La gran inspiración de Expediente X
La historia de la televisión reserva un rincón muy especial para aquellas series que no tuvieron una trayectoria muy destacada en el momento de su emisión inicial, pero que con el paso de los años se han convertido en grandes influencias para muchos creadores modernos que citan a esas series como su principal fuente de inspiración. Uno de los mejores ejemplos es la serie que les vamos a recordar hoy “Kolchak: The Night Stalker”, una serie de terror sobrenatural de principios de los setenta que es la mayor influencia que tuvo Chris Carter para la creación de su Expediente X, incluyendo un homenaje descarado a la misma en su reciente resurrección. Si a esto le añadimos que representó el debut como productor de un imberbe David Chase así como de Robert Zemeckis, en sus primeros trabajos importantes y alguna que otra curiosidad que les tengo reservada para mas adelante, creo que va a quedar mas que evidente el más que merecido estatus de serie de culto que tienen las aventuras de ese periodista tan desarrapado como es Kolchak en la historia televisiva. Sinopsis: Carl Kolchak es un periodista de investigación que trabaja en una agencia de noticias de
Chicago, que muy a su pesar se ha especializado en resolver crímenes que presentan componentes fantásticas o sobrenaturales, que escapan a la comprensión de la policía y que solo una mente abierta como la suya y de vuelta de todo, puede ayudar a desenmascarar a los culpables. El inicio: La génesis de la serie fue una novela escrita por Jeff Rice (foto), “The Kolchak Papers” que antes de publicarse llegó a las manos de Barry Diller un ejecutivo de la ABC, desesperado por sacar a su cadena del último lugar de las audiencias y dispuesto a probar cosas nuevas en televisión. La ABC compró los derechos del libro y echó el resto encargando el guión de una película televisiva a Richard Mathison, uno de los mas reputados escritores de ciencia-ficción de la época, dejando la producción en manos de Dan Curtis, creador de la gran fantasía gótica que era “Dark Shadows”. Ambos eligieron personalmente a Darren McGavin como protagonista por ser el que que mejor se adecuaba a su visión del periodista desencantado de la vieja escuela, que querían transmitir con el personaje literario. El estreno de la película arrasó en las audiencias, con un 54 % de share, convirtiéndose en lo mas visto del año 1972, descubriendo el apetito del público televisivo por el genero del terror, que parecía limitado a las pantallas cinematográficas. El primer vídeo es precisamente el de la primera película, donde Kolchak cazaba a un vampiro en Las Vegas, El éxito provocó el encargo inmediato de una segunda película, con nuestro héroe por Seattle, estrenada con otro gran éxito, pero cuando el dúo Mathison-Curtis estaba preparando la tercera película, la cadena ABC decidió pasarla al formato de serie para ver si podía ayudarle en sus audiencias de una forma mas regular.
https://blogs.diariovasco.com/seriesgourmets/2017/04/21/kolchak-thenight-stalker-la-gran-inspiracion-deexpediente-x
POR: Daniel Patearroyo / 10 de julio de 2020
‘Expediente X’: Los únicos episodios que necesitas ver para conocer la verdad
2) la de los monstruos de la semana, los episodios autoconclusivos y aparentemente independientes donde también están algunos de los mejores de la historia de Expediente X. Si combinas ambas vertientes, como hicieron sus creadores, encontrarás la verdad.
Solo lo mejor de lo mejor (40 episodios) La ruta auténticamente concentrada, en tiempo y calidad, para ver lo mejor de Expediente X es el resultado de seguir solo los episodios marcados en verde, de este modo:
Expediente X no solo es una de las series de ciencia-ficción más populares del último cuarto de siglo. Tiene estatus de fenómeno cultural, logrado por Chris Carter y sus dos protagonistas: David Duchovny y Gillian Anderson. Los agentes del FBI Fox Mulder y Dana Scully cambiaron la ficción televisiva, la organización de las comunidades de fans y muchas otras cosas. Eso sí, la serie también fue increíblemente larga, por lo que, a pesar de las cordilleras de calidad estable que ofreció durante sus años clave, el conjunto acabó siendo muy irregular. Expediente X se desarrolló durante nueve temporadas clásicas, dos de revival [todo ello, disponible en Amazon Prime Video] y dos largometrajes para cine; uno bueno (1998) y otro horrible (2018). Esto deja 218 episodios de casi 50 minutos de duración cada uno. Para gente con poco tiempo, aquí va una guía de episodios que permite conocer Expediente X en profundidad sin desesperar en el intento. Te ofrecemos dos rutas alternas y combinables: 1) la de la mitología (el arco argumental de la conspiración extraterrestre, que abarca toda la serie), donde están algunos de los mejores episodios de Expediente X pero también se enreda todo hasta lo inaguantable y ridículo.
Temporada 1: 1, 2, 8, 13, 20 Temporada 2: 5, 6, 16, 17, 20 Temporada 3: 1, 2, 4, 9, 10, 12, 15, 16, 17, 20 Temporada 4: 2, 4, 7, 8, 9, 21 Temporada 5: 3, 5, 12, 13, 14, 20 Temporada 6: 3, 9, 11, 12, 14 Temporada 7: 15, 12, 19
FICCIORAMA DESCRIPCIONES PROFÉTICAS INTROXICANTES / NÚMERO 103 Agosto de 2020 DIRECCIÓN FICCIORAMA COMITE EDITORIAL UNIDAD DE INVESTIGACIÓN METACOGNITIVA POSCULTURAL COLABORAN EN ESTE NÚMERO Lorenzo Mejino (el diario vasco) / Antoni Roig (Comein.edu) / Daniel Patearroyo (cinemanía) PORTADA ficciorama DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN sindicato de artefinalstas secciòn 24