P. Francisco Javier Rebollo León sda
Desde hace muchos años me llamó la atención esta frase que decimos en el “ Credo de los Apóstoles “: “ descendió a los infiernos”, y cuando me explicaron en que consistían “ los infiernos y que era el lugar dónde esperaban los justos del Antiguo Testamento a que llegara el Salvador y por fin pudieran acceder a la Gloria de Dios, me era difícil imaginarme a Nuestro Señor resucitado llegando a ese lugar sombrío donde estaban desde nuestro padre Adán y nuestra madre Eva, hasta Juan bautista el último de los profetas. Hasta que comencé con la oración de la liturgia de las horas y en el Oficio de lectura del Sábado Santo la segunda lectura nos describe ese encuentro de Cristo vencedor, sobre todo con Adán por quien se habían cerrado las puertas del paraíso por su pecado original. Y al leer esta antigua homilía encontré el sentido salvífico profundo de el porqué Jesucristo baja a jos “infiernos” para sacar de ahí a quienes lo esperaba desde hacía mucho tiempo. Les comparto el texto íntegro para que nos ayude a descubrir en nosotros el valor infinito del triunfo de Jesús sobre la muerte, el pecado y el demonio..
De una antigua Homilía sobre el santo y grandioso Sábado (PG 43, 439. 451. 462-463) EL DESCENSO DEL SEÑOR A LA REGIÓN DE LOS MUERTOS ¿Qué es lo que pasa? Un gran silencio se cierne hoy sobre la tierra; un gran silencio y una gran soledad. Un gran silencio, porque el Rey está durmiendo; la tierra está temerosa Y no se atreve a moverse, porque el Dios hecho hombre se ha dormido Y ha despertado a los que dormían desde hace siglos. El Dios hecho hombre ha muerto y ha puesto en movimiento a la región de los muertos. En primer lugar, va a buscar a nuestro primer padre, como a la oveja perdida. Quiere visitar a los que yacen sumergidos en las tinieblas y en las sombras de la muerte; Dios y su Hijo van a liberar de los dolores de la muerte a Adán, que está cautivo, y a Eva, que está cautiva con él.
El Señor hace su entrada donde están ellos, llevando en sus manos el arma victoriosa de la cruz. Al verlo, Adán, nuestro primer padre, golpeándose el pecho de estupor, exclama, dirigiéndose a todos: «Mi Señor está con todos vosotros.» Y responde Cristo a Adán: «y con tu espíritu.» Y, tomándolo de la mano, lo levanta, diciéndole: «Despierta, tú que duermes, Y levántate de entre los muertos y te iluminará Cristo. Yo soy tu Dios, que por ti me hice hijo tuyo, por ti y por todos estos que habían de nacer de ti; digo, ahora, y ordeno a todos los que estaban en cadenas: "Salid", y a los que estaban en tinieblas: "Sed iluminados", Y a los que estaban adormilados: "Levantaos."
Anástasis (Ανάστασις) que significa levantamiento en griego y que se refiere a este dogma de fe del descenso de Cristo resucitado al seno de Abraham para levantar a Adán y a todos los justos al Cielo. Yo te lo mando: Despierta, tú que duermes; porque yo no te he creado para que estuvieras preso en la región de los muertos. Levántate de entre los muertos; yo soy la vida de los que han muerto. Levántate, obra de mis manos; levántate, mi efigie, tú que has sido creado a imagen mía. Levántate, salgamos de aquí; porque tú en mí y yo en ti somos una sola cosa. Por ti, yo, tu Dios, me he hecho hijo tuyo; por ti, siendo Señor, asumí tu misma apariencia de esclavo; por ti, yo, que estoy por encima de los cielos, vine a la tierra, y aun bajo tierra; por ti, hombre, vine a ser como hombre sin fuerzas, abandonado entre los muertos; por ti, que fuiste expulsado del huerto paradisíaco, fui entregado a los judíos en un huerto y sepultado en un huerto. Mira los salivazos de mi rostro, que recibí, por ti, para restituirte el primitivo aliento de vida que inspiré en tu rostro. Mira las bofetadas de mis mejillas, que soporté para reformar a imagen mía tu aspecto deteriorado. Mira los azotes de mi espalda, que recibí para quitarte de la espalda el peso de tus pecados. Mira mis manos, fuertemente sujetas con clavos en el árbol de la cruz, por ti, que en otro tiempo extendiste funestamente una de tus manos hacia el árbol prohibido.
Me dormí en la cruz, y la lanza penetró en mi costado, por ti, de cuyo costado salió Eva, mientras dormías allá en el paraíso. Mi costado ha curado el dolor del tuyo. Mi sueño te sacará del sueño de la muerte. Mi lanza ha reprimido la espada de fuego que se alzaba contra ti. Levántate, vayámonos de aquí. El enemigo te hizo salir del paraíso; yo, en cambio, te coloco no ya en el paraíso, sino en el trono celestial. Te prohibí comer del simbólico árbol de la vida; mas he aquí que yo, que soy la vida, estoy unido a ti. Puse a los ángeles a tu servicio, para que te guardaran; ahora hago que te adoren en calidad de Dios. Tienes preparado un trono de querubines, están dispuestos los mensajeros, construido el tálamo, preparado el banquete, adornados los eternos tabernáculos y mansiones, a tu disposición el tesoro de todos los bienes, y preparado desde toda la eternidad el reino de los cielos.»
Cristo está Vivo
“Si Cristo no hubiera Resucitado, vana sería nuestra fe” (1 Corintios 15:14) Después de haber conmemorado con mucho recogimiento en la Semana Santa La Pasión y muerte de Nuestro Señor, estamos ahora presenciando el triunfo de Jesús sobre la muerte. Ahora todo es gozo, alegría y mucha esperanza. El triunfo de Jesús es el camino que debemos seguir. Seguir la doctrina de Jesús, es tener el amor vivo y surge desde Cristo Resucitado: amor a Dios y a nuestros semejantes. Para este tiempo podemos meditar algunos párrafos de los escritos de nuestra espiritualidad de los Siervos del Divino Amor:
“VIGILIA PASCUAL. Yo Soy La Luz, La Verdad y El Camino. Yo he vencido la muerte para que todo el que crea en Mí, viva y viva eternamente. El que me ama permanece en Mi y Yo en él, por esto Yo les digo que el que a Mí me tiene jamás caminará por la oscuridad. Yo les digo que Soy el que Es y por esto Yo los he sacado de la esclavitud, para que, siendo Mi Pueblo, sean ustedes Míos y Yo vuestro y así en esta unidad en el amor me conozcan verdaderamente. Yo atraje a Mi Pueblo para que gozando de mis dulzuras y Mi Misericordia lo diera a los demás.
Padre Jesús Leonardo Rebollo León sda
Hoy es día de fiesta, Yo soy fuego y deseo que lo den a todos porque sin Mi nada son, Yo Soy su Dios y ustedes Mi Pueblo el Pueblo que saqué de Egipto para que así todos se unieran y así fueran uno solo como Yo lo Soy con el Hijo y el Espíritu Santo, y como Trinidad que Soy os deseo en esa unión por el Amor. Venid todos a Mi porque Yo sólo les puedo dar la felicidad y la vida eterna, fuera de mi sólo muerte encuentran. Vean y verán que bueno es lo que Yo les doy: Mi Corazón ardiendo de Amor y en Él os deseo estrechar. María es ese puente por el cual llegan a tener esa unión. Busquen ese amor semejante al Mío y así entenderán Mi Amor. Yo les bendigo, Soy fuego y deseo ardan ya en él todos”. 22 de abril de 2000 7:50 pm. Sagrado Corazón de Jesús. Siervos del Divino Amor.
Que la alegría de esta resurrección nos llene de esperanza y nos haga transmitirla a todos, especialmente a los que están sufriendo enfermedad o han perdido algún ser querido en estos difíciles momentos. Sabemos que sólo Dios puede ayudarnos en estos momentos y, con la oración, será más rápida su intervención. No nos cansemos de invocarle, por medio de María por tanta necesidad y tanto pecado en el mundo entero.
Seminarista Francisco Merlo
Hay que "acoger la luz en nuestra conciencia", "para abrir nuestros corazones al amor infinito de Dios, a su misericordia llena de ternura y bondad". En este tiempo nos invita el papa a reflexionar sobre el amor de Dios que debemos de tener. No es sólo algo aislado, sino que debe salir de las fuentes de los manantiales de Dios, Para poder dar la propia vida por amor, pues "Tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna" (Jn. 3,16). El papa nos dice que Dios sigue encontrándonos con ese amor a nosotros pecadores, y quiere que también le correspondamos a su amor. No hay que ver a Dios como alguien que castiga sino a aquel que llego al extremo, y que no dudo en entregar a su propio Hijo a la muerte por amor. Ver los planes de Dios, amor, para con todos sus hijos. Él nos trajo la luz en medio de un mundo lleno de oscuridad y quiere que nosotros no nos alejemos de esa luz que ilumina lo profundo de nuestros corazones, ya que, caemos el riesgo de perdernos estando cerca de la fuente de aquella luz. Èl es capaz de darse como objeto de salvación para que nosotros tengamos vida. Como analogía a ello tenemos la barra de bronce que hizo Moisés para que los israelitas se salvaran de las picaduras de las serpientes, así él es el objeto de salvación, que nos vino a dar amor y salvación, como Hijo que es de Dios.
Nos dice el papa: La misión de Jesús es misión de salvación, para todos. Así hay que ser nosotros caminos de esa salvación, para los otros que seamos generosos y perdonemos de corazón las ofensas de los otros, como él nos perdonó las nuestras. Dios quiere que en este tiempo escojamos que camino queremos seguir el camino de las tinieblas o el de la Luz. Si escogemos la luz, escogemos la verdad, y si elegimos las tinieblas elegimos las mentiras de su autor, el diablo. Nosotros acarremos en nosotros lo que queremos en nuestras vidas. Dios no quiere que nos sintamos forzados a elegirlo sino con amor descubrir que él es el único camino que nos conduce al Padre, y a lo que verdaderamente anhela nuestro corazón; la paz, la alegría, el amor, que llena todo. Hay que nosotros dejarnos guiar por aquel camino de las buenas obras, el de la luz; y no aquel de las malas obras, el de la muerte eterna. ¿Pero cómo tomaremos aquel camino? Nos preguntaremos, abriéndonos al perdón a la misericordia; y ¿Cómo los encontraremos? Nos dice el papa, en el sacramento del Perdón y del amor de Dios, en él descubrimos el amor de Dios en nuestras vidas, para que se llenen de Luz. Aquella Luz que regenera y da la vida. Nos anima el papa a encontrar la Luz en un mundo lleno de tinieblas; pero no estamos solos tenemos quienes nos guiaran en aquel camino de Luz, la Madre de Jesús, que es aquella luna que nos alumbra de esa verdadera Luz de Dios. Ella nos invita a que nos acerquemos a la Luz, para que seamos curados de nuestros egoísmos y desamores del corazón. Que ella sea verdaderamente aquel camino, que nos conduzca al sol que no conoce ocaso.
5 DE ABRIL SAN VICENTE FERRER
San Vicente nació en Valencia, España; el 23 de enero de 1350. Desde pequeño le inculcaron gran amor a Jesús y a María Santísima; además de encomendarle el repartir ayudas a los más necesitados, cosa que acostumbraba a hacer su familia. Recibe el hábito dominicano en el año 1367, y realizo sus estudios en Barcelona, se destacó como un gran predicador. Ordenado Sacerdote en el 1379. Ejerció el cargo de catedrático de Teología, predicador, confesor y asesor diplomático. Le tocó vivir un tiempo muy difícil a nuestro santo, debido al cisma de Oriente y Occidente que dejaba muchas secuelas y confusiones. Por esto mismo, pidió el debido permiso para predicar en las calles y casas, buscando la unidad y la paz de la Iglesia, de la penitencia, llevando a cabo una importantísima labor misionera en gran parte de Europa. Podían escucharlo predicar durante horas y no dar la menor muestra de cansancio, porque hacia muchas horas de oración antes de ponerse a predicar, dándole Dios esa gracia de tocar los corazones de los oyentes. Por más de treinta años evangelizo, incluso logró la conversión de los miles de musulmanes.
Una de sus obras es el: “Tratado de la Vida Espiritual” y otros sermones que se conservan de San Vicente. En su última cuaresma, a los 69 años, murió predicando en Vannes, Francia; el 5 de abril de 1419. Dios nos ayude a todos en esta misión para fomentar siempre la unidad de la Iglesia, empezando por nuestra casa, que es iglesia doméstica, dejando a un lado todo odio, rencor y división. Que Dios nos conceda esa valentía de hablar y llevar el amor de Dios a todos lo que nos va poniendo enfrente la Providencia Divina en sus inescrutables caminos, para encenderlos con el fuego del divino amor y ser lámparas, antorchas de amor que tanta falta hace en nuestros tiempos, llenos de confusión. “San Vicente Ferrer Alcánzame una fe viva y sincera para valorar debidamente las cosas divinas, rectitud y pureza de costumbres como la que tú predicabas, y caridad ardiente para amar a Dios y al prójimo”. P. Pablo Santoscoy Rebollo sda.
29 DE ABRIL SANTA CATALINA DE SIENA
Santa Catalina de Siena, es doctora de la Iglesia, virgen y copatrona de Europa y de Italia. Nació en Siena; Italia, en el año de 1347. Desde muy pequeña fue asidua a la oración, tanto que a sus siete años hizo un voto privado de virginidad. A los doce años, quisieron su hermana y su madre convencerla de que debía de pensar en el matrimonio, por lo cual le obligaban a vestir conforme a los lujos y las modas de la época. Pero existía en ella un deseo ferviente de dedicarse a la oración y de entregar su vida a Cristo totalmente. Sus familiares no aceptaron, pero cedieron y finalmente a los quince años ingreso en la Tercera Orden de Santo Domingo, con una vida de penitencia. En 1366, por fin vio concretado su matrimonio con Cristo. Llevando una verdadera vida mística y contemplativa, que dejaría plasmada en sus escritos como: “El Diálogo sobre la Divina Providencia”, “oraciones y soliloquios”; con una profundidad y sencillez que admiran. Recibió los estigmas de Jesucristo, pero solamente ella los podía ver, por lo que estuvo unida a la Pasión de Cristo de una forma laudable.
Santa Catalina de Siena vivió en una época en que el Santo Padre se encontraba en Avignon; Francia, esto por motivos del rey de Francia que quería que se quedara el Papa ahí en su reino. Pero Santa Catalina de Siena, movida por el Espíritu Santo, tiene la valentía de decirle al Sumo Pontífice que su lugar, como sucesor de Pedro, es en Roma, por lo que le pedía que regresara a su respectivo lugar. A pesar de no saber leer ni escribir, pero pidió a amanuenses que escribieran sus cartas, dirigidas al Santo Padre, a reyes y al pueblo mismo. Murió recién había cumplido los 33 años, el 29 de abril de 1980. Dios nos ayude para tener ese valor, con que movió Dios a Santa Catalina de Siena para hablar con la verdad, aunque sin faltar a la caridad. A que nos entreguemos realmente a una vida de oración, pero también de acción en bien de los que nos rodean. Que sepamos llevar los estigmas de Cristo, ahí en el anonimato donde, uniéndolo todo con Cristo y a su Pasión, nuestra vida sea una oblación agradable a Dios Padre en lo íntimo de nuestros corazones. Que nos ayude Santa Catalina de Siena por intercesión de María Santísima, a tener esa pureza de corazón para llegar a gozar de la presencia de Dios.
“Santa Catalina de Siena… ruega por nosotros”. P. Pablo Santoscoy Rebollo sda.
¡No lo dudes! Jesús necesita de tus manos y de ti para llevar la Buena Nueva. Llámanos al 3336890235 o con el Padre Jesús Leonardo Rebollo León al 3331161222
“Con tu ayuda al Seminario le decimos a Dios que no nos deje sin sacerdotes”.
Una vez más acudimos a la bondad de sus corazones para que, con la
ayuda de la Divina Providencia, sigamos aportando nuestro granito de arena. Viene un gasto realmente fuerte, con lo de la colada de la segunda planta, pero, con la ayuda de Dios que no nos ha dejado ni un momento y las generosas aportaciones de todos ustedes que, recordemos que, desde las aportaciones pequeñitas son valiosas y grandes a los ojos de Dios, primero Dios se va a realizar este momento en donde quedará al fin este colado de lo que representa la azotea del seminario.
Te invitamos a que promuevas esta ayuda principalmente invitando a los que tu conoces a que hagan una campaña de oración por la construcción del seminario, pues hay ahora más que nunca la necesidad de formar a nuestros futuros sacerdotes, de saber que por esta pandemia muchos sacerdotes han muerto, y confiando en la Providencia de Dios que no nos deje sin sacerdotes para que tengamos siempre los sacramentos y con su palabra nos ayuden a acercarnos a Dios y que no se siga perdiendo este mundo en tanta confusión que hay actualmente.
Acudamos a María Santísima a rezar el rosario y hagamos campaña con nuestros conocidos que recen un rosario por esta intención pidiendo por este seminario y por los del mundo entero. Muchas gracias por todas sus atenciones.
Para tus donativos tenemos estas cuentas bancarias
: BANCO: SANTANDER Jesús Leonardo Rebollo León Cuenta: 60550481196 CLABE BANCARIA PARA TRANSFERENCIAS: 014320605504811963 Depósitos en OXXO: 5579 0700 9014 3192
BANCO BBVA BANCOMER Jesús Leonardo Rebollo León CUENTA 0474762231 CLABE 012320004747622318 Depósitos en OXXO: 41523136905877
Oración para pedir por la construcción del Seminario de San José de los Siervos del Divino Amor. “Ahora es el momento de que Tu Señor, en esta piedra, como le dijiste a Pedro: que sobre esta piedra fundabas Tu Iglesia, con este recuerdo de La Verdad que Eres Tú, te pedimos que Tu Bendición haga prospera esta Tu Obra, para que este lugar sea para darte Gloria, que el Corazon de María, Señor San José nos ayuden a perseverar, y así este lugar sea semillero de vocaciones santas, de que su deseo sea El Tuyo y su Anhelo como el Tuyo, las almas sean su único deseo para darte Gloria a Ti Señor. Amén.”
SOPA DE LETRAS
Vicente
Ángel del Apocalipsis
Castidad
Ferrer
Dominicos
Ayuno
Catalina
España
Sacrificio
Siena
Italia
Oración
Predicador
Pureza
Antigua Carretera a Chapala No. 8005 A, Col. Insurgentes Sur, El Salto, Jalisco. C.P. 45690 Tel: (33) 36-89-02-35 MAIL javreb@hotmail.com O jesusleonardo7@hotmail.com WEB: www.siervosdeldivinoamor.com (8) Francisco Javier Rebollo Leon | Facebook