Un periodista chileno -inocente hasta las lágrimas, con cierta tendencia a la introspección y un conocimiento no infrecuente de manifestaciones (inopinadas) del Síndrome de Asperger- relata su experiencia de vivir 3 años en la Rusia actual, nación que vive un fenómeno inédito: pasar en sólo unos años de ser un territorio hermético y regido por las lógicas del comunismo como lo fue en la mayor parte del siglo XX a convertirse en una nación moderna, vertiginosa, cosmopolita y en la que el capitalismo se infiltra por doquier día a día y, al parecer, sin ninguna vuelta atrás.
Volumen dinámico y rápido, incluye curiosas anécdotas acerca de la (singular) vida cotidiana del autor en un país cuyo idioma comprende poco y nada, por lo que algo tan sencillo como comprar una “salchicha caliente” o un paquete de cigarrillos puede derivar en un insólito (y casi demencial) intercambio lingüístico…
He aquí su Informe...