ni,» iw^pjpw!.""
i1."
pjw^in'.ywi.
-
"V"'.'1"!'
'
^a/f^m^m^j»
5
PARA LA HISTORIA
Documentos con
los
sucesos que se el
29 de
relacionados
desarrollaron
agosto
en
Santiago
de 1891
SANTIAGO DE CHILE
ESTABLECIMIENTO POLIGRAF1CO ROMA CALLE DE LA BANDERA NÚM.
1898
30
*\ mw
:
íiiíi
¿Ifif?
PARA LA HISTORIA
4
PARA LA HISTORIA
Documentos con
los
sucesos que se
el
29 de
relacionados
desarrollaron
agosto
en
Santiago
de 1891
SANTIAGO DE CHILE
ESTABLECIMIENTO POLIGRAF1CO ROMA calle de la bandera nĂşm.
1898
30
I
Entrego á la luz de la más alto
interés histórico;
eminente ciudadano que
y
él
episodios que en
cidad
publicidad por
documento del
alta respetabilidad
lo suscribe,
se narran con
como por
la
del
los hechos
más absoluta vera
precisión.
y El futuro historiador del
ció en
junio de
á los
acuerdos
terminó
la
la
un
en
1890,
patricio
sangriento
la
censuras
y
agosto
Placilla, hallará
ilustre
con
rebelión
drama
que se
ini
del Poder Ejecutivo
del Congreso Nacional, y que coa las batallas de Concón y
de 1891,
en
la
palabra elocuente
y
prestigiosa
del
don Francisco Echáurreu Huidobro la
cribir
y decisiva que ha menester para des la última etapa del gobierno del presidente Balma
ceda,
que abraza
prueba abundante
dido
entre el
el
breve
29 de agosto,
período
de tres días,
cuando el general
compren
don Manuel
Baquedano aceptó,
provisoria mente el cargo que para sal
var el orden público
le
coníirió el
desgraciado presidente, firmado
último decreto de aq con esa misma
■
uel
fecha (1),
1891.— Gregorio Cerda y (1) Bando. Santiago, agosto 29 de Ossa, Intendente de la Provincia, por cuanto S. E. el Presidente —
de la República ha decretado lo
que sigue:
t Considerando que al resistirla revolución en armas, iniciada por la Escuadra el 7 de enero último, he cumplido el deber elemental de mantener el principio de autoridad, sin el cual no hay gobierno
posible; Que mi mis
patriotismo
esfuerzos,
y deberes de chileno han puesto límites á á un gobernante honrado prolongar
pues no cumple
lucha que no puede mantenerse con expectativas razonables de éxito; Que no habiendo sido favorable á la causa que sostengo la suerte de las armas en la última batalla de Valparaíso, he resuelto por mi
una
término a una contienda que tanto menoscaba el cré dito de la República y bienestar común; Que el ciudadano, general de división señor don Manuel Baque dano, quede á la cabeza del Gobierno encargando, en consecuencia, á todos los jefes, oficiales y soldados, y á los intendentes y parte poner
gober-
6
—
hasta
mente
la
31 de
el
mes,
que penetró triunfal-
en
la Excelentísima Junta de Gobierno
Moneda,
para
ese mismo
—
escoltada por una parte
tomar á
cargo el gobierno
su
al
Palacio de
del Ejército
vencedor
constitucional
de la
República. Si
Balmaceda,
el presidente
agonizante
ensangrentado el
y
Baquedano,
poder
que
a
la
en vez
de delegar
29 de Agosto
sazón
no
le
coloca en esa prestigiosa personalidad al
levantamiento de la Escuadra Nacional habrían
cias se
hoi
reflejaría
El
ahorrado
7 de
maceda recibió
la
cual puso
autor,
en
día
siguiente
del
desgra
¡cuántas
cuánta gloria
día
por
siguiente
sus
la noche,
carta,
se
Bal
escrita por un estadista
gran previsión
manos,
levantamiento el presidente
y de
gran
carácter,
por especial comisión
de
su
don Francisco Freiré.
el señor
Hela
la
prestigio, de
sólido
lo
pertenecía,
á la República y
enero en que ese
en ese mismo
de
al general
su nombre!
memorable
verificó,
su poder
aquí.
Confidencial. S. D. José Manuel Balmaceda. Santia Mi querido José Manuel: Muy go, enero 7 de 1891. tentado me sentí hoy de asistir al Consejo de Estado pero me retraje, esperando que no hubiera Ud. tenido quorum, con el deliberado intento de dejar venir la calma y la reflexión que estaba cierto habían de faltarle en los primeros momentos de recibir Ud. las trascendentales no ticias de Valparaíso. Creo que no cometo un avance sino que cumplo con un deber sagrado, tal como yo lo comprendo, diciendo á —
—
—
y demás funcionarios, que le presten el debido acata y obediencia. Publíquese y comuniqúese por telégrafo. Balmaceda.— Manuel Arístides Zañartu.*
nadores miento
Por tanto, para que llegue á conocimiento de todos, publíquese bando. Dado en la sala de mi despacho á 29 de Agosto de 1891. Cbkda Miguel Arturo Zañartu, secretario. Santiago, agosto 29 Ossa. de 1891.
por
—
—
—
Santiago,
agosto
29 de 1891.
que se me confiere para quese
por
bando
en
todas las
mentos, trascríoase y Baquedano.
—
Acepto orden
salvar el
cabeceras
publíquese en el
provisoriamente el
cargo
Por tanto, publí de provincias i departa Diario Oficial. Manueí, público.
—
—
Ud.
que
la hora
debe Ud. sino
á
es solemne
pedir
consejo
7
y
—
decisiva,
para
y
que en ella sólo
sus grandes resoluciones
su patriotismo.
Reflexione
que una gota
de
sangre que se
estos momentos caerá quemante
sobre
Ud.,
derrame en los suyos y
su memoria.
Reflexione todavía
en
habría de
ello
que
la
ser segura
las rentas Escuadra, Norte habrá de suministrar á la causa del Congreso, un ejército de diez, de quince ó de veinte mil hombres, si fuera preciso, caerá terrible sobre los que mente
estéril,
y la tropa
puesto que con
con
que el
se opongan
á
su paso
y, tarde
que
temprano,
el
triunfo
será suyo.
Todavía es tiempo de que Ud. abra los ojos y apro las horas, los instantes tal vez, en que sería aún oportuno que Ud. llamara á Baquedano, representante legítimo de nuestras glorias militares, y que, por lo tanto, no alarmará al Ejército, que lo haga su Ministro del In terior, le entregue su renuncia, y deje que él, convo cando al Congreso y restableciendo el imperio de la Cons titución, presida las elecciones como Vice-presidente constitucional de la República. Devuelva así al país su soberanía y tome Ud. parte voluntaria en una evolución que, como Ud. sabe, se inició por el gran O'Higgins, el héroe de los héroes, y en cuyo pecho no cupo otro temor que el que no le fuera dable hacer bastantes sacrificios en obsequio de la felici dad de Chile. Le entregó su sangre, su fortuna, el poder, veche
su vida.
¡Ese es ejemplo!
Deje á
hoy
un
lado á
sus consejeros que no
¡ni con qué podrían
lo tienen. Créame
hacerlo! del
le
abismo
responderán
á
borde
cuyo
con grandeza de desolada á la vista, su crédito y prestigio comprometidos, la sangre de sus hijos en la dolorosa perspectiva de derramarse, hará nacer por Ud. en muchos cariño y respeto. Su afectísimo. Aní bal Zañautu.
alma,
con
que una
resolución
la imagen de la
tomada
patria
—
—
Señor (Confidencial). «Presidencia de la República. don Aníbal Zafiartu. Santiago, enero 8 de 1891. Que rido Aníbal: Recibí anoche su carta confidencial y amis —
—
—
—
tosa. Los sucesos, Ud. y á mi en
y
proporciones
Debí
provocados por
octubre
de
último,
adversarios.
el
que no quisieron oír
tienen
toda la
á
gravedad
un acontecimiento.
reflexionar mucho
ocultárseme
los
plano
en octubre
inclinado á
que
porque
me
no
podía
lanzaron
mis
8
—
Mi
—
tomado entonces, pero dispuesto á Usted fué testigo de este anhelo.
partido quedó
oír acuerdos razonables.
Hoy no cabe sino cumplir el deber. Estimo y respeto mucho á la persona de que me habla. Lo menos que puedo estimar en esta gran partida de honor y de orden público, es la vida, que entregaría cien veces antes recibí
Mi
lo
de
mi autoridad
abatir
que
y
el
que
mandato
mis conciudadanos.
Ud.
cariño por
en
se aumenta
estas
horas,
encuentro como
pre su amigo
siempre, caballero y generoso. J. M. Balmaceda.» (1)
Siem
—
El futuro historiador conciencia
porque
—
ilustre
que
pura,
siga
que
su
los impulsos de
trabajo
la
con
una
antorcha
y de la experiencia, hallará en las car tas preinsertas, en la del ilustre ciudadano señor Echáu
de la
observación
rren
y
en
la del Excelentísimo
ducimos á continuación, la hechos
que en
cación, honor y
junio de
la
en
culminante
más
en
certifican,
de
prestigio
vindi
distinguido
mi
don Carlos Walker
el señor
amigo,
merecido
se
que repro
justificación de los
plena
documentos
estos
Uriburu,
señor
Martínez, la figura de 1891. Santiago,
revolución
—
Ramón Ricardo Rozas.
1898.—
II
«Señor
de 1896. interés tigua
don Francisco Echáurren:
—
Respetado
histórico,
me
carta,
sobre
verificado en con
el
al
muy
de
el
hecho, de
saqueo
de que,
inspirador ó
el
Ud.,
verdadera
cómplice
(1). Estas cartas se publicaron brero de 1892 en "La Libertad
por
la
adictos al
pre
gravedad, relaciouado
Presidente se
le
su
Walker Martínez.
primera
Electoral"
an
y
de la
ó criminalmente,
al señor
Un
impulsa á
me
al pie
transcendental
hogares
maliciosa
—
partido con
29 de Agosto de 1891,
alguno-s
julio 16
querido.
Presidente del
testimonio de
Santiago
Balmaceda, de pone
liga
Santiago,
don Carlos Walker Martínez,
solicitar el respetable sente
y
amigo
unido al sentimiento
amistad que
servador,
señor
—
vez el
1.°
de Fe
9
—
En
—
día, y en los siguientes, se encontró Ud. al lado del General Baquedano, llamado por el Presidente Balma ceda que
ese
tan luego
alguien
vencido en
Ud.
cerciorarse
excesos acaecidos
la
en
existencia,
la «Placilla»,
del en
ese
y desarrollo de los capital, como de la
origen esta
de despacho del Jefe de
sala
necesitó
autoridad; y desde
asumiera su agonizante
puesto pudo
punibles
como,
de
policía
Santiago, de listas indicando detalladamente los hogares que
debían
mas
triunfantes del
ser resguardados
del
saqueo ofrecido
Balmaceda....
señor
indignación hizo
que el pueblo en su
lamidad! Pudo Ud., señor, observar, tancias
el
Walker Martínez
á
se concretaron
tales
que en
los
contener
-
esa ca
circuns
del
energía
ar
mismos
de
víctimas
i toda la
merecido prestigio
los
¡A
á las
señor
estragos
de las turbas. Con
testimonio
el
que
el mismo sentido obtuve
ru, dado
por primera vez
del 11 de
marzo
de Ud. solicito,
unido al que en
del Excelentísimo ala
de 1894, la
señor Uribu-
Porvenir»
publicidad en «El
calumnia quedará aplastada
para siempre.
Disponga
Ud.,
ssñor,
afectísimo servidor
«Señor
y
amigo.
—
Ramón Ricardo Rozas.
25 de julio de 1896. que
y en todo, de su muy Ramón R. Rozas.»
siempre
haya demorado haberme
cede por
—
Mi
—
apreciado
gustoso
la
por
Ud.
personas
con motivo
de los
tan
del 29 de
todos los hombres honrados,
líticos, han lamentado y Para dar á Ud.
sin
de
sido posible
me ofrece para
agosto
de 1891,
distinción de
mi
también
culpadas como
condenado con
razón cabal
-
algunos asun
ha
así como
injustamente
saqueos
Excúseme
sentimientos manifesta
don Carlos Walker Martínez,
por otras
Casa de Ud .,
—
atenta que pre
de
no me
ocasión que
dar testimonio de los levantados
dos
su
ocupado
encontrado
—
amigo:
á
mi contestación
tos impostergables, de los cuales desprenderme antes de ahora.
Aprovecho
Presente.
él,
que
colores po
justicia.
testimonio
me veo en
10
—
la
de recordar
necesidad
someramente
las
circunstancias
que rodearon el hecho que atestiguo, y las que me per mitieron observarlo más de cerca que á la generalidad de
las
personas.
A
pesar
del
desde hace
me mantengo
de
de la
completo alejamiento
ya algunos
agosto recordado me vi en el caso
neda, á
de mi
pedido
amigo el
hacía
en
por otra
parte,
política,
sino simplemente
no
lo
curando evitar en al violento
años,
de
el veintinueve
la Mo
pasarlo en
General Baquedano;
esas
el
de patriotismo,
los trastornos
ceda
y completo cambio de régimen político y debía operarse con el triunfo de la y
el
brusco
hizo del poder,
nistración
abandono que el señor
eD circunstancias que
del país, la fuerza
preparadas sólo para el
admi causa
Balma
toda la
admi
y hasta las policías de los parciales de ésta
triunfo de
su
causa, y
en mo
Gobierno y las fuerzas constitucionales, en posesión de la capital, sino
mentos en que el
no sólo no
pro
armada
estaban exclusivamente en manos
y
de
consiguientes
nistrativo que constitucional
cual,
circunstancias nada
una obra
posible
política en que
estaban aún
que se encontraban
embarazados para
llegar hasta ella;
y hasta para comunicarse con ella, por el mal estado en que las operaciones bélicas habían dejado el telégrafo, que se encontraba
cortado, y
el material
y la línea del ferro
carril.
Serían las
seis
una persona
el
de
de la
mi
familia
General Baquedano de
gencia por medio
dejado dicho
del indicado
mañana
me
me
cuando
despertó, diciéndome
había
un oficial
que el señor
día,
mandado
llamar
del Ejército,
Baquedano
que
con ur
el cual
había
me esperaba en
la
Moneda. Acudí posible,
al
llamado del
notando
que
atravesé, y
á la
suspensión
una
en
la
amigo
tan
pronto
como me
soledad casi completa en
ciudad
toda un
de todo tráfico de
gran
las
fué
calles
silencio, debido
vehículos que se
había
ordenado por entonces.
Las
guardias estaban aún en
de Gobierno, esquina
como en
de la
calle
los
alrededores
de la
casa
los días anteriores; y al llegar á la me detuvieron algún
de Morandé
II
—
tiempo, hasta
que obtuve que un
oficial ordenara que se
me permitiera pasar.
A las siete,
más
ó menos, llegué donde
encontrándolo en
quedano,
la
Ba
el general
de despacho destinada
sala
Presidente de la
al
República, con el notario de esta ciu Márquez de la Plata, é inmediatamente el
dad don F. señor
Baquedano
documento
mismo
al
Plata y había
señor
para que se alistara
la tropa
la indicada forma de la
en
se
último
me añadió que con este
llamar
cho
en que el señor
resignado el mando en manos
ordenando que ese
bando; y
documento
me mostró el
Balmaceda había
ya
objeto
por
había he
dado las órdenes
necesaria para
simple
de aquél,
publicara
la
publicación
del
abdicación
señor
Balmaceda.
Notando la irregularidad de á la
también
vez
bía de
que
éste fuera
las terribles
y
—
las
por
dichas
había
alguien, traer la
ha
para evitar anarquía en
y
—
queriendo evitar
que
había
si
sido sólo con el patriótico
del momento, de la
falsas á
mi
aceptado
el
posteriores con respecto
General Baquedano,
necesidades
por
necesidad que
que quien sabe cuánto más podían pro
causas
imputaciones
maliciosas
amigo el mando
asumido
consecuencias que podía
esos momentos
longarse
trasmisión del poder,
esa
la imprescindible
que
me permití
del
un
al
decreto
expresando «que sólo aceptaba provisoriamente el orden
cargo para salvar el
aceptada por el señor
Previendo las ción ese
del
acto;
público», indicación
Baquedano
taban dadas las órdenes
para
durante la noche,
duda habrían cumpliendo
Como
la
Santiago fué
su
ya cumplido
preveerse, el
de
publica
que el mismo señor
por
telégrafo á las
decreto de abdicación,
publicación por
y
los intendentes y
podía
la
me observó que ya es
eso, y
Balmaceda habia hecho transmitir vincias
fué
presente que convendría más evitar
pero el señor
cual ordenaba
que
Baquedano.
consecuencias que produciría
hice
bando,
señor
Balmaceda,
poner,
pie
abdicación
fin de llenar las
insinuarle la idea de
bando,
estarían
pro
en el
orden que sin
en esos momentos
gobernadores.
el efecto
de
esa
publicación en
un verdadero estallido: al silencio
de
12
—
las
horas del día
primeras
todas
el correr en
mente,
riendo
y
agrupaban
se
y
de
Queriendo
se
le
en
permitían
que
de la Moneda, con orden
al
contaba
y
llamado,
capitán
sólo
á paje,
con sus armas
la tenían.
que
fuerzas del
entonces que
del frente
el cuartel
que estaba en
á
salieran en pelotones reunión
del triunfo de la
á llamar
que
la policía toda, de
de dispersar toda
noticia
con
cuartel, desertando
su
de Zapadores,
envió
se
en contestación al
pero,
de
noticia
.
y hasta con su cabalgadura los En vista de esto, se ordenó
A la
á los
diversos puntos, inqui
la fuerza
para saber
abandonado
cuerpo
de toia
que vivaban
coche,
desórdenes,
prevenir
instrucciones;
tuvo la
había
en
gente
lo sucedido, y dando rienda suelta la forma que la condición y la educa
cada cual
Jefe de Policía darle
venir apresurada
de
comentando
al entusiasmo en
ción
ir y
el
direcciones,
condición, á pie, á caballo, vencedores
bulli
sucedió el más completo
de lascampauas,
el repique
cio,
—
la ciudad,
recorrer
tumultuosa.
causa
constitucional,
mu
y numeroso pueblo acudieron á demanda de la libertad de los presos polí
chas personas respetables
la Moneda
en
ticos; y
General Baquedano
el
á la
mismo
cárcel
Pensóse luego la
Gobierno
hacer
señor
á la
del orden;
saber al
Ejército Constitucional
Balmaceda,
tades
cortados,
enviaran
ejército
la
vencedor, y
hizo
sempeñarla,
iba; de en
la
por
resulta
cara
y
de
esta
haber
de lo
treu
á
dirigida
á don Alberto
comisión,
casi
jefe del
de trasbordarse
Covarrúbias,
le
costó el
Covarrúbias
con algunas contusiones.
al
interrupción de la
sufrido un choque
cual el señor
dificul
especial conduciendo
comunicación
posible en cada
recordará que
cargo
vencer algunas
con recomendación
mayor presteza
línea. Ud. se
de llevar la
cuanto antes
para el mantenimiento
telégrafo y la línea del ferrocarril
después de
se obtuvo que saliera un
al encargado
con
sólo
la Junta de
para que
tomar la determinación del
vez que se
pero como el
ir él
libertad.
Santiago las fuerzas indispensables
estaban
conveniente
creyó
otorgar esa
constituida pudiera
en pedir
caso, y
en
del
abdicación
á
la
que
vida
treu
de
en que
salió
herido
—
n
—
Entretanto, la marea ibacreciendo en Santiago: momento á
momento aumentaba el gentío en
las
calles
y
plazas
de
la ciudad; y á medida que crecía la afluencia de gente en los lugares públicos, y que el acercamiento, la reunión y la comunicación de las personas hada aumentar el entu siasmo
del triunfo, la
más
más
la
y
lando
y haciéndose
de
cantidad
gran
en
efervescencia
iba también
por momentos
de
gente
diversos barrios de la
terrible
más
iba
arrabal que se
Igual
ciudad.
subiendo por
acumu
cosa sucedía
las demás ciudades, á juzgar por los telegramas alar mantes que de las que tenían líneas expeditas llegaban á en
cada
Y
instante. tal
en
que
la
publicación
para
la
conservación
del bando dispuesto
del
elemen
Por
orden.
Bal
por el señor
Santiago y las provincias, fué una especie de de ¡sálvese quien pueda! dada al personal de la Ad
maceda, voz
de los
situación se carecía en absoluto
tos indispensables
en
ministración, del
Ejército, de las Policías, del
de las fuerzas todas,
dicial,
vencido, únicas
en
después,
la
en
tren especial,
conduciendo
partido
habrían
podido
la Provincia,
el
senadores
yeron más prudente ron quedando en
madrugada
tomar
mismo
de
y
el
otros
ese
al
salió,
día,
otros
camino, los
mili
cre
cuales se
fue
precaución
convoy, fuera de las
cada vez el
un
que
empleados
diversos puntos, tomando la
de hacer detener
ese
Intendente de
Sur, Policía, algunos
Prefecto de
tares, diputados,
De Santiago
hacia
Poder Ju
palabra, del
que en esos momentos
servir para mantener el orden.
según se supo
una
esta
oficinas
de los diversos Ministerios y casa de habitación del Presi
hacer
de
Hasta los
ciones.
porteros
de Palacio y de la dente habían desaparecido, colocar un centinela
Jas
resguardar
oficinas
Balmaceda. Todo del á
pánico
que
de
había
esto
motivo por el cual
y la no
vista en cada
casa
fué
preciso
puerta,
de habitación del
era sino
consecuencia
para
señor
lógica
la derrota y del grado de encarnizamiento la lucha antes de su desenlace
alcanzado
final.
Era,
pues,
preciso organizarlo
visionalmente,
todo,
aunque
fuera
para poder salvar aquellas angustiosas
pro cir-
—
cunstancias zadas por
en que
14
todas las
—
poblaciones estaban amena
los desmanes de la hez del
pueblo.
Confióse la Intendencia de Santiago á don Carlos Lira, la inspección de las fuerzas de Ejército contar, al
con que se creía
Amagada; la Comandancia de Armas
al general
General Arteaga;
de Zapadores
el cuerpo
Coronel
al
don Gabriel Alamos y otros oficiales de los que junto con él habían sido libertados de la cárcel, y la fuerza hospe
dada
en
mírez,
día. Y
la
calle
de la Maestranza á don Cruz Daniel Ra
también había
que
medidas
provincias
y
sido
departamentos,
que
lo
con
Al
ese
á las
respecto
reclamaban confiando
las Intendencias y Gobernaciones á los
tigiosos,
libertad
en
puesto
tomaron
análogas se
vecinos más pres
para que pudieran resguardar el orden.
mismo
tiempo
de
necesidad
de impedir destinados
no era
atender
que
por
se
á
también
otros
la Administación
de buques y armamentos, llegaran á
que
vertidos, y
del
ramos
los
malversaran
aún
Gobierno,
caudales
á la
caída
que
imperiosa la
menos
no
con ese mismo
de dar
de los
á las
gestiones
de la Junta de Gobierno de lo
conocimiento
denciales á
nombre
extranjero
venía
que
agentes
Constitucional, sucedía
i
objeto; á fin
diplomáticos
poniéndolos en
reiterándoles
del Gobierno Provisorio,
á
ser
maceda, y á fin también
había
derivada
como
de
los
organizar
sus cre
que ante el
del
señor
Bal
pocos elemen
tos
militares que
del
pésimo estado en que se encontraban exigían
en esos
in
sido
negociaciones
pendientes en el extranjero vigor
adquisición
habían
las
realizarse
á fin
públicos
momentos, y
que
á
causa
mucha
atención.
Esta labor fué unión
de
acometida
respetables
mente con ese
por el
objeto, y
venidos
á impulsos del patriotismo, á
la Sala de Gobierno rrúbias,
que
estaban
otros
Baquedano unos
expontáneamente,
En
ofrecer su cooperación.
los
en
expresa
señores:
don Alvaro Cova
hacía de Secretario general; don Melchor
Concha y
Toro,
mente en
los
ñores
señor
caballeros, llamados
que prestaba
negocios
Ovalle y
su
cooperación
de hacienda,
García,
empleados
principal
auxiliado por
de
ese
ramo,
los —
se
don
—
—
15
Ambrosio Montt, don Carlos Aldunate, don Luis Barros Borgoño, don Eusebio Lulo, don Carlos Wulker Martínez, don Gregorio
Donoso, don
largo é inoficioso
otros que sería
Debo, señor
sin
Máximo R. Lira y
hacer
embargo,
muchos
recordar ahora.
una
especial
don Manuel Arístides Zañartu,
del
mención
último Ministro
el
de Hacienda de la Administración caída, caballero que fué también personalmente á la Moneda en las primeras horas de la que
honró
me
manos
á hacer
mañana
la
con
la llave de
entrega
de
su
letras
Londres de
sobre
que
don C. R. Ovalle
tivo
por el cual se mandó
timo
impedir
dar
podía
En
medio
cuenta
aviso
de todo eso;
esa
un
labor
minuto
este
dar á los libra
ya
despachadas.
que
perder,
llegaban á la
de la
estado
ciudad.
jefe de la Estación Central de los Ferrocarriles auxilio por
dirigía á
se
nos
atacar
puntos
atacaban
tos del á
teléfono, diciendo
cuerpo
de Zapadores,
blo
en
Se se
orden,
soldados con sus
las
que
habían
armas
y
resguardar
habían
destinados
sido
dispersado, desertándose
confundiéndose con el pue
200 hombres del saber que
se
2.°
de línea,
—
del
400
encontraban
cual
solda
de la Avenida de Matucana, fueran á la Estación y á dispersar la muchedumbre —
disponía á
en el cuartel
de la
destacamentos
atacarla, y que calle
en
bladas é impedir mendó al
pobladas que
Y los destacamen
en el cuartel
que se
inmensa
asonadas.
ordenó que
había llegado á
dos
se
El
pidió
diversos y leja
otros
propiedades particulares.
resguardar el
los
que una poblada
la Estación. En
habían también formado
se
las
úl
sobre manera apremiante
del
noticias alarmantes
y
mo
telegráfico, á fin de
las letras
pagadas
de toda
había
en que no
Moneda
y
fiscal,-
llamar á la Moneda á
oportuno
fueran
que
y
mis
200,000 libras
propiedad
caballero con cuyo concurso se pudo
dos, inmediato
en
departamento de la Casa de Go
ese
bierno, advirtiéndome que existían cerca de esterlinas en
Ministerio,
de depositar
confianza
el
de la fuerza
de la Maestranza
que
salieran
había
también
diversas direcciones á disolver las ataque
á las propiedades; y
Comandante de Armas
que
po
se reco
inquiriera las
de-
¡6
—
m
ás fuerzas
las
cou
que
la
en
Pero
ficaz. La tropa,
tarde
vez que por
segundo
se
lugar de
en
rrotada, y
impasibles lo
Aquí debo
de
las
tomar
que
meras sas
de
horas,
de
pocas),
se
también
llegó á
sido encontradas
los
papeles que
mañana por
hecho á
la
casas
con que
probable que
saqueadas
y tomadas
de
frecuencia
tenían el
necesitaría
hecho de
el
todo
prenderías
fueron
por
en
el
esta
esas
el
en
á las
ca
muy listas habían de
entre
abandonado
algunos
de
esa
cuyos
también que, disfra
asonadas.
en
En la
cuanto al ob
Policía,
de facilitar los llamados
hacer
pri
otras casas
populacho
ciudad,
listas
y
las
relativamente
cuartel
saberse
de las
parte
sobre
entonces que esas
saber
fuera
refiere,
Balmaceda.
que exclusivamente
(pues las
existían
se
se
personas que
señor
la Moneda
en
dirigidos,
decirse
policía
zados, formaban
Ud.
que
for
las
individuos de tropa llegó á
jeto
saqueos.
de las
estas personas
negocio
los
la ciudad, ó pasando, ó se dis
para
fueran
puede
de las
recorrían
que
de la Administración del
saqueos
casas
disponían de listas detalladas
extrañeza que causaba
los
que
las
los diversos órdenes y
en
parte en
reconocer con precisión
maban parte
En la
saquear
que estaba
confirmar el
chusmas
uniformes,
Poder, de la Administración de
del
los destacamentos
persaban para
sus
cau
de la chusma, aumentan desorden con el uso de las armas.
formaban parte,
presenciaban
hacer
preferido
en medio
confusión y el Las turbas habían empezado á
ramas
Estación,
resguardarla
arrojando
populacho, y,
do la
todas las
im
sino
con éste y en medio de los desórdenes. Las fuerzas
parte en
de línea,
personas que
no sólo era
á los desmanes del pueblo,
confundía
se
habían dispersado
en
ine.
era
de armas,
sus compañeros
les había ordenado, habían
sa común con el
todo
que
la deserción de sus jefes,
desertándose,
como se
or
totalidad recluta, y desmoralizada
su
en
de la derrota de
él tomaba también
del
del
conservación
á decirse
volvió
potente para poner atajo
que,
la
para
ciudad,
poco más
por el pánico
á la
contar, y tomara todas
pudiera
se
providencias necesarias
den
-
por aquel
tiempo
parece
que con
el Gobier-
—
del
no
señor
—
Balmaceda á las indicadas personas;
de
esos momentos
á
opinión que
17
fué bastante
efervescencia
Ud,
este respecto estampa
ceda, los
fueron
saqueos
de
cebo
de enganche, imprudentes é No
para reclutar soldados.
porque no
cionarios,
Estado
pueda echar
vez que
falta
criminal,
recurso
dados,
de los
cho en el
corosas,
de
para
á los
á los
el
y
en esa
las
negocio
que
todo
se podía
temer
pulacho, después de
fuerza,
rienda suelta estado
La las
á
de
debido á la
propiedades
dujo
grau
con mayor
ker
atacar
preparados
tiempo de
ba
propiedad
á los Ban saqueos.
y de
manera
y
un orden rigurosa
y por la dueño de sí mis
vigilancia
enteramente
de contenerlo, y podía dar instintos, á los cuales se les ha
pábulo por
que
está
capaz
sus malos
dando
noticia
infame
de clases, habían los ricos y, haciendo
más extricta
se veía repentina
mo, sin ningúu freno
bía
la
como
eu esos momentos en que el po
algún
mente mantenido por
época,
los
inde
odios
respeto
estaban, pues,
esto
-
clases menos edu
también la idea de los
propalado
elementos
á
con caricaturas
ajena, les habían llegado á hablar de
Los
la
es que el
ellos cundió mu
pobres contra
primeros
cos, y habían
necesario
hecho
de
desgraciadamente
Esas publicaciones, cuyo en hacer nacer y fomentar
perder
el
para reclutar sol
con gran profusión entre
estado azuzando
hombre de
juego
soez
cadas. sado
sería
Pero
ejecución
lenguaje
fun
altos
contribuyendo en gran parte
que, con
Balma ínfimos
tan peligroso, á la
empleo
cuyo
la
se valieron
á los
que ningún
saqueos se puso en
pueblo,
esto
recurso
sentido moral.
circulaban
otras,
de
posible
la idea de la
que
y
pasquines
en
de
completa
es
señor
agentes
irresponsables,
culpo
mano
los
que
general
favorecida.
eu su
En los últimos tiempos del Gobierno del
pero en
los
los
medios
saqueos
se
indicados.
ejecutaban sólo en
de los caídos, á la vez que sorpresa, pro en la Moneda, y uno de los que
indignación energía
Martínez;
los
condenaron
motivo por el
de
mo,
valiéndose
gio,
podría contribuir
su
nes
de las
fué don Carlos Wal
cual se
reconocida
eficazmente
le indicó
elocuencia
á
que
él
mis
su presti
y los desma
contener
chusmas.
2
18
—
Esa insinuación, impulso
mer
do, bastó
del
sino como el eco
era
que no
pri
manifestado espontáneamente por el mismo
Walker
señor
—
tener
al
noticia
de lo
que estaba sucedien
inmediatamente
para que este caballero saliera
de la Moneda y se fuera á poner por obra los impulsos de su generosa caballerosidad. Y en el día tuvimos la sa tisfacción de
de
también de
su palabra sino
seguido
evitar,
Vicuña,
á llegar á tiempo
canzó
sus
más,
y á
con
como
—
cual no al
el saqueo mismo
—
algunas otras.
Como
la Moneda
se presentara en
pos que estaba recién
llegado á la
drón de
le dio
te
Caballería, á
en partidas
proteger
las
se
Comandante Cam
el
de hacer
orden
hora,
personas
Campos á hacer sus soldados
que se un
aún
pa.
y que,
viaje que
Y
se
quitara
de
esos
dio,
le
ordenó
también
previniendo que
peraran en el
con
Cuerpo y
se
y
de
la
estado
en
de
hacer, habían logrado individuos de la tro último recurso,
hiciera fuego
que
so
disfraza
policiales
también
parte
Campos los del
de hacer fuego hubo des á
diversos
pun
algunas personas.
tocara la
mientras
campana
de incen
que concurrieran es
los jefes iban á la Mone
ellos se convino
en
hiciera
custodiar
de
al señor
ejecutarla en
los bomberos
cargo
mal
consecuencia
con ellos remontara
vida
que se
Cuartel,
señor
de la Policía tomando
orden
necesidad
el
una
disolviera á la tercera intima
ordenó
su ejecución costó
da. Y
de
Campos
caballos
La
á
que apelar al
caballos
su mando.
graciadamente
y
del
como se supiera que muchos
los saqueos,
Se
nuevamente
algunos
que no se
los
cuerpo
tos,
al señor
de
al cabo
chusmas no respetaban
cabalgaduras
acababan
andaban en
que
las
prevaliéndose
desmontar y desarmar Entonces no hubo más
ción.
en
presentó
presente que
y se le dio orden bre toda poblada
dos
se
encontraban sus
largo
salir su gen
la ciudad, dispersar las turbas y y las propiedades, así como tam
recorrer
ó menos,
más
Escua
capital con un
bién la Estación de los ferrocarriles. Pero
á
casas,
ejemplo, á la
por
para
algunas
no sólo
había
se
puños,
incendio de
ya el
la de don Claudio
de
que, debido á los esfuerzos,
saber
que
armara
todo
el
la ciudad,
pues
la
se
—
tropa existente,
Campos, beros sar
á
fuerza
Entre
garantías.
día
prestaron ese viva
—
del
exceptuando sólo el escuadrón
daba
no
19
otros
importante
el
una poblada que
señor
muchos, los bom
servicio
intentó
de disper
asaltar
á
uno
de los Bancos. Los
de Santiago
comerciantes
formar
también
se presentaron
del orden, y sus ser fueron igualmente aceptados, indicándoles que
á ofrecerse vicios
para
una guardia
Intendente y
ocurrieran al
Comandante de Armas
al
pa
ra procurarse el armamento necesario.
Los bomberos y los comerciantes prestaron en ese día servicios de inapreciable valor para el restablecimiento del
orden.
Debo
aún recordar
del
miembros
Clero,
los
servicios prestados por algunos
entre
los
tengo
cuales
presente al
Presbítero don Ramón Ángel Jara, hoy Gobernador Ecle siástico de Valparaíso. Este caballero fué á ofrecer su concurso personal en yo
estábamos; y niencia
de
partir con
profusión,
de los del
miembros ciendo
de
publicara
conve
é hiciera
orden, la
Clero,
y la cordura en cristianos, y de que algunos á la vez, recorrieran las calles ha moderación
por el
durante todo lo
tanto
aceptada
como
con
re
alguna pequeña exhortación al puc
Clero,
Jara á la Moneda,
cuencia;
indicarle la
palabra exhortaciones en el mismo sentido.
Casanova
que
al
en que
circunstancias
permití
sentimientos
indicación fué
señor
azarosas me
Arzobispo
que el señor
blo, llamándole nombre
las
mismo
el
cual
Ilustrísimo
por el
volviendo
al anochecer el
enronquecido por
día había hecho
él y
La
señor
los
esfuerzos
su caritativa elo
sus compañeros merecieron
bien
de la Patria. El en
señor
todo
minaba
el
Walker,
por su
día. Concluida
á otro,
parte,
no
desmayó tampoco
su misión en un
condenando en
todos
con
lugar, igual
se enca rigor
los
desmanes de las chusmas, y luchando muchas veces con su brazo hasta obligar al populacho á retirarse de las ca sas asaltadas.
Admiramos
entonces el
temple de
su espí
y la abnegación con que ponía toda su persona en la defensa de las propiedades de los que acababan de ser
ritu
20
—
adversarios, dando
sus
de
justicia
que con
también los
como
así
—
un
alto ejemplo
él enorgullecerse,
podrá siempre
lo
que
de civismo, así
acompañaron ayudándolo en su
tarea.
Mediante los
y la importantísima cooperación de las personas y corporaciones que he re cordado, logróse al fin contener y dispersar las turbas an recursos empleados
tes del anochecer,
de temerse
ran
durante la tes
la
suerte
de la
ciudad
noche si no se conseguía alejar el peligro an
ésta
que
las últimas horas deja
no sin que en
serias zozobras por
temiéndose
llegara,
sucedía, los desmanes del
con razón
populacho
no
si esto
que,
reconocieran
límites. Y
para que pueda
juzgarse hasta
qué punto era
inútil
y hasta peligrosa la tropa de infantería que en ese día aciago había en la ciudad, concluiré por recordar que, en las primeras horas de la noche, el Cuerpo de Zapadores que se
se
hospedaba
sublevó,
fugar
jefes, fuera á
algunos
soldados por
ron
que
causa que
á todos ellos,
parte alguna en
provincia
la
volverse para
Santiago,
llegar á
tranquilizarlos, y les
que
he
tes, y
extendido ya
cordados,
me
he
hacía
á
toma"
poco que
Coquimbo,
á la
cual querían
hogares. El General á
procuró
ser condu
de
en
esta
relación,
ella muchos otros
más
del
aun
inciden
punto principal que
que contesto.
Necesitando dar á Ud. la respecto al señor
sino que
demasiado
no quiero apartarme
apreciable,
habían
sus residencias.
procurado cercenar
motivó su
vencedores venían
aseguró que volverían
á los lugares de
Me he
los
expusie
recientemente reclutados por
de
sus
de
Interrogados después
los había movido,
que
á
preciso
acompañado
persona,
la campaña,
la fuerza
en
armas; y fué
aunque no sólo no
a
Moneda,
alcanzándose
masa,
contenerlos.
habían llegado
cidos
en
les habían dicho
castigarlos
do
la
en
con sus
General Baquedano
que el
los
desertar
hombres
como cien
de frente de la
en el cuartel
queriendo
Walker
razón
de
mi
en presencia
encontrado en
la
afirmación con
de los
precisión
el modo cómo se generaron esos sucesos
y
sucesos re
de hacer
por qué
ver
llega-
21
—
ron ellos
la
á tomar
—
el cuerpo que
desarrollo
generación ni en el
tomaron, que
tener la
más mínima participación
durante
ese
tamente
ajeno
tiempo
tica labor. Y
á
si
y
ni en
que,
pudiera
alcanzaron,
Walker, que Moneda, comple
el señor
la
se encontraba en
eso
sin
prestando su concurso
él llegó después á intervenir
á
una patrió
los
en
recor
dados sucesos, fué única y exclusivamente para ponerles lo posible, y lejos de ser movido á eso por pa
atajo en
innobles,
siones
dalga
vencidos,
y la
vez no
he
justiciero de las gación
día,
personas
en el
cual
tam
recurso militar
de
un
recuerdo
también
señalados servicios
que
debieron haber
orden, lejos de hacer ésto, fue
del
excepción
hi los
enaltecen sobre
de hacer
las fuerzas
con su pundonoroso
dadero
mas
corporaciones que con abne
y
ron un verdadero peligro para
que,
lo
que
menos
prestaron
servido para mantener el
la honrosa
la
sino
cristiana compasión por
muchas otras personas pueden
podido
i patriotismo
en aquel
más
en acciones
reveladas
manera, de las cuales bién dar testimonio.
A la
él
no se vio entonces en
generosidad
el
orden mismo,
escuadrón
del
con solo
Campos
señor
jefe á la cabeza, fué todo que
entonces pudo
el ver
disponerse
con confianza.
Reiterándole dado
esta
tísimo
mis excusas por el retardo con
contestación,
amigo
i S. S.
me es grato repetirme
que
de Ud.
le he afec
F. Echáurren».
—
III
(Editorial de El Porvenir de
Nuestro distinguido Ramón Ricardo Rozas te
el
11 de Marzo de
correligionario se
ha
servido
y
1894)
amigo señor
dirigirnos la
don
siguien
carta:
Señor Redactor Principal «Santiago, Marzo 9 de 1897. de El Porvenir. Presente. Mi estimado amigo: Adjunto me es grato remitirá Ud., para su publicación en El Porvenir, copia de un interesante documento, que ha de servir para ilustrar el juicio de la historia acerca de la conducta observada por uno de los miembros mas be—
—
—
22
—
neméritos
guieron al
—
del Partido Conservador en los sucesos triunfo de las armas constitucionales en
que si agosto
de 1891. Seguro de que Ud., estimando en lo que vale la impor tancia de este documento, que enaltece la figura de nues tro común amigo don Carlos Walker Martínez y á la vez desvanece las imputaciones calumniosas con que se ha pretendido manchar su reputación, le han de dar honrosa colocación en las columnas del diario, tiene el gusto de suscribirse de Ud. afectísimo amigo y servidor. Ramón Ricardo Rozas.» —
Hé del
las
piezas
á las
cuales
aquí ahora
señor
Rozas,
á la
adjuntas
damos
comunicación
cabida en estas colum
nas con sumo placer:
don José E. Uriburu, Vicepresi
«Excelentísimo señor
dente de la República Argentina. tiago de
—
Buenos Aires.
Chile, noviembre 20 de 1893.
—
San
Respetado señor y
—
amigo:
El los
alienta
para
presente
amigos
carta,
Sus los
saqueos
al
país,
pie
del 29 de
de la
le inculpan agosto
los
participación activa
de 1891, y le niegan todo la triunfante revo
caídos en
ese mismo año.
circunstancias, fué
el
de
entregar
un caudillo
extraordina
á Ud. la llave de
su propia casa para que pudiera refugiarse en ella el
tador Balmaceda, y deseo que un hecho que tanto lo tece no continúe siendo una revelación sin detalles
la debida y fehaciente constancia. En cuanto á la calumniosa inculpación de ción,
según
unos, y
dirección,
del 29 de agosto, Ud. procuró
me
relacionados con
Como á Ud. le consta, lo más notable que como Walker Martínez pudo ejercer en tan rias
este
don Carlos Walker Martínez.
generosidad con
lución de
en
testimonio,
hechos históricos
sobre
enemigos políticos
de
acto
bondades hacemos
sus
Ud. tiene
que
solicitar su valioso
nuestro común amigo
en
de
constaute recuerdo que
numerosos
impedirlos,
no
habrá
según
otros,
dic
enal
y
sin
su participa
en
los
saqueos
olvidado que personalmente
especialmente el
de la
casa
de don
r-
Claudio Vicuña. Por
estaba
bargo,
á los
Se
la
su
plebe
día
ese
Legación,
iba
esparciendo en
y útiles del
desde la
acera opuesta
para su
tranquilidad,
en
la
de dejarla
dos hechos á
tuve
que
diendo á con
ella
del
con que
los
calles
Vicuña,
cuando
en alta
voz,
Ud. homenaje á la
que rindiendo
importantísimo
le corresponde,
que
la
el
presente
carta, y
anhelo, disculpará la
y
dadero
su mui adicto servidor
ser
sobre
los
que aten
molestia que
aceptará mis anticipados
agradecimientos
á
las
de decirle
de la
calle
furor
Walker trataba de impedir tan
lugar
sincero
impongo,
amigo
de
por
señor
el gusto
que se refiere
este
le
en el
sin em
obedecerle.
puerta
verdad, hará á la Historia de Chile vicio
á
fragmentos
palacio
No dudo
escándalo.
ella cuan
consumada, castigando,
que se resistían
presenciando el ciego
muebles
to .
Ud.
encontraba
de
casa
llegó Walker á
desgracia,
do la destrucción con golpes
~
23
y
sinceros
continuará considerando como un ver
Q. B. SS. MM.
—
Ramón R. Rozas.»
«Buenos
Me felicito de
go: con
31 de diciembre de 1893.
Ricardo Rozas.
món
de
Aires,
—
Santiago.
que me
las indicaciones
nuestro
amigo
de dar testimonio
tan y
que siempre
he
en
precedente
su
de la hidalguía de
don Carlos Walker
como
Señor Ra
estimado
ami
haya dado Ud. oportunidad,
contenidas
confirmar actos reveladores
ter de
Muy
—
—
contra
Martínez,
imputaciones
considerado
carta, carác
que
le
así
afec
desprovistas de toda
verdad.
El hecho
que
ceda, es exacto.
ñor zón
á
me
Ud. señala,
llegaron diversos
alarmarme,
rumores
porque me
tal
Argentina; y do y generalizado, dadas las opiniones
si
alardeadas
Balma
de
este se
debieron
con ra
asilo
demostraban
sospecharse que el ex-Presidente
Legación
que
señor
al
relativo
En los últimos días del
se
que
empezaba
encontraba
en
la
sospecha se
hubiese
condiciones
de ánimo y las
por una
ejército victorioso que ocupaba
parte
del
y por el inminente
pueblo
la capital,
era
afirma
—
24
—
desastrosas
una explosión cuyas consecuencias zás
hubiera
Balmaceda,
señor
Walker
podido prevenir.
con el mismo
señor, y
propósito, de
el
proporcionarme un colaborador
á la
proveer
de
seguridad
del único
mi
del
acuerdo
parte, de
la delicada tarea de
en
asilado; de
mi
ante el peligro que amenasaba el consejo
mía, hecha de
por confidencia
con
nadie qui
conocía el asilo
á éste,
manera que
buscar
no vaciló en
entonces podía
auxiliar con que por
contar.
En
si
lugar
llegase la
llave cirlo
á
Esto
aquélla.
de
usar
de
su
Por lo
á
mis
que
la tarde,
vi
ella; toda
que
la
á
detalles
la
Ud. refiere,
agregar,
sin
á Walker
de
perpetración
acerca
de lo
parte,
de las
propiedades,
aún,
que
el
y
casi
á deplorar
la ciudad,
supe entonces
él había
que
conde
á otras,
muchos
presenciado
caballo
ocurriendo
de
al
á todas
de impedir la destrucción de las
atendido
Walker tenía la
aseguró que
á
puños,
en
voz
de lo
que
á la
rapa
de
número
diversos
casi
que sentía
participación
multitudes
poner coto
el excesivo
simultaneidad con que
á las
día citado, por llegaba á
cuando recién
ya que no era posible
pequeña
día 29 de
el
con severidad proporcio
ellos
ejercitaban.
cabido
de
estrictamente verídico.
escandalizado
casas asaltadas
sus
peli
aprove
me permiten rati
haberse trasladado á
de los asaltantes,
expulsar
es
casa,
ocurrido
por
co
en presencia
multitud
Por Walker
su magnitud.
éstos y la
la
vivos
embargo,
habían
habría
me
de Walker
que
en su
lo
por no revelarle cual
tuve
discreto dar
requerido.
actitud
entregó
se
ellas con el propósito
bía
su
Balmaceda,
ofreciéndome
nuestra conversación se redujo
en mucha gunas
del
pero
lo hubiera
atentados que
nando
Balmaceda;
recuerdos, muy
cuanto
Tengo
cidad
temía,
indicó
me
señor
que no consideré
toca á la
que
sucesos
agosto,
nada
del
era un recurso extremo que no
y del
situación,
chado si el caso
los
Walker
que
refugió
eventualidad que se
nocimiento al señor
groso
ficar
del
seguro
para que en cualquier momento pudiera yo condu
ocasión
los
fué
esta circunstancia
casa como
puntos
extinguida
y
la
me
doloridos, no les ha en la jornada; para
habían de
convertir
-
en
teatro de rapiña, le
del
de
acto
A
25
insolencia,
el golpe
de
hubiesen tomado
garlo sería apartarse palda
de la
de látigo ó
parte
debe indudablemente
se
agosto no
á la increpación
era menester unir
esta actitud enérgica
más,
—
que
puño.
de Walker y algunos los atentados del 29 de
mayores proporciones:
verdad notoria
—
volverle
y
la
ne
es
á la justicia.
Pensé
escribirle
asuntos, aplazar
la
nidad.
Esta
que, á
pesar
Crea
de
realización
vacilación
soy
con más extensión sobre
considerado
su
los
le
explicará a
Ud.
conveniente otra
oportu
el retardo con
de distinguido
atento servidor.
y muy
estos
a su apreciable carta.
sentimientos
amigo
más
ese propósito para
mío, correspondo
usted en
con que
á Ud.
después he
pero
aprecio
José E.
—
Uriburu.»
Quien tan
que
este
testimonio
nuestra
sociedad por
hombre
perfectamente
contienda que se
que,
rinde,
su
imparcial,
desenlazó
parte
tomó
en
en
é
los
unos
sucesos
en
hidalguía;
absoluto
ajeno
de 1891;
un
en agosto
de
caballero
ha dejado
recuerdos
noble carácter
como generoso asilador
tes, tanta
es un cumplido
é inolvidables
gratos
un
á la
testigo
otros contendien
y de
aquellos
días y
los conoce; el que entonces era Ministro Plenipotenciario y hoyes digno Vice-presidente de la Re tan
cabalmeute
pública
Argentina.
El testimonio, pues, menos decisivo. Tampoco
no puede ser ni más respetable ni
puede ser más. explícito ni más
honroso
para
don Carlos Walker Martínez. El honorable considerado
señor
Uriburu
afirma
desprovistas de toda
que
«siempre
ha
las imputacio
verdad»
inescrupulosos y audaces enemigos han intentado mancillar la limpia reputación del señor Wal
nes con que sus
ker;
que, muy lejos de haber incitado
29 de
agosto
constituyó
en
ó
mirándolos
siquiera
defensor de las
cables perseguidores
a
con
propiedades
de la víspera; que,
saqueos
del
indolencia,
se
los
de
sus
impla
no contento con
1 —
26
—
haber increpado á las turbas la fealdad de hortándolas hasta
de
sistir para
enrouquecer su
intentos, luchó
sus
impedirles la
entrada
con
á las
su
delito y
prestigiosa voz
casas
á
cuerpo
ellas
ex
á de
cuerpo
dictatoriales ó ha
de las mismas; que, cuando rendido de can volvió el señor Walker á su domicilio, tuvo pala
cerlas salir sancio
bras de plebe,
enérgica reprobación
de
atestigua el respetable ex
Vicepresidente de
actual
mayor
la
encono, de
más
el más
del
ardoroso
de
perseguido posesión
del secreto,
maceda;
que ese secreto
homenaje ese
sabia
secreto
no
las horas
que en
cuando
excitación,
tomaron parte,
dónde
le fué
hallaba
se
el más
estaba en
oculto
Bal
confiado con anuencia
éste
rindiendo
la hidalguía de
a
país,
do la revolución,
caudillo
cuantos en ella
Dictador mismo,
su
violenta
Ministro Argen
desesperada, porque no podía des Dictador, el señor Walker Martí
cólera popular rugía
cubrir el paradero
nez,
Uriburu.
palabras que oyó el mismo señor
Mas todavía: tino y
los desmanes de la
contra
así
el mas
del
elocuente
de la víspera; jamás de los labios de Walker
salió
su adversario
Mai tínez.
Todavía
el señor
más:
Walker Martínez guro para el
Balmaceda
Walker la
ver
encargó
ignore
que
la
que el señor
como asilo se
fué
sus
fué y
á
triste día
alguien
alguien precio
quien
yerta
el papel que
que
en
fué
á las profanaciones de
¿Ignora
puesta
crispada
envolver
cuál
vida? ¿Tgnora
odio?
sido
Dictadura,
mano
de
de
había
de la
de la
casa
conservador en aquel
se quitó
ebria
cabeza
guidores
atestigua
propia
quién sustrajo ese cadáver
multitud
cuya
su
Dictador.
Pero ¿hay alguien hizo el noble caudillo que
Uriburu
ofreció
que
desprendió
del
Walker,
por sus perse
Dictador,
el revól quién se
ensangrentados restos en el su
último y fúnebre servicio que se suele prestar á los deudos y á los amigos? ¡I á ese noble corazón es á quien se acusa de haberse
dario,
convertido en capitán
de
Hay hombres que no los
calumnia.
Sus
saqueadores!
necesitan vindicaciones cuando se
reputaciones están colocadas
tan arriba,
-
tan
son
la
luminosas,
niebla
bres
de la
Para
útiles
sólo son
lo
para
diáfana ha
visible;
y franco
siempre
la
en
leal,
temer, y
de él drá
de
este
razón,
aun,
en
odio
pues,
y tan hermosas
en
cuando se
necesitan,
para
la
historia, y la
ni
hoy
las
y
ai mas propias
So le
campeón
pero nunca
que
po
de
como vi
figuras tan limpias no
vindicarse ante sus con son
siempre
útiles
exhibimos contraías groseras
ha hecho blanco auno de los
populares caudillos
ser mas
sin
visera alzada
causa cuyo
vindicaciones
que
petados
de
y
la de Carlos Walker Martínez
de
y
á
ruines alevosías.
á la
calumnias
que se
sin miedo
mas nunca se podrá recelar
las calumnia,
temporáneos. Pero las
noble,
ni una sola villanía.
cuando
conclusión,
como
disimulo,
podrá encontrar
Bayardo
fidelidad jamás desmentida ha sido; llano despreciarlo.
Repitamos,
el
siempre
Nadie
adversario esgrime
cobardes emboscadas
aborrecer
i privada;
Todos conocen
la doblez y
con
y del cristiano;
caballero
de
lugar
en el
sido su vida pública
generoso.
con
él
estado
desfallecimiento
ni un solo
podrá
vindicacione;; están
hasta la rudeza,
carrera
frente á frente del del
esos
ni
hom
la historia.
reñido
casi
siempre
larga
ya
reproche,
Se le
Uno de
en ella una mancha.
siempre
carácter,
abierto
la3 alcanza,
odio
obscurece.
Siempre ha
conoce?
nadie puede señalar su
la baba del
las
contemporáneos, las
sus
¿Quién no
más
que ni
mentira
—
Carlos Walker Martínez.
es
mas;
27
de
espléndida.
tTIV'
nuestro
partido,
más res no pue
i;>*fP ', '#,«;■$##
'
:
...
■5¡3-¿:í
yjOfrs
-.
t.