“Toda persona tiene derecho a la protección por parte del Estado, a través de los órganos de seguridad ciudadana regulados por ley, frente a situaciones que constituyan amenaza, vulnerabilidad o riesgo para la integridad física de las personas, sus propiedades, el disfrute de sus derechos y el cumplimiento de sus deberes” EEMDJ Artículo 55 CRBV.
Considerada una de las ciudades más peligrosas del mundo por su alto índice de criminalidad, Caracas a pesar de encontrarse en ventaja en comparación a otras ciudades de Venezuela, no escapa de la delincuencia. A pesar de haber registrado una baja en los homicidios del 50% en el año 2020 producto del éxodo masivo e igualmente por el contexto de pandemia, para ese mismo año de acuerdo al informe de la organización no gubernamental de México, Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, Caracas ocupó el lugar 191 en el ranking de las 50 las ciudades más violentas del mundo. Igualmente, el informe anual regional del Observatorio Venezolano de Violencia Región Capital (OVVRC) en 2020 registró una tasa de 52,8 muertes violentas por cada 100 mil habitantes (m/h) en el Área Metropolitana de Caracas, conformada por los municipios Libertador, Chacao, Baruta, Sucre y El Hatillo. La organización Transparencia Venezuela en el año 2018, realizó una investigación en la que expuso los esfuerzos fallidos realizados por parte del gobierno para dar respuesta a la inseguridad en el país; para ese año se habían implementado al menos 22 2 planes de seguridad ciudadana con el objetivo de reducir la delincuencia en Venezuela. A pesar de los intentos, la línea de acción implementada por el gobierno no redujo los niveles de criminalidad.
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Vease http://www.seguridadjusticiaypaz.org.mx/sala-de-prensa/1596-boletin-ranking-de-las-50-ciudades-ma-s-violentas-del-mundo-2020
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Vease https://transparencia.org.ve/project/existe-seguridad-ciudadana-para-transformar-a-venezuela/
Hurtos, robo de vehículos, secuestros, son tan solo algunas de las acciones delictivas que imposibilitan a los ciudadanos gozar de seguridad ciudadana, se le suma a ello la debilidad institucional y la actuación arbitraria en el sistema de justicia. De acuerdo a la organización Human Rights Watch (HRW)3 más del 95 % de los delitos graves no son castigados, ya que la impunidad en el país es generalizada. El problema La inseguridad que vive Caracas representa un obstáculo para el desarrollo social, cultural y económico de los ciudadanos y sobre todo para la ciudad. El impacto de la inseguridad en la calidad de vida de los ciudadanos es negativo y hablamos desde el que toma el transporte público para asistir a su trabajo y puede ser víctima de un robo, como el repartidor de comida rápida quién al pasar por una zona oscura y sin presencia policial, puede ser víctima de la delincuencia o incluso el empresario que también se ve afectado por la extorsión. Los caraqueños saben que su ciudad es altamente insegura, pero desconocen cómo se comporta la delincuencia en el país, y cuáles son los delitos que mayormente se registran en nuestra ciudad. Las cifras que son reflejadas en notas de prensa son levantadas por periodistas de las secciones de sucesos o por organizaciones de la sociedad civil y observatorios. A pesar de su valiosa labor, la información que se visibiliza en medios de comunicación, esconde aspectos importantes de la delincuencia que afecta a los venezolanos. Información clave como, hora de mayor incidencia delictiva, tipos de delitos, identificación de zonas en donde se registran hurtos, robos armados, entre otros; haría una diferencia relevante, no solo para los ciudadanos sino para aquellos que se dedican al monitoreo e investigación de la delincuencia en Venezuela. No se puede actuar ante lo que se desconoce, si no se visibiliza en detalle un problema tan influyente como la delincuencia, es poco probable que los ciudadanos perciban que pueden ser parte de la solución. Aunque el incremento de la delincuencia es atribuido a la ineficaz actuación del Estado, hay elementos (sociales, económicos y políticos) que influyen en esta dinámica delictiva como la ausencia de oportunidades laborales para quienes ven como una opción el robo, el hurto, entre otros. Igualmente, se le suma la falta de espacios para fomentar la cultura y el deporte.
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Vease https://cods.uniandes.edu.co/seguridad-ciudadana-en-venezuela-asesinatos-derechos-humanos/#entry-content
La violencia que predomina en el país, más que un problema, representa una oportunidad en la actualidad. Por años ha sido el segundo problema que más afecta a los venezolanos y una de las razones por las que muchos abandonaron el país. Hoy frente a la necesidad de transformar a Venezuela en manos de sus propios ciudadanos, sin más espera de la actuación del Estado, surge la oportunidad de cambiarle el tablero a la delincuencia, a través de la actuación activa de la ciudadanía por medio de la denuncia, las organizaciones de la sociedad civil por medio de intervenciones en espacios ociosos y programas de sensibilización para jóvenes; el sector privado por medio de propuestas y apoyo económico, y el gobierno local al aplicar políticas públicas eficientes a partir de la evaluación rigurosa de los datos. Problemas identificados ● Ausencia de estrategias de prevención de la actividad delictiva. ● Canales informales (redes sociales) para realizar denuncias de actividad delictiva en la ciudad. ● Falta de datos recopilados de forma rigurosa sobre cómo se comporta la violencia en el país. ● Desconocimiento de las zonas (geolocalización) en donde se registra con mayor énfasis la actividad delictiva. ● Precario sistema de justicia, transparente y efectivo que trabaje a favor de la reducción de la impunidad. ● Uso excesivo de la fuerza como medida para abordar la actividad delictiva. Propuesta Aplicación Ojo Pelao, una herramienta para que los ciudadanos denuncien de manera anónima los actos delictivos y puedan geolocalizar el delito, lo que permitirá tener un mapa en tiempo real de las zonas con mayor conflictividad y delincuencia, así como el tipo de delito. A través de la aplicación, diversos actores podrán tener incidencia en un problema tan importante como lo es la inseguridad. El denunciar públicamente de manera anónima permitirá:
● A los ciudadanos: Hacer de conocimiento público la zona en donde fue víctima de la inseguridad. De esta manera, su testimonio funciona como una medida de prevención para que otros ciudadanos estén “ojo pelao” en esas zonas y nos sean víctimas de la inseguridad. Igualmente, los ciudadanos al tener esa información podrán tomar decisiones respecto a cuáles rutas alternas tomar en el caso de que la zona que deba transitar haya registrado una alta actividad delictiva. ● Organizaciones de la sociedad civil: Podrán tener conocimiento de las zonas delictivas y el tipo de delito, y así podrán incidir en esos espacios. Ya sea a través de actividades de prevención, actividades informativas con los ciudadanos, especialmente los jóvenes e interviniendo en espacios físicos. ● Gobierno local: Tener información en tiempo real para tomar medidas que garanticen la seguridad ciudadana, entre las medidas que puede tomar es que en los llamados “puntos calientes” tengan mayor presencia policial. La diferencia es que el mapa geolocalizado de Ojo Pelao, les permitirá tener mayor precisión sobre las zonas. ● Empresa privada: Tener información para tomar decisiones, en el caso de las empresas de Delivery o transporte privado, conocer si en alguna zona se han registrado delitos en las últimas horas y eso les permitirá tomar otra ruta o planificar estrategias. ● Medios digitales y periodistas de sucesos: Visibilizar la problemática de la inseguridad desde la fuente primaria (denuncia ciudadana). ● Organizaciones internacionales y multilaterales: Tener un mapeo de las acciones delictivas que se registran en la ciudad y evaluar si las zonas en donde realizan sus programas se pueden ver afectados. Igualmente, los datos levantados a través de Ojo Pelao representan un insumo valioso para que los multilaterales y organizaciones internacionales planifiquen intervenciones respecto a seguridad ciudadana en el futuro.
Ojo Pelao, más que una aplicación móvil es una herramienta colaborativa para la prevención del delito. Ya que hay dos visiones de la inseguridad (el hecho: la delincuencia real) y la dimensión subjetiva (la percepción: la opinión sobre la seguridad de los ciudadanos) 4. Con la aplicación los ciudadanos podrán: ● Reportar robos, o cualquier actividad delictiva. ● Alertar a vecinos y grupo familiar sobre actividad delictiva. ● Colaborar y participar en la construcción de una ciudad más segura de manera rápida y fácil. ● Conocer en tiempo real lo que pasa en su ciudad, comunidad, lugar de trabajo, entre otros. Tener el mapa en tiempo real es un recurso que a largo plazo funcionará como un mapa de color y se podrá ver la incidencia (social y económica) y acción de los actores. Actualmente, hay zonas rojas en Caracas porque hay poca intervención del gobierno local o de las organizaciones. Sin embargo, estas zonas pueden pasar de amarillo o incluso verde cuando actores clave tomen acciones al respecto. Ojo Pelao es replicable para cualquier ciudad venezolana ya que se nutre de los insumos de los ciudadanos. Es una propuesta factible ya que países como Colombia y México con altos índices de criminalidad se han apoyado en la tecnología para desarrollar propuestas en donde la ciudadanía es parte de la solución a un problema como la delincuencia. Es una idea que generará fuentes de empleo para quienes trabajen en la app. Una aplicación como ésta requerirá de un equipo conformado por ingenieros y expertos en desarrollo de aplicaciones, estadísticos, geógrafos, economistas y sociólogos, quienes realizarán estudios, informes y propuestas con base a los datos que se levanten mensualmente en la app.
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La seguridad ciudadana: instrumentos de análisis. Véase https://tecnicasmasseroni.files.wordpress.com/2012/02/murria-y-gonzalez-la-seguridadciudadana-insturmentos-de-anc3a1lisis.pdf
Desde el ámbito económico, resulta factible ya que empresas privadas, gobierno local y organizaciones pueden contratar los servicios de la app, en donde encontrarán estadísticas e infografías para mejorar la toma de decisiones y la priorización de recursos para desarrollar programas y propuestas que apoyen los esfuerzos en cuanto a la seguridad ciudadana. Alianzas Para el desarrollo, puesta en marcha y monitoreo del proyecto se propone el trabajo en conjunto con el Parque Tecnológico Sartenejas por su visión rigurosa y científica al momento de innovar en el ámbito tecnológico; el Observatorio de Conflictividad Social por su trayectoria en la evaluación, análisis de datos y monitoreo de la delincuencia en el país y por último el Monitor de Víctimas para la visibilización y difusión de los datos. Igualmente, frente a un proyecto como Ojo Pelao vale la pena establecer diferentes niveles de alianzas; con universidades, organizaciones civiles y sector privado, tanto nacional como internacional para poder construir a futuro mesas de trabajo, que permitan desde diferentes enfoques diseñar políticas, programas e intervenciones que se adapten a las ciudades y den respuesta a la delincuencia, con base en el conocimiento científico de los expertos y los datos disponibles proporcionados desde la participación ciudadana.