Pronunciamiento Latindadd 2007

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Red Latinoamericana Deuda Desarrollo y derechos-Latindadd América Latina ante la Cumbre del G8 Situación Económica y Social:

Se prevé que en el 2007 continúe la expansión iniciada hace cuatro años, aunque con cierta desaceleración del ritmo de crecimiento respecto al 2006. Se estima que el incremento de la actividad regional será de alrededor de 4.7%.

Junto a esa previsión, América Latina mantiene altos niveles de pobreza, a pesar de su disminución en algunos puntos porcentuales. De acuerdo a las proyecciones de la CEPAL la pobreza en el año 2006 estaba en 38.5% de la población y la pobreza extrema pobreza en 14.7 %. La población en situación de pobreza asciende a 205 millones y la que está en extrema pobreza asciende a 79 millones.

Los países con un mayor Porcentaje de Pobreza sobre sus poblaciones en Latinoamérica y Caribe son: Bolivia, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Paraguay y Haití. Pero tienen mayor número de pobres, a pesar de poseer un menor porcentaje de pobreza sobre sus poblaciones: Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, México, Perú y Venezuela. En los casos de Colombia, Ecuador, Perú está cercana al 50% o lo supera.

Respecto al cumplimiento de la Primera de los Objetivos del Milenio, según la CEPAL, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, México, Panamá y Perú lo alcanzarán tan solo si su ingreso por habitante creciera a un ritmo similar al promedio de los de los últimos 16 años. Colombia y Uruguay requieren de un crecimiento superior a su promedio histórico. CEPAL considera que junto al crecimiento económico es decisivo el mejoramiento de la distribución del Ingreso. Mas aún en países como Bolivia, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Paraguay.

La desigualdad se mantiene en la mayor parte de los países. En el período considerado entre 1990-2005, en poco ha disminuido y en otros ha aumentado. Entre los que han mejorado según la CEPAL, están Uruguay y Panamá (considerando cifras de sus áreas urbanas). En contraste, empeoraron Ecuador, Paraguay, Venezuela Argentina y Costa Rica.

Los gobiernos han incorporado medidas para mejorar la sostenibilidad de las cuentas públicas que sumadas a la favorable coyuntura económica entre el 2003 – 2006, ha permitido que se reduzca, desde el enfoque de los Organismos Financieros Internacionales, “la tensión entre búsqueda de sostenibilidad fiscal a largo plazo y la aplicación de políticas de estabilización”.

Es así que en América Latina se ha logrado un resultado primario promedio positivo de 2.1% sobre el PBI en el 2006 (estimación hecha por la CEPAL). En 2003 el resultado primario fue de -0.2% sobre el PBI. Sólo Colombia y Guatemala tuvieron resultado negativo. El resultado global (luego que se descuentan los intereses de la deuda) del 2006 fue de –0.3 mientras el del 2003 fue de -3.0


Sin embargo en los criterios de sostenibilidad fiscal siguen primando principalmente los criterios financieros(de sostenibilidad de la deuda entre otros) y los criterios de atracción de la inversión extranjera y liberalización del comercio, dejándose de lado los criterios que aportan los índices de desarrollo humano.

Esto se ve reforzado por los Indicadores de Instituciones y Políticas-CPIA y los indicadores sobre Buen Gobierno y Lucha contra la Corrupción, creados en el marco de la nueva Estrategia del Banco Mundial que lleva el mismo nombre.

El servicio de la deuda externa sigue ampliando el déficit fiscal total y el mismo se cubre con más deuda.

Respecto a la Deuda Pública y el Financiamiento del desarrollo.

La deuda externa total de América Latina ha decrecido en monto total en los años 2005 y 2006, en parte producto de las medidas para su reducción - mediante el programa HIPCS, Bolivia, Honduras y Nicaragua - y las propuestas de reperfilamiento de la deuda (Perú, Colombia) - planteados por los Organismos Internacionales ante la presión de la sociedad civil y como forma de prevenir futuras crisis - en el marco de posibilitar mejoras en la convivencia mundial y para dar facilidades a la liberalización del comercio a la inversión.

A esta disminución ha contribuido también la iniciativa de adelantos del pago de la deuda de los grandes países de ingresos medios: México, Brasil, Argentina como una forma de lograr mayor autonomía de los organismos internacionales en sus decisiones económico –financieras.

En el año 2004 la deuda total de América latina fue de 761,344 millones de dólares; en el año 2005 fue de 656,129 millones de dólares y en el año 2006 fue de 632,849 (en cifras preliminares a junio de 2006), suma que contrasta con grandes necesidades insatisfechas.

Los adelantos de pagos de la deuda externa que se han hecho sea pensando en lograr “la sostenibilidad fiscal y los niveles de déficit recomendados” como por una mayor autonomía, han sido hechos sin considerar la deuda social.

Sin embargo, la rebaja más significativa de la deuda total en esos tres años se da por las operaciones realizadas por Argentina en el año 2005 y por Brasil en los años 2004 y 2005. Y la rebaja por todo lo mencionado anteriormente ha sido atenuada por el nuevo endeudamiento externo.

Se ha aprovechado el crecimiento sostenido de los últimos años para lograr dicha disminución. La disminución del peso de la deuda externa con respecto al PBI regional al 24.0% se ha logrado también por dicho crecimiento. La deuda se redujo en el período 2004-2006 en 16% y el PBI creció en 9.8%.


Sin embargo hay países como Chile, El Salvador; Guatemala, Panamá, República Dominicana, Uruguay Jamaica e incluso México que están aumentando su deuda externa.

Existe actualmente una oferta de nuevos préstamos que pueden generar el aumento de la deuda bruta externa. La oferta de fondos está dirigida a la promoción del comercio principalmente: aumento de la competitividad, crédito para exportaciones. Asimismo, existe una oferta de fondos que forma parte de la Estrategia de “Buena Gobernanza y Lucha contra la Corrupción” del Banco Mundial para el fortalecimiento y reforma de instituciones.

La falta de progresividad en la política tributaria puede generar nuevo endeudamiento para cubrir los déficit.

El peso de deuda pública, suma de la deuda externa con la deuda interna sigue siendo alta. Es de 42.9% sobre el PBI. En la mayoría de los países la deuda externa sigue siendo alta y la Deuda Interna está aumentando fuertemente.

El peso de la deuda Pública es en: Nicaragua 85.8%, Bolivia 72.1% Argentina 68.6% Uruguay 62.8% Panamá 62.2% Brasil 49.9% Honduras 48.7 Colombia 45.2% El Salvador 40.6% Haití 39.5% Ecuador 35.1% Perú 34.1%

Junto a todo este panorama las Transferencias Netas de Recursos al exterior siguen siendo negativas para toda América Latina desde el año 2001. En el 2004 llegaron a ser -67,076 millones de dólares en el año 2005 llegaron la suma de -76,987, millones de dólares y en año 2006 ascendieron a 102,367 millones de dólares. Los países con transferencias de recursos negativas más altas son: Venezuela, Chile, Brasil, Argentina, México y Perú.

En conclusión podemos hablar de una situación de “estabilidad” con transferencia bastante alta recursos al exterior, con el mantenimiento de altos déficit de consumo y alimentario y con pronósticos inciertos de desarrollo estable y con equidad.

Propuestas de los Organismos Internacionales para América Latina:


Los Organismos Internacionales insisten en que América Latina tiene que tomar las siguientes medidas de Política: Reforma Fiscal, reducción de la deuda y atención a los problemas sociales. Reforma del sistema financiero para promover el ahorro y su uso eficiente. Reformas en el mercado de trabajo para mejorar su flexibilidad y mejorar el desarrollo del capital humano. Mayor apertura a las fuerzas de la competencia que impulsan la innovación y el cambio. Un entorno de negocios equitativo y transparente que incentive la inversión y a la creación del empleo.

Reacción de los Pueblos: • • • • •

Pueblos que viven con gran insatisfacción ante la problemática económica que enfrentan de desempleo y subempleo y para la que no ven soluciones. Aumento de la migración. Pueblos hartos ante las propuestas políticas que no los incluyen y agudización de enfrentamientos entre distintos sectores de la población. Sectores pobres y sectores medios movilizados frente a inversión extranjera, la liberalización del comercio y al presupuesto nacional que detenta un alto porcentaje de pago de deudas en relación al gasto social. Opinión pública y grandes sectores de la población que tienen gran desconfianza en los políticos de los partidos tradicionales y que buscan y esperan cambios en las conducciones políticas nacionales.

Desde de los movimientos ciudadanos latinoamericanos y globales planteamos: •

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Seguir cuestionando los mecanismos financieros con los que se administran la problemática de la deuda para favorecer la liberalización del comercio y de la inversión, enmarcadas en una política de prevención de crisis, que implica un control de las finanzas públicas desde los organismos internacionales y en los flujos de capitales, reales causantes de la crisis. Seguir mostrando la incoherencia entre las políticas económico- financieras con Objetivos de Desarrollo del Milenio y con el Desarrollo Humano. Seguir fortaleciendo lo avanzado en la articulación de equipos y campañas para enfrentar la problemática de la deuda pública y la deuda externa y sus efectos en la pobreza y la desigualdad, en la promoción de la auditoría de la deuda y el control ciudadano. Contribuir al desarrollo de los nuevos mecanismos financieros que se vienen diseñando en Sudamérica como el Banco del Sur, el Fondo Monetario del Sur, la moneda regional y asegurar que sean realmente equitativos.


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