• Año IX • Número 73 • Abril de 2013 • Publicación de distribución gratuita • redaccion@gacetamarinera.com.ar • www.gacetamarinera.com.ar
edición mensual
La Armada produce hechos todos los días...
APBT, CIFA y EAH1
Trabajo integrado
CORREO ARGENTINO
Pág. 5
FRANQUEO A PAGAR CUENTA Nº 11054 F
en el aire
El almirante Martin en Puerto Belgrano
El jefe del Estado Mayor General de la Armada, almirante VGM Daniel Alberto Enrique Martin, estuvo en la Base Naval Puerto Belgrano, donde mantuvo reuniones en el anfiteatro de la Escuela de Oficiales de la Armada, en primera instancia con suboficiales mayores y encargados de destinos de la zona; y luego con comandantes y oficiales superiores. 15 de marzo – Puerto Belgrano.
Con la participación de la Escuadrilla de Ríos y el BIM3
Ejercitaciones fluviales
Durante su recorrido estuvo acompañado por el comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada a cargo, contraalmirante VGM Oscar Patricio González. “Armamos reuniones con los distintos niveles de conducción para compartir cómo empezamos el año y exponer cuáles son las ideas para los próximos meses. Es importante lanzar las líneas de conducción generales para este año naval y escucharlos, conocer sus necesidades e inquietudes”, explicó el almirante Martin respecto de su visita a la zona. Acompañado por el director de la ESOA, capitán de navío VGM Roberto Ulloa, el jefe de la Armada también saludó a los oficiales de las Armadas de Brasil, Uruguay y Venezuela que en esa escuela realizan el Curso Aplicativo para Oficiales Navales. “Me alegra que puedan estar acá, es importante para nosotros contar con ustedes. Considero que no sólo será enriquecedor en el aspecto académico, sino por los vínculos con los camaradas de aula que perdurarán por el resto de sus carreras”, expresó. DIRECTOR Capitán de navío Julio Horacio Guardia SUBDIRECTOR Capitán de corbeta Fernando Sabadín COORDINADORA EDITORIAL Lic. Jimena López Montes SECRETARIA DE REDACCIÓN Lic. Andrea Carabetta ASESOR DE CONTENIDOS Lic. Leandro Fernández DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN D.G/ Ilustr. Natalia S. Saia Claudia Bellido FOTOGRAFÍA Staff de fotógrafos de Gaceta Marinera REDACCIÓN Staff de redactores de Gaceta Marinera ASESORA COMUNICACIONAL STELLA MARIS Lic. Alba M. de Petit DISTRIBUCIÓN Silvana Beltrán Sergio Aristi Impresión Artes Gráficas Papiros S.A.C.I.
18 al 20 de marzo. El patrullero ARA “King”, la lancha patrullera ARA “Río Santiago” y los buques multipropósito ARA “Ciudad de Rosario” y ARA “Ciudad de Zarate” protagonizaron junto al Batallón de Infantería de Marina N°3 (BIM3) un adiestramiento fluvial, que incluyó una navegación por el río Paraná de las Palmas, el canal Irigoyen y los ríos Talavera, Paraná Guazú e Ibicuy. ZÁRATE
En referencia a los ejercicios de adiestramiento que llevaron a cabo los efectivos del BIM3 pueden mencionarse zafarranchos a bordo, incorporación del personal de Infantería de Marina al plan de defensa de la unidad, práctica de izado y arriado de lanchas, maniobras de hombre al agua, técnicas de empleo inmediato, técnicas de acción inmediata y ejercicios de señales. También, transporte de heridos y remolques, entre otros. Al respecto, el jefe de la Sección Botes del BIM3, suboficial segundo Ariel Córdoba, explicó que: “El fin de este ejercicio fue que el personal y los medios se unan y que la gente a la hora de operar no tenga mayores inconvenientes”. Este ejercicio contó con la participación de dos mujeres infantes de Marina. “Durante los dos primeros días me desempeñé haciendo guardias en un extremo de la formación por donde íbamos caminando”, puntualizó la marinero segundo Nancy Verónica Severo. Y destacó que en cada campaña se aprende algo nuevo. En cuanto al adiestramiento específico de la Escuadrilla de Ríos, una vez iniciada la actividad
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“Estos ejercicios de adiestramiento permiten que el personal vuelque todos sus conocimientos y creatividad con elementos que se cuentan a bordo, a fin de llevar a cabo la misión impuesta a esta unidad de la Armada. En ese sentido me siento orgulloso de la calidad humana y profesionalismo con que se desenvolvió el personal que conduzco, el cual supo responder de manera eficiente y eficaz, manteniendo en funcionamiento todos los sistemas.” Teniente de fragata Santiago Quiroga Ponce, jefe del Departamento Máquinas del patrullero ARA “King”
se buscó crear un movimiento de dispersión. De esta forma, el comandante, capitán de fragata Pablo Barbich, ordenó que el “King” –dada su capacidad de transporte y tropa– realizara la navegación por los ríos Paraná de las Palmas, Paraná Guazú e Ibicuy, donde se encontró con el resto de las embarcaciones. A lo largo de estos tres días de adiestramiento los buques realizaron diferentes ejercicios, como maniobras de remolque efectivo, fondeo, zarpada, formaciones y cubrimiento de diferentes roles, como lucha contra incendio y control de averías. También, maniobras de fondeo, evacuación, primeros auxilios y comunicaciones visuales, entre otras actividades. Al respecto, el comandante del patrullero, capitán de corbeta Pablo Buonanotte, subrayó que “fue un ejercicio muy completo, intensivo y productivo de un alto nivel profesional que demuestra una vez más las capacidades de las unidades componentes del Área Naval Fluvial”.
El “San Blas” regresó a Puerto Belgrano
Misión cumplida
El transporte ARA “Bahía San Blas” arribó a Puerto Belgrano luego de cumplir con la misión encomendada en el marco de la Operación “Fraternidad Antártica I”, durante la cual brindó apoyo logístico a la Marina de Brasil en la reconstrucción de la Estación Antártica Comandante Ferraz. 26 de marzo.
En el muelle el buque fue recibido por el comandante de Adiestramiento y Alistamiento a cargo, contralmirante VGM Oscar Patricio González, y el comandante de la Flota de Mar, contralmirante Julio Alberto Graf. También se encontraban presentes el comandante Naval Anfibio y Logístico, capitán de navío Gabriel Martín González, y familiares de los tripulantes del “San Blas”, que esperaron ansiosos la llegada de sus seres queridos. Luego del amarre y de los saludos pertinentes se leyó la orden de felicitaciones y se le otorgó a la unidad el Gallardete de Eficiencia. El comandante del “San Blas”, capitán de corbeta Carlos Pedro Schavinsky Trinchero, después de su arribo exitoso a Puerto Belgrano expresó: “El balance que hago es sumamente positivo, tanto a nivel profesional como personal, ya que para un comandante ejercer su comando plenamente en el mar es un privilegio”. “Esta operación en la Antártida, con las particularidades que ha tenido por el área de operaciones en la que se desarrolló, me llenó de satisfacción”, comentó. “Siento un gran orgullo y
honor por el personal que tuve a mi cargo. Han sido una satisfacción permanente en cada una de las actividades realizadas con la motivación y el profesionalismo con el que las llevaron a cabo”, destacó. La unidad prestó apoyo logístico a la Marina de Brasil durante la reconstrucción de la estación antártica Comandante Ferraz: “El entendimiento entre ambas Armadas fue total”, expresó Schavinsky Trinchero. “Esta operación, más allá de la importancia que tuvo en la reconstrucción en sí de la estación antártica, contribuyó a seguir estrechando los lazos de amistad y fraternidad. En todos los niveles se dio esa integración y ese trabajo en equipo al cual nosotros estamos acostumbrados; juntos formamos un grupo de trabajo homogéneo”, destacó. Por su parte, el comandante Naval Anfibio y Logístico contó que: “Es una operación de cooperación más con la Marina de Brasil. Tenemos un entendimiento desde hace varios años, siempre hay colaboración permanente y mutua”. “Para la Armada Argentina y para el país la campaña fue muy positiva porque permitió brindar apoyo para componer la base Comandante Ferraz que se había incendiado el año pasado”, expresó el capitán González. Con un total de 4800 millas navegadas y 71 días lejos de sus hogares, los 90 hombres y mujeres que integran la tripulación del “San Blas”, regresaron con la satisfacción del deber cumplido.
El reencuentro tan esperado Johana Oviedo, esposa del cabo segundo Roberto Britos, explicó que el reencuentro fue muy lindo. “No había vivido nunca una navegación tan larga de mi esposo y por eso la emoción es enorme. Lo esperaba mucho y nuestro bebé también; a quien tuve que hacerle la idea de que papá no iba a estar durante un tiempo”. En cuanto a la ansiedad por este momento contó: “Anoche no podía dormir de la emoción que tenía de saber que regresaba hoy. Ahora lo que queda es disfrutar el tiempo juntos”. Por su parte, el cabo principal Sergio Álvarez expresó: “El reencuentro con la familia fue muy emotivo, extrañaba mucho en la última etapa del viaje. Por suerte nos mantuvimos comunicados todo el viaje y eso nos ayudó un montón”. Uno de los reencuentros más emotivos fue el del cabo segundo Daniel Alarcón, quien conoció a su hija al bajar del “San Blas”. “Estaba muy ansioso en esta vuelta porque quería conocer a mi nena que nació mientras navegaba. La alegría es enorme por poder verla y estar todos juntos en familia”, comentó el cabo Alarcón.
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Ejercicios con cadetes de la Escuela de Aviación Militar
Supervivencia en el mar 11 de marzo. Durante cinco días, 52 cadetes de cuarto año de la Escuela MAR DEL de Aviación Militar realizaron ejerciPLATA cios de supervivencia en el mar en la Base Naval Mar del Plata.
Para desarrollar la actividad contaron con la asistencia de personal de la Agrupación Buzos Tácticos (APBT), quienes tuvieron a su cargo el adiestramiento en técnicas anfibias y la seguridad. El jefe de Operaciones de la Agrupación Buzos Tácticos, teniente de navío Raúl Closter, explicó que: “Todos los años la APBT le brinda apoyo a la instrucción de los cadetes del último año de la Fuerza Aérea Argentina. El curso que da Fuerza Aérea es supervivencia en el mar. Por la experiencia que nosotros tenemos en esto nos piden ayuda y damos instrucción específica”. El ejercicio fue coordinado por el vicecomodoro Alejandro Méndez, en tanto que actuó como jefe de la operación el capitán Carlos Cantarino de la Fuerza Aérea Argentina. Esta etapa de supervivencia en el mar constituye para los futuros aviadores militares el contacto con el medio ambiente marino y los prepara para afrontar su hostilidad. Representa la fase práctica que se suma a los conocimientos teóricos adquiridos en las aulas de la Escuela de Aviación. Desarrollo de las actividades La APBT se encargó de la adaptación primaria de los cadetes en su contacto con el mar, la transferencia de conocimientos en las técnicas anfibias y las normas de seguridad, para su mejor protección en esta prueba.
nicas de primeros auxilios y la optimización en el uso de los recursos para la supervivencia en el mar. Durante dos jornadas también contaron con el apoyo aéreo de un helicóptero Mi - 171E de la Séptima Brigada Aérea y una aeronave Fokker F-27 de la Primera Brigada Aérea. El helicóptero se utilizó para realizar las maniobras de rescate del personal de las balsas: primero, dentro de la dársena de la base naval se izaron 16 cadetes en una “canasta” de rescate con capacidad para dos “náufragos”; y luego, en condiciones más reales, fue el turno de otros 12 cadetes. El Fokker F-27 tuvo a su cargo la “localización” de las balsas y la entrega de lo que se denomina “línea de vida”, consistente en el lanzamiento en vuelo rasante de otra balsa con elementos de refuerzo, víveres y comunicaciones para la supervivencia de los náufragos. Máxima seguridad Durante el ejercicio, todos los cadetes se hallaban protegidos por trajes de neoprene. Además, se alimentaron con las raciones de supervivencia que se hallaban a bordo de las balsas, racionando el agua potable y protegiéndose contra la hipotermia, principal enemigo de la supervivencia en el mar. Por estas razones, las medidas de seguridad se mantuvieron al extremo y fueron permanentemente monitoreados por buzos tácticos y personal del GOE contando, además, con un equipo sanitario de pronta respuesta en tierra.
“Apenas arriban los cadetes les explicamos todo lo que tiene que ver con la seguridad de las típicas balsas que puede tener cualquier aeronave. A partir de ese momento pasan a ejercitarse durante la semana completa”, explicó el jefe de Operaciones de la Agrupación Buzos Tácticos. En este contexto se suceden diferentes etapas de práctica de este curso que ofrece la Fuerza Aérea en el cual se ven materias como sanidad en combate, primeros auxilios, supervivencia, manejo de bote, conocimiento de motores fuera de borda, entre otros. “Nosotros les damos la instrucción y le brindamos el apoyo”, agregó el teniente Closter. La primera fase se desarrolló en aguas internas del puerto y la segunda en mar abierto, con el apoyo también de personal del Grupo de Operaciones Especiales de la Fuerza Aérea (GOE) y de la lancha patrullera ARA “Punta Mogotes”. Así, los cadetes aprendieron técnicas de supervivencia en balsa, la importancia del trabajo en equipo para afrontar situaciones difíciles, téc4•edición mensual
“El balance es positivo ya que nos permite conocer a los futuros oficiales con los que vamos a tener contacto el día de mañana, porque a lo largo de la carrera hacemos trabajos en conjunto.” Teniente de navío Raúl Closter, jefe de Operaciones de la APBT
APBT, CIFA y EAH1
Trabajo integrado en el aire La Agrupación Buzos Tácticos (APBT) y el Centro de Instrucción de la Fuerza Aeronaval Nº 2 (CIFA) homologaron sus paracaídas para que puedan ser utilizados en los adiestramientos. Asimismo, durante el ejercicio, la Primera Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros capacitó a sus pilotos y copilotos. 13 de marzo.
El comandante de la Primera Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, capitán de corbeta Dardo Diego Jorge Trotta, contó: “Es un adiestramiento propio de la escuadrilla para el lanzamiento de paracaidistas. El piloto adiestra al copiloto en cumplimiento del plan anual que tenemos para nuestros helicopteristas. Estamos muy contentos porque el ejercicio salió perfecto”. Por su parte, el segundo comandante de la Primera Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, capitán de corbeta Germán Zarralanga, explicó: “Aprovechamos estos lanzamientos para el adiestramiento de los pilotos que nunca habían lanzado paracaidistas y a la vez colaboramos con la APBT que tiene que homologar la apertura manual de los paracaídas”. Agregó que: “El equipamiento que traen la Agrupación Buzos Tácticos y el CIFA es nuevo y nosotros tenemos helicopteristas que nunca tiraron paracaidistas. Es muy importante porque nuestros pilotos tienen que poner en práctica la técnica de cómo acomodar el helicóptero según el viento, sobretodo en el momento del salto”. El ejercicio que se realizó en la Base Aeronaval Comandante Espora y en el que se utilizó una aeronave AS 555 SN Fennec fue exitoso. El nuevo material fue certificado por el personal de prueba y los pilotos realizaron el ejercicio de lanzamiento de paracaidistas que está dentro del plan anual de adiestramiento. Las vivencias El suboficial primero Juan Marcelo Blanco, buzo táctico, contó que: “Lo que hacemos es la puesta en servicio del paracaídas de la Armada. Es un salto de prueba para ver cómo responde el equipamiento. Por suerte nos tocó un día óptimo y todo salió bien”. “Este ejercicio lo hicimos en conjunto con un colega aeronaval del CIFA, que también es paracaidista de prueba. Por eso coordinamos entre los dos para poder poner en servicio los paracaídas que vamos a utilizar en las dos unidades”, explicó el suboficial Blanco. Por su parte, el paracaidista de prueba del Centro de Instrucción de la Fuerza Aeronaval, suboficial primero Leandro Montesino, dijo que: “El trabajo fue muy bueno; es muy importante que nos conozcamos desde hace años. No nos vemos mucho, pero es como si trabajáramos todos los días juntos. Es muy bueno realizar este ejercicio y poner a disposición el material”.
En tanto, el piloto, teniente de navío Juan Spadaccioli, comentó: “El helicóptero voló sin ningún problema, hubo un buen acoplamiento con el personal. Hicimos una buena coordinación de cabina antes de salir a volar. Las condiciones meteorológicas fueron las adecuadas, hubo un poco de nubosidad por lo que estuvimos atentos a alguna maniobra. Pero por suerte salió todo como estaba previsto”.
“Al ser dos paracaidistas uno saltaba para cada lado por lo que se mantuvo la estabilidad del helicóptero. Después de hacer el prevuelo y las coordinaciones de cabina fuimos al helicóptero y les explicamos a los paracaidistas cómo era la maniobra que tenían que hacer para saltar del helicóptero y no generar riesgos, evitando movimientos en la aeronave. Y eso lo entendieron a la perfección.” Teniente de navío Juan Spadaccioli, piloto
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Batallón de Vehículos Anfibios
Instrucción en técnicas
19 al 21 de marzo. El Batallón de Vehículos Anfibios (BIVH) desarrolló una campaña de adiestramiento en campos de instrucción de la Base de Infantería de Marina Baterías.
Con el objetivo de iniciar sus primeras ejercitaciones en técnicas de este año, efectivos de la Compañía de Vehículos Anfibios a Rueda realizaron navegaciones nocturnas y diurnas en tierra y en agua, con GPS y visores nocturnos. Se ejercitaron en remolque, navegación y amadrinamientos. Además, durante esta instancia, trabajaron en botes de asalto con el Batallón de Infantería de Marina Nº 2 y prestaron apoyo al Curso de Combatiente Individual para guardiamarinas y cabos segundo que se llevó a cabo simultáneamente en esa zona. “Algunos hombres presentes llegaron recientemente a la unidad. Es importante que ya comiencen a conocer las técnicas”, 6•edición mensual
expresó el teniente de navío Diego Emiliano Durán, jefe de Operaciones de BIVH, en referencia a la importancia de los trabajos. Del adiestramiento también participó un grupo de hombres de la Compañía Comando de ese Batallón, que es la que realiza el mantenimiento sobre las unidades; además del personal del Batallón de Comando y Apoyo Logístico, a cargo de su jefe de Operaciones, teniente de navío Christian Mondiné. Los medios utilizados fueron Vehículos Anfibios a Oruga (VAO), para el transporte de personal y como recuperador; Vehículos Anfibios a Rueda (VAR), para trabajos de carga, con guinche y con radar; y botes de asalto. “El adiestramiento fue muy positivo porque se pudo cumplir con lo esperado en esta ejercitación en técnicas, que sirve para prepararse para los trabajos tácticos del resto del año”, concluyó el teniente Durán.
Las comunicaciones En este adiestramiento las comunicaciones jugaron un papel fundamental. Desde el setter de comunicaciones ubicado en la playa, el suboficial segundo Juan Alejandro Cabrera explicó que “el vehículo tiene un radar de navegación para brindar seguridad a las unidades de nuestro batallón cada vez que ingresan al mar, tanto la Compañía de Botes de Asalto como los VAR o los VAO”. En referencia al trabajo específico, indicó que en primera instancia se vuelca en la carta toda la planificación del ejercicio, “lo que se va hacer. Y con el radar naval montado aquí brindamos los límites para el movimiento de los vehículos, que no lleguen donde están los buques, que no pasen el canal”. A esto agregó que de día “tenemos el contacto visual pero de noche es más difícil; entonces los llevamos con el radar y los controlamos mediante navegación nocturna. Ellos tienen los puntos que están asentados en las cartas en su GPS”.
BIM5 en el terreno
Campaña de adaptación 16 de marzo. El Batallón de Infantería de Marina Nº 5 (BIM5) se adiestró en técnicas básicas de operaciones en el ambiente de baja montaña y monte austral, en la zona centro de la Isla Grande de Tierra del Fuego.
Este adiestramiento, según detalló el comandante del batallón, capitán de fragata Leonardo Natan Gómez, tuvo como finalidad la adaptación del personal recientemente incorporado a la unidad y la revisión para los veteranos. Dentro de los ejercicios se intensificaron las instrucciones y prácticas de patrullas que incluyeron las técnicas referidas a desplazamientos, supervivencia y construcción de refugios; y también técnicas de andinismo como escalada en roca, descenso en cuerda y armado de itinerarios. Como cierre del adiestramiento, el batallón realizó una marcha de ascenso y descenso al cerro Jeujepen, punto característico de esa zona Apoyo Para que el Batallón de Infantería de Marina Nº 5 pudiese cumplir con todas sus actividades y expectativas resultó determinante el apoyo logístico brindado por el Destacamento Naval Río Grande, unidad que aportó servicios de abastecimiento, transporte y sanidad, necesarios para el adecuado desarrollo de la instrucción.
“Fue una verdadera campaña de adaptación. Muchos no conocían el clima y tuvieron que acomodarse rápidamente a condiciones realmente adversas como las que vivimos durante los primeros días en el terreno.” Capitán de fragata Leonardo Natan Gómez, comandante del BIM5 A estas actividades se sumó también personal de la Compañía de Seguridad de la Base Aeronaval Río Grande “Pioneros Aeronavales en el Polo Sur”, que aprovechó la oportunidad para integrarse y compartir vivencias comunes con el personal de la Fuerza de Infantería de Marina Austral (FAIA). Durante los días en que se extendió el ejercicio, el comandante de la FAIA, capitán de navío Luis María Ferrari, estuvo presente en el lugar junto al encargado de la Fuerza, suboficial mayor Oscar Aciar, para presenciar las actividades de adiestramiento.
El BIM4 en acción 15 de marzo. Las actividades de adiestramiento en el terreno del Batallón de Infantería de Marina Nº4 (BIM4) se desarrollaron en la zona de Estancia Remolinos, ubicada a unos 60 kilómetros de Ushuaia a orillas del Canal Beagle, terreno característico del extremo sur de la Isla Grande de Tierra del Fuego. El programa de instrucción abarcó diferentes aspectos del adiestramiento específico en baja montaña y monte austral, cumpliendo así la primera campaña del año. El batallón estuvo a cargo de su comandante, capitán de fragata Javier López, quien junto a su Estado Mayor condujo cada uno de los eventos planificados. Durante los días en el terreno, el BIM4 puso en práctica las técnicas de acción inmediata, navegación terrestre, adiestramiento de embarcaciones menores, sanidad en combate, supervivencia y procedimientos de comunicaciones, explotando fundamentalmente la rigurosidad que imponen el clima y el terreno en esta zona.
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CAV 2013
Logística antártica Diciembre/Abril. Con 800 efectivos de las Fuerzas Armadas junto al personal científico de la Dirección Nacional del Antártico y del Instituto Antártico Argentino se concretó la Campaña Antártica de Verano. Durante su transcurso se efectuaron tareas y acciones de apoyo logístico que comprenden el traslado de los científicos que desarrollan sus proyectos de investigación en la zona, el abastecimiento general a las bases permanentes que el país tiene en el continente antártico y el recambio de la dotación que inverna anualmente.
También se prestó apoyo a los programas antárticos de otros países, se realizó la apertura de bases temporarias, campamentos y refugios. Asimismo, durante la actual CAV se relevó a la dotación que inverna en Belgrano II (77°52ºS) vía aérea, la cual por su ubicación es la base argentina más austral. El período estival es la oportunidad de navegar las aguas gélidas, por ello los hombres y mujeres de la Armada llegaron a bordo de las unidades navales designadas para participar de la CAV, que concluye durante el presente mes. El buque transporte ARA “Canal Beagle” abasteció parcialmente a las bases Orcadas y Carlini. Entre otras tareas, en la primera efectuó el traslado de la dotación que invernará como también del personal de mantenimiento que hizo re-
paraciones en la base centenaria. En tanto que en Carlini realizó la transferencia del personal científico que allí se desempeñó. Asimismo, efectuó la clausura de la base temporaria Decepción, recuperó basura antártica trasladándola al continente para su disposición final de acuerdo a normas específicas y brindó apoyo al buque polar “Timca” de bandera holandesa –arrendado por el Ministerio de Defensa a través del Estado Mayor Conjunto– que se ocupó de abastecer a aquellas bases antárticas que requieren la llegada de un buque con capacidad para navegar en aguas con presencia de hielo. Por su parte, el aviso ARA “Suboficial Castillo” designado para la Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC) que realiza con la Armada de Chile, cumplimentó tareas subsidiarias en la CAV realizando trasladando de personal científico.
La campaña en números • GOA (gasoil antártico): 1250 m3 • Víveres frigorizados: 156 toneladas (300 m3) • Carga general (herramientas, vehículos, equipos de comunicación, ropa, herrería, entre otras): 922 toneladas (2000 m3). • Otros combustibles: 5603 tambores
“Puerto Deseado”: 45 días de operaciones
El buque oceanográfico ARA “Puerto Deseado” zarpó el 25 de enero del puerto de Mar del Plata rumbo a la Antártida y operó durante 45 días hasta recalar en Ushuaia. Su comandante, capitán de corbeta Pedro Fernández, explicó que el “Puerto Deseado” en una primera etapa realizó un muestreo atmosférico de nuestro litoral marítimo desde Mar del Plata hasta la Península Antártica. “Se tomaron muestras de agua para estudiar la salinidad y temperatura y se puntualizaron trabajos en el Pasaje de Drake”. En la Antártida, el personal científico tomó muestras a través de redes “para verificar la diversidad de peces y crustáceos y ver si se encuentran nuevas especies”. Además, según indicó, tomaron muestras geológicas en distintos puntos de la Antártida y realizaron tareas de logística, como el reabastecimiento de la base Decepción, el recambio de personal de algunas bases y la colaboración con las bases Juan Carlos I y Gabriel de Castilla (España) y la base Henryk Arctowski (Polonia). Precisó también que en la segunda etapa se trabajó en la delimitación exterior de la Plataforma Continental Argentina. El buque cuenta con tripulación de la Armada pero siempre lleva a bordo a personal científico, que puede pertenecer al Servicio de Hidrografía Naval, dependiente del Ministerio de Defensa, o de organismos del CONICET u otros, como el Instituto Antártico Argentino o universidades nacionales.
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Guardiamarinas se adiestraron previo al viaje de instrucción
Cuenta regresiva
Más de sesenta guardiamarinas en comisión realizaron diferentes cursos en dependencias y adiestradores de la Escuela de Técnicas y Tácticas Navales (ESTT), a los efectos de capacitarse y adiestrarse para el próximo Viaje de Instrucción que realizarán a bordo de la fragata ARA “Libertad”. 14 de marzo.
Los jóvenes tomaron clases relacionadas con lucha contra incendios y control de averías. En este contexto, además de las exposiciones teóricas de los instructores y las evaluaciones correspondientes, ejecutaron la instancia práctica en los adiestradores con los que cuenta la escuela. En referencia al primero de los cursos, el suboficial principal Juan Carlos Gallardo, encargado de los adiestradores de lucha contra incendio, explicó que “adiestramos en las técnicas de lucha contra el fuego. En ese marco hacemos, entre otras, una práctica con espuma en el adiestrador ecológico recientemente inaugurado, donde no trabajamos con gas oil”. El suboficial principal Walter Daza, instructor del curso, agregó que los guardiamarinas recibieron la teoría básica de acuerdo a la ley 19.587. “Después se apuntó a lo que es el buque, espe-
El guardiamarina en comisión infante de Marina Ignacio Arriaga realizó ambos cursos, con la experiencia adicional de haber sido bombero voluntario en Punta Alta durante tres años de su adolescencia. cialmente la fragata, y lo que es la extinción de un incendio en un espacio confinado”. Asimismo, destacó la experiencia en el laboratorio, “donde vemos la química del fuego, los materiales combustibles de primera y segunda categoría y cuál es la diferencia entre ellos. Porque una cosa es saber la teoría y la otra es la observación. Por ejemplo, mucha gente cree que la harina no se prende fuego y ahí le demostramos que sí. Todo eso se ve en el laboratorio”. Control de averías Los guardiamarinas en comisión realizaron, además, el curso de control de averías tipo americano donde se los adiestró en cómo actuar ante la emergencia en un buque, ya sea por algún siniestro como una inundación, tuberías rotas, casco fisurado o rumbos. Se les enseñó además a realizar apuntalamientos en puertas, tambuchos o cualquier estructura del buque que se haya deformado.
El cabo principal Juan Ramón Morales, instructor del simulador, explicó la situación planteada que los jóvenes debieron resolver. “Este local es un simulador de un compartimento de un buque donde apareció un rumbo (agujero) y ellos lo tuvieron que resolver utilizando los conocimientos que adquirieron en la semana de clases teóricas”. También detalló que en este curso se les dan a conocer los elementos específicos a utilizar y los trabajos a desarrollar. “Les decimos que trabajen organizados, que resuelvan cada incidencia que vaya apareciendo para salir de la situación. Nosotros les damos alternativas y después se los pone en situación a ver cómo salen”.
“El trabajo es diferente; en los bomberos voluntarios nos dedicábamos sobre todo a los incendios de pastizales, domésticos y accidentes vehiculares, y también actuábamos en caso de inundaciones”, explicó, para agregar que “en el buque uno encuentra mucho más peligro porque son espacios confinados, con humo, en los cuales todo es metal que se calienta. El desafío es mayor porque no se puede hacer ventilación ni tirar mucho agua por la inundación del buque”.
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Escuela de Suboficiales de la Armada
Inicio del ciclo lectivo Con una ceremonia en la Plaza de Armas de la Escuela de Suboficiales de la Armada (ESSA) se dio por iniciado el ciclo lectivo 2013. Además, se llevó a cabo el cierre del Período Selectivo Preliminar (PSP). 18 de marzo.
La misma fue presidida por el director de la ESSA, capitán de navío Osvaldo Andrés Vernazza, y contó con la presencia de la Plana Mayor y dotación de la Escuela y los aspirantes de primero, segundo y tercer año.
de la Armada porque la delegación que hay en mi Corrientes natal frecuentaba la escuela secundaria donde yo estudiaba. Al principio tenía un poco de temor debido a que todo era nuevo. Estoy satisfecho con la especialidad que me otorgaron y deseo aprobar a fin de año”, destacó. Juan Zalazar, con 24 años, es aspirante del segundo año en la especialidad Mecánico en Sistemas de Armas Submarinas. “Vengo de Salta y allí hay mucha difusión de la Armada, por eso es
Luego de la lectura de la orden transitoria en la cual el director de la ESSA estableció la finalización del PSP, los aspirantes desfilaron en la Plaza de Armas. El jefe del Cuerpo de Aspirantes, capitán de fragata Gastón Federico Rigourd, mencionó que: “La idea es que los aspirantes tengan la mejor formación posible tanto en el aspecto académico como profesional. Toda la gente va a trabajar en equipo para que algunos a fin de año, y otros en dos años, tengan la mejor preparación. Esta es la base de los distintos destinos navales a futuro”.
Los postulantes que arribaron fueron aproximadamente 1100. Después de un proceso de selección, en el cual se evaluaron las aptitudes físicas y de instrucción militar, fueron 561 los que cumplieron con todos los requisitos de ingreso y admisión. Ellos dejaron la condición de postulantes para pasar a ser aspirantes navales de primer año. Los lugares de donde arribaron fueron Salta, Jujuy, Tucumán, Córdoba, Buenos Aires, San Juan, Mendoza, Santa Fe, Entre Ríos, Trelew, Ushuaia, Río Grande, Río Gallegos, Corrientes, Posadas y la zona Puerto Belgrano. La mirada de los aspirantes Los aspirantes llegaron desde distintos puntos del país, pero más allá de sus diferentes realidades, todos anhelan cumplir con sus objetivos. Proveniente de San Nicolás, con 17 años e ingresando a la especialidad Meteorología, la aspirante de primer año Irupé Ferreyra es un ejemplo de ellos. “Mi idea siempre fue entrar a alguna Fuerza. Al principio estaba nerviosa por el PSP, pero estoy contenta por haberlo pasado. Pondré lo mejor de mí para aprobar”, dijo. Por su parte, Nicolás Cabral es correntino y cursa la misma especialidad. “Tomé conocimiento 10•edición mensual
También en la Escuela de Aprendices 19 de marzo. Más de 70 alumnos iniciaron este año la capacitación en oficios impartida desde la Escuela de Aprendices en las especialidades electricidad naval, motores navales, estructuras navales, carpintería naval y máquinas navales. La ceremonia de inicio del ciclo lectivo 2013 tuvo lugar en el patio cubierto del Departamento Máquinas de la Escuela de Técnicas y Tácticas Navales (ESTT), donde funciona ese establecimiento educativo. Fue presidida por el director, capitán de navío VGM Faustino Lavia. En la oportunidad Lavia agradeció por su presencia “a todos los que forman parte del proceso de gestión de la escuela, que inicia su tercer ciclo lectivo consecutivo”. Además, el director saludó personalmente a cada uno de los nuevos alumnos”.
que suelen venir muchos de esa zona. Al igual que mi compañero, solía ir personal a dar charlas a las escuelas”. “Mi expectativa para este año es conocer gente nueva y mi mayor anhelo es aprobar las materias de la especialidad de Mar y recibirme de cabo segundo”, destacó por su parte Leoncio Quinteros, quien proviene de Santiago del Estero. El joven se enteró de la posibilidad de ingresar a la Armada gracias a un cliente del mercadito que tenía su padre, que era suboficial retirado y le contó qué era la Armada.
PROTAGONISTAS
Guardiamarina en comisión Ariel Palmiteste
Con el pecho henchido de orgullo El guardiamarina Ariel Palmiteste rebalsa de orgullo y alegría. Acaba de bajarse de la fragata ARA “Libertad” y ya tiene un pie en la cubierta de otro gran velero. La Armada de México lo invitó a realizar el crucero de instrucción de su buque escuela ARM “Cuauhtémoc”. Se lo ganó por su desempeño académico y sus altos promedios. Salió primero en su promoción y ahora es el único militar argentino de los 20 invitados extranjeros que acompañará a los cadetes de la Heroica Escuela Naval Militar mexicana en una travesía que navegará mares del norte desde el puerto de Veracruz, en el océano Atlántico, hasta Acapulco, en el Pacífico. “¡Espectacular!”, pensó Palmiteste, de 24 años, porteño, actual jefe de la División X del Departamento Sistemas del destructor ARA “Heroína”. La noticia también le resultó inesperada: “Me tomó por sorpresa. Sabía que por orden de mérito me tocaría una comisión al extranjero pero no lo esperaba tan rápido”. Sus seres queridos compartieron su mismo orgullo y alegría, aunque no pudieron evitar los sentimientos encontrados: “Sabía que mi familia me extrañaría. Y mi novia, que también es guardiamarina y egresó conmigo. Ella lo tomó muy bien, aunque no se imaginó que me iría tan pronto y por tanto tiempo”. Pero a Palmiteste, que se bajó de la fragata “Libertad” en octubre del año pasado cuando el buque escuela estuvo retenido en Ghana, le encanta navegar así: “Son 20.000 millas. Un
montón. Siete meses en los que voy a poder intercambiar conocimientos del arte y las ciencias de navegar”. Volver a un país amigo El guardiamarina Ariel Palmiteste ya había conocido México y había representado allí a la Armada Argentina. En septiembre de 2010, siendo cadete de tercer año de la Escuela Naval Militar, integró la comisión que viajó al Distrito Federal para participar de los festejos por los 200 años de la independencia de ese país. “Era el abanderado de la Escuela. Fuimos 35 personas y fue un desfile de 8 kilómetros por la principal avenida. Impresionante. La gente nos saludaba y nos gritaba ‘¡Viva Argentina!’. En México nos aprecian como argentinos y nos admiran como marinos.”
Gracias a un tío conscripto Palmiteste sostiene que siempre quiso ser militar. Estaba seguro de que iba a ingresar a la Escuela Naval después de la secundaria. “No tenía un plan B”, dice. Lo único que conocía de la Armada eran las experiencias que le transmitió un tío que había sido conscripto en Puerto Belgrano. “Me hablaba de su trabajo en buques que ya ni están, como cuando viajó 5 meses a la Antártida con el rompehielos ARA ‘San Martín’ –recuerda--. Un día me llevó a visitar los buques y a un suboficial amigo y después directo a la Delegación Naval. De ahí me fui con el formulario para inscribirme. Y en febrero de 2008 ya estaba haciendo el reclutamiento.”
Mientras Palmiteste desfilaba, el “Cuauhtémoc” cortaba olas en compañía de los otros grandes veleros que participaban de la Regata del Bicentenario, evento que lo había traído a la Argentina.
Ariel sumó a su hermano mellizo Damián a la carrera naval: “Estudiaba una ingeniería y lo convencí de que entrara a la Escuela Naval. En cuarto año le pasé la bandera. Si sigue siendo el primero de su promoción quizás también le toque un viaje como el mío”.
“Es como regresar a un país amigo”, evalúa.
Y se hincha su pecho otra vez de orgullo.
¿Qué le dejó el viaje en la “Libertad”? “Aprendí muchísimo. Era lo que me faltaba para recibirme de oficial. Pude poner mis conocimientos a prueba todo el tiempo. Había cosas que parecían ocultas y que afloraron a bordo. También forjé amistades. Fue muy triste volver al país en avión, después de 22 días varados en Ghana. Pero cuando pudimos recuperarla, entendimos que fue un hecho histórico.”
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Walter Olave
Marinero segundo
Guardia de honor Homenaje a 31 años de la Gesta de Malvinas en la Fuerza de Infantería de Marina de la Flota de Mar
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