• Año IX • Número 74 • Mayo de 2013 • Publicación de distribución gratuita • redaccion@gacetamarinera.com.ar • www.gacetamarinera.com.ar
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La Armada produce hechos todos los días...
Infantes desembarcaron desde el transporte “Hércules”
Operación
anfibia
CORREO ARGENTINO
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FRANQUEO A PAGAR CUENTA Nº 11054 F
Día de la Sanidad Naval
El 21 de abril se conmemoró el Día de la Sanidad Naval, fecha establecida en homenaje a la creación –en 1879– del cargo de cirujano general de la Armada como jefe del personal médico. Fue mediante un decreto presidencial del doctor Nicolás Avellaneda y el primer designado fue el doctor Pedro Mallo. 21 de abril.
Por este motivo, y entre otras ceremonias que se llevaron a cabo en diferentes destinos navales, en el Hospital Naval Pedro Mallo (HNPM) tuvo lugar el acto conmemorativo central presidido por el jefe del Estado Mayor General de la Armada, almirante VGM Daniel Alberto Martin, acompañado por el director general de Salud de la Armada, contralmirante Alfredo Ricardo Talarico, junto a otras autoridades y personal de Sanidad Naval. La alocución estuvo a cargo de la capitán de navío María Zicre, quien recordó la importancia de la Sanidad Naval a lo largo de la historia y la participación activa del doctor Pedro Mallo, quien prestó abnegado servicio. En sus palabras destacó “la labor incansable de los hombres y mujeres comprometidos con su tiempo y con la Armada, que dejan sus huellas en cada estructura edilicia de nuestros hospitales y enfermerías navales” y la importancia del trabajo en equipo entre los integrantes del escalafón Sanidad y todos los miembros de la Armada.
DIRECTOR Capitán de navío Julio Horacio Guardia SUBDIRECTOR Capitán de corbeta Fernando Sabadín COORDINADORA EDITORIAL Lic. Jimena López Montes SECRETARIA DE REDACCIÓN Lic. Andrea Carabetta ASESOR DE CONTENIDOS Lic. Leandro Fernández DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN D.G/ Ilustr. Natalia S. Saia Claudia Bellido FOTOGRAFÍA Staff de fotógrafos de Gaceta Marinera REDACCIÓN Staff de redactores de Gaceta Marinera ASESORA COMUNICACIONAL STELLA MARIS Lic. Alba M. de Petit DISTRIBUCIÓN Silvana Beltrán Sergio Aristi Impresión Artes Gráficas Papiros S.A.C.I.
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Patrulla Antártica Naval Combinada
Reunión de evaluación Tras la finalización de la decimoquinta Patrulla Antártica Naval PUNTA Combinada (PANC), el comandante ARENAS en jefe de la Tercera Zona Naval, contralmirante Kurt Hartung Sabugo, y el jefe de Estado Mayor del Área Naval Austral a cargo del Comando, capitán de navío Edmundo Vitaliano Vives, se reunieron en Punta Arenas para evaluar su desarrollo. 22 de abril.
La PANC Es una operación realizada por las Armadas de Chile y Argentina desde 1998 con la misión de salvaguardar la vida humana en el mar, proteger el medio ambiente marino y dar apoyo mutuo ante emergencias en la Antártida.
En la reunión se expusieron las conclusiones de la experiencia vivida por las tripulaciones de los buques participantes. Al respecto, el contralmirante Hartung destacó que “la evaluación de esta operación binacional es altamente positiva, debido a que durante la temporada estival –donde se produce la mayor cantidad de tránsito desde y hacia la Antártida– no se registraron accidentes”.
La patrulla se lleva a cabo ininterrumpidamente entre noviembre y marzo de cada año. En esta oportunidad se alternaron las etapas el ATF “Lautaro” de la Armada de Chile y el aviso ARA “Suboficial Castillo” de la Armada Argentina.
Este verano las unidades navegaron 15.754 millas náuticas, embarcaron a 140 personas, visitaron 31 bases y refugios en la Antártida y establecieron comunicaciones con 159 embarcaciones que durante el verano surcaron aguas más australes del Atlántico Sur.
averías en el casco, debiendo evacuar a un herido para recibir asistencia médica y teniendo que controlar, además, la contaminación marina con la ayuda de barreras de contención y equipos separadores de petróleo”.
Por su parte, el capitán Vives enfatizó que dentro de los ejercicios realizados por ambas Armadas “simulamos que uno de los buques sufrió
Ambas autoridades destacaron que en el marco del ejercicio se desarrolló de manera combinada –con participación de un buzo argentino y uno chileno– una actividad de inspección submarina con el objetivo de medir las capacidades de reparación de un posible rumbo.
Infantes desembarcaron desde el transporte “Hércules”
Operación anfibia
29 de abril. Infantes de Marina pertenecientes al Batallón de Infantería Nº 2 (BIM2) embarcaron en el transporte rápido multipropósito ARA “Hércules” para desarrollar una operación anfibia con un desembarco en la playa de la Base de Infantería de Marina Baterías.
La operación se dividió en tres etapas: la primera, de embarco, tuvo lugar en la Base Naval Puerto Belgrano. Consecutivamente se realizaron actividades de embarco y desembarco de los infantes y transbordo sobre embarcaciones menores que se encontraban amadrinados al “Hércules”, unidad dependiente del Comando Naval, Anfibio y Logístico (COAL). La tercera etapa consistió en el asalto de la Compañía Delta del BIM2 –reforzada con elementos del Batallón Antiaéreo, de Vehículos Anfibios, de Comunicaciones, de la Compañía de Ingenieros Anfibios y de Apoyo Logístico– que realizó un desembarco en dos olas sobre la playa de Punta Tejada.
A posteriori se sumaron la Compañía Eco del Batallón y aspirantes de la Escuela de Suboficiales para realizar una maniobra en la ocupación de dos objetivos distintos, permitiendo el desembarco de una fuerza terrestre. La participación del BIM2 incluyó la ocupación de una zona de reunión y de ahí regresaron a la playa, para finalizar con el desarrollo del ejercicio. “El objetivo de la operación anfibia se cumplió con creces. El mismo consistía en la consolidación de los conocimientos que posee nuestra gente y que los jefes de fracciones puedan conducirlas, que es lo más importante que tiene esta profesión”, manifestó el capitán de fragata Ricardo Alberto Díaz, comandante del BIM2. Los medios utilizados para la práctica fueron vehículos anfibios a oruga, para el transporte de personal y como recuperador; vehículos anfibios a rueda, para trabajos de carga, con guinche y con radar; y botes de asalto.
A bordo El transporte rápido multipropósito ARA “Hércules” zarpó el lunes 29 desde la dársena de Puerto Belgrano para participar la operación anfibia, de la que formaron parte alrededor de 500 personas entre la dotación del buque, infantes de Marina, personal de la Escuela de Suboficiales, guardiamarinas provenientes de otros buques, cadetes de la Escuela Naval y quienes se sumaron en tierra. A bordo del “Hércules” se realizaron ejercicios de lucha contra incendio, rol de abandono (diurno y nocturno) y de combate, adiestramiento a nivel unidad, búsqueda y rescate, ajuste de roles y técnicas de desembarco.
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Con unidades de la Flota
Adiestramientos individuales en el mar Abril. Unidades de la Flota de Mar realizaron ejercicios de adiestramiento con el objetivo de ajustar los roles de los buques en sus diferentes facetas, en cumplimiento de la orden de operaciones emanada del Comando de la Flota de Mar.
“Estoy muy contento con el desempeño de la gente que da respuesta y por cómo consolidan tan rápido el trabajo en equipo.” Capitán de navío Rafael Gerardo Prieto, comandante de la División de Destructores.
Así, los destructores ARA “Brown” y ARA “Sarandí” de la División de Destructores, las corbetas ARA “Robinson”, ARA “Gómez Roca”, ARA “Parker” y ARA “Espora” de la División de Corbetas y el transporte rápido multipropósito ARA “Hércules” del Comando Naval Anfibio y Logístico verificaron durante la navegación el estado de alistamiento y chequearon los conjuntos operativos. Las jornadas de navegación comprendieron diversos roles y maniobras en los que participaron la totalidad de los integrantes de las planas mayores y dotaciones de los buques que realizaron sus adiestramientos individuales. En algunas de las jornadas, las unidades navales interoperaron con un helicóptero Fennec de la Primera Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros. Tanto las corbetas como los destructores y el transporte rápido multipropósito ajustaron roles de maniobras, de emergencia y de combate.
Ceremonia de Lista Mayor Comandantes de unidades de segunda y tercera clase de la Flota de Mar dieron el parte operativo a su comandante, contraalmirante Julio Alberto Graf.
23 de abril.
En la Plaza de Armas “Capitán de Fragata Sergio Raúl Gómez Roca” formaron las planas mayores y dotaciones de unidades de la Flota de Mar, de la Fuerza Aeronaval Nº2 y de la Fuerza de Infantería de Marina de la Flota de Mar. El comandante de la Flota de Mar, una vez incorporada la bandera de guerra, revistó al personal, con el acompañamiento de la Banda de Música de la Base Naval Puerto Belgrano, que ejecutaba la marcha Avenida de las Camelias. Luego, los comandantes de las unidades de segunda y tercera clase dieron el parte operativo al contraalmirante Graf, quien brindó palabras a la formación.
“Cada navegación es una oportunidad para que el comandante y su dotación puedan hacer ajustes de roles.” Capitán de navío Alejandro Daniel Verde, comandante de la División de Corbetas. 4•edición mensual
Agrupación Buzos Tácticos
Homologación de paracaídas La Agrupación Buzos Tácticos (APBT) homologó paracaídas recientemente incorporados con el apoyo de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, el Centro de Adiestramiento de la Fuerza Aeronaval Nº 2 (CIFA) y la Agrupación Comandos Anfibios.
equipos y cada paracaidista redactó un informe sobre el material utilizado. Luego ese legajo fue llevado junto con los equipos al Arsenal de la Base Comandante Espora donde el personal efectivizó una revisación completa de los equipos y una lectura minuciosa de los informes realizados por los paracaidistas de prueba”.
“Cuando la Armada incorpora material de paracaídas debe, antes de ponerlo en servicio, hacerle la prueba de homologación. La misma consta de una inspección ocular donde se verifica que los sistemas de despliegue y desprendimiento funcionen correctamente; y en segundo lugar, se efectiviza el lanzamiento de prueba donde se analiza la parte técnica de los equipos”, explicó el suboficial mayor y paracaidista de prueba de la Agrupación Comandos Anfibios Juan Carlos Pérez.
Como todos los datos fueron normales se habilitaron los equipos para el empleo por parte de la agrupación.
18 de abril.
Los equipos de la Agrupación Buzos Tácticos fueron de apertura manual, paracaídas de combate y de apertura automática de procedencia norteamericana. El comandante de la Agrupación Buzos Tácticos, capitán de corbeta Martín Méndez, comentó: “Hicimos un ejercicio completo de paracaidismo en el cual realizamos saltos con apertura manual y homologación de equipos que quedaron con la parte técnica realizada, aumentando nuestra capacidad”. A fin de poner en servicio en la Armada los nuevos sistemas de paracaídas de alta infiltración, cinco inspectores pertenecientes al Arsenal Naval Comandante Espora, a la Agrupación de Comandos Anfibios, al CIFA y a la Agrupación Buzos Tácticos realizaron los saltos de prueba de los equipos. Estos saltos se realizan con personal especialmente capacitado como paracaidista de prueba. “Para poder llevarlos a cabo se necesita una habilitación. Además de ser paracaidista, se exige una cierta cantidad de requisitos para luego realizar un curso que habilita a ser paracaidista de prueba”, explicó el suboficial Pérez. El comandante de la APBT, en tanto, señaló que “se realizaron dos saltos por cada uno de los
“La homologación de paracaídas es un ejercicio que requiere del apoyo de una escuadrilla de helicópteros, por este motivo coordinamos anualmente con la Base Comandante Espora. Hacemos el requerimiento de las horas de vuelo y a partir de allí realizamos la conexión entre los destinos. Luego trabajamos en forma integrada logrando una optimización de los recursos.” Capitán de corbeta Martín Méndez, comandante de la APBT
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Agrupación Comandos Anfibios
Prácticas en técnicas anfibias La Agrupación Comandos Anfibios (APCA) se desplegó hasta Puerto Madryn como parte de su adiestramiento en ambientes geográficos particulares. Aprovecharon allí las ventajas que posee dicha zona y realizaron la práctica de actividades relacionadas con las técnicas anfibias. 8 al 25 de abril.
Durante la campaña se efectuaron numerosas instrucciones de buceo con itinerarios preparados desde las distintas plataformas; buceo con plancheta (compás para la navegación) y sembrado y recuperación de nadadores. También se desarrollaron formaciones con botes; ejercitación de entrada y salida de playa sorteando rompientes, ya sea a nado, con botes neumáticos a remo y/o motor; volteo de botes; trabajos con kayaks y buceo de casco en cercanías del “Folias”, buque hundido en el lugar. Como cierre de la campaña tuvo lugar un ejercicio de instrucción en el terreno donde las secciones efectuaron una incursión anfibia y aplicaron diferentes técnicas de comandos, realizando supervivencia en el desierto patagónico durante tres días.
“Se cumplieron con éxito todas las actividades planificadas, logrando mantener un adecuado nivel de adiestramiento en técnicas anfibias.” Suboficial segundo José Acosta
El contralmirante VGM Oscar Patricio González, comandante de la Infantería de Marina, visitó a la Agrupación durante su instrucción en Puerto Madryn En la oportunidad expresó que “las bondades que brinda el Apostadero Naval Puerto Madryn en lo que respecta al alojamiento y habitabilidad del personal en instrucción, sumado a las excelentes condiciones hidrometeorológicas que otorga el área de operaciones, permiten a esta unidad adiestrarse en técnicas especiales anfibias como son el buceo y el empleo de botes neumáticos”. Este adiestramiento implica, como muchos otros, el empleo de diferentes técnicas y procedimientos específicos como parte de la rutina de la Agrupación, que asume el compromiso de mantener una condición de alistamiento tal que le permita responder sin demoras a los requerimientos de la Armada.
“El personal de la Agrupación se aloja en el apostadero, cuyas instalaciones brindan las comodidades necesarias para un buen descanso luego de las arduas jornadas de trabajo.” Teniente de navío Tomas Rodolfo Duca, segundo comandante 6•edición mensual
“Este tipo de adiestramiento es importante para la Agrupación Comandos Anfibios, ya que nos permite estar preparados para ejecutar incursiones anfibias en un ambiente geográfico particular como es el desierto patagónico, uno de los terrenos más extensos y menos poblados que linda con el mar argentino.” Capitán de corbeta Eduardo Javier Mateo, comandante de la Agrupación Comandos Anfibios
En el 33º aniversario de la Brigada de Explosivos
Intercambio y capacitación La Brigada de Explosivos de la Policía de Establecimientos Navales (PEN) Puerto Belgrano convocó a personal de diferentes Fuerzas de Seguridad de todo el país para realizar jornadas de intercambio y capacitación.
llazgos y, principalmente, seguridad con el material. Realizaron diversas voladuras y pernoctaron en el lugar para llevar a cabo ejercitaciones nocturnas.
Los efectivos compartieron conceptos y experiencias durante instancias teóricas y prácticas, que les significaron actualizarse en manejo de materiales explosivos, elementos y medidas de seguridad, como también en diversos procedimientos.
“Es la cuarta vez que vengo y vuelvo por el nivel del personal de la Brigada de Explosivos, por su gran experiencia y por las intervenciones que realizan dentro y fuera del ámbito de la base naval; tienen una experiencia y reputación que es bueno que compartan”, explicó el oficial principal encargado Martín Ignacio Portillo, perteneciente al grupo especial de Policía de la Provincia de La Pampa, con asiento en General Pico.
15 al 19 de abril.
Este curso de instrucción, que se realiza desde 2006, se llevó a cabo en el marco del 33º aniversario de la creación de la brigada, fecha que se conmemoró el 20 de abril. El personal invitado arribó a Puerto Belgrano el lunes 15 procedente de brigadas de explosivos y grupos especiales de las policías provinciales de Santa Cruz, Mendoza, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Santa Cruz, Santa Fe y de los Servicios Penitenciarios Nacional y de la Provincia de Buenos Aires. También se sumó un cabo principal del Servicio de Salvamento de la Armada. Ese día comenzaron los encuentros de instrucción teórica en instalaciones de la comisaría de la PEN, que incluyeron disertaciones y presentaciones audiovisuales. “Para nosotros, esta es una buena oportunidad de brindar conocimientos sobre munición regular reglamentaria, ya que contamos con muchísima experiencia al respecto”, explicó allí el oficial inspector Marcos Zandoná, jefe de la Brigada de Explosivos de la Policía de Establecimientos Navales y responsable de las jornadas. A partir del miércoles 17 se desplegó gran cantidad de medios en el campo de instrucción de la brigada adonde se trasladó todo el personal para desarrollar las prácticas. La instrucción abordó tipos de explosivos, técnicas ante ha-
Brigada de alto nivel
Asimismo destacó que es bueno repasar los protocolos de intervención para que el personal esté afianzado con los explosivos, a los efectos de que al momento de proceder actúe con seguridad. Por último, detalló que en General Pico “no se cuenta con tantas intervenciones, lo que no significa que no haya que estar preparado ante una eventualidad y ésta es una buena forma de hacerlo”.
Los instructores evaluaron permanentemente el nivel de conocimientos de todos los participantes y luego de cada práctica registraron datos y conclusiones. Durante las jornadas, la seguridad fue la premisa, por lo que el personal menos experto pudo trabajar con confianza y aprovechar todas las instancias. “El intercambio nuestro con la PEN ya venía desde ediciones anteriores y para nosotros es importante volver cada vez, ya que aunque llevamos muchos años en trabajo con explosivos, nunca está de más el intercambio de conocimientos. Siempre surge algo nuevo en la materia y lo exponemos en estas prácticas y ejercicios”, expresó el subcomisario Luis Donoso, jefe de la División Táctica y Explosivos de la Policía de la Provincia de Mendoza. El oficial también destacó “la importancia de trabajar en un campo de instrucción de primer nivel, con el que pocas Fuerzas cuentan y que resulta fundamental para el óptimo desarrollo de las ejercitaciones”. Luego de la instancia práctica, autoridades de la Policía de Establecimientos Navales entregaron certificados de asistencia a las jornadas a los participantes.
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Adiestramiento
Simulacro de accidente En la pista auxiliar de la Base Aeronaval Punta Indio (BAPI) se realizó un simulacro de accidente de una aeronave T-34C Turbo Mentor del que participaron aproximadamente 300 personas destinadas allí, incluidos los grupos que integran el Plan de Emergencia de la BAPI que se adiestraron en sus tareas específicas. PUNTA INDIO
18 de abril.
La actividad fue dirigida por el entonces jefe de la base aeronaval, capitán de navío Julio Fabián Gandolfo, y comprendió tres etapas. En la primera se extinguió el fuego producido como consecuencia del accidente de aviación; en la segunda, rescataron a la tripulación afectada que fue asistida por el Grupo de Asistencia Médico; y finalmente, se procedió a rescatar la aeronave siniestrada mediante el uso de una grúa y su respectivo grupo de remoción. “El objetivo fue detectar fallas del procedimiento y falencias en equipos técnicos al mismo tiempo que se adiestró al personal”, explicó el
comandante de la Escuadrilla Aeronaval N°1, capitán de fragata Gustavo De Coro, quien agregó que al concluir la ejercitación “se efectúan las correcciones correspondientes para que en un caso real se ejecuten las acciones de la mejor manera posible”. La importancia de realizar periódicamente este tipo de ejercitaciones radica en que los sistemas de emergencia son responsabilidad de la Armada Argentina en su condición de aeródromo exclusivamente militar. Al mantener adiestrado al personal se aspira a preservar las vidas y el material. Por otra parte, la práctica del barrido de pista es una “preocupación permanente porque en las plataformas y pistas de aviación se depositan elementos peligrosos como tornillos, clavos, piedras y remaches propios de aeronaves como de vehículos que circulan circunstancialmente por allí”, destacó el capitán De Coro.
Lucha contra incendios: instalaron un adiestrador portátil 22 de abril. En la Base Naval Ushuaia quedó instalado y habilitado el simulador de lucha contra incendios diseñado y fabricado en la Escuela de Técnicas y Tácticas Navales de la Armada (ESTT) ubicada en la Base Naval Puerto Belgrano, de donde fue trasladado hacia el sur a bordo del transporte ARA “Bahía San Blas”.
Una vez arribado a Ushuaia fue instalado por personal destacado de la ESTT y personal del Departamento Talleres de la Base Naval Ushuaia. Para poder habilitarlo, personal de los destinos con asiento en la ciudad de Ushuaia que se encontraba realizando el Curso de Lucha contra Incendio impartido por instructores de la ESTT, realizaron ejercicios. Las pruebas arrojaron resultados satisfactorios dando por finalizado el primer Curso de Lucha Contra Incendio utilizando el nuevo adiestrador. Para difundir las facilidades que brinda este simulador participó, además, personal de la Prefectura Naval Argentina y de Bomberos de Ushuaia.
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A 31 años del hundimiento del crucero ARA “General Belgrano”
Eterno homenaje
2 de mayo. 31 años pasaron desde que el crucero ARA “General Belgrano” se hundió en las frías aguas del sur. Fue 16 días después de que partiera de su apostadero natural ARGENTINA en Puerto Belgrano en pleno desarrollo de la guerra de Malvinas. Cayeron 323 hombres y sobrevivieron 770 que tienen grabada a fuego en su memoria aquella tarde del 2 de mayo de 1982.
El hundimiento del “Belgrano” es una de los hechos más significativos de la historia naval y la Armada cada año rinde un justo y merecido homenaje con ceremonias a lo largo de todo el país. El ministro de Defensa, doctor Arturo Puricelli, junto al jefe del Estado Mayor General de la Armada, almirante VGM Daniel Alberto Enrique Martin, encabezaron el acto que tuvo lugar en el Edificio Libertad. Participaron del acto, además, el secretario de Estrategias y Asuntos Militares, licenciado Oscar Cuattromo; y los jefes del Estado Mayor Conjunto, brigadier general Jorge Chevallier; del Ejército, teniente general Luis Pozzi; de la Fuerza Aérea, brigadier general Normando Constantino; y de la Prefectura Naval, prefecto general Luis Alberto Heiler. En la ocasión, el capitán de navío VGM Gustavo Enrique Castillo, quien era uno de los guardiamarinas tripulantes del crucero “Belgrano” en 1982, recordó vivencias y la rutina de a bordo hasta el momento del hundimiento.“Conformábamos
un grupo con el destructor ARA ‘Bouchard’ y el ARA ‘Piedrabuena’, con el propósito de defender el sector sur del Teatro de Operaciones marítimo. Tamaña tarea para un escaso número de buques; esa fue la misión y así nos aprestamos para cumplirla, conscientes del riesgo que ello implicaba”, expresó. Luego de recordar el primer impacto de torpedo y los momentos vividos junto a sus compañeros, agregó: “Finalmente, 770 tripulantes serían rescatados, y volvieron al seno familiar, y 323 fueron los que dieron su vida, para convertirse en héroes nacionales (…) Estamos aquí reunidos para rendirles un justo homenaje y para dar testimonio de que estos héroes han cumplido cabalmente su juramento a la Patria, al seguir constantemente a su bandera, defendiéndola hasta perder la vida”. En el sitio que lo vio partir En Puerto Belgrano, en el monumento erigido en su honor frente al Comando de la Flota de Mar, el acto fue presidido por el comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada a cargo, contraalmirante VGM Oscar Patricio González, acompañado por el intendente del Partido de Coronel Rosales, ingeniero Néstor Hugo Starc También estuvieron presentes el comandante de la Flota de Mar, contraalmirante Julio Alberto Graf; el comandante de la Aviación Naval, contraalmirante Hugo Manuel Vives; y el jefe de la Base Naval Puerto Belgrano, contraalmirante
VGM Juan Carlos Temperoni, entre otras autoridades civiles y militares. En la oportunidad el contraalmirante Graf pronunció palabras alusivas, en las que recordó el trágico suceso ocurrido hace 31 años como también a los 323 tripulantes que quedaron en el camino. Se dirigió, además, a los hombres y mujeres que hoy tripulan las unidades de combate en el mar, en el aire y en la tierra. “La profesión de marino militar ha sido, es y será riesgosa por definición. Este atributo debe ser asumido e interpretado cabalmente por quienes han decidido voluntariamente hacer de ella su vida”. Finalmente, a los familiares de quienes perdieron sus vidas a bordo del crucero les recordó que “su eterno legado debe ayudarnos a fortalecer la disposición para el servicio y guiarnos hacia un futuro mejor”.
“El hundimiento del crucero nos lleva a la reflexión del honor y la gloria en cumplimiento del deber, nos lleva también a revalorizar el coraje, la subordinación y el heroísmo, que es lo que a una Fuerza Armada la templa para encarar los desafíos del futuro.” Doctor Arturo Puricelli, ministro de Defensa
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Los aspirantes de Infantería de Marina realizaron trabajos en el campo
Primera campaña
Los aspirantes de la Escuela de Suboficiales de la Armada (ESSA) de la especialidad Infantería de Marina desarrollaron ejercicios de instrucción de pelotones y tropas en el terreno. 8 al 13 de abril.
Tuvieron lugar en campos de instrucción de la Base de Infantería de Marina Baterías y contaron con la particularidad de que hubo un número equivalente de aspirantes varones y mujeres. La Escuela de Suboficiales de la Armada incluye en su Plan la realización de períodos de instrucción en el terreno para los aspirantes navales de Infantería de Marina con el objetivo de que desarrollen y afiancen habilidades en las técnicas básicas de combatiente individual y que adquieran conocimientos y experiencia en la conducción de fracciones menores de nivel pelotón. Esta actividad tuvo como fin que los aspirantes puedan plasmar en el campo todo lo que se aprendió en las aulas. El segundo jefe de la Agrupación Infantería de Marina, teniente de fragata José Eduardo Gómez, contó que: “La capacitación en el terreno permite desenvolver las capacidades y lo aprendido en clase haciendo ejercicios propios del escalafón. Se busca
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“La sensación de estar en el campo es muy diferente a la de estar en el aula. El año pasado aprendimos todo lo referido a combate individual y este año comenzamos a trabajar y a ejercitarnos a nivel grupo. Aprendimos mucho y eso es lo importante,” Aspirante de segundo año de Infantería de Marina Leandro Ávalos
que el hombre sienta el ejercicio, cuestión que en el aula es difícil de visualizar en un pizarrón”. Asimismo, el encargado de la agrupación, suboficial primero Leandro Achor explicó: “El campo es el ambiente del infante de Marina y en él las situaciones van cambiando. Ellos no saben cuál es la próxima actividad que van a realizar, por eso tienen que estar muy atentos en todo momento. Entendemos que en el campo es donde se entrena y se practica todo lo que se ve en la escuela, además es donde se van a desarrollar como militares el resto de su carrera”. “En esta campaña llevamos a los dos años. Como para primer año fue la primera campaña, realizaron ejercicios básicos que incluyeron desde cómo caminar hasta cómo dormir en el campo. Con segundo año trabajamos al nivel de
fracciones menores; realizaron desplazamientos, navegación diurna y nocturna”, comentó el suboficial Achor. Del mismo modo, el teniente Gómez detalló: “Durante el primer año ellos tienen instrucción de lo que son las técnicas básicas de un combatiente individual, aprenden a caminar, a vivir y desenvolverse en el terreno. Mientras que en segundo año se apunta más a las técnicas de grupo o conjunto. Los aspirantes tienen la capacidad de conducir a sus compañeros, decidir sobre acciones o situaciones que se le plantean sobre el terreno”.
En el 2013 se inauguró la orientación Infante de Marina dentro del escalafón Infantería de Marina para reforzar y trabajar otros aspectos específicos antes de que los egresados se incorporen a los destinos. El primer año es básico para todos los infantes de Marina y en el segundo optan por la orientación, que puede ser: Artillería, Infantería, Auxiliar de Comando, Motorista o Comunicaciones.
PROTAGONISTAS
Suboficial principal Salvador Ramón Aguilera
Un maquinista con experiencia En uno de los campos cercanos a San Rafael, en el departamento Cuadro Benegas (Mendoza), Salvador Ramón Aguilera se interiorizaba sobre la Armada Argentina a través de la lectura. Sin buscarlo, una pasión lo llevó a la otra. A los 16 años, con la convicción firme, se anotó para ingresar en la Marina. Aguilera contó que: “Dentro de las tres ramas de las Fuerzas Armadas me gustaba el mar porque une. Siempre me llamó la atención la idea de navegar”. “Rendí en el colegio Rodolfo Iselin de San Rafael. Por un lado, nos tomaron la parte física y, por el otro, las materias. Al mes me llegó la carta que había ingresado y que debía presentarme en la estación de trenes, la felicidad fue enorme”, dijo el mendocino. En el campo donde vivía Aguilera pasaban pocos colectivos y ninguno lo dejaba en el horario en el que tenía que presentarse en el andén para partir hacia Buenos Aires. Por este motivo le pidió al novio de su prima que lo lleve. Pasó a las 12 de la noche por su casa. El futuro aspirante lo esperaba en la tranquera con el bolso en mano y la mochila puesta. Partieron hacia San Rafael donde tomó un colectivo que lo dejó en la estación de tren de la capital provincial. “Después de salir de la escuela, mi primer destino fue la Base Aeronaval Punta Indio. Los primeros tres meses fui a una división que se llamaba Infraestructura. Como no había cabo segundo de mi especialidad en el cuartel de bomberos, me destinaron allí. Hacíamos guardia con las tres autobombas y mi tarea específica fue encargarme de los matafuegos”. A partir de allí pasó por diferentes destinos, siempre dedicando el máximo de su esfuerzo. Entre ellos, estuvo en el buque hospital ARA “Bahía Paraíso” con el que combatió en la guerra de Malvinas. Durante el conflicto, en una primera etapa ayudó a evacuar al personal civil que se encontraba en Georgias y durante el conflicto el buque brindó apoyo logístico y funcionó como sanatorio. También trabajó en el portaviones ARA “25 de Mayo”, la Base Naval Ushuaia, el buque escuela fragata ARA “Libertad”, la corbeta ARA “Guerrico”, la Base de Infantería de Marina Baterías, el transporte ARA “Hércules” y, actualmente, está destinado en la Escuela de Técnicas y Tácticas Navales. Aguilera, hoy Luego de 32 años en la Armada conserva la misma alegría y pasión que aquel primer día. Es suboficial mayor VGM especialidad Control de Averías, escalafón que sin dudar eligió en la escuela donde se formó. “A mí me gustaba el control de averías porque tenía muchas materias y es una especialidad muy completa”, dijo Salvador.
En la ESTT Aguilera es uno de los encargados de capacitar al personal militar y civil en los cursos de control de averías. “Me encanta trabajar en esto, con mi grupo de trabajo estamos pensando siempre en superarnos y en hacer cosas nuevas”. Teniendo como base esos deseos de superación constante formó parte del equipo que realizó los primeros adiestradores
portátiles de lucha contra incendio y control de averías. Aguilera se emociona al repasar su carrera dentro de la Fuerza: “Lo disfruto mucho y espero poder retransmitir todo lo que aprendí aquí. Me siento muy satisfecho con la Armada, me formó como persona de bien”.
El valor de la familia El suboficial Aguilera lo resalta a cada instante. Está casado con Nora Ester Varas a quien conoció en su Mendoza natal y tiene tres hijos a quienes supo transmitir los valores de la Armada. Todos ingresaron a la institución: su hijo mayor, Cristián Iván, es teniente de corbeta; el segundo, Gastón Sebastián, es cabo segundo electricista; y su hija menor, Fátima Lucía, está en el segundo año de la Escuela Naval.
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Jorge Luis Cortez Cabo primero
Servicios
Transporte ARA “San Blas”
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