• Año VIII • Número 69 • Octubre de 2012 • Publicación de distribución gratuita • redaccion@gacetamarinera.com.ar • www.gacetamarinera.com.ar
edición mensual
La Armada produce hechos
todos los días...
Flota de mar
Etapa de adiestramiento
CUENTA Nº 11054 F
FRANQUEO A PAGAR
Pág. 6 y 7
CORREO ARGENTINO
VI Jornadas Federales
13 y 14 de septiembre - Puerto Belgrano. Durante dos
días tuvieron lugar en Puerto Belgrano las VI Jornadas Federales de la Red de Bibliotecas de las Fuerzas Armadas, en las que bibliotecarios de las Fuerzas Armadas, del Estado Mayor Conjunto y otras dependencias del Ministerio de Defensa participaron intensamente. Las jornadas se realizan una vez por año y es allí donde se plantean diferentes temáticas vinculadas a la tarea de los bibliotecarios. En noviembre de cada año se lleva a cabo un encuentro donde una biblioteca se postula para el año próximo. Finalizadas las jornadas, una vez al mes, los bibliotecarios tienen un encuentro en la ciudad de Buenos Aires –en Casa Amarilla o en el Centro Naval– a manera de capacitación e intercambio de tareas con colegas. Con respecto a la importancia del encuentro, María de los Ángeles Mariscal –encargada de la Biblioteca de la Escuela de Oficiales de la Armada (ESOA)– concluyó: “Esto nos sirve para crecer, para vincularnos, para conocernos, para mejorar y para estar en contacto entre todas las bibliotecas”. Y agregó que el grupo resultó sumamente motivado e incentivado a crecer, “estoy muy gratificada con la ESOA por haber participado de algo tan importante”. La jornada permitió la recorrida de los participantes por la Base Naval Puerto Belgrano, ya que muchos de ellos no conocían la zona. También estuvieron en la Base Aeronaval Comandante Espora. “Allí tuvimos un intercambio muy importante con profesores y licenciados de la Universidad Nacional del Sur”, mencionó.
DIRECTOR Capitán de navío Julio Guardia SUBDIRECTOR Capitán de fragata Gustavo Lioi Pombo COORDINADORA EDITORIAL Lic. Jimena López Montes SECRETARIA DE REDACCIÓN Lic. Andrea Carabetta ASESOR DE CONTENIDOS Lic. Leandro Fernández DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN D.G/ Ilustr. Natalia S. Saia Claudia Bellido FOTOGRAFÍA Staff de fotógrafos de Gaceta Marinera REDACCIÓN Staff de redactores de Gaceta Marinera ASESORA COMUNICACIONAL STELLA MARIS Lic. Alba M. de Petit DISTRIBUCIÓN Silvana Beltrán Sergio Aristi Impresión Artes Gráficas Papiros S.A.C.I.
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Para contribuir con la seguridad
Formación de canes 10 de septiembre.
En instalaciones del Comando de Instrucción y Evaluación de la Infantería de Marina (COIE) se realizó por primera vez el adiestramiento de 11 canes de la Agrupación Perros de Guerra (APG). El objetivo fue su preparación para actuar ante diversas situaciones de complejidad.
Con respecto al balance de la capacitación, el suboficial Sajama mencionó que “las actividades fueron un éxito. Ya se está evaluando dentro del comando del batallón y del COIE la posibilidad de que se vuelvan a realizar nuevos ejercicios, teniendo como referencia las conclusiones sacadas luego de la primera capacitación”.
Los ejercicios que ejecutaron en conjunto guíacan estuvieron destinados al progreso en diferentes áreas tales como la búsqueda, el rescate y ejercicios de acordonamiento; además de la práctica de destrezas, como la de bajar por un arnés integral para trabajar con el can en ambientes urbanos.
Esa etapa de adiestramiento finalizó con una marcha desde la Base de Infantería de Marina Baterías hasta las dependencias de la APG en Puerto Belgrano.
“Cada pista tiene un instructor que está a cargo y que guía las acciones”, explicó el suboficial segundo Sergio Javier Sajama de la APG del Batallón de Seguridad de la Base Naval Puerto Belgrano.
La Agrupación Perros de Guerra nació en 1965 bajo el concepto de empleo de la raza ovejero alemán como medio de vigilancia y seguridad para la Base Naval Puerto Belgrano.
Las actividades se desarrollaron en la Pista Acuática Militar, la Torre Multipropósito, Close Combat y Pista de Combate Urbano, con la finalidad ulterior de incrementar el nivel de preparación en pos de la seguridad de la base naval.
El personal y los canes demostraron superación, voluntad y esfuerzo a la hora de realizar las actividades de adiestramiento propuestas por la Agrupación Perros de Guerra.
Historia
Se inició con asesoramiento de la Policía Federal Argentina que donó los primeros animales adiestrados y capacitó con cursos al personal de la Armada Argentina formando los primeros instructores de perros de guerra.
Anfibio
Gran despliegue de hombres y unidades 3 de septiembre. La Infantería de Marina, el Comando de la Flota de Mar, el Comando Anfibio y Logístico (COAL) y la Aviación Naval desarrollaron actividades en el marco de un nuevo adiestramiento anfibio de cara al ejercicio UNIDEF que tiene como protagonistas a las tres Fuerzas Armadas.
Para esta operación se marcó una situación ficticia que consistió en la recuperación de un terreno con capacidades energéticas y petroleras bajo control del enemigo. La incursión buscó recuperar el control de la zona. “En ese marco nos encontramos con un enemigo simulado que se encontraba desplegado en el terreno y realizamos esta operación para poder incidir en el mismo”, explicó el capitán de fragata Miguel Ángel Troitiño, jefe de Operaciones de la FAIF. Luego del desembarco se ejecutó un movimiento helitransportado de infantes de Marina que realizaron un avance con fuego en movimiento y apoyo de fuego naval, simultáneamente, sobre la zona del objetivo. Luego, se cumplió con una serie de objetivos intermedios en vista de tomar el control en la zona de responsabilidad táctica. “La exigencia y las complicaciones fueron mayores en este Anfibio por diversas razones. La mayoría de los ejercicios eran nocturnos, aumentando la exigencia del personal. Las lluvias, la neblina, los fríos y el viento condicionaron la visibilidad del personal y complicaron la realización de distintas actividades”, dijo el capitán
Participantes
de navío César Recalde, comandante Naval Anfibio y Logístico al explicar que las condiciones climáticas desfavorables fueron una forma de acercarse a una realidad posible. Asimismo, el capitán Recalde aseguró que “se vieron progresos en términos cuantitativos en diversos aspectos y el adiestramiento fue altamente positivo. Uno de los objetivos de esta ejercitación fue la motivación de las personas
y, en ese sentido, se hicieron diversas actividades”, concluyó el COAL. Por su parte, el capitán Troitiño destacó que “fue un ejercicio muy complejo. Cuando nos fijamos el devenir de 2012 quisimos generar un valor agregado que lleve a una mejora del nivel de adiestramiento, es decir, evolucionar, crecer y en eso tiene mucho que ver el concepto de trabajar sobre la toma de decisiones”.
Durante la operación las unidades participantes extremaron las medidas para la protección del medioambiente tanto marino como terrestre en el área de operaciones.
Estuvieron todos los batallones de la Fuerza de Infantería de Marina de la Flota de Mar a cargo de su comandante, capitán de navío Roberto Oscar Vinazza; mientras que al mando de la Fuerza de Tareas Anfibia estuvo el comandante Naval Anfibio y Logístico, capitán de navío César Julio Recalde. La Fuerza de Desembarco estuvo integrada por tres Compañías de Tiradores del Batallón de Infantería de Marina N°2, reforzadas con elementos de la Compañía de Ingenieros Anfibios, del Batallón Antiaéreo, de la Agrupación Comandos Anfibios y de los Batallones de Artillería de Campaña, Comando y Apoyo Logístico y de Comunicaciones. En tanto que las unidades navales de superficie intervinientes fueron el transporte rápido multipropósito ARA “Hércules”, el transporte ARA “San Blas”, el multipropósito ARA “Punta Alta” y, como unidades de apoyo de fuego, las corbetas “Robinson” y “Rosales”. Por parte de la Aviación Naval, las unidades participantes fueron un AS-555 Fennec de la Primera Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros y un H-3 Sea King de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros.
El Anfibio contó, además, con la participación especial de tres oficiales de Artillería, Comunicaciones e Infantería de Marina del Ejército Argentino y del sargento segundo Luis Fernando Vallejo Delgado de la Armada de la República de Ecuador.
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La corbeta “Gómez Roca” participó del Fraterno XXX
El regreso a puerto
16 de septiembre. Con 108 tripulantes a bordo la corbeta ARA “Gómez Roca” arribó a la dársena de Puerto Belgrano luego de haber participado en la 30º edición del ejercicio binacional Fraterno con la Marina de Brasil.
Los 26 días de trabajo a pleno culminaron cuando los marinos observaron desde el buque la alegría de los familiares que esperaban en la dársena y escucharon los acordes de la Banda de Música de la Base Naval Puerto Belgrano. Reencuentros, abrazos, emociones y charlas poblaron el muelle. La corbeta había zarpado el 22 de agosto de su apostadero y la Base Naval Mar del Plata fue su primera escala logística, antes de poner proa a las costas brasileñas de Itajaí y Río de Janeiro, donde se ejercitó con las fragatas “Bosísio” y “União” y el submarino “Tamoio” de la Armada brasileña. El teniente de navío Ulises Gastón Hoyos, quien embarcó en la “Gómez Roca” para desempeñarse luego como oficial de enlace en la fragata “União”, explicó que durante la navegación hasta el primer puerto del país vecino la unidad
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realizó ejercicios individualmente “y una vez allá pudimos cumplir con las reuniones y la ejecución del operativo en sí. Se realizaron distintos tipos de operaciones tácticas, simuladas y reales”, describió. Durante el trayecto, ambas Armadas desarrollaron ejercicios antiaéreos, antisuperficie y antisubmarinos, además de las usuales maniobras marineras de comunicaciones, traspaso de peso y cubiertas cruzadas (crossdeck) con aeronaves, entre otras. Al final del Fraterno, en tanto, la corbeta argentina se incorporó a un grupo de buques de las Marinas de Brasil y Uruguay para festejar el Día de la Independencia brasileña, con una formación de unidades frente a Río de Janeiro. “De esta manera terminamos con las actividades marítimas, luego hubo una etapa protocolar y una etapa de cierre donde se hizo la crítica final y se planificaron los ejercicios para el año que viene. Fue una experiencia muy buena en lo profesional y en lo personal”, expresó el comandante del buque, capitán de fragata Rodrigo Martín Arriegues.
Por otra parte, el segundo comandante, capitán de corbeta Javier Andrés Linhart, calificó la experiencia como muy positiva. “Pudimos ver que entre ambas Armadas hay un grado de conocimiento muy importante que les permite operar sin problemas. Se trabajó con helicópteros de la Armada de Brasil que posaron en nuestra cubierta e hicieron un reaprovisionamiento vertical sin ningún inconveniente”, relató.
Más experiencias El teniente de navío Maximiliano Metzner, jefe de Electricidad de la corbeta ARA “Gómez Roca”, controla y opera la planta eléctrica del buque que provee de energía a la corbeta para que pueda trabajar con su sistema de armas y llevar a cabo las ejercitaciones con los buques de Armada de Brasil. “Es la primera vez que participo de un operativo internacional y el balance es positivo. Se cosecha mucha experiencia profesional y se cultiva la amistad con otros marinos de la Armada amiga. Es un orgullo para mí haber participado con mi personal en este operativo”.
Buzos tácticos en el sur
Actividades acuáticas y en el terreno
2 de septiembre. La Agrupación Buzos Tácticos (APBT), dependiente del Comando de la Fuerza de Submarinos, se trasladó hasta Ushuaia para realizar la etapa de adiestramiento en operaciones navales especiales en zona fría. Lo hicieron a bordo de la corbeta ARA “Guerrico”, dependiente de la División de Patrullado Marítimo.
A cargo de su comandante, capitán de corbeta Crisanto Diego González, las actividades se iniciaron con el adiestramiento en actividades acuáticas. En este contexto se destacó el buceo con circuito cerrado, realizando la aproximación final a unidades navales, sitios de amarre e instalaciones portuarias. En esta ejercitación el grupo se dividió en parejas que tanto en natación como en el buceo se encontraban unidas por un cabo. Posteriormente, se realizó la misma ejercitación en forma nocturna. Al realizar estas incursiones navales, los factores influyentes en esta zona son las condiciones del mar, del terreno y del clima; siendo la temperatura del agua entre 3º y 5º centígrados.
Las grandes profundidades a pocos metros de la costa obligan a respetarlas para evitar accidentes de buceo y en todos los casos las ejercitaciones se realizan cumpliendo con las normas de seguridad vigentes. La faz terrestre La zona de operaciones fue Estancia Remolinos adonde llegaron a bordo de la lancha patrullera ARA “Baradero”. En ese lugar se dispuso de zonas que permitieron dar mayor realismo a las ejercitaciones de tiro en patrulla, para poder ejecutar los desplazamientos específicos en distintas áreas geográficas poniendo en práctica técnicas y tácticas de tiro en patrulla. Luego el grupo se alistó para iniciar el desplazamiento por el terreno hacia Rancho Pincol, donde debió aplicar todas las técnicas y tácticas de desplazamiento que este tipo de terreno exige. La marcha estuvo condicionada por factores como la vigilancia enemiga (simulada) la situación geográfica (zona de montaña invernal) y condiciones meteorológicas adversas (bajas temperaturas con nevadas).
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Flota de Mar
Etapa de adiestramiento
MAR ARGENTINO
18 de septiembre. Los destructores ARA “Almirante Brown” y “Sarandí” y las corbetas ARA “Robinson” y “Rosales” efectuaron diversos ejercicios en el marco de una etapa de adiestramiento integrado de la Flota de Mar.
La actividad se completó con la participación de aeronaves AS 555 Fennec de la Primera Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros; SH3 Sea King de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros; y P-3B Orion de la Escuadrilla Aeronaval de Exploración. Una vez desplegadas en el mar, las unidades desarrollaron operaciones que incluyeron el tránsito y reconocimiento del canal de acceso de la Ría de Bahía Blanca y maniobras tácticas. A partir de la primera jornada de navegación, los buques recibieron en sus cubiertas de vuelo a los medios aeronavales de las dos escuadrillas de helicópteros, que efectuaron la calificación diurna y nocturna de pilotos y la transferencia diurna y nocturna de personal. Las operaciones continuaron con maniobras de hombre al agua simulado en formación; traspa-
“El balance siempre es muy bueno cuando permanecemos en el mar. Es importante para todos nosotros, ya que no sólo navegamos sino que llevamos adelante el adiestramiento con otras unidades, en el que cada uno pone en práctica sus procedimientos.” Capitán de corbeta Anselmo Omar Herrera, jefe de Operaciones del destructor ARA “Sarandí”
so de peso liviano entre unidades de superficie; y tiro naval con blanco en superficie desde cañón de 127 milímetros. En horas de la noche, los destructores “Brown” y “Sarandí” efectuaron un tiro nocturno antiaéreo, con cañones de 40 milímetros. Desde los buques se llevaron a cabo coordinaciones antiaéreas con la aeronave P-3B Orion, que también se adiestró en exploración, a la vez que los helicópteros continuaban con prácticas de aterrizaje y despegue. También se realizaron ejercitaciones con embarcaciones menores y de visita, registro y captura (VRC).
Guardiamarinas a bordo Con el objetivo de sumar experiencia y ganar adiestramiento a bordo, guardiamarinas que integran la dotación del transporte multipropósito ARA “Hércules” participaron de esta etapa de mar en comisión a bordo de las unidades de superficie. “En el ‘Hércules’, buque al que pertenezco, normalmente hacemos otro tipo de navegación, más orientada a la ejercitación con la Infantería de Marina. Este embarco nos sirve para sumar
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millas y experiencia en navegación como también para realizar ejercitaciones tácticas”, explicó la guardiamarina Lorena Alejandra González, en comisión en el destructor “Sarandí”. Durante la etapa de mar, los guardiamarinas se acoplaron a la dinámica propia del buque, realizaron guardias de puente de comando como oficiales de seguridad náutica, llevaron la carta y posicionaron el buque, participando en las maniobras tácticas.
Tiro efectivo Días antes de la etapa de mar, las mismas unidades participantes zarparon de la dársena de Puerto Belgrano para efectuar ejercicios de tiro en la zona de Baliza Chica y Punta Tejada. “Con esta actividad le dimos a los buques la posibilidad de adiestrarse en el reconocimiento de blancos en la costa, navegar por aguas restringidas y realizar corridas de tiro efectivas y de práctica de cara a la calificación de las unidades para hacer tareas de apoyo de fuego directo”, destacó el comandante de la Flota de Mar, contraalmirante Julio Alberto Graf. Asimismo, concluyó que “siempre que podemos ejercitar en el mar el balance es positivo”. Mientras que el teniente de navío Ariel Del Pino, jefe de Control Tiro del destructor “Brown”, expresó que aunque no fue su primer ejercicio “fue el más importante, debido a que, por el tipo, este es un tiro que requiere la coordinación de todos los conjuntos operativos del buque así como la atención de toda la dotación”.
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Impuesta por el almirante Paz
Condecoración al jefe de la Marina Italiana El jefe de Estado Mayor General de la Armada Argentina, almirante VGM Carlos Alberto Paz, distinguió al jefe del Estado Mayor de la Marina Militar Italiana, almirante de Escuadra Luigi Binelli Mantelli. 10 de septiembre.
Estuvieron presentes en la ceremonia, que se realizó en el salón Almirante Brown, el embajador de la República Italiana, Guido Walter La Tella; almirantes de la Armada Argentina e invitados especiales. Luego de la lectura de la resolución de asignación de la condecoración, el almirante Paz pronunció palabras alusivas. “Queremos concederle una distinción muy cara a los sentimientos de todos nosotros. Una distinción destinada a destacar a quienes, en virtud de sus especiales servicios o de su trascendente ejercicio profesional en beneficio de la institución, se han hecho acreedores de su reconocimiento”, destacó. “Esta condecoración, la única de indiscutible categoría naval, encierra en su simbología
misma la historia de la Armada y de la Nación Argentina y da fiel testimonio de un glorioso hecho naval protagonizado por los marinos de la Patria naciente”, agregó luego el jefe de la Armada Argentina. A continuación, dijo que “a lo largo de su existencia, la República Italiana y la Argentina han forjado entrañables lazos, que se han ido enriqueciendo con el transcurso de una historia de coincidencias y convergencias entre ambos pueblos”. A continuación, el almirante Paz impuso la condecoración Cruz Naval a los Servicios Distinguidos en el grado de Cruz Naval Laureada al almirante de Escuadra Luigi Binelli Mantelli, quien se dirigió a los presentes destacando el orgullo y la satisfacción sentidos ante la condecoración. “Los lazos profundos entre nuestros países representan, por cierto, la base sobre la que se apoya la atribución de esta condecoración que considero dirigida, además de a mi persona, a toda la Marina Militar Italiana, que tengo el privilegio de mandar”.
“Los sentimientos de nuestra gente, los de los marineros en particular, son los mismos. El mar une e inspira a nuestras Marinas y a nuestras tripulaciones. Compartimos valores e ideales, compromiso para el mantenimiento de la paz en el ámbito de las organizaciones internacionales, vocación e índole marítima, cultura, historia, civilización y afinidades de carácter.” Almirante de Escuadra Luigi Binelli Mantelli, jefe del Estado Mayor de la Marina Militar Italiana
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También en Puerto Belgrano En el marco de su visita por Argentina, la máxima autoridad de la Marina italiana junto a representantes de Defensa y de la Marina de su país recorrieron instalaciones educativas y operativas de la Base Naval Puerto Belgrano, como también las bases de Infantería de Marina Baterías y Aeronaval Comandante Espora. Además del almirante de escuadra Binelli Mantelli completaron la delegación el agregado de Defensa Militar, Naval y Aéreo, general de brigada Antonio Dibello; el asistente del jefe de Estado Mayor italiano, capitán de navío Gianluiggi Reversi; y un ayudante de bandera, capitán de corbeta Massimiliano Carrino, quienes arribaron a la zona acompañados por el secretario general de la Armada Argentina, contralmirante Luis María González Day. Durante su estadía en Puerto Belgrano, el almirante italiano explicó que la relación entre las Armadas de ambos países atraviesa un momento de fortaleza “muy intensa fundada en una tradición de cooperación. Nosotros hemos venido a traer la voluntad de reanudar más activamente esta cooperación”, agregó.
Hogar Naval Stella Maris
Tradicional té a beneficio 17 de septiembre. Más de un centenar de personas participaron del té anual del Hogar Naval, actividad benéfica que las señoras de la comisión directiva de la Asociación Hogar Naval Stella Maris realizan cada año en el Círculo de Oficiales de Mar en la ciudad de Buenos Aires.
Para dar inicio al encuentro, la presidenta del Hogar Naval, Patricia Mónica Migliavacca de Martin, agradeció la presencia y colaboración de los presentes como así también de la gente de la Armada y las empresas que donaron los presentes para la realización del evento. Los participantes disfrutaron de una tarde entre amigos colaborando con esta obra que desde sus comienzos, hace 161 años, tiene como fin brindar apoyo a los niños del personal de la Armada que más lo necesitan. Entre los presentes se encontraban ex alumnos de Hogar Naval, señoras de personal militar de la Armada, de otras Fuerzas y de los Agregados Navales Extranjeros, voluntarios del Hospital Naval Pedro Mallo y representantes de la Fundación Loreto y del Rotary Club de Montserrat. Este evento se enmarca dentro de las tareas solidarias y educativas llevadas a cabo por el Hogar Naval que apuntan a brindar ayuda moral y social –a través de obras concretas– a quienes así lo requieren, priorizando las relacionadas con la salud y la educación.
El Hogar Naval Fue creado a fines del siglo XIX, como respuesta solidaria al delicado problema de los niños huérfanos hijos del personal de la Armada. Con domicilio en Juan Bautista Alberdi 3350 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, actualmente alberga a 108 niños y hace más de un siglo proporciona a los más pequeños de la familia naval: alojamiento y alimentación, educación, recreación, formación física, atención
Se inauguró una nueva vitrina en Puerto Belgrano La Subcomisión de Artesanías de la Obra Taller Stella Maris inauguró una nueva vitrina ubicada en la secretaría de la parroquia Stella Maris de Puerto Belgrano En ella, a diferencia de las otras ya existentes en la base naval, se pueden apreciar únicamente artesanías con motivos religiosos. Cabe destacar que dicho emprendimiento es a total beneficio de la Obra Taller y de la parroquia Stella Maris, que en noviembre cumplirá 75 años.
médica, odontológica, psicológica y psicopedagógica, servicio social, orientación a padres y sostenimiento espiritual para el crecimiento y para desarrollarse sanamente. Cuenta con el apoyo de la Asociación Hogar Naval Stella Maris y contiene a niños desde los 5 años hasta su egreso del secundario, sin distinción de credos.
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Ingenieros Anfibios en la Cantera Santa Rita
Reconocimiento y rastrillaje 5 de septiembre. Personal de la Compañía de Ingenieros Anfibios (CKIA) provenientes de la Base Naval Puerto Belgrano se trasladó a Río Grande con el objetivo de realizar un rastrillaje en la zona de la Cantera Santa Rita, al norte de Río Grande. Allí, días atrás, se había hallado un antiguo proyectil que fue luego detonado por personal de la Policía de Santa Cruz, a partir de la orden de un juez.
El personal de Ingenieros Anfibios que trabajó en conjunto con sus pares del Batallón de Infantería de Marina Nº 5 (BIM5) contó para la tarea con equipos de detección de metales, recientemente incorporados a la Armada Argentina. Estos poseen una gran capacidad de detección en profundidad y discriminación de materiales ferrosos, lo cual permitió un mejor desempeño en el terreno. Las primeras actividades consistieron en realizar el reconocimiento del lugar, delimitar la zona de trabajo y programar el sistema de rastrillado. Para ello se diagramaron líneas de trabajo por el terreno en las que avanzó el equipo técnico. En el lugar de desarrollo de los trabajos, el comandante de la Fuerza de Infantería Austral
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(FAIA), capitán de navío Luis María Ferrari, aseguró que “estamos trabajando de manera conjunta con la Policía Provincial a fin de brindar seguridad a toda la población. Para esto vino personal de Ingenieros Anfibios con material recientemente incorporado. Este equipo realiza una búsqueda minuciosa de pequeños y grandes trozos de metal, hasta 4 metros de profundidad”. “Es una tarea minuciosa, que requiere profesionalismo y adiestramiento específico. Por eso se decidió el envío de los especialistas”, agregó el capitán Ferrari. Por su parte, uno de los miembros de la CKIA, el teniente de fragata Héctor Guitian, detalló las características del equipo: “Trajimos material de origen italiano, con capacidad de detectar hasta un alfiler en el terreno, lo que permite diferenciar cualquier masa metálica ajena a la composición mineral del suelo”, indicó. Estas tareas de rastrillaje, en las que la Armada Argentina trabajó una vez más en pos de colaborar y apoyar a la población civil, dieron por resultado que no había más objetos explosivos en el área.
Los Ingenieros Anfibios Son el personal técnico de la Armada capacitado para el manejo y manipulación de explosivos. Cuentan con una vasta experiencia en desminado humanitario, habiendo participado en las Misiones de Paz de Naciones Unidas en Angola, Centroamérica y Chipre. Además, han tenido una destacada labor en Malvinas, donde brindaron un importante apoyo al BIM5 en lo relacionado a las actividades de ingenieros en combate.
Suboficial mayor Luis Ángel Urquiza, mecánico de sistemas
PROTAGONISTAS
Amar los buques
“Cada día de zarpada es tan inquietante como el primero. ¡Mi vida es esto!”, dice el suboficial mayor Luis Urquiza, el suboficial más antiguo del destructor ARA “Almirante Brown”.
Luis Ángel Urquiza es uno de aquellos hombres de la Flota de Mar que a lo largo de su carrera naval descubrió que los buques tienen alma, sienten y responden de acuerdo al esfuerzo y dedicación que se les brinde. Dice que en su Villa Dolores natal todavía no tenía una vocación marinera; ni siquiera conocía el mar. No obstante, llegó a amar los buques. También cuenta que la pasión le surgió navegando mucho, operando con helicópteros y aviones, conociendo el Mar Argentino y otros océanos, viendo la inmensidad de nuestras costas e intuyendo el valor y la riqueza de nuestros recursos. “Incursioné en esto y mi vida cambió. ¡Mi vida es esto!”, dice Urquiza, quien ingresó a la Armada en enero de 1981 y ahora es suboficial mayor. En 2010 fue destinado al destructor ARA “Almirante Brown” y desde febrero de 2012 es suboficial de destino de ese buque. Al egresar de la Escuela de Suboficiales pasó por destinos en tierra y en unidades de la Flota de Mar. Recuerda especialmente los dos años a bordo del portaviones ARA “25 de Mayo”. “Fue magnífico navegar y ver desde la torre las operaciones de vuelo, los aviones Super Etendard y A4 y los helicópteros. Increíble. Ahí tuve mis primeras navegaciones importantes”, dice. También estuvo en las corbetas ARA “Spiro”, ARA “Gómez Roca” y ARA “Robinson” y en
comisiones en el extranjero: dos años en París (Francia) y 8 meses haciendo patrullas de 20 días sin tocar puerto en el Golfo Pérsico. Para el suboficial Urquiza el sentido de pertenencia, el espíritu de cuerpo, la camaradería y el trabajo en equipo son conceptos que se forjan arriba de un buque. “Uno zarpa a la soledad del mar y sí o sí tiene que apoyarse en el compañero; sobre todo cuando la Flota está muy lejos de casa, la familia y el país. Hay altibajos emocionales pero siempre ha estado el compañerismo. Es en esas situaciones donde se refuerza todo ese espíritu de cuerpo que uno destaca permanentemente”. Trabajar con compromiso Urquiza asegura que ser el más antiguo de los suboficiales y cabos en un destructor como el “Almirante Brown” es una enorme responsabilidad. “Cuando uno está en la máxima jerarquía, podría decir ‘ya está’ y no preocuparse por nada más. Sin embargo, las cosas se ven de otra manera y uno lo toma como un doble compromiso: el de no sólo hacer las cosas como corresponde, sino también estar a la altura de las circunstancias. Tengo 200 personas que me están mirando y me debo a ellos; mi función existe gracias a que ellos existen”, afirma. Y para cumplir con esa prerrogativa, asegura que debe multiplicar su esfuerzo porque “son ellos quienes realmente trabajan y dejan todo de sí”.
Muchos aspectos de su rol a bordo del “Brown” también pasan por colaborar en la formación de las dotaciones nuevas del buque, conformar un grupo de gente que inspire confianza a la hora de salir al mar y transmitir el amor por aquellas experiencias que hacen al marino: “Lo mejor lo vivimos cuando estamos embarcados, navegando; es nuestra esencia”, expresa. Urquiza sabe que el destructor “Brown” puede ser su último destino en un buque de la Flota y no quiere bajarse, porque estuvo 7 años en ese barco, porque a bordo se formó “un grupo humano espectacular” y porque esas cubiertas son el motor de su vocación marina: “Cada día de zarpada es tan inquietante como el primero”. Pero también dice que no le teme al cambio, que vivirá su última navegación como lo que es, una oportunidad para disfrutar hacer bien su trabajo, la profesión que eligió y que se convirtió en su vida. “Acepto las distintas etapas que se van cumpliendo. Aunque en todos los destinos que estuve me costó mucho despegarme, al otro día hacía borrón y cuenta nueva. Asumo al cien por ciento lo que me toca”. “Acá se fusionan la profesión con la vida”, dice, y no deja de señalar que la base para eso está formada por “el apego que cada uno tiene por la Flota de Mar, el apoyo de la familia y el incentivo mutuo”.
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Oscar Osvaldo Malandra Suboficial Mayor
Banda de Música Escuela de Suboficiales de la Armada
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