Declaración

Mis horas.

Mi obra se basa en escenarios barrocos de pintura fantástica/clásica donde mi imaginación se concentra en temas que voy experimentando conforme las experiencias de mi vida se engrandecen. En esta ocasión quise adentrarme al mundo personal y emocional de mis hijas, quienes son mis maestras de vida y con quienes me espejeo: puedo decir que es mi encuentro psicoanalítico más profundo hasta el día de hoy. Y en todas aquellas grandes mujeres que van dejando y han dejado huella, su infancia y el brillo que las caracteriza desde su niñez.

Mi casa está en las montañas y es de grandes ventanales donde me paso mirando la luz del día; es importante decir que antes de comenzar una obra, medito y entro en ésta.

No puedo definir mi personalidad en una sola palabra, ya que en todo momento me reinvento junto con mi obra; si se busca definir mi trabajo: es el constante encuentro con la luz que se emana de mi interior.

Mi motivación es dar a conocer al mundo las luces y sombras de cada cosa. Nunca me quedo en lo terrenal, busco llegar a un lenguaje universal de trascendencia poética y por en ende amorosa; mi obra, es la esperanza que al fin y al cabo es el quehacer del arte. Mi vida es arte. Por más difícil que parezca el obstáculo, inmediatamente encuentro la respuesta en mis pinceles, los cuales tienen muchas horas de trabajo en las que se plasman diversas técnicas. Como antes lo había ya dictado: mi obra tiene comunicación profunda con mi alma y mi espíritu. Así, logro que mi pintura figurativa manifieste la fuerza necesaria para mantenerse de pie o en equilibrio con la vida misma.