Historia de La Virgen Del Valle patrona nacional del turismo PATRONA Y PROTECTORA Patrona del Noroeste Argentino, Patrona de Catamarca, Patrona de la Diócesis de Añatuya y Protectora de la Diócesis de La Rioja. Patrona Nacional del Turismo y Patrona Nacional del Paracaidismo. Patrona de los Algodoneros del Chaco.
El hallazgo de la Imagen La historia cuenta que fue encontrada entre 1618 y 1620. Un indio de los encomendados al servicio de Don Manuel de Salazar, en el silencio de la tarde percibió voces y ruido de pisadas. Era un grupo de indiecitas que caminaban recelosas, como temiendo que alguien las sorprendiera. Llevaban lámparas y flores de la montaña. Como era de noche regresó a los ranchos de Choya. Su curiosidad hizo que a la mañana siguiente regresara a esos parajes. Pronto dio con las huellas y encontró un sendero que, se veía, era muy transitado. Caminó unos 5 Km., remontando la quebrada cuando a unos 7 metros de altura apareció un nicho de piedra bien disimulado. Al fin del nicho había rústicos asientos y restos de fogones, e incluso huellas de danzas. Trepó al nicho y allá al fondo encontró una Imagen de la Santísima Virgen María. Era pequeñita, muy limpia, de rostro morenito y tenía las manos juntas. Después de varios meses y de estar seguro de su descubrimiento, el indio le cuenta todo a su amo. Le dice que la veneraban, que estaba allí entre las piedras, que era morenita como los indios y que por eso la querían y que él también había aprendido a quererla.
Primer Templo en honor a la Virgen del Valle Según la declaración del testigo Juan Cisternas: "Viéndola hacer tantos prodigios, le edificaron una capilla, que por la tradición antigua fue donde hoy (1764) están las paredes de la iglesia matriz de dicho Valle, en la parte del poniente a poca distancia y en que hoy corre el río del Valle que ha muchos años se la llevó" Ermita de la Virgen del Valle En la edificación hicieron sus aportes los más adinerados como Pedro de Maidana, Nuño Rodríguez Beltrán y el valioso y sacrificado esfuerzo de los pobres de la comunidad que llegaban con su trabajo de peones y albañiles. También colaboraron Don Manuel de Salazar, Mateo de Acuña, Baltazar de Orellana, los hermanos Pérez de Hoyo, además de Juan Domínguez, carpintero de profesión que por su
bondad y habilidad en diferentes trabajos, era por 1628 un personaje que gozaba de gran aprecio en todo el vecindario. LA VIRGEN DEL VALLE JURADA COMO PATRONA La Madre Santísima del Valle fue jurada Patrona, y este solemne acontecimiento celebrado por sus hijos con verdadero regocijo, se repitió hasta en seis oportunidades. PRIMER Juramento: Fue allá por el año 1657. Se hizo bajo la prerrogativa y advocación de la "Pura y Limpia Concepción". Tuvo el hecho un carácter parroquial. SEGUNDO Juramento: Al declararse Patrono Titular de la ciudad Capital a San Juan Bautista, no quedó en claro el asunto del Patronazgo, por lo que se resuelve jurar de nuevo a Nuestra Señora del Valle, no solo ya, en el orden Parroquial que hubiera sido de la ciudad de San Fernando, sino de toda la provincia de Catamarca, y lo fue en el año 1688. TERCER Juramento: Sucedió 200 años después, reafirmando el juramento de 1688. Es realizado en el atrio de la entonces Iglesia Matriz, donde habían mandado construir un entarimado especial, el último día de las festividades marianas de 1888. CUARTO Juramento: Se llevó a cabo en 1904. Había representantes de los Gobiernos Tucumano y Santiagueño, cuyas provincias también la juraban Patrona. QUINTO Juramento: Fue en 1941, en el lugar denominado "Paseo Gral. Navarro" o "La Alameda", con motivo de las áureas conmemoraciones de la Coronación de la Portentosa Imagen de Nuestra Señora del Valle. SEXTO Juramento: Lo hacen representantes de Catamarca, Tucumán y Santiago del Estero, después de la Procesión de las Bodas de Diamante de la Coronación, en 199. Se realizó en el frente de la Catedral Basílica. "LA BAJADA" SOLEMNE CEREMONIA Es el traslado de la Sagrada Imagen desde su Camarín al trono que para los días de sus Fiestas se le erige junto al Altar Mayor, en parte del presbiterio de la Catedral Basílica. Se hacen tres entusiastas repiques de las tradicionales y sonoras campanas. El Maestro de Ceremonias saca la Sagrada Imagen de su urna habitual que está en el Camarín, poniéndola en manos del Obispo, quien la traslada hasta el trono. En el trayecto se cantan las letanías Lauretanas y el Himno de la Virgen hasta llegar al recinto de la Catedral.
CORONACIÓN DE LA IMAGEN DE LA VIRGEN DEL VALLE En Diciembre de 1887 fueron convocados los principales vecinos de la Ciudad de Catamarca por el entonces Vicario Segura, con dos finalidades: programar los actos para renovar el juramento en 1888 y la gestión ante la Santa Sede, pidiendo la coronación de la Portentosa Imagen. Entonces una comisión gestiona por intermedio del benemérito franciscano Fray Bernardino Orellana, mediante una súplica firmada por el entonces Vicario Capitular de Salta Monseñor Pablo Padilla y Bárcena. Corría setiembre de 1889.
Así fue que como un mes más tarde de haber iniciado el trámite Fray Orellana recibió el Decreto del Capítulo Vaticano comediendo la coronación. Es obvio mencionar el júbilo desbordante con que fue recibida la noticia del éxito positivo, entre los devotos y buenos hijos de la Madre del Valle. La coronación de la Sagrada Imagen se realizó el 12 de Abril de 1891, en el Paseo General Navarro, a ocho cuadras de la Iglesia Matriz. En el costado Norte se construyó una Galería de pilares y techo de madera, de una altura de cinco metros; el adorno del techo eran tiras angostas de géneros de colores; en las orillas del techo se pusieron gallardetes y sobre el techo grandes banderas y el escudo pontificio. En la parte media de la galería se levanto un majestuoso trono para la Reina del Valle. Se dio en el lugar una enorme concurrencia; abría la banda de música y la encabezaban con sus respectivos estandartes diversas peregrinaciones LA CONFECCIÓN DE LA CORONA En el mes de enero de 1890, Fray Orellana contrato en París, en la Casa PoussielgueRusaud, la confección de la Corona. Se fijó un precio de costo de 4200 pesos oro. Tendría 68 diamantes y otras piedras preciosas. Además de este material, se envió desde Catamarca seis onzas de oro, un cóndor, ocho monedas de oro, un anillo con siete piedras y un zarcillo con dos perlas. Además de la corona, se hicieron acuñar treinta mil medallas y confeccionar estampas de diversas clases. CONCEPTOS DEL PRESBÍTERO GREGORIO ROMERO En la ceremonia de la misa pontificial, el joven salteño Don Gregorio Romero, al referirse a la corona dijo: "Esta Preciosa Corona que contemplará perpetuamente el pueblo catamarqueño, simboliza todas las lágrimas enjugadas, todos los hogares bendecidos, todos los dolores mitigados; en fin señores, esa corona es la gloria, el poder y la fortaleza de la Reina coronada y al mismo tiempo la consagración más brillante que han recibido los prodigios y las maravillas de la Reina de los Valles en el transcurso de los siglos".
DETALLES DEL ESCUDO DE LA VIRGEN DEL VALLE En 1914, el entonces Obispo Diocesano de Catamarca, Mons. Bernabé Piedrabuena, encarga al historiador Larrouy que ideara un escudo para la Reina y Patrona de Catamarca. Este lo ideó conforme a las leyes heráldicas, y de acuerdo a las normas lo dibujo un Sr. Thomas, eminente heraldista.
Forma oval: Corresponde a la realeza; como también el dosel sobre el que están puestos la corona y los cetros. Los cetros se cruzan por detrás del óvalo, para terminar en las flores heráldicas una rosa y una flor de lis. La corona es abierta, porque así se acostumbra ponerla en los escudos de las reinas. Se alternan estrellas y flores de lis, por ser la Reina Universal de cielos y tierras. Los doseles de los escudos reales italianos se pintaban de armiño, o sea blanco con pintas negras semejantes a cruces. Los del escudo de la Virgen son tan elegantes que vienen a ser como una joya en su género. Colores: Los colores usuales son los de dos metales; oro y plata, y los cuatro esmaltes: azul, verde, rojo y negro. Campo: Es el fondo del escudo. Para mayor claridad se recurre aquí a lo muy querido y conocido: el Escudo Nacional. Su lema dice SPES NOSTRA (Esperanza Nuestra) palabras, que como se sabe, fueron tomadas de la oración de la "Salve". Figuras: Posee un emblema simbólico, la flor de lis; sus cuatro iniciales NSDV y una estrella EL CAMARÍN DE LA VIRGEN DEL VALLE Desde el comienzo de la construcción del actual templo en honor de la Santísima Virgen se había determinado un espacio, bastante reducido al principio, sobre el altar mayor, en que, a la vez que la Sagrada Imagen podía presidir los solemnes actos que en su honor se desarrollaban en las naves principales de la Iglesia Matriz, podía ser venerada en el recogimiento y el silencio de aquel íntimo lugar. El diminuto Camarín fue después bellamente ampliado, cuya obra llevó a cabo el virtuoso sacerdote italiano Mons. Rafael D´Armico. Después, el primer Obispo de Catamarca, Mons. Dr. Bernabé Piedrabuena, el 5 de Mayo de 1916, durante las fiestas de las Bodas de Plata de la Coronación de la Imagen, inaguró un nuevo y verdaderamente suntuoso camarín (el actual) al que hermoseó aún más, Mons. Hanlon en su iluminación y escalinatas. Hacia las pequeñas naves laterales tienen costosísimos y hermosos vitreaux expresamente realizados en Alemania con dibujos enviados desde la ciudad
de Catamarca. Partiendo del altar del Camarín a mano derecha, el primero representa el hallazgo de la Imagen; el indio muestra a Salazar la estatuita. El segundo, representa a Salazar poniendo la Imagen sobre el algodón que se incendiaba. El tercero muestra cuando la Virgen derrota a los ejércitos calchaquíes con su presencia soberana. El gran vitraux del fondo es la historia del acto de la Coronación de la portentosa Imagen; por el lado derecho, yendo hacia el altar, el primero significa la resurrección de la niña Ana de la Vega, y el Segundo la milagrosa curación del caballero peruano que luego le deja su cadena. Conducen a este pequeño templo, dos amplias escaleras de mármol, una de entrada y otra de salida.
LA GRUTA DE LA VIRGEN DEL VALLE En el tiempo del gran sacerdote mariano Mons. D´Amico, por iniciativa esforzada de este mismo hijo de la Virgen del Valle, se había comenzado a levantar una capilla o templete en el lugar en que fue encontrada la Sagrada imagen. A poco de iniciarse, quedó paralizada la obra por motivos que sería obvio mencionar. Soportó así, después, las inclemencias del tiempo que no lograron dañarla en su estructura general por tratarse de una construcción sólida y muy bien ideada. Con motivo de las fiestas cincuentenarias de la Coronación de la Sagrada Imagen del Valle en 1941, una nueva Comisión presidida por el Doctor Armando Correa y alentada incansablemente por Mons. Hanlon, más la generosa colaboración del pueblo catamarqueño y otros provincianos, se concluyó esta construcción tan deseada por los hijos de la Virgen Santísima. Conforme lo muestra el grabado estampado en una de las páginas de este libro, es un templete que cubre la gruta propiamente dicha, donde se levanta un sencillo altar de piedra a cuyo costado tiene una pequeña sacristía, todo resguardado con una reja de hierro de arriba abajo, con una puerta del mismo metal, que permite la entrada cuando hay oficios sagrados o está presente el encargado de aquel lugar. Complementa la obra un amplio lugar abierto con piso de lajas y barandas para las reuniones de los fieles al aire libre durante las celebraciones litúrgicas. Este templete fue inaugurado el 26 de Abril de 1941, día en que se iniciaron las fiestas conmemorativas del cincuentenario de la Coronación. El Prelado Diocesano bendijo solemnemente el templete para continuar con el Santo Sacrificio de la Misa por primera vez celebrada en aquel paraje.
El Obispo Diocesano Mons. Torres Farías dispuso el mejoramiento total del edificio, arreglo de escalinatas, colocación de barandillas y también distribución de figuras simbólicas en las adyacencias de este venerado y muy visitado lugar. Bibliografía: "HISTORIA POPULAR DE LA VIRGEN DEL VALLE" - Editorial Guadalupe Pbro. Alberto S. Miranda
PRIMEROS MILAGROS OBRADOS POR INTERCESIÓN DE LA VIRGEN DEL VALLE QUE SE ENCUENTRAN REGISTRADOS EN DOCUMENTOS HISTÓRICOS Los milagros son hechos increíbles, sobrenaturales, que suceden gracias a la intercesión de la Virgen ante Dios nuestro Señor. Quienes realmente veneramos y amamos a la Virgen del Valle creemos que los milagros son posibles y que gracias a su infinito amor muchos hechos que acongojan a sus hijos terminan sin que nadie pudiera explicar cómo. MILAGRO DE LA CADENA Por los años 1630 o un poco más, salió del Perú, atravesando las provincias del antiguo Tucumán, un caballero muy rico, pero tullido y desahuciado por los médicos que intentaron curarlo. Sin duda salió de su patria en busca de una salud que le faltaba a cambio del dinero que tenía de más. Había escuchado hablar sobre los hechos milagrosos relacionados con la Imagen de la Virgen María encontrada en una Gruta en Catamarca y hacia ella acude. Con sólo invocarla sanó, y en agradecimiento le dejó su magnifica cadena de oro. Emprendió su viaje de regreso sano y optimista, y en el camino encontró un amigo, al que contó que había en el Valle de Catamarca una Médica Soberana, que lo había curado gracias a la hermosa cadena que le dio en pago. Llegó la noche y se recostó en hermosas mantas, pero al despertar se encontraba dolorido y tullido otra vez, y ante su sorpresa y la de sus criados, debajo de sus almohadas halló la cadena que días antes había dejado a la Virgen. Fue una lección que le dio la Santísima Virgen para significarle que ella no vende lo que hace por sus hijos como una madre no vende su cariño.
MILAGRO DEL JARRO Don Samuel Lafone Y Quevedo, historiador y lingüista, en su trabajo "Historia de la Virgen del Valle" (1894) narra este prodigio. Había un hombre de mediana edad que vivía solo en una región remota llamada
Totoralejos. Esta es una localidad pequeña situada en las Salinas Grandes ubicadas entre las provincias de Catamarca y Córdoba. Él estaba en la angustia por el sufrimiento de una enfermedad fatal. Estaba a punto de morir cuando recordó a Nuestra Señora del Valle y le rogó por su vida, prometiéndole peregrinar a su Santuario. Poco después recuperó su salud sin alguna explicación visible, a tal punto que sus vecinos se sorprendieron al mirarlo trabaja la tierra como antes. Pasado un tiempo, decidió cumplir su promesa a la Virgen, así que comenzó su largo viaje aCatamarca por las extensas salinas. Mientras tanto, los guardianes de la iglesia Catedral de Catamarca habían descubierto la desaparición de un jarro plateado que se mantenía en el altar de la Virgen. Ellos buscaron por todas partes y preguntaron a cuantas personas pudieron si lo habían visto, pero era inútil, no aparecía. Dos semanas después, un peregrino vino a la Catedral y pidió por un Sacerdote. Entonces, le dijo al sacerdote, en palabras muy sencillas y conmovedoras, que él había recuperado su salud gracias a la "ayuda" de la Virgen y que para cumplir la promesa que le había hecho a Ella, peregrinó a su Santuario. Dijo que había hecho un viaje muy largo y difícil por las Salinas Grandes. El lugar es terriblemente árido y desolado sin agua para beber cerca. Por esa razón él y su mulo se morían de sed. Entonces, otra vez, le rogó a la Virgen pidiéndole ayuda y Ella le respondió milagrosamente. Dijo con lágrimas en los ojos que "... de un jarro plateado que apareció repentinamente en el camino, salía mucho agua, como si fuera una fuente que fluye del corazón de la tierra, para que podamos ambos satisfacer nuestra sed". Él sacó de su bolso el jarro plateado y lo entregó al sacerdote. Era el jarro plateado que había desaparecido del Santuario de la Virgen. Esta jarro se llama actualmente "El Jarro Milagroso" o el "Jarro de la Virgen”. RESUCITA A UN NIÑO Su nombre: JUAN ALONSO MORENO GORDILLO Don Ignacio Moreno Gordillo, conocido y respetado vecino de Santa Cruz, vivía en sus posesiones rodeado de cierto bienestar, pero sumamente afligido pues de sus dos hijos había perdido uno y un día se enferma gravemente el segundo. A pesar del gran empeño y atención, el niño fallece poco después. Es así que sus padres cargan con el cuerpo rumbo al Valle para depositarlo a los pies de la Virgen, y prometen que si vivía lo consagrarían a su exclusivo servicio como sacerdote y capellán del Santuario. Una vez depositado el cuerpecito ya rígido, a los pies de la Portentosa Imagen, éste comienza a moverse, se anima y revive. Los padres con el corazón lleno de luz y gozo sacan vivo a su pequeño. SANA A UN CIEGO AL PRESBÍTERO Dr. PEDRO IGNACIO ACUÑA
Hallándose en cama convaleciente de una enfermedad, el Dr. Acuña solicita que le abran la puerta de la habitación porque no veía nada, a lo que le responden que estaba abierta, por lo que él exclama –"estoy ciego". Sin aplicarle remedio alguno, el cura de la Matriz y el clero deciden llevar en procesión la Imagen de la Virgen a la casa del enfermo. A pesar de su oposición por no considerarse digno de recibirla, una vez allí, postrado de rodillas oró en silencio un corto tiempo, y después habló en voz alta a la Virgen para pedirle que si convenía le devolviera la vista perdida, y si no le diera resignación para soportar aquella desgracia. Aun no había terminado de hablar cuando comenzó a inquietarse y luego de un instante de silencio manifestó que comenzaba a distinguir la Imagen. Al poco rato veía perfectamente.
LA VIRGEN DEL VALLE SALVA AL PUCARÁ DE POLCOS Corrían los años de 1636, cuando estalló el llamado "Alzamiento general de los indios en los valles y montañas del extenso territorio norteño. Ocurrió que uno de aquellos días, una patrulla de indios enemigos intentó asaltar la población del Fuerte del Valle de Catamarca. Más he aquí que, llegando a las barrancas, vieron sobre ellas y luego sobre los aires, la Imagen de la Virgen que infundió en sus espíritus un pánico horrible. El tiempo se tornó borrascoso, mientras se levantaba un formidable huracán que los envolvió en tierra y arena, a la vez que de la Imagen salían como lanzas de fuego. Llenos de espanto y temor, se dieron a la fuga, desistiendo completamente del intento EXTERMINIO DE PLAGAS Corría el año 1764. Se había desencadenado una devastadora e invencible plaga de gusanos, de tal manera que se tenían por perdidas las cosechas de algodón. En la Misa del 25 de Marzo, los colonos pidieron en sus plegarias por el exterminio de las plagas y la salvación de sus cosechas. Al otro día, ¡no podían creerlo!. Los algodonales estaban verdes, lozanos, frondosos, no había plantas marchitas. El gusano había desaparecido por completo, sin dejar rastros de su destructor paso. Pocos años después ataca a la zona la terrible langosta talando casi todo bosque del valle. Un día, un grupo de viajeros llegó con la noticia que este espantable ejército se venía acercando a esta ciudad y cuerpo de haciendas. Entonces los vecinos concurrieron a una Misa de rogativas a Nuestra Señora suplicándole su intercesión ante tamaño mal. Esa noche había acampado una inmensa manga en las inmediaciones de la Ciudad. A la mañana se cantó Misa, y pese a que ya estaba calentando el sol, la plaga no aparecía. Luego llegó la noticia de que la temible manga de langostas había levantado vuelo hacia el sur. FUENTE: http://www.virgendelvalle.net.ar/
ORACIONES Acto de Consagración a nuestra Señora del Valle
Consagración de los niños recién bautizados
Postrado humildemente a tus pies, ¡oh Virgen Santísima del Valle! vengo, a pesar de mi indignidad, a elegirte por Madre, abogada y protectora, ante Jesús, tu Hijo divino, para amarte, honrarte y servirte fielmente todos los días de mi vida.
Virgen y Señora del Valle, Madre de Jesús y Madre nuestra. Hoy, como miembros de la Iglesia de tu Hijo, traemos a estos niños, para que reciban Nueva Vida con las aguas del Bautismo y entren al Pueblo de Dios, que es nuestra Iglesia.
Alcánzame de Jesús un vivo horror al pecado; la gracia de vivir y morir en la fe más viva, en la esperanza más firme, en la caridad más ardiente y generosa. ¡Oh Virgen del Valle! Dame el consuelo de que en la hora de mi muerte, entregue mi alma en tus manos, y sea conducido por ti a la gloriosa inmortalidad. Amén Plegaria de la familia al salir de vacaciones, a la Virgen del Valle, Patrona del Turismo Madre nuestra del Valle, Patrona Nacional del Turismo, nuestro caminar de turistas nos pone en tu presencia. Escucha, Madre, nuestro clamor. Madre del divino amparo, camina a nuestro lado, sube a nuestros vehículos y danos la prudencia necesaria para transitar los caminos de la Patria con la fe y la alegría que nos da tu compañía. Señora nuestra del Valle, desde tu cuna hecha de cerros donde convergen las rutas de todos los llanos, abre las puertas de nuestro corazón para que podamos conocernos mejor, como peregrinos que somos de fraternidad y paz.
Aunque pequeños, estaban en el pecado, en soledad y muerte. Desde hoy, sepultados con Cristo, con Él han resucitado a la Nueva Vida del Agua y del Espíritu Santo. Desde hoy llamarán Padre a Nuestro Dios; y el Dios hecho hombre que vino a salvarnos, el Buen Jesús, será su Hermano, y ellos serán templos vivientes del Espíritu Santo, y podrán llamarte Madre y quedar a ti consagrados. Desde hoy son miembros de la familia cristiana extendida por el mundo. Con la vida habían comenzado su peregrinar por sendas ásperas, colmadas de dificultades y peligros. La nueva vida que hoy inician, será un desafío para dar tertimonio de su fe y de su bautismo. Madre del Valle, hoy los consagramos a ti. Ayúdalos a mantener la gracia y la amistad con Dios en esta vida nueva que hoy reciben, y que iluminen con su luz el camino de todos los hombres. Te pedimos, Madre, por su salud, la de sus palabras, padrinos y familiares para que fuertes y unidos,
Guía nuestros pasos y haz que nuestro descanso nos alivie de todas las fatigas. Que seamos testimonio de paz fraterna en esta tierra argentina que nos cobija para que, conociéndonos todos juntos seamos creadores de la gran familia nacional donde reine tu amor y que en todo lugar seamos heraldos del Evangelio de tu Hijo, que hermana a todos los hombres del mundo. Madre y Patrona bendícenos. Amén.
se apoyen en el camino diario. Virgen del Valle, recibe a estos niños, que son los nuevos hijos de Dios, y ayúdalos a crecer sin traicionar nunca su santo bautismo. Amén.