Daniel Vigenor
“Es estresante y excitante, lo odias y lo amas, pero te sirve para lidiar con muchas circunstancias que no imaginas y que tal vez no te enseñan en la escuela o en algún curso...”
Mi nombre es Daniel Vigenor Hernández.
27 años de edad.
Me dedico a tomar fotografías que generalmente tienen que ver con el Skateboarding.
¿Patinas? ¿Cuánto tiempo llevas patinando?
D: Sí, llevo como 11 años patinando, que no han sido seguidos, a veces dejo de montar.
¿Cómo es que decides dedicarte a registrar skaters? y ¿cómo logras llevarlo a una experiencia profesional?
D: Realmente fue... pues de la nada, por decirlo así. Cuando estaba patinando(como en los primeros tres años) un amigo compraba revistas en las tiendas Sanborns. Las revistas eran: Thrasher, TransWorld, Skatebord Mag, y... había varias europeas. Después, yo empecé a comprar algunas, o a sólo ir a verlas, porque costaban como 50 o 70 pesos, no recuerdo muy bien.
Me gustaba ver el detalle en las fotos de los videos que ya había visto con mis amigos. Como que... no sé, obviamente me gustaba ver los videos, pero las fotos eran algo más a detalle. Podía pasarme el día viendo la foto del truco “tal” en la Thrasher “tal”, y... pues en algún momento me decidí a agarrar una cámara que había de un familiar. Era una para película de rollo 16mm y... era automática, con esa tiraba. Entre todos cooperábamos para el revelado y esas ondas, entonces pues sí era bastante chido.
Alrededor del 2012 pude comprar mi primera cámara. Era ya una réflex digital, una Nikon D3200, y empecé a aprender lo básico por mi cuenta.
Meses adelante, el fotógrafo y director del Urbeskate, Miguel Ángel López Virgen, puso en Facebook que iba a dar un taller de foto. Empecé a seguir su trabajo, me suscribí a su taller, y desde ahí fue una inspiración total para mí. Fue cuando decidí que realmente podía aprender foto de skate y que no estaría mal hacerlo por mucho tiempo, ¿no?
Creo que el éxito en el trabajo consiste en hacerlo con las personas que te inspiran y en proyectos que también te inspiren y te gusten.
Aprendí a trabajar de manera profesional porque estaba obligado, y más que estar trabajando de eso, estaba aprendiendo. Es como si tuviera una escuela con beca incluida, porque afortunadamente, la mayoría de la gente con la que me ha tocado trabajar, es gente profesional. Personas que son muy profesionales en sus marcas o en la manera de dirigir un equipo siendo Team Managers, o directores de ventas, artistas, diseñadores, ilustradores, etc.
Entonces, viendo y aprendiendo de ellos, es como he logrado llevarlo a esto, y ha sido muy grato, porque... pues no sé cómo explicarlo pero sí tiene un sentido como de inspiración.
¿Cuál es la relación que llevas con los skaters a los que fotografías?
D:Primeramente debe de haber confianza. Recuerdo que algunas veces, en las primeras misiones con patinadores de renombre, o con una carrera ya plasmada en el skate, era difícil. Quizá porque nunca me junté con nadie de ellos directamente y era un total desconocido; entonces tenía que haber un cierta confianza en que yo pudiera hacer bien el trabajo. Ellos se están arriesgando patinando un barandal, unas escaleras, o una forma arquitectónica que... puede ser peligroso o puede ser que nos corran en algunos intentos; entonces se ven comprometidos a hacerlo sin fallar y tú también, porque quizá ellos pueden repetir el truco hasta que lo logren, pero si tú no logras la foto pues ahí... estás muerto.
Es difícil arriesgar al patinador a que se vuelva aventar para que a ti te quede bien la foto, por eso desde el comienzo tratas de hacerlo bien.
Y pues todo esto lleva a un momento de amistad, en donde, si todo sale bien, todo se queda en un vínculo en el que estás siendo parte de la hazaña; la estás documentando, pero también formas parte de eso.
Aparte todo el tiempo estás con estas personas, te rodeas todo el tiempo de ellos, los ves en los parques, en las fiestas, en los concursos, en... el trabajo,¿no?
Ahora sí que son como tus compañeros del trabajo, porque: ¿cómo no ser amigo de alguien con quien vas a viajar más de un mes, o con quien vas a vivir un mes fuera de tu ciudad? Sí sería de locos, pero claro, no con todos los patinadores ocurre esto.
¿Qué tan improvisado es tu trabajo y cómo imprimes tu huella en lo que haces?
D: No paras de improvisar, la mayoría de la foto es en la calle bajo circunstancias en donde no puedes elegir ni el horario para la luz, o donde no todo va a marchar bien aunque tengas el mejor plan o la mejor producción. Siempre hay algo que cambia, que no esperas y tienes que hacerte un perro para resolver todo eso.
Es estresante y excitante, lo odias y lo amas, pero te sirve para lidiar con muchas circunstancias que no imaginas y que tal vez no te enseñan en la escuela o en algún curso, y tú mismo te vas haciendo de tus mañas o de tu sabiduría para resolver ese tipo de cosas e improvisar, improvisar, improvisar.
¿Tienes alguna película, canción, color, artista, etc. que te sirva de referencia durante tus procesos creativos?
D: Creo que en general, la música (no tengo una canción en especial) acompaña de maravilla a la imaginación.
¿Crees que la ideología “punk” con la que nace el skate, se ha perdido con el paso del tiempo? ¿Qué piensas al respecto?
D: Creo que el punk no se ha perdido dentro del skate, creo que solamente se ha expandido todo lo que es el skate. Ya no se puede simplificar a una ideología punk.
Fue una etapa crucial para muchos patinadores, y de hecho, muchos mantienen ese espíritu e ideología, pero yo creo que no es algo vital. Creo que el skate es algo muy libre, siempre lo ha sido, pero ahora es el momento en donde se expresa o se tiene más esa libertad.
¿Llevas alguna búsqueda con interés personal o, tal vez experimental, en tu trabajo?
D: Busco mucho crecimiento de la documentación, y sobre todo, busco entender tanto la foto en general como el skate para poder proyectar mi propia visión.
Hay muchas cosas que no me gustan de la patineta, es muy bueno el trabajo de todos, son muy buenas las ganas de todos, pero a veces hay cosas que no me quedan claras, o no me gusta la manera en cómo ven al skate.
Lo que quiero es aprender bien de esto (tanto como se pueda) para poder proyectarlo en algún momento y de esta manera poder inspirar a más personas.
El skate constantemente mezcla distintos tipos de intereses, lo cual, hace que se enriquezca mucho más. ¿Haces algo que no tenga ninguna relación con esto?
D: Sí estoy llegando a hacer otras cosas sin relación al skate.
El skate es un circulo aún muy pequeño que se está desarrollando fuertemente aquí en México, que es lo que me ha tocado vivir; pero también hay muchas más cosas que quiero aprender y ver. Aún así, el skate es vital para mi.
¿Qué opinas de las redes sociales y cómo suman o restan al Skate?
D: Pienso que las redes sociales ayudan mucho a acercar a la gente: puedes tener contacto con patinadores de todo el mundo, tienes acceso a las imágenes, a las revistas, a las marcas; y todo esto te contamina, te inspira y te rellena para crear y hacer tu trabajo.
Pero también se ha tornado algo extraño en que todo tenga que ser tan fresco que los patinadores o todo tipo de personas, quieran subir de manera insaciable toda esta información. Incluso, siento que se ha perdido el respeto a lo impreso; se ha perdido, quizá, el respeto a los videos largos, a esperar un tiempo de producción de un buen video.
Ahora te enteras de todo por las historias de Instagram cuando despiertas por la mañana, o cuando vas al baño y ves todo tipo de imágenes. Es algo bueno, pero como todo en lo que abusamos, se convierte en algo malo.
Por último, ¿rudos o técnicos?
D: Jaja rudos son locos.
Por: Dalí García.
Imágenes rescatadas de:
@dvigenor