LA CIUDADELA MARBELLA

En la página anterior, de arriba abajo: La casa se abre hacia los viñedos del valle del Ebro y la sierra de Cantabria; y detalle de la decoración de la casa, de colores suaves y líneas sencillas.

Junto a estas líneas: Barricas de roble francés en las bodegas donde Cosme Palacios comenzó a elaborar vinos hace más de cien años.

EL LUJO ERA ESTO

La Casa Cosme Palacio ofrece un alojamiento exclusivo, en plena naturaleza de la Rioja alavesa y con atenciones premium como mayordomo y cocina las 24 horas o un servicio de guest manager que hace posible todos los deseos. Eso sí, solo para invitados.

TEXTO J. L. GALLEGO

UNA BODEGA CENTENARIA QUE DATA DE 1894, en la que se ha elaborado vino hasta 1970, convertida en alojamiento de lujo en pleno corazón de la Rioja Alavesa y bajo un concepto revolucionario: los huéspedes solo pueden alojarse si son invitados. Se llama La Casa Cosme Palacio y es la nueva y sugerente aventura empresarial emprendida por la bodega Entrecanales Domecq e Hijos, presidida ahora por Gonzalo Entrecanales.

El espacio es sencillamente apabullante. La Casa Cosme Palacio ocupa cerca de 4.000 m2 y consta de 13 habitaciones, cuatro de ellas suites, para alojar a 26 personas, además de un espectacular comedor, sala de estar, zonas comunes y frondosos jardines rodeados de viñedos y con espectaculares vistas al valle del Ebro y la Sierra de Cantabria. Los invitados disponen de la casa en exclusiva, es decir, la reservan entera, pero con ella se garantizan un servicio cinco estrellas –seguramente superior–; pocos hoteles ofrecen lo que La Casa Cosme Palacio, que incluye mayordomo-cocinero 24 horas al día, amenities premium, e-bikes, experiencias solo para invitados –como una cata privada en la bodega o una comida al aire libre entre viñedos centenarios– y un servicio de guest manager que abre una puerta de posibilidades infinitas. Simplemente, diga qué quiere hacer; ellos lo harán posible, y este amplio abanico incluye desde itinerarios personalizados por la zona –el pueblo medieval de Laguardia está a apenas unos minutos andando– hasta, por qué no, un traslado en helicóptero hasta alguno de los restaurantes con estrellas Michelin nada escasos en las cercanías. El precio de la casa varía según el número de personas y sus planes, pero sirva como referencia la cantidad de unos cinco mil euros al día.

La reforma acometida en la bodega garantiza también la relajación a quienes la busquen. Firmada por el arquitecto Gregorio Marañón, la paisajista María Medina y la interiorista Cristina Arechabala, la casa presenta un estilo de líneas sencillas y funcionales, cierto minimalismo y una admirable maestría para conservar algunas señas de identidad de este espacio bodeguero. Si se animan, el primer paso para alojarse en La Casa Cosme Palacio es entrar en su web y solicitar su estancia privada. Un asesor contac-

tará con usted. lacasacosmepalacio.com

LA IDENTIDAD DE UNA CIUDAD

Edificios históricos en el casco antiguo de la ciudad convertidos, tras una cuidada remodelación, en hoteles exclusivos y sofisticados. Con esa estrategia, el grupo La Ciudadela Marbella abandera un turismo de lujo diferente en la ciudad malagueña.

TEXTO JUAN PARRA Junto a estas líneas, patio del hotel Santo Cristo, en una casa señorial de 1920.

En la página siguiente, el espectacular rooftop del nuevo hotel El Castillo, el primero con cuatro estrellas en el casco histórico de Marbella; y rincón de su restaurante, AFuego, de ambiente relajado y cuidada decoración.

LA CIUDADELA MARBELLA CRECE. No hablamos, claro está, del casco antiguo; sino de un innovador grupo hotelero que, con ese nombre, refleja un objetivo ambicioso: recuperar un turismo de lujo en el casco antiguo de esta ciudad malagueña que, más allá de las fiestas y excesos, ponga en valor la autenticidad y la identidad que la convirtieron en destino imprescindible para la alta sociedad y todo tipo de celebrities, tanto nacionales como internacionales. En poco más de un año, a tenor de lo visto, no hay duda de que lo están consiguiendo.

El concepto es muy claro: exclusivos y sofisticados hoteles, con pocas habitaciones; en las ubicaciones más privilegiadas del casco histórico; y remodelando edificios históricos con la maestría necesaria para combinar la arquitectura señorial andaluza del siglo XIX y principios del XX con una decoración moderna y con materiales de la más alta calidad, manteniendo, además, los elementos que forman parte de la historia marbellí. El desembarco de La Ciudadela Marbella –que, sin duda, marca el comienzo de una nueva etapa en el turismo de la ciudad– se produjo hace un año, con la apertura de los dos primeros hoteles. Maison Ardois, situado en un edificio de 1929 de la céntrica calle Ancha, consta de 9 habitaciones. Hotel Santo Cristo, en una casa señorial de la emblemática plaza del Santo Cristo de la Vera Cruz, dispone de 15.

Ambas aperturas sirven, también, para dejar sentadas las bases de otros importantes atractivos del grupo: sus hoteles cuentan con rooftops bars con las mejores vistas de la ciudad y sus huéspedes tienen a su disposición una amplia oferta gastronómica, con acceso a restaurantes de alta cocina que combinan las propuestas internacionales con el producto fresco y de km. 0. Thaissence, de cocina de fusión thai-peruana, es una muestra de ello.

Pero, como decíamos, La Ciudadela Marbella crece. Recientemente, ha abierto su tercer hotel, El Castillo, el primero con 4 estrellas en el casco histórico de la ciudad. Situado en la plaza de San Bartolomé, dentro de las antiguas murallas de la ciudad, el edificio que lo acoge es Bien de Interés Cultural. De fachada blanca, consta de 13 habitaciones; por supuesto, un rooftop –llamado a convertirse en el place to be de la temporada estival– y un restaurante, AFuego, que basa su apuesta culinaria en dotar del máximo valor a la materia prima de calidad, el producto fresco, de temporada y local.

Y el grupo anuncia ya una próxima apertura, a lo largo del año que viene: el hotel Puerta de Ronda, que se convertirá en el primer 5 estrellas dentro del casco histórico de Marbella. Sin duda, un punto y aparte para uno de los núcleos urbanos con más encanto del sur de Málaga.