TEMA 23: Del Neolitico a las sociedades urbanas del Próximo Oriente: Egipto y Mesopotamia. Índice 1. INTRODUCCION 2. CAMBIOS CLIMÁTICOS Y PERIODOS CULTURALES A FINALES DEL PALEOLÍTICO. 2.1. 2.2.
Marco cronológico. El Epipaleolítico y el Mesoítico.
3. NEOLÍTICO: 3.1. 3.2. 3.3.
Aproximación al concepto. Transformaciones del Neolítico. Teorías sobre el origen del Neolítico. • • •
3.4.
Las teorías clásicas. Teoría del desequilibrio. Teoria del Neolítico como etapa evolutiva Rasgos económicos.
• • 3.5. 3.6. 3.7.
Domesticación de plantas y animales. Desarrollo tecnológico social. Focos originarios. Expansión. Cronología del Neolítico.
4. CULTURAS URBANAS: EGIPTO Y MESOPOTAMIA: 4.1. 4.2. 4.3. 4.4.
Hipotesis sobre el origen de las sociedades urbanas. Condicionantes geográficos e históricos. La formación de los primeros estados. Egipto: • • • • • • •
Aproximación geográfica. Orígenes. Estructura política. Estructura administrativa. Estructura económica. Estructura social. Estructura religiosa.
4.5.
Mesopotamia: • • •
Aspetos políticos. Aspectos sociales. Aspectos económicos.
5. MAPAS CONCEPTUALES. 6. CONCLUSIÓN. 7. BIBLIOGRAFÍA.
1. INTRODUCCIÓN: El presente tema incide en uno de los procesos de cambio más importantes de la historia (la revolución neolítica y el inicio de las sociedades históricas propiamente dichas). Su estudio permite comprender la interrelación de causas desencadenantes que hacen pasar a las sociedades al sedentarismo. El largo periodo que se extiende entre el noveno milenio y la primera mitad del primer milenio a. C. constituye una época decisiva en la historia de la humanidad, a través de la cual el hombre paleolítico, en un primer momento, establece una economía productora y, posteriormente, producto de la nueva estructura económica, consigue crear sociedades urbanas consolidadas. Hace unos doce mil años el clima de la Tierra comenzó a experimentar una mejoría. Este fenómeno lo conocen los geólogos como el tránsito entre el Pleistoceno (periodo de las grandes glaciaciones) y el Holoceno, cuyo clima se aproxima progresivamente a su estado actual. Por aquel entonces, pequeñas bandas de cazadoresrecolectores, que habían alcanzado un cierto grado de complejidad cultural, se extendían por las tierras emergidas. Sin embargo, la posición de los cazadores paleolíticos en el conjunto de la naturaleza no era diferente a la del resto de depredadores. Era un cazador extraordinariamente eficaz con respecto a sus competidores animales, pero se diferenciaba poco de ellos en su dependencia de las condiciones ecológicas en las que estaba obligado a sobrevivir. Cinco mil años más tarde se había operado un sorprendente cambio: la mayor parte de los grupos humanos había abandonado su vida de cazadores nómadas para sustituirla por una existencia sedentaria basada en el cultivo de la tierra y la domesticación de animales: se había transformado en un productor de alimentos. Las consecuencias del paso de la caza-recolección a la producción de alimentos permitió la impresionante aceleración de la evolución sociocultural y demográfica de los últimos cinco mil años de la Historia. A este proceso se le denomina “revolución neolítica”. La revolución neolítica supone un proceso de cambio, una ruptura con el periodo anterior. Pero no podría entenderse sin analizar sus antecedentes inmediatos. El paso de cazadores-recolectores al de agricultores-ganaderos es un proceso gradual, que además no afectó igualmente a todas las regiones: en el Próximo Oriente este sistema se impone de manera acelerada, pero en las regiones de Europa central y occidental no se da hasta el Bronce final. Cuando en algunas zonas del Próximo Oriente la neolitización llega a un alto grado de madurez socioeconómica, se inicia entonces la formación de sociedades urbanas lo suficientemente desarrolladas para poder soportar estructuras políticas imperiales en Mesopotamia, Egipto y Asia Menor. Esta circunstancia tuvo lugar a partir del III milenio a. C 2. CAMBIOS CLIMÁTICOS Y PERIODOS CULTURALES A FINALES DEL PALEOLÍTICO. 2.1. Marco cronológico: Con el fin de las glaciaciones se produce un aumento gradual de las temperaturas y en el norte de Europa aparece el bosque frío, al tiempo que en el sur y suroeste lo hace el bosque templado. La cuenca mediterránea se convertirá en una zona muy cálida, mientras que en el Próximo Oriente se recupera la humedad tras un periodo de aridez.
Esto provocará una mayor diversificación de las especies animales y vegetales, que originará un cambio en las estrategias de subsistencia de los grupos humanos. Esto, unido al clima favorable debió de provocar un aumento significativo de la población. 2.2. Epipaleolítico y el Mesolítico: Estas dos fases, previas al Neolítico, se entienden como estadio intermedio entre economía depredadora y economía productora. Como es sabido, la economía de los cazadores-recolectores del Paleolítico se basa en el aprovechamiento de recursos naturales en la zona o territorio explotado por los respectivos grupos, y -dado el carácter limitado de esos recursos- esas poblaciones tienen una serie de rasgos culturales destinados a garantizar su supervivencia. Son grupos constituidos por un número muy reducido de miembros, por lo que su sistema de asociación se basaba fundamentalmente en el parentesco. Por otro lado, suelen ser nómadas, pues, el agotamiento de los recursos de su territorio obliga a buscar nuevas zonas de explotación. Tanto por ese carácter limitado de los recursos alimenticios como por la elevada tasa de mortalidad y reducida esperanza de vida, la densidad de población y el crecimiento vegetativo son escasos. Por el contrario, las modificaciones del Neolítico, con la llegada de los sistemas de producción artificial de alimentos y la existencia de excedentes, comporta cambios importantes en el comportamiento cultural: sedentarismo, grupos más numerosos, aumento de población y con ello organización "política", es decir, basada en pactos, no en vínculos de parentesco, etc. Considerando las industrias posglaciares como escalón intermedio entre esos dos sistemas de vida -el recolector y el productor- podemos diferenciar entre ellas dos grandes grupos o modelos de cultura: Epipaleolítico y Mesolítico. Las poblaciones epipaleolíticas son cazadores-recolectores que continúan con el mismo sistema de vida del Paleolítico Superior Final. Su propia tecnología es, al menos al principio, muy semejante, si bien progresivamente se van observando modificaciones que suponen la adaptación a las nuevas necesidades técnicas y a las distintas actividades de extracción. Por el hecho de tratarse de industrias "residuales" del Paleolítico Superior, responden al menos a tantas variedades regionales o locales como los últimos momentos de aquél. Todo esto, a la posterior evolución autónoma y a los procesos de especialización, explica la gran cantidad de complejos epipaleolíticos conocidos. A estos grupos se superpone un Neolítico importado, ya sea por aculturación o colonización. Por el contrario, son comunidades mesolíticas, aquéllas que se encuentran en vías de transformación hacia la economía productora, es decir, van a llegar a la
domesticación de los animales o al cultivo de la tierra a través de su propia evolución interna y sin solución de continuidad. Los mesolíticos que practican la recolección intensiva de productos silvestre, darán lugar a los primeros agricultores cerealistas, lo mismo que los que practican la caza selectiva de determinadas especies potencialmente domesticables originarán las poblaciones pastoriles de sus respectivas zonas. Por ello, el Mesolítico propiamente dicho es propio de las llamadas "zonas de intervención" o "focos de neolitización", en los que el proceso se desarrolla in situ, mientras que el Epipaleolítico lo es de regiones de condiciones menos favorables a los que el sistema de producción artificial de alimentos llega ya plenamente formado. 3. NEOLÍTICO. 3.1. Aproximación al concepto: El término Neolítico se debe a J. Lubbock acuñado en una de sus obras en 1865. Se traduce como “edad de la piedra nueva” y hacia referencia a la piedra pulimentada en oposición a la piedra tallada propia del paleolitico. Este nuevo periodo no solo se caracteriza por la piedra pulida, sino por la domesticación de los animales y plantas, surgiendo asi la agricultura y la ganadería. Los desarrollos tecnologicos que marcan la aparición del neolítico solo serán una respuesta a las necesidades y a las nuevas posibilidades que resultan de la agricultura y del sedentarismo que la acompaña. 3.2. Transformaciones del Neolítico: El Neolítico se define por una serie de rasgos característicos, que suponen autenticas transformaciones, muchas de ellas revolucionarias. Estas son las más importantes: a) Económicas y sociales: - Además del trascendental descubrimiento de la agricultura y la ganadería, surge la división social del trabajo, y con ella, la progresiva diferenciación de los individuos en función de su riqueza o del papel que ocupan en una escala social. - Aparece el excedente económico o conjunto de bienes sobrantes, una vez cubiertas las necesidades de la sociedad. Esto lleva aparejado la posibilidad de acumulación de riquezas en manos de un grupo social, abriendo el camino a la propiedad privada. Al mismo tiempo permitirá el desarrollo de las primeras formas rudimentarias de actividad comercial. - El aumento de población acompañado del sedentarismo. El territorio de cada grupo debió ser cada vez más reducido debido al aumento de la población, no quedando más remedio que asentarse de forma estable. La sedentarización es menos ventajosa por las carencias alimenticias que provoca y al mismo tiempo este hecho pudo provocar que la población siguiera creciendo. El aumento de la población fue demandando una más eficiente organización del trabajo que necesariamente debería ir acompañada de una tecnología que permitiese aprovechar mejor los recursos. - De todo esto se deriva la necesidad de una organización social en la que alguien sea el que controle lo almacenado, lo distribuya y que además sea capaz de frenar los conflictos que este nuevo sistema genera. Los mecanismos sociales para controlar los conflictos son: • La fisión del grupo, válido para aquellas poblaciones poco numerosas y escasamente organizadas.
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Desarrollar una actividad ritual, que se basa en el principio de que si tu mundo está estandarizado, se evita que el individuo piense por si mismo. • Aparición de jerarquías. Las primeras en aparecer son las secuenciales o consejo de ancianos, que deciden como jueces en los conflictos de la comunidad. La clave de las transformaciones socieconómicas parece estar en el almacenamiento, ya que transforma el modo de vida y el punto de vista de la gente. Las sociedades que almacenan piensan más en el mañana. Por otro lado, siempre hay alguien que almacena más que otros, asi se generan las diferencias entre los individuos y se crean los grupos sociales en funcion de la riqueza de la que dispongan.
b) Tecnológicas: - Piedra pulimentada y especialización de los útiles relacionados con la agricultura. - Bases de los sistemas de irrigación y drenajes. - La cerámica, los tejidos, el telar y los rudimentos de la navegación. - Se abre el camino al uso de los objetos de metal. Estos rasgos no son exclusivos de las sociedades de agricultores y ganaderos, ya que existen pueblos recolectores no productores que utilizan la cerámica y el almacenamiento de alimentos. c) Culturales, religiosas y artísticas: - Se desarrollan los cultos telúricos y de las fuerzas de la naturaleza personificadas en la propia Tierra a la que se adora bajo la forma de la diosa madre que se materializa en estatuillas femeninas. - El culto a los muertos, ligado a complejas prácticas de adivinación o astronómicas y complejas formas de enterramiento. - Se imponen las formas esquemáticas y abstractas en el arte. - Nace la arquitectura, el hombre construye viviendas, monumentos funerarios o santuarios. 3.3. TEORIAS SOBRE EL ORIGEN DEL NEOLÍTICO: