Q:.Q:.H:.H:. Acogiendo lo planteado por la Q:.H:. Rosy, les envío plancha de mi grado. Un T:.A:.F:. Rafael Rojas de Chile A:.L:.G:.D:.G:.A:.D:.U:. Introducción: La figura masónica del Retejador en el Primer Grado, más allá de su función explícita, está dotada de amplios y profundos contenidos simbólicos, esotéricos y filosóficos, en los cuales el Signo, el Toque y la Palabra adquieren una connotación especial llena de misterio. En este trabajo intentamos explorar en sus significados, partiendo de nuestra condición de Aprendices, para tratar de dar una respuesta, no la única, a las preguntas sobre el significado de nuestro grado y al esfuerzo sincero de conocernos a nosotros mismos. Desarrollo.Características Simbólicas.En el largo camino que como Aprendices, hemos iniciado, con el objetivo de llegar a conocernos a nosotros mismos, en una búsqueda constante de la Verdad y practicando el Bien, reconocemos tácitamente nuestra condición de viajeros por los caminos de la vida. En muchos lugares de la ruta a recorrer y en variadas circunstancias se nos exigirá dar testimonio de nuestra condición de masones. Se nos pedirá un santo y seña. Este revelará nuestra calidad de iniciados y será entregado a quien en ese momento representará para nosotros el vínculo estrecho con nuestros hermanos, personificado en el Q:.H:.Retejador. Cuando se habla del Retejador, todos entendemos que nos estamos remitiendo al Simbolismo, que en la francmasonería es en sí un método docente hecho a la altura y en la medida del hombre para buscar respuesta a las interrogantes que se anidan dentro de él. Esta forma de aprender hace posible desentrañar la verdad, poco a poco, a través de analogías y de cadenas conceptuales asociadas, que se abren paso en nuestra conciencia y en nuestro espíritu paulatinamente en un proceso constante de perfeccionamiento de nosotros mismos. En el simbolismo están presentes, solos o en conjunto, los signos, la palabra y el toque, junto a todas aquellas reminiscencias nuestras, tales como: los colores, los sonidos, las imágenes y nuestros afectos más queridos y más nobles.
Se trata entonces de un caleidoscopio de sensaciones y sentimientos, que agitándose en nuestro interior, forman una imagen que le da contenido al símbolo y determina para nosotros su significado: "nuestro significado". Es, o debiera ser el equivalente, a "una sensación de sumidad o de totalidad", parecido al sentimiento y la conmoción que nos pueda producir una obra de arte o una sinfonía. A esto lo llamamos "Armonía", que en esencia, traduce la sensación profunda de sentirse parte de un Todo vibrando al unísono con el Universo. Estas expresiones simbólicas promueven la contemplación y la reflexión y actúan como puntos de apoyo para inducirnos a abordar ciertos particulares estados mentales, en que el uso de nuestro instrumento más preciado, el ejercicio de nuestra racionalidad, se coloca en sintonía con un saber más profundo, que esperamos alcanzar paso a paso, avanzando desde lo biológico a lo geométrico, del mundo físico medible y previsible, tecnológico y matemático hacia el ámbito utópico de las cosas del espíritu. Esta "metodología" es entregada al Aprendiz para que la desarrolle y la personalice en "su propia y justa medida". Para esto se requiere de una condición: el secreto. El secreto representa un gran atractivo para los que gustan del misterio o poseen inclinaciones conspirativas. Poseer algo secreto que no esté al alcance de los demás es tener una ventaja. Una superioridad que permanece mientras el secreto esté bien guardado. En que consiste nuestro secreto y para que sirve? Si yo, o alguno de Uds. lo revelara, aún en la reserva de nuestro Templo, por este solo hecho mi secreto "individual" dejaría de ser tal, sería "nuestro secreto" y por lo tanto perdería su condición. Pero podría ser quizás más simple, revelar que no se posee ningún secreto, y que lo que verdaderamente permanece y es relevante es la tenaz y constante búsqueda de la verdad y del conocimiento de nosotros mismos y de todas aquellas preguntas que "la duda filosófica del Aprendiz" nos plantee. Por eso y para eso he llamado y me han abierto. Por eso golpeo con tres golpes sucesivos a las puertas del Templo. Para ingresar a el como Aprendiz, en la búsqueda de la verdad. Ahí recibo la Luz necesaria para emprender el camino. Para ascender del mundo físico de la forma, donde también mora la Belleza, a ese mundo de lo diáfano, donde el espíritu se viste de Luz.
Para esto existe un método y nosotros poseemos la facultad de utilizarlo y de ponerlo en marcha. Este consiste en alimentar nuestro intelecto y nuestra curiosidad con nuevos conocimientos. Someterlos a todos ellos, a veces aparentemente caóticos y contradictorios, al rigor de nuestros propósitos de perfección y, mediante el ejercicio reiterado de nuestra voluntad, propender con tenacidad al desarrollo de esa facultad maravillosa que nos coloca en Armonía con el mundo físico y espiritual que nos rodea. Esta facultad se llama Imaginación y confiere el poder de la creatividad, es la potencia espiritual del ser humano. Cual es el secreto? Nuestra individual y personalísima manera, como masones, de propender al desarrollo de tan preciado tesoro que se nos entrega. Esto podría ser paradójico, al punto de inducirnos a no buscar en nosotros mismos, la presencia del secreto. Incluso no saber siquiera de su real existencia. Contentarnos solo de la formalidad de su enunciado y acomodarnos tranquilamente en la butaca de nuestro Ritual, despojándolo de su significado simbólico, que es el recordarnos a cada paso el ejercicio de la búsqueda, el uso de nuestra razón, de nuestra imaginación y del propósito de mejorar constantemente. No percibir esta característica tan particular, podría hacernos considerar nuestro trabajo en el Taller, como el de un grupo de personas fraternas que se reúnen por una singular amistad o por algún otro tipo de lazos, y de este modo llegar al extremo de su banalización, olvidando que su percepción profunda nos da la Igualdad, porque somos iguales en la búsqueda y por que usamos un mismo método para alcanzarla, dando esencia y significado a la Fraternidad entre hermanos, descubriendo en todos ellos el espíritu de Libertad en que trabajamos. La función del Retejador, al comprobar nuestra calidad de masones nos lo recuerda, solicitándonos, más allá de la ritualidad expresiva del Signo, el Toque y la Palabra esa introspección reflexiva de la seriedad de nuestros propósitos en la Orden. Características Esotéricas.El Retejador está personificado en la figura del Q:.H:.Experto. Es en la práctica la "llave del secreto masónico" En un sentido esotérico, es la expresión de un misterio conceptualizado en el rito del retejamiento.
Sin embargo no se trata de un misterio que se funda en poderes ascentrales e ignotos, sino de un misterio simbolizado, un ideograma, que nos permite un análisis racional, es decir el uso del intelecto de cada cual. Así el misterio produce una conceptualización, mediante la deducción, que genera una doctrina, una manera de ser masón. El esoterismo representado en el Retejador es el "cáliz sagrado" en que se cobijan los valores más altos. Que deben ser tomados, comprendidos y sublimados en sus significados más profundos por cada Aprendiz, que como Iniciado recibe aquella Luz necesaria que deberá irradiar en su tarea emancipadora del Hombre, en lucha contra la ignorancia. El Retejador siempre fue elegido entre aquellos hermanos de gran conocimiento y de profunda sabiduría, porque no solo los secretos de la oficialidad, sino que los de todo el taller dependen de él. En un manuscrito del 1750 se le compara con el "Arcángel Gabriel" que con su espada flamígera guardaba el "árbol de la vida". De donde viene su nombre ? En una primera interpretación se refiere al oficio de la masonería operativa, encargado de revisar las tejas (en inglés: tile ), en el techo de las construcciones medioevales para impedir que se llovieran. Todavía se usa la palabra "llueve" entre masones para indicar que nos escuchan oídos profanos. Emblemáticamente podemos decir que el Retejador cubre su logia para ocultar su interior; lo que en ella ocurre, de los "ojos curiosos". Esta interpretación es muy bella y metafórica, pero es poco probable su nexo con la realidad. El rol del Retejador aparece por primera vez en 1738, impreso en documentos masónicos ingleses, aparentemente importado desde el Gran Oriente de Francia, donde la expresión “estar a cubierto", era utilizada en relación a la labor del Experto. Este vigilaba el exterior del Templo para protegerlo de la presencia de "oídos profanos". Entre las funciones del guardián exterior y experto-retejador, destacaba también la de delinear con tiza las antiguas logias simbólicas que desarrollaban sus actividades en locales no habilitados como templos. Se les pagaba por este trabajo. Así en las actas de la R:.L:. Jerusalem Lodge 197 en Londres, está anotado que el Retejador recibió dos chelines y seis peniques por su trabajo. En la "Lodge of Probity" de Halifax, el Retejador estaba autorizado para negar la admisión de cualquier miembro de la logia que no viniera vestido limpia y decentemente, y con corbata blanca.
Aún en la actualidad su función principal consiste en el comprobar la calidad de masones de los hermanos visitadores que desean integrarse al trabajo del taller, solicitándoles las pruebas reconocidas. Así su labor se entrelaza bellamente con su significado operativo, al comprobar la "tejas en mal estado" y recolocarlas en donde faltan para evitar que el Templo "se llueva". El techo es un símbolo que en este caso cubre o protege al hombre que como Aprendiz desea ingresar al templo. Este Aprendiz es el "retejado". Es por eso que el Retejador debe examinarlo por el Signo, el Toque y la Palabra. Esto se efectúa de pie, en posición al orden, o sea con el Signo. Mediante un Toque misterioso al estrechar la mano y trasmitiendo de boca a oído la Palabra sagrada. De esta manera le hace presente al Aprendiz, que su reconocimiento no es un hecho formal. Está por el contrario revestido de esoterismo. Es un conocimiento velado por el secreto de unos pocos elegidos, que se adquiere solo por la vía de la Iniciación. Sus contenidos implican una visión trascendente del hombre en su condición espiritual. En ella este se siente formado por una conciencia perfectible de manera gradual y ascendente, en su camino hacia el Oriente. Características Filosóficas La escuadra representada en el Signo, con la mano apoyada sobre la garganta nos induce a medir nuestras palabras de conformidad con nuestros ideales y sentimientos más elevados. Evitamos con ello juicios superficiales y negativos y le damos a nuestro pensamiento un significado constructivo. Expresan "lo que se encuentra en nuestro corazón", en un ejercicio De sinceridad y benevolencia. De esta forma damos vida a un trinomio que debe estar presente constantemente en nuestra vida: Pensar, hablar y obrar según nuestros ideales y profundas convicciones. Dominando nuestros pensamientos y nuestras pasiones, dominaremos nuestras palabras y nos será posible dominar también nuestras acciones. De esta forma "Obraremos el Bien" y le daremos un sentido de trascendencia a nuestra condición de Aprendices. El Toque permite reconocer la "cualidad real", verdadera que se esconde bajo la apariencia exterior de una persona. El profano basa sus juicios sobre consideraciones puramente exteriores. El Aprendiz debe hacerlo esforzándose por emitirlos bajo la "Luz de lo Real", por haber adquirido la facultad
de ver las cualidades de las personas que lo rodean y del mundo material en su significado más íntimo y profundo. En vez de quedarse en la superficie, o en el aspecto ilusorio del hombre, se esfuerza en ver su individualidad. Para decirlo filosóficamente, en "percibir su esencia". Cada golpe, hecho sobre la falange, es un esfuerzo para penetrar "bajo la piel", bajo la ilusión de la apariencia, para descubrir el misterio final dentro de uno mismo. La Palabra Sagrada, deletreada de boca a oído, nos muestra en sí un acto de Fe, virtud esencial del Aprendiz. Es una palabra que se da secretamente, para que permanezca en el secreto de la conciencia y forme parte indisoluble de nuestro propio y personal secreto. Significa: EN ÉL LA FUERZA, es el profundo reconocimiento, que podemos percibir en nuestra condición de iniciados de que la Fuerza verdadera y real no reside en el mundo de las apariencias, ni en las cosas materiales, sino en el Mundo Trascendente, en el cual se halla el Principio Inmanente del Todo. Este reconocimiento, si es efectivo convencimiento, coloca al Aprendiz, en una actitud profunda y reflexiva, en el "principio de la Vida", de la nueva vida, que es en realidad el "principio del Bien", que le da sentido y trascendencia a su accionar. Nos da la base, para en plena libertad e independencia de las cosa materiales que nos atan, y en uso de nuestra razón, pensar, hablar y obrar en la realización del Bien y en la práctica de las Virtudes. "Sí, por lo tanto, aprendemos a permanecer fieles a esta Palabra o íntimo reconocimiento, toda forma de miedo o de temor cesará de dominarnos y de tener poder sobre nosotros: si la Fuerza es en Él (que es la Realidad y el Principio del Bien),toda apariencia del mal es sólo una ilusión que tiene poder sobre nosotros mientras nuestra mente reconoce esta ilusión como "realidad", pero que desaparece tan pronto como cesamos de darle en nuestro fuero íntimo realidad y poder." Manual del Aprendiz.-Aldo Lavagnini. El Signo, el Toque y la Palabra representan filosóficamente, este sentido natural del hombre a la Trascendencia, en que Aristóteles, se demora en el análisis de la diversidad del carácter humano y la recoge, con una mirada, a veces, profundamente sicológica, forjando así las incipientes categorías de la introspección. Investiga la inmanencia de la acción humana, tan armónica con la racionalidad y el ejercicio del Bien a nuestros semejantes, propia de la francmasonería, y trata de esclarecer su relación con un bien supremo, a partir de la propia acción del hombre.
Le entrega al accionar humano un alto contenido ético, basado en la moral, dándole la característica, ética, del gobierno de sí mismo. Le permite recurrir a los principios de la recta razón para armonizar y hacer concordar el bien individual con el bien colectivo. El aprendiz en su aspiración de practicar la Virtud, reconoce, intuitivamente al inicio y después racionalmente, que la práctica de la virtud, que caracteriza al masón, pasa por la identidad del bien propio, al cual tendemos todos los seres humanos, con el bien colectivo. La Ética y la práctica del Bien, concordando con Aristóteles, no consiste en una ciencia sistemática. El conocimiento teórico del bien y de la virtud, no asegura su ejercicio, ni basta para lograr su acceso. La producción de la Virtud y del Bien a la que como Aprendices masónicos aspiramos, es el resultado del ejercicio constante y de la acción. La adecuada comprensión de esta relación, nos sitúa en la condición de establecer la unidad que existe entre nuestro trabajo en el seno del taller y nuestro accionar en el mundo profano. Nuestra libertad de pensamiento y de palabra tiene su cauce natural en nuestro obrar como masones, dentro y fuera del taller. El Retejador filosóficamente y en la forma velada de su calidad esotérica y simbólica nos hace presente esta relación, que se debe abrir paso vigorosamente en nuestras mentes y corazones. A nuestro entender, este es el sentido profundo de la labor del Retejador y de el Signo, el Toque y la Palabra, que lo representan en su significado Real en nuestra conciencia. S:.F:.U:. R:.L:. Abnegación No.48 Valle de Viña del Mar.EL RETEJADOR DE PRIMER GRADO: Sus aspectos simbólicos, esotéricos y Filosóficos.Rafael Rojas Moreno Cámara de Aprendices 2005 Bibliografía.- Manual del Aprendiz-Aldo Lavagnini. - Trabajos de Cámara de Aprendices, sobre El Signo, el Toque y la Palabra. - La labor del Aprendiz Masónico. Cámara de Aprendices. rrm.
- Constituciones de Anderson. Texto de 1723 y modificaciones de 1738 y 1813. - El Retejador de Primer Grado. Juan Gabriel Arrate Ducoing. R:.L:.Atenea No.67. - Apuntes sobre Espíritu y Esoterismo. Gran Logia de la República Bolivariana de Venezuela.. - El Kybalion. Tres Iniciados. - Los Oficios y los Oficiales de la Logia. Daniel Beresniak. - El Libro del Aprendiz. Oswald Wirth - Conócete a ti mismo. Filosofía del Primer Grado. Cámara de Aprendices. - Ética a Nicómaco. Aristóteles. - Enseñanza del Simbolismo para el Aprendiz. Texto de Docencia masónica.