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EL CAMPO THE COURSE 2010/2018
El campo comenzó su andadura con sólo 7 hoyos, el primero de los cuales se encontraba en el actual hoyo 4. Pronto se convirtió en 9 hoyos a finales de 1973 y finalmente en 18 hoyos. En estos 50 años el campo se ha ido actualizando, sobre todo en los últimos años en los objetivos de ahorro de agua y sostenibilidad, para lo que ha acometido reformas e inversiones en instalaciones y maquinaria.
También se introdujeron algunos cambios menores en el diseño y la estética del campo. Aunque no se disponía de fondos para grandes obras, el presidente de greens, animó a los socios a hacer donaciones privadas para árboles, plantas y puentes y, entre 2010 y 2018, se plantaron 334 nuevos árboles y arbustos de gran tamaño.
Entre 2014 y 2019 se trabajó mucho para aumentar el atractivo visual del campo, en particular en la construcción de nuevos tees y puentes. Se recaudaron 27.000 euros de donaciones privadas de socios para poder reconstruir los puentes de los hoyos 9, 12 y 18 en piedra de Casares.
También se utilizó piedra de Casares para construir muros y parterres que realzan la entrada al campo de prácticas. En 2015, el aspecto del campo mejoró aún más con la plantación de un par de árboles raros cuyo nombre en latín es Tetraclinis Articulata, y que ahora son una especie protegida.
En ese momento la mayor prioridad era la sustitución de los greens, que para entonces tenían más de cuarenta años. El primero fue una simple sustitución del existente, a este le siguieron el 2º y el 12º. En esta etapa, la junta decidió que sería deseable tener coherencia en el rediseño de los greens restantes, y se hizo un acercamiento a la empresa Gary Player Design (GPD). Su vicepresidente Steven MacFarlane, arquitecto escocés, aceptó preparar los diseños y supervisar la construcción de los quince greens restantes, y también de muchos de los búnkeres del campo. Estos dibujos se recibieron en febrero de 2014 y, desde entonces, la junta ha trabajado con GPD para mejorar el carácter general, la funcionalidad y la jugabilidad del campo.
The course started out with only seven holes, the first of which was on the current 4th hole. It soon became nine holes at the end of 1973 and finally 18 holes. In those 50 years the course has been updated, especially in recent years as part of meeting the goals of saving water and sustainability, for which the club has undertaken reforms and investment in facilities and machinery.
Some minor changes were also made to the design and aesthetics of the course. Although funds were not available for major works, the greens’ chairman encouraged members to make private donations for trees, plants and bridges and, between 2010 and 2018, 334 new trees and large shrubs were planted.
Between 2014 and 2019, a lot of work was done to increase the visual appeal of the course, particularly with the laying out of new tees and more bridges. 27,000 euros were raised from private donations from members to enable the bridges on the 9th, 12th and 18th holes to be rebuilt in Casares stone.
Casares stone was also used to build walls and flowerbeds to enhance the entrance to the driving range. In 2015, the appearance of the course was further improved by the planting of a pair of rare trees whose Latin name is Tetraclinis Articulata, and which are now a protected species.
At that time the main priority was the replacement of the greens, which were by then more than forty years old. The first was a simple replacement of the existing one, followed by the 2nd and 12th. At that stage, the board decided that it would be desirable to have consistency in the redesign of the remaining greens, and an approach was made to Gary Player Design (GPD). Its vice-president Steven MacFarlane, a Scottish architect, agreed to prepare the designs and oversee the construction of the remaining fifteen greens, and also many of the course bunkers. These drawings were received in February 2014 and, since then, the board has worked with GPD to improve the overall character, functionality and playability of the course.