EL PARADIGMA OLVIDADO

Page 1


RETORNO AL PARADIGMA OLVIDADO

Recopilaci贸n de charlas ofrecidas por M贸nica M. Aguilar y publicadas por el grupo Kenosis.


Se hallan reservados todos los derechos. Sin autorización escrita del editor, que-da prohibida la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio—mecánico, electrónico y/u otro--- y su distribución mediante alquiler o préstamo públicos.

Aguilar, Mónica Retorno al paradigma olvidado.- 1ª. ed. - Buenos Aires: Kenosis, 2004. 334 p.; 14x20 cm.ISBN 987-21248-0-9 1. Psicología aplicada. Autoayuda CDD 158.1 Fecha de catalogación: 21-01-04

Corrector de pruebas: Sergio Mastríaco Diagramación de interiores: El Fenix S.R.L. Diseño de tapa: Khalibahn LIBRO DE EDICION ARGENTINA Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723  2004 by Kenosis. Buenos Aires. 1ª Edición.

Impreso en la Argentina Printed in Argentina

-2-


Dedicado a la memoria de Mirhan Memprelian Obrador Cr铆stico Modelo de Convicci贸n y Amigo de nuestras almas

-3-


INDICE Prólogo ................................................................................ 1. ¿Por qué? y ¿Desde dónde? ................................................ 2. Nadie puede ver lo que no es .............................................. 3. El Foco: Una extraña compañía ........................................... 4. El sabio sufrir ................................................................... 5. Sobredosis de ilusiones ...................................................... 6. Gobernantes del mundo interior .......................................... 7. Significado y empleo del amor ............................................ 8. Monumentos de piedra ...................................................... 9. Estudio de la complacencia ................................................ 10.

El descalificador ...........................................................

Anexo 1. El Paradigma reflejado en la poesía ........................... Anexo 2. Carta de Mónica a sus alumnos .................................

Compilación y prólogos: Vanesa Ferrari (Vanita) - Andrés Frasca – Diego García - Vanessa Moccagatta y Roy Sierra.

-4-


RETORNO AL PARADIGMA OLVIDADO

"Toda verdad pasa por tres estadios. Primero, es ridiculizada, segundo, es violentamente negada, tercero, es aceptada como evidente." -Arthur Schopenhauer

PROLOGO

Este libro es la moderna desocultamiento del ser.

reformulación

de

la

leyenda

del

Desde Aristóteles hasta nosotros, la verdad, para ser tal, depende de cuán comprobable sea en el plano sensorio. Pero existe otro tipo de verdad, una cuyo mejor significado comprende la palabra griega Alétheia, que significa develación. Lo contrario no es lo falso, sino lo oculto, lo escondido, lo olvidado. A lo largo de estas páginas, usted encontrará aquello que ha sido vedado a lo largo de decenas de siglos. Logias, sociedades secretas, y organizaciones similares, buscan ofuscar el conocimiento que alcanzan, archivarlo, incluso codificarlo con simbologías solo aptas para iniciados, con el objeto de impedir de esa forma que su verdad sea desvirtuada, difamada y consumida. Lo que este libro expone, se plantea como un claro opuesto al ocultismo, puesto que su finalidad es la de hacer conocer, divulgar aquel fragmento de verdad que poseemos. En un momento tan particular como lo es este para la humanidad, vemos como un deber comunicar aquello que tuvimos el privilegio de conocer. Lo existente es atravesado a diario por la fatalidad de ser velado, cubierto, confundido en medio del mundo que nos enseña que no hay verdades absolutas y por lo tanto si hay tantas verdades como personas y todas son válidas, la verdad no existe. Es consigna de la posmodernidad tomar todo axioma como relativo, llevar todo código y verdad interna al pasteurizado estado de las modas y las creencias. A lo largo de estas pocas páginas, usted encontrará (a veces en forma explícita y otras tantas entre líneas) semillas de una verdad olvidada. -5-


RETORNO AL PARADIGMA OLVIDADO

El resultado producido por éstas es el desafío de expandir la realidad interna de usted que las recibe y relacionarla con las realidades externas de su vida cotidiana. Este libro es particularmente escurridizo en cuanto a cómo definirlo. Escapa del plano filosófico, puesto que se basa en la constante práctica y reformulación de hipótesis, es psicológico desde su enfoque, pero ve más allá de las convenciones en busca de ese algo más propio de lo desconocido. Tampoco podría ser puesto en el estante de la Autoayuda ya que trasciende ampliamente la funcionalidad de parche psicológico mostrando contundentes verdades que decodifican la realidad misma. Podría incluirse en el segmento de literatura religiosa, pero incluso esta amplia categoría tampoco lo puede abarcar, ya que se basa en que la Fe es convicción, y la creencia es solo la imitación humana de ella. Genera en el lector la sed de ponerse en contacto con ese Algo Superior, y explica el cómo llegar sin dar direcciones ni teléfonos donde encontrarlo. Como verá este no es un libro típico. Ya desde su planeamiento, surgió como una invitación a ser testigos de las mágicas tardes que tuvimos la posibilidad de pasar con una persona muy especial llamada Mónica, y de esta forma compartir parte de todo el inmenso caudal que de ella nos nutrimos. Es una obra, cuyo objetivo es el de generar más preguntas que respuestas, susurrando en todo momento que el Hombre no nace para morir; sino para trascender la vida. En esta enseñanza trascender la vida no es renunciar a ella, es conocerla, experimentarla y transformarla. Conocer, no es sumar conceptos; es responder interrogantes del Ser. Experimentar, no es degradarse; es hacer consciente lo posible. Transformar, no es romper; es cambiar la calidad de lo vivido. Acerca de quienes somos nosotros, poco hay para decir; profesionales de actividades tan disímiles entre si como lo es la computación y la psicología, repletos de características que no nos diferencian de usted, o cualquier otro. Nuestro único valor agregado, es el hecho de haber tenido la certeza de querer tomar este camino y saber que para hacerlo es imprescindible enarbolar una bandera capaz de resistir al desgaste del tiempo, a las turbulencias del espacio, a los cambios y reveses de las circunstancias. -6-


RETORNO AL PARADIGMA OLVIDADO

Una bandera que no pierda color ni textura, que no se quiebre ante la tempestad ni se destiña en el desierto. Esa bandera, ese por qué y para quién luchar que necesita todo guerrero para no desistir, es Dios... El como llegar a él, es sin duda, la invalorable piedra preciosa que se puede extraer de la sabiduría de Mónica. De ella podemos decir que observada desde el valuarte social, fue una mujer de éxito, de dinero, incluso gozó de una clara notoriedad, pero nada de esto se convirtió nunca en su finalidad de vida. No importa cuán alta fue la suma ofrecida por la comodidad, para que dejara de lado su camino, ella siguió adelante. En el reino del culto a la complacencia, el egocentrismo, y la evasión, ella fue considerada un anatema y un misterio insondable. Paso a paso creció, caminando descalza por el filo de una navaja, encontró una manera de regresar a "aquel lugar" cuya existencia ni es recordada. Avanzó con vivencias concretas y palpables (no con el intelecto) con el objetivo de llegar a merecer la Gracia de servir a Dios. He ahí su mérito, su hermosura, y el orgullo de compartir nuestro camino con ella como guía. A su alrededor siempre hubo gente buscando consejo y orientación y se fue formando poco a poco un sistema de reuniones periódicas que culminaron volviéndose semanales. Muchos rostros fueron y vinieron en el devenir de personas que formaron parte del grupo. Llegamos a ser pocos y muchos, algunos compatibles entre sí y otros disímiles; pero todos individuales, diferentes; aprendimos a crecer como una semilla que es regada por el agua de la vida hecha palabra. Descubrimos por nuestra cuenta, cual era el cáliz de nuestra cruzada, y gracias a la guía de Mónica, algunos de nosotros aún seguimos caminando hacia ese encuentro. De entre los que persistimos en la disciplina y trabajo que ello conlleva, surgió el concepto de compartir ese alivio tan revitalizador que es conocer que existe una verdad, que hay un arriba, un abajo, una derecha y una izquierda, aun cuando el mareo de la vida cotidiana nos indique que todo oriente es igual de caótico y fútil. Con este propósito, decidimos que la manera más fiel de realizar un traspaso de la información que recibimos en su momento, sin ser ésta -7-


RETORNO AL PARADIGMA OLVIDADO

pasada por el tamiz de la subjetividad, era transmitir un fiel reflejo de las charlas de la misma forma en la cual nosotros las escuchamos, entre el año 1998 y el 2002, momento en el que decidimos comenzar la preparación de esta recopilación. Fue así que recurrimos al archivo de charlas que teníamos registradas, y después de elegir cada uno, cuales temas preferíamos sobre otros, nos dividimos la tarea de prologarlos, desde nuestras vivencias y descubrimientos posteriores. La humanidad sólo sabe evolucionar cuando lo oculto y lo mágico se convierten en científicamente objetivo. Por eso, es que cada uno de estos diez capítulos lo invita a experimentar, lo incentiva a cuestionarse, a abrir sus ojos a una nueva forma de ver y vivir el proceso del ser humano. Al momento del cierre de esta obra, después de muchas reuniones de trabajo, el resultado fue ver que lo que teníamos en nuestras manos no es más que un cartografiado del espíritu humano, un mapa de cómo regresar al Paradigma Olvidado. Esperamos que sepan aprovecharlo tanto como nosotros.

GRUPO KENOSIS

-8-


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

CAPÍTULO I ¿Por qué? y ¿Desde dónde?

Introducción y cierre del capítulo realizado por: Roy Sierra -9-


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Dos preguntas que decodificarán el resto de la obra. El buscar su respuesta, no sólo en el plano interpersonal de la relación con el mundo, sino en el intrapersonal del universo interno, abrirá las puertas del sueño que nos aprisiona. Elegí esta charla como la primera, debido a que es ni más ni menos que una llave que abre las puertas al entendimiento interno que se busca con este libro. Pero para eso se requiere escuchar, que en este caso es leer. A fin de conseguir eso, es necesario entender que nadie escucha a nadie, sólo a nuestras propias voces internas, mientras usted lee esto, significados y significantes se disparan en un eterno monólogo interno que opaca el mensaje objetivo de lo que lee. Todo preconcepto aplicado, toda red de asociaciones, dirigen nuestra mente a una interpretación errónea, subjetiva y caprichosa. Es recomendable incluso leer cada texto tres veces, una como quien lee el diario, otra para entenderlo con su mente y la última para que lo asimile su corazón. El entender “por qué” uno hace lo que hace, puede ser mucho más complicado de lo que se cree en el plano mundano. En principio hay que descartar todas las respuestas fáciles como las justificaciones o las proyecciones en busca de algo mucho más sustancial: la causa de la “aparente causa”. Aquí es donde se descubre el microcosmos interno significando esto el primer paso en la exploración del interior de cada uno. Un acercamiento al por qué sufrimos en vano y lo caótico y paradojal de nuestra condición humana. Si bien sucedió hace años, esta charla permaneció en mi casi de manera textual, hasta hoy. Las analogías expuestas por Mónica, así como ese sabor a descubrimiento interno tan nuevo para nosotros en aquella época, son en este momento compartidos con ustedes. De la lectura de esta charla, surge la responsabilidad de entender que ésta no es una enseñanza sacada de un libro y que su “por qué” y “desde dónde” está lejos del plano de la vida cotidiana.

- 10 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

He conversado con ustedes de manera particular y luego grupal durante mucho tiempo, en algunos casos, por más de un año, sin embargo, nadie preguntó “por qué”, ni tampoco “desde dónde” nacen estas charlas. (Después de un silencio desconcertante) Andrés: Cierto. Vanessa: En mi caso, hace tanto tiempo que te conozco, que ni pensé en preguntarlo. Lo que conocés de mí, son datos de filiación, lo que demuestro y lo que digo. Lo que deseo que conozcas... Pero... ¿alguna vez cuestionaste de dónde nace mi deseo? ¿Para qué, con qué motivo, o desde qué parte de mi interior, dispongo tiempo y energía para enseñar?... Acaso, ¿podés tener acceso a mi estado de conciencia? Vanessa: ¡No!... Pero uno más o menos se da cuenta que tipo de persona sos... Eso siempre es así hasta que llega el “Día del Arrepentimiento”. Allí se dicen cosas como “Y pensar que yo confiaba” o “¡Quién lo hubiera dicho!” problema que generalmente se resuelve de una de dos maneras: O sintiéndose víctima del engaño, o en un descreído sistemático, un escéptico. Soledad: Hay gente crédula, que no tiene maldad para ver la intención del otro... ¿no? ¡Ojalá fuera eso! El genuino estado de inocencia es una capacidad que el hombre perdió, con el primer mordisco que le dio a la manzana del Edén. Melina: Yo soy de las que creen en todo y en todos. Me defraudaron muchas veces, pero no dejo de creer. Más allá de lo que me hagan, siempre estoy dispuesta a... Roy: ¡Yo soy todo lo contrario!... Antes de confiar en alguien tienen que pasar muchas pruebas de lealtad. Escuchen sus propias palabras. Ambos empiezan diciendo: “yo soy” y de esa manera firman su propia acta de defunción a toda posibilidad de conocimiento. Si hay en ustedes un “Yo Soy” está muy lejos de la pequeñez de creer o no creer en la gente. “Creer” o “No creer”, en el aspecto que estamos hablando, no es un Acto de Fe en los semejantes, sino un acto de autocomplacencia.

- 11 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Melina: ¿En qué sentido me complazco, por el hecho de ser confiada? Confiás desde la necesidad de molestarte y tener siempre alguien para hablar, estar o no sentirte sola, en eso te complacés, diciéndote que “crees” en la gente. En el caso de Roy, también se complace a sí mismo, pero desde otro lugar. Roy: ¿Desde dónde? En tu desconfianza, complacés la necesidad de sentirte juez... o más astuto. Tanto Melina como vos, simplemente reaccionan a algún suceso fortuito de la vida con el producto de la confianza o la desconfianza. Ninguno tiene contenido cierto. Vanessa: Por la respuesta que te dí, yo también estoy en esa categoría, ¿no? En tu respuesta, hay especulación. Fijate: Si mis intenciones no son correctas vos estás a salvo, te constituyen en mi víctima y no hay error de parte tuya. Ahora, si mis intenciones resultan correctas, te llevarías el lauro de no haberte equivocado. De una u otra manera, tu responsabilidad queda a salvo. Vanessa: Pero... ¡No me doy cuenta de eso! No hay intencionalidad alguna. No es un proceso consciente, en todos los casos son sólo mecanismos subconscientes. Andrés: Y... ¿Cuál es la postura correcta? No hay postura. “Postura” es falso, el hombre está lleno de imposturas, no busquemos más de eso. Hay que estar en lo auténtico. Andrés: Entonces... ¿Cuál es el lugar auténtico, para confiar o desconfiar? El lugar correcto entre confiar o desconfiar, es conocer. Una tercera opción que nadie se molesta en buscar. Roy: ¿Siempre existe una tercera opción? Sí. Siempre. Roy: ¿Y cuál es la tercera opción entre confiar o desconfiar? La tercera opción te la provee el “desde dónde” y el “para qué”. Respondiendo a esto sinceramente, imparcialmente, llegás a lo

- 12 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

auténtico. Un ejemplo: “Desde dónde” desconfiás de Juan Pérez: ¿Desde la sospecha maliciosa? ¿Desde experiencias negativas del pasado que trasladás al presente? ¿Desde el considerarte el más astuto? ¿Desde el miedo al dolor? ¿Desde la proyección de tus propios errores? ¿Desde el acondicionamiento mecánico? ¿Desde la aceptación del chisme? ¿Desde el deseo de aparentar? ¿Desde hacer causa común con otros que difaman?... Podría seguir mucho más, pero no creo que haga falta... Cualquier sentimiento, emoción, estado, que surja de esos lugares, más que un juicio subjetivo, es una agresión al otro. Soledad: ¿Decís que hay que aprender a vivir sin opinar? Supongamos por un instante, que tenés que pasar de un edificio a otro, pisando sobre una cuerda muy finita. Hacia uno de los lados, está el abismo insondable, hacia el otro, un cúmulo indescriptible de espadas, cuchillos y filos cortantes dispuestos de manera tal, que caer allí implicaría también la muerte. ¿Por cuál de los lados optarías? Soledad: ¡Por ninguno! Naturalmente, optarías por mantener tus pies en la cuerda, sin inclinarte ni a derecha ni a izquierda... Soledad: ¡Por supuesto! Pues.... eso es vivir, sin embargo nadie evita ir hacia los costados y cada vez que pierde el equilibrio, en vez de pensar dónde se equivocó, cuál fue el error, lo primero que hace es culpar al vecino, a la vida, a Dios... La vida es una cuerda finita que va desde el nacer hasta el morir. El desafío es mantenerse en equilibrio. Roy: ¿Cómo se pierde el equilibrio? En principio hay que saber y conocer por experiencia propia y no por filosofía, que la vida es un Don, una energía de incalculable belleza y perfección... indefinible.... irrepetible... una fuerza creadora que está siempre en Presente, nueva, sin pasado ni futuro... sin edad, sin tiempo subjetivo.... y fundamentalmente sin acción. Todos los problemas se inician cuando uno pone el pie en el abismo, o en el lado de las cuchillas afiladas y eso ocurre cada vez que optás por una de las opciones que ve el hombre, que sólo sabe contar hasta dos. Andrés: ¿Estás diciendo que el equilibrio, es manejarse en el punto intermedio entre lo real y lo fantástico, entre el ser y el no ser...?

- 13 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

¡No!... ¡No dije eso!... especulación filosófica.

ni

quiero

decirlo

tampoco.

Eso

es

Roy: Lo que yo entiendo, es que hay que ser “ni”. ¿Y cómo es eso? Roy: Ni bueno ni malo, ni lindo ni feo, ni confiado ni desconfiado. ¡Eso me parece horrible! Una deducción más tenebrosa que la de Andrés. Una persona que “ni” frío, “ni” calor... parece más un pez que un ser humano... (Risas y comentarios) Vanessa: ¿Y entonces? Paso a paso y sin ansiedad. No se va a producir ninguna transformación en ustedes si persisten en sumar conceptos a los que ya tienen. No tejan en el aire... No edifiquen ideas sobre otras ideas. No comparen. Sólo escuchen, permitan que lo que escuchan ingrese sin aceptación ni rechazo, como una hipótesis que el tiempo y el trabajo interno comprobará. Andrés: ¿Cómo se encuentra el equilibrio entre dos opciones? ¡Excelente! ¡Esa es la pregunta! En principio, Andrés, debe quedar claro que el equilibrio no es estar un ratito de un lado y después otro ratito del otro, sino que consiste en mantenernos sobre la cuerda. Andrés: Sí, está claro... Si ustedes observan esto, comprobarán que las personas que se autodenominan “ecuánimes” no están en la cuerda, sino que saltan de un lateral a otro. Toman pedazos de ambas opciones, las mezclan y sacan una tercera opción. Es decir, van de costado en costado y creen dar una respuesta equilibrada. Soledad: A ver si me queda más claro... este cenicero... para mí horrible y para Andrés es hermoso. Viene Vanessa y dice: El cenicero horrible en su forma porque está un poco deformado aquí, pero hermoso por los colores que tiene. Haciendo esto... ¿Vane estaría en concepto equilibrado?

es es es un

Sí. Vanessa estaría en un “concepto equilibrado”, pero NO en el equilibrio. ¡Gran diferencia! Tu ejemplo es lo que decía hace un momento: Vanessa tomó un poco de cada costado e hizo una

- 14 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

síntesis. Esa actitud siempre es más sana que el fanatismo, pero sigue viendo sólo dos opciones: es feo o lindo... ¡Siguen siendo conceptos!... A esos conceptos suelen oponerse otros contrarios, tan parcial como el primero y así sucesivamente, hasta que entre dimes y diretes de varios opinólogos, logran enterrar la verdad. Vanessa: Pero... ¿Y de qué otra manera puede ser el cenicero? En principio, un cenicero no puede “ser” de ninguna manera. Los objetos cumplen una función práctica o estética. Suponer que el cenicero “puede ser” ya te lleva al desequilibrio. Si en cambio hablamos del Hombre y sus circunstancias, ahí sí se puede aplicar el Ser como contrapartida de la Nada. Andrés: Pero acaso... ¿es posible que un Hombre sea “nada”? Así como los objetos se valoran en sí mismos en razón de función, el Hombre (genéricamente hablando) “es” en tanto acerque o se aleje de su Propósito de vida. A mayor cercanía de Razón Primera, más significado adquiere. A mayor distancia, significado se desdibuja y su final puede estar en la Nada.

su se su su

Melina: Y... ¿Qué propósito tiene la vida del Hombre? Esa es una respuesta que cada uno debe buscar en sí mismo. Andrés: ¿Te referís a la misión que cada persona tiene en la vida? Se ha fantaseado mucho con eso. El Propósito al cual me refiero (y que siempre en el significado interno debe escribirse con mayúscula) está escondido en niveles muy profundos. Lo primero que hay que aprender, es a buscarlo. No imaginarlo, no especularlo... Justamente ese es el motivo de estos encuentros: aprender a encontrar el Propósito de vida y el Propósito de la Vida, ambos exceden la mente rutinaria y lo cierto es, que ninguno de los dos está en el abismo, ni en el sector de las cuchillas. Lo primero en esta búsqueda, es aprender a caminar por la cuerda de la vida, sin pisar ni uno ni otro lado del error. Andrés: y eso... ¿Es posible? Aquí, en este Planeta “Todo es posible”. Tenemos todas las posibilidades a favor, pero paradójicamente, no hacemos otra cosa que desechar posibilidades. Andrés: ¡Otra vez estamos en el enigma! ¿Es posible o no encontrar la respuesta?

- 15 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

En principio, existe (con mayúscula) “La Posibilidad” de acceder a conocer nuestro Propósito particular y nuestra Misión de vida... eso a largo plazo... En lo inmediato, sólo está la búsqueda. ¿Pero cómo encontrar, si nadie busca? Se opina y listo, se enlata, se rotula y después se lo vende en el mercado de las opiniones varias. Ahí llegan consumidores de rostro aburrido a elegir por el empaque, cuál será la idea que manejará su vida en adelante... ¿Qué posibilidad tiene de encontrar aquél que no busca, que sólo compra ideas de otros? ... ¡Ninguna! Andrés: ¿Qué tenemos que buscar? ¿Dónde hay que buscar? En lo interior, no en lo exterior. Cada hombre es por dentro como una selva amazónica. ¡Hay de todo! Variadas especies, plantas maravillosas, medicinales, carnívoras, venenosas, decorativas. Pastos útiles y pastos inútiles. Las hierbas aromáticas crecen junto al hedor de animales muertos y excrementos. Alimañas, insectos laboriosos, mamíferos de aspecto inocente... animales feroces que conviven con otros indefensos. Hay cuevas, sectores de luz y otros enmarañados, impenetrables. Lo primero es darse cuenta que no somos un grupo de pensamientos algo coherentes, sino una selva desconocida que debemos recorrer palmo a palmo. Andrés: ¿La misión sería convertir la selva, en un jardín? Eso sería un ideal utópico, un objetivo romántico. No, no es eso. Por ejemplo, hoy hablábamos de confiar o desconfiar... ¿Podrías confiar en un alacrán? Andrés: ¡No! Sin embargo, cuando confiamos en un persona, no sólo reconocemos sus aspectos positivos, sino que, además, estamos dando un voto de confianza a su alacrán, a su boa constrictor, y a todas las alimañas que ni él mismo sabe que tiene. De la misma manera, cuando desconfiamos de alguien, estamos ultrajando sus rosales, sus ruiseñores, sus lagos azules… ¡Todo lo positivo y todo lo negativo converge en el Hombre!... ¿Por qué y en base a qué soberbia hemos de juzgar por ver sólo una faceta, un costado pequeño de su realidad interior? Soledad: Tendríamos que tratar de conocer todos sus aspectos, antes de dar una opinión. Primer error: Jamás conocerás todos sus aspectos. Segundo error: formular una opinión, es decir un juicio sobre el otro. Tercer error: ¿Cómo hacés para conocer algo de alguien?

- 16 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Soledad: Creo que volví a cero… En principio, la manera de conocer al otro, es conocerse a sí mismo. En otras palabras: Si vos conocés tu propio alacrán, vas a ver venir el alacrán del otro. Si sos capaz de estar en contacto con tu ruiseñor, estarás apta para escuchar el canto del ruiseñor de tu prójimo. No hay otra forma. Ahora bien, si conocés tu “sector Alimañas”… ¿Te atreverías a juzgar el “sector Alimañas” del otro? Soledad: No, supongo que no… Tal vez entendería lo que le está pasando… Recién ahí es posible “Amar al prójimo”, cuando no esperamos un cliché de hombre, sino que reconocemos al Hombre. En tanto supongamos que nosotros y los otros deben ser siempre de la misma manera… no sólo cometemos un acto de ignorancia, sino que además caemos en el abismo. Roy: Eso es como estar en concordancia con el mundo… Lo entendiste bien. ¡Es una maravillosa experiencia! Melina: ¡Bueno, pero hay gente que vive con la boa puesta! Sí, es cierto. Cada vez hay más gente que vive en su costado negativo. Cuando se conectaron allí, nadie les enseñó su contra cara. Crecieron identificados con ese sector y terminaron convertidos en su propio pensamiento, porque uno se convierte en aquello donde pone su atención. ¡Hay que ver cuánto resentimiento tienen esas personas por sentirse tan miserables! No viven felices con su crueldad, sino que se empeñan en degradar, en comer lo positivo de otra gente, con un mensaje similar a “si no es para mí, tampoco para vos”. Si vamos un paso más profundo, encontraremos dolor por no poder ser positivos. Ahora bien, en este dolor, en este resentimiento, en este agredir, hay un reconocimiento tácito de que ellos alguna vez, tuvieron blancura, pero consideran que se la robaron. Andrés: ¿Estás diciendo que si tomamos cualquier personaje actual de la violencia, podríamos mostrarle su parte positiva? No es tan sencillo. No tan así. “La Naturaleza se venga de todo aquello que renuncia a su utilidad”. Dejá de usar un brazo un año, y luego no podrás moverlo. Dejá de usar una porción de ti mismo, y se destruirá. Nada se puede generalizar. Hay gente que ya está muerta en vida, otros serán rescatables… ¡Depende!

- 17 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Vanessa: ¿Hay que tratar de no usar nuestra parte negativa para que se muera? Roy: Algo así como no poner alimento al “sector Alimañas y otros”… Si hacen eso, el “sector Alimañas y otros” dejará de ser “rasgos percibibles” como lo eran la araña pollito, el alacrán, la boa constrictora, para convertirse en un caldo de cultivo que se extenderá en lo profundo de la persona, socavando todo lo puro, noble, positivo que haya en la selva. Después será muy difícil el rescate. Roy: Entonces… ¿Qué debemos hacer con ese sector? Dejar que fluya para poder conocerlo. Roy: ¡Pero, si dejamos que fluya… seríamos un caos! Roy, dije “dejar que fluya” y no “dejar que haga”. Esto es, por ejemplo: “Ahí viene la viuda negra Envidia, la atrajo mi minusvalía y la comparación, en mi interior produce escozor, una especie de corriente eléctrica que viene de la zona baja del intestino. Me hace desear quitarle al otro lo que creo que es mío. Me hace hablar con voz diferente, pierdo fluidez, mi mirada se hace corta. Produzco más saliva de lo habitual. Sonrío ficticiamente para ocultar ese sentimiento. Mis expresiones son falsas, estoy diciendo “te felicito” cuando lo que siento es decirle “te odio"… Mis cervicales se contraen, siento frustración”. Eso es “dejar fluir” y observar lo que fluye: “Conocer la araña”. Vanessa: ¿Qué pasa después que la conocés? Volverá muchas, muchísimas veces, pero cada vez más cachuza. (Risas y comentarios) Soledad: Y después ¿Se muere o se va? Dije “cachuza” porque cada vez tiene menos energía. Nadie la alimenta. Un día llegará en que ya no tendrá ninguna fuerza. La observación imparcial (sin crítica ni opinión) y el conocimiento que deviene detrás de esa simple observación que detallé, obrará la transmutación, es decir, toda la energía que tenía la araña, de ese momento en más, nutrirá algún aspecto positivo, por ejemplo, la caridad. El rasgo no existirá, pero por el hecho de haberlo conocido, seremos capaces de detectar su presencia en otras personas y desde allí, resguardarnos sin juzgar y sin interpretar que la totalidad del otro, es una araña.

- 18 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Andrés: ¡Suena apasionante! Y lo es. ¿Saben qué hace el común de la gente? Se rinde ante ella y se convierte en Viuda Negra, o la niega y la Viuda Negra se la come por dentro. Roy: Y... ¿Qué tal un zapatazo y chau araña? (Risas y comentarios) “Nada se pierde, todo se transforma”. Si le das un zapatazo, surgirá un serio problema psicosomático. Hay que tener paciencia y también comprensión de nosotros mismos. Dije comprensión y no lástima ni auto consideración. Es decir, sin ansiedad y sin esperar resultados, ser abejitas labradoras todo el tiempo. Nada más. Andrés: “A Dios rogando y con el mazo dando” Correcto. Te felicito. Melina: Digo yo... ¿Cómo hago para saber si dentro mío vive la Viuda Negra o no? ¿Te gusta la gente envidiosa? Melina: ¡La detesto! Ahí la tenés: Señora Melina le presento a su Viuda Negra. (Risas y comentarios) Hay un proceso en la mente por el cual proyectamos en el otro lo que no queremos ver en nosotros. Cuanto más criticona es la persona, más trabajo tendrá que hacer sobre sí misma. Para empezar, hagan una lista de todo lo que critican y después, busquen localizar esos factores en ustedes. Ciento por ciento seguro que ahí están. Es un test que no falla. Lo que no aceptamos en nosotros, lo vemos en los demás. Roy: ¿Y si odio que me den órdenes? Pone en evidencia que sos un controlador, una persona que necesita digitar la vida de los otros. Roy: ¡También puede ser rebeldía!

- 19 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Esa definición te haría sentir mejor, ¿verdad?... Así son los mecanismos. Siempre se busca la justificación y la definición más elegante para quedar lo mejor posible ante nuestros propios ojos. Hay que romper la imagen que formamos, y buscar el lugar correcto donde reflejarnos. Las personas que nos rodean son espejos fidedignos. Fijate qué rechazás de ellas, y encontrarás tu rostro. Andrés: Yo rechazo la violencia, el desprecio por la vida, los secuestradores, los ladrones, la corrupción y en general, lo que está pasando en el país. ¿En qué me refleja eso? En cada persona existe un depredador, recordemos que es una selva. Un ave de rapiña que roba los huevos del nido ajeno. Un ladrón de ideas, un corrupto por conveniencia. El entorno refleja el lado oscuro de la selva, que no se quiere reconocer. Lo que sucede afuera, es consecuencia de lo que sucede internamente. Andrés: En el caso que tuviera observado mi depredador... ¿Aceptaría el depredador externo? No. Ni aceptar ni rechazar. El depredador está y punto. No hay por qué reaccionar a él. Es sólo un aspecto de lo que ocurre. Si está en tu posibilidad organizar situaciones para resolverlo, lo harás sin pasiones. Si no está la solución a tu alcance, la evidencia te pondrá a resguardo. Roy: ¿La sociedad es un reflejo de los individuos que la componen? Las conductas y cánones sociales, son la evidencia del subconsciente de las partes que la componen. No se trata de corregir “afuera”, hay que cambiar “adentro”. No hay política ni ideología que pueda hacer por el hombre, lo que éste debe hacer por sí mismo. Pretender cambiar las cosas desde afuera, es dar el zapatazo a la araña... el forúnculo explotará por otro lado. Vanessa: Todas las propuestas que se escuchan tienen que ver con lo exterior... Así es. Quedan en lo externo, no atienden a las causas, y lo peor es que tampoco prevén las consecuencias. Andrés: Entonces... ¿No hay solución? La vida en sí es un enigma insoluble, pero siempre existe “la posibilidad” de cambio hacia un estilo mejor de convivencia. Si un grupo generoso de personas trabajara en la transmutación de su selva y se empeñaran por andar por la cuerda de la vida, cuidando

- 20 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

de no caer ni a uno ni a otro lado, se produciría el gran cambio, sin necesidad de recurrir a propaganda, libros, folletines, cacerolazos, piqueteros, presidente, superhéroe y etc. Soledad: ¡Cómo!... ¿Y de qué manera se produciría? Explicar ahora cómo se transfiere el conocimiento, merecería un tiempo muy extenso y nos desviaría del tema. Por hoy, me limito a decirles que esto ocurre, que es posible. Mientras tanto, volvamos a la selva. Andrés: Por lo que estábamos hablando, se me ocurre que el hombre digamos... gira. ¡Eso! Como si fuera un planeta, tiene movimiento de rotación. A veces uno ve una cara, y otras veces otra. ¡El tema pasa por no comprar ninguna! Algo parecido... para completar lo que dijiste, Andrés, cada país de este planeta, cada centímetro de tierra y cada centímetro de agua que se presenta en la superficie, debería considerarse el “aspecto visible” de un sin número de aspectos ocultos que se hayan por debajo. En otras palabras: Cada rasgo que aflora, tiene más de cuarenta niveles de profundidad. Recién cuando se llega al último nivel, el trabajo está terminado. Roy: ¡Ay!... ¿Y quién puede llegar a hacer un mapa de ese despelote? No todo es querer acopiar, juntar, sumar. Muchísimas veces es necesario renunciar, abnegar, desistir. Deben aprender a renunciar a los resultados, si es que en verdad, quieren hacer algo. Te fuiste a un futuro virtual, para buscar el descanso del “todo resuelto”, un estadio muy nocivo. Andrés: ¿Cómo es eso? Se pretende todo rápido, sólo para volver a dormir. Lo que fácil viene, fácil se va. Esta es una tarea para toda la vida y no volver a dormir más. Si en este momento les diera una pastilla para llegar al final del camino, todos estarían dispuestos a ingerirla... Pero pasado mañana, cuando el efecto de la pastilla pasó, estarían donde están hoy... ¡No debe ser así! Uno debe proponerse una meta, aplicar a ella todo el esfuerzo, toda la perseverancia que tengamos, y renunciar a los resultados. Melina: No. La verdad es que no estoy de acuerdo. ¿Por qué hay que renunciar a los resultados? Porque es la única forma de hacer las cosas bien. El desear resultados es un grado de omnipotencia que tarde o temprano se

- 21 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

paga con un fracaso merecido. Hagan lo que es correcto, día a día, segundo a segundo, pongan en ello toda la capacidad y el esfuerzo que tengan y dejen el resultado en manos de Dios. La Omnipotencia en Su lugar, y no en el nuestro. Melina: Pero... si yo no espero resultados, no empiezo nada. ¡No me da ganas! Al contrario. La ansiedad, el temor, la desesperación, la torpeza, el frenesí, la pasión descontrolada, son algunos de los aspectos que acompañan la “espera de resultados”... ¿Dónde podés llegar con eso? ¿Qué eficiencia puede haber en tus actos? Melina: ¿Cuál tiene que ser el motor, entonces? El Propósito, no el resultado. Lo correcto. Dicho de otra manera: “Voy hacia allí, pondré en ello mi mayor atención, todo el esfuerzo, la suma de capacidad que tengo, pero no espero, ni el triunfo ni el fracaso.” Melina: ¡Eso es muy difícil... no creo que sea para mi...! ¿Ves? Ya renunciaste antes de empezar, sólo por esperar resultados. Lo que te detiene, es el miedo a fracasar, y desde ahí la presunción de que es difícil, que no llegarás, todas referencias a un futuro lejano al que no deberías apostar, dado que no está asegurado. Andrés: ...Mostrás un perfil muy espartano, ¿no? “Serás lo que debas ser, o no serás nada”. La claridad requiere que cada cosa se llame por su nombre. Andrés: ¿Qué pasa cuando una persona, no se tiene propósito alguno? El hombre se convierte en masa. Se une en manada y sobrevive... ¡Un barco a la deriva, termina encallando! Roy: ¿Podés darnos títulos de posibles propósitos? Tal vez así nos quede más claro. El hombre está en constante cambio, por lo tanto sus propósitos van cambiando, sus intereses se modifican, hasta que encuentra el Gran Propósito. De pequeño su propósito es alimentarse, jugar y recibir amor. En la adolescencia su propósito es llamar la atención, ser popular y conocer. Al poco tiempo, eso se transforma en deseos de alcanzar sexo, fama, dinero y poder. Cuando obtiene esto, su propósito es la familia, el amor, la contención que no

- 22 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

encontró en ninguno de esos estadios. En la vejez, el propósito es no morir. Si pueden hacer una abstracción de estos estadios aparentes, encontrarán que cada etapa, cada modificación de propósito, no es otra cosa más que diferentes maneras de buscar a Dios, aunque sin saberlo. Cuando no se satisface ese encuentro, el hombre queda literalmente hundido en el vacío existencial... Melina: ¡Si es por eso... cada vez hay menos gente creyente! Creer o no creer es dualidad, es lo mismo que confiar o no confiar. Estoy hablando de otra cosa. Una gran mayoría tiene Fe, pero le pone nombres falsos a su búsqueda, como Pareja, Poder, Fama, Dinero, Inmortalidad. Si llegaran a conocer su selva interna, se darían un buen susto. Roy: Decís que deberíamos tener como Propósito a Dios... Yo creo en Él, se que está por algún lado, pero sinceramente, mi propósito es vivir lo mejor posible. Esa fe no me alcanza para que sea un motor que me mueva a ninguna parte. Y no te sientas mal por eso. Nunca hay que sentirse mal por darse cuenta que algo no está a nuestro alcance. Hoy te doy una hipótesis: Toda aspiración humana, reserva una oculta motivación de conocer la Fuente de Creación, el Origen de todo lo creado. Es una tendencia “que viene” con nosotros y que luego nosotros nos dedicamos a desviar, es decir, a traducir equívocamente. Tu tiempo dirá si es una hipótesis confirmada o no. Andrés: A mí me pasa algo muy similar a Roy, la pregunta es: ¿Cómo se explica que se de esa desviación? ¿Por qué si la tendencia es a buscar ese Origen, esa Fuerza, la gran mayoría de personas lo traduce en metas como sexo, fama, amor, dinero, o lo que fuera? Hay varias explicaciones, de las cuales voy a elegir la más sencilla: Esa traducción equivocada es el efecto de la ilusión, lo que llaman los orientales, el Maya. Se trata de un velo que oculta lo que es y que nos muestra una realidad aparente. Andrés: ¿Por ejemplo? Ver las personas y las metas, como si fueran una estructura estable y definible, en vez de una selva. Entenderse a sí mismo, como un ser inmortal. Eso es ejemplo del maya. Vanessa: ¿Y por qué existe ese velo de maya? Lo puso en marcha el Hombre en el Paraíso, y el resto de la humanidad lo recibe por herencia.

- 23 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Vanessa: ¿Cuándo lo puso en marcha? Cuando quiso ser “conocedor” del Bien y del Mal, probando del fruto de las “Opiniones varias”. Ahí se ocultó la Verdad y surgieron todos los Pareceres de la dualidad. Melina: Y eso… ¿Se puede corregir? Andrés:… Pero lo del Árbol lo cuenta la tradición judeo cristiana, nada más. Error. Todas las religiones del mundo, todas las mitologías narran la presencia de una pareja pecadora. Sólo tomé la más corriente. Roy: ¿Hay alguna manera de descubrir la verdad? Hay que desarrollar la aptitud de la duda. Repito: Duda, no “sospecha”. La sospecha es maliciosa. Hay que ensayar cuestionamiento sobre todo lo que es uno, en principio, y cuestionamiento sobre todo lo que vemos, después. Eso es la duda positiva. Andrés: ¿Un tanto alienante, no? No comparto eso. Si acepto la idea de que “soy buena” es tan perjudicial como aceptar la de que “soy mala”. Entre ambas hay una incógnita: ¿Quién soy? Esa es la duda a la que me refiero. Roy: Si veo una chica linda, ¿tengo que dudar de que es fea? (Risas y comentarios) ¡Tal cual! No es una chica linda, no es un aparato de medidas estéticas. Es una persona que más allá o más acá de su apariencia, es por excelencia, una persona. Definir todas sus posibilidades con algo tan pobre como estar linda o fea… es maya, además de degradante a la condición humana. Lo correcto es preguntarte ¿Quién es esa persona de aspecto lindo? Roy: Hummm… A ver: ¿que integrante de tu selva te lleva a decir “Qué linda chica”? Roy: No lo sé, pero supongo que debe ser un gran felino…

- 24 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

¿En qué zona de tu selva vive? ¿En la mente, la emoción, o el instinto? Roy: Creo que en el instinto… Así es. Tu instinto la diferencia por linda, podrías haberle dicho “rica”, porque lo que busca tu definición es comerla. Ahora bien, no es una torta de chocolate, sino una persona. Si conocieras al depredador, no te sentirías protegido por la opinión general, y estarías apto para separar la visión de la persona, del apetito por la hembra. Roy: Y en ese caso… ¿Cómo sería? Lo más interesante es que manejarías tu depredador, en vez de estar manejado por él. Esta diferenciación que parece una simpleza, llena el diario de noticias desagradables. El hombre (genéricamente hablando) tiende a sentirse ganador cuando satisface sus deseos, pero indefectiblemente es un perdedor, cuando abre el paquete que compró. El deseo sólo sirve al deseo y nunca aconseja bien en otros órdenes. Soledad: ¡Oh, no!... ¿También hay que renunciar al deseo? (Risas y comentarios) No, no es necesario enviarle carta de despido… se va solito no más, cuando se da cuenta que nadie lo escucha. Concretamente, hoy no estás apta a renunciar a la torta de chocolate, pero a fuerza de conocer tu deseo, llegará un día en que la torta, no te será necesaria. Andrés: ¿Estás refiriéndote a la sublimación del deseo? No. Para nada. No hablo de sublimar nada. Simplemente hablo de verlo, conocerlo, saber cómo y por qué requiere. Aprender a detectar quién y cómo lo llaman desde afuera. Cuando este proceso está bien cumplido, uno en su fuero interno y conforme a su propio Propósito, decide si va a acceder o no. La situación se invierte, no hago lo que mi animalito quiere, sino que el animalito hace lo que le digo. Les recuerdo nuevamente el Génesis: al Hombre, como punto cúlmine de la Creación, se le ha dado la potestad de enseñorear (domeñar) todo lo creado... y no a la inversa, como generalmente sucede. Roy: Supongamos que acepto que soy una selva: ¿Dónde estoy yo en ella?

- 25 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Es la mejor pregunta que podés formular. La mejor respuesta que te puedo dar es: trabajá de explorador y buscalo. Roy: ...Pero si no tengo de partida un yo para buscarlo. ¿Quién lo va a encontrar? Tarzán, el rey de la Selva. (Risas y comentarios) Entiendo la reacción que tuvieron, pero no di una respuesta esquiva. ¿Quién mejor que Tarzán para recorrer la selva de punta a punta? Andrés: ¿Puedo preguntar quién es Tarzán? Es otra facultad que nace con el hombre y que por falta de práctica se adormece. Es una presencia que está en nuestro interior y que nos informa qué estamos haciendo, pensando, sintiendo, deseando... Andrés: ¿La Conciencia? No. Deviene de ella, pero no es ella. Es una facultad netamente humana. Cuando el gato sube a una silla, no sabe que está subiendo a la silla. El hombre sí. A diferencia de la Conciencia, este factor Tarzán no juzga, sólo informa. No le dice “subirse a la silla está mal” sólo le informa: Estás subiendo a la silla, estás comiendo, estás hablando, estás escuchando. Andrés: ¡Es el estado de conciencia de sí mismo! Ese es un título presuntuoso para un estado demasiado común. Andrés: ¿Es la razón? No. El Tarzán al que me refiero, no dictamina, no selecciona, no imagina, no supone, no juzga. Sólo releva datos, saca fotografías. Es concreto. Vanessa: Me parece que lo entiendo, pero si es lo que pienso, no está permanentemente. Hay momentos en que “me encuentro” comiendo, caminando, etc. Ahí qué pasó ¿Tarzán no funcionó? ¡Deberías volver a ver aquellas viejas series! Tarzán nunca duerme como un topo, siempre está con algún sentido despierto, siempre atento al menor cambio de ruidos, de movimientos... Tené

- 26 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

por seguro que, si se produjo una desconección, la causa de esa interrupción no es Tarzán. Andrés: ¿Quién o qué es el responsable, entonces? Cuando ese vigía desaparece, significa que estamos identificados con algún aspecto interno o externo. Melina: Pero concretamente, ¿qué función tiene ese Tarzán? Es potencialmente, el encargado de buscar diamantes en la selva interior. Melina: Es decir, todo lo que es bueno y valorable en uno... No. ¡Al contrario!... Todo lo que es confuso, mecánico, tramposo, degradante, conflictivo, bajo, sucio, etc. Melina: ¿Qué tiene todo eso de diamante?... ¡Más bien sería basura...! Eso depende sobre qué río navegás. Si el fin de tu vida es halagarte, complacerte, y recibir otro tanto de tu entorno, el encuentro con el error es pavoroso y hasta llega a ser causa de suicidio... La aptitud de observar el mundo interior es, para los “imagen dependientes”, algo insoportable. Pero, por suerte, hay muchas personas que consideran que este tiempo espacio es una oportunidad para el aprendizaje y a la realización personal. Para estos últimos, descubrir un error, es poseer un diamante. Melina: ¡Eso es ser masoquista! ¿Por qué me voy a alegrar, por el hecho de descubrir que estoy en falta? Porque a partir de ese momento, “esa falta” (como vos la llamás) empieza su período descendente hasta desaparecer. La observación y el trabajo interno, logrará que en el futuro, ya no pertenezca a nuestra selva. ¿Te parece poco motivo de alegría? Melina: ¡Hmm!... ¡No se!... ¿Preferirías acaso pasar toda tu vida ignorándola? Andrés: ¿En qué lugar de la selva están esos diamantes? Diseminados como campos minados, escondidos en lo más inédito, cubiertos de hermosos follajes, en el fondo de los arroyos y pantanos… En todas partes… Ahora bien, esto no es un viaje aconsejable para ninguna persona impresionable. Allí hay que ir con mente fría, coraje y dispuesto a soportar todo.

- 27 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

Roy: ¿Qué nos va a mostrar ese Observador? Ya se los dije: Lo positivo y lo negativo que habita en nosotros, lo genuino y lo falso, lo armado y lo espontáneo, el por qué de cada sentimiento, dónde formamos cada mecanismo, cuáles son las estructuras que nos sostienen, qué nos motiva verdaderamente, qué fuerzas ejercen poder sobre nuestras conductas, y aún más, develaremos gran parte del mensaje subconsciente. Melina: … Pero el encuentro de esos diamantes es muy doloroso. Sí, duele. Pero no duele en vano. Por supuesto que no duele en el sentido de una estúpida y falaz autoestima idealizada, sino que duele en la Conciencia del error y de todas sus consecuencias. Ahí duele, pero detrás de ese dolor, viene el equilibrio, la Vida como Don, el esplendor día a día, la Paz… Fundamentalmente, la realización como Persona. Soledad: ¡Es difícil optar por un camino de dolor! El dolor es parte inevitable de la vida. En este momento sufren mucho más. Vanessa: ¿De qué manera sufrimos? Nadie se satisface con lo que logra. Nadie disfruta el momento, siempre están pensando en lo que fue o temiendo perder en el futuro lo que tienen. Sufren por poseer y cuando poseen por no perder. Sufren por alcanzar una meta y luego sufren por mantenerla. Sufren por conciliar un amor, y después sufren por querer quitar ese amor de sus vidas. Sufren por lo que puede llegar a venir, sin saber si va a venir. Sufren cuando les tocan el amor propio, cuando pierden, cuando ganan… ¿Para qué sirve ese montón de sufrimiento vano? Soledad: ¿Y para qué sirve el sufrimiento que vos proponés? Justamente, para dejar de sufrir en vano, para aprender a caminar por la cuerda finita de la vida, y para hacer de este tiempo y de este espacio, una obra de arte. Pero mucho más importante que todo eso, sirve para hacer lo correcto, y cuando se hace lo correcto, es posible evitar la explosión y la implosión de las consecuencias de la vida. Soledad: ¿De que manera explota la vida?

- 28 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

En algún recodo del camino, nuestros contenidos oscuros y egoístas nos esperan con los “efectos” que conciente o subconscientemente hemos creado. Después podemos catalogarlos como se nos ocurra: Injusticias de la vida, destino cruel, mala racha, brujería… ¡Se puede poner cualquier título! El resultado no varía. Hemos sido causa subconsciente de un efecto que nos explotó en la cara, pero como no sabemos ni cómo, ni por qué, solemos agravar la situación con extrañas conductas como culpar a alguna deidad, al Don de la Vida, a la envidia de la vecina… ¡Cualquier cosa! Roy: ¿De qué manera la vida implota? Somos creadores de nuestras desarmonías y por ende responsables, aunque nos neguemos a verlas o aceptarlas. La pregunta es ¿Qué sucede con esas creaciones humanas que supimos concebir…? Son energías de doble efecto, uno externo y otro interno. ¿Qué creen que sucede con la persona que acumula errores en el subconsciente? Andrés: Neurosis, psicosomáticas…

culpa,

desórdenes

nerviosos…

enfermedades

Si nada se pierde y todo se transforma… Cada intención, sentimiento, pensamiento negativo abrirá nuevas cuevas, y el Hombre quedará perdido en su propia selva, víctima de las bombas que él mismo activó: enfermedades, vejez prematura, amargura, depresión, violencia… y otras similares. Eso es implosión. Andrés: En lo que a mi respecta, sólo me quedó una pregunta. Sí, con gusto. Andrés: ¿Para qué y desde dónde convocás a estas reuniones? Si conocieras tu selva, no necesitarías preguntarlo, ni creerme.

- 29 -


¿POR QUE? Y ¿DESDE DONDE?

CIERRE DEL CAPITULO Cuando Mónica dijo por aquel entonces, que “con que un grupo pequeño de gente cambiara, bastaría para cambiar todo”, ninguno de nosotros terminó de entender lo empírico de su afirmación. Hoy entiendo que se refiere a lo que la ciencia recién empieza a entender como “campo morfogenético” que consiste en una teoría derivada del trabajo sobre el Orgon de W. Reich. Sheldrake, el creador de la teoría, estudia la posibilidad de transmisión no local ni hereditaria, entre miembros de una morfología similar. Una rata de Australia va a saber algo que aprendió una rata en el otro extremo del mundo por “resonancia mórfica”. En su libro “Nueva ciencia de Vida”, explica el proceso; el cual no viene al caso reproducir por su complejidad. Un experimento realizado sobre esta hipótesis por la revista New Scientist (Londres), se llevó a cabo con gente de varios países; a quienes se les dio un minuto para encontrar rostros escondidos en un dibujo abstracto, luego, se midieron los resultados. Las respuestas fueron entonces transmitidas por la BBC de Londres, donde al menos un millón de personas se esperaba que las vieran. En lugares donde la BBC no era recibida, inmediatamente después de la transmisión fue realizado el test de nuevo. El porcentaje de gente que encontró los rostros, era mayor. En un 76% !!!. Se estima que hay cien a uno posibilidades de que sea por azar el resultado de esto. Los campos no locales, o sea fuera del tiempo y del espacio, transportaron la información de la gente que no la recibió por TV. De esta forma, la evolución psíquica o espiritual de un grupo de sujetos puede crear una ola que por resonancia morfogenética, sacuda todo el resto, sin necesidad de hacerlo de manera expresa. Esta experiencia sirve también para explicar el fenómeno de las modas y la razón por la cual Mónica insiste siempre en mantener un filtro en cada uno de nosotros, a través del “Por qué y desde donde”, dado que la resonancia morfogenética también tiene dos filos, y puede ser utilizada para lo positivo y constructor o para lo negativo y destructor. Sólo buscando cual es la tercera fuerza que detona nuestros actos, podemos llamarnos verdaderos conocedores del concepto de libertad. Si obramos por y desde uno vaya a saber qué, sin que medie la conciencia, sólo somos robots receptores de órdenes de un gran control remoto controlado por alguien más.

- 30 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

CAPÍTULO II Nadie puede ver lo que no es

Introducción y cierre del capítulo realizado por: Andrés Frasca - 31 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Uno de los objetivos que nos propusimos al escribir este libro, fue lograr volcar con la mayor claridad posible, toda la experiencia del aprendizaje recibido durante muchos e inolvidables encuentros y, con especial atención, tratar de no perder el contenido vivencial que acompañaba este proceso. Releyéndolo, creo que lo logramos en gran medida. Sin embargo,... no quisiera que el lector entrara a esta reunión sin algunos comentarios previos, que espero puedan ayudar a su mejor comprensión. El tema de esta reunión, de seguro va a producir un efecto desestabilizante en sus mentes, ya que propone una visión muy contrastante con la manera en que las personas están entrenadas para mirar la realidad de sus vidas y del mundo que habitan. Describe un escenario evolutivo de los seres humanos con una perspectiva que los va a ayudar a poder mirarse en forma diferente a la que cotidianamente están acostumbrados. Retoma una concepción de la persona y sus circunstancias que otorga la posibilidad de comenzar a diferenciar claramente qué es una persona y cuáles son estas llamadas circunstancias. Van a poder encontrarse con una renovada perspectiva de lo que significa la libertad y el libre albedrío. O sea, en qué consiste exactamente, esa posibilidad que tenemos los seres humanos de elegir. Y más aún, cuáles son esas notas distintivas que nos hacen humanos, personas en evolución o máquinas mutantes. "Nadie puede ver lo que no es...", también puede comenzar a entenderse como sólo vemos lo que somos o lo que nuestra mente esta programada para ver. La mente humana (en uno de sus niveles) funciona como un sistema sofisticado y complejo que realiza operaciones en forma automática, resolviendo (y produciendo) todas las cuestiones de adaptación sensorial a nuestra vida cotidiana. Es un archivo de memoria y procesamiento de información que ejecuta cientos de miles de operaciones por día. Lo particularmente interesante de este increíble sistema es que prácticamente el 90% o más de los pensamientos que produce son repeticiones de lo mismo, pero... ¿nos damos cuenta de ello? Bastaría con detenernos a observar y registrar los pensamientos que nos provee cotidianamente para comprobar que, en su gran mayoría, son variaciones de lo mismo, y que describe aquello para lo cual sólo está programado para encontrar, que por lo general no es lo que realmente es. Sólo una variación de la misma película que se confirma a sí misma. Miramos lo que los programas mentales que se grabaron nos indican que miremos y resolvemos de acuerdo a las soluciones (también grabadas) que ellos mismos nos indican. Todo esto, además, con la convicción de que lo que estamos haciendo es entender una realidad que a esta altura se convierte en "verdad inobjetable" y que por supuesto creemos ser absolutamente "conscientes" de ella.

- 32 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Los sistemas sociales construyen sus propias reglas y lógicas (cosmovisiones) y, al llegar a este mundo de sistemas culturales, entramos en estos "juegos" que nos anteceden y dentro de los cuales se espera que transitemos acatando los "sí y los no" que nos enseñan. Alan Watts (psicólogo) decía que la vida es un juego cuya primera regla es: ..."esto no es ningún juego, esto es muy en serio..." y aquellos que se animen a romperla pagarán un castigo por ello. Afortunadamente la lista de los que se animaron y se animan a ver más allá es vasta. Muchos de ellos nos han ido dejando el legado de sus experiencias transformadas en conocimiento, como ocurre con los cuatro grandes sistemas religiosos. La misión siempre ha sido retomar la secuencia ininterrumpida en el largo camino "del despertar", desde el principio de los tiempos de la humanidad, hasta la actualidad. Este paradigma nos enfrenta con la necesidad de buscar más allá de los límites de nuestros sistemas procesadores de lo sensorio. Nos proyecta a una nueva dimensión desde la cual la vida toma otro relieve. Para comenzar, les recomiendo que traten de conectar la lectura a su experiencia directa, buscando no quedarse con la interpretación ofrecida por el cristal que sus mentes "en forma automática" tratará de ver, comparar o razonar. Para lograrlo, pueden probar responderse las preguntas antes de leer las respuestas que da Mónica. También, de esa manera, dejarán en clara evidencia la respuesta que tienen grabada en sus archivos mentales. Esa secuencia podría proporcionarles la magia de abrir una brecha en la ilusión y posibilitarles ver (aunque sea por un rato) las cosas más parecidas a cómo se presentan, ya que" nadie puede ver lo que no es..."

- 33 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Un niño, es una cinta de grabador en blanco, pero no una cinta cualquiera, sino de las más sofisticadas, capaz de registrar el más pequeño de los sonidos, pero sin aptitud de interpretarlo. Los centros, mental y emocional están en blanco y su instinto, solo elementalmente preparado para la supervivencia primaria, de ahí que lo que graba, no se relaciona con lo que se le pueda decir, sino por la forma en que recibe un estímulo sensorio de placer o displacer. Es importante que no escuchen esto como algo ya conocido, sino que sean aptos de captar lo que esto significa... Todo cuanto sucede en torno al recién nacido y durante sus primeros años, ingresa a borbollones y sin elección, dado que el pequeño carece de parámetros para confrontar... Vanessa: Por ejemplo ¿cómo registraría un bebé un portazo, una puerta que se cierra con violencia? En el lenguaje simple te diría: conocerá lo que es el susto... pero no queda ahí. Si ese portazo coincide con el momento del baño, unirá la experiencia higiénica al dolor aún físico que le produjo ese ruido. Tal vez a partir de ahí, asocie el baño al dolor y cada vez que se lo acerque al agua, llore. Vanessa: ... ¡Pero siendo así, es imposible evitar que un chico se nutra de experiencias negativas! Roy: Habría que criarlo dentro de un frasco... En vez de cunita, usar "tapper baby" (Risas y comentarios) Antiguas y ancestrales culturas sabían esto y aún hoy, hay sociedades que lo practican. La madre y el pequeño se recluyen durante un tiempo, en sectores especialmente destinado a eso y donde todo es armónico, sereno y amoroso. Durante los primeros tres años de vida, el pequeño sólo se nutre de amor. Vanita: ¿Y qué resultado dio esas experiencias? Lo ignoro. No he tenido contacto con ese tipo de cultura... ¡Siempre viví en Argentina!... He leído al respecto, e incluso he visto documentales que exponen el tema, pero desde lo curioso y no desde la investigación de sus consecuencias... El parámetro más próximo que tenemos, es observar el reflejo social de culturas que hacen de la familia un culto, de aquellas que sólo son depósitos de crianza. Lo esperable es que alguien propiciado a sí mismo, sea una persona más completa, más radiante, no en actitudes, sino en verdad interior... Lo que puedo decir por experiencia, es que la mujer, para poder cumplir de manera legítima su rol de madre,

- 34 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

antes de concebir un hijo debe sentirse apta para dejar de ser flor y convertirse en raíz. Vanita: ¡Dejar un primer rol, para asumir uno secundario a favor del hijo! Lo importante es que no lo haga por catálogo ni por mandato. Si por convicción es raíz, su hijo será flor... nunca se ha visto en la Naturaleza, que una flor sea apta para engendrar otra flor... Pero estamos haciendo un desvío del tema de hoy. No pertenece a nuestro ámbito determinar formas de crianza. Lo que interesa hoy es que quede claro y comprendido que cada uno de nosotros, fue ese niño que, como una hiper sensible cámara filmó sin filtros, sin guión, sin objetivo ni previo mensaje y, además, fuera de contexto. Vanita: ¿Por qué fuera de contexto? Si hoy vamos al cine a ver una película que no conocemos, y llegamos tarde a la función, la escena que refleja la pantalla será interpretada por nosotros, fuera de la trama general. Al cabo de unos minutos, ajustamos esa interpretación, es decir reformulamos y adaptamos la interpretación de la escena, al contexto general. Es decir, como adultos, tenemos con qué comparar, cómo ajustar conceptos y elementos para adaptarnos y así incorporarnos, en más o en menos, al mensaje del autor...Analógicamente, el niño llega a la vida, cuando la película está por la mitad... Nadie le explica la trama, y aunque se la explicaran, tampoco entendería. Todo es nuevo para el bebé, dentro de un engranaje ya establecido al que debe adaptarse por razones de supervivencia. Roy: ¿Cuándo empieza a entender? Con el transcurso del tiempo y el desarrollo de ciertas facultades intelectuales. Mientras tanto, todo es experiencia sensoria y asociación. Se golpeó la puerta cuando se bañaba... en más, él, cada vez que vea el agua, llorará. Es del todo imposible que separe una de otra instancia, como podría hacerlo un niño más grande o un adulto. Esas experiencias que, en su gran mayoría, sólo el bebé conoce, pasan al sector subconsciente y desde allí, percibirá la realidad. Es decir, en el caso del ejemplo, cuando crezca tendrá cierta "inexplicable" aprehensión al agua. Roy: ¡Jamás será campeón de natación! (Risas y comentarios)

- 35 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Así es, pero volvemos a caer en información teórica. ¿Por qué el niño del ejemplo jamás será campeón de natación? Vanessa: Porque le quedó grabado como una experiencia dolorosa... Algo más, Vanessa: ¡Esa es su verdad...! Vanessa: ¿Cómo su verdad? Así va a vivirlo a través de su vida, y será inútil cuanto se diga y obre. Para esa persona el agua será desagradable, estará asociada al dolor. Vanita: Bueno... ¡pero puede hacer una terapia psicológica, y aprender a superarlo! Desde ya. Cuando alguna parte de la grabación interfiere en el desarrollo de una vida normal, se procura resolverlo. Pero debemos ir a otro estadio más sutil... El "Yo soy así" que llevamos como escudo, es solamente el resultado de ese período de grabaciones antojadizas... y no creo que nadie estaría dispuesto a realizar terapias por causa de contenidos que considera legítimos, propios o que cree que no interfieren en su vida cotidiana. Diego: O sea... A ver si entendí bien... ¿Estás diciendo que nuestros conceptos, nuestras opiniones, lo que nos gusta o rechazamos... es consecuencia de lo que se grabó al boleo, sin intención y como vino? Esa etapa es la cuna de todas las inclinaciones futuras, las que naturalmente se irán perfilando, coloreando, justificando... pero siempre como proyecciones de los primeros tres años de vida. Allí se forma la jaula, de la que el hombre es prisionero. Allí nacen sus diferentes yoes, se arman sus mecanismos, sus creencias, sus entes... Allí se forma un mensaje, que imprimirá en todos los actos de su vida futura: una interpretación casual de su existencia, que no es la verdad, pero que uno vive y defiende como si lo fuera. Vanita: Para mí es muy fuerte... Es decir... que el hecho de que a mí no me guste el chocolate ¿no es una elección sino una consecuencia? Todo es una consecuencia. Tus poderes y tus limitaciones. Vanita: Y... ¿Qué es mío?... ¿Qué es lo que me pertenece?... ¿Dónde estoy yo como persona? En una elección que hiciste, cuando no sabías que elegías. Es ese algo, ese Alguien que espera tu rescate. Es esa "cinta en blanco" que no es "nada" sino que "es" la persona, lo auténtico, lo

- 36 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

genuino, la esencia misma del ser, sin condicionantes ni domesticaciones. Es ahí donde está el mensaje, el por qué de la vida, la razón última, la verdad individual... Roy: O sea... ¿"Yo" sería el que graba?... ¿El operador de cámara? Exacto. Sos el que está detrás de la experiencia sensoria y "no" la experiencia sensoria misma. Vanita: No entiendo a qué te referís cuando hablás de una elección, que no supe que estaba haciendo... Se suele pensar que la libertad consiste en hacer lo que a uno se le da la gana. Ya han observado y comprobado en experiencia propia, que hacer lo que a uno se le da la gana, es un voluntarismo propio del Ego, el dominio de Nebt, el sometimiento a la voz contraria al Deber Ser. Un estadio de complacencia negativa, cuyo resultado es el debilitamiento de la persona. Contrariamente, Libertad es conocer "desde dónde" las ganas quieren y desde allí decidir si es correcto o no, llevarlo a cabo. Esas son las decisiones cotidianas a las cuales estamos expuestos todos, para no llevar una vida de animalito. Ahora bien, por sobre esas decisiones cotidianas, en la vida se presentan tres fundamentales, en las cuales no participa la lógica, ni la observación, ni el conocimiento. Andrés: Entonces... ¿En base a qué se toma una decisión? No hay definición. Esto también es importante que lo integren a sus posibilidades: no todo es definible, no todo es cuantificable. El que define, cuantifica, especifica, es el aparato sensorio. Estamos hablando de algo, de alguien que está detrás de esos cinco sentidos, por tanto ignora sobre peso, medida, color, tamaño, etc. Si ese algo o alguien, llegara al mundo con experiencia y conocimiento sensorio, al llegarle el estímulo del ruido que hace una puerta al cerrarse con violencia, interpretaría correctamente: "eso es un portazo" y en nada lo asociaría al agua del baño. La persona es previa al aprendizaje. Ser bebé significa aprender a reconocer estímulos del aparato sensorio... y no aprender a ser persona. Roy: ¡Obvio!... Si no fuera así, con un poco de dedicación podríamos convertir al gato en persona, en cuyo caso no tendría que estar disculpando todos los desastres que me hace. (Risas y comentarios) ¡Es cierto!... Sin embargo fijate que no es tan claro para el común de la gente. A los bebés se lo trata como adultos

- 37 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

disminuídos y a los animales, como personas esclavas. Hay que respetar la naturaleza esencial... La domesticación de los animales no debe sobrepasar el estadio de la convivencia. Algo así como "este es tu límite y este es el mío", pero no es justo ni necesario deteriorar la naturaleza y convertirlo en un sometido. Con respecto al niño, no merece collar alguno de pertenencia. Nadie es su dueño, sino Dios. Los padres son representantes del Gran Señor y su misión es descubrir la persona... "el operador de cámara"... y procurar mantenerlo vivo, existente, impidiendo que el aprendizaje sensorio lo devore, lo anule, o lo esclavice. Vanessa: Ahora... No sé, me parece que estoy un poco confundida... pero... ¿Acaso no es necesario poner límites a un chico, para que no se desvíe en cualquier cosa? Lo primero que es necesario, es tratar de determinar "quién es"... cuál es su particularidad. Lo habitual es forzar al niño para que "sea"... como los demás, como el tío, como el admirado abuelo... Eso es tomar la masa y ponerla adentro de un molde. Esa persona jamás se sentirá bien consigo misma. Ha sido obligada a ser lo que no es. Eso no es educación, sino domesticación. Diego: Pero... ¿Cómo se sabe quién es? Si la madre dejó de ser flor para convertirse en raíz, sabe quién es su hijo. Ella sabe en su corazón ese gran secreto y lo traducirá en una especial intuición que la paternidad no posee... ¡Claro que no hay que aprovechar esta ventaja para imponer conceptos aprendidos o de moda, pareceres, o antojos personales!... Debe ser genuina intuición. Por otra parte, esa preponderancia femenina debe extenderse sólo mientras dura la etapa de la Inocencia, alrededor de los tres años. A partir de allí, la grabadora actúa mucho más espaciadamente, comenzando la etapa de desgrabar o dicho de otra manera, la etapa de demostrar y aplicar lo aprendido. Vanessa: Ese puede ser un buen momento para chequear qué estuvimos haciendo, ¿no? Si estuvimos obligando al niño a ser lo que no es, en esa edad el pequeño será un solo chillido. Disarmonía puesta en acción. Contradicción que será aumentada por las reacciones negativas del entorno, al que perturba. Si su persona fue respetada y amparada por el amor, manteniendo la instancia del conocimiento del pequeño y la aceptación de su persona particular, a esa edad aparecerán todos esos sentimientos y estados que uno suele referir al esplendor de la Inocencia. No obstante las travesuras, inoportunidades, y la sobreexigencia de atención que requieren, el pequeño será un nuevo sol y no un remedo de sol.

- 38 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Andrés: ¿Qué sucede con los aspectos negativos del niño, los caprichos, enojos, rabietas y demás aspectos similares...? ¿Se los acepta también? La respuesta está en una afirmación: Ningún "operador de cámara" en el significado que le dimos, nace conociendo el odio, el rechazo, el resentimiento, la competencia, la envidia... Todo eso se aprende. Si en el mejor de los casos, la madre aceptó su condición de raíz, nutrió en sentido eseral a su hijo en respuesta a una intuición especial, pero ella misma es un saco de rabias, envidias, odios contenidos, egocentrismos y angustias... todo eso, quiera o no, lo enseñará al pequeño y luego tendrá a la vista lo sembrado. En ese caso, se puede corregir la mecanicidad del niño en base a estímulos, premios, castigos, reprimendas... pero lo grabado está grabado. No se borra. Vanita: ¿Nunca más se borra? Lo único constante en el hombre, es el cambio. Si la persona quiere, es decir, si "el operador de cámara" quiere, puede salir de allí hacia un estadio superior. Si no quiere, por ley de gravedad, irá paulatinamente hacia abajo, a mayor degradación. Vanessa: Hablás de la intervención de la madre. El padre y los abuelos ¿no tienen responsabilidad en esto? La responsabilidad cabal que cabe a los papás, abuelos, tíos y demás integrantes de la familia, durante este período de los primeros tres años, es ser proveedores continuos de emociones positivas hacia la mamá. Ellos deben ser lugar de remanso y fortaleza, un sitio donde la contenedora es contenida. El agua para que esa raíz se mantenga vital, espléndida, sana. Vanessa: pero... ¡En la realidad es todo lo contrario! Se da en lo cotidiano todo lo contrario, pero eso no es la realidad. Esa es la enfermedad. En ese síntoma patológico de "cualquier cosa que se me ocurra es válido" el bebé suele jugar de balón en una cancha de futbol. Todos creen saber qué es lo mejor para él, y entre tironeos y forzadas suplencias del rol materno, lo único que crean es una atmósfera absolutamente contraria: nervios, angustias, discusiones y una áspera soledad para la madre que no puede traducir de manera lógica y puntual los dictados de su corazón y termina rendida ante el ataque externo. Las consecuencias, ya se dijeron. Vanita: ¿De qué depende el hecho de que el "operador de cámara" quiera o no quiera, cambiar a una emocionalidad más positiva?

- 39 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Es una respuesta que hace rato quedó pendiente. Aquí hay un ensamble entre lo que es para mi experiencia, y lo que se me presenta como un recuerdo vívido del pasado. Una religiosa, la Madre Concepción de la Orden de las Misioneras del Sagrado Corazón de Jesús, a quien mi alma debe un altar y a quien por su obra fecunda de sembradora, seguramente Dios recibió por Santa, dijo en una oportunidad y allá por mi niñez, que Dios llama tres veces en la vida de una persona. Esas palabras abrieron algo dentro mío, pero fue necesario transitar toda una vida, para saber su contenido... (Mónica quedó unos minutos en silencio) Y sí... ¡Aquellas palabras reservaban mucho contenido!... No importa qué suceda con el entorno, más allá de actitudes positivas o negativas de mamá y papá... la guerra, las mutilaciones psíquicas o físicas, y de toda circunstancia agradable o chocante... Mucho más inalcanzable que la decisión lógica, meditada o comparativa, en la vida de todo ser humano... Ahí, en ese no frecuentado rincón de uno mismo, hay tres momentos claves, donde "el operador de cámara" utiliza el Libre Albedrío total y absoluto para inclinarse a la opción "sí" o a la opción "no"... Por favor no asimilen esto a nada conocido. Deben buscar verlo, palparlo, recuperar esa instancia y aunque está profundamente escondida, deben hacer todos los intentos por revivirla... Vanita: Bueno... Estoy tratando de imaginarlo, pero no creo que eso sea suficiente... Tal vez ahora no puedas recordar la experiencia, pero si hacés un sobrevuelo por tu vida, tal vez puedas determinar una constante, un especie de estela que fue tiñendo de un color propio, todos los acontecimientos. Hay algo en el interior de cada uno que, pase lo que pase, se mantiene sin transgresión. Hablo de una decisión fundamental, por eso (valga la redundancia) "fundamentaliza" todas las actitudes y define la resolución de todas las tendencias. Roy: Pero... ¿Qué es? ¿Una actitud?... ¿Un pensamiento?... ¿Una inclinación? Es aquello que diferencia que dos personas, bajo iguales circunstancias, resuelvan de manera completamente distinta. Vanessa: ¡Un sello de personalidad! No. Nada tiene que ver con una síntesis de las columnas Debe y Haber de la Vida. No es un rasgo, ni un perfil. No es una

- 40 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

consecuencia de lo experimentado y más aún, no interviene en ello la voluntad común, aquella que nos define entre un alfajor de almendras o un tomate relleno, o la que determina un cambio de sitio laboral o de estado civil. Nada tiene que ver con esos movimientos habituales del hombre. Es una opción del Alma, no hay otra manera de definirlo. Andrés: Nos quedará más claro después, pero... ¿Qué es lo que se define ahí? Ascender o bajar por la escala evolutiva. Degradarse o evolucionar. En el terreno espiritual su traducción es: estar con Dios o estar con el Diablo. Roy: Y esa elección: ¿Cómo se traduce en la vida común? ¿En buenas y malas personas? Ahí está el punto. Si entendemos por "persona", el balance entre aspectos positivos y negativos, la decisión fundamental no interfiere. Alguien puede ser un dechado de buenas actitudes hacia lo externo, y a la vez un pozo de odio y resentimiento hacia adentro. Ahora, si entendemos por "persona" al "operador de cámara" entonces sí, la decisión fundamental interfiere directamente, dado que es el protagonista. Vanita: Y eso... ¿en qué se ve?... ¿Cómo se traslada a la vida en común? En que detrás de sus manifestaciones de personalidad, además de cometer errores y aciertos, de equivocarse y acertar... próspero o pobre, sano o neurótico, agradable o desagradable, su fuero íntimo siempre resuelve elevándose, o degradándose. Vanessa: La diferencia entre una persona optimista o un depresivo... ¡No! Mucho más allá de esa "casualidad". La diferencia estriba en que resuelve por algún grado de Amor o por algún grado de Odio. Andrés: ¿Cuáles son esos grados del amor? Es interesante que lo preguntes, ya que aquí también hay mucha fantasía. El grado de amor más elemental surge en la ausencia total de necesidad de venganza o revancha, aún ante las más graves ofensas. Un airado: "Chau, me voy a otra cosa" sin tener la necesidad de clavarte un puñal para escarmentarte o que no te olvides de mí, es un elemental acto de Amor. Andrés: ¿El más alto?

- 41 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Dar la vida por el otro, como Cristo. En el medio, hay millones de matices... Andrés: ¿Dónde comienza el odio?... Digo, el más incipiente... Cuando empezás a vivir el activo de otro, como tu propio pasivo. Es decir, cuando algún bien material, físico, psicológico que posea una persona, lo vivís como si ella te lo hubiera robado. Ese cosquilleo que produce molestia ante el bien del prójimo, es el primer paso del odio. Andrés: ¿Y en su punto máximo?... El Anti Cristo. El punto contrario al Amor. Un descalificador total. Vanita: ¿Es peor que un asesino? El asesino de cuerpos, no mata lo esencial. El Descalificador, sí. Eso es mucho peor. Vanita: pero cómo es peor... ¡No pregunten más! No voy a contestar. Algún día hablaremos... El día que sea oportuno... Ahora seguimos con el tema que estábamos tratando. Lo que estuvimos hablando hoy, no es para usarlo como crítica social, ni como lustre de excentricidad, ni para ser buenos consejeros de otros. Estuvimos hablando de cada uno de nosotros, de lo que contiene nuestro hoy. De nuestro particular producto, el que lleva nuestro nombre de pila. Diego: Sí, pero eso ya fue... ya pasó. ¿Qué podemos hacer con lo que ya fue? Corregirlo. Diego: ¿Se puede corregir el pasado? Totalmente. Roy: ¡Eso es magia! ¡Mi alma desea que un día de estos saques de tu galera un conejo y así finalmente satisfagas tu sed de magia! Roy: Pero... ¿Qué tenés contra la magia? Nada y todo. La vida en sí misma es mágica. Me opongo cuando alguien pretende demostrarme que es "El Mago". Me asombra

- 42 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

continuamente la tendencia que tienen hoy los jóvenes a la búsqueda de poderes ocultos y soluciones solapadas. ¿No ven en eso una gran minusvalía? Vanita: No. No veo minusvalía... ¿En qué sentido hay minusvalía? En el hecho de depender de un brebaje para lograr lo que se busca o vencer lo que entorpece y en ambos casos, a escondidas. Cuando para lograr algo, es necesario esconderse, ocultarse, apagar la luz, o encerrarse bajo llave... es porque la Conciencia acusa y nadie que tenga apagada su propia luz de Conciencia, tiene cabal sentido de su propio valer, ni de su propia dignidad. En otro momento vamos a hablar de los elementos que intervienen en esa búsqueda de soluciones "mágicas"... Ahora voy a dar el "brebaje" para corregir el pasado. (Risas y comentarios) Y ya que estamos hablando de insatisfacciones personales, tomemos el ejemplo de un niño que fue constantemente desacreditado por su familia en palabras, actitudes, miradas, hechos y demás. En principio, si su opción fundamental es ir hacia lo positivo, hacia el Bien, ese pequeño crecerá <<resistiendo> >> el mal hedor de su entorno. Soportará, se resignará, aprenderá precozmente a sufrir, a ocupar un lugar secundario. Si se quiebra, será una persona insegura, inestable psíquicamente, acomplejada como se dice de manera corriente. Ahora bien, otro niño, bajo las mismas circunstancias, decide desde su Libre Albedrío degradarse, entonces se llena de odio, resentimiento, sed de venganza, de destrucción de todo lo que pueda. Amargo y herido, se le reconocerá por sus frutos. Nada puede haber en esa persona que sea cristalino, limpio, alegre, puro, espontáneo, sano. Diego: O sea... El que opta por sufrir lo que le toca, se debilita... mientras que el que se llena de odio, se fortalece. ¡Exactamente todo lo contrario, amigo Diego! Y ahí los quería tener... ¿Así es que para ustedes, "fuerza" es el producto del odio?... Diego: No sé si del odio, pero fuerte es una persona que se sobrepone, que no se deja vencer... En eso estamos de acuerdo: Fuerte es el que no se deja vencer. Por eso, el que se degrada y es más malo que su verdugo, es claramente el más débil, el de alma más pusilánime. Es el que se arrodilló frente al enemigo, y terminó haciendo lo que él quería: degradarse.

- 43 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Diego: Sí... visto así, puede ser... ¿Y de qué otra manera se puede ver algo tan obvio? Hay que tener mucho coraje, mucho aguante, mucha convicción para no ser igual o peor que el enemigo y mantenerse en lo correcto, en lo sano. Roy: Bueno, pero coincidamos que una persona apaleada, que sólo se limitó a sobrevivir calamidades, no es precisamente un triunfador... Hace dos mil años existió alguien que tenía el poder de devolver la vista a los ciegos, la movilidad a los paralíticos, y la vida a los sepultados... Un solo gesto de su mano hubiera sido suficiente para paralizar a los agresores convirtiéndolos en estatuas de piedra... No lo hizo. Fue objeto de humillaciones, burlas, daños físicos, emocionales, psíquicos... y no se defendió. Sólo resistió al mal. ¿Fue un triunfador o un fracasado? Roy: ¡Bueno!... ¡Era Dios!... nosotros somos simples humanos... ¡Siempre y cuando nos convenga, somos simples humanos! Cuando se trata de decidir y obtener, preferimos jugar a ser dioses. Jesús no soporta esa terrible tortura por el solo hecho de ser Redentor, sino también para demostrar gráfica y cabalmente cuál es el camino del triunfo: Resistir al mal y dejar la venganza en el Padre. Contra eso, nada puede. Vanita: Pero si ese es el camino correcto... ¿Por qué Dios permite que el chico de nuestro ejemplo que eligió resistir, quede debilitado, acomplejado y demás? Eso es estúpido. ¡El Señor no elige daños para nosotros!... Tiene cosas más importantes en que ocuparse. El chico de nuestro ejemplo eligió él mismo, ser víctima de sus heridas de guerra, en vez de procurar sanarlas y volver a la lucha. Vanita: ¡No te entiendo! Cuando entre la decisión del alma y la decisión de la personalidad, no se establece el nexo correcto, ese desequilibrio se traduce en enfermedad física o psíquica. Un pie demasiado arriba y otro demasiado abajo, termina por torcer la columna. Andrés: ¿Cuáles son los síntomas que determinan esa falta de relación entre la decisión del alma y la de la personalidad?

- 44 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Hacer lo correcto y después dudar, que es lo mismo que obrar conforme a lo conveniente y no a la responsabilidad. Esa confrontación interna, esa dualidad que pretende como se dice vulgarmente "quedar bien con Dios y con el Diablo" es la que produce el desequilibrio. Vanessa: Hay algo que no me queda en claro, pero no puedo traducirlo. ¿Nos das un ejemplo de eso de "quedar bien con Dios y con el Diablo"? Es alguien que desde su convicción se opuso a algo aberrante, por ejemplo, y tras cartón se muestra permisivo, porque teme "quedar mal" o ser criticado. El Señor muestra el camino correcto, pero como ven, es uno quien elige su destino, aunque después no quiera aceptar sus consecuencias. Roy: ¿Cómo es esto?... En el caso de los ejemplos que veíamos, el que eligió por "resistir al mal" ¿después se contradice?... ¿Eso estás diciendo? Sí. Justamente por tratarse de una decisión no conciente, sino álmica, carece de motivos, especulaciones, justificaciones para su obrar. En vez de aceptar esa genuina voz interna, entra en discusión consigo mismo, se deja convencer, mira de reojo a "los más afortunados" (dicho esto muy entre comillas) y termina lastimado. Vanita: Lastimado, pero no degradado. Decís muy bien. No es que se entregue al odio, sino que se "achica", se minimiza, se cree a sí mismo menos apto, y allí se crean mil conexiones mentales absurdas que lo llevarán a cualquier lado. Andrés: O sea que si esa persona acepta que su decisión es la que debió ser, y no se confronta a sí mismo, ¿puede salir ileso de una situación tan traumática? Nadie sale ileso de ninguna guerra. "La vida no es un paseo" suele decir mi Amigo. Si elegís por degradarte, vivirás lastimado. Si elegís por sostenerte en convicción, podrás sanar. Para el primero no hay Esperanza, para el segundo, sí. Andrés: Eso es muy terminante. No existiendo una razón de peso, un motivo descollante... ¡Se puede regresar de cualquier sentimiento nocivo...! Se puede cambiar un proceso mental, pero no un estado del alma. Generará otra forma de odio.

- 45 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Andrés: Entonces... ¿Se lo da por perdido? ¿No hay solución? Dije que eran tres las posibilidades que teníamos de elegir. La primera entre los seis y ocho años de edad. La segunda alrededor de los veintitrés o veinticinco años y la tercera, cercano a los cincuenta. En esa decisión no puede intervenir nada ni nadie. El que eligió por resistir, tendrá otras dos oportunidades de confirmar o cambiar su elección. El que eligió por degradarse, tendrá igual oportunidad. Andrés: ¡Ahí se emparejan las posibilidades! La razón por la que soy escéptica en cuanto a que cambie la persona que optó por el odio, es que ese sentimiento bastardo tiene mucha prensa en el mundo, y creo que eso influye mucho. El otro motivo, es lo que ustedes presentaron aquí: al odio se le llama "fuerza", y a nadie le gusta ser contado entre los débiles. Esto me duele y angustia de manera muy especial. Si existiera una forma, un método de mostrar a la gente que optó por la destrucción, toda la excelencia de vida que se pierden, y que jamás tendrán acceso a conocer... ¡lo haría!... Nada más digno de pena que aquél que se nutre de su propia carroña... Roy: Dijiste que hay una forma de corregir el pasado. ¿Cuál es? ¡Comprender el pasado!... Si los chicos de nuestro ejemplo se dieran cuenta que todo cuanto les tocó vivir, es sólo por causa de algo superior... Si se dieran cuenta que es sólo una materia a rendir... Si entendieran de todo entender, que toda mala experiencia no es más que una oportunidad de aprender... aquella familia torturadora y dañina, se convertiría al instante, en un medio afortunado para extraer experiencia. Desde "aquí" no hay acreedor de estimas y lauros. Desaparece el vengador... el torturado... Y sólo queda un alumno de la vida, agradecido por la oportunidad de aprendizaje. Roy: Suena lindo, pero poco practicable. No estoy expresando una consigna intelectual ni una pastilla "cal-ma-lo-to-do". Estoy expresando la verdad más grande que puedan esperar. Vanessa: ¿Qué se puede aprender de la falta de amor? Conocer y reconocer qué debilidad impidió a aquél que debía amarte, a renunciar a su derecho. A qué propósito sirvió. ¿Para qué?

- 46 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Diego: ¿Qué se puede aprender de ocupar en la familia, la parte más fina del embudo? Aprender a resistir y confirmar la resistencia. Fortalecerse en el aprendizaje de sufrir, para alcanzar la más sana alegría. ¡Ese es el desafío! Vanita: ¿Qué se aprende del abandono? A verlo como un medio para asirse a Dios. De no mediar una tremenda soledad, el alma no habría aprendido a volar. ¡Esa es la ventaja y la oportunidad! Roy: ¿Cómo se hace para ver la lección que corresponde a cada uno? Primero saber que todas las verdades donde sustentas tus rencores y debilidades, tus apetencias y sueños de poderío... son sólo interpretaciones antojadizas de un Operador de Cámara sin experiencia previa y "no" la verdad. Segundo: Con esa duda positiva, salir en decidida búsqueda del Operador de Cámara, volver a ver su película y separar las asociaciones equivocadas. Tercero, desde esa claridad, verás la lección que estaba predestinada, verás la escena apropiada a esa experiencia, aceptarás que nada pudo ser mejor que esa circunstancia para aprender y allí, tu agradecimiento llegará solo. Vanita: ¿Qué nos impide ver nuestras propias vidas desde una óptica distinta? Porque al parecer, nos gusta más ir cargando la vida, que vivirla. En tanto y en cuanto sean el producto de una película antojadiza, casual, y arbitraria... no podrán ver nada distinto a ustedes mismos, a sus propios reflejos. Vanita: ¿Es como sacarse un lente? Así es. Un viejo dicho lo reafirma: "Cada uno ve la vida, de acuerdo al color del cristal con que se mira"... Si tu óptica es verde, verás todo lo verde y en verde. Andrés: Es parecido al proceso de percepción selectiva. Parecido, pero no igual. En la percepción selectiva uno distingue aquello por lo cual tiene algún interés. En el caso que hablo, es mucho peor. No hay un interés, sino un grado de esclavitud que nos condena a ver en los demás, sólo lo que somos. Por ejemplo, si somos personas especulativas, todo lo interpretaremos como que

- 47 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

hay un interés de por medio, siendo del todo incapaces de ver la generosidad. Diego: ¿Tan así? ¡Tan así! Roy: Es aquello de que el ladrón cree que todos son ladrones... Nadie puede ver lo que no es. Si quieren tener una pista de cuáles son sus defectos, observen qué defecto detectan al instante en los demás. El método es igualmente infalible para detectar lo positivo. Roy: O sea: ¿No vemos otra cosa, que no sea el reflejo de mismos?

nosotros

Diego: Hay gente que critica todo, constantemente... Que todo lo que señala es malo, hace mal, o trae urticaria... ¿Qué pasa con ellos? Se odian a sí mismos. No se aceptan ni un poquito. Es parte de su película, pero quien filmó, tiene otra visión de las cosas, y eso es lo que hay que rescatar. Hay quien se adapta a la sin razón... y otros, a los que la sin razón los vence... El resultado es el mismo. Uno termina convencido que se nace para aprender a competir, estudiar, trabajar, formar una familia, envejecer y morir. Uno termina convencido que vivir es pasar por una cinta de hacer chorizos, cuyo resultado final es desaparecer de la escena. ¿Quién puede explicar o explicarse esto? Andrés: Desde esa óptica... nadie. ¡Justamente!... El recién nacido, el niño que aún mantiene su estado de inocencia, tiene otra óptica, trae otro mensaje... llega impregnado de existencia... Y es literalmente obligado a trasgredirse, para "ser como los demás"... Prueba de ello son mensajes cotidianos como "No seas tonto, no prestes tus juguetes"... "Si te pegan, pegá más fuerte"... "Mirá la nena de al lado que arregladita está, por qué no sos más coqueta"... De disponer de tiempo suficiente, se podría hacer un catálogo de mensajes destructores de la esencia genuina. Todos tenemos que aprender algo, sortear un escollo, superar una prueba. Es ahí donde está el sabor de la vida. El Código Secreto lo tiene el Operador de Cámara. Hay que volver allí, donde no hay mentira, ni maldad, ni distorsión. Hay que volver ahí, al lugar de la Inocencia, el Amor y el Mensaje celeste y mantenerse fiel a ese estado, con coraje y madurez de adulto.

- 48 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

Roy: Es como ir en rescate del niño que alguna vez fuimos. No. Hay que ir más atrás todavía. No al niño, al Operador que grabó al niño. Hay que salir en busca del alma, para que la vida tenga sentido.

- 49 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

CIERRE DEL CAPITULO Ese día, cuando salí de la reunión, vinieron a mi memoria las palabras de Pascal: "hay razones del corazón que la razón no conoce"... y, a la luz de lo vivido en la reunión de la que acabábamos de salir, tomaban otro significado y otra dimensión. La mente, en su formativo intelectual, va construyendo un mundo lleno de explicaciones que dan respuesta a los estímulos que llegan desde el llamado de los sentidos. Los toma en una progresión casi al parecer azarosa y, sobre la base de esto, construye una película que opera en forma autónoma. Una realidad virtual a la cual llamamos la historia de nuestra vida o personalidad, que se proyecta para formar el sentido de nuestra existencia. Una película que transcurre veinticuatro horas y que se va auto-re-haciendo con la misma frecuencia y dedicación. Esta mente automática, nunca se detiene, salvo por algún error o acto voluntario que busque detenerla. Está construida para proveer todas las respuestas que, por supuesto, van a guardar coherencia con todo el sistema de datos y programas que la forman. De no mediar "error", nuestras vidas van a transcurrir dentro de esta película en la cual debemos encontrar sentido y verdad. Espero que, con esta descripción, pueda transmitirles la clara sensación de lo que significa "la jaula" en la que vivimos. Y, junto con ello, el sentido de lo que significa hablar de libertad, conciencia e intencionalidad. Pero no quisiera que este espacio se transforme en un lugar para disquisiciones teóricas. Quiero continuar con la clara intención de buscar un lenguaje que nos provea elementos para la experiencia de la vida cotidiana, ya que, como se habrán dado cuenta, esta enseñanza hace permanente hincapié en el "cómo hacer las cosas", aspecto que por lo general no se suele encontrar fácilmente. En la actualidad, disponemos de textos y películas en donde se describe de múltiples formas a esta jaula mental en la cual vivimos. Pero, cómo lograr el camino de detección y salida de esta circunstancia, no. Cómo se comienza: dejando de ignorar esos fugaces mensajes que nos llegan desde algún lado en nuestro interior y que nos alertan en forma de que algo no está bien dentro de nosotros. Son sumamente fugaces; su brevedad se debe a que rápidamente nuestro sistema operativo llena esa especie de sensación con ofertas en forma de promesas de satisfacciones que seguramente llenarán el vacío o intentarán calmarlo, o también en forma de desconfirmaciones. Entonces, si decidimos renunciar a esa especie de telemarketing interior y tomar "la extraña resolución" de atender a este mensaje,... seguramente nos va a sobrevenir una clara sensación de angustia porque el mundo que se nos va a abrir no está contemplado desde el sistema operativo, y su exploración requiere de otras fuentes de captación para vivirlo. Una clave para saber que estamos en camino, es que este proceso nos produce incertidumbre y con ella experimentamos miedo o angustia. Si no hay alguna forma de incertidumbre (miedo, angustia) podremos saber con certeza que estamos recorriendo el mismo camino... con la

- 50 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

"ilusión" de haber adquirido algo diferente. Lo conocido produce seguridad, tranquilidad aunque no nos guste o no lo queramos más.

Por lo tanto, es muy importante armarnos de paciencia, prudencia, vocación de duda y renuncia a las ofertas rápidas que nos provee el sistema, ya que sólo en la abstinencia al anestésico se nos hace presente el programa y así... conocemos. El autoconocimiento no es un camino de placeres sensoriales; los programas emocionales buscan objetos para poseer y descargar. Los llamados estados interiores como la paz, felicidad o el amor se construyen a través de la libertad interior y, como se darán cuenta, necesariamente implican renunciar a las llamadas "voluntades cotidianas". Tampoco se trata de vivir inhibiendo los deseos, esa es otra cara de la trampa del sistema. No se trata de sufrir por sufrir, se trata de renunciar para conocer y liberarse. La libertad es un estado de conciencia. Y en primera instancia consiste en conocer la jaula en la cual vivimos. No podemos salir de algo que no conocemos. De otra manera es como transitar indefinidamente un laberinto sin el famoso hilo de Ariadna que nos logre sacar. Entonces, como se darán cuenta, el primer movimiento es de entrada, y la entrada se logra siguiendo ese anuncio de malestar, que nos da la llave para abrir la puerta y encontrar ese "testigo" que nos provea la perspectiva para observar y conocer. A esta altura ya podremos comprender por qué se trata de ir para adentro, por qué el "conócete a ti mismo",... ya que si no conocemos "cómo conocemos" no hay esperanza de libertad, o sea de libertad interna. La tarea es ardua y sumamente compleja, pero el camino es claro. Los diferentes capítulos que vamos a ir recorriendo, les van a trazar un mapa guía, necesario para transitar y saber en cada momento dónde están parados. Sin este hilo conductor se caería irremediablemente en estados de impotencia y desesperanza; también podríamos armarnos una vida llena de estados de supuesto bienestar sobre la base de dejar fuera todo aquello que pueda alterar una imagen de nosotros mismos considerada negativa (para nuestro relativo sistema de creencias y valores). Autoconocimiento o autoconvencimiento. Les recomiendo a los lectores que decidan comenzar con la experiencia, que traten de buscar en primera instancia el "qué", o sea qué es lo que estoy observando, para después continuar con él "cómo", o sea cómo es el proceso que estoy observando, que los va a conducir al “desde dónde” sale esa intención. Él “por qué” y lo que implica la historia de un programa llegará sólo a partir del desarrollo correcto de la secuencia. Son esos momentos en que a la persona se le presenta lo que podríamos llamar un “darse cuenta” en donde pasado, presente y futuro se manifiestan como una totalidad de

- 51 -


NADIE PUEDE VER LO QUE NO ES

comprensión. Si la primer pregunta es ¿por qué?, la mente nos enviará una respuesta desde dentro del sistema y seguro será una construcción de tipo racional que originará una cadena de palabras que sólo responderán a más de lo mismo. Y lo importante es poder ver este más de lo mismo, saber a qué intención responde y aprender cómo lo grabó nuestra mente. Pruebe hacer la siguiente experiencia.. Siéntese un rato y trate de imaginar su vida como uno de esos mapas en donde se grafican las diferentes eras de la humanidad y diseñe su propio mapa de vida. Comience a recorrerlo hacia el pasado y busque una escena que pueda reconocer como importante. Como el día en que egresó de la universidad o que comenzó con el emprendimiento que ahora desarrolla, etc. Trate de visualizarla con toda claridad. Y luego continúe yendo para atrás, por ejemplo cuando terminó el colegio primario, el jardín de infantes. Ahora trate de visualizar escenas de la niñez, cuando comenzaba a caminar o cuando estaba en la cuna y era recién nacido. Lo importante es recuperar la sensación de cómo era cuando tenía esas edades. Trate luego de imaginarse el día en que nació, luego véase adentro del útero materno, y luego en un conjunto de células en forma esférica. Vaya encogiendo la esfera hasta llegar a dos células y luego hasta llegar a una sola. Llegado este punto, cruce la línea e imagínese como era antes de eso, sin ninguna célula. Al cruzar este umbral podrá ver que hay algo que no desaparece, aunque no haya imagen de la cual agarrarse hay algo que no desaparece, un observador que no desaparece, un testigo que permanece inmutable aunque las escenas de la vida cambien, y se produzca una permanente transformación. Trate luego de pensar que esta conciencia testigo desaparece, imaginando una época antes de que usted existiera. Verá que es algo que no puede lograr. Sigue habiendo algo que está más allá del tiempo y el espacio trazado en su mapa. No tiene forma ni tiempo y se manifiesta como un impulso vital que fluye con una presencia silenciosa, pura intención y libertad. Lo que parta desde ahí se vivirá en un aquí y ahora fuera del tiempo. Un estado de inocencia y de aceptación de sí mismo. No existen dudas, hay paz. Llegado a este punto, podrán comenzar a observar todo lo que se le ha ido construyendo a su alrededor. Como si fuera un perchero al que se le fue colgando ropa en forma de personajes que encarnan nuestros deseos y temores en un sin número de formas y estilos. Todos ellos encolumnados en listas de "calificados y descalificados", de acuerdo por supuesto a las vicisitudes y cultura particular en que fueron criados. Recuerden que la tarea es ardua y requiere de dos elementos fundamentales para su logro y sostenimiento: amor y humor.

- 52 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

CAPÍTULO III El Foco: Una extraña Compañía

Introducción y cierre del capítulo realizado por: Diego García

- 53 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Intenté muchas veces buscar una respuesta intelectual, una conclusión lógica de las circunstancias de mi vida que explique o me muestre el Foco. No hay caso, no funciona así. Como veremos en este capitulo, el Foco se parece en cierto sentido a la vocación. A eso que llevamos dentro y que nos da determinadas aptitudes y una necesidad de expresarlas, que va más allá de la profesión, la opinión de la gente o la moda. Pero el Foco es más que eso, es más que la necesidad interna de expresar un don, es la necesidad interna de traducir la energía vida, el tiempo vida, en algo. El problema se origina cuando esa “traducción” es equivocada y en vez de perseguir un “Foco de realización”, uno se encuentra persiguiendo un espejismo. Condicionantes sociales (si es o no redituable, oportuno, aceptable, etc.), bloqueos personales (miedo, falta de resolución, apegos, etc.) y la suma de ambos factores, inducen a errar el camino para el que uno está llamado. En esta charla, el lector se encontrará ante la alternativa de dos grandes opciones: un río que lleva a la plenitud de la vida mundana y otro que conduce a la plenitud espiritual. Esto no significa que uno y otro sean incompatibles, no se trata de que una persona que eligió el río de la vida, no pueda, simultáneamente desarrollar su estado espiritual. El tema pasa por “Qué es lo prioritario”, “Qué es lo primero” es decir “Cual es el Foco, el Objetivo primero, el Propósito de vida”. Establecido esto, necesariamente se establece una escala de valores libre de condicionamientos, donde “lo correcto” es lo que acerca al Foco y “lo incorrecto” es lo que aleja de él. Si una persona carece de Propósito claro y definido, navegará por el río equivocado o pretenderá hacerlo por los dos, convirtiendo su vida en una barca a la deriva. Si por el contrario, puede establecer sin dudas el Foco que su alma tiene impreso, la vida toma un rumbo decidido, cuyo puerto de arribo se llama “REALIZACIÓN”

- 54 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Florencia: ¡Es un camino muy solitario! No necesariamente. Florencia: Se alejan de la familia, no forman sus propios hogares, no tienen sus parejas, no sé cómo pueden elegir estar tan alejados de la sociedad. ¿Por qué eligen esa vida? Diego: Es una vocación, como la del médico. Florencia: Pero el médico no compromete toda su vida, sino una parte de ella. Le queda su privacidad, su mundo personal... ¡Es otra cosa! A mí me parece mucho más sano lo que hacen los pastores de las Iglesias Evangélicas o Protestantes, que tienen su vida personal, como cualquier otro profesional. Cumplen con dar a conocer a Dios, y a la vez llevan una vida normal. Si este es desarrollarlo.

un

tema

que

le

interesa

a

todos,

podemos

(Manifiestan estar de acuerdo) Para entender la elección de un devoto, de un religioso, de un alpinista, de un abogado, etc. es indispensable abrir la jaula, aunque más no sea un momento. Nadie puede entenderlo desde sí mismo, y proyectar los contenidos propios sobre algo tan especial como es la vocación, sin que en ello cometa una intromisión imperdonable. Diego: La vocación... ¿Es una tendencia? Sí, lo es, pero se suele confundir con muchas cosas. La vocación, cuando es tal, es una propiedad del alma, nace con el hombre y lo acompaña toda su vida. Algunas personas se dan cuenta de ese llamado, otras no. Vanessa: ¿O sea que, de alguna manera, yo nací contadora? Depende. Si es tu vocación (y no una elección especulativa), naciste con tendencia y aptitud, a resolver matemáticamente la vida. El título que buscaste después, es cosa de este mundo y sus clasificaciones. Si hubieras elegido abogacía, la tendencia sería a colaborar con la vida desde la defensa de la Ley, por sobre las leyes. Así el artista, busca traducir el mensaje de la Armonía y la Belleza esencial; el hombre de letras a explicar lo Inexplicable; el humanista, a comprender el por qué de la existencia...

- 55 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Diego: O sea que... A ver si me explico... No quiero decir una cosa por otra... pero es como que “el llamado de la vocación” siempre está referido a algo universal, genérico, superior... no sé cómo llamarlo... No importa el nombre que le des. Siendo la vocación un Don del alma, necesariamente está referida al servicio de la Creación, por lo tanto su mensaje siempre es trascendente, sublime. Después es el Hombre el que se encarga de desvirtuarla, de sumarle ambición, egoísmo, especulación, y otras, además de organizar disciplinas, pronunciar títulos, o diseñar ropa. Diego: Y... ¿qué pasa con la gente que no tiene vocación? Eso es imposible. Lo posible es no reconocerla, no escucharla o negarla, pero estar... ¡siempre está! Andrés: ¿Está relacionada con la misión que tiene cada ser humano, no? Caes reiteradamente en la misma pregunta. Parece que justificar tu vida fuera la prioridad. Si es eso, debés salir de allí. En principio la misión que cada ser humano tiene en la Tierra, corresponde al Misterio de Dios y nadie está autorizado a develarlo. En segundo lugar, la misión no halaga el ego, no complace ni justifica al Hombre, sólo responde a la Divinidad y en tercer lugar, nunca es un motivo de orgullo personal, ni viene para aliviar complejas situaciones de desvalorización. Es un humilde servicio que no podemos evitar. Hay mucha gente que se dice “misionera”, porque al no soportar su vacío existencial, su nadiedad, se auto invistió de un protagonismo ante el Cielo. Si le pidiéramos credenciales, esas personas estarían en problemas. Soledad: ¿De qué manera sabemos que estamos cumpliendo o no una misión? ¿Para qué querés saberlo? ¿Para colgar otra medalla de merecimiento en tu interior?... o lo que es peor, ¿para solicitar el pago a tu buena conducta? ¿Desde dónde viene tu pregunta? Soledad: Si... creo que desde la intención de sentirme superior en algo... ¿no? Esa es una respuesta sana. En el futuro, no va a molestarte la pregunta. Vanessa: Dijiste hace un rato que si estudiar Ciencias Económicas era mi vocación, tenía la tendencia a resolver matemáticamente la vida... ¿Qué pasa si me equivoqué de vocación?

- 56 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Eso es imposible. Te podés equivocar de carrera con respecto a tu vocación, pero no podés equivocar lo que viene impreso en vos. Lo que puede suceder es que “no tengas oídos para oír” y en ese caso vayas a parar a cualquier lado. Si escuchás tu vocación, la vas a cumplir con estudio o sin estudio, en la ilustración o en el analfabetismo. Andrés: ¿Cómo es eso? No hace falta tener un título para ejercer la vocación. Si llevás impreso en tu alma sanar al dolorido, una traducción puede ser la medicina, pero si no tenés acceso a eso, serás un buen samaritano, siempre dispuesto a calmar el dolor, aunque no hayas ido a la escuela jamás. La que suele ser un enemigo de las vocaciones, es la oferta del mundo. Florencia: En el ejemplo que diste, sería no ayudar a nadie, porque no conviene, y es más divertido estar en la pavada. No sólo eso. La Oferta del mundo es amplia y muy tentadora, si a esa atracción unimos el temor a no ser queridos o aceptados... el miedo al fracaso... entenderás por qué, más de una genuina vocación termina abortada. Los motivos para desertar, no hay que buscarlos en la superficie ni en el Formativo Intelectual. Se esconden en las cavernas psicológicas de las que hablamos continuamente. Soledad: ¿Me das un ejemplo? Tiene más posibilidad de cumplir su vocación un campesino, que un próspero varón de ciudad. El primero está más en contacto con lo esencial y sin necesidad de concurrir a ninguna casa de estudios, vivirá su vocación. Como producto de ella, tenemos al sabio popular, al conocedor de yerbas medicinales, al veterinario improvisado... personas que se destacan en su pequeño ambiente y que denotan, muchas veces, ser más conocedores que quienes poseen un título de estudio en esas materias. Ahora bien, tomemos uno de ellos, por ejemplo el sabio popular. Si este hombre lo trasladamos a la ciudad, será convencido por la presión del medio, que sus reflexiones son tonterías y que debe estudiar arquitectura, para llegar a “ser alguien en la vida”. Diego: ¿Qué pasaría con la vida de ese hombre? “Serás lo que debes ser, o sino no serás nada”. En lo factual, será un arquitecto del montón. En lo interno, un eterno insatisfecho que, a la larga, perderá el sabor de la vida. La familia no debería forzar la tendencia espontánea de los chicos, aunque les parezca

- 57 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

que no es redituable. Por el contrario, se debería estar siempre atentos a traducir esa “línea de preferencias” que los pequeños denotan ya en sus juegos infantiles, y alentarla. Roy: ¿Qué vocación tiene un político? La tendencia sería mejorar y ordenar las relaciones de convivencia, en pos de dar al Hombre las mejores condiciones para su evolución individual. Vanessa: Pero eso... ¡Nada que ver con lo que sucede! Me pidieron que definiera la vocación, no la práctica. Si alguien actúa en política a beneficio propio, obviamente, no responderá a la tendencia, sino a su propio Ego. Ahí no hay vocación, sólo interés personal. Vanessa: Tal vez esa gente tenga su vocación y como vos decís, la abortó para conseguir dinero, poder, status y todo eso... No lo sé. Tal vez... Ocurre que, por encima de la vocación, hay otra tendencia, muy fuerte, a la que llamaremos Foco Existencial. La orientación de la cuerda que une el nacer con el morir, no es igual para todos, y se divide en dos grandes corrientes: un río va hacia el Dinero, la Fama, el Poder, el Sexo y todos los resultados del mundo sensorio. El otro río va en busca de las respuestas existenciales, el conocimiento, y el encuentro con la Divinidad. Nadie puede navegar en los dos ríos simultáneamente. Roy: ¿Qué diferencia tiene el Foco, de la Vocación? La vocación se puede ejercer indistintamente, en cualquiera de los dos ríos. El Foco, sólo en uno. Andrés: Se puede ser abogado en el río de lo sensorio, o en el río de la existencia... Tal cual, pero no podés “ser” simultáneamente ni indistintamente, en cualquiera de los dos ríos. Si el objetivo profundo de vida te induce a conocer la pasión, la diversión, elaborar un futuro próspero, una familia, concretar ideales mundanos. En síntesis, si para vos, vivir es desarrollar al máximo tus capacidades sensorias y los resultados de tu vida, están ofrecidos a este Planeta, estás navegando por el río de la vida. Lo importante es que seas un buen navegante. Florencia: ¿Qué querés decir con que hay que ser “un buen navegante”?

- 58 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Estar sano en todos tus aspectos, sin olvidar el desarrollo de ninguno. Esto es: procurar una psiquis limpia, una emocionalidad pura, un instinto sabio. Ser por excelencia, una persona correcta, leal, noble en sus actitudes... Hay muchos que navegan por el infra río, desbordados en sus instintos, sucios en sus intenciones, hipócritas en sus afectos. Diego: ¿Qué foco tiene ese tipo de persona? Son anarquistas del Deber Ser. Seguramente nacieron con un Foco, pero terminaron cambiándolo por un plato de lentejas. No navegan por ningún río, porque no tienen más objetivo de vida que sus propios egos. Dispersos y sin meta, sólo sirven a la consigna de desviar a aquellos que encontraron su Foco. Florencia: ¿Cómo es la opción contraria a navegar por la vida sensorial? No son opciones. Es un mandato interno que, como la vocación, algunos escuchan y otros no. Soledad: Y... ¿Por qué no se escucha? En el mundo hay mucho ruido, tanto, que cada vez es más difícil escuchar el interior genuino. Hay gente que da manotazos por el mundo del senso, porque tiene miedo de ser juzgado por una sociedad materialista. Otros, navegan ficticiamente por el río de la Existencia, porque tienen miedo, incapacidad traumática de hacerlo por la vía sensoria. Ambos terminan ahogados. Florencia: Debe haber alguna forma de saber si estamos navegando en el río correcto... Siempre buscás fórmulas hechas, en vez de procurar tu verdad. En este caso no hay diferencia y siempre llegamos al mismo título: auto conocimiento. No es espiritual el hombre que huye de la materia por miedo. No es materialista el hombre que cae en el senso por debilidad. El mundo juzga apresuradamente la apariencia, porque se ignora que hay un Foco y que antes de enrolarse, es necesario conocerlo. Andrés: ¿Desde dónde actúa el Foco? Desde el subconsciente lejano. percibe, pero no es tangible, sino compañía que influye siempre y para detectarlo. Actúa como una varios inconvenientes.

A modo de brisa se siente, se por sus efectos. Es una extraña que requiere máxima atención fuerza magnética, por eso trae

- 59 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Soledad: ¿Inconvenientes?... ¿De qué tipo? Si estás navegando en el río que no te corresponde, todo te será hostil y la vida perderá significado. Roy: Si eso no se llama frustración, le pega en el palo... Tenemos un hombre enjaulado en la casualidad, que proyecta una verdad que no es tal, que opina sin significado, influenciado por las voces externas, prisionero del miedo y el qué dirán, lleva a cuestas su vacío existencial, pero es sordo al llamado de su Foco. Inmerso en lo cotidiano, no alcanza a ver sus consecuencias. No camina, sino que corre por la vida, pero no sabe hacia dónde. Pregunto: ¿A qué felicidad aspira un hombre así? Roy: Si lo ve desde tu perspectiva, la felicidad será salir de ese estado. Correcta respuesta. ¡Te felicito! Ojalá sea la tuya. Roy: Y si no... ¿De quién? De la conclusión intelectual, en cuyo caso no serviría para nada. Todos buscan la felicidad, pero nadie puede definirla ni alcanzarla. Es como la zanahoria del burro de la noria. Lo importante es darse cuenta que se está buscando la zanahoria atada siempre, a un metro de nuestra posibilidad. Es ahí cuando se deja de correr, se detiene, y cambia. Roy: Es el momento en que el burro se hace inteligente y le dice al dueño: “Che, ocupate vos de tu propia agua”... ¡y se come la zanahoria! (Risas y comentarios) No sabés Roy hasta que punto, lo que dijiste en chiste, es toda una verdad. Algún día tomará otro significado para vos. Ahora bien, la tarea de vivir, no pasa por alcanzar la zanahoria, dado que después volverás a tener hambre, y la necesidad te hará preso de otra noria. Lo correcto es detenerse y detectar de dónde viene y hacia donde va la brisa del Foco. Hay que estar seguro del río por el cual navegamos. Lo demás viene sólo. Soledad: ¿Ahí es posible ser feliz? He visto que la felicidad son estados pasajeros que no se disfrutan por el temor a perderlos. Prefiero decirte que ahí, hay plenitud y realización como persona. Eso es más duradero. Todo aquel que está en el río correcto, recibe el resto “por añadidura”.

- 60 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Roy: ¿Estás diciendo que si cada una de las personas del mundo siguieran su Foco verdadero, no existiría hambre ni necesidades básicas? Eso digo. Florencia: Pero... ¡Cómo!... Eso es imposible... Imaginen un mundo donde cada uno cumple ordenada y cabalmente su vocación genuina... A nadie faltaría pan, vestimenta y techo. Florencia: ¡Pero para cumplir cualquier vocación, antes hay que tener resuelto el problema de las necesidades básicas! Las necesidades básicas no están resueltas, porque una enorme mayoría tiende a un mismo objetivo, en vez de estar cada uno en su objetivo. La Humanidad agota ciertas posibilidades y desatiende totalmente otras. Es ahí donde se produce el desequilibrio. Florencia: ¡No lo veo! Intentaré mostrártelo: Si hiciéramos un mapa de las posibilidades que ofrece el mundo, veríamos que hay densidad demográfica en los rubros Dinero, Sexo, Fama y Poder, en ese orden de apetencias. En ese mismo mapa, veríamos ausencia demográfica en los sectores de Esfuerzo, Creatividad, Realización personal, y Caridad bien entendida. Si cada uno simplemente hiciera lo que le corresponde en el lugar debido... no habría desequilibrio. Andrés: ¡Es para pensarlo!... Un sector compensaría a otro y la riqueza estaría mejor distribuida... Entendiste bien. Diego: ¿Cualquier persona puede parar, es decir, dejar la vida que hace todos los días... por ejemplo, aislarse de sus hábitos, de su rutina, y así, imprevistamente ponerse a buscar su Foco?... Cualquier persona puede hacerlo. Andrés: ¿Cómo empieza ese proceso? Dándose cuenta que se ignora a sí mismo, que está lleno de cosas, pero que no tiene nada. Hay un momento en que hay que detenerse y preguntar ¿Hacia dónde voy? ¿Cuál es el significado de mi vida?

- 61 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Andrés: Pero... ¿Qué hace falta para hacerlo, para que no quede en una idea remota...? Coraje. Andrés: ¡Eso es mucho pedir! ¡Todo el coraje que se necesita, está en el alma!... No importa que en la personalidad deambulen fantasmas de inhibición, temor, falsa sensación de incapacidad... Todo eso son cosas creadas en la jaula. La verdad está en otro lado. Recuerden que el Foco trasciende la personalidad adquirida. Florencia: ¿Se puede cambiar de río en cualquier momento? Sí, se puede. Para uno o para el otro. La condición es tener convicción y no pretender navegar por dos ríos al mismo tiempo. Después del darse cuenta, se produce la elección y como tal es definitiva. Ya no estamos en uno u otro lado por condicionamientos, factores traumáticos, casualidad... y otros eventos incontrolables... Ahora bien, todo lo que hablamos nos lleva al punto donde nació esta charla. Vos, Flor, estabas argumentando lo que deberían hacer y no hacer los religiosos... Aquí hay que aceptar que, “cuando a uno le pica, necesariamente no le tiene que picar a todo el mundo”. Florencia: Lo que yo decía es que, con todas estas noticias que se están dando sobre sacerdotes católicos con problemas sexuales, lo mejor sería que la Iglesia les permitiera una vida normal. Sería mucho más sano... ¡Total! Casado o no casado, igual pueden cumplir su función. En principio, todo sacerdote, todo ministro de cualquier religión, está navegando en el río de la Existencia. Allí pudieron llegar por convicción o por error. Algunos estarán en el río correcto para ellos, otros no. A partir de aquí, están los religiosos que se dieron cuenta que navegan en el río equivocado y no obstante siguen haciendo lo que mejor puedan... Otros están en el río correcto, pero aún son víctimas de situaciones psicológicas que los dominan... Otros, navegando en el río correcto, siguen aprendiendo a superar las atracciones del senso, en procura de un estado mejor... y también están aquellos que, con convicción en su Foco, recibieron la Gracia de la santificación. ¿A cuál de ellos te referís? Florencia: ¡Supongo que a los que tienen problemas...! ¿Y la solución para vos, es que se rindan? ¿Qué no lo intenten más? En principio ellos son hombres y mujeres con vocación (genuina o no) que navegan en pos de un Foco que puede ser

- 62 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

verdadero o falso, más allá de toda especulación o intencionalidad negativa. En lo opuesto, en la calle hay un montón de religiosos frustrados, que no respondieron a su Foco, porque se dejaron convencer por otros, y que en ese error, tampoco son lo que deberían ser. Florencia: Si, tenés razón... Lo que pasa es que ciertas conductas afectan a la Iglesia, la hacen centro de comentarios y a mí, como católica, me duele. Lo que vos hacés Flor, con tu comentario, es reproducir una crítica destructiva que cuenta con mucha prensa. En una Institución tan grande como la Iglesia, siempre hay quien “pone la nota”. Casos aislados que van engarzados por una época histórica de tientes especiales, empeñada en masificar la perspectiva humana y convertir la vida en una cinta procesadora de chorizos indiscriminados, iguales, y donde cualquier intento de identificación personal, es penado con la muerte cívica. No sólo la Iglesia, sino cualquier Institución está compuesta por personas en proceso de alcanzar un ideal, un objetivo y por el hecho de llevar un hábito, un uniforme, o cualquier identificación de grupo, no deben ser considerados “productos terminados” sino “personas en formación”. Andrés: ¡La famosa generalización!... Desde esa perspectiva, también se puede analizar la familia, la educación, el ejercicio de profesiones... genéricos como “juventud”, “ancianidad”, “políticos”.... El aspecto interesante es, “¿Quién juzga?”... “¿Desde Dónde?”... “¿Para qué?”... Todos nosotros, en una u otra medida pertenecemos a una institución, desde la familia, el estudio, el club social o deportivo, el partido político, el credo. Todos formamos parte de algún sector. Ahora bien: Si todos formamos parte de lo criticable... Si todos somos parte interesada de aquello que se critica... ¿Quién critica? Florencia: ¿Cómo quién critica? ... No entiendo... Roy: ¡El Gran Bonete! (Risas y comentarios) ¿Por qué no? Bien puede llamarse el Gran Bonete... El rótulo siempre es lo de menor importancia... Aquí lo que hay que tener en cuenta, es que nada se salva, todo se critica, se degrada, se descalifica... ¿Quién nos critica? ¿Para qué? ¿Desde qué perfección lo hace? ¿Con qué motivo?... Si admiten la generalización, sepan que se están condenando a sí mismos, de una u otra manera.

- 63 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Florencia: Está claro que tenemos que aprender a diferenciar, pero más allá de eso, de generalizar injustamente... ¿Acaso no es mejor para un religioso, que se le de la opción de elegir entre una vida normal o no? Lo normal o lo no normal, siempre debe estar referido al propósito que se persigue. Es normal que el deportista profesional dedique ocho horas a ejercicios físicos diversos, pero no es normal que el comerciante abandone su trabajo para hacer ocho horas de gimnasia. No estoy hablando puntualmente del sacerdote católico, sino de todos los religiosos de ambos sexos que, bajo distintos credos, han optado por el servicio devocional desde la actividad sacerdotal o laica. Si el Foco de una persona lo orienta a la existencia, y ésta es directamente opuesta a la complacencia de los sentidos corporales, te pregunto: ¿Qué es lo normal en esa persona? ¿Propiciar la actividad sexual o no propiciarla? Florencia: No propiciarla... Pero también es cierto que son tan seres humanos como nosotros, por lo tanto, tienen las mismas necesidades físicas, biológicas, psicológicas... No, en absoluto. Lo que estás diciendo es aquello de “si a mí me pica, le pica a todo el mundo”. El conjunto Hombre, tiende hacia donde va su interés. Si vas a comprar pan, sólo acompaña tu idea una parte de vos. No pondrás todo lo tuyo en ir a la panadería. El Foco no es una idea momentánea, no es un pensamiento pasajero, no es una necesidad temporal, no es el impulso de ir a comprar pan... es un magnetismo absoluto que atrae a todo el hombre completo. Dicho de una manera alegórica, todo el hombre va hacia dónde le indica esa extraña compañía. Al ir todo el hombre hacia el Foco, no es igual, no tiene las mismas necesidades, ni la misma motivación, la persona que sigue el Foco de la Vida que aquél que sigue el Foco de la Existencia. Diego: ¿No tiene las mismas necesidades ni las mismas apetencias? Más aún: no tienen nada que ver uno con el otro. Hasta organismo se dispone de manera diferente. “Allí donde pones atención, en eso te conviertes”. A partir de aquí, pueden comprendiendo que las aspiraciones hacen al Hombre y no Hombre a las aspiraciones.

el tu ir el

Diego: A ver... es como que cuando uno busca algo en función del Foco, no lo hace desde el intelecto, sino que todo el conjunto persona se moviliza hacia allí... Se originan necesidades específicas acordes con lo que se busca... ¿Es así?

- 64 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Sí, es así. No es que el hombre espiritual carezca de sentidos, sino que no da prioridad a sus sentidos. Es una práctica diaria, constante, que no procura matarlos, destruirlos, sino ordenarlos, disciplinarlos. Soledad: Pero eso es enfermedad... ¡La gente que reprime se enferma! Ese es un riesgo cierto. Si se equivoca, y en vez de domeñar, reprime, termina enfermo. Soledad: Y... ¿Cuál es la diferencia? Una cosa es sentir y accionar acorde al impulso, como lo hace el que elige la vida sensoria y otra es sentir, aceptar lo que se siente y derivar esa energía a otro lado. Si un religioso reprime, no tendrá materia prima para llegar donde sus aspiraciones lo llevan. Se desviará en la neurosis, la ansiedad, y a partir de allí, cometerá muchos errores en función de lo que debe ser. Se habrá bloqueado. Si lo llevamos a la analogía del río... ¡Se ahogó!... Vanessa: Al decir que se ahogó ¿estás diciendo que ya no va a poder alcanzar su objetivo? No soy Dios para contestar esa pregunta. Lo que digo es que cualquier persona que tenga un desajuste serio en su psiquis, verá obstruido el camino a su meta. A partir de allí, es más factible cometer errores. Pero en este terreno, no sólo los religiosos se ahogan... ¿Cuántos ahogados conocen dentro de la vida sensoria?... ¡Hay millones!... No están allí por virtud, ni por convicción, sino por discapacidad. Es gente que se empeña y aún obsesiona por alcanzar altos grados de placer y no lo logra. Reprimir, no es algo que le pasa solamente a quien elige el otro río. Andrés: ¿Qué relación tiene el mecanismo de represión, con la materia prima necesaria de la que hablaste? Es conocido que la energía que no se canaliza debidamente, se convierte en un arma auto agresiva. Si esto ocurre, por más vida monacal que haga, esa persona sólo podrá representar sus propios problemas de carácter. Roy: Es el tipo de gente que cuando te acercás a preguntarle la hora, ¡te muerde! Es posible. Es una energía estancada, que de alguna manera tiene que salir. Lo que deben entender, es que la energía sexual no sólo es necesaria, sino imprescindible para alcanzar la meta, de aquellos que navegan por el río de la existencia.

- 65 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Soledad: ¿Y entonces? !En qué quedamos! ¿Tenés presente que una energía vital te permite manejarte por el mundo? Soledad: Sí, por supuesto. ¿Para qué la usás? Soledad: Para un montón de cosas... ¡Qué se yo!... Caminar, trabajar, estudiar, bailar, hablar... ¡No sé! ... ¡Si no la tuviera, estaría muerta! Si tantos usos le das a la energía vital, esa energía básica que está presente en todo ser viviente... ¿Por qué suponés que la energía sexual sirve al sólo efecto de hacer el amor? Soledad: ¿Cómo?... Pero... ¿para qué otra cosa? Estás depredando algo que no conocés. Soledad: ¡Cómo!... ¿De qué otra manera se puede usar? La vital y la sexual son dos energías diferentes. Una corresponde a lo biológico y la otra a lo psíquico. La energía sexual no se produce en los órganos sexuales, sino en el cerebro. La vital provee movimiento, la sexual amplía y fortalece ciertos sectores del cerebro, produciendo aperturas hacia estadios creativos y espirituales. No creas que es casual que personas especialmente creativas, hayan sido históricamente muy pasivas en el terreno de las relaciones carnales. Soledad: ¡De eso no tenía ni idea! Del punto de vista biológico, animales y humanos tenemos períodos de celo, épocas a intervalos específicos, donde la energía vital se combina con la sexual, a fin de asegurar la continuidad de la especie. En esas etapas, que en el humano se produce tres o cuatro veces al año, hay una concreta necesidad de realizar la cópula carnal. Diego: Y el resto del tiempo, cuando no existe ese celo... ¿Qué promueve las relaciones de pareja? Los ratones. (Risas y comentarios)

- 66 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

El apetito se estimula ficticiamente, es decir, fuera de lo natural, gracias a la activa participación de creencias y convicciones sociales alentadas por los medios de comunicación, estímulo éste al que el Hombre responde con imaginaciones que exacerban glándulas de manera ficticia. Dicho de otra manera, se identifica con el estímulo externo, y lo hace propio. Ahí traduce un equivocado “deseo” que, ratones y manija de por medio, toma la totalidad. Roy: ¿Cómo se hace para comprobar esto? Leyendo estadísticas: Porcentajes altísimos, cercanos al 70% de mujeres frígidas y varones con diversas dificultades... Esas son las consecuencias de estar forzando lo “no natural”. Si tuvieran relaciones cuando el cuerpo natural se los pide, no tendrían ningún problema... Florencia: ¡No sé!... Es muy difícil ver las cosas como vos... ¡No debe ser tan así!... hay otras cosas... la necesidad que tiene el amor de manifestarse, por ejemplo. ¡Eso es mentira!... El Amor tiene un millón y medio de formas de manifestarse: colaborar en la realización de la pareja, abnegar lo propio a favor del otro, la generosidad, el altruismo, la ternura, el compañerismo, el respeto, la admiración... Con la mano en el corazón, ¿pueden afirmar que en la mayoría de las parejas actuales, está todo esto y que la conclusión de ese intercambio, es la cama? Roy: Yo lo único que puedo decir, es que hoy la consigna es “todos contra todos”... e incluso sin elección de sexo. ¡Eso es cierto! La pregunta es ¿Por qué se impone como “moda” un objetivo anti natural, que requiere emplear todas las energías necesarias para la creatividad, la realización personal y el crecimiento? ¿Por qué los cultores de esta práctica, rebalsan los consultorios en busca de una satisfacción que no tienen? Y si no tienen satisfacción: ¿por qué cultivan afanosamente esta práctica? Roy: ¿Cuál es la respuesta? ¡Búsquenla! Mi respuesta no les sirve. Sólo aprendan a preguntar “Por qué” en vez de correr detrás de todo lo que se les ofrece. Cuando se carece de auto disciplina, uno queda a merced de intereses ajenos a sí mismo. Vanessa: En definitiva, ¿uno debería tener relaciones sólo tres o cuatro veces al año?

- 67 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

¡No dije eso! En lo que a mi respecta, pueden hacerlo todos los días. Es cuestión de ustedes. Lo que hice fue desgranar una masa compacta, para que sepan lo que hay adentro. La decisión de cómo, cuándo y cuánto, es particular de cada uno. No estoy hablando de moral de costumbres, sino de saber qué se está haciendo. Andrés: Por lo que escuchamos, la persona que tiene por objetivo la práctica del celibato, debe estar desapegado de la oferta general, no reaccionar ante los estímulos, evitar todo contacto con la imaginación y estar especialmente atento a esas etapas naturales de celo. Ahora bien: ¿Qué hace en esas etapas de celo? Se vive, se siente el celo, y esa gran tensión, se abnega, se ofrece como un cáliz a la Fuente de Creación. Es como desprenderse del corazón mismo y ofrecerlo, sin que quede nada para uno mismo. Vanessa: Y ¿Qué sucede ahí? Él la toma, la agradece y la devuelve convertida en Paz y Sabiduría. La energía que en el río de la Vida se utiliza para el goce, en el río de la Existencia se utiliza para abrir canales de Conciencia, que de otra manera quedarían cerrados. Florencia: ¿Con el tiempo y la práctica, las etapas de celo se van superando mejor? Eso depende de cada persona. Hay gente más pegada a su aparato sensorio que otras. Algunos alcanzan el objetivo y otros no. Pero el tema no es llegar al objetivo, sino la intención, la perseverancia y el esfuerzo que se haga, como ofrenda a Dios. Florencia: ¿Cuál es el estímulo?... ¿Qué mueve a alguien, a hacer algo así con su vida? Al comienzo el llamado sutil del Foco. Después la convicción. Finalmente la evidencia. Soledad: ¿Vos decís que se utiliza esa energía, para desarrollar el cerebro? No hay desarrollo mental ni espiritual posible, sin un buen cúmulo de energía sexual reservado exclusivamente a ese fin. No es una cuestión estética ni moral. No es que “quede feo” o “que sea malo” dedicarse a la actividad sexual. Todo depende de en qué río navegues... Cual será el punto de llegada... Hacia dónde vas... La energía sexual es combustible; depende de dónde quieras llegar, es el empleo que le das. Afortunadamente hay muchas

- 68 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

personas que buscan la Razón Última de su existencia, es el camino más difícil, más duro, nadie sobrevuela, nadie logra su cometido por arte de magia. Esa aspiración, tiene un precio muy caro, y a veces no se puede pagar. Es un camino solitario, lleno de trampas, y el que lo transita es sólo un ser humano. No importa cuantas veces caiga, sólo importa que no se rinda, que no renuncie al esfuerzo, que no se de por vencido. Andrés: El que tiene verdaderamente el Foco de la Existencia, es evidente que tiene que estar preparado a una lucha interna muy dura. No. No es así. Es un claro objetivo que amerita iniciar una constante lucha interna. Es tal la atracción, que se está dispuesto a pagar por adelantado. Vanessa: Sí, todo lo que quieras, pero esa gente que renuncia a la pareja, también renuncia a la ternura de los hijos, el calor del hogar... Todo tiene un precio y su ganancia. El que opta por el río de la Vida, también renuncia a muchas cosas importantes. El que está en el río de la Existencia (siempre que el Foco sea real y no un escondite o una imaginación) tiene su “hogar” estable, bien consolidado, en el espíritu. No tomen esto como una expresión romántica y literaria. Es algo concreto. Se alcanza un estado de Amor, que es millones de veces más pleno, completo, y satisfactorio que la pareja humana. Soledad: ¿Cómo es ese estado de amor?... ¡No lo imagino! No hay reacción ante la vida, es decir, no es necesario ser querido para querer, no es necesario poseer para amar... no es necesario que las cosas vayan bien o mal para auto generar amor, esperanza, sabiduría. El dolor no entristece, la pérdida no destruye, la materia no gobierna. No hay esclavitud, porque no hay posesión. En síntesis, todo lo que se construye dentro del mundo interior, no está sujeto a ninguna variable de personas, hechos, circunstancias, espacio ni tiempo... Sólo a Dios, como único referente. Alguien que utiliza su vida para lograr estos fines... ¿Les parece que se está perdiendo de algo? Florencia: Sí, de acuerdo... pero ¿Cuánto tiempo vida lleva conseguir eso? Exactamente el mismo que lleva el otro río, para llegar a la muerte. Cómo y para qué se utiliza el tiempo, depende del Foco. No hay buen o mal Foco. No es mejor uno que otro. ¡No se puede inventar un Foco! Está, nace con uno, y magnetiza. Lo que es necesario es abandonar la costumbre de meter todo en una misma

- 69 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

bolsa y admitir que hay otras personas que son diferentes. No importa el río, importa el navegante y que éste sea fiel, noble, íntegro, que no se trasgreda como ser humano, que no se degrade, y que sea lo mejor en sí mismo, sin competir con nadie. Andrés: Entonces... ¿No hay un foco equivocado? No. Eso jamás. No hay error en la Creación. Lo que sí hay, son ciegos que no quieren ver, minusválidos del oído ensordecidos por el ruido del mundo... deteriorados del cerebro que no distinguen sus voces interiores de las exteriores... Hay también robots manejados por sus traumas, o sus carencias, y almas que, sin reparo, sienten satisfacción en venderse por un plato de lentejas. Es muy importante detectar nuestro Foco y ser fieles a él, y una vez ingresados en el río que corresponda, “ser lo que debemos ser”, y bajo esa consigna, dar el mayor esfuerzo, la máxima perseverancia, dejando los resultados a Dios. Diego: Me parece, que pensamos que la gente ya tiene todo resuelto, y no que va hacia un objetivo... Quiero decir, nos da la impresión de que no tienen que trabajar para llegar, sino que lo vemos como que llegó al final de su meta y desde allí juzgamos con severidad... Sería bueno cambiar eso, darnos cuenta que todos vamos hacia algún lado, pero que nadie llegó todavía. Es un buen inicio. El mismo permiso que nos damos, por sabernos en estado de proceso hacia algo, permitirlo en los demás. Diego: Y otra cosa, es lo que comentábamos sobre las instituciones. Me parece que lo que hacemos es peor, que pretendemos que una vez que alguien está adentro de una pilcha, me refiero a un hábito o un uniforme, estamos esperando que cometa una equivocación, cualquier equivocación, para hacerle pedazos la vestimenta... y afirmar que eso no sirve... que su elección es equivocada... ¿Hay algo de eso? Sí. Es correcto lo que decís... Pareciera que hay una consigna para tirar abajo todo lo que tiene significado y reemplazarlo por lo que degrada... Florencia: pero... ¿Por qué pasa eso?... Mejor dicho: ¿Por qué pasa esto?... Un día te levantás, y todo lo que tenía sentido, ya no lo tiene. Dentro de cada uno de ustedes hay, más que un Foco, un Faro que les indica hacia donde deben ir. ¡No lo pierdan de vista, aunque lleguen las tormentas! Sigan siempre esa luz, y van a encontrar más de una respuesta... Florencia: ¡No es tan fácil!

- 70 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

Para que con el tiempo recuerden esta charla, voy a regalarles un cuento que sintetiza bastante, lo que hemos conversado hoy. Se trata de la historia de un Rey muy próspero que vivía en algún rincón de una lejana tierra del pasado... Había una vez un Rey muy poderoso, tanto y en tal grado, que en todas las comarcas vecinas se hablaba de su “extraña” prosperidad. Decimos “extraña” porque el Rey en cuestión, no se desvelaba por sus bienes materiales, sino que estos parecían “llover del cielo” mientras él, se mostraba radiante, sano, feliz, sin tensiones, ni apuros. El tema era el comentario de todos, pero nadie se atrevía a preguntarle al Rey cual era el secreto de su maravilloso éxito. Un día (en los cuentos siempre hay “un día”) su sirviente personal no pudo resistir la tentación, y viendo al monarca tan feliz, se atrevió a preguntarle: -Dime, Majestad... ¿Cuál es el secreto de tu éxito? ¿Cómo es posible que tus bienes se multipliquen sin que hagas esfuerzo alguno? Y lo más sorprendente... ¿Cómo haces para ser un hombre tan pleno y feliz, en medio de tantas riquezas para resguardar? El sirviente se había animado a formular la gran pregunta, pero recibió una respuesta inesperada. -Si quieres que comparta contigo mi secreto -respondió con voz severa Su Majestad- deberás demostrar que eres apto para recibirlo. Para eso, me acompañarás a recorrer mis posesiones, llevando en tus manos una vela encendida. Si al regresar la vela continúa encendida, te diré mi secreto. Si por el contrario, la vela se apaga, ordenaré que te decapiten, en castigo por tu curiosidad. Así fue. Ambos hombres salieron a recorrer la próspera Comarca. El Rey, manteniendo su felicidad. El sirviente, sosteniendo con visible preocupación una vela encendida. Al regresar el Rey preguntó: -Y... ¿Qué te parecieron mis riquezas? -Perdóname Señor mío, poco y nada pude ver en el recorrido – respondió temblando aún de miedo, mientras sostenía el último pedacito de vela-. Estaba tan preocupado en mantener encendida la llama de la cual dependía mi cabeza, que no pude ver otra cosa...

- 71 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

El Rey lo miró compasivamente, se sentó en su dorado trono despaciosamente y contestó: -Ese es mi gran secreto. Todos nacemos con una luz encendida en nuestro interior. La única preocupación y ocupación que tuve durante toda mi vida, fue que no se apagara esa luz, que ahora con sorpresa, ustedes ven reflejada en mi cara. Todo lo demás, vino por añadidura y... sinceramente, no me queda tiempo para contar cuánto tengo y cuánto gano.

- 72 -


EL FOCO: UNA EXTRAÑA COMPAÑIA

CIERRE DEL CAPÍTULO Espero que esta charla los haya puesto en contacto con la duda, con la inquietud de cual será su Foco y que les de los elementos para que puedan ver más allá de sus condicionamientos, sus miedos o las razones que la sociedad les da sobre que es lo que deben hacer con su vida. Una cosa que me parece importante rescatar es como se empieza este proceso. Antes de poder empezar a buscar cuál es nuestro Foco, es fundamental darse cuenta que uno “se ignora a si mismo, que está lleno de cosas, pero que no tiene nada”. Sin este darse cuenta, la elección se transforma en una especulación de los contenidos de la propia jaula. Es pensar en que río “conviene más” estar y cuán reales serán los beneficios que promete, es pura especulación, en base a las creencias, traumas o condicionamientos que cada uno tenga. Y desde esto, surge muchas veces la idea de que un río es “mejor” que otro. Ningún Foco es más, ni es menos que otro, sino que todo Foco verdadero es el que debe ser. El trabajo de auto observación, es lo que nos permite juntar suficientes evidencias que nos muestren que podemos llegar a ser un corcho a la deriva. El tiempo vida es un don que debemos apreciar y utilizarlo en cada instante. Una vez en contacto con el Foco verdadero, al saber para que se nació, surge la responsabilidad de vivir en pos de acercarnos cada vez más al mismo, de hacer lo correcto a pesar de todo el esfuerzo que requiera, de dejar de flotar y empezar a nadar. Y saber que al final del tiempo vida, no servirán las excusas o las justificaciones, lo único que contará como real, es cuántos instantes nadamos en pos del foco y cuántos nos dejamos arrastrar por la corriente. Por lo tanto, por más fuerte que sea la corriente, si todavía están a flote, empiecen hoy mismo a buscar ese Propósito y a partir de ahí naden con todas sus fuerzas y cuando se cansen sigan nadando igual (y para los que estén especulando si están a flote o no, la única manera que tienen de saber la respuesta es empezar a nadar).

- 73 -


EL SABIO SUFRIR

CAPÍTULO IV El Sabio Sufrir

Introducción y cierre del capítulo realizado por: Vanita Ferrari - 74 -


EL SABIO SUFRIR

¿Por qué sufrimos? ¿Cuántas veces durante el día, nos hemos encontrado volviendo nuestra mente a situaciones pasadas? Historias inconclusas o de las que hubiésemos deseado otro final. Apegados a lo que fuimos (o creíamos ser) años atrás. Todos recuerdos inútiles de lo que pudo suceder, lamentos infructuosos. Y pocos dignos del Ser, llenos de venganza, ira o sentimentalismos cursis de lo que en otro tiempo nos produjo placer. ¿Alguna vez nos preguntamos para qué hacemos esto? ¿Qué logramos al volver nuestra atención atrás? Esta especie de “masturbación de sí”, lo único que produce es la enfermedad mental, física y emocional, más una vida estéril que conduce a una lamentable vejez para nada. Frecuentemente, cuando pregunto a las personas qué es lo que más desean, cuál es su meta, suelen contestarme con frases del estilo: -

“Yo lo que más quiero en el mundo, es ser feliz”.

Como si la felicidad fuera un estado fijo, al que uno puede acceder algún día en este mundo y permanecer allí por siempre. Como si al alcanzar este objetivo, uno adquiriera una amplia sonrisa, un caminar seguro y a partir de allí ya nada ni nadie pudiera afectarnos, dañarnos, entristecernos, hacernos sufrir. Como si el deseo de ser feliz ocultara otro deseo: el de no tener que vérselas cara a cara con el dolor. “Es peor el miedo a sufrir que el sufrimiento mismo”, escuché decir alguna vez por ahí. Y sucede que al estar creándonos todo un ideal de felicidad plena, lo único que estamos haciendo es tender nuestra propia trampa. LA FELICIDAD ABSOLUTA EN ESTE MUNDO ES UNA GRAN MENTIRA. No venimos aquí a permanecer en perpetuo estado de alegría y exaltación, tampoco vinimos a hacer turismo. Hemos venido a tratar de discernir algunas cosas con respecto a la vida y a nosotros mismos. Y es en una de esas etapas de la comprensión verdadera, que eso a lo que tanto huimos toma real valor, se convierte en una llave maestra capaz de abrirnos la puerta hacia ese nuevo estado, en el que dejamos de ser lo que somos y adquirimos mayor grado de Conciencia.

- 75 -


EL SABIO SUFRIR

Hoy me van a contar por qué sufren, y qué los hace sufrir, dejando de lado, por el momento, dolores o impedimentos físicos, y aquellos surgidos como grandes pruebas. (Durante un buen rato, todos nos explayamos en los temas que nos producían sufrimiento: la falta de afectos, la soledad, la ausencia de trabajo, la deshonestidad, la rutina, etc. Al cabo...) Algunas cosas que dijeron se engloban en una misma carátula: “Carencias humanas”... Cada uno vive a su manera las consecuencias de una humanidad, que en mucho dejó de serlo. Este es un tipo de dolor. Otros sufrimientos tienen que ver con las “jaulas” formadas en los primeros años de vida, a través de gestos, mensajes subconscientes, interpretaciones parciales de los sucesos, mensajes directos y demás. Una tercera categoría resume todos aquellos dolores que podemos evitar, por lo que los llamaremos, “vanos”. Así, hoy vamos a tratar los dos extremos: el dolor vano y el dolor de la Prueba. Diego: ¿Por qué no se incluyen en el vano, los que caratulaste como de “carencias humanas”? Porque un alto porcentaje de la sociedad de nuestro país está viviendo una ola de infra humanidad, a la cual es difícil sustraerse cuando en el receptor hay sensibilidad, alma, dignidad. Indudablemente, el gran desborde que nos toca vivir, duele. Y esto es concreto, no imaginado. Andrés: ¿Te referís a la ola de violencia, secuestros y desmanes diarios? No. No a eso. Eso es parte de la sin razón. El origen es otro. No hay que confundir la causa con el efecto. Lo que está podrido no es lo que se ve. Andrés: Entonces ¿Qué es? Lo que está en el corazón. Es como si a la Humanidad le hubieran robado el corazón. Eso es motivo de mucho dolor. ¿Cómo se hace para reimplantar un corazón? Esa ausencia ha creado un ente masa muy contagioso que podemos definir como “espera inerte”. La gente está como sonámbula, desconcertada, sin esperanza, en una quietud rara, como si hubiera perdido incluso, el sentido de la sobrevivencia y se hubiera rendido a esperar lo peor, sin moverse, sin siquiera atinar a atajarse de algo que amenaza. Andrés: Hay un gran miedo, paralizante.

- 76 -


EL SABIO SUFRIR

Le llamo “Efecto matambre”. En algún momento me tomó, y me di cuenta que actuaba, pensaba y sentía como si estuviera atada y como si esa atadura, también inhibiera mi estado emocional. Fue una experiencia muy especial. Andrés: En esa estamos todos. ¿Cómo saliste? Gracias a la fórmula de siempre: Observación. Ese estado no era en mí lo habitual, entonces paso a paso deshice el paquete. Si uno se mantiene vigilante, se da cuenta de las cosas que “no son de uno”. Son como extraños visitantes del mundo interior. Diego: ¿Una vez que viste el efecto matambre, no volvió? No volvió por la Gracia de Dios, pero me exige trabajar continuamente en desestructurarme y salir de la sordera reinante. Vanita: ¿Qué sordera? Nadie escucha nada en medio de un silencio que no es normal. Cuídense mucho, por favor. Hagan todos sus ejercicios. Vanessa: ¿Cómo se formó ese ente masa? Hay muchas cosas. Necesidades vitales, carencias extremas, falta de trabajo, desviaciones morales serias, falta de proyectos, exceso de mentiras, muchos caranchos sobrevolando el queso del poder, demasiadas opiniones y ninguna planificación concreta que arme carriles para animar la continuidad. Si a todo eso sumamos la falta de ejercicio de los Principios Fundamentales del Hombre, ya está el panorama bastante claro. Frente a la desesperanza, se gritó ¡Sálvese quién pueda! y ahí salió lo peor de la gente, formando un ambiente psicológico tremendo. Roy: ¿Cómo se resuelve eso? Lo primero sería que todo el país se diera cuenta que, tal como sucede en el plano individual, las grandes crisis sociales también son pruebas para resolver, significan grandes baches para surcar y desde allí, significa también la gran oportunidad de proveer un cambio positivo. Los pueblos, igual que las personas, se ponen a prueba en su integridad y con profundos dolores se nos da la opción de elevarnos o hundirnos. Vanita: ¿De qué depende eso? De cómo surcás el charco. Ante un dolor grande, de esos que hacen temblar todo, uno tiene la opción de aceptar el dolor,

- 77 -


EL SABIO SUFRIR

abnegar sin resentimiento, y producir la Perla... o llenarse de desesperación y de odio, y producir escoria. Vanita: Pero, suponete el caso de la muerte de un ser muy querido... ¿Cómo hacés para producir perlas? Veamos si pueden entender esto, sin levantar barreras de preconceptos... Uno debe vivir en la aceptación tácita, pero integral y completa, de que esta Tierra no es el Paraíso, sino el Valle de Lágrimas, por lo tanto, el dolor no debe ser una sorpresa. Vanita: Y ¿No es muy negativo pensar así? Sin calificar, Vanita. ¿Crees factible pasar una vida de... 70 años, sin que jamás ocurra nada que te haga sufrir? Vanita: Supongo que no, pero uno siempre espera lo mejor... No. Nadie espera lo mejor. En el fondo, muy en el fondo de todo ser humano, habitan el miedo y la inseguridad y mucho de lo que se hace, dice y piensa, son especies de fetiches anti sufrimiento. El llamado “pensamiento positivo” sólo actúa en la superficie, por lo tanto, es sólo un fetiche más, no sirve; sólo engaña, y en el mejor de los casos, hipnotiza. El fatalismo y el optimismo son dos caras de una misma moneda falsa. Vayamos a lo concreto: El dolor ¿Es o no parte de la vida? Vanita: Y... Sí... Entonces, sin irse por las ramas, ni con pensamientos fantásticos, hay que “saber” que el dolor es parte del juego de la vida, y aceptar ese reglamento. En ese “saber” interno, que no es esperar el dolor, sino saber que es factible, le quitamos el primer ingrediente maligno: la sorpresa. Diego: ¿En qué sentido la sorpresa es algo maligno? La sorpresa crea un stop involuntario en todo el aparato psico emocional, y en ese estado, la persona se abre a recibir cualquier cosa del exterior. Pero no me refiero a eso, sino al hecho de que sorprenderse cuando nos toca la mala, indica que damos por sentado que merecemos lo mejor. Y eso es lo maligno. Vanita: No entiendo. Para mi es todo lo contrario. Me parece que se debe tener la auto estima elevada, y siempre esperar lo mejor.

- 78 -


EL SABIO SUFRIR

Vanita... ¿Qué hiciste en tu vida para merecer lo mejor? ¿En qué te diferencias del que le toca lo peor?... En esa auto estima que hablás, ¿No está incluido el menosprecio por los que sufren? Vanita: ¡No! ¿Por qué? Porque si vos merecés lo mejor, los otros, los que tienen problemas, evidentemente se habrán portado muy mal y merecen todo lo peor. Vanita: ¡No! ¡Para nada! No es que lo desees, ni que lo pienses. La contrapartida está inmersa en el sentimiento. Acaso no escuchaste alguna vez esas personas que ante la tragedia lloran un ¿Por qué a mí?... Vanita: Sí, muchas veces. Bueno, en su discurso incluyen subconscientemente un “¿Por qué a mí y no a otro?”... No es muy altruista, ¿verdad? Vanita: Bueno, pero uno cuando habla así se refiere a que no hizo nada malo para merecer esa tragedia, en tanto la calle está llena de asesinos y de mala gente, a los que no les pasa nada. ¡Todas imaginaciones!... Primero: Como decíamos hoy, el dolor es parte del juego de la vida y es ignorante suponer que por ser Fulanita, no va a suceder. Llamarse de determinada manera, no es un talismán anti desgracias. Segundo: El dolor no es un castigo, sino una prueba para el aprendizaje, por lo tanto, a mayor cantidad de obstáculos, más esperanza. Tercero, la gente mala y los asesinos tampoco están libres de su cuota de dolor... el que no le haya tocado ese día, no significa nada... Y finalmente, no hay mérito en hacer lo correcto. Graben esto por favor: No hay mérito alguno en hacer lo correcto, por lo tanto si sos una buena persona, no significa que por eso merezcas lauros ni concesiones especiales, ni mucho menos ser excluida de la cuota de dolor que te corresponde. Vanita: ¡Es cierto!... Y otra cosa importante. Cuando alguien es una persona correcta, no tiene especulación sobre su conducta, sino convicción. Por lo tanto, alguien que cree merecer algo por serlo, no es una buena persona. Andrés: ¡Claro!... Su conducta sería, como vos lo definiste, un fetiche más.

- 79 -


EL SABIO SUFRIR

Así es. Entonces, a partir de esta comprensión, es posible producir la Perla. Saber que la prueba y el dolor pueden estar a la vuelta de la esquina, saber que el hacer lo correcto no merece ningún atenuante. Saber que el dolor no es un castigo y sentir con fuerza de convicción, que lo que nos toca, es para nosotros y no para el vecino, son las herramientas iniciales. Diego: La frase, o mejor dicho, el sentimiento que incluye la frase “¿Por qué a mi...?” es una proyección ¿verdad? Desde luego. En ese estado ya perdiste la mitad del valor de la prueba. Perdiste el 50% de tu posibilidad de crecer, de ser mejor. Diego: ¿Por qué tan así? Porque la prueba viene, cuando hay algo grande que quemar en nosotros. La mitad no alcanza a producir la mutación. Vanessa: ¿Cómo se hace para soportar el total? No huir, soportar con quemazón interna, pero no sumar ni un milímetro más de dolor, ni un segundo más, de lo que corresponda y genuinamente sea. Explico: El dolor del que estamos hablando, es siempre intermitente, similar al parto. Jamás dura las 24 horas del día. Cuando viene hay que quemarse, cuando entra la pausa, aceptar la pausa y como un buzo sin oxígeno, salir a la superficie a tomar aire. Tengan presente esto, si quieren surcar la prueba satisfactoriamente. Andrés: ¿Te referís a no apegarse al dolor? Lo habitual, es que en esa pausa, la persona se identifique con lo que le sucede, y a partir de allí sume a la identificación, factores como la lástima de sí mismo, la proyección de culpa y la negatividad. Estos factores son escapes al dolor, y si bien por un lado alivian, por el otro hunden más, y es factible que termine en una depresión o un cambio desfavorable de personalidad. Andrés: ¿Qué se hace cuando se sale a tomar oxígeno? Inteligente pregunta. Es el momento de hacer otra cosa, no quedarse aplastado sufriendo, sino continuar con la vida ordinaria, sólo que más atentos que nunca a identificaciones y demás venenos. Obviamente se siente toda la paliza del dolor asumido al cien por cien, pero es en esa paliza, donde surge lo verdadero de nosotros. Al caer toda la estantería de los yoes, aparece lo genuino

- 80 -


EL SABIO SUFRIR

de uno, lo esencial, el alma... Y esa es la gran oportunidad de chequear su estado. Roy: ¿Es lo que hablabas el otro día, con respecto a cuando nos enfermamos? Sí. Se conoce la persona cuando está enferma, por la misma causa que apuntamos. Sus yoes, sus actitudes, se debilitan y lo que está adentro boya. Lo que boya es lo que la define: dulzura u odio, paciencia o voluntarismo. Los médicos y las familias suelen hablar de los “malos y buenos” pacientes. ¿Qué mejor oportunidad para conocerse uno mismo y corregir lo que no corresponda? Vanita: ¿Esa sería la Perla? No. La Perla es el conocimiento que se logra al cabo de todo el proceso. Nada ocurre “porque si”. Saber qué ocurrió, por qué, qué mensaje deja, dónde se inició, qué nos toca directamente, esa es la Perla, que generalmente se traduce en una síntesis de sabiduría. Vanessa: Pero... ¡hay que ser muy frío para hacer eso! No sé si frío, pero sí práctico. Si no hacemos eso, se pierde la oportunidad, se aumenta el dolor y se suman consecuencias físicas y psicológicas. Al no pasar la prueba, no sería de extrañar que la situación se repita con el tiempo. Vinimos a la vida para aprender y para formar una Conciencia. Roy: ¿Desde dónde, es posible hacer esto? Desde la abnegación al Ser Superior. Si Él falta, olvídense de lo demás. Ningún amor, ningún apego debe ser más grande que el amor y apego a Él. El momento de dolor, debe ser propicio para ofrecerse a Dios. Hay momentos, en que el guerrero debe ser el alma. Vanita: Entonces... ¿Siempre hay que estar dispuestos a sufrir? No. Hay gente que siempre está dispuesta a sufrir, pero eso es psicológico, no es de la Vida, no es de Dios. Entre estar dispuesto a sufrir y el rechazar el sufrimiento, hay un punto intermedio que es aceptar lo que nos toca y cuando nos toca. En los momentos de recreo, bendecir la vida, disfrutando a pleno de ella. Diego: ¿Qué hay que hacer cuando el que está sufriendo no es uno, sino otra persona?

- 81 -


EL SABIO SUFRIR

Acompañar en resonancia, nada más. No compadecer, no permanecer sintiéndonos incómodos y mucho menos, no permitirnos el sentimiento de que estamos haciendo un favor. Si hay algo de conocimiento al respecto, y el momento es oportuno, en vez de consolar, enseñar a sufrir. Vanita: ¿Qué pasa con el entorno, la familia o los amigos, cuando ven a una persona que frente al dolor, en vez de tirarse de los pelos, actúa de una manera diferente? Eso no es algo que nos tenga que quitar el sueño. Cuando se hace lo correcto, el qué dirán no interesa. Pero la reacción es generalmente divertida. Diego: ¿Divertida en qué sentido? En todas las proyecciones que se hacen sobre uno. Hay quienes piensan que uno es de hielo, que no siente nada... están lo que nos adjudican ser “demasiado orgullosos para demostrar el dolor”... y no faltan los que se enfurecen por no poder consolarnos. Recuerden que cada uno nos ve desde su jaula... Y aquí tienen un trabajo adicional, por esas reacciones de la gente que rodea, conocerán a los otros. Vanessa: No entiendo por qué alguien se puede llegar a enfurecer por no poder consolar a una persona. ¿Cómo es eso? Eso ocurre cuando el que sufre estuvo en una posición más elevada que el otro, social, económica o culturalmente. Desea consolar para igualar posiciones y no para aliviar la herida, y si no le dan la oportunidad se enfurece. Esto tiene que ver con aquello de que “Del árbol caído se hace leña”. Vanita: ¡Eso es muy cruel...! En la selva hay de todo. A veces aparece la alimaña. No hay que darle más importancia que la que tiene, ni juzgar a partir de ahí. Seguramente esa persona debe tener también sus hermosas lagunas y sus bellas flores. Si le preguntaras lo que está haciendo, te darías cuenta que ni ella misma sabe “desde dónde” actúa. Ahora bien, aquel que pretende salir del carril ordinario de la vida y tomar otro atajo, debe saber que el profundo dolor, ese que desgarra y conmueve, ese intermitente, debe sufrirse a solas, como ofrenda al Señor, y nadie tiene el derecho de impedirlo. Roy: ¿No existe el peligro de quedarse pegado ahí?

- 82 -


EL SABIO SUFRIR

No. Como dije recién, hay que estar flexibles. Cuando es el momento de sufrir, no oponer reparos, ni auto lamentaciones, ni buscar muletas donde apoyarse, pero cuando viene la pausa, tomarla rápidamente. Con el tiempo, las pausas son mayores y pronto llega el conocimiento, en base a él se produce la Perla y en ella, el retorno límpido, sano, maduro a toda la Gracia, a toda la luz que nos sea posible. No hay que extender el dolor ni un centímetro más de lo que es y debe ser. Andrés: Lo de la abnegación es interesante, como que cierra el círculo, porque uno no se queda con el dolor, sino que lo ofrece, y en tanto la cosa no se personalice, se va más rápido. Exactamente. Desde tu posición lo ves como un resultado terapéutico, para mí, es la Gracia que se recibe como consecuencia. Pero el hecho es el mismo y lo que decís aporta. Roy: Ahora, digo... ¿Cómo se prepara uno para esos grandes eventos? Ejercitando a diario la Templanza. Si veo algo que me gusta mucho, lo tomo, lo disfruto y lo abnego. Si estoy desesperada por comer algo, lo retraso hasta que cesa la exigencia instintiva. Si queda el último pedazo de comida en la fuente y me quedé con hambre, se la ofrezco a otro diciendo que estoy satisfecha. Si no tengo ganas de caminar, camino. Si no tengo deseos de trabajar, lo hago más que nunca... Vanessa: ¿Nunca te das un gusto? Sí. ¿Por qué no? Nada en demasía y todo armoniosamente. Si nunca me diera un gusto, dejaría de ser abnegación y se convertiría en un acto mecánico y masoquista de privarme de todo. Eso tampoco sirve. Recuerden: la cuerda está en el medio y debe ser uno el que camine por ella, y no un antojo de uno. Andrés: ¿La abnegación tiene otros usos o empleos? ¿Conocés algún caso de alguien que, por no ser correspondido en el amor, terminó enfermo, muerto, o degradado en sus principios? Andrés: Sí. ¡Un montón!... Pues esas personas no aprendieron nunca a abnegar. No aprovecharon la pausa, el recreo, para fortalecerse, sino que consideraron que “ya habían sufrido lo suficiente” y que a partir de allí, estaban autorizados a todo placer y todo exceso... ¿Conocés alguien resentido, humillado por haber perdido su patrimonio económico o su status social?

- 83 -


EL SABIO SUFRIR

Andrés: Tampoco aprendió nunca a abnegar... Tal cual. No hay individuo, donde no hay aptitud de abnegación. La auto complacencia convierte al hombre en una gelatina manejable por cualquier deseo, carencia o persona. Ella es la causa de perder el honor, la dignidad, y otros factores esenciales. Andrés: La complacencia.

abnegación

es

entonces

el

antídoto

contra

la

auto

Sí señor. ¡Pero cuidado! No olvidar el “desde dónde” y el “para quién”. Si abnegás desde el deseo de complacer la imagen de un super hombre inmanejable y etc... ¡Perdiste!... Te venció la complacencia. Estás en el mismo lugar, pero con otro rostro. Por eso es tan importante, tan decisivo, tener claro el “para quién” y que ese “Quién” siempre sea superior a nosotros mismos, inmutable, y trascendente. Andrés: Quedó clarísimo. Pasemos entonces al vano dolor. Estos tienen tres matrices, tres madres gestadoras: una proviene de caprichos, quereres y voluntarismos insatisfechos (de la voluntad de Mara). La otra, del afán descontrolado por ser admitidos, queridos y aceptados (la inseguridad) y la tercera, proviene de la calificación y la descalificación interna (el miedo a la soledad). Diego: ... ¿Todas nacen de la identificación? Siempre que hay sufrimiento en vano, hay identificación. Toda la humanidad podría sufrir el 60% menos de dolor, si sólo aprendiera a no identificarse con lo que le pasa. Pero vamos hacia otros aspectos. ¿Alguna vez midieron cuánto pesan sus caprichos, voluntarismos y demás atributos de Mara? Vanessa: ¿Cómo cuánto pesa? Al peso corporal, hay que sumar el energético. Veamos algunos ejemplos: Si estoy ansiosa por el resultado de una entrevista de trabajo, ese sufrir pesa... digamos... 50 gramos. Si el tiempo lluvioso y tormentoso no me gusta, me pone mal, sufro otros 20 gramos. Si deseo intensamente una pareja y no se concreta, debo sumar otros... 80 gramos. Si deseo comprar un par de zapatos, y el dinero no me alcanza, sumaré otros 30 gramos de peso. Si el jefe elogió a una compañera y me ignoró a mí, la envidia me hará pesar un kilo más. Si en el colectivo me dieron un pisotón, y me puse intolerante, sumaré 400 gramos más...

- 84 -


EL SABIO SUFRIR

Vanessa: Vendría a ser una suma de tensiones ¿no? Son cargas energéticas motivadas por sufrimientos inútiles. Dolores que no producen ningún efecto valorable para el crecimiento y que, muy por el contrario, pone en marcha los aspectos negativos. Lo insólito es que estos dolores vanos, son defendidos y promulgados por gente que dice de sí misma, no ser masoquista y disfrutar de la vida. Vanita: ¿No tiene que ver con el buen o mal carácter? No. Tiene que ver con el Ego, y con nada más. Con él tiene que ver también esa desesperada necesidad de aceptación que maneja a tanta gente. ¡Se llega a hacer cualquier disparate con tal de ser aceptado! Vanita: Vos lo relacionaste con la inseguridad, entonces no tiene relación con el Ego. El Ego “es” la inseguridad. Jamás se complace. Jamás se satisface. Siempre quiere más. Nunca se siente seguro. Si tiene éxito, quiere más éxito, y en ese querer más busca la meta de la seguridad, que es igual a la meta de la inmortalidad, o invulnerabilidad. Andrés: ¿Cómo es eso? Se suele vivir pensando que la muerte, es algo que le ocurre a otros y a partir de allí, se vive de tal manera, que las ganancias del Ego confirman la premisa. Así, confirmar la propia existencia, en el reconocimiento de los demás, es una insólita manera de sentirse “seguro”, “vivo”, y aún “inmortal”. Roy: ¿Por eso nos pega tanto la indiferencia? Tal cual. Alguien indiferente a vos, te está diciendo que “no existís”. Roy: ¡Cierto!... Ahora, cuando es así, ¿cómo hacés para que no te afecte? ¡A mi me mata la indiferencia de los demás...! Prefiero que me odien. Eso no sólo te sucede a vos, sino a todo aquél que aún tiene un pozo vacío, donde debiera estar el Ser. Nacemos para completar ese vacío, pero pocos lo logran y mientras se está ahí, se le da importancia a muchas cosas que no tienen real valor.

- 85 -


EL SABIO SUFRIR

Vanessa: Pero... Mientras tanto... ¿Cómo hacés, por dónde empezás, para que no te afecte el hecho de ser aceptada o no? Darte cuenta lo que está sucediendo en vos. Cuando uno trata de agradar, deja de ser lo que es, para convertirse en un ente, en una actitud falsa, rebuscada, interesada, que adopta mil y una maneras de seducir. Se sale del eje, y se convierte en otra cosa. Lo malo es que después ese ente, pesa mucho... ¡muchísimo!... y nos conduce a trasgresiones muy caras. Vanita: Entonces, eso de la consideración externa, ¿dónde queda? Cuando se “considera” a alguien se lo respeta, no se le “vende” un producto falso. No se lo seduce. No se le acapara. Considerar quiere decir que hay que poner lo mejor de uno para que el otro se sienta bien... bien para él, no para nosotros. ¿Entendés la diferencia? Vanita: Creo que sí. No hay que ganar la persona para uno. No hay que envolverlo como un paquete. No hay que conquistar... Esas son actitudes peyorativas hacia el otro, es una moneda falsa que hiere mucho más de lo que se presupone, porque nace “desde” la presunción de que la otra persona es tonta y que puede ser engañada fácilmente. En cambio, considerar al prójimo, significa ponerse en los zapatos del otro, comprender, y obrar a beneficio del otro, no para sí mismo. Vanita: Sí. Comprendo la diferencia, es muy difícil llevarlo a cabo... pero me pregunto si hay que considerar a toda la gente, o sólo a los que nos interesan. Considerar a aquellos que “te interesan”, no te da muchas monedas. Cuando hay un nexo, es como considerarse uno mismo, cuidar parte de nuestro patrimonio. Lo interesante es incluir en el corazón, a quien no conocemos, a quien no nos une interés ni nexo. Al anónimo. Vanita: Bueno... Eso ya es mucho para mí. ¿Cómo hago para que me interese alguien que no me interesa, eh? Aprendiendo a descubrir el factor dignidad en todos. Pero no se tiene acceso a ver la dignidad de otros, en tanto no hayamos descubierto la propia. El que no valora, no respeta... el que invade y se sirve de los demás, el que juzga y menosprecia, sólo demuestra que se ignora a sí mismo. Es ciego de alma y por lo tanto, digno de compasión.

- 86 -


EL SABIO SUFRIR

Andrés: Es patético, pero si miramos un poco alrededor y nos miramos nosotros, esto me hace descubrir que de alguna manera, la calle es una cacería... ¿A esto te referías cuando dijiste que a la Humanidad le habían quitado el corazón? Sí. A eso y a otras cosas. Por el momento interesa que se den cuenta que, el querer ganar a los demás, produce un vano sufrimiento. Diego: Entiendo que querer ser aceptado, es doloroso, pero no veo por qué el mismo acto de hacerlo, implica también dolor. En el simple dejar de ser uno mismo, está el vano dolor. A eso debemos sumar el peso de la ansiedad, los nervios, la tensión, la espera de resultados, la decepción, el rechazo, las trasgresiones... la utilización de energías, todo esto, sin que entremos a evaluar el error. ¿Hace falta más? Diego: No. Pero lo que no me queda claro, es cómo se resuelve la causa de esa búsqueda de aceptación, es decir, la búsqueda de seguridad. Miedo e inseguridad manejan el mundo. Es una tarea difícil, pero no imposible. Todos los días hay que trabajar para minimizar las exigencias del Ego. Andrés: Esos sentimientos, con el tiempo y trabajo de observación, ¿se superan o se reemplazan por otros, a medida que vas debilitando el Ego? Se van reemplazando paulatinamente con uno muy difícil de acceder en su totalidad: Confianza plena en Dios. Eso implica achicar el Ego a su mínima expresión, de ahí la dificultad. Es una meta muy alta. Mientras tanto, vayan conociendo ese sufrimiento, y en el conocer, vayan buscando la salida y aliviando peso inútil. Vanita: Para salir de esas tensiones ¿Sirve la meditación? Sirve, según lo que entiendas por meditar. Si es sinónimo de volar, irte a exóticos planos de lo desconocido, la respuesta es no. Por supuesto que sentirías un alivio momentáneo porque esa bolsa de cosas inútiles quedarían apoyadas en el suelo mientras tu imaginación huye, pero al regreso: ahí están. No resolviste nada. Vanita: Bueno... Pero se puede tomar esa bolsa de problemas y envolviéndola en un color, por ejemplo el violeta que es transmutante, enviarla al cosmos y liberarnos de ella. ¿Eso no haría más rápido el resultado?

- 87 -


EL SABIO SUFRIR

¡Te quiero mucho, Vanita!... ¡La búsqueda de respuestas de tu alma, es un espectáculo que me deleita! Pero ya te lo he dicho, si pretendés lograr algo concreto, ¡debés sumergir tu cerebro en lavandina!... (Risas y comentarios) ¡Leíste demasiado y cualquier cosa!... ¡Estás tan confundida! El Cosmos, es un lugar Objetivo, absolutamente Objetivo... jamás podría llegar ahí ninguna subjetividad. Para evitarlo, existen filtros muy severos que impiden la contaminación. En segundo lugar, es misión de la humanidad, transmutar en si mismo y con el costo que sea necesario, todo lo que sea negativo, y esta es una Ley inevitable, como toda Ley Superior. De modo que, si el método que proponés surtiera algún efecto, no dudes que cuanto harías, sería enviar una bolsa de 100 kilos de cemento a la atmósfera la que, al cabo de un tiempo, regresaría sobre tu cabeza tres veces más pesada. Roy: Titulares de último momento!... Joven mujer queda achatada por misteriosa bola cósmica!... Los científicos aseguran que no es un aerolito... (Risas y comentarios) Si por un instante tuvieran idea de lo que significa faltar el respeto al Cosmos... se quedarían muy serios... ¡Por favor! ¡Usen la cabeza! ¿Cómo pueden considerar el Cosmos, como un basurero de las miserias humanas? Vanita: Pero entonces... ¿Qué se hace con lo malo de cada uno de nosotros y con la maldad que uno recibe de otras personas? Se redime, Vanita. Sólo se redime. Vanita: ¿Se redime? ¿Cómo? La vida y obra de Jesús no es para usarla, sino para imitarla. No es ni fue “cabeza de turco” como se dice vulgarmente, sino que fue y es El Camino. ¿Entendés lo que eso significa? Cristo no ofreció su tremendo sacrificio para dar piedra libre a cualquier cosa, total Él ya hizo todo!... Si buscás un camino serio, debés ser seria. Vanita: ¿Y de qué forma se redime? Voy a dar una fórmula para los que la piden siempre: Las tres “a”: Acepte, Aguante y Abnegue. Eso nos enseñó la Cruz, eso se hace.

- 88 -


EL SABIO SUFRIR

Roy: ¿Y por qué no puedo tener acción? ¿Por qué no puedo en nombre de la misma Cruz, salir a la calle y darle con un palo a todos esos que ensucian la vida y la gente y que contaminan lo bueno? Simplemente, porque harías lo mismo que ellos, serías igual a ellos y por lo tanto, te perderías con ellos. Todo lo cual significa darle la victoria a ellos. Es normal que a tu edad se pretenda resolver todo a los golpes, pero la madurez espiritual te enseñará en su momento, que nadie, ningún mortal, ninguna meta de este mundo, vale tu existencia. Recién ahí se aprende a “Poner la otra mejilla” no por debilidad, sino por convicción. Roy: ¿No hay que defenderse? ¿No hay que hacer nada cuando viene otro y te pasa por encima...? ¿Hay que poner la otra mejilla y nada más? ¡Ni loco! ¡Eso depende de vos!... Si vas a reaccionar a lo que te hicieron, continuarás siendo un robot toda tu vida. “Te amo porque me amas, te odio porque me odias”. Si tenés vocación para eso, adelante. Ahora bien, si pretendés desarrollar tu nivel de conciencia, el trabajo es más complicado. Lo primero a determinar es “Por qué” te dolió la actitud del otro. Qué tocó en vos, qué parte de tu interior. Si es una parte insana, dale las gracias a quien te dio la oportunidad de saber algo más de vos y corregirlo. Después de determinar esto, queda “el otro”. Sin reacción y sabiendo “desde donde” marcar el límite que le corresponda, sin que en ello intervenga represalia, desborde pasional, odio, venganza, ni ninguno de esos aspectos negativos. Andrés: Ahí se me complicó la cosa... ¿Cuál es el lugar interior que puede poner límite, sin ninguna otra pasión? Cada cual debe saber cual es su lugar, su posición correcta, su sitio dentro del concierto universal. Si el guerrero no invade ni conquista, le asiste el derecho de cerrar la puerta a actos de esa naturaleza, pero primero hay que empezar por sí mismo. No hay que responder desde el orgullo, la soberbia, el despecho, mucho menos desde la intención del escarmiento o de producir dolor, sino desde la convicción de que uno es Dignidad (la misma, idéntica, que apreciamos en los otros) y que ese aspecto nos obliga, nos hace responsables de responder a Dios, por permitir atropellos por causa del miedo, la complacencia, o el desborde emocional. Vos, Roy, hablás de defenderte del agresor cotidiano... ¿Cuántas veces lo permitiste, sólo por miedo a perder una ventaja, una posición, una pasión, o una posesión? ¿Cuántas veces cediste tu puesto, para conservar algo que apreciabas?... Y siendo así... ¿Por qué emplear el falso honor, sólo cuando conviene?

- 89 -


EL SABIO SUFRIR

Roy: Parece que estamos otra vez saltando desde el abismo a las cuchillas y viceversa, ¿no? Recordá esto: El Hombre, cuando es tal, no debe ser un camaleón, sino un Hombre. Ese es el desafío. No se trata de mentirnos “honor y coraje” cuando estamos justificados y conviene a nuestros intereses, sino de “vivir” en honor y coraje. Allí no es necesaria la agresión. Andrés: ¿Qué pasa con el tercer dolor en vano? Tiene que ver con la manera como uno se califica o descalifica, es decir, con la manera en que uno se sueña a si mismo. El miedo, el terror es a perder esa imagen, a romper ese espejo. Para mantenerlo sano, el hombre está dispuesto a sufrir todo lo que no sufriría por una causa noble. Roy: ¿Está relacionado a complejos de inferioridad? Sí, y de superioridad, también. A partir de allí nacen esos tropeles de ambición, de desesperación, de esfuerzos desmedidos, de furias, venganzas, y en síntesis el ejercicio a pleno de todos los Pecados Capitales. Hay que ver funcionando estos dolores vanos, y cuando no nos obligan los genuinos, saber permanecer en el éxtasis, en la alegría sincera y completa, impidiendo que esas comparaciones por más o por menos, nos priven del deleite de existir. Andrés: Si uno puede liberarse de esos dolores, es como que tiene más fuerza para enfrentar los verdaderos, cuando nos toca vivirlos. Es así, pero aún hay más. Sin esa carga de tonterías, lo cotidiano es mucho más completo, más satisfactorio, la vida como Don Divino, está más cerca. Lo positivo se acrecienta y lo circundante pierde poder sobre uno. Vale la pena intentarlo. Diego: ¿Cuál es el peor de todos los dolores de este tipo? ¿Hay alguno que tenga más fuerza que otro, o que dañe más? No hay peor sufrimiento, que no saber por qué se sufre. Hay gente que parece sonámbula, que perdió capacidad de asombro y disfrute, porque quedó pegada al dolor, y ni siquiera sabe qué es, ni por qué lo sufre, pero todo le resulta una buena excusa. ¿Qué enseñanza, qué Perla, qué perfume, podés extraer por trastornarte a causa del pisotón que te dio un señor gordo en el colectivo?... sin embargo siempre hay alguien dispuesto a padecer por esto, en tanto manifiesta a voz en cuello que, lo que pide el dogma

- 90 -


EL SABIO SUFRIR

religioso, es “mucho sufrimiento”. Les aseguro que toda “diversión”, todo “placer” se restringe, se marchita donde vive el vano dolor. En tanto esté esa carga pesada, no hay posibilidad de acceder a ningún estado completo. Hasta lo más bello, la oportunidad más maravillosa, queda quebrada, sucia, marchita... Ellos se devoran casi todo, y el hombre sólo tiene acceso a los restos. ¿No es una pena?

- 91 -


EL SABIO SUFRIR

CIERRE DEL CAPÍTULO Al leer el presente capítulo, tal vez ustedes se preguntaran quién será Mara, palabra mencionada durante el pasaje en que se habla del vano dolor y sus matrices gestadoras. Es conveniente entonces, presentarles a Mara a través de una leyenda mitológica: Las Tres hijas de Mara tentaron al Bodhisatwa, pero éste no reparó en ellas y cuando Mara vio que no podía encender ningún deseo en el corazón de Buda, ordenó a todos los espíritus malignos (los yoes) que obedientes a su mandato atacasen y dieran terror al Gran Buda. Pero el bienaventurado los observó como quien mira a los juegos inocentes de los niños y el ardiente odio de los malos espíritus, quedó sin resultado. Las llamas del infierno se convirtieron en saludables brisas perfumadas y los rayos furibundos se trocaron en flores de loto. Ante esto Mara, el Dragón de las Tinieblas, y sus legiones huyeron. Mientras tanto de las alturas Celestes caía una lluvia de flores y se oían las voces de los Buenos Espíritus: “¡Ved al Gran Buda! El odio no conmueve su espíritu (venció a Apopi, las pasiones y emociones negativas desenfrenadas). Las legiones de la Maldad no lo han intimidado (venció a Hai, la mala mente). ¡Es puro y Sabio! ¡Está lleno de Amor y Compasión! (venció a Nebt, la mala voluntad).” Como los rayos del sol barren las tinieblas del mundo, así el que persevera en su búsqueda encontrará la Verdad y sólo LA VERDAD ILUMINA. Para comprender el cuento, debemos aclarar que: Los tres enemigos internos (Apopi, Hai y Nebt) se alimentan del CUERPO DE LOS DESEOS, y que actúan mancomunados, en equipo, formando una unidad a la cual llamamos “EL DRAGÓN MARA”. Cada vez que nos sentimos “yo”, “unidad”, “personalidad concreta”, cada vez que afirmamos o negamos algo que no tiene base de sabiduría, esos tres demonios coparon la esencia y están hablando por nosotros. Estas entidades tenebrosas son las que se encuentran detrás de cada “yo” negativo, sugiriendo actos, justificaciones, proyecciones, acusaciones y autocompasión.

- 92 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

CAPITULO V Sobredosis de Ilusiones

Introducci贸n y cierre del cap铆tulo realizado por: Vanessa Moccagatta

- 93 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

Cuando pasé la experiencia de la lectura de una hoja de papel -que Uds. podrán conocer en este capítulo- me asusté mucho porque no entendía nada. Pero gracias a ésta me quedó una enseñanza que creo jamás olvidaré. La mayoría de las veces uno cree que lo que ve u oye es cierto. Por ejemplo, alguna vez se preguntaron ¿Quién soy? Tal vez la respuesta haya sido: Me llamo..., tengo tantos años, soy hijo de..., mis abuelos son..., soy hermano de..., estudio la carrera de..., trabajo en..., me gusta tal o cual cosa, etc., etc., etc. Es decir, sustantivos como respuesta: hijo, nieto, hermano, estudiante, novio, amigo, profesional, empleado. O bien la respuesta podrían ser adjetivos: bueno, malo, lindo, feo, alto, bajo, agradable, desagradable, etc., etc. Pero, ¿Uno es eso? Si uno no se conforma sólo con estas respuestas aparecen otras preguntas: “¿Por qué siento de una forma ahora y al rato lo contrario?”, “¿Por qué a veces me enojo y otras veces estoy contento?”, “¿Cuál es el motivo que me hace cambiar de estados anímicos?”, “¿Por qué estoy indeciso a veces y otras seguro?”, “¿Por qué algunas cosas me molestan y otras no?”, “¿Por qué surgen envidias, celos, temores, odio, alegría, pereza, tristezas, entusiasmo, desgano, cariño, etc., etc.?”. A estas y tantas otras preguntas o bien se tiende a decir “soy así” o bien a buscar respuestas afuera de uno. Así, hoy la respuesta es una y al día siguiente es otra. Siempre cambiante, en función de lo que nos parece, de lo que nos dicen, de la situación por la que uno está atravesando, o según nuestra conveniencia. A través del trabajo de observación describiremos estados, sensaciones, emociones, sentimientos, etc. que se van generando dentro nuestro manteniendo una diferenciación entre los mismos y uno. Podríamos asemejarlo a la idea de un laboratorio (nosotros) donde está la sustancia u objeto a ser examinado (actitudes, sensaciones, emociones) y el profesional que examina (una parte de nosotros). Para ello se necesita estar en permanente estado de atención a fin de poder “capturar” el origen, desarrollo y consecuencias de lo que observamos ya que todo el tiempo van sucediendo cosas dentro y fuera nuestro. Si estamos dormidos o “en babia”, nos encontraremos de repente en medio de las consecuencias y no veremos la raíz. O lo que es peor, creeremos ver el origen cuando en realidad es parte de las consecuencias. Entonces estaremos en un círculo donde las circunstancias externas pueden ser otras pero lo que sucede dentro nuestro vuelve a repetirse. Así continuaremos viviendo según lo que pasa afuera, por reacción y nunca llegaremos a conocernos. En el trabajo de observación uno al principio ve sólo lo más superficial, es decir: mecanicidades, reacciones, costumbres, etc. Esto nos sirve para ir experimentando de qué se trata el “observar”. Luego uno va profundizando cada vez más: de dónde surgen, por qué se manifiestan, por qué se repiten, cómo se relacionan, que hay detrás de todo ello. El trabajo se complementa escribiendo nuestras observaciones, es decir,

- 94 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

formaremos un diario de observaciones y será escrito en tercera persona. Así, a medida que vayamos conociendo las actitudes que forman nuestra personalidad, iremos comprendiendo que no somos lo que nos sucede interna o externamente. En este capítulo, a través de preguntas y respuestas y con ejemplos muy claros iremos conociendo la importancia de mantener la independencia entre el observador y lo que se está observando a fin de que la observación sea concreta y puntual, libre de subjetividades. Esto es: evitar identificarnos con lo observado (diferenciar lo observado del observador), evitar auto justificarnos (no buscar “excusas” a lo que estamos viendo), evitar auto considerarnos (ser honestos con lo observado) y evitar proyectar culpas (no depositar en los demás nuestra responsabilidad). Es decir en la observación no debe existir imaginación ya que caeríamos en estos cuatro venenos para nuestro Ser. Así, lo que observamos tiene que estar limitado a “conocer”, no a sacar conclusiones, suposiciones o resultados. Sólo habiendo un Fin Supremo que “nos movilice” a ser honestos, persistentes, perseverantes en nuestra labor podremos sortear la TRAMPA DE LA ILUSIÓN. La clave del trabajo de observación es: saber desde dónde, para qué y para quién se está observando para evitar entrar en una rueda de imaginar sobre lo ya imaginado, es decir una “sobredosis de ilusiones” que tan bien titula a este capítulo.

- 95 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

(Mónica tomó un papel, y prácticamente lo pegó a la nariz de Vanessa, diciendo) ¡Leelo! Vanessa: ¡No puedo! Te digo que lo leas. Vanessa: Es imposible. ¿Y qué necesitás para leer lo que dice este papel? Vanessa: Que me lo saques de la nariz. ¿Por qué? Vanessa: ¡Porque necesito distancia para poder leer! Así pegado a mis ojos, no veo nada... (Mónica se levantó y desde la otra punta de la mesa, dijo) Ahora podés leer. Vanessa: ¡Imposible! ¡Ni siquiera con los lentes podría ver esa letra desde allí! Entonces... ¿Qué necesitás para poder saber lo que dice este escrito? Vanessa: Distancia, pero no tanta. Unos 20 0 30 cm, no más. (Mónica la dio el papel y Vanessa se puso a leer en voz alta. En determinado momento interrumpió la lectura) A ver, Vanesa, ¿Qué gesto hice recién? Vanessa: No lo sé, estaba leyendo. ¿Por qué no estabas también atenta al resto de la gente? Vanessa: No lo sé... Creo que estaba muy preocupada en leer bien, en no equivocarme, y por eso no miraba a nadie. Y... ¿Cuál era la consigna? ¿Que no te equivocaras o que todos entendieran? Vanessa: ... que todos entendieran...

- 96 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

¿Y como sabés si entendieron o no, si no mirás a tu alrededor, si no mirás los ojos y las actitudes de quienes te escuchan? Vanessa: Creo que me identifiqué con el hecho de “quedar bien” ante mis compañeros, en vez de ocuparme en que me entendieran. ¡Ahí estamos de acuerdo!... Pero no te preocupes Vanessa, esto no es sólo para vos, es para todos. Lo ejemplifiqué en vos, para que el resto aprenda de lo que veían. Ninguno está trabajando bien en Observación interna, y es necesario aclarar el tema lo antes posible. Vanessa: ¡Me asusté! ¡No entendía nada! Primero: Cuando te puse este escrito sobre tu nariz, no pudiste leer su contenido. ¿Por qué? Vanessa: ¡Porque lo tenía muy cerca! Bien. Cuando tenemos muy cerca el motivo de la observación, no podemos ver más que la forma del tema, y al perder perspectiva, en vez de aprender, nos equivocamos. Por ejemplo: Supongamos que el motivo de mi observación es esta miguita de pan. Si me acerco demasiado, no podré conocer cómo está formada y más aún, ésta posición frente a ella (Mónica se agacha hasta quedar su nariz pegada a la miga de pan) me llevará a considerar que su tamaño es mucho mayor de lo que concretamente es. No solo habré perdido perspectiva, sino también su relación con el entorno. Vanessa: ¡Es cierto!... Desde ahí tenés una perspectiva equivocada. (Riendo) ¡El papel me parecía enorme! Exacto. Si me alejo un poco, pero no lo suficiente, veré pequeñas cavernas en la miga que, desde esta distancia, pueden parecerme hormigueros gigantes. Descubriré tonalidades, porosidades, pero todavía no tengo una apreciación correcta de esta miga. Haciendo esto, describo la miga, pero no la conozco. Para conocerla, debo separarme a la distancia prudente, donde la miga siga ocupando un primer plano, pero desde donde pueda determinar que viene de ese pedazo de budín, que el budín está sobre una fuente. Que la fuente está sobre una mesa. Que la mesa es un componente de una habitación y que en esa habitación hay sillas, y sentados sobre ellas hay gente... ¿Está claro? Vanita: Sí. Es como leer una frase fuera de contexto e interpretarla.

- 97 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

¡Muy bien Vanita! Eso es. Cuando observan desde el lugar incorrecto, lo que hacen es “interpretar fuera de contexto”, en vez de observar imparcialmente. Andrés: ¿Y qué significa lo contrario? Quiero decir... ¿cuál es la analogía de ver el papel desde la otra punta de la habitación? Significa que a mayor distancia de lo prudencial, si bien vemos la relación con el contexto, no podemos apreciar detalles ni contenidos. Esto hacemos cuando vemos “la paja en el ojo ajeno”. El error que tiene uno encima, visto en el otro, aparece claro como el agua, pero solemos juzgarlo dentro de un confuso panorama general que nos impide la comprensión del tema. Andrés: O sea, que el mismo objeto de observación cambia, en función de la posición del observador. Sin duda. Una cosa es ver, por ejemplo, el odio en uno mismo, que en otra persona. Si lo veo muy de cerca, el odio aumentará de tamaño y no podré salir de ese estado. Si lo veo en otra persona, lo juzgaré sin base, diré de esa persona que es mala, o enferma, o vengativa. Veré la forma, pero no alcanzaré a comprender el contenido... Andrés: Cuando se proyecta, no es posible ver los componentes del problema. Se juzga y de manera improvisada... Eso es lo grave del mecanismo de proyección. Se juzga apresuradamente para liberar culpa. Literalmente sacar el peso que nos molesta tirándolo sobre otra persona, pero disfrazado de “opinión”. Vanessa: ¿Dónde está el punto correcto de observación? Lo correcto es que se tome distancia de ese sentimiento. Digamos: sacar la nariz del odio, salir del estado de compenetración con él, para lo cual es necesario trabajar primero sobre la distancia. Esto quiere decir observar el grado de identificación que tengo con lo observado. A partir de allí, sin especular, juzgar ni monologar, veré cómo se relaciona conmigo, cómo entró ese sentimiento, qué sensación de mí lo trajo, qué pensamiento, qué hábito, qué miedos... Veré qué relación tiene con mi espejo, con la educación recibida, con mi jaula, mis prejuicios... en fin, con todo el contexto. De esa manera habré llegado al cometido de la observación: conocer el odio. Diego: Si sólo vemos el odio, sería aumentar el sentimiento de odio y que este nos domine.

- 98 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

No lo dudes... Aquí es importante recordar que “uno se convierte en aquello.... Diego: donde pone su atención”... Síntesis, nos convertimos en odio. Esto está claro. No basta con que esté claro. Hay que practicarlo. Diego: Me quedó un poco de duda respecto a la distancia correcta. ¿Cómo saber si es o no el lugar óptimo para la observación? ¿Cuál es la medida correcta? Eso depende de tu visión. Cuanto más vehemente, cuanto más casado estás con tu propia imagen, hay que buscar más distancia. Para los de “buena visión” es suficiente reservar un 20% de distancia. Andrés: ¿Cómo se mide un 20% de distancia, cuando se trata de una observación interna? Hay tres cosas que te darán la medida: Desde dónde, para qué, y para quién. La consigna que se le dio a Vanessa, fue leer para todos, pero ella, manejada por un estado de complacencia, leyó para si misma, para “quedar bien” con ustedes. El “desde dónde” estuvo equivocado. El “para qué” no se cumplió y el “para quién” fue egocéntrico. Traslademos esta situación a una observación interna. ¿Desde dónde observan? Roy: Desde el Observador. ¡Respuesta de catálogo! El Observador es una meta que aún no alcanzó ninguno de ustedes. En tanto ese factor de conciencia se va fortaleciendo y tome cuerpo, es reemplazado por un estado. Por ejemplo: “me siento mal, por lo tanto observaré qué me pasa”. El “desde dónde” es un malestar. ¿Pueden ver esto? Roy: Sí, es cierto. Por eso escriben poco. Por eso pasan horas en que no encuentran nada para observar. Están pasivos o muy identificados con la vida, entonces el aparente observador (que no es tal) no funciona. Si funcionara, la atención sobre procesos externos e internos sería continua y simultánea aún durmiendo. Ahora bien, para resolver esto, la primera pregunta que deben hacer es ¿Desde dónde estoy observando? Ahí se van a dar cuenta que tienen la nariz pegada a la miguita.

- 99 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

Roy: O sea, el que observa... ¿no es el observador, sino el síntoma...? Exacto. Cuando el observador es el síntoma, lo observado no sirve. Pero vayamos por partes: La cadena de error comenzó con la primera nota, un Do equivocado en la escala musical, que hace sonar una canción muy opuesta a la que debe ser. Observando esa primera nota, que es el “desde dónde” se inicia la observación. Al observar “quién observa”, ya se impuso la distancia correcta. Diego: ¿Qué pasa si descubro que el que observa es, por ejemplo, un sentimiento de minusvalía? Es igual que el ejemplo que vimos. Si permitís que la observación se haga desde allí, todo cuanto veas va a confirmar el concepto de minusvalía. En palabras simples: en vez de salir de eso, te enterrarás más... Jamás, entiendan bien esto, jamás nada interno que califique o descalifique debe ser el punto de observación, porque si lo hacen desde allí, lo único que van a lograr es confirmar, sellar, agrandar el síntoma, hasta convertirse en el mismo síntoma... Diego: Ah! ¡Eso es muy importante!... No hay que observar desde nada que califique o descalifique... Sí... Ahí está el tema... Si observás, por ejemplo, desde el estado de descalificación, sería lo mismo que alquilar un señor para que te insulte todo el día, te rebaje, te demuestre que tan horribles son tus actos, hasta que ya no te queden dudas y te conviertas vos mismo en un descalificado. Mucho cuidado con lo que acabo de decir... observar incorrectamente es cavar la propia fosa. Diego: ¿Y cómo se evita observar desde ese lugar equivocado? Lo dije y lo repito: El primer paso es observar desde dónde vamos a realizar el trabajo y desarmar ese paquete. En el ejemplo que diste vos, sería observar cómo funciona la minusvalía, cómo afecta la emoción, el pensamiento y la acción. De qué manera, bajo el dominio de ese estado, se producen cambios. Qué cambios son esos. Cómo corroe lo positivo. Qué se lleva de vos. Síntesis: conocimiento total y absoluto, detallado, minucioso de la minusvalía... Hasta que de ella no quede nada... Ahora bien, si en vez de conocer la minusvalía, la dejás observar, le permitís tomar el lugar del observador, ocurrirá que ella te va a informar todas las torpezas, taradeces, y ridiculeces que hacés bajo su dominio. Va a ridiculizarte, no a enseñarte. Y a fuerza de ser ridiculizado por ella, aquél estado dormido de minusvalía, tomará cuerpo, crecerá bajo las constataciones y el resultado será: convertirte en el minusválido que antes no eras.

- 100 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

Diego: Pero... ¿Es suficiente observar eso, para que no domine? Es suficiente, si respondés cabalmente a la segunda pregunta: “para qué” estás observando. Si la tendencia es al masoquismo, mejor alquilar el señor que te insulte. Pregunto a todos: ¿Para qué se practica la auto observación? Vanita: Para estar mejor. Para sentirnos mejor. ¡Por eso no te resulta! No. No es esa la respuesta. Es igual a lo que dijo Vanessa cuando leía muy identificada con “quedar bien ante sus compañeros”, en vez de procurar que el resto comprenda lo que leía. Roy: Para evolucionar. No. Eso sería un para qué especulativo. ¿Sabés lo que ocurriría en ese caso? El observante sería el afán de llegar a ser superhéroe, en cuyo caso pueden ocurrir dos cosas: que viendo lo negativo llegues a odiarte por no lograrlo al tercer intento, ó que animado por ese deseo, creas resolver lo que no resolviste en absoluto. ¡Todo un engaño!... ¡Qué extraño es esto de que no recuerden por qué están aquí! Vanessa: Nos damos por vencidos... ¿Para qué se observa? Simple y llano: Para conocerse a sí mismo. Cualquier agregado, cualquier otro motivo, sensación, ambición, especulación que se sume a esa frase, es error, desvía del objetivo, más aún, hace daño. Entonces, para no caer en ese error, lo primero que se va a observar es desde dónde, lo segundo, recordar continuamente que lo único que debe estar presente es: auto conocerse. Todo cuanto agreguen a eso, es sobredosis de ilusión. Vanita: Y si uno no puede evitar iniciar la observación con el motivo de sentirse bien... ¿Qué se hace? Te detenés ahí y no le das permiso a tu Ego a descargarse. Se observa precisamente eso: el quiero sentirme bien. ¿De dónde viene? ¿Para qué? ¿Cómo me maneja? ... etc. Vanita: Y no observo nada más que el hecho de que quiero sentirme bien? Exacto. Nada más que eso, hasta que eso se corra. Cuando insisto en que observen sólo el desde dónde, lo que estoy indicando es que deben observar todos los inicios y motivos de

- 101 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

observación incorrectos. Si este trabajo no está bien hecho, solo imaginan observar. Vanita: Y... ¿Se corre? No te quede duda. Una observación imparcial realizada metódicamente y en forma perseverante, disuelve cualquier cosa, absolutamente cualquiera. No importa la gravedad que tenga. Diego: ¿Por qué dijiste “sobredosis de ilusión”? Porque diciendo y creyendo que se están conociendo, lo que en verdad hacen es aumentar el engaño. Porque diciendo y creyendo que están haciendo algo para crecer, se estarían destruyendo. Porque diciendo y creyendo que están en búsqueda de lo esencial y de su propio eje, están aumentando lo negativo y creando un eje falso. Andrés: Entonces tiene un valor muy destacado, el recordar el Propósito por el cual se está trabajando internamente. Exacto. Sin ese recuerdo, no hay camino. Pero... ¿A qué llamás Propósito? Andrés: A mantener el por qué de la observación, como un medio para alcanzar el objetivo de conocernos a nosotros mismos. Ese es un objetivo. Un para qué. Ya saben que cuando hablamos de Propósito, está mucho más lejos y podríamos acercarnos a él, contestando sinceramente la tercer pregunta: ¿Para qué buscan conocerse a sí mismos? Vanita: Si soy sincera, es para salir de mis problemas internos y estar mejor. O sea, regreso donde estaba. Siendo esta la fuerza que te impulsa, mañana vendrá un tiempo de buenaventura, como siempre se da en la vida, y sintiéndote feliz, en ese instante abandonarás todo esfuerzo. No habrá ya motivos para conocerte a vos misma. Nada duradero puede venir de ahí. Vanita: Sí. Es cierto... Roy: Hace un rato habías dicho que la tercera pregunta es “Para quién”. ¿Estamos hablando de eso? Sí. De eso hablamos.

- 102 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

Roy: Entonces la respuesta sería para acercarnos a Dios. ¡Toda una deducción!... Y como tal, no sirve. Relacionaste de manera lógica y diste una respuesta lógica. Estoy hablando al corazón de ustedes, no a la lógica. ¿Para qué, para quién tomarse el trabajo de conocerse a sí mismo? Afuera, la vida es mucho más sencilla, más simple. ¿Por qué eligieron venir aquí? Diego: En mi caso estoy lleno de preguntas que en otro lado no me responden. Necesito conocer algo más, llegar más al fondo de lo que veo... No me siento satisfecho con todo lo que estudio o investigo... No sé... es difícil de traducir... Quiero algo más, pero no puedo definir qué es eso. Bien Diego. Ese, momentáneamente, es un lugar correcto. Se llama Ansia de saber y conocer. Necesidad de respuestas concretas, no intelectuales. Esa ansia de saber, de llegar a respuestas de convicción y no de catálogo, es el Foco que debés seguir. Ahí está la fuerza, ese es el camino. Por ese Foco, para ese Foco hay que hacer todos los esfuerzos que sean necesarios, y un poco más. Ese deseo de conocer, es el velo que oculta la presencia Divina. Cuando lo descorras, lo conocerás a Él. Diego: ¿Y por qué me cuesta tanto encontrar el equilibrio interno? Porque estabas trabajando equivocadamente. Estabas conociéndote desde tus falencias temporales, no desde el ansia de conocerte como medio para llegar a un estado de convicción. ¿Qué equilibrio puede haber en alguien que se ignora a sí mismo, o que cree conocerse porque se ve desde el lado del abismo? Vanessa: A mí me pasa lo mismo, recién lo veo... Por eso a pesar de observar tanto, no lograba salir de lo observado ¿no? Tus observaciones, puntuales, detalladas, son el producto de una miga pegada en tu nariz. ¿Lo comprendiste? Ves sólo la miga, es decir, sos descriptiva, pero no conocedora. Es necesario que tomes distancia y veas el resto. Hay que detener todo otro trabajo interno y dedicarse solamente a conocer desde dónde, para qué y para quién observás. Vanessa: ¿Podés decirme cual es el estado que observa en mí? Es complicado, pero te daré pistas. El título es “obediencia ciega”. Esto se puede confundir con docilidad, pero no lo es. El primer rasgo persigue la constatación de la perfección. Es un mecanismo que te obliga a demostrarte y demostrar cierto nivel de excelencia, en pos del cual realizás todo tipo de esfuerzos, pero nada que comprometa tu interior. La perfección de la apariencia...

- 103 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

Internamente, está lo opuesto, esa rebeldía que nunca manifestaste hacia afuera y que constituye el reino de lo anárquico. Nada ni nadie lo doblega, ni siquiera vos misma. De ahí viene que las observaciones sean técnicamente perfectas (hacia afuera) pero sin compromiso de tu interioridad. Estás impermeable a ellas. Hay un dique, una muralla que separa la obediencia ciega, del reino anárquico y que debe ser observado para tu bien. Roy: Me toca a mí. ¿Dónde está mi error? Tu observador, es un personaje que lo sabe todo, un tipo muy eficiente. Sabe tanto, que no necesita conocer nada. Tu trabajo será conocer detallada y precisamente cómo es ese señor, qué muros levanta, dónde nació, qué pretende, qué miedo oculta, dónde le gusta actuar, cómo se alimenta... Tenés que salir de ese observador, porque es engañoso. El que te dicta observaciones, es ese “señor Eficiente”, no es el Observador de Roy. Andrés: ¿En mi caso, cómo es el tema? ¿Desde dónde observo yo? Desde el miedo al abismo. No es un personaje, sino un estado que a su vez es madre de ansiedad y abuela de complacencias. Todo lo querés ya y ahora con rápidos resultados que te complazcan, que te den seguridad. Andrés: ¿Entonces...? Tu observador es un señor desesperado, que da manotazos continuamente. Que ni bien tiene algo, en vez de utilizarlo adentro, lo lleva a la especulación filosófica, a la definición académica, es decir: huye y es ahí cuando da por concluida la experiencia y cree haber resuelto algo. Es otro engañador. Tu trabajo consiste en dar caza a ese personaje. No observar lo que él quiere, sino conocer cómo te maneja. Vanita: Quedo yo... No me dijiste donde estaba mi observador ¿Qué pasa conmigo? Prioriza en vos, el “Hada Madrina” que con su varita mágica quiere cambiar el mundo, en especial, la gente de tu entorno. No aceptás lo que es concreto, sino que empeñás fuerza y energía en modificar lo que no te gusta. En transformar una ilusión en otra ilusión, pero a tu medida. Vanita: Si... pero... ¡La gente puede cambiar! Aún no comprendiste que nadie cambia a nadie. Dentro nuestro, en la parte más recóndita del ser, hay una cajita que le llamo

- 104 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

“individualidad”. Ahí no llega nadie, ni siquiera Dios, por eso es el asiento del Libre Albedrío, el lugar de las grandes decisiones. En esa cajita hay dos botones: uno dice SI y otro dice NO. Nadie, diga lo que diga y haga lo que haga, puede apretar la opción del otro. Por eso uno es responsable de sí mismo. Cada uno oprime el botón de su opción individual y de eso se hace responsable. En esa opción, no hay excusas, no hay “peros”, ni tampoco justificaciones. Al oprimir el botón, uno demuestra quién es, en lo más esencial de sí mismo. Se quita la careta y queda la verdad. Vanita: Escuchándote, cambié muchas cosas... ¿Por qué otros no pueden cambiar? Cambiaste actitudes, formas de pensar, tus estados anímicos o emocionales, tal vez algunas conductas... Tu ser interior no cambió. Esa es tu opción. Ese es tu botón. Hay casos que tienen todo servido para decidir por el lado correcto y a último momento aprietan el botón equivocado... y ahí se terminó la historia. Ya no hay regreso. Vanita: ¿No se puede volver? No. De esas decisiones fundamentales, esenciales, no. Para eso, y no para hacer lo que se nos dé la gana, como erróneamente creen muchos, está el Don del Libre Albedrío. Te digo más, la mayoría de la gente no se da cuenta cuando aprieta el botón. Vanita: ¿Entonces hay que dejar que cada cual siga en la suya, sin interferir en nada? ¡Siempre en los extremos!... Por supuesto que hay que hablar, hay que ayudar... hay que intentar sacar a alguien del error, el tema es “desde dónde” y “para quién”. Tu desde dónde, es el capricho, la omnipotencia, el “yo lo voy a lograr”. Tu “para quién” tiene por destinatario a vos misma, y eso es lo que no está bien. ¿Sabés por qué? Vanita: ¿Por qué? Porque del “Hada Madrina” a la “Bruja Mala”, sólo hay un paso... Lo que estoy haciendo ahora, es darles la oportunidad de cambiar, pero no es mi voluntad que cambien, ni me encapricho en el resultado... Lo que logren aquí, no constituirá mi éxito o mi fracaso, sino el de cada uno de ustedes. No reportan a mí, ni dependo de lo que logren o no. Eso depende de ustedes, del botón que opriman y de la Voluntad Divina... Desde ese lugar, me doy y les doy libertad y responsabilidad. En tu caso es diferente, Vanita, ese querer que aplicás, en esa compulsión que te domina, está la

- 105 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

voluntad de Nebt y ninguna referencia a la Voluntad de Dios. Vos querés que la gente cambie, sí o sí... Ese es tu error. Por eso ves más lo ajeno, que lo propio. Vanita: ¿Y cómo sería lo correcto? Hacer todo lo posible desde el amor por el otro y para el otro, no para vos. No para tu satisfacción. No para tu logro. Después dejar los resultados a donde corresponde: A la Gloria de Dios. Vanita: Si, comprendo... Lo que me quedó en duda es cómo se pasa de la “Hada” a la “Bruja”... ¡Eso no me gustó nada! Es un método muy fácil: Hacé todos los días tu voluntad, manejá a la gente desde tu voluntad, empeñá todo el esfuerzo en que las cosas se den como vos lo planeaste, nunca aceptes un no, trabajá sin descanso para que todo resulte a la medida de tu complacencia, concentrá tu mente en que otros te obedezcan y en que los resultados sean los que vos planificaste, cuando no resulten a la medida de tu apetencia ponete furiosa y redoblá esfuerzos, jamás aceptes otra voluntad que la tuya... y pronto te invitarán a un aquelarre. (Risas y comentarios) Roy: Voluntad de Nebt potenciada a la enésima. Eso es una bruja, o un brujo. Ignora absolutamente una voluntad diferente a la suya. Tal vez más de uno, comenzó su carrera como aspirante a “Hada Madrina”. ¿Entendés el riesgo? Vanita: Sí, por supuesto. ¿Desde ahí observo yo? Sí. Desde el ideal de perfección y de corrección. Debés conocer a fondo esa “Maestra Ciruela” y decirle que deje en paz a los otros, dado que hay mucho trabajo para vos misma. Diego: Cada uno está observando desde un personaje o un estado. Después que lo descubrimos ¿Aparece el verdadero observador? Puede que sí, puede que no. Es muy factible que aparezca otro estado u otra actitud. Este es un trabajo de paciencia, perseverancia y de renuncia a los resultados. Primero hagan, después veremos. Roy: ¿Son estos falsos observadores los que no nos permiten escuchar lo que nos enseñás, de manera completa y como es debido?

- 106 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

Para escuchar hace falta mantener silencio interno. Para alcanzar ese estado, tienen que haberse ido un grupo mayoritario de yoes y dejar de discutir entre ellos, eso significa abandonar el monólogo interno. Roy: Evidentemente si depende de eso, mejor renunciamos hoy. Faltan más o menos mil años para que lleguemos ahí. ¡Huy! ¡Se enojó tu sabiondo interno! Roy: Sí. Perdón. ¿Ven? Dado que el observador de Roy es el sabiondo, cuando aparece ese personaje, él no lo puede ver... lo tiene pegado en la nariz... Lo que Roy sabe de sí mismo, es lo que le contó el sabiondo, y es a partir de allí que interpreta la vida y sus circunstancias. En tanto ese personaje hable por altoparlante, no puede escuchar a nadie más. Además, cuando actúa, lo ve tarde y sólo por sus consecuencias. No puede anticiparse a su aparición, cosa que lograría observándolo, conociéndolo. Cada uno aplique esto sobre sí mismo. Andrés: Sí, el tema es apasionante y revelador. No obstante me uno a la inquietud de Roy. Falta mucho para tener mente quieta... ¿Mientras tanto qué podemos hacer para mejorar nuestra atención? ¿Recuerdan el ejercicio de buscar el diente blanco?... ¡Lo hicieron con desgano y tres días!... Después cayó a la bolsa de lo que no sirve. Sin ese paso, el otro es impracticable. Vanita: Yo no estaba. ¿Me podés contar qué es ese ejercicio? A partir de que no se ama lo que no se admira, y que el hombre tiende sólo a admirarse a sí mismo, la tarea propuesta fue determinar en todas las personas conocidas y por conocer, cuál es el rasgo admirable que tienen. Vanita: ¿Y por qué se llama “diente blanco”? Se cuenta que en el bosque cayó un coyote muerto. La gente se reunió en su entorno para comentar que horrible espectáculo era, que feo olor, que dañada se veía la piel del animal, que desagradable se veían sus huesos... En eso, llegó un sabio, se abrió paso entre toda la gente y mirando al animal muerto exclamó: ¡Qué hermoso diente blanco tiene! Vanita: ¡Una persona optimista, que siempre rescata lo bueno del otro!

- 107 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

No, para nada. Eso es una actitud, no una capacidad. ¡Nada que ver!... En lo que dijiste, hay un buen ejemplo de “no escuchar”. Estás proyectando lo que vos hacés y no aprendiendo lo que hizo el sabio. No hubo asombro, ni comprensión. Vanita: ¿Qué hizo el sabio? Desde su corazón, admiró el diente blanco. Descubrió lo perfecto, dentro de la carroña. El común de la gente no admira, sólo envidia. Vanita: Pero... uno admira a algunas personas... No admiran la persona, sino el lugar o el atributo que quisieran tener para sí. De tal manera que, quien pretende para sí el bien del otro, no admira, sólo envidia. Vanita: ¿Qué es admirar? Descubrir en el otro algo que uno no tiene, y ser capaz de disfrutarlo en esa persona, sin quererlo para sí. Ser capaz de gozar el bien ajeno, sin pretenderlo. Disfrutar en el otro el bien que le pertenece, sin añorarlo, sin tomarlo, sin necesidad de poseerlo, sin comparaciones personales. Aceptar y disfrutar el bien ajeno, en el prójimo, para el prójimo y no para sí mismo. Eso es admirar. Diego: ¿Y que relación tiene la admiración, con saber escuchar? Es el mismo estado. Hay que desarrollar la capacidad de escuchar al otro con asombro, que es el primer síntoma de la admiración sana. En ese asombro, hay interés por el otro, más aún: es posible “asomarse al otro”, a su interior, al espectáculo de su alma, sin presuponer, calcular o especular a ver que se saca de provecho, o “qué tiene ese que a mi me falta”... o “a ver en qué me gana” y similares. Cualquier persona, aún la más primitiva, la más ignorante, tiene su verdad, tiene su especial don, su tesoro individual. Aún las personalidades más retorcidas, inoportunas, agrias, tienen su diente blanco. La envidia priva de esos maravillosos espectáculos y de esas oportunidades de conocimiento. Vanita: ¿Entonces el trabajo sería intentar descubrir qué es lo bueno, positivo o lindo que tienen todas las personas, no importa quién sean? Eso es. ¿Sabés por qué no se hace? Porque se cree en el poder de la envidia. ¡Otro fetiche!... ¿No es tremendamente ignorante pensar que alguien se puede quedar con el Don de otro? Eso hace la envidia... comer, destruir, no el bien ajeno porque eso sería imposible, sino al poseedor del bien. Tanta desesperación se pone

- 108 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

en tomar los atributos de los otros, que el envidioso se condena a desconocer por siempre, el bien que le corresponde y tiene. Diego: ¿Es bueno encontrar también nuestro propio diente blanco? Es indispensable, es parte del auto conocimiento. Si trabajan bien, verán rasgos que es necesario sacar. Errores de apreciación que hay que corregir... Cuando el sector esté un poco limpio, verán aparecer aptitudes desconocidas, estados puros, emociones elevadas, y capacidades dormidas propias, que son de uno, que pertenecen al mundo individual e intransferible, y contra los cuales la envidia ajena no llega. Si en ese momento sortean la voz de la soberbia, serán seres humanos completos, capaces de aceptar el sol y la luna que corresponde, es decir los sectores de luz y de oscuridad propia, y estarán aptos para descubrir y gozar de soles ajenos, como quien asiste al más brillante de los espectáculos... Queridos todos: nadie es más ni nadie es menos, en la gran diversidad del género humano. La cuestión está en ocupar el lugar que a cada uno le corresponde, sin pretender el lugar del otro. Ese es el gran secreto.

- 109 -


SOBREDOSIS DE ILUSIONES

CIERRE DEL CAPÍTULO “Si sortean la voz de la soberbia, serán seres humanos completos, capaces de aceptar el sol y la luna que corresponde...”. Creo que esta es una clave importante a tener en cuenta para aprender a conocerse. Tal vez la soberbia sea la gran muralla levantada en cada uno de nosotros que nos impide conocer nuestra propia existencia, ese ¿Quién soy? que no se limita a adjetivos y sustantivos. Para poder sortear esa gran barrera sólo contamos con el aprender a ver las mecanicidades a las que estamos sujetos y que nos tienen atrapados en un mundo de ilusión donde no nos queda más que reaccionar por costumbre. El trabajo de observación -asemejándonos a un gran laboratorio- es la llave de ese conocimiento. Hay que tener en cuenta siempre el separar lo que observamos en nosotros, de nosotros mismos. Es decir, mantener ese mínimo de distancia de un 20% para no fijar la atención directamente a lo que se está observando. Para lograr esto hay que recordarse a sí mismo, o sea, tomar percepción de uno mismo, en forma permanente, un micro instante antes de cualquier pensamiento, sentimiento o acción. Si no lo hacemos, sólo nos estaremos identificando con lo observado y nos convertiremos en ello (en otras palabras fusionaríamos el observador con lo observado). Entonces dejaremos de ser “los científicos del gran laboratorio”, se perderá el “objeto de estudio” y la tarea para la cual fuimos convocados como científicos se truncará. Sólo conseguiremos seguir “incrementando las dosis de ilusión” al creer que estamos observando. Se nos dio la posibilidad de conocer quienes somos realmente. Y conocerse es querer encontrar nuestra propia existencia. Si dejamos a un lado la soberbia y experimentamos el trabajo con la satisfacción de estar haciendo lo que se debe hacer, lograremos la perseverancia de no caer en falsas respuestas que lo único que hacen es alimentar nuestro ego. Es una tarea permanente, es como un comenzar cada día sin pensar que ya hemos hecho bastante, donde sólo a través del sentimiento de Algo Superior a nosotros podremos separarnos de algo inferior. Recuerden: “desde dónde, para qué y para quién se está observando”.

- 110 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

CAPITULO VI Gobernantes del Mundo Interior

Introducci贸n y cierre del cap铆tulo realizado por: Roy Sierra

- 111 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

USTED NO ES LIBRE. La libertad es tal si (y solo si) comprendemos el por qué de lo que hacemos. Común es confundir voluntarismo con autarquía interna. No es libre el que hace lo que sus caprichos le dicen. Y para decidir nuestro accionar ante el mandato interno debemos hacernos responsables de aquellos procesos que lo producen. Cada acto de la vida cotidiana está repleto de ejemplos de nuestro total descontrol. Una dieta diaria compuesta por una media docena de "no fue mi intención”, "no quise hacerlo”, "no sé en que estaba pensando”, una decena de pensamientos análogos entre sí (en el mismo momento; sobre el mismo tema) y unas cuantas ocasiones en las que uno "se encuentra a sí mismo haciéndolo” es un buen ejemplo de este punto. Tal como el piloto automático de un avión, algo dentro nuestro toma el control. Y eso sucede más seguido de lo que se puede imaginar. Un análisis honesto de nuestra mecanicidad, nos empuja ante la evidente presencia de un titiritero que desde detrás del telón de nuestro inconsciente, maneja nuestros actos. Esta conferencia es un intento más que certero de dar luz sobre ese fenómeno. Sin dudas, su efecto sobre el día a día de nuestras vidas es inmenso; y es por eso que la comparto aquí. El afrontar la hipótesis de estar fraccionados por dentro, siendo toda una selva de yoes y actitudes fue el desafío de capítulos anteriores. Ahora es el momento que enfrente aquello foráneo a usted que también habita en su interior. Es mi más profundo anhelo que estas líneas desenmascaren a estos titiriteros que basan su poder en la no-verdad de la oscuridad de la mente humana y den el puntapié inicial a una revolución interna en busca de esa libertad hurtada.

- 112 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

Ya sabemos que cada persona es un individuo único e irrepetible... Lo excelente sería demostrarlo, vivir desde esa aceptación, pero no es así. Nadie quiere su lugar, y se pasa la vida luchando por estar en el lugar de otro, aunque ese “otro” sea un personaje de novela. Como ven, la filosofía aportó mucho, pero la experiencia poco y nada. Tal vez ahora entiendan por qué hay que diferenciar constante y claramente, la “información” que se tiene y lo que realmente se ha vivido y experimentado. Si el crecimiento del hombre dependiera de haber leído la Biblioteca Nacional, la cuestión estaría resuelta. No es así, el intelecto no es suficiente. Es necesario encarnar el conocimiento, para que deje de ser una mera Información, y de esa manera poder añadir un codo a nuestra estatura real.... Fíjense que podríamos hacer de estas charlas, un prolífero intercambio de halagos, fomentando actitudes heroicas, sublimes, amorosas... Roy: ¿Reuniones de auto hipnosis? ¡Tal cual! Saldrían de aquí convencidos de que son algo especial, únicos, maravillosos... y hasta es factible que actuaran en consecuencia, siendo señalados por el mundo como ejemplos vivientes de los principios más sabios... Pero eso: ¿Qué cambiaría en ustedes?... Vanessa: ¡Nada! Error. El cambio está siempre presente. Recuerden que “Lo único permanente en este mundo, es el cambio”. Lo que no evoluciona, se degrada, pero nada permanece igual. Por lo tanto, ese cambio de actitudes externas, incorporadas como dijo Roy a través de la auto hipnosis, lograrían hacer más abismal la naturaleza dual, es decir, la contradicción entre sentir, pensar y realizar, sería irreconciliable. Vanita: ¿Por eso hay que empezar el trabajo por el “Quien No Soy”? Así es, correcto Vanita. Para poder imperdible pregunta de “Quién soy”, “Quién no soy”. También sabemos que tarea, es quedar identificados con ese No

responder esa mágica e antes debemos conocer el riesgo mayor de esta Soy.

Diego: A mí lo que más me cuesta es reconocer lo positivo, como parte del no soy. Vanessa: ¡Obvio! ¡Qué vivo! No tan obvio. Eso depende de otros factores. Si por ejemplo, estás auto descalificada, aceptar lo positivo es todo un desafío, tan

- 113 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

imponente, como para aquella otra persona que se cree muy positiva, y por nada desea aceptar su lado oscuro. Andrés: ¿Si uno se identifica con lo positivo o lo negativo que observa, se forma otra imagen falsa de uno mismo? Sí y algo peor: Si aquello que está subconsciente, lo llevamos al plano de la vigilia y lo aceptamos como verdadero... quedaremos sellados a toda posibilidad de cambio. Esto tiene que ver con el resultado de ciertas terapias. Hay psicólogos que cuando el paciente pone en evidencia su rasgo negativo, la terapia trabaja para que ese rasgo sea asumido como parte del sí mismo, cuando en verdad, es algo que con el debido conocimiento, puede ser revertido. Diego: Parece algo simple, sin embargo todavía no logro desapegarme del todo de mis observaciones. ¿Me estará faltando hacer algo? Un excelente antídoto contra la identificación, es el humor. Un buen sentido del humor, pero no crítico ni grosero, sino un fino “humor inglés”. Vanessa: No sé como es el humor inglés Roy: ¡Lo conozco!... Te reís, pero por lo desabrido que es, y no por lo que se dice... La calificación de “desabrido” que le das, es porque en él no participa la zona instintiva, sino sólo el intelecto. Por eso es un humor fino, elegante... y exento de picardía. De ahí viene su sabor. Diego: No entiendo por qué es antídoto contra la identificación. Cuando uno se ve a si mismo, haciendo, pensando o sintiendo algo que no corresponde, que está fuera de eje, y observa desde el lugar correcto, es decir desde el observador imparcial, es inevitable el humor. Entre ese observador y nosotros, no cabe otra cosa que una sonrisa. Ahora bien, cuando el que observa no es el debido, sino un yo en busca de su propia aprobación... no hay humor, y si lo hay, es ácido como el arsénico. En el primer caso, se cortó la identificación, en el segundo, se aumentó. Diego: De arranque no sé si puedo aplicar humor en medio de una observación, pero... ¿Por qué tiene que ser inglés? ¡Oh!... Si no sabés inglés, también podés decirlo en castellano!... (Risas y comentarios)

- 114 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

Explico: Si estamos cometiendo una torpeza, y en ese momento interviene el humor instintivo, el de uso habitual, surgirá una comparación descalificadora, grosera, que en vez de producir alivio, causará rechazo por nosotros mismos. El sabor posterior a ese trabajo interno será entonces agrio y además fijará el rasgo. Se habrán dado cuenta que los llamados “chistes” siempre degradan algo, menoscaban, o hieren. En cambio, lo que defino como “humor inglés” queda en el ámbito de lo sutil, irónico, y sagaz. Trabaja el intelecto, sin colaboración de lo instintivo, por eso también no deja huellas. Como llega, se va, ¿Está clara la diferencia? Roy: Comprendido... Pero, ¿de qué manera podemos evitar uno y emplear otro?... ¿Cómo se le puede ordenar al humor ser inglés o italiano? Simplemente atendiendo al observador interno. Escucharlo. El tiene flema inglesa, jamás te hará una comparación fuera de tono. Roy: ¡Es un tipo distinguido! ¡Totalmente! ¡Fijate que llevamos más de 30 años de convivencia y jamás me sugirió nada grosero!... Vanessa: ¿Aunque lo que estuviera fotografiando fuera grosero? ¡Por supuesto!... El Observador no tiene emoción, ni lógica, ni instinto en sí mismo, aunque trabaje en los tres niveles de la persona y simultáneamente. Es frío como el filo de una navaja y lo único que sabe hacer es, justamente, fotografiar. Si después de sacar la foto de tu torpeza, le permitís tomar una segunda instantánea... ¡Te lo aseguro!... ¡No podés menos que reírte de vos misma! Diego: ¿Y esa segunda foto no la capitaliza el instinto para decirte, por ejemplo, “sos un idiota”...? No. El movimiento es muy rápido. Lo más gracioso es que, cuando querés contar de qué te reías... es difícil explicarlo con palabras, y pierde toda la gracia al narrarlo. Vanessa: ¡Que raro! Es una experiencia extraña, pero muy divertida... En especial por lo que te ven reír y no saben por qué... Vanessa: ¿Pero... te reís en serio?... Digo, ¿con carcajadas?

- 115 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

Por lo menos muy tentada. ¡Inconteniblemente tentada...! Andrés: ¿Cómo hacés para que el observador saque una foto, como decís vos, después de la observación? Para lograr esa segunda instantánea, se requiere un pequeño esfuerzo intencional, pero decididamente rápido. Se trata de hacer stop cuando termina la observación principal, es decir, un “punto y aparte”... es allí cuando saca la segunda foto, y pone en evidencia cómo hemos vivido la primera observación. Diego: ¿Y en eso está lo gracioso? ¡No lo dudes!... ¡Es muy cómico!... Hay que ver el álbum para entender lo que te digo... Hay experiencias que no se pueden transferir y esta es una de ellas!... Lo interesante es que están recibiendo hoy, otro elemento, otra herramienta, para detectar si el trabajo interno que están haciendo es correcto o equivocado: Si no hay humor inglés, no hay observador correcto, más aún, es señal que está observando alguien equivocado. Diego: Pero... Cuando uno se da cuenta que cometió una barbaridad... ¿De qué te reís? Depende de lo que llames “barbaridad”. Si por “barbaridad” entendés romper el espejo de una soñada perfección... con un papelón, un fracaso, una actitud estúpida o similares... el hecho de poder ver esos resbalones como quien lee una tira cómica, es doblemente saludable. Ahora si la “barbaridad” es un atentado al ser, una atrocidad del alma... no hay inglés ni alemán que te haga reír. Allí inevitablemente el observador imparcial te da una evidencia que no se puede vivir desde otro lugar que no sea el dolor, la vergüenza, el tormento, el rechinar de dientes. Allí se hace presente un estado de conciencia, muy severo y que les deseo a todos como escalón necesario a un grado superior del estado del ser. Pero cuidado con esto: No confundir con “sentirse culpable” desde la personalidad, estado que no va más allá de una justificación disfrazada de conciencia. Vanita: ¿Cómo se determina la diferencia? No hay manera de confundirse. El arrepentimiento del alma, hace que todo el hombre caiga de rodillas y que su interior arda como una tea... ¡Nada que ver con las culpas derivadas de los complejos! ¡Nada que ver con los monólogos de falsos arrepentimientos!... Estos son estados muy serios, que se dan de manera muy aislada en la vida y que a su paso dejan verdaderas transformaciones

- 116 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

internas. Genuinas muertes a uno mismo, reales metanoias... Lo demás, como dice mi Amigo, son “paparruchadas”.

Vanessa: Cada vez que creo que tengo el camino, la recta, me doy cuenta que falta algo. ¡Esto que estamos hablando de determinar la observación por el sentido del humor es nuevo! Es necesario ir completando paso a paso la forma de trabajo interno. Son tantas las distorsiones a las que estamos habituados, que solo una estricta medición de dosis homeopáticas de conocimiento, puede llegar a controlar la variable de un desvío negativo. No les serviría absolutamente de nada que profiriera una fórmula completa... si es que esta existe. Andrés: Sucede que reformular toda una vida, es un hecho complicado... ¡Aún no lo intentaron y ya lo catalogan de complicado! El que habló así es tu ente. Andrés: Mi... ¿Qué? Un Gobernador interno. El mandatario suplente. El conjunto de actitudes que reemplaza tu verdadero Yo. Andrés: Y ese... ¿Quién es? De eso quería hablarles hoy y simplemente me diste pie para hacerlo... No es nada personal... Andrés: ¡Ah!... ¡Pensé que tenía algo especial! Nada especial, por el contrario, común a la raza humana, pero que es necesario reconocer a fin de completar un poco más la tarea del auto conocimiento. Veamos si logro explicarlo con claridad: cuando un grupo de falsos yoes se unen en una pequeña convicción, se forma una actitud. ¿De acuerdo? Andrés: Si, por ejemplo, la actitud dominante. Te sigo. Correcto. Ahora bien, un grupo de actitudes mancomunadas, forma un ente, es decir, “Un ser que solo tiene razonamiento, pero no verdad” según la más concreta definición académica. Roy: Preparen más café... ¡Como viene la mano, tenemos hasta pasado mañana! Diego: Dijiste “ser”... ¿Tiene vida propia, independiente?

- 117 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

Sí. Actúa sin que medie nuestra intencionalidad, menos nuestra voluntad. Toma el lugar principal de la personalidad, y desde allí imprime su condición. Vanita: ¿En qué sentido tiene razonamiento? En el sentido de que puede formular pensamientos racionales, coherentes, justificaciones, aspectos lógicos, pero ninguno de esos movimientos intelectuales, están basados en la Verdad. Además, ni el mismo ente tiene verdad. Vanessa: ¡Despacito, por favor!... ¡Me perdí! Roy: De nuevo, por favor. Andrés: A ver, dejame a mi... Un ente es un ser ficticio, es decir tiene vida, autonomía, pero no realidad... De acuerdo. ¿Qué más? Andrés: Es capaz de razonar, es decir, de fundamentarse a si mismo... pero no obstante esos fundamentos... no existe, no es un ser real... Muy bien. Tal cual. Vanita: Andrés me dictás, así tomo nota... No, Vanita, no es esa la forma. Tratá de entenderlo por vos misma. ¿Sabés lo que es un “yo”? Vanita: Sí, lo se. Es un personaje interno, un rol. Bien. Un grupo de ellos, similares, o empáticos entre sí, forman una actitud. ¿Sabés qué es una actitud? Vanita: Es cuando me pongo caprichosa, por ejemplo, y quiero ir a tocar el timbre de quien no debo... (Risas y comentarios) Eso es. Ahora bien, no una actitud, sino un grupo de actitudes positivas y negativas, se reúnen a efectos de una finalidad, por ejemplo: “evitar el sufrimiento a costa de lo que sea”. Al cabo de un tiempo, esas actitudes se hacen subconscientes, se independizan, y comienzan a actuar sin tu control, es decir sin que tengas conciencia de ello y te inducen a actuar, decir, pensar, sentir, en consecuencia. Eso es un ente. ¿Hasta ahí está claro?

- 118 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

Vanita: Sí, completamente... Bien. Ese ente, tiene razonamiento, lógica, es capaz de interpretaciones intelectuales, más aún, puede escribir todo un libro acerca de sus motivos para existir, pero no tiene verdad. Les pregunto: ¿Por qué carece de verdad? Vanessa: Porque nació de una reacción a la vida, de una interpretación falsa, o cómoda... En el ejemplo, “evitar el sufrimiento a toda costa” ¡es una decisión muy seria! Roy: ¿Por qué? Vanessa: ¡Y... fijate que desde ahí te convertís en una persona super egoísta, fría, calculadora, y capaz de cualquier cosa! ¿Ese es el ente, no? Roy: ¿Actúa como un desencadenante de un montón de cosas? Sin duda. Diego: ... ¡Creo que lo tengo! ¡Claro!... porque cuando se encarna en uno, “uno” cree que es uno mismo, pero no lo es! Te felicito, Diego. Un poco enredada la frase pero muy correcto el significado. Vanita: ¿Es como si un fantasma actuara dentro de nosotros? Bien... Tal vez podría ser una forma de decirlo... Pero veamos otra manera. Si me quemo la mano cuando la pongo sobre la llama de una vela, tendré una actitud cautelosa en el futuro. Hay un hecho concreto, y a partir de ello, la cautela es la consecuencia de una experiencia... Ahora bien, esto es diferente a que, sin mediar una experiencia concreta, cada vez que veo flamear una vela, cante el Himno Nacional, por ejemplo. Roy: ¡Ahí lo que falla es una tuerca...! (Risas y comentarios) ¡No!... Estoy hablando analógicamente. Un ente no es una reacción patológica, sino una reacción subconsciente que carece de base real. Por eso, en ese aspecto, no es verdadero. Andrés: ¿Es una actitud paradojal?

- 119 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

No. Tampoco. Una actitud, es eso. Un ente es más que una actitud. Está en todo ser humano normal y corriente, y se triplican en los enfermos mentales. Roy: Alguien que tiene un pire... ¿es un saco lleno de entes? Si. Tal cual. A ver si por ese lado resulta más claro el tema. Una persona con una patología severa, cree en sus alucinaciones, habla con ellas, las escucha, interactúa y si le preguntás, resultará que puede darte todo un “razonamiento” entre comillas, de lo que está sucediendo. Esa alucinación tiene vida por si misma, actúa de manera independiente a la persona, sin que ella ponga voluntad o intención. Roy: Sí, eso está claro. Bien, un ente, es una forma de alucinación, pero no es patológica... al menos no se la considera así. Maneja la sensación del “yo” y reemplaza al verdadero amo. Andrés: No lo veo... ¿Hablás con vos mismo? Andrés: Sí. Hay días que demasiado... ¿Con quién hablás? Andrés: ¡Conmigo!... Como se dice vulgarmente, con mi otro yo... Bien. ¿Crees en él? ¿Interactuás con él? Andrés: Sí, eso creo... ¿Podés impedir que hable, te responda, o aconseje? Andrés: No... Es bastante difícil, depende del día... Eso, o esa persona con quien dialogás internamente... ¿Tiene vida o es materia, como una piedra? Andrés: Si tengo que decidir por una u otra opción, digo que tiene vida. ¿Tiene razonamiento? Andrés: No se si lo llamaría así, pero... ofrece sus razones...

- 120 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

Bueno. Esa forma de alucinación “normal” es un tipo de “ente”. Más aún, si lo escuchás, lo verás cambiar de texto, según quién domine en ese momento tu personalidad. ¿Entendieron todos? Roy: Entonces, el que habla conmigo adentro de mi cabeza, es un ente? Varios, no uno. Algunos gritan y se los escucha con claridad. Otros apenas sugieren. Andrés: ¿Cómo es eso? Supongamos que hoy Diego discutió con su novia. Tras un portazo salió a caminar. El “ente ganador”, el que siempre quiere tener razón, está furioso y le dice a Diego: “Que se vaya al diablo... ¿Quién se cree ella?... A mi no me va a manejar con esas escenas... Lo que voy a hacer es no llamarla por una semana, así aprende...” Todo esto, teñido de sentimientos de frustración, bronca, impotencia... Vanita: ¿Pero eso no son simples pensamientos? No. Ahí está la diferencia, no es Diego el que piensa, sino “El Ganador” de Diego, el que habla. Vanita: Y si no tuviera el ente ganador... ¿Cómo se sentiría? Mal. Desagradado, triste, disgustado, cualquier emoción relacionada con el hecho puntual, Diego se sentiría naturalmente mal, pero sin la intervención del “ente ganador” sería apto para reconocer en qué se equivocó él, como puede corregirse, y estaría libre de toda la resaca que viene con el ente: resentimientos, venganzas, astucias planificadas y etc. Vanita: Como que uno se transforma en otra persona, ¿no? El ente resta espontaneidad, naturalidad, pero no solo transmite lo artificial, sino que, la persona queda privada de recibir. Vanessa: ¿Actúa como bloqueante? Cuando iniciamos esta charla, Andrés mencionó como ejemplo la actitud dominante. En determinado momento, bajo determinadas circunstancias, es necesaria una actitud de ese tenor. Por ejemplo: Alguien va a cruzar la calle desprevenidamente y gritamos un terminante “¡Cuidado!”. Ese es un aspecto. Otro muy diferente, es relacionarse con una persona sujeta a un ente dominante. En el primer caso, quien iba a cruzar la calle, agradece nuestro

- 121 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

imperativo, en tanto que en el segundo caso, todo cuanto deseamos, es poner distancia con esa persona. Diego: Alguien que se mete en todas tus cosas, que manipula tu vida, que si no cumplís con lo que quiere, te arruina... Digamos, la “manda más” Así es. Detrás de la “manda más” o “el manda más” seguramente hay un ser muy diferente, tal vez inseguro, dúctil, por ejemplo, pero se dejó ganar por alguna situación especial que le tocó vivir, y a partir de allí hizo carne una consigna como: “Estaré seguro en tanto y en cuanto domine todo lo que ocurre”. Roy: ¡Típica suegra! (Risas y comentarios) Vanessa: ... Y el ente... ¿Cuándo se va?... ¿Cuándo deja de actuar? Si no hay auto conocimiento, el ente vive en tanto la persona viva. También puede ocurrir que se vaya a dormir cuando quiere, cuando le conviene estratégicamente, cuando considera haber ganado la partida, o cuando desde lo externo, le dan un palo por la cabeza. Diego: Y cuando hay trabajo interno... ¿Cuándo se va? Cuando lo has fotografiado desde todos los ángulos posibles, cuando lo conocés mejor que a la palma de tu mano, y cuando sos capáz de renunciar a él. Andrés: ¿Qué significa renunciar a él? Que el cajón de tu individualidad oprima la opción correcta. No es una decisión intelectual. Andrés: Me confundís... ¿Cómo alguien no va a querer renunciar a eso? Si fueran tan molestos, la humanidad no estaría plagada. Más aún, el mundo clasifica como “fuertes” a las personas dominadas por algunos de ellos... Sucede que generalmente son compensadores de falencias, alimentadores de falsas aptitudes, andamios de ensueños... ¡Por eso no es fácil renunciar! Vanessa: Nos quedaría un poco más claro, si nos das un ejemplo concreto. La mujer de mala entraña, suele formar un ente de niña cándida. El varón cobarde, se esconde detrás de un ente con poder

- 122 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

económico o social, la persona infiel se justifica en un ente seductor e irresistible... Renunciar a esos grandes entes, implica quitar la silla al momento de sentarse. Hay quienes ante esa posibilidad, se abisman, pensando que caerán en la no vida... ¡Tal es el dominio que tienen! Por eso no es sencillo ni simple renunciar a su dominio. Diego: ¿Hay un solo ente? Hay un millón, ya lo dije. El de personalidad es el más grande y hay otros más escondidos en cada salón del templo interior. Todos se deben retirar para que surja el Rey. La tarea se complica porque, además de los individuales, están los que actúan en la masa, en la sociedad, en la educación, en grupos específicos, influyendo directa e indirectamente. Andrés: ¿Como actúa un ente de grupo? Se ve en los colegios, instituciones... Por ejemplo, son esos casos donde una persona es calificada negativamente y de repente aparece como “punto” de descalificación y burla. Todos se unen bajo una misma consigna, sin que haya el ser capaz de tomar distancia de ese fenómeno y modificar su apreciación. Vanita: ¿Por qué?... ¿Son contagiosos? Si. Muy contagiosos. Hay que tener un grado amplio de claridad, para poder resistir su influencia. Vanessa: ¿Y como se contagian? ¿Recuerdan aquello de la manzana podrida que hecha a perder todo el frutero? Esto es igual. Diría (aunque no es la palabra exacta) que ciertos contenidos sin verdad que los sustente, se transfieren a otras personas telepáticamente. Roy: Con la idea de redondear un poco más el tema, dame un ejemplo de “ente positivo”. Consideremos una mujer de alrededor de 30 años, aplicada en su estudio y trabajo, organizada familiarmente y dentro de lo estándar definible como "normal". Ella siente de manera imperceptible, casi lejana, que aún es una niña pequeña, y está convencida de ello. A través de ese sentir o, a causa de ese comando, no toma responsabilidades serias, se excusa en su “inocencia”, no puede hacerse cargo de las acciones que hace, porque no las ve. Juega con la vida y con la gente como si tuviera cinco años, pretende ser aceptada a partir de esa creencia, y desde

- 123 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

allí se autoriza a cometer cualquier acción. Aparentemente encantadora, es una persona nada confiable. Como pueden apreciar, lo positivo o negativo, es solo la apariencia, el efecto es siempre nocivo. Diego: Mientras siga sintiendo que es una niña, no puede vivir como una mujer, y allí estaría el bloqueo de que hablaste. Bien Diego. Es así. Roy: En ese caso, es una persona que quedó fijada en una etapa de su vida. ¿Siempre es así? ¿Siempre el ente está relacionado a una fijación? Sí, en algunos casos es así, pero con una salvedad: aceptemos como “etapa” cualquier segundo de la vida de un individuo, no solo la referida a su niñez. Hoy mismo, una circunstancia cualquiera, puede llevarnos a incorporar un ente. O sea, cualquier momento es bueno para sembrar entes, si el interior no está calmo. Vanita: Tal vez la pregunta merezca una respuesta obvia, pero... ¿Cómo se sabe si estamos viviendo a través de un ente o de nuestro ser genuino? ¿Solo con la observación? Si. El método siempre es el mismo, solo que en este caso debés estar atenta a otro elemento: De qué lugar de tu interior salen las palabras, ideas, acciones y pensamientos. Cuando actúa el ente, uno de los síntomas es el desgaste de energía, por un sobre esfuerzo de la máquina psíquica. Es como un rodillo que funciona en falso: desgasta energía y no produce nada coherente en lo interior. Vanita: ¿Cómo que no produce nada coherente? En el ejemplo que estábamos viendo: El ente dominante digita todo, pero cuando lo logra, el resultado interno, no es de satisfacción, no es el sentimiento de triunfo. Al contrario: Porque carece de verdad, la persona dominante se queda con un mal sabor donde se juntan muchas contradicciones: soledad, exceso de peso de responsabilidad, miedo a que el otro fracase cuando aceptó su consigna, dudas sobre su propia determinación, dureza emocional, tensión física, descalificación hacia el otro, ansiedad, dualidad, etc. Roy: ¡Del punto de vista práctico, le conviene deponer esa actitud! Sólo por un instante, calculá qué puede pasar con alguien que “maneja todo”, que se impone por su inflexibilidad, su autoritarismo... y que de pronto, renuncia a eso...

- 124 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

Roy: ¡Se la comen cruda! Respuesta poco académica, pero concreta. ¿Entendés por qué es difícil renunciar al ente? Roy: ¡Cierto! Vanita: Y... ¿Qué pasa con la gente que no actúa desde el ente? ¿Cómo se siente? Cuando el “desde donde” no es especulativo, sino espontáneo, llano y simple. Cuando el “para qué” construye, edifica en el otro y el “para quién” es un canto de alabanza... la persona se pone en contacto con su naturaleza genuina. Allí sólo hay una cosa: deleite del alma. Roy: La moda... ¿Es un ente de masa? Buena pregunta. Investiguen y respóndanla ustedes.

- 125 -


GOBERNANTES DEL MUNDO INTERIOR

CIERRE DEL CAPÍTULO Considero interesante volver sobre la inquietud que dejó Mónica con respecto a la transmisión y contagio de estos peculiares personajes. Esta hipótesis viene siendo analizada desde la antigüedad, tanto por la filosofía como por las llamadas "escuelas de misterio". Por lo tanto no sorprende ver hoy, en la era tecnocrática, este mismo cuestionamiento en el pensamiento científico. La etología en particular, parece bien encaminada al señalar las similitudes entre la evolución cultural y la evolución biológica. Uno investigador llamado Dawkins, dio un paso más en esta hipótesis creando la idea de la evolución cultural como consecuencia de lo que llama “memes”, o unidades mínimas de información y replicación cultural. Este neologismo fue creado por su semejanza fonética al termino “genes” y, por otra parte, para señalar la similitud de su raíz con memoria y mímesis. Para la teoría memetica, los memes poseen características propias de todo proceso evolutivo, se dan en un amplio campo de variación, se replican a sí mismos por mecanismos de imitación y transmisión de cerebro a cerebro y engendran un amplio abanico de copias que subsisten en diversos medios. Los memes (como otros replicadores: el ARN, ciertos polímeros, virus informáticos, etc.) tienden a reproducirse precisan un vehículo y soporte. El vehículo es el cerebro. Su soporte puede ser variado y necesariamente biológico, por ejemplo: los libros, los medios comunicación masivos, y por supuesto, el folklore.

los un no de

Con está teoría, plantea el marco general de un proceso evolutivo símil a la evolución biológica, e incluso llega a aceptar que los memes deben ser considerados como estructuras vivientes no sólo metafóricamente, sino técnicamente. Si bien la teoría memetica aún esta en sus orígenes, puede darnos pautas claras para formar un metamodelo (manteniendo aún un pie en el campo de la hipótesis) que nos permita desarrollar nuevas y mejores formas de entender el contagio de ideas al cual todos estamos sometidos. El conocimiento masivo de la existencia de los gobernantes del mundo interior está pronto a ser un hecho.

- 126 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

CAPÍTULO VII Significado y Empleo del Amor

Introducción y cierre del capítulo realizado por: Vanessa Moccagatta - 127 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

Mucho se ha hablado sobre el amor. Desde tiempos inmemoriales en la literatura, en la historia de famosos, en el cine, en la T.V., en las historias de nuestros padres, abuelos, tíos, etc., etc. Pero realmente ¿conocemos lo que significa la palabra amor? En mi caso pude comprender su significado aquella tarde que nos reunimos con Mónica para charlar sobre el tema. Generalmente relacionamos al amor con las cuestiones afectivas, románticas, de pareja, o de la relación padres–hijos. Aquí comienza el primer error al limitar al amor a una mera cuestión de necesidades de afecto, cariño, compañía, diversión, compañerismo, compinchería, sexo, etc. Y al partir de un error lo que sigue será agregar más de lo mismo. Cuando hablamos de amor lo hacemos desde una búsqueda por “llenar nuestras carencias” con la presencia de otro, o desde el: “qué me puede dar el otro”, llámese pareja, cónyuge, amigo, hijos. Ponemos como condición, que reúna los requisitos que permitan satisfacer nuestras necesidades. Por lo tanto, y para saber a quien vamos a “candidatear” a tan honorable “puesto”, iremos preparando nuestra larga lista de requisitos a cumplir por el/los otro/s. Esa preparación comienza desde muy temprana edad: desde el “juntate con chicos que estén en tu mismo nivel económico o que estudien, para que te ayuden si necesitás algo” hasta la famosa “búsqueda del príncipe azul” tan bien vendido en la literatura romántica, el cine y la T.V. Es así como nos vamos formando una imagen de todo lo que queremos encontrar en el otro ... para que nos sea dado. Y en esa gran imaginación nos olvidamos por completo o, mejor dicho, ni se nos cruza mínimamente, qué es lo que la otra persona puede llegar a necesitar, qué busca el otro, qué tenemos nosotros para ofrecer o qué somos capaces de brindar . Ya es “suficiente” con el estar ocupados añadiendo - a medida que transcurren los años - más y más exigencias de satisfacción para nosotros mismos. Es como si fuéramos por la Vida armando un catálogo de requisitos a reunir por los demás para que sean merecedores de nuestro supuesto amor/cariño/compañía/amistad etc. Prueba de ello son las expresiones que tenemos tales como: “me gustó”, “le gusté”, “me atrae”, “qué físico que tiene”, “qué lindo/a es”, “la paso bien con él/ella”, “nos divertimos juntos”, “es una gran compañía”, “mis hijos me adoran”, “mis hijos son muy estudiosos /educados /religiosos”, etc. Partimos de un Desde Dónde equivocado porque priorizamos la satisfacción propia. Es como si pudiéramos armar la persona perfecta a nuestra elección. Tenemos los ingredientes y a partir de allí nos ponemos a fabricar un ideal de persona, con historias fantásticas a la medida de nuestra imaginación. En esto tendrá influencia nuestras historias personales, es decir, nuestros conceptos, traumas, complejos, educación, moral, familia, etc. Pero lo más complicado es que no nos damos cuenta de “para quién y para qué estamos derrochando energías preciosas”. Encarcelados en una jaula de imaginaciones - donde nadie se “comunica” con nadie - nos

- 128 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

pasamos muy ocupados en satisfacer... nos”. Vivimos proyectando en los otros lo que queremos ver, basados en ese catálogo de imaginaciones que “muy orgullosamente” llevamos con nosotros a todos lados. Es así que, por ejemplo, conocemos a alguien e inmediatamente desplegamos el catálogo para evaluar cuánto del mismo reúne el otro. Si este otro no cumple con gran parte de las condiciones lo hacemos a un lado, lo desechamos. Si hay algunas coincidencias entonces, en función de nuestras necesidades, comenzamos a buscar más similitudes con nuestro catálogo, llegando incluso al punto de querer hacer coincidir lo que no coincide. Y así se forman relaciones, amistades, matrimonios, noviazgos, parejas, etc. basados en nexos como el “la paso bien con el otro”, “me da la fama que quería”, “nos divertimos mucho juntos”, “tengo con quien salir”, “tiene auto, casa”, “me llevo bien con su familia”, “tenemos buen sexo”, “trabaja mucho para darme los gustos”, “no me siento solo/a”, “cocina bien”, “es muy buen mozo”, “causa la envidia de mis amigos/as”, etc., etc. Y, recubriendo esto, está la creencia de ser amigo del otro o de amar al otro. Todos estos nexos tienen algo en común: La gran mentira en donde nacen, crecen y se reproducen. Y así, como toda gran mentira, no se sostiene por mucho tiempo, por que se va haciendo cada vez más difícil el sobrellevarla. Su propio peso hace que ésta caiga. Pero como no somos sinceros en reconocer que el punto de partida está equivocado, vamos a encontrar todas las justificaciones necesarias para que salgamos invictos en nuestro proceder. Así nos sentimos engañados, estafados... por el otro. Nos consideramos víctimas de la trampa del otro. Y después de todo esto viene la pregunta ¡¡¿ Y dónde quedó el amor que le dí?!! Pero ¿creen Uds. que hubo realmente amor en esa historia?... Los invito a compartir este capítulo para encontrar la respuesta.

- 129 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

No se trata de sumar definiciones a las miles que existen, para luego hacer una tarjeta bonita y obsequiarla. Hablar de amor, es algo muy serio, muy profundo, y nada tiene que ver con el dibujito de una flor, un corazón partido o dos pajaritos sobre una rama... Estas cosas son terreno del romanticismo. Vanita: ¿El romanticismo, no es una cara del amor? No. El romanticismo, es un brote de imaginación proveniente del apego, ni siquiera es un sentimiento. La gente cree que ama, cuando escucha una canción melosa y se sumerge en fantasías donde todo es complaciente. Vanessa: ... ¡Pero mientras dura, es lindo! No puedo estar de acuerdo conque haya belleza alguna en esos estados fantasiosos... Vanita: ¡Sí que es lindo!... Una se siente como si volara, todo alrededor está bien... Todo parece muy dulce... Estoy tentada de decir que se prenden florcitas y corazoncitos alrededor, pero si lo digo... ¡me matás! (Risas y comentarios) Ese esplendor es empalago de ego, no Amor. Si prestan atención a ese tipo de ensueño, verán que allí el protagonista es uno, no el otro. Andrés: No entiendo a qué te referís. Cuando se entra en esos estados de fantasía llamados “románticos”, la trama de la película que se proyecta, se basa y desarrolla en una serie de imágenes, sucesos y palabras destinadas exclusivamente a complacer al soñador. “El otro” no importa. Todo es como “le gusta” al soñador, todo ocurre a la medida exacta del goce personal... Y el rol que se le deja al presunto amado o amada, es servir a la consigna de complacer y nada más. ¿Cómo llamar a eso Amor? Andrés: Y entonces cabe preguntar... ¿Qué es el Amor? Es un nexo que a veces Dios presta, para que dos, puedan ser uno. Andrés: O sea, el Amor es lo que une a las personas y no las personas...

- 130 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

Exacto. Por eso no tiene nada que ver con esos estados, donde uno se proyecta a sí mismo. Tampoco tiene relación alguna con el dominio o posesión, porque el Amor, nada pretende para sí mismo. Su objetivo es la realización, el bien y la elevación del ser amado, para el ser amado, por el ser amado... y no para sí mismo... Roy: ¡Ah! Y eso... ¿Existe? Diego: ¡Esperá! Vamos a ponernos de acuerdo. ¿Cómo se llama ese estado de empalago, de fantasías dulces, de pasión... caricias y demás? Se llama atracción química. Las equivalencias químicas de uno, son acordes a la de otro. Eso ocurre más o menos seguido y no es nada que no se pueda sortear con una simple sonrisa. Roy: ¿Para qué uno querría sortearlo?, es la primera pregunta. La segunda: ¿De qué te reirías? Hay que tener en cuenta muchas cosas para responder eso. Depende de donde vayas, cual sea tu objetivo de vida, no vale la pena responder a los estímulos químicos. Se sabe que duran entre seis meses a tres años máximo, período suficiente como para auto engañarse y llamarlo amor... hay que medir las consecuencias de ese riesgo. Al comienzo se tiene claridad, después intervienen otros factores como costumbre, anécdotas compartidas, conocidos, familiares, rutinas, compromisos... y se termina en donde no se debe, con todo tipo de problemas no deseados y unido, no a quien quiere, sino a una imaginación, o a un sueño. Andrés: ¡Lo patético es despertar! Ahí te das cuenta que no fue un sueño, sino una pesadilla. (Risas y comentarios) Eso, lamentablemente, es muy común. Ocurre que se le da un valor adicional al quimismo, que en verdad no lo tiene. Por eso decía que, cuando se conocen los síntomas de la atracción, no hay necesidad de quedarse en eso, y uno “deja ir” esa química, con una sonrisa comprensiva (no con una carcajada) Vanessa: Bueno... pero.... ¿Cómo se sabe si es química o si es amor? ¿Sabés distinguir un dolor de vientre, de una taquicardia? Vanessa: Sí, por supuesto.

- 131 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

¡Entonces sabés la diferencia!... Uno estimula la necesidad de acercamiento sexual. El otro estimula la necesidad de completarse como persona. Roy: La cuestión es que, naturalmente, uno tiende a sublimar cualquier relación... por lo que, caer en la trampa es cosa de todos los días. La trampa no está en la sublimación de los apetitos sensorios, ni tampoco está en ese empeño, que a veces se pone, en revestir lo grosero de sutil, para hacerlo moralmente más aceptable... La trampa es el “desde dónde”. La gran mayoría de las personas no saben estar acompañadas por sí mismas, sienten un gran vacío interno y desde ese lugar, salen a pescar “lo que pique”. Si su completitud era un salmón, termina aceptando una trucha de reemplazo. Vanita: Tendríamos que aprender a esperar el ideal ¿no? El ideal es algo que fabricó la imaginación, después de ver tres telenovelas. No me refiero a eso. Me refiero a que hay que ser fiel al Amor... Si usamos la analogía, hay que saber esperar al salmón, y rechazar todos los demás peces. Vanessa: Pero... ¿Cómo saber que es la persona indicada? El corazón lo sabe al instante. Lo “reconoce”. Ahora, para que funcione como debe hacerlo, el dueño del corazón ha de estar en claridad interna. Si se educa el corazón a aceptar cualquier engaño “con tal de no estar solos” el pobre se marea, no distingue, y cuando llega el Amor, lo deja pasar sin reconocerlo. Indudablemente, esto es una desgracia. Vanita: ¿Por qué dijiste que el Amor produce necesidad de completitud y no de sexo? ¿Acaso, no van juntas? ¿Acaso el Amor es patrimonio exclusivo de la pareja? Vanita: ¡Tenés razón!... pero bueno, estábamos hablando de pareja y me quedé ahí. Esa es una forma de hablar desde la jaula: referir todo al interés o la especulación personal, a lo nimio. Escuchar es ampliar horizontes, no estrecharlos. Como dije hace un rato, el Amor no es patrimonio del hombre, es un préstamo que Dios hace. Cuando ese Don, pasa por el filtro de la naturaleza humana, “una” de las traducciones posibles (no la única) lleva el rótulo de “pareja”... pero el Amor seguiría existiendo, aunque ya no hubiera hombres.

- 132 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

Roy: Pero según entre quienes se dé ese nexo, cambia de forma, o de manera de manifestarse. No cambia. Lo que cambia es la traducción humana. No el Amor. Si esto no queda claro, es inútil continuar el tema. Este es uno de esos casos, donde es necesario utilizar lavandina cerebral, limpiarse de toda la contaminación que ha rebajado, ultrajado y minimizado ese aspecto Divino. Para llegar a algo, no llamemos Amor, sino al Amor. Al resto, el nombre que le corresponde: atracción, metejón, pasión, síndrome de soledad, o lo que convenga. Vanita: En ese caso... ¿Qué importancia tiene la relación sexual en el Amor? Importancia equivalente a la comunicación emocional, psíquica, o álmica. Si tu pregunta atiende a la prioridad, ocupa el último lugar, después de haberse logrado la debida completitud, el debido “encastre” en un montón de aspectos más genuinos y esenciales, como son la empatía emocional, la concordancia mental (no intelectual), el silencio pleno, la admiración mutua, el inegoísmo, etc. Cuando en el orden de prioridades, la atracción sexual ocupa el primer lugar, es sólo química. Vanessa: Y ¿Por qué se dice que es tan importante en la pareja, el hecho de lograr una relación plena y satisfactoria? Cuando no se tiene la Gracia del Amor, se buscan reemplazos que den “satisfacción”... Eso es todo. Diego: Entonces... la concordancia sexual... ¿Tiene una importancia muy limitada en la pareja? Repito: Si no hay Amor, ese aspecto debe ser fundamental, de lo contrario no se podría establecer un nexo... Simplemente... ¡no habría nada!... Muy pocas personas prefieren “nada”, a un simulacro de amor... Diego: ¡Es cierto! Esto es muy fácil de comprender... El hombre se “completa” con lo que ama... sea la Naturaleza... los hijos... el prójimo... el mundo... la pareja... Dios mismo. ¡Sólo en el Amor es un ser completo!... Ahora bien, en esa “completitud” el primer síntoma es la resonancia, el segundo la incondicionalidad y finalmente el éxtasis de amar... Pregunto: en cualquiera de los órdenes en que se presente ese Amor... ¿Dónde cabe la disonancia? ¿Dónde puede

- 133 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

estar el desencuentro? ¿Dónde es posible la “no” concordancia sexual o de cualquier otro aspecto?... Vanita: Ahora entiendo por qué tu insistencia en que comprendamos el sentido único del Amor... Vanessa: ¡Por eso está en crisis el matrimonio! ¡El matrimonio no está en crisis! Es una organización fundamental, que refleja tanto la armonía, como el caos que contiene, no sólo ésta, sino todas las instituciones que conforman la sociedad. No hay individuos de generación espontánea. Todos somos productos de una familia reflejados en un contexto mayor. Lo que está en crisis, no es la institución, sino el sentido y significado de la familia. La base donde se forma. ¿Cómo formar un hogar, donde ambos buscan ser complacidos, en vez de complacer?... En épocas anteriores, la mujer resignaba su Ego a favor de la unión. Con la mal llamada “liberación femenina”, hoy mantiene las exigencias de su Ego, como lo hace el varón. De ahí surge la dificultad de convivencia. Roy: O sea que la solución es que la mujer vuelva a la cocina ¡Totalmente de acuerdo! Vanita: Ah, sí... ¡Cualquier día! Vanessa: ¡Qué gracioso!... ¿Y que tal si se da lo contrario, y ustedes por una vez en la historia renuncian al Ego? Acaban de dar un ejemplo cabal de lo que ocurre. Cada cual mantiene su posición. Mujeres versus varones y viceversa. Así se construye un cuadrilátero de boxeo, no un hogar. Vanessa: ¿Y cómo se construye un hogar? Bueno... Digo... ¡si es que antes existiera algún método para construir parejas! ¡Esa sí es una buena pregunta! Sì lo hay. Obviamente, si hay Amor, no hace falta ningún manual, pero si hay intención de construir un hogar, se debe trabajar de común acuerdo. Lo podemos llamar “amor intencional”. Para hacerlo realidad, ambos integrantes de la pareja deben aceptar, con sinceridad, que el inicio de la relación sólo fue afán de complacer el ego y reservarlo para uso personal. A partir de allí, se puede construir un nuevo modelo de pareja. Ya no sería un Ego resignado y otro activo, sino que la unidad se basaría en dos Egos al descubierto, que tienen el propósito de abandonar ese estado, en medio del aprendizaje del amor. Ahí puede surgir una familia. Vanessa: ¿Y cómo se haría eso?

- 134 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

En vez de pelear por quién toma la manija, por quién tiene más derechos, por quién cubre este rol y quién no, quién posee a quién, quién es el esclavo y quién el dueño, ambos de común acuerdo, deberían abnegar simultáneamente las voces de las pretensiones, a favor del otro, por el otro y para el otro. Una tarea de este tipo, continua y esforzada, de ambas partes, dará por resultado dos personas nuevas, unidas (pero no pegadas) en un tercer aspecto: la pareja humana. Vanita: Eso sería muy dulce, ¿no? Sí. Esa es la palabra: dulzura. ¿Cuánta dulzura ven en la pareja actual, y que no sea un anzuelo de la seducción? Diego: ¿Ahí se produciría lo que vos llamás, resonancia? Ese sería uno de los grandes beneficios: conocer la resonancia. Esta no puede darse porque necesita expansión, terreno donde manifestarse, y el espacio del Ego es demasiado corto y estrecho. Andrés: Nunca pude entender muy bien, qué es la resonancia con otra persona. ¿Podés explicarlo? Si tomo unas piedras y en el baño de mi casa juego a lanzarlas hasta que caigan en el agua de la bañera, no es igual que haga lo mismo, frente a un océano. En el primer caso, rebotarían en la pared, y correría el riesgo de que alguna piedra me pegara en la cara. En el segundo caso, el límite estaría sólo en el alcance de mis ojos y el retorno sería el murmullo espléndido del mar. Cuando uno emite sin segundas, terceras, cuartas, ni novenas intenciones, sino que emite desde lo espontáneo, genuino y natural lo que está haciendo es, en el mejor de los sentidos, jugar a lanzar emociones, vibraciones, estallidos empáticos del alma. Cuando esas emisiones se encuentran con el Ego y sus múltiples entes, esa vibración no sólo no ingresa al otro, sino que rebota (como la piedrita en el baño) y no falta ocasión en que regrese revestida de interpretaciones bastardas, que en definitiva lastiman. En síntesis, una comunicación sin resonancia, es lanzar cascotes en la bañera que, después de rebotar, regresan como rocas en la cabeza. Vanita: ¡Por eso es tan raro sentirse bien cuando hablamos con alguien! La resonancia, debería estar presente en todos los actos de nuestra vida y en todo tipo de relaciones, no sólo en la de pareja. La ausencia de esa resonancia es un alto grado de soledad, que se confunde con “carencia afectiva” y que es causa de ese vacío que, a la larga, lleva a “vender el alma por un plato de lentejas”.

- 135 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

Diego: ¿Cómo se hace para estar en “resonancia”... Digo, para abrir ese canal de comunicación con el otro? A diferencia del Amor, la resonancia sí es un atributo del Hombre. Está en todos nosotros, sin excepción. Si no funciona, es porque está sucio el canal. Andrés: ¿Sucio? ¿De qué?... o... ¿Con qué? Con hollín, con el producto de la combustión del lado oscuro: sentimientos putrefactos, sensaciones viles, blasfemias, vanidades estúpidas, mentiras, corrupciones, presunciones falsas... envidias, odios... ¡En fin! Si se limpia el canal, renunciando a todo ese material, muy descartable por cierto, por ese canal ingresa el Amor, y el hombre puede estar en resonancia, hasta con el mismo Universo. Vanita: Sí, pero... deshollinador?

¿Cómo

se limpia

el

canal?

¿Dónde

hay

un

Sólo viendo. Ver lo putrefacto, no negarlo, no huir. No caer en el “yo soy así”. Nadie “es así”... somos apenas un simulacro de lo que debemos ser, y lo mejor es que siempre estamos a tiempo de sacar la basura... Vos (se dirige a Vanita) si en este momento vieras que todo tu cuerpo está lleno de telarañas, gusanos, arañas pollito, lagartos y demás productos del pantano ¿Qué harías? Vanita: Después de gritar como loca, me meto bajo el agua. No esperarías al mes que viene, cuando regrese el equipo de Desinfección del Consorcio, ¿verdad?... Vanita: ¡Por supuesto que no! ¡Eso es lo correcto! ¡No esperar al deshollinador!... Si uno ve lo que lleva encima, al momento resuelve sanar. La gente sería mucho más buena, si no se negara a ver su lado oscuro, si no se conformara con una imagen de sí misma, si no se acostumbrara a cargar con la bolsa de las miserias, como si fuera la del mercado. Si se siente aversión por ella, como por los bichos del pantano, un solo instante de coraje es suficiente para desprenderse de ella. Diego: ¿Tan rápido y sencillo? El triunfo, la victoria está en la determinación, en la convicción de abandonar un estado e ir en procura del verdadero que

- 136 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

corresponde. Tomada esa determinación, día a día, segundo a segundo, se ven los resultados. Diego: ¿De qué manera se nota la falta de resonancia en una pareja? Se manifiesta como un monólogo de a dos. Dos personas hablando juntas al mismo tiempo... ¿Cómo pueden nutrirse, comprenderse, conocerse?. Cada cual piensa en sus derechos, realiza de mala gana algunos deberes comunes, y jamás toma la responsabilidad del otro. Casados o no, esas relaciones no pueden prosperar. Vanita: Pero... ¡Insisto!... cuando hay enamoramiento, cuando estamos allí arriba llenos de pajaritos y corazoncitos pintados con marcador de colores... ¡Se piensa en el otro! Sí. Se piensa, pero “desde” y “como” lo hace un dueño, de su esclavo: Control de tiempo y eficiencia, rendimiento, condiciones de servicio, etc. (Risas y comentarios)

Vanita: ¡El sentir y pensar como “dueño” suele ser “después” de los corazoncitos de colores! Cuando recién se conoce a alguien, los pensamientos suelen ser románticos. ¡Oh! ¡Sí! ¡Perdón!... ¡Hace tanto tiempo!... Salté la etapa a la que te referís. En esos momentos, lo que ocurre es un desgrane de miel, donde la piel anticipa todas las promesas... ¿A eso te referís? Vanita: Sí. Eso creo. Eso es excitación. Una fuerte vibración que regala la Naturaleza, para que se conserve la especie. Como todo lo natural es hermoso, pero no dura en el tiempo. Para que comprendan esto, tenemos que descubrir otra paradoja de estos tiempos: Según consignas vigentes, parece ser que todo lo resuelve el “dios-sexo”. No sólo se habla en reuniones particulares, sino que lo propician la mayoría de los medios de comunicación... ¡Hasta los informativos!. La cuestión es que, quien no mira, practica o habla de sexo, es enfermo o no existe... (Risas y comentarios) Hasta ahí observé el hecho como un condicionante de moda, con sus graves riesgos pero.... ¡moda al fin!... La paradoja nace cuando se dan a conocer índices estadísticos de personas con problemas

- 137 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

sexuales... Se habla de un 70% de mujeres frígidas, y de un porcentaje similar de hombres con diferentes disfunciones... Entonces, si no les resulta, si no hay satisfacción... ¿Qué hacen? ¿Para qué lo hacen? ¡Eso más que un placer, parece una tortura! (Risas y comentarios) Les aseguro que, cuando en la pareja media el Amor genuino, no hay disfunción alguna, porque la relación manifiesta la completitud de todos los planos, de manera natural y espontánea... ¡Y sin necesidad de Viagra! (Risas y comentarios) La Humanidad se niega a lo simple, y en eso se priva de lo mejor de la vida. Prefieren las relaciones tortuosas, llenas de pasiones violentas, peleas, cachetazos, montones de sufrimientos vanos, escenas espectaculares... ¡Todo falso! Vanita: ¡La telenovela! Sí, totalmente. Mientras tanto, el deleite de la vida ni siquiera los toca. Se privan voluntariamente del éxtasis del amor, para canjearlo por un terreno propicio a la gastritis. (Risas y comentarios) ¡Es cierto! ¿Por qué complicar las cosas? Cuando hay que convivir, lo necesario es conocer la luna y el sol del otro, lo positivo y lo negativo. Lo que nos hace bien y lo que nos hace mal... Y una vez que hemos logrado conocer y amar... dejarlo libre con el éxtasis y el deleite con que se puede ver volar a una paloma. ¿Qué significa ella dentro de una jaula? Vanita: ¿En qué sentido hay que dejarlo libre? Sin posesión, sin dominio, sin usufructo. Alguien que sabe mucho dijo que el gran secreto del amor es “sujetar con mano firme y dejar ir libremente”. Vanessa: Ese amor de que hablás, seguramente es fiel por naturaleza, ¿no? La fidelidad y la infidelidad, son las dos caras de una misma falsa moneda. Tu pregunta nos limita nuevamente. Estábamos sobrevolando el Amor y volvimos al terreno de la posesión. Si ese Amor de que hablamos, se concreta en una pareja, nada ni nadie, ni siquiera un pensamiento fugaz, puede interferir en esa relación.

- 138 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

No hace falta constituirse en perro cancerbero y controlador... Simplemente nadie puede ocupar un lugar lleno. Ahora, cuando el nexo es la posesión del otro... ni todo el cuerpo policial puede impedir la infidelidad pensada, sentida o concretada. En este último caso, tampoco hay infidelidad. Lo que hay, es deslealtad a la confianza del otro, una carencia de principios que no se relaciona con el Amor. Andrés: Creo que el problema más grave, es ser capaces de distinguir claramente cuándo se trata de amor, y cuándo se trata de otra cosa. ¡Ahí está el gran secreto! Hay pistas para responder eso, por ejemplo preguntarse cuál es el Propósito del Amor... En base a ese conocimiento, comparar: si la respuesta se relaciona a algún atributo físico... el tema está claro. Si se relaciona con el sabor, aquello de “me gusta”, también está claro... Ni hablemos de posición social o económica, porque ya estaríamos en el terreno de la conveniencia... ¿Qué nos queda?... ¡La Virtud! Roy: ¿Virtud?... Sí, virtud... Amar la virtud que hay en la otra persona. ¿Sabés de que hablo? Roy: Eso creo... pero me quedé con el cerebro vacío... Será porque es una palabra que no se usa mucho ¿no?... pero... ¡Está bueno! Vanessa: Sí... la verdad es que suena raro...

- 139 -


SIGNIFICADO Y EMPLEO DEL AMOR

CIERRE DEL CAPÍTULO “Amar la virtud del otro”... suena raro... seguramente porque jamás lo hicimos... y si alguna vez creímos hacerlo, en realidad fue buscar lo bueno del otro que a uno le conviniera. Lamentablemente vivimos en un permanente estado de trueque: cuánto me das... cuánto te doy. O tal vez ni siquiera esto, sino que nos dedicamos a exigir a los demás lo que queremos para nosotros. Y en este culto a la complacencia del ego estamos perdiendo la oportunidad de encontrar la virtud en los demás y en nosotros. Vivimos en un “mercado” de egoísmos, envidias, celos, broncas, temores, auto justificaciones, etc. donde todos compiten contra todos. No nos atrevemos a ser sinceros en lo más profundo nuestro y a dejar al descubierto a ese que demanda todo y no ofrece nada y que termina robando lo que le parece que es de él. La pregunta que se me viene es ¿Qué o cómo hago para comenzar a revertir esto? Tal vez el primer pasito sería entender que el Amor es un Aspecto de Dios y que nosotros, como seres humanos vivientes en este planeta, no tenemos capacidad de generarlo. Nuestra Alma trae el recuerdo de ese estado y es ella la única que se puede poner en contacto con ese estado. A partir de allí comienza nuestra labor de “limpieza” como tan bien lo describe Mónica en este capítulo. Dios nos ha dado la posibilidad de que su estado pueda ser vivido por nosotros siempre y cuando tengamos las puertas abiertas para recibirlo y las ventanas abiertas para dejarlo salir. Mientras continuemos buscando complacencia en nuestras relaciones con los demás en vez de completitud jamás conoceremos qué es amar. Es una elección entre el “Deber Ser” y el “parecer”. Sólo con el trabajo sobre sí mismo podremos ir preparando la morada para recibir con honores a ese... “nexo que a veces Dios presta, para que dos puedan ser uno”.

- 140 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

CAPITULO VIII Monumentos de Piedra

Introducción realizada por: Andrés Frasca y cierre del capítulo por: Diego García - 141 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

En esta charla nos encontramos con lo que podría denominar: “la llave de la puerta para el conocimiento". La búsqueda... ¿es hacia adelante?, ¿hacia atrás?, ¿hacia afuera ?, ¿hacia adentro?. ¿Desde dónde partimos para aprender? ¿Buscamos que el conocimiento se adapte a nuestros requerimientos y limitadas explicaciones para lograr complacernos, o nos dejamos llevar por el hecho de saber y comprender "negándonos a nosotros mismos"... y buscando que las verdades nos transformen y nos introduzcan a una nueva dimensión? El encuentro nos va a ir conduciendo por los diferentes obstáculos en los cuales nos vemos atrapados las personas para acceder al rescate y descubrimiento de verdades que hemos olvidando con el tiempo. El "cómo" lograrlo está presente desde el primer momento y el recorrido de la charla ayuda a ir demoliendo falsos mitos y construcciones mentales en las cuales los lectores pueden verse reflejados. Estos, constituyen parte de los mensajes que, sin darnos cuenta grabamos y van conformando el velo de niebla y ruido que imperceptiblemente nos pierden de las claves originales que portamos. El paradigma nos indica que: es desde la vida que comienza la búsqueda. Desde lo vivo en cada uno se parte para recuperar las claves de lo permanente, y cómo podemos perdernos en lo muerto, en lo que cambia y sólo deja vacío, agujeros de ruido y confusión. Este capítulo constituye un práctico y útil mapa de ingreso a la búsqueda, ya que evita falsos posicionamientos que, por lo general, son los responsables de conducirnos por caminos sin salida que terminan en estados de desaliento y abandono. En medio de la confusión reinante, el bombardeo de ofertas indiscriminadas y mutantes que conforman la gran masa de ruido dentro de la cual habitamos, los seres humanos necesitamos puntos de referencia, monolitos que permanezcan inamovibles, indestructibles frente a las vicisitudes e inclemencias. Los invito a entrar a la reunión, en la que partiendo de la vida misma, intentemos descubrir cuáles son estos monumentos de piedra que han resistido inmutables, para que la humanidad tenga la referencia necesaria para encontrar el camino de salida hacia el encuentro con lo genuino e imperecedero de cada uno.

- 142 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

... Pero antes necesito que cada uno escriba en un papel la respuesta a esta pregunta: ¿Cómo está tu vida? Vanita: ¿En qué sentido? Así, como lo digo... una síntesis sincera y en pocas palabras... Nadie va a leer ese papel. (Después que cada uno hizo lo indicado) Ahora vamos a hacer un breve ejercicio... todos conocen la forma de lograr silencio interno, así que... relajen los pequeños músculos de la cara, del cuello, principalmente los ojos... y dejen que los pensamientos, las emociones y las sensaciones “pasen”. (Al cabo de unos minutos) Los que lograron acallar voces, monólogos, pensamientos, intenten ahora prestar especial atención... traten de captar el sonido que está en ese silencio. Es decir, ir más allá del lugar que ocupaban las palabras, y escuchar... escuchar... (Al término, sólo dos de nosotros habíamos logrado captar “ese sonido” que está en el silencio. Minutos después...) Ese sonido, que es similar al murmullo del mar en sus zonas más profundas, está en todos. Sucede que hay mejores y peores oídos para captarlo. Vanessa: A mí lo que me pareció sentir es una energía, una fuerza sorda más que un murmullo. ¡Es posible! Esa energía, esa “fuerza” como la definís, es de por sí armónica y toda armonía tiene un mensaje claro y transparente, perceptible a una atención muy sutil y dirigida. Ahora bien, si ese silencio careciera de sonidos, sería sólo vacío. Un agujero. Diego: Pero... en concreto: ¿Qué es ese sonido o ese silencio lleno? ¡La vida!... Nada más ni nada menos que “la vida” como don. Diego: Pero... ¿Cómo?... Ustedes siguen confundiendo la vida, con las circunstancias. Cuando les pregunté “Cómo está tu vida”, seguramente respondieron con un calificativo acerca de un balance de sucesos al día de hoy: bien, mal, regular, mejorando, empeorando... triste, alegre, complicada... Todas esas respuestas son nada más que

- 143 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

“reacciones” a ese pozo común de ensueños y frustraciones que son las circunstancias. Vanita: ¿Tanto así? ¡Tanto es así, que cuando una vida termina, las circunstancias continúan!... ¿O no?... Vanita: Sí, claro... ¡Salvo las del muerto! (Risas y comentarios) ¿Se dan cuenta qué resistencia hay, en ver la vida como un don interior y no como un conjunto de actitudes externas? Roy: No somos nosotros. ¡Son nuestros yoes que se niegan a renunciar a su utilidad! (Risas y comentarios) A ver... Si en este momento nos quedamos mudos, quietos, sin realizar ningún movimiento, con el cerebro tranquilo, las emociones planas... ¿Acaso estamos muertos? Vanessa: Obvio que no, pero es extraño verlo así. Ignoro quien fue el primer hombre en señalar que vivir es moverse vertiginosamente, provocarse emociones múltiples, y demostrarle al mundo cuán exitosos somos... pero la idea equivocada prendió y se extendió. Diego: Yo, despacito, me estoy acercando a la idea de ver las circunstancias, como algo “no personal” y además “fuera de mi” pero confieso que es difícil aceptar la idea de renunciar a la competencia y al éxito... No hay que renunciar a nada... Sólo correrse de lugar, ver lo mismo desde otro ángulo. El verdadero éxito, viene después de triunfar. Vanita: ¿Cómo es eso? La mejor definición que encontré, es del libro El Kybalión y dice textualmente: “Triunfar es colocar La Ley, sobre las leyes Lo Superior contra lo inferior Y por arte de la alquimia transmutar Lo no deseable, en estimable.”

- 144 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Roy: O sea... La ley de Dios, por sobre las leyes del hombre. Lo superior de uno, ganando la batalla de lo inferior... el producto del auto conocimiento es la alquimia y el resultado, revertir lo no deseable, en estimable. ¡Ahí hay triunfo!... En especial teniendo en cuenta que “la verdad final” no es lo que uno acumula y demuestra aquí para luego dejar, sino los valores que se pueden llevar después de la muerte. Vanita: ¿La valija para ir al cielo? ¡Vanita! ¡Algún día, entenderás!... Por ahora hablemos de los beneficios terrenos: Una persona que triunfa sobre sí misma, de ninguna manera puede fracasar en el terreno de las acciones. Andrés: Es cierto, de ninguna manera se podría fracasar, porque si algo no se da, se abnega... o por ahí hay temas que ya no son tan importantes... ... Contrariamente, alguien puede estar lleno de cosas, y a la vez absolutamente vacío por dentro. ¿Cuál es el éxito? Esa energía que está detrás del silencio interno, es un don, una posibilidad, un mar de plenitud, una fuente mágica, sublime, que es necesario emplear correctamente. Si la empleás sólo para mover el cuerpo... estar más joven o más bello... o sin más, hacer lo que te viene en ganas, sin causa ni razón, esa “posibilidad” llamada Hombre, sobrevuela por el mundo, no siembra nada, y se va sin nada... aunque tenga muchas cosas. Roy: ¡Pregunto!... ¿Cómo se hace para usar la vida de manera correcta? Repetir la historia de Pulgarcito. Diego: Y ese ¿Quién es? Un niño tan pequeño, como el pulgar de una mano. Diego: ¡Ah!... (Risas y comentarios) ...Es un cuento, chicos, un cuentito que mi abuela tuvo a bien contarme muchas veces, cuando era chica y que creo es de Charles Perrault. Era la historia de un pequeño desprevenido, que al tener que alejarse de su casa, dejó marcado el camino de regreso con miguitas de pan. Cuando quiso volver, se dio cuenta que los

- 145 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

pajaritos se habían comido las migas, por lo tanto, no encontró el camino. Vanita: (Riendo) ¡Qué triste, pobrecito!... Ustedes pueden reír lo que quieran, pero todavía recuerdo la angustia que me daba cada vez que esa sabia abuela, ponía énfasis en demostrar que las señales ya no estaban, gracias al apetito de los pájaros. -¿Qué hará ese niño solo en la vida?- Me preguntaba con genuina pena... Lo cierto es que, después de pasar todo tipo de aventuras peligrosas con ogros, y otros personajes “de terror” de aquellos tiempos, Pulgarcito pudo regresar y aprender la gran moraleja: en más, cada vez que se alejara de su casa, dejaría como señal del camino algo que fuera perdurable: piedras. Roy: Para el caso, alguien que pasaba por ahí, pudo patearlas y hacerlas desaparecer de algún modo... ¡Justamente ese era el argumento que planteaba a mi Yaya! A lo que me respondía que unas cuantas fuera de lugar, no modificaban un camino. Por lo tanto, Pulgarcito, en más, podría regresar a su Casa, no importa que lejos se hubiera ido. Vanessa: ¿Qué representan las migas y las piedras? Estoy segura Vanessa, que cuando un bebé nace, todavía tiene “memoria” del Cielo. Por esa mollera abierta, vaya uno a saber cuántos encuentros celestes habrán dejado sus huellas... Estoy segura que extrañan su Casa, es decir un estado diferente, pleno de armonía, paz, seguridad, verdad... Sufren añoranza de eternidad. Vanessa: ¿En serio? Sí, muy en serio... Te digo más, aún puedo recordar mi propia añoranza, que todavía seguía presente entre los tres y los cinco años... ¡Eran otros tiempos, donde la inocencia se resguardaba como un tesoro!... ¡Sí!... Aún recuerdo esa sensación tan particular... Con el paso del tiempo eso se va olvidando, y paralelamente aceptando las condiciones de esta vida. Obviamente, es algo que jamás podré comprobar, pero intuyo que ahí está. Andrés: Hay muchos estudios referidos a vivencias de la vida intra uterina y lo estresante que es para el bebé, el hecho del nacimiento y la adaptación biológica.

- 146 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

¡Tal vez sea eso, no más!... Lo que me hizo dudar de esas teorías es que también se comprobó que el feto recibe todos los estados emocionales de la madre, como si fueran un mismo ser y ambos vivieran las mismas experiencias. ¡Es muy difícil que una mujer pueda transitar nueve meses de armonía! Por eso no creo que sea ese, el estado perfecto que añora... Pero, en fin, no importa... Lo cierto es que después crecemos y también nos vamos, psicológica y/o físicamente de nuestras casas hasta que, en algún momento, como es éste en la vida de ustedes, se hace “necesario” regresar. Diego: ¿Regresar?... ¿Adonde? La sensación más palpable es “Al lugar donde uno debe estar” no en el plano físico, sino interno. Cansados de trajín, hay un momento donde hacen falta cosas ciertas, perdurables, fundamentalmente que completen. Algo que a cambio, no deje un gran vacío. Andrés: ¿La búsqueda de eternizarse? Tal vez no, en el sentido que lo estás diciendo... La búsqueda a la que te referís tiene que ver con dejar algo aquí... De la que hablo, es llevar algo Allá. Andrés: ¿La búsqueda de una trascendencia espiritual? ¡Eso también es especulativo! “Voy a hacer esto y aquello para ganar el Cielo”... como si en verdad tuviéramos nosotros esa llave. Me refiero a algo más sutil, como es la búsqueda de lo permanente, lo estable, lo que no tiene doblez... La necesidad de Ser y encontrar una Razón de Ser, sin que en ello participe la aceptación o el rechazo del mundo. Es un momento de encuentro a solas del Hombre con el Hombre. El momento de volver para encontrar “su verdad”. Andrés: Creo que lo entiendo, pero no sé si esa comprensión está libre de condicionamientos aprendidos, por lo tanto, sigamos acercándonos... La forma de acceder a lo que estamos hablando, es hacer una pregunta puntual. Veamos: Si ayer hubiéramos muerto, hoy ¿Qué le faltaría al mundo? (Todos quedamos en silencio durante unos minutos) En la respuesta, no es válido incluir afectos, apegos, profesiones ni actividades, sino que se trata de establecer que “valor” dejaría de estar en el mundo, si nosotros ya no estuviéramos aquí.

- 147 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Vanita: La alegría... Diego: Nada. No encuentro nada que pueda separar de la actividad que desarrollo. Se me ocurrieron cosas que tiene que ver con el deseo de desarrollar un programa de computación, pero ¡nada que ver! Además, ni siquiera lo empecé. Vanessa: A mí también lo primero que me surgió fue “nada”. Después sentí que faltaría aquello que, desde hace cuatro años, voy construyendo en estas charlas. No lo puedo definir, pero sé que hay algo que puede ser útil y constructivo. Roy: Faltaría el estímulo, el empuje que constantemente estoy dando para que la gente no se quede, ni se duerma, ni se resigne. Andrés: Alguien que escuche dolores y problemas y aconseje cómo resolverlos. Todas las respuestas son válidas y muy interesantes. Los que saben que tienen algo, también saben que pueden dar algo y desde allí, pueden ir al encuentro de su razón y su misión... Observen que, para ejercer ese valor, no les hace falta ningún método intelectual ni ningún medio material... Justamente esa cualidad es lo que constituye el “valor”... Otro punto a tener en cuenta es que se trata de “la moneda que se entrega” y no “de la moneda que se recibe”. ¡Qué especial es esto!: Uno se completa en la entrega y no recibiendo... Finalmente, en eso, en ese algo, que se puede dar de uno mismo, se esconde el “Para qué” de la vida... el sentido de la vida... Vanita: ¡Ah!... Y no es una reacción a lo que pasa afuera de uno, ni es nada que se aprende... ¡Es propio y está adentro! ¡Qué hermoso! Diego: ¿Qué pasa en mi caso, donde no encontré nada? Igual que Vanessa, tu camino de regreso estaba marcado con migas de pan, que se comieron los pájaros. La diferencia es que sólo llevás un año de búsqueda, y aún no la percibís. Diego: ¿Qué alegoría guardan los pájaros? Las tantas ideas voladoras que suelen pasar durante nuestro personal tiempo histórico. Sugerencias del mundo que uno acepta sin propósito ni selección. Vanessa: Traducido en criollo, son las distintas maneras de ir detrás de cualquier cosa, ¿no?

- 148 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Espejismos, ilusiones fuertes que, si uno las sigue, desvían de donde se debe estar. Ninguno de ustedes dos tuvieron en la niñez, formación religiosa de ningún tipo, por eso no hay verdades de convicción que les dijeran qué sendero tomar para encontrar esas columnas firmes y concretas. Ambos esperaban resultados visibles en el mundo de todos, y nada más. Si esos resultados eran buenos, adelante. Si eran malos desistir. Pero nunca se plantearon “hacia dónde iban”, ni cuál era el Puerto donde pretendían llegar. Diego: ¡Claro!... Uno tiene delineado los puntos básicos: Formar una familia, tener un título, un buen trabajo... Pero adentro de uno, en el corazón, no iba hacia ningún lado en concreto. (Riendo) ¡Ni siquiera lo había pensado! Vanessa: Y ¿Por qué ocurre eso? ¿Cuál es la causa? Simple y llano: Los valores que no se sustentan en la existencia de lo Superior, son endebles y cambiables, se pueden modificar o suprimir. Carecen de niveles de importancia, de prioridad y de autoridad. Vanita: ¿Es como que carecen de moral? ¡No, por favor! ¡Eso es una atrocidad!... Me estás haciendo pasar como que les digo a los chicos que son inmorales. ¡Qué ocurrencia, Vanita! (Risas y comentarios) Escuchen con el corazón y no interpreten cualquier cosa. No es que carezcan de moral, sino que están sustentados en una “moral de costumbres” que no reconoce un motivo superior a la acción. Las bases de esa moral, atienden a satisfacer los propios logros y no “un logro” fuera de sí mismos. Por ejemplo “el hábito de ser honestos” en vez de la “convicción interior de la honestidad”. Ese es el “desde dónde”. Andrés: Entonces, si es una cuestión de hábitos, digamos que todo se puede modificar, conforme a nuevos niveles de apreciación de la realidad. ¡Eso es! Ahora entenderán por qué, la Honestidad, la Palabra Empeñada, el Amor, la Belleza, la Pureza y otros valores, “están fuera de moda”... Repentinamente “molestaron” al imperio de nuevos y caprichosos objetivos de la sociedad, y al no estar sustentados en una Causa Superior, se dieron de baja, como puede abolirse cualquier ley del hombre, que aparezca como “poco práctica” en determinado momento histórico.

- 149 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Roy: ¡Claro! Dejaron de existir porque no tienen una base real, digo, en el sentido que pueden estar o no, según convenga a una finalidad práctica... ¡Qué bárbaro! Ahora lo veo: ¡Sólo tienen una utilidad práctica y no un compromiso superior...! ¡A mí esto me aclara un montón!... Siempre discutimos con mis amigos por qué ya no tienen actualidad los valores de la Caballería medieval. Cayeron en desuso bajo la espada de estos nuevos códigos sin fundamento. Lo expresaste con toda claridad. Lo que es necesario aclarar es que ningún Valor carece de Causa Superior. Es el hombre quien destruye esa Causa y minimiza esos valores, hasta degradarlos al nivel de “sanas costumbres”. No dudo que aquellos Caballeros a los que te referís, sustentaban sus principios en la existencia de Dios. Cuando se les destruyó esa Causa, quedaron sin sustento, como figuras de cartón, y ahí se van borrando de la historia, hasta desaparecer. Roy: Se borran como baluartes, pero lo más triste es la manera en que se degrada su significado. Desde hace mucho tiempo que se considera “caballero” a aquél que sirve y atiende solícito a las señoras... Les corre la silla, les acomoda un saco, o les sostiene una puerta para que pasen... ¡Se minimizó todo!... ¡Nada que ver con el arrojo, la nobleza, los ideales...! Diego: Mi pregunta es: ¿Quién produjo la destrucción de la causa que tenían esos valores...? La respuesta vas a encontrarla en la historia de los acontecimientos. Lo primero que se atacó son los pilares: los Templos y credos mayores. El resto de la tarea fue fácil. Un día cualquiera nos despertamos, y nos dimos cuenta que, sustentar una conducta o una moral en la Fe, en un Credo, es propio de una persona débil, tonta, ignorante y cosas por el estilo. Cuando se ataca la sensación de seguridad que aporta la aceptación social, la respuesta es segura y fuerte: ¡Nadie se quiere quedar atrás de la aceptación general! Si no así: ¿Por qué es tan fuerte el dictado de la moda? Roy: ¡Es cierto! ¡Hay una relación entre ser agnóstico y ser inteligente...! Cuando se destruye la idea de la existencia de un Ser Superior, causa y sostén de Valores y Principios, por efecto dominó, esos valores se nivelan hacia abajo, se convierten en una “opción”, en una costumbre adaptable a las necesidades y deseos personales. Carecen de convicción, de fuerza, de contenido. Más aún: son reemplazables. Vanita: Pero... ¿Para qué?... ¿Qué se gana con eso?...

- 150 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Mientras la moral convencional está al servicio del hombre, para su utilidad y provecho, la moral religiosa está al servicio de Dios. Si esto lo vemos desde un sentido, digamos, “práctico” no es lo mismo tener el motivo de complacencia en el Ego, que tenerlo en un modelo de Perfección, que además no varía con el tiempo, y que está fuera del “sí mismo”. Dicho de otra manera, Vanita, la moral religiosa no consume cualquier cosa que se le ofrezca, no hace prosperar ciertos negocios, ni permite el enriquecimiento de lo perverso. Vanita: Y esto también tiene relación con esperar resultados ¿no? Andrés: ¿De qué manera? Vanita: Pienso que cuando uno tiene puesto su propósito en uno mismo, el resultado te destruye o te alegra... Como que te deprimís o te viene euforia, según hayas conseguido lo que te proponías o no... En cambio, cuando existe verdaderamente una Causa Superior, los resultados no te alteran demasiado. Andrés:... Siempre y cuando te hayas jugado en eso todas las cartas... No es cuestión de quedarse sentado, sin hacer nada, en la justificación de ser indiferente a los resultados... Vanita: ¡Obvio!... No me refería a eso... Sucede que, aunque parezca boba, recién entiendo por qué no hay fracaso cuando la vida se comprende como un proceso interno... ¡Qué bueno! Roy: ¡Booom! ¡Cayó Vanita! (Risas y comentarios) Vanessa: ¡Para mí, no hay nada bueno!... Mis padres se casaron por Iglesia, son católicos pero no practicantes, por lo que decidieron dejarnos a mi hermana y a mí sin ninguna orientación religiosa, para que nosotras tomáramos la decisión cuando fuéramos grandes... Parece que eso, ahora, me deja afuera de algo bueno... Recordá que tu primera respuesta a la pregunta, fue “nada” y a continuación agregaste que en el mundo faltaría lo que ahora estás generando en tu interior. Si bien aún no tiene nombre, eso (lo que sea) está, lo percibís. Ahora bien: ¿Cuál es el mayor cambio que hiciste en los cuatro años que estás concurriendo a estas charlas? Vanessa: ¡Un montón! Antes estaba perseguida por ser “la perfectita” que todo el mundo aprueba, y vivía no sólo sobre exigida, sino además muy frustrada. Aprendí a conocerme por dentro, a llamar a las cosas que veo por su nombre. Aprendí a estar más contenta. ¡Qué sé yo!...

- 151 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

psicológicamente hablando, aprendí a reconocer de qué manera proyecto lo que es mío, en los otros... Y bueno, creo que lo más importante es que pude ponerme en contacto con la Fe. ¡No voy a decir que soy “la devota”!... ¡no!... Pero ahora siento adentro, que Dios existe y que hay un montón de cosas que yo sola no puedo realizar y que necesito esa ayuda superior... Bien. El tema es que, como el camino de regreso a Casa, había estado marcado con miguitas que se comieron los pájaros, (moral convencional) fue necesario trabajar duramente cuatro años de tu vida, aprendiendo a reconocer el Camino, desde afuera. En este caso me tocó a mí ser el guía, pero pudo ser cualquier otra persona. Hubo que enseñarte que existía un Camino, que existían las piedras y que podías utilizar unas en beneficio de lo otro. Vanessa: Cuando decís que me enseñaste a poner piedras ¿quiere decir que me llevaste a descubrir valores permanentes? Sólo te dije donde estaban. Vos fuiste a buscarlas y constatar si son reales o no. De alguna manera abriste un sendero adentro tuyo y recién ahora, se insinúa la presencia de algo nuevo y valioso. Todavía no sabés cómo se llama, pero ya lo distinguís como “el producto de lo que estás trabajando en tu interior”. Diego: ¿Cuál sería la diferencia, si hubiera sido educada en alguna fe religiosa? Lo dijimos muchas veces: El ser humano graba en su cinta virgen, desde el nacimiento hasta los 6 o 7 años. Después repite lo aprendido, o hace variaciones sobre un mismo tema. Si en ese período hubieran recibido formación religiosa, ambos hubieran reconocido el camino sin mayor dificultad. Esas convicciones, que en el momento parecen tan nimias e insignificantes, quedan grabadas a través de toda la vida, y sugieren su existencia desde el inconsciente, por eso facilita las cosas. Diego: En ese proceso ¿Qué diferencia hay con aquello de “el jarrón duele” o “la puerta que se golpea y es base para tenerle miedo al agua”? El transcurso de la vida, la experiencia, una buena terapia psicológica, o este trabajo de auto conocimiento que estamos realizando, sería suficiente para que el jarrón ya no duela, o para vencer el miedo al agua. Son programas de computadora, factibles de ser modificados, dado que se fundamentan en una experiencia mal interpretada. En cambio, lo que llamo “piedras” son títulos, nada más que grandes títulos, cuyo texto sólo lee el alma cuando llega el momento propicio. Ingresan por otro lado, y mantienen

- 152 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

vivo aquél estado de infinita armonía, en una resonancia muy particular... Andrés: Decís que la formación religiosa ¿es la que mantiene en estado latente, ese misterio que antecede al nacimiento? Lo dijiste de forma puntual y concreta, por lo que te respondo de igual modo: Sí. Andrés: Es bastante difícil de demostrar... El domingo pasado, estando en Misa, vi una niña de dos años, aproximadamente, que estaba en brazos de su abuela, y desde allí repartía besos con su manito a las imágenes de Jesús y de la Virgen. Cuando me miró, le tiré un beso de la misma manera, pero ella me dio vuelta la cara. No dudo que la abuela le enseñó a tirar besitos a Dios, de la misma manera que le habrá enseñado a saludar a la gente. Ahora digo: ¿Por qué siendo tan pequeña, aprendió perfectamente una lección y no la otra? Si no existiera esa misteriosa conexión, la niña le enviaría besos a toda estatua que viera, aún las que están en el parque, sin embargo, y esto si lo tengo por experiencia con muchos niños, ellos no se equivocan, saben hacia quien destinan su adorable saludo, sin que sea necesario corregirlos ni una sola vez. Andrés: En mi caso fui educado en una familia cristiana, que cumplía con todos los ritos ¡hasta me mandaron a un colegio religioso y todo!... sin embargo, jamás estuve en contacto con la fe. ¿Cómo verías mi caso? Lo veo como es: Según contaste, te enojaste con la Iglesia, porque un sacerdote se portó mal con vos. A partir de ahí, metiste todo adentro de una misma bolsa y no sólo te alejaste de la Iglesia, de las verdades de fe y los sacramentos, sino que además te constituiste en un vocero detractor, hasta que el destino quiso (para tu bien o tu mal) que te encontraras conmigo. Hoy estás nuevamente en contacto con aquella Fe que tenías cuando eras pequeño. ¿Sabés por qué? Andrés: No. Y a decir verdad no trataste de catequizarme ni convencerme de nada. Entré solito... ¡Supongo que lo tuyo es contagioso! (Risas y comentarios) No. No es eso. Simplemente iniciaste un trabajo de reconocimiento interno, que te llevó a darte cuenta de que esas actitudes eran dictadas por el “yo anárquico”, ese que destruye y minimiza todo, no sólo lo que se relaciona a devociones y cultos, sino a todo lo que le impide estar en contacto con la auto

- 153 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

complacencia, o privarse de algún deleite. Descubierta la causa del desvío, la oveja regresó al redil, sin necesidad de que un pastorcito tocara la flauta. (Risas y comentarios) Si ese tipo de argumentos que se esgrimen para alejarse de cualquier culto verdadero, se aplicara en el 1% en los cultos truchos y las religiones inventadas, el 50% de las sectas actuales habrían cerrado por falta de adeptos... En esto, como en todo lo demás, lo que se dice no está en concordancia con la causa. El sacerdote que se quedó con tus monedas raras, seguramente deberá dar cuenta por su acto, pero vos, nunca debiste usarlo como excusa. El sacerdote no es Dios. Andrés: ¡Pero es su representante!... ¿o no? Lo es, solamente cuando ejerce el Orden Sagrado. Después, en sus otros momentos, es un ser humano en búsqueda, en proceso de realización. Es alguien llamado por una fuerte vocación, a la que intenta responder entre errores y aciertos, como cualquier otro. Andrés: ¡Pero tiene obligación de hacer, todo lo que propaga! ¡No es una obligación! Es una devoción, es un Propósito. Pretender que al momento de vestir el hábito, ya estuvieran aptos y en condiciones de hacer propia toda La Palabra, sería pretender que todos estuvieran en estado de santidad... Ellos no ingresan en las congregaciones como “santos” sino para intentar serlo. Estás pidiendo un producto terminado, de alguien que está en proceso. Andrés: Bueno... ¡entonces que se dediquen a otra cosa...! ¿Vos crees que todos los médicos se hacen el chequeo anual de salud que imponen a sus pacientes? ¿Todos los obreros de la construcción tienen sus casas arregladas, conforme aconsejan para un buen mantenimiento? Vos mismo, sos un maravilloso profesional: ¿Ponés en práctica todo lo que aconsejás a tus pacientes?... ¡Claro que no! Sin embargo nadie abandona su oficio, su vocación o profesión por esa causa. ¿Verdad? Andrés: Sí, en ese sentido es así. De la misma manera que no cuestionás a tu médico de confianza, porque no se hace el chequeo anual; que no dejás de darle trabajo al obrero de la construcción porque desatienda su hogar, tampoco tiene sentido privarse de Dios toda la vida, porque un sacerdote, no supo aplicar en sí mismo, lo que proclama.

- 154 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Vanessa: Pero ¿los sacerdotes no tienen obligación de ser un ejemplo de vida? Te respondo desde la otra punta del tema: Nadie, religioso o no, tiene derecho a constituirse en piedra de escándalo para nadie. El ejercicio de un ministerio de cualquier culto, los hace tres veces más responsables que a un laico, porque afectan el Templo, la fe de otros y sus propias almas. Ellos, más que nadie, deben esforzarse en dar ejemplo de vida, y ser absolutamente respetuosos de ese Sacramento que recibieron. Ahora bien, en lo que corresponde a nosotros, no es digno escudarse en el error de terceros para justificar el propio, porque ahí somos nosotros la piedra del escándalo... Si nadie deja morir a un ser querido sin atención médica, porque el profesional no toma para sí mismo los recaudos que su profesión le indica, ¿porqué aceptar como válido morir a la Fe, porque un ministro no sabe comportarse? Acaso ¿No es evidente que se trata de una excusa y no de un motivo real? Diego: Creo que deberíamos repasar todas las fichas de ese tipo que tenemos acomodadas en la cabeza. En este momento se me ocurren montones de otros ejemplos y no sólo referido a religiones. Vanita: La verdad es que si esa medida fuera válida, a como está la gente hoy de falsa, uno no debería salir de su casa ni tampoco atender el teléfono. Sin embargo, nadie renuncia a vivir ¿no?... Lo que no me queda en claro, es por qué no se aplica esa forma de juzgar terminante, a las religiones truchas. En principio, “porque son truchas” y sólo se persigue a lo que tiene verdad. Lo trucho ya tiene lugar, está acomodado e integrado a la confusión. Más aún: es un aporte a la confusión general. ¿Para qué tocarlo? Las piedras sembradas en momento oportuno, son incógnitas que, cuando no se las atiende, desde lo más íntimo del ser reclaman atención y respuesta. Los inescrupulosos de todos los tiempos, aprovechan esa necesidad e inventan religiones a fin de que la gente “crea” que está en el camino de Dios, sin que sea necesario sacrificio, privaciones, ni ningún esfuerzo de abnegación. Inventan un dios facilitador, dispuesto a servir al hombre, a cambio de unas monedas. Si esto fuera cierto: ¿Qué estuvieron haciendo personajes como Siddharta Gotama, Mahoma, Moisés, Abraham, Krisna, Jesús, entre tantos otros dedicados a la búsqueda de Dios, transitando caminos de dolor, renunciamientos, sangre, sudor y lágrimas? ¿Nosotros estamos en mejores condiciones que ellos? ¿Merecemos más? ¿Ellos se equivocaron?... El Camino que justifica y da significado a la vida, ya fue marcado por ellos, y ningún profeta o iluminado dejó el ejemplo ni la

- 155 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

fórmula de llegar a la Suprema Fuente de Creación, dándose todos los gustos y placeres. Vanita: ¿Qué es lo que provoca que la gente deje sus creencias de familia y caiga en esos lugares? Muchas cosas. Las más decisivas son, la comodidad y el egoísmo. ¿Nunca escuchaste que la necesidad tiene cara de hereje? Muchas veces se vende el alma por un plato de lentejas. Son personas carentes de conciencia de sí mismas, que creen que, si existe un dios, es para llevarles pedidos a domicilio. ¡Jamás se cuestionan esto! Roy: El “dios Delivery”. (Risas y comentarios) Andrés:...Veamos si estoy en la orientación válida. En mi caso ¿Por qué no sentí necesidad del “dios Delivery”? ¿Fue por esas piedras que tenía grabadas en mí? Sí, pero también pueden haber otros motivos, como por ejemplo, que tu autoimagen diera más para agnóstico, que para eso. Andrés: Entonces, ¿Por qué relacionás la piedra, con el hecho de que siento que, si faltara de este mundo, habría un consejero de vida menos? Esa piedra contiene el significado de “Amar al Prójimo”. ¿Por qué otra razón gastás tanto tiempo y energía construyendo a los demás y me consta que más allá de tu profesión, lo hacés desinteresadamente?... Y además... ¿Te preguntaste por qué, la mala experiencia con aquél maestro cura, no pudo “comer” ese valor, como si fuera una miga de pan? Andrés: O sea que, no obstante lo que decía concientemente, el subconsciente, por decirlo de alguna manera, “recordaba” la piedra...y ¡obraba en consecuencia! Así es. Diego: Y ¿qué pasa con la gente que, no obstante haber tenido una formación religiosa muy severa, con el tiempo no sólo pierden sus creencias, sino que además, se hacen enemigos implacables de todo lo que se relaciona con la fe? Si lo que se tiene es un “dios Delivery” cuando el pedido llega tarde, frío o no llega, se cambia de comercio. Cuando se pierde la noción de Dios, ese lugar de primacía lo ocupan otras cosas: la

- 156 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

persona misma, las evidencias científicas o el devenir de las circunstancias, el sexo, el éxito, el poder, en fin: todas formas de idolatría. Lo cierto es que, ese lugar, no queda vacío. La convicción se corre de lugar, pero no desaparece. La existencia de Dios está grabada en el Ser del Hombre, no puede desoírla ni desatenderla, haya tenido o no, formación religiosa. Digamos que la certeza de lo Inmutable “es” a la condición humana. Con piedras o sin ellas, ese lugar no puede quedar vacío. Si no está allí lo verdadero, se reemplaza con lo falso. Vanessa: ¿Qué pasa si, por esas cosas, ese lugar no lo ocupa nada? Las personas se suicidan. No resisten el vacío. Diego: Quisiera saber algo más acerca de esas idolatrías... Veamos esto desde otro lugar. Según nuestra Fe, Dios nos pide anteponerlo a todo afecto, a todo deseo, a toda causa. Su Amor, debe estar antes que el amor profesado por nuestros hijos, padres, vocaciones, deseos, metas... Toda inversión de esa prioridad, implica una idolatría. De esta manera, todo aquello que sea superior a vos, todo aquello por lo cual estés dispuesto a realizar todos los esfuerzos, todo “para qué” o “para quién” que no tenga por causa, la Gran Causa de todo lo creado, son formas de idolatría, de reemplazo. Diego: O sea: ¿una persona que vive para llegar a ser famosa en cualquier orden, tiene por “dios” a la fama? ¿Tenés alguna duda? Ahí no hay resistencia a realizar todos los sacrificios, a pasar por todos los dolores y postergaciones necesarias con tal de alcanzar ese objetivo. Roy: ...Ahí no se cuestiona ni el dogma, ni el rito... ¡Hasta se da la vida, por esas deidades! Pruebas a la vista: bulimia y anorexia en pos del dios de la Aceptación Social. Lo grave de esto, es que ninguna de esas formas sustitutas de Dios, contienen una base inequívoca, infalible y cierta, entonces en vez de estar en sí, en su convicción y que el resto haga y diga lo que quiera, se constituyen en enemigos, en detractores de la “evidencia” que desmiente su “no creencia”. Roy: Si entendí bien, esto es algo así como que, si me creo un dios ¿no admito competencia? Así es. ¿Por qué buscar argumentos para destruir, si no hay amenaza a algo? El tigre no ataca al tigre. Si “molesta” la fidelidad

- 157 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

a los Templos ancestrales, si se atacan sus valores y se dasacreditan sus prácticas, es porque eso les impide imponer su propio “credo”. Contrario a esto, hay personas que, careciendo de religiosidad alguna, no atacan, ni destruyen, ni atentan contra la fe de nadie. Asumen la postura de “esto no es para mí” y punto. Eso es sano, en el sentido de que son coherentes en lo interno con lo externo, y por eso no se sienten amenazados. Diego: ¿Qué deidad tiene esa persona que carece de Fe en Dios, pero que no intenta destruir la de otros? No es posible generalizar, pero prepondera la “Fe en sí mismo”... en otros casos, se endiosa una cualidad del sí mismo, como por ejemplo, la inteligencia, la bondad, la capacidad de realizar, etc. Vanessa: Sin ir muy lejos, así era yo. No creía en nada, pero tampoco me molestaban los creyentes de ningún tipo. Creías en tu perfección. ¡Un dios terrible! (Risas y comentarios) Roy: Por lo que escucho, parecería que nadie pudiera ser totalmente ateo, quiero decir, que si no hay contacto con una deidad verdadera, es como que surge la necesidad de reemplazarla por algo o alguien... Entendiste bien. Ahora falta que lo comprendas y que lo compruebes. Nadie puede dejar ese vacío sin llenar. ¡Cualquier sustituto es bueno! Diego: Yo reconozco que durante toda mi vida, fui devoto de la ciencia. Para mí, lo que no se podía explicar científicamente, no existía. ¡Esa es una deidad fuerte! Si comprendés la ciencia, como un aporte inteligente y necesario a la humanidad, es del todo maravillosa. Del punto de la investigación, la tecnología, los avances son cada vez más admirables. Ahora, si la considerás un dios... la evidencia te demostrará que no es completa, ni omnipotente, ni irrefutable, ni sabia. Diego: ¡Es irrefutable! Sólo en el tramo que estudia y no en la totalidad. Admirar los avances de la ciencia es positivo, darle características y potestades de Dios, es otra cosa muy distinta. Lo ideal es que ambos fueran juntos: Dios crea, y la ciencia descubre... ¡Una amalgama perfecta! El error está en entender que una, reemplaza al otro.

- 158 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Diego: Sucede que la ciencia explica todo. No hay misterios ni cosas que admitan discusión. Es de tal manera y el resultado es siempre igual. ¡No hay cómo darle! ¿Por qué será que el ser humano tiende siempre, a que le den las cosas servidas y listas para consumir? Admiro al investigador científico, pero no al que utiliza la ciencia, sin que en ello medie su propia experiencia. Lo usan como un latiguillo, pero por sí mismos, carecen absolutamente de comprobación del método. Entonces: ¿Qué diferencia hay entre creer en el resultado de la ciencia, a creer en un camino espiritual? Ambas son “religiones”. Diego: ¡No sé!... ¡Los descubrimientos científicos son cada vez más impactantes y menos discutibles! ¿Quién dice lo contrario?... Me refiero a otro aspecto: Cuando hablamos de una deidad, de un Ser Superior, de un Dios, hablamos de algo o alguien que no requiere completarse, porque está completo. Que no requiere reparar, porque no se equivoca. Que no necesita comprobarse, porque es y está. La Creación no tiene errores, la Ciencia sí. Andrés: ¿En qué se equivoca? ¿En qué sentido? ¿Nunca oíste que el resultado de una investigación científica, o la aplicación de un gran descubrimiento, con el tiempo, resultó ser nocivo y dañino al género humano?... Y ¿Qué sucede con el gran desastre ecológico que amenaza con una destrucción total? ¿Se equivocó la Naturaleza, o se equivocó el hombre? Hoy, con esto de las armas nucleares y químicas ¿quién pone en riesgo la supervivencia del Planeta?: ¿Dios o la Ciencia?... El chiste es que algunos suponen que El no debería permitirlo, es decir, Dios debería transgredir su palabra empeñada de darnos Libertad, para salvar a los que la usan mal. ¿No es pedir mucho? Andrés: Con ese criterio sobre el avance científico, tendríamos que volver a los tiempos de las cavernas... ¡No se equivoquen, ni pongan en mi boca cosas que no digo!... No estoy en contra del avance científico. Sólo digo que es la aplicación de una inteligencia humana, falible, que no tiene a su alcance prever las consecuencias de sus descubrimientos. Es útil, necesaria, apreciable, pero la suma de sus potencialidades no da por resultado un dios. ¡Eso es lo que afirmo! Roy: Le falta caracteres de perfección... ¿Eso decís?

- 159 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Le falta las condiciones de deidad. Eso digo. No pierdan el hilo de lo que estamos hablando. El tema que consideramos no es el valor de la ciencia, sino la ciencia como reemplazo de la existencia de Dios. Diego: Pero Dios también se equivoca... ¿Por ejemplo? Diego: Cuando permite que sucedan cosas injustas, como por ejemplo, que haya hambre, que un chico muera en manos de la violencia... Si hay algo que no ahorré en la educación de mi hijo, fueron palabras. Usé todas las que conocía, las amplié para él, y si fue necesario, las inventé para darle un mapa de cómo puede ser su vida, conforme a sus opciones. Si sumara las horas de charla con él, medirían medio tramo de mi vida. Le avisé todo lo que podía ocurrir si tomaba opciones desde la A hasta la Z... Ahora es grande, y debe tomar sus propias opciones. Si él elige mal ¿Quién es el responsable de las consecuencias? Diego: Si le diste todo lo necesario, y él no supo aplicarlo, él es el responsable de sus actos. La Fuente de Creación, el Principio de todas las cosas, habló desde el nacimiento del Hombre. ¡Milenios de recomendaciones y guías! ¡Miles de acontecimientos reveladores, miles de profetas en todas partes de la Tierra. Libros Sagrados, Tablas de la Ley. Habló todo, en todas las lenguas. Tomó presencia en todos los nombres que se le dio... La Humanidad tiene todas las palabras y toda La Palabra. Ahora te pregunto: ¿Quién mató a Abel?... ¿Caín o Dios?... De ahí en más, no es Dios quien “permite”, sino que es el hombre el que “hace lo que se le da la gana” y desde ahí, paga sus consecuencias. De la misma manera que no puedo meterme dentro del corazón de mi hijo para evitarle un error, que todo lo que puedo hacer por él es sugerirle, guiarlo, mostrarle el camino, pero no puedo caminar por él... ni decidir por él... El Padre de Todo lo Creado puede, pero no debe poseer al hombre, que fue dotado de Libre Albedrío. Por lo tanto ¿Quién se equivoca? ¿Quién es responsable de las consecuencias? Diego: Sí, está claro. Las circunstancias (la vida en común) es el reflejo de la vida interna de cada uno de nosotros... Cada persona deposita allí sus contenidos y ellos fermentan solos, convirtiéndose, a poco, en imperativos sociales. Allí fue depositada la avaricia de los más ricos, que produjo el hambre de los más pobres. En ese pozo

- 160 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

común se ultrajó el sentido del Amor, equiparándolo a debilidad o estupidez, y desde el pozo surgió el imperio de la violencia. En el pozo de las circunstancias es donde se denigró la escala de valores, y desde allí se impuso el culto a las pasiones bajas. ¿Quién inventó la corrupción? ¿Quién inventó el abuso sexual, las violaciones, los asesinatos...? Todo este horror ¿fue auspiciado por Dios, cualquiera sea el nombre que le den, o por el Hombre? Vanita: Entonces... ¿Somos nosotros los responsables del Mundo? Sí. De aquí viene la otra cuestión: ¿Qué aportamos al pozo? ¿Tratamos de poner algún antiséptico o sin fe verdadera en Dios, esperamos que “un dios” resuelva lo que no hacemos? Vanessa: ¿Por qué está todo tan confuso, y no se puede ver lo que es evidente? ¿Es por falta de tiempo para pensar? Porque es mucho más fácil sentarse a criticar, que realizar. Porque es más fácil hablar, que escuchar y porque es más fácil calificar y descalificar, que discernir. El tiempo que se dice no tener para pensar... ¿En qué se usa? Diego: La pregunta que me surge, me parece de terror, pero te la digo como la siento: Si esto es así, como lo hablamos: ¿Para qué sirve Dios? ¿Es sólo un veedor, un testigo del error del hombre? Si el Hombre está en manos del Hombre... ¿Qué función cumple un Dios? Toda duda que se expresa, no anida en el corazón... Hacés muy bien en expresarla... Hay diferentes respuestas según el nivel de comprensión que tengas de Él. La más importante, es que Dios no está al servicio del hombre, sino que es el hombre, quien debe servir a Dios. Lo inferior sirve a lo Superior, y no al revés. No obstante esta verdad, desde el real Amor y la Infinita Misericordia, (y no desde la servidumbre) Dios asiste a todo aquél que solicita su intervención. Si no es así, ¿Por qué desde siempre, y en todas las creencias, existieron ritos de peticiones? Ahora bien, la respuesta a esas peticiones depende de, cómo, quién, desde dónde y por qué se formulen. Andrés: El “cómo” ¿está referido a la sinceridad o mecanicidad con que se realice el pedido? Ese es un aspecto. Si la petición es “de fórmula”, sólo de palabras, sin contenido, no tiene efecto, pero además el “cómo” tiene relación con la humildad o la soberbia con que lo expreses. ¡Qué dolor me producen esas personas que narran los “milagros obtenidos” (muy entre comillas) como si fuera su logro, su dominio

- 161 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

sobre Dios! Sinceramente, me indignan. Lo expresan como algo que Dios “debe hacer” porque “yo soy Fulana o Fulano”. Vanessa: ... ¡Pero parece que obtienen lo que piden! Eso es cierto, pero ¿Quién se los da? Ya sabemos que hay un solo Dios Verdadero, pero también influyen muchos dioses producidos por la ignorancia. Vanessa: Y esos pueden hacer “milagros”. Los productos de la sugestión, la hipnosis, o la auto hipnosis, también pueden ser vistos como tales. Eso depende del observador. Hay gente que le da poder a una pata de conejo... ¿o no? Vanita: Con respecto a “quién” formula el pedido, ¿tiene que ver con el estado interno de la persona? Está relacionado a quién peticiona dentro nuestro. Qué “yo” o qué “ente” o caso contrario, qué alma está requiriendo. Acaso, ¿no saben de aquellos que oran para que alguien sufra? Vanessa: ¡No! ¡Eso es imposible! ¡Nada es imposible! Está lleno de ejemplos donde la fe se adapta al ego del suplicante. Por ejemplo, hay personas que rezan para que un hombre o una mujer, abandone sus hogares y sus hijos, y así satisfacer su propia pasión, justificada en “el amor”. Otros “suponen” que tal o cual les hizo daño, y en nombre de algún dios, piden su destrucción. ¡Ahí no están los oídos del Señor! Vanita: Pero ese tipo de pedidos, también suelen darse, como si fueran legítimos. No es atribuible a La Fuente Suprema, porque en Ella, no hay contradicción. Esos pedidos negativos o que no corresponden, pero que no obstante “se dan”, por obra de lo que sea, también explica el hambre de los más pobres, el drama de los inocentes, la victoria de la injusticia. Todo esto surge de la misma fuente: el deseo personal, el voluntarismo propio, el orgullo, la ignorancia, el egoísmo y las consecuencias de todo esto. Roy: En cuanto al desde dónde y el para qué, del pedido, está relacionado a la motivación y a los resultados, ¿no? Supongo que si el “desde dónde” es el odio, el resentimiento, la venganza, etc, no habrá oídos. Ahora, la pregunta que me queda es la siguiente: Si Dios es La Sabiduría ¿para qué hay que pedir? ¿Acaso no sabe lo que necesitamos?

- 162 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Si te doy sin que me pidas, sólo voy a alimentar tu Ego y te privaré de la posibilidad de realizar lo tuyo. Roy: No lo veo. Si ahora tenés hambre y sin más te doy comida. Tenés sed, y te la satisfago. Tenés sueño y te llevo a la cama. Estás aburrido y te divierto. Necesitás aire y te apantallo... y así sucesivamente, en poco tiempo, ¿En qué te convertís? Roy: ¡En un bello parásito!... No estaría nada mal... (Risas y comentarios) Sí, un parásito, pero no en un hombre en uso de su libertad. En el hecho de pedir, muchas son las cosas que confluyen. No sólo la libertad, también la humildad, el ejercicio de la confianza en Dios, el acto de Fe, la abnegación a los resultados... y mucho más. Vanita: ¿Por qué a veces, cuando uno pide desde el corazón y para bien, hay pedidos que no se cumplen? Esa respuesta la encontré en un libro, cuando aún estaba en el Colegio. Se narraba ahí que, en una pequeña aldea, se había enfermado un tal señor Juan, conocido y reconocido por su extrema virtud. Era una persona honesta, leal, sincera, generosa, siempre bien dispuesta a darse a los demás. La enfermedad era irreversible y el médico había anunciado que su vida terminaría en muy pocos días. La situación motivó que toda la población de la aldea se reuniera frente a su casa para orar por su vida. Con lágrimas y verdadera emoción, todos pedían que Juan viviera, que se lo dejara en la Tierra... Tanta insistencia, obtuvo resultados y Juan no murió, pero quedó en estado vegetativo durante 15 penosos años. Vanessa: ¿Qué pasó? ¿Por qué sucedió eso? Porque la gente de la aldea “olvidó” confiar en la Gran Sabiduría y pidió puntualmente “que Juan viviera”, en vez de pedir que se hiciera en él, la Voluntad y Misericordia Divina. Si debía vivir, que sanara y si no, que muriera en paz. Esas personas creyeron que sabían más que Dios, lo que Juan necesitaba. Hay mucho misterio en esto. A veces la muerte es la forma de liberarnos de un mal mayor. Otras, el dolor, la privación, es un medio, un motivo de aprendizaje sin el cual, no hubiéramos crecido. El secreto está en vivir con humildad y aceptar la condición de ser alumnos de la vida.

- 163 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

Vanessa: Siento que la cosa pasa por abandonar pretensiones... ¿me equivoco? No te equivocás. ¿Por qué siempre pedir, exigir, reclamar? ¿Por qué estar siempre en acreedores? ¿Por qué aceptar tácitamente que la vida es un paseo? ¿Desde dónde y por qué esa vanidad de sentir que sólo merecemos?... Cuando uno abandona esa postura y de pronto se detiene, gira la cabeza y ve en perspectiva su propia vida, hasta las fibras más íntimas tiemblan de emoción, ante la presencia no de un milagro, sino de miles de ellos. Y es ahí cuando surgen frases como: “No se cómo superé esta dificultad”... “Ahora entiendo por qué aquello no se dio”... “Qué bien que esa persona se alejó de mi vida”... “Si no fuera por tal cosa, hoy no tendría tal otra”... Todo, si se quiere, es atribuible a la casualidad, pero basta vivir un trecho para tener la seguridad, de que la casualidad no existe. Es ahí cuando se puede apreciar una de las razones, la más básica, en cuanto a aquello de “para qué sirve Dios”. Diego: ¿Hay que pedir siempre? Digamos que, para uso personal, sólo lo necesario y siempre ad referéndum de la Suprema Voluntad, observando imparcialmente los resultados, porque es ahí, donde está la enseñanza, es ahí donde se reconocen las piedras. Ahora, para los demás, para los conocidos y los desconocidos, hay que pedir siempre, incesantemente. La oración por el otro, en especial si el destinatario no se entera, es una bella manera de amar. Andrés: Resumiendo un poco, las piedras son esas convicciones profundas que quedaron subyacentes. Cuando en determinado momento de la vida, nos surge la necesidad de reemplazar lo vano, por lo estable, encontrar algo que de un cabal sentido, al parecer, esas piedras son las que sirven de guía... Entonces: ¿La Verdad, está atrás de uno en el tiempo? ¡No te quepa duda! Andrés: Eso es extraño. ¿Para qué vamos hacia delante, entonces? ¿Y quién dijo que vamos hacia delante? ¿En serio pensás que el pasado está atrás y el futuro adelante? Andrés: ¿Y si no? Te dejo una posibilidad para estuviéramos girando en círculos? Andrés: Podría ser... No sé...

- 164 -

meditarla:

¿Qué

tal

si

sólo


MONUMENTOS DE PIEDRA

¿No se repiten en tu vida una y mil veces las mismas situaciones, nada más que con diferente escenografía y protagonistas? Acaso: ¿No te encontraste más de una vez, con la misma costumbre, con la misma reacción, con la misma experiencia, sin que hayas podido liberarte de ellas?... Si fuera un camino que se extiende en horizontal... ¿Por qué se repite la historia personal, la de grupos y la mundial? Andrés: ¿Hay alguna manera de evitar recorrer el mismo círculo? Sí. Estar alerta y evitar que el mismo suceso, nos ponga en el mismo redil. ¡No es nada sencillo! Andrés: ¿Y mientras tanto? Juntar todas las piedras que sea posible, reconstruir los monumentos y emprender el regreso a Casa, con decisión y valentía. Andrés: ¿Qué monumentos? Los Templos. Los verdaderos Templos de todas las genuinas religiones del mundo deben volver a erguirse. Entre sus paredes están las grandes piedras de una Verdad Inmutable, Inconmovible, que no se resquebraja con el tiempo. Atemporal, Vibrante y Única se oculta detrás de los gestos visibles, de las actitudes mundanas, de las palabras cotidianas. En alguna etapa de la historia se llamaron “Templos del Misterio” y hoy siguen siendo lo mismo: custodios de una Verdad que vale entregar la vida por conocerla. Diego: ¿Todos los credos son Templos de Misterio? Todos los grandes y verdaderos. ¡No los inventos comerciales! Las puertas de esos Templos están abiertas, tanto para los que se conforman con “ir a cumplir” como para los que necesitan encontrar la Verdad. Eso depende de la libertad de cada uno... Lo cierto es, que es una pena pasar por esta vida, y no llevarse nada de allí. Vanita: Yo voy todos los domingos a Misa, pero no sé donde buscar esos misterios. Más aún, no los veo. Vas a cumplir y desde el “ya lo sé” interno. Vas a repetir palabras y a poner la cara. Así: ¿Qué puede haber hoy de novedoso?... Y sin embargo, todo es nuevo a cada día. También hay millones de personas que en vez de vivir, repiten sus vidas. ¿Qué aptitud pueden tener para descubrir nada? Si tu interior está viejo y

- 165 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

aplanado, si crees que las apariencias justifican todo, si no hay ansia de saber, comprender, conocer... Si te conformaste con aquello de que naciste para reproducirte y morir... ¡Hasta un espectáculo de circo, te resultará aburrido! Vanita: Entonces... ¿Qué tengo que hacer? Volvé a tu Templo a buscar la verdad y no, creyendo que la tenés.

- 166 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

CIERRE DEL CAPITULO Andrés los introdujo con un enfoque más general sobre el tema. Es por eso que me pareció adecuado cerrarlo contándoles mi experiencia particular en el acercamiento a un camino religioso. Durante mucho tiempo en mi vida tuve una fuerte creencia en que, con el conocimiento científico y la deducción lógica encontraría la respuesta a todo. Me pasé leyendo libros de las más diversas disciplinas intentando llegar a algo y sin embargo cuanta más información juntaba más perdido me encontraba. A través de estas charlas, empecé a ver lo vacío de las distintas mezclas de circunstancias y empecé a comprender que tenía que haber algo más. Una respuesta que no fuera creer en lo que alguien dijo en un libro. Me acerqué a la Iglesia Católica, con todo el escepticismo (lo veía como algo cursi y anticuado), pero con una simple inquietud: intentar ver por qué me resultaba tan chocante. Ver qué había en mí que me hacía rechazarla y de paso conocer bien qué era, en vez de presuponer en base a opiniones de otros. Algunos se preguntarán por qué fui a la Iglesia Católica y no a otra. Primero porque es de las grandes religiones tradicionales, en este sentido veía que el camino que ofrecieran (correcto o no) no sería la improvisación de algún grupo que había tenido necesidad de adaptar la fe a sus circunstancias actuales. Tenían pilares básicos que habían mantenido durante siglos y que le habían servido a mucha gente (en distintas circunstancias) durante siglos. Es decir la Religión era una, más allá de los individuos o grupos con los que fuera a encontrarme. Y por otro lado, dentro del ámbito sociocultural en el que estoy inmerso, de todas las grandes Religiones, era la que más fácilmente me permitía acercarme, sin tener requisitos previos o tener que estar comprometiéndome a nada. Con el pasar del tiempo, de asistir a misa, leer material religioso, fui viendo que había algo concreto. Que esas palabras, que me habían parecido cursis, tenían un significado profundo, que lo que había que “aprender” no era algo externo que uno pudiera entender con el razonamiento, sino que se usaba otra parte de la cabeza (aunque ahora lo veo más como el corazón) y que era quizás mucho más complejo que un montón de material científico y que quizás de tan complejo parecía utópico. Pero lo más importante, es que no era otro libro más juntando polvo en una biblioteca dentro de mi cerebro, sino algo que tenía aplicación concreta en cada instante de mi vida. La vida religiosa como algo “vivo”

- 167 -


MONUMENTOS DE PIEDRA

que surge de experiencias concretas y no como una serie de reglas artificiales. También es importante aclarar que todo esto no me hizo un descreído de la ciencia y el razonamiento lógico, sino que solamente los puso en el lugar que les corresponde, como herramientas útiles para diversos fines; no como fines en sí mismo. Una cosa importante es ver que existe un camino, que lo más probable es que no sepamos cuál es, ni como es, ni dónde está la primer piedra; pero que se puede hacer algo más en la vida que deambular perdido en el bosque. A partir de que uno sabe que hay un camino puede empezar a buscarlo, va a deambular un tiempo más hasta encontrar la primer piedra. Esa piedra que quizás se cruzó cientos de veces en su vida y la vio como una curiosidad arqueológica o desde el punto de vista estético, sin saber que era parte del camino. Pero ahora sabiendo que hay un camino, se transforma en el primer paso. Y como decía Mónica en la charla, nos pueden faltar algunas piedras en el medio, pero eso no destruye el camino. Nos perderemos por un tiempo, pero la dirección ya la tenemos y sobre todo esa certeza de que de alguna manera, se puede llegar a Casa.

- 168 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

CAPÍTULO IX Estudio de la Complacencia

Introducción y cierre del capítulo realizado por: Andrés Frasca - 169 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Como ha sido de costumbre a lo largo del libro, cada capítulo está prologado y cerrado con un comentario de las diferentes personas que componemos el grupo. En este prólogo sólo quisiera prepararlos para lo que van a asistir y luego hacer algunos comentarios al salir del encuentro. El tema seguramente va a disparar en sus mentes muchos tipos de comparaciones y analogías ligadas a teorías psicológicas, filosóficas y sociales con vigencia en la actualidad. Les recomendaría que, para una más amplia comprensión, eviten caer en esa tentación. Busquen sumergirse en lo que van a escuchar desde su más profunda e íntima experiencia. Traten de entrar en el tema tal cual está planteado sabiendo que nuestras "comparativas mentes" van a llevarlos a los recurrentes: "...esto es como lo que dijo tal, o... esto otro se relaciona con las teorías de cual...". Si no resisten esa tentación, la consecuencia es que van a lograr empequeñecer la inmensa dimensión que tiene el tema y, por lo tanto, las vastas implicancias que pueden descubrir para sus vidas. Es que, en esta reunión, vamos a recorrer en cada uno de nosotros la otra cara de la vida, el lado oscuro, aquello que draga todo lo humano. Aquello que podemos tal vez conceptualizar como: "la escencia de la nada" en su absoluta dimensión. La desaparición de la existencia de todo aquello que nos hace humanos. Además, y por necesario contraste, entender qué significa lo escencialmente humano. El contenido del capítulo, como todos los anteriores, no deja lugar a ninguna ambigüedad, es contundente. Ofrece múltiple cantidad de herramientas de respuesta para poder salir de esta trampa sobre la cual se ha desarrollado la línea central de creencias de la cultura contemporánea. Esperamos que, a partir de aquí, termine de cobrar sentido para el lector el por qué de nuestra necesidad de reflotar este "paradigma olvidado". Si así fuera, estarán mejor preparados para el último capítulo (El Descalificador), que no llevará ningún comentario. Pensamos que a esta altura del recorrido que hemos realizado juntos, podíamos dejar para cada uno de ustedes su prólogo y comentario final.

- 170 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Con gran sorpresa leí en sus diarios de observaciones, reiteraciones sobre estados de complacencia. Peor aún, es visible cierta “alegría” o cierta “satisfacción” de tenerlos, como si fuera un adorno bonito. ¿Qué entienden por auto complacencia? Diego: La tendencia a darse el gusto a sí mismo. Roy: Hacer cosas, solamente en busca de satisfacer algún interés personal. Andrés: Es una especie de goce oculto, que termina siendo causa de ciertas conductas. La búsqueda de una sensación placentera, no alcanza para englobar el tema. La complacencia como “estado” es algo mucho más complejo. (Mónica hizo una pausa, como buscando las palabras justas) A ver... Cierren los ojos, e imaginen un rostro sonriente... no de una persona conocida, sino un rostro cualquiera... (Cerramos los ojos y cada uno trató de imaginar un rostro sonriente) Bien... Ahora imaginen esa persona... ¡con un palo en el trasero! (Carcajadas y comentarios) ¡Eso es complacencia! (Más risas y comentarios) Es una molestia centrada en el instintivo, que produce un dolor erótico sordo. Una mezcla de sensaciones detenidas en un sorprendente punto de contradicciones... Sólo se atiende a ese estado, la atención queda detenida ahí, todo lo externo desaparece, todo movimiento superior se detiene, no hay otro interés que vivir “esa sensación”... ¿Lo han visto en ustedes? Andrés: ¿Es auto consideración? No. Es la madre de ella. Vanessa: ¡Yo sí lo tengo observado! Es como entrar en un lugar con fango, pantanoso, donde uno no atina a salir ni a sumergirse. Es como que uno se queda ahí, sólo respirando...

- 171 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Roy: ¡Sí!... ¡Yo también tengo esa figurita! Cuando entro en esos estados soy un vegetal perfecto... Noté que la mirada se pierde o se debilita, no sé distinguirlo bien... los músculos se hacen de baba... Me siento como invadido por una tristeza o desgano sin motivo... ¡Cuando estoy así, se me da por rascarme sin que me pique! (Risas) Diego: ¡No lo veo!... No entiendo de qué hablan... Roy: No lo ves porque lo tenés encima. (Risas y comentarios) Los que vieron la complacencia... ¿Se dieron cuenta que el gesto del rostro, acompaña ese estado? Vanessa: (riendo) ¡Sí!... ¡Es como si uno llevara el palo puesto! (Risas y comentarios) Bien. Disculpen la analogía, pero no encontré una manera más gráfica de dar a conocer con nombre y apellido a un estado interior que no es privativo de ustedes, sino de la gran mayoría de la gente. Tiene poder hipnótico, y no es fácil trascenderlo, justamente, por ese extraño placer erótico (no genital) que produce. Andrés: ¿Cuál es la causa? ¿Cómo se llega ahí? En principio digamos que está ligado al “vacío existencial”. En palabras severas, diremos que todo lo “humano” entra en cortocircuito y queda latiendo sólo lo primario, vegetativo, egocéntrico del hombre: el amor a sí mismo de los planos más profundos. En síntesis: la personificación del “Estado de estupidez” Vanessa: ¡Sí!, ¡es cierto!... No hay ahí ningún contacto con lo externo. ¡Es como que uno se aísla en ese pantano, sin proyectos, sin deseos, sin alegría ni tristeza! ¡No hay nada más allá de durar!... ¡Excelente, Vanessa! Tus observaciones son cada vez más precisas. Es correcto lo que decís. No hay nada, en concreto, ni predomina ninguna sensación. Sólo estar ahí, gozando el “no ser”... pero sin conciencia de ello... ¡Eso es lo más grave! Diego: ¿Es como cuando uno está viendo televisión sin ver, quiero decir, sin interés en nada particular?

- 172 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Algo así, pero no exactamente eso. No hay absolutamente ninguna intencionalidad. Lo que dijiste sirve de ejemplo, no es una persona viendo televisión, es un montón de carne desparramada, haciendo de cuenta que mira la pantalla. En este caso puntual, se trata de una manifestación, un brote del estado de complacencia... Lo que nos ocupa hoy, es lo que está debajo de ese brote, lo que sustenta esa apariencia. Andrés: Es como si quedara sólo el “hábito” de vivir, o mejor dicho de respirar... ¡Casi un estado vegetativo!... ¡Tal cual!... Lo están entendiendo... Observen que las características sobresalientes de él, son la sensación gelatinosa y la caída involuntaria. Deben ver y experimentar, que en esos momentos no se está, digamos, como normalmente estamos... Es decir, no estamos ni divertidos, ni enojados, ni tristes ni alegres, ni miedosos ni corajudos... estamos ¡en nada!... A partir de ahora, nunca más queden indiferentes a esos estados. Vanita: ¡Son horribles! No es lo lindo o lo feo. Lo que se debe temer, es el abismo que hay debajo de ese estado: se deja de existir, aunque se siga viviendo. Se entra en vacío interior y esto es la trampa más negativa y destructora que puedan imaginar. Se suele manifestar como estados esporádicos visibles, pero existe el riesgo de que se cristalice ese estado, que se haga permanente y es ahí cuando la persona deja de ser tal, para mutarse en “eso”. Roy: ¿Qué hay adentro de ese vacío? Es muy difícil responder esa pregunta, por dos motivos. Uno, porque se trata del Ego sin yoes y dos, porque al tomar la persona, sólo deja un 2% de capacidad de observación. ¡Un porcentaje demasiado pequeño! Andrés: En ese caso ¿Qué sucede con la atención dirigida? ¡Es absorbida por el Ego! Por eso no podemos ver, decidir, o aplicar determinación para salir de allí y se acrecienta la identificación con él. Aquí se produce esa extraña atracción magnética que siente aquél que se asoma a un abismo. Vanessa: ¡Qué horror!... ¡Es como quedar presos! Sí. Así es.

- 173 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Vanita: ¿Qué significa, en este caso puntual, lo que dijiste acerca de dejar de existir? Hemos hablado reiteradamente de Valores y Principios, como elementos que permiten distinguir al hombre en su dignidad de tal, con respecto a los animales. Si esos Valores y Principios son declamaciones, posturas convenientes, falsas actitudes, obviamente no existen. Constituyen un engaño más ante el espejo de “creer ser”... Cuando ellos están y son ciertos y genuinos, no se gritan en ninguna plaza pública, se ejercen desde lo inevitable, son imperativos y ordenan la conducta humana, no sólo hacia fuera, sino principalmente hacia adentro de la persona. No es la Existencia, pero son destellos, signos o evidencia de ella. Ahora bien, el estado de complacencia, es la anulación, la desconexión de esos Valores y Principios. Vanessa:... ¡Es algo así como transformarse en un animalito! No hace falta transformarse. En todos nosotros hay una parte animal. En el caso de la complacencia, ésta, simplemente predomina. Andrés: ¿Es la persona sensual por excelencia? No. ¡Nada que ver!... Convengamos que la actividad sensoria, es indispensable para movernos por el mundo. Algunos la emplean como medio y otros como fin, pero en una y otra manera, “algo” vive, se moviliza, siente. El tema que tratamos es más complicado todavía... Además, tengan en cuenta que, si la persona ha tenido una educación rígida, no será dada a la satisfacción de los sentidos, tratará de reprimirlos, pero eso no la exime de caer en estado de complacencia. No es ésta una condición. Puede ser rígida moralmente, pero internamente complaciente. Roy: Creí que había entendido, y ahora se me quemaron todos los papeles. ¿Actúan o no los principios? Estás confundiendo la moral de costumbres, con los Valores y Principios. Roy: O.K... ¿Cómo los distingo? Podemos dar ejemplos tales como la monogamia o la poligamia, según se trate de la moral occidental u oriental. Para unos sólo se permite una esposa por vez, en tanto que para los musulmanes, por ejemplo, lo válido es la coexistencia de varias esposas... ¡Cómo calificar la moral mejor o la peor!... Ambas tienen fundamentos ciertos y el aceptar una u otra, tiene que ver con la

- 174 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

cultura a la cual uno pertenece... Esto es moral de costumbres. Ahora bien, si nos quedamos sólo con este ejemplo, limitaríamos el tema a una cuestión de formas. Para aproximarlos al tema de fondo, vamos a recordar una frase que lo dice todo: “Pecó en su corazón”... (Silencio de todos) Roy: ¿Se trasgredió en sus sentimientos? No. Deben dejar de pensar en sí mismos, como un artefacto único. Recuerden que somos una máquina muy compleja que no admite la simpleza para su comprensión... Los sentimientos (no el Amor) tienen una conexión directa con los sentidos, por lo tanto ante una mujer muy bella un varón puede sentir enamoramiento, pasión, deseo... y eso es humano y aún bello. La diferencia viene instantes después. Si detrás de ese sentimiento, o de esa pasión, el hombre va en procura de concretarlo, sin importarle su propia condición ni la de la mujer, ni medir consecuencias... ni el daño o el perjuicio de sus actos hacia sí mismo, hacia terceros, o hacia su foco, ahí no hay valores que se opongan a su necesidad de satisfacción. No hay valores activos. No hay nada que le ponga freno a su Ego. Ahora bien, el motivo de que no tenga activados esos valores, no es una cuestión de educación, de moral, etc. sino que esa persona está dominada por una actitud complaciente. Escuchen bien. Dije “actitud” y no “estado”. Andrés: Esa “actitud” sería un “algo” interior que sólo tiende a estar cómodo y satisfecho, y que no está dispuesto a sacrificar nada. ¡Eso es! ¡Muy bien! Debilitado por la complacencia, no tiene la aptitud de la renuncia, la abnegación, o el sacrificio de nada. Vanessa: Pero eso ¿No es ser un egoísta? El egoísta es el que no comparte. En el caso que estamos viendo, el tema no pasa por compartir o no. ¡Todavía no sabemos si la mujer del ejemplo aceptaría o no su pretensión!... (Risas y comentarios) Ahora estamos en la instancia de ese hombre ante sí mismo y la respuesta o no, de sus valores y principios reales, ante un estímulo externo. Diego: Pero negarse a ese estímulo, ¿no sería también una represión?

- 175 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

La represión pasa por otro circuito y muchas veces actúa también sobre la complacencia, pero no es ella. Cuando la represión reemplaza los valores, la persona está enferma, o el “Ser” interno (el navegante de la cáscara) está muerto. Diego: No lo veo... Si el señor de nuestra historia, en vez de aceptar y reconocer el estímulo externo, se refugiara psicológicamente en la caverna de lo prohibido y pecaminoso, o bloqueara el estímulo, por ejemplo, mintiéndose a sí mismo, diciéndose que lo que siente por esa mujer, no es tan fuerte porque a ella le falta nivel cultural, o un simple estudio de conveniencias sociales o familiares, de pronto le hiciera “perder el apetito”... su auto complacencia estaría reprimida en el aspecto de la acción, pero vigente completamente en lo interior, en su corazón. Vanita: No entiendo. Lo expreso desde otro lugar. La renunciación de la persona del ejemplo, no estaría respondiendo al mandato de valores y principios reales, sino que, el estado de enfermedad o muerte de la que hablábamos, sería la causa de que él reprima, bloquee o llegue a la conclusión lógica de que la situación no es conveniente. Lo que busca en concreto, es no molestarse internamente, no tener problemas, no tener que salir de su estado, aunque esa molestia, signifique satisfacer su deseo. La buena acción desde allí, carece de monedas. Roy: Digamos que el “desde dónde” sería la complacencia... Así es. Ella, actuando en reemplazo del sentido de lo correcto Vanita: Pero... ¿Lo hace a propósito?... Quiero decir... ¿la persona se da cuenta de lo que está haciendo? No. Si no tiene trabajo de observación interna, no sólo no sabe qué está sucediendo, sino que ni siquiera se plantea el problema. Andrés: O sea que el estado de complacencia puede estar latente o manifiesto... Puede verse en actitudes sustentadas desde allí, o en estados que produce esa caída al vacío de la que hablamos. Correcto. Es fácil detectarlo cuando está literalmente toma la personalidad, pero reconocerla en su estado latente... conocerla tinte solapadamente, filtrándose en todos los

- 176 -

manifiesto, cuando lo interesante es cuando imprime su rincones del templo


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

interior, cuando decide, opta, elige, obra, razona, ama u odia por nosotros. Diego: ¿Cómo “por nosotros”? Diego es una persona. La complacencia es un estado de Diego, no su persona. Diego: ¡Ah! Sí... Cuesta reconocerlo así, pero es cierto. Siempre cuesta entender y aceptar que el estado no es uno. Recuerden todos que al momento en que decimos “Soy así” la puerta quedó sellada y no se puede producir cambio. Nadie “es así” porque nadie sabe verdaderamente “Quién es”... Somos un continuo proceso de cambio, igual que las células del cuerpo que siempre están, pero no son las mismas. Si no fuera así, este trabajo sería inútil. Diego: Lo que me falta ahora, es ver cual sería la alternativa que tendría el hombre del ejemplo, si no tuviera complacencia. Aceptar el estímulo, vivirlo, (no reprimirlo) y “molestando” su complacencia, renunciar, abnegar y aguantar “desde” el Deber Ser y “para” su Propósito. Desde la convicción, no desde la conveniencia o la confusión... Vanessa: O sea, todo lo que se hace y todo lo que no se hace, desde cualquier lugar interno incorrecto, como el miedo, el qué dirá la gente, la represión, o lo que sea, es puntualmente ¿“pecar en el corazón”? ¡Sí! Excelente. No sirve de nada mentirse a sí mismo, suponiendo, imaginando, o creyendo que se es correcto, cuando sólo se es formal o excesivamente adiestrado. Roy: El punto está en que, sinceramente, creo que la mayor parte del tiempo, el “desde dónde” que produce la acción de todos los días, es equivocado. ¿Qué se hace en ese caso? Observar ese “desde dónde” equivocado, conocerlo, tratar de localizar cuál es la causa y cuál su trayectoria. Ese conocimiento lo irá debilitando, hasta que ya no interfiera más. Cuando la última mentira caiga, la verdad se impone. La esencia del Hombre no sólo es sabia, es también valiente, fuerte, e incorruptible. Vanessa: ¡Pero no es tan fácil!... Uno se propone objetivos, pero al poco tiempo se cae en lo mismo.

- 177 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Es cierto. Son condicionantes muy arraigados, con raíces profundas, pero el desafío no consiste en llegar al objetivo, sino iniciarlo y luego persistir. Una vez que se está en carrera hay que estar tozudo y caprichoso como una mula y cada vez que descubrimos que estamos en error, simplemente volver a empezar, no una sino un millón de veces, sin críticas, sin sentirse miserable, perdedor, frustrado, ni ninguna de esas cosas tan propias del mal amor a sí mismo. Sólo empezar de nuevo, recordando aquello de “Rendirse nunca, retroceder jamás”. Un día... el menos pensado... miramos hacia adentro, y eso ya no está, o al menos, no domina. La virtud está en la perseverancia. Roy: Intelectualmente lo creo, pero no ingresa en mi la idea de que se pueda cambiar cualquier rasgo. Me da la sensación de que, de una u otra forma, uno está condenado, predestinado a llevar encima determinadas cosas. ¡Esa es la voz de la complacencia, no de la experiencia! Hay mucha gente así. En vez de proponer el cambio, se disculpan “a priori” argumentando un fatalismo que, en el fondo, no es otra cosa que una auto justificación. Hay que intentarlo no una, sino un millón de veces y después sabrán de todo saber, que no hay rasgo negativo que sobreviva a esa determinación. El éxito pasa por “querer hacerlo”. Andrés: Te digo que, lo que estamos conociendo como “complacencia” es muy diferente a lo que se entiende cotidianamente... Creo que todos deberíamos limpiar cualquier idea anterior, no relacionarla con nada y así sería más simple. Vanessa: ¡Hasta hoy, para mí ser auto complaciente, significaba mimarme, darme gustos, buscar satisfacción, pero nada que ver con lo que estamos tratando! ¡Estoy sorprendida! Hay que diferenciar la actitud complaciente, del estado. Las actitudes, se incorporan o se sacan como programas de una computadora. En cambio, los estados nacen con el hombre, son inherentes a la raza y el verdadero desafío consiste en transmutarlos... no en quitarlos. Tomar esa masa entre las manos y convertirla en un cristal, en un algo valioso. Vanita: Si pudiéramos salir de ese estado y transformarlo ¿Qué cambio tendríamos nosotros?... A lo mejor entendiendo el objetivo, me queda más claro el punto de partida, ¿no? Cambiarían el estado de conciencia. No haría falta fantasear con viajes astrales... Entrarían en una nueva sintonía universal. Pero ¿Qué importa eso, si todavía no empezaron? Aún sin garantías de

- 178 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

llegar a la excelencia, el sólo hecho de descubrir la influencia del estado de complacencia no sólo en tu vida, sino en todas las circunstancias que te rodean, es un panorama que vale la pena el intento. Vanessa: ¿Por dónde se comienza la observación? Por ver y detallar en sus diarios, todo lo que se hace y se deja de hacer, con tal de “no molestar algo interno”. ¡Prepárense para un arduo trabajo que les ocupará el resto de sus vidas!... Hay cantidad de niveles, cantidad de grados y al menos, siete formas diferentes de complacencia: además de esa básica y obvia que distinguimos al comienzo de la charla y que proviene del ego en su expresión más primitiva, hay complacencia instintiva, emocional, mental, psíquica, física, espiritual. Vanita: La complacencia física es la que uno no hace ni el menor esfuerzo muscular... ¿Cuál sería un ejemplo de la instintiva? En grandes manifestaciones, la gula y la lujuria. En lo más cotidiano, apurarse para comer y quedarse con la última masita de la bandeja, es un buen ejemplo. (Risas y comentarios) Vanessa: Un ejemplo de complacencia emocional, ¿puede ser la falta de compromiso con los demás? Sí, es muy buen ejemplo. En lo muy sutil, podemos mencionar la incapacidad de admirar. Descubrir en el otro y para el otro algo positivo que admirar, implica darle un empujón a la envidia. ¡Todo un trabajo interno! Diego: Ahí me perdí. No lo veo Para admirar (y no envidiar) algo o alguien, la emoción debe dejar la auto contemplación y “molestarse” es decir “girar” hacia otra persona o lugar... “movilizar” valores y aplicarlos. ¡Todo un esfuerzo!... Lo mismo ocurre con el aprendizaje en la zona mental. Fíjense que para incorporar algo nuevo, algo que contradice lo que teníamos integrado, es necesario salir de lo cómodo y placentero de sentir que “sabemos”, para realizar un esfuerzo que nos prive, que más no sea un instante, de la propia sensación de seguridad. Andrés: ¡Claro! ¡La complacencia y la sensación de seguridad van unidas, por lo tanto, debe actuar como antídoto contra el miedo!

- 179 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

No como antídoto, sí como placebo. La auto complacencia crece a espaldas del miedo, digamos que sentados hombro a hombro, pero a la vez se sustentan y aún se complementan... ¿Muy enredado, no? Andrés: ¡No!... ¡Me parece muy interesante! Como siempre, no intelectualicen conceptos, que eso sólo los enredan. Sólo observen, investiguen, mantengan vivo lo conversado y con el tiempo, se irá desenredando la madeja. Roy: En este trabajo, ¿dónde puede estar la trampa? En primer lugar, hay que tener especial cuidado en no caer en culpa negativa. Vanita: ¿Qué es, la culpa negativa? Ante lo que se va descubriendo, evitar entrar en diálogos internos con mensajes similares a: ¿Cómo va a estar esto tan feo en mí?... ¿Cómo es posible que yo sea esto?... o temas como ¿Por qué hice esto o por qué no lo hice?. Igual que otros aspectos negativos, la complacencia está ahí, nos guste o no. Esto es igual a detenerse frente a un espejo y sufrir porque un granito entorpece la estética de nuestra piel. El sufrimiento no es valedero, sino la clara manifestación del narcisismo: “¡Horror!... ¡Cómo alguien tan bello puede estar así desfigurado!”. En este caso, clavarse los puñales es auto engaño y no sirve para nada. Andrés: ¿Qué es lo que sirve? La vergüenza de sí mismo. Sacar el polvo de los tiempos a la palabra “arrepentimiento” y emplearla realmente. Roy: ¿Es estúpido preguntar cómo se hace para sentir arrepentimiento y qué diferencia tiene con la culpa? Muy por el contrario. Es una excelente pregunta. La culpa negativa es un reproche que uno se hace a sí mismo, por no haber cumplido con las expectativas que tenemos de nosotros mismos. Empieza en el Ego y termina en el Ego... después de beneficiar al Ego. Ahí no puede haber cambio. La sociedad tiene el master de hacer sentir culpable a la gente: culpable de no ser exitoso, culpable de no mantener el físico espléndido, culpable de estar fuera de moda, culpable de ser atípico... culpable de no tener, hacer o sentir como la inmensa mayoría... Y la presión es tan grande, que más de una persona entra en estado de complacencia, sólo para “estar acorde” y no sentir “culpa social”

- 180 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Diego: Sí, es así. Pero no hay manera de sustraerse a eso... Es muy fuerte ese mensaje que se recibe, no sé por qué vía, pero se recibe. Vanita: Lo aceptás o te condenan a la soledad. Roy: Yo eso lo tengo visto y lo digo de otra manera. La sociedad te ofrece un montón de alternativas pre hechas y te dice “elegí”: podés inclinarte hacia el comunista, o al consumista, al cheto o al rollinga, al dark o al nerd, todo siempre dentro del mismo circo. Son todas latas de sardinas. Una vez que entrás te cierran la tapa sobre la cabeza y la sociedad te beneficia con la medalla a la “Pertenencia a algo”, es decir, ya no sos nada. Lo que no está permitido, es ser algo diferente, ser individuo. Peor aún, si querés ser individuo, podés poner una etiqueta y allí van a sectorizarse “los que quieren ser individuos” que en definitiva no son, sino otra lata: La lata de los rebeldes a las latas. Lo espantoso de esto, es que no hay latas mejores o peores... ¡Todo vale, y todo tiene el mismo sabor y el mismo precio!...No hay mejor ni peor... La única condición es que pertenezcas a una lata y que no molestes. ¿Qué se puede hacer con eso? En principio estudiarlo como un fenómeno. Lo que acabás de describir es el producto, justamente, de una sociedad complaciente: “Mientras no molestes, todo está bien”. Ese es el mensaje subyacente. Es la expresión cabal de la ausencia de Valores y Principios. ¡Nadie se compromete a nada ni se juega por nada! No hay verdades, sólo hay opciones dentro de una gran amalgama de mentiras. La consigna es que pertenezcas a algo que se sirva de vos... Muy por el contrario, cuando el Paradigma Olvidado estaba vigente, las personas se nutrían de un ideal, en vez de ser absorbidos por propósitos indefinibles. Vanessa: Eso también ocurre cuando los padres ponen los chicos frente al televisor para que se entretengan y no molesten. ¡Por supuesto! Educar, comunicar, establecer valores, consignas, dar y darse en tiempo y sacrificio, requiere dejar de “estar ocupado en otras cosas”... es decir: salir de la complacencia. El resultado de eso es engendrar más complacientes. Un gran grupo de complacientes crea un ente masa, y un gran ente masa, es una orden a la sociedad que el resto de los individuos obedece. Diego: ¿Qué hacer con esto? ¿Cómo evitar enlatarse? Observar la culpa de la que hablamos, y no permitir que se instale, porque es manipuladora y no genuina. Si conduce a algún lado, es exactamente el lado contrario al Deber Ser. Es importante que aprendan a establecer el propósito final de cada una de las “latas” a fin de discernir si completa al hombre, lo destruye o lo

- 181 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

limita. Si ese propósito, esa finalidad, sirve de alimento, de estímulo hacia algo, o simplemente es una olla donde los ponen a cocinar, para que sean ustedes la res que alimenta al objetivo. Si toman distancia y pueden establecer esta diferencia, no correrán riegos. Roy: ¿Y como hago para hacer algo diferente, sin que sea otra lata en el menú de “opciones para nada”? Establecer tu propósito. Si éste es “juntar los rebeldes al sistema” estás haciendo más de lo mismo. El “desde dónde”, debe trascender la rebeldía sistemática y el “para qué” debe ser concreto, puntual, absolutamente definido, fuera del interés personal y constituir un foco, una meta, un ideal donde llegar. Roy: ¿Un nuevo paradigma? ...O reflotar uno viejo y olvidado. (Risas y comentarios) Lo importante es resistir al imperio de la complacencia. No combatir: resistir. Si simplemente te oponés, estás combatiendo. Andrés: ¿Por qué no hay que combatir? Porque se multiplicaría y se fortalecería en la oposición, y ya de eso hay suficiente. Diego: ¿Sobre qué estímulo se puede tomar fuerzas para resistir, o abstenerse o combatir? Se habla mucho de la auto estima. Un buen nivel de auto estima, es suficiente estímulo para desear fervientemente sostenerse como persona, en vez de transformarse en comida, para quien sabe quien. Diego: Para lograr que esa culpa social no influya ¿Cómo hay que hacer? Conocerla. Observarla. Darte cuenta cada vez que actúa sobre vos. La mentira no resiste al ojo de la verdad. En poco tiempo, no tendrá poder sobre vos. Vanessa: ¿Sabés la cantidad de trasgresiones que hacemos, por no tener que sufrir esa culpa? ¡Claro que lo sé!... La anorexia, la bulimia, las trasgresiones sexuales y aún la drogadicción son ejemplo cabal de aceptar esa

- 182 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

culpa... Por eso convoqué a estas charlas, es una manera de reparación por el hecho de ser parte de una sociedad complaciente que, ante la visión de que se desmorona gran parte de la generación del futuro, en lo único que piensa es en su propia quintita... Además, en mi juventud, también tuve que pagar un precio muy alto por mi estupidez. Vanita: ¿Qué precio? Darme cuenta de todas las trasgresiones a mi ser íntimo que había cometido, por no “faltarle a la sociedad” y las consecuencias que eso tuvo en mi vida... ¡Es un precio caro!... Después aprendí a respetarla y considerarla dentro de sus parámetros, pero también aprendí a no ser permeable, ni sugestionable, ni dependiente de ella. Al cambiar el orden de prioridad, primero quedó lo correcto, el Deber ser, después el agradar a la sociedad, y eso, en tanto y en cuanto no dañe mi primer objetivo... La clave está en darse cuenta de lo que sucede, el resto viene solo y sin necesidad de violencia. Andrés: Nos quedó pendiente el tema del arrepentimiento. Sí... Justamente, cuando me di cuenta que, por coquetear con la sociedad, había arruinado muchas cosas esenciales de mi vida, sentí verdadero arrepentimiento. No es que quedaba bien o mal con algo o alguien, no es que hubiera logrado más o menos beneficios de haber seguido otra conducta. No me sentí “culpable” por las consecuencias, sino avergonzada de haber traicionado mi voz interior... Cuando uno se mira en ese punto, no hay excusas. Ante la evidencia se desmorona la soberbia, la conveniencia, la especulación... se hacen trizas todos los ensayos de perdón, no queda ni una sola soga donde sujetarse: La evidencia habla y uno ingresa en un profundo silencio de humildad, donde Dios es cada vez más grande. Eso es arrepentirse. Diego: Es decir, no es que la elección no fuera la más conveniente, sino que lo sentiste como una traición a vos misma. Eso es. Pero con una diferencia. Es algo más que una traición a mi misma, es una traición al plan de Esperanza que el Amor había puesto en mí. Traición a algo que mi Alma sabía, pero que por un tiempo, preferí no escuchar. Eso es mucho más punzante. Estaba donde no debía estar, internamente hablando, por supuesto, y todo esto a cambio de “ser como los demás”... Sé que la experiencia es intransferible, pero... ¡cómo quisiera contagiarla!... Andrés: Es muy interesante lo que decís. Creo que de una u otra manera, todos los seres humanos nos traicionamos en ese sentido.

- 183 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Lo que quiero rescatar de este tema personal que traigo a la charla, es que para existir arrepentimiento, no debe mediar ninguna conveniencia, ningún alivio, no debe producir ningún efecto paralelo. Contrario a la “culpa” de la que hablábamos, no es un canje a la manera de “te doy mi culpa y vos me das tu estima o tu perdón”... o “Hago lo que vos querés y después me sonreís”... ¡No es eso! El arrepentimiento no es un fin, no es un negocio rentable ni una transacción comercial, sino una consecuencia inevitable ante la comprobación fehaciente del error. Diego: ¡La culpa sí es un fin en sí misma! Sí. Justamente, que te sientas culpable, es la finalidad. Cuando alguien está bajo el dominio de esa culpa negativa, está en deuda con todos, disminuido por el pecado de no haber satisfecho tal o cual expectativa. Desde ese lugar viene la auto trasgresión a sí mismo, a sus deberes eserales, y a su convicción. Por el contrario, al arrepentimiento no te conduce nadie, sino tu propia evidencia de haber fallado seriamente a algo superior a tu presunción de ser. Vanita: Y una vez que estás ahí... ¿Qué pasa? ... ¿Cargás con eso toda la vida? Según como lo veas, y desde donde. Si hablás de autoreproche, clavarte puñales y demás torturas mentales, la respuesta es no. Ese es el patrimonio de la culpa infligida, y lo único para lo cuál es útil, es para debilitar la persona... Ahora, si hablás de llevar constancia del error, sin mega espectáculos, sin falsa humildad, y llevarlo consigo como un referente que aliente a reparar, para que guíe para no reincidir, que marque un camino para alertar, entonces, la respuesta es sí... Además, no hay que tener miedo a hacerse responsable de lo que a uno le corresponde, sin alardes ni manejos psicológicos enfermos. Más aún, el no hacerlo, es auto complacencia. Andrés: Ya que volvimos al tema: ¿Cuál es la puerta de entrada al estado de complacencia? El ocio conduce allí, el hastío lo sostiene. Me han oído decir hasta el cansancio, que por ninguna razón la atención debe estar dispersa. Se dice que “El ocio es madre de todos los vicios”... Y es cierto. ¡Fíjense qué interesante!... Ahora me doy cuenta... ¡La educación en las generaciones antiguas, se basaba precisamente en impedir el ocio y conformaba una sociedad mucho más apta al ejercicio de los Valores y Principios!

- 184 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Vanessa: ¡Sí!... Eso se ve en las películas... Las mujeres siempre están bordando o tejiendo... y los hombres siempre activos, apurados... como que no tenían nunca mucho tiempo disponible... ¿No? Roy: No te vayas tan lejos... Hoy mismo en los monasterios de todas las religiones del mundo, pasa lo mismo. La actividad es constante. Diego: ...Pero tampoco se puede estar estresado todo el día, corriendo de obligación en obligación. Desde ya que no. ¿Alguna vez supiste de un monje estresado?... Escuchen lo que voy a indicarles, y después de intentarlo me cuentan el resultado. Si estuve estudiando todo el día, es mi centro mental el que estará agotado y no, como se presume, “toda mi persona”. Los otros dos, y aún mi cuerpo, estarán disponibles y completitos de energía, para realizar tareas. Así, tendré margen para limpiar la casa, ordenar placares, dibujar, pintar, tejer. Ordenar papeles, escribir, conversar con mis seres queridos, realizar artesanías, cocinar, leer algo fresco... y ¿Por qué no? ver televisión, es decir, buscar concretamente un programa que me interese y estar en esa propuesta y no en mi aburrimiento. La primera parte del día, el hecho de estudiar, fue una obligación. Entre las otras opciones planteadas, hay muchas de distracción. ¡No hay razón alguna para adicionar estrés a esas actividades! Vanessa: Pero... ¡seguís haciendo cosas! ¿Cuándo descansás? El descanso consiste en cambiar de centro de actividad y no en desplomarse como un lagarto. ¡Eso no es necesario! Las energías se recuperan cuando se cambia de centro, y cuando se realiza una tarea por placer y no por obligación. Tener las manos ocupadas siempre, es un gran antídoto contra el ocio improductivo. Vanita: Entonces... ¿Nunca hay que estar sin hacer nada? ¡Nunca! Vanita: Y cuando estás viajando en el colectivo ¿Qué hacés? ¡Viajar!... no durar. También podés leer, conversar, redescubrir el paisaje... Observen que la mayoría de las personas viajan tomados por la complacencia, con caras de “nada”... aburridos de sí mismos. La famosa rutina, es la incapacidad propia de ver lo mismo desde un lado diferente, es decir, no molestar a la auto complacencia. Vanessa: ¡No parar nunca!... ¡Me canso, de sólo pensarlo! (Risas y comentarios)

- 185 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Vamos a verlo desde un lado práctico... Para tener respeto por uno mismo, es indispensable ser la misma persona cuando estamos con público, que cuando estamos a solas y a oscuras en una habitación. Eso produce un gran descanso y una enorme recarga de energías, porque nada altera más, que el hecho de tener que sostener una mentira. ¿Están de acuerdo? Vanita: Sí. Totalmente Bien: ¿Qué cara pondrían esas princesas y príncipes azules que ocupan sus cabecitas, si entraran repentinamente en una habitación y los vieran en “estado de complacencia”? Vanessa: ¡Noooo! ¡Por Dios! (Risas y comentarios) Entonces en vez de sostener una imagen, vamos a ser coincidentes en lo externo y en lo interno. La propuesta es que seamos la misma persona en casa, que cuando salimos de casa, así nadie vivirá sobresaltado con que se abra una puerta, ni nadie saldrá decepcionado... Esta es una buena receta para ir desprendiendo lo que no debe estar. Vanita: Pregunto... ¿Uno nunca se tiene que dar un gustito... chiquitito así, aunque más no sea? (Risas y comentarios) Y... ¿Por qué no? Se están confundiendo nuevamente. Salir del estado de complacencia no tiene nada que ver con hacer vida de ascetismo puro. Vanita: ¡Ah! Muchas veces es necesario darse un gusto. No hay que llevar a la Naturaleza a un estado de rebeldía, porque se anarquiza. En el Templo de Delfos, detrás de la consigna que decía “Conócete a ti mismo” había otra, sabia y complementaria: “Nada en demasía”. Siempre hay que buscar el equilibro... ¿Saben ustedes establecer qué diferencia hay entre estado de complacencia, placer, y autosatisfacción? Diego: El estado de complacencia, creo que quedó claro. El placer... tiene que ver con satisfacer los sentidos, lo que no tengo muy claro es la autosatisfacción.

- 186 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Vanessa: ¿No es pariente cercano de la complacencia? Está bien lo que dijo Diego: la complacencia es el Ego manifestado. El placer es la gratificación de lo sensorio, mientras que la auto satisfacción, si tiene un buen “desde donde”, es el goce del deber cumplido, una alegría esencial a la cual todo ser humano tiene derecho. Vanita: O sea... ¿No es egoísta estar contentos por lo que hicimos bien? El que está alegre, quiéralo o no, siempre glorifica a Dios. ¡Aunque él mismo no se de cuenta!... Egoísmo sería el que, recibiendo un bien de la vida, no supieras agradecerlo con su alegría... ¡Qué cosa! ¡Siempre se van a los extremos, y nunca logran ver el camino del medio!... El hecho de no saber disfrutar de los bienes recibidos, implica, de alguna manera, que nos sentimos merecedores de recibir más y mejor. Eso es soberbia. Vanita: ¡Soberbio y un agrio total! A mí eso no me pasa... Siempre que puedo, estoy alegre. Roy ¡Paren!... Acabo de ver algo interesante... El no ser capaz de tener alegría con el bien recibido... ¡Es una manifestación del estado de complacencia! Andrés: ¿Cómo es eso? Diego: ¿De qué manera? Roy: ¡No sé cómo explicarlo! A ver... Si uno está en complacencia, nada le es suficiente, siempre tiene cara de llevar el palo en el.... y además, no tiene capacidad de disfrute... Andrés: ¡Sí! ¡Tal cual! ¡Se anula la capacidad de vibrar! Es así. Dicho de otra manera: el sapo del Ego se come el deleite, y al Alma... no le llega nada. Justamente, otra característica es que, cuando se sale de ella, no deja ninguna energía sublime. Por eso, la complacencia es el asiento del “No Amor”, que no necesariamente, es el odio. La persona complaciente está anestesiada a cualquier vibración. Su vida no es una escala musical, sino la repetición monocorde de una sola nota: yo... yo... yo... Vanita: ¿La persona se valora a sí misma, más que a nadie?

El

¡Ni siquiera eso! Quien se otorga un valor adicional, es soberbio. soberbio vibra como un chillido agudo, pero vibra. El

- 187 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

complaciente es una plasta monocorde... Sólo busca “estar bien”, es decir, en su propia abulia y que no lo molesten. Ese es su propósito de vida, su foco: Que nadie lo moleste, que nada interrumpa la formación de sus gelatinas interiores... Como una verdadera fábrica de degradar, allí dentro todo se minimiza, se achata. Diego: ¿Es potencialmente un descalificador? El descalificador tiene la satisfacción, el placer de destruir. Es decir, hay movimiento, hay sensación, hay goce... ¡negativo!... pero goce al fin. Si al complaciente le hiciéramos un electro, en vez de tener montañitas que suben y bajan, veríamos una sola larga línea que se altera, solamente, cuando se lo “molesta”, es decir, cuando se pretende que salga de su abulia, del goce sordo, de sí mismo... Roy: ¡Es una persona chata! Lo es en lo interno, pero no necesariamente lo manifieste en lo externo. Tal vez en apariencia, sea activo. Hay personas que desarrollan enorme cantidad de actividades eficientes, pero que son incapaces de dar un solo segundo, ni siquiera para sus más caros afectos. “Están en lo suyo” y el resto del mundo, “que no moleste”. Andrés: El ejemplo es interesante, porque “lo suyo” es la actividad y el trabajo, ese es el hilo conductor que lo mantiene sujeto a la complacencia... Se entrega la complacencia al trabajo o al movimiento... ¡Es bastante difícil de detectar! Bien acotado. El estado complaciente se esconde detrás del irresponsable como del diligente, del instruido como del ignorante, del niño como del adulto, del atleta como del sedentario, del religioso como del ateo... Sólo cuando brota, toma características definibles, como las estuvimos viendo, y esa es la señal, la pista que nos permite reconocerlo en una primera “presentación”. Roy: Hablaste de la puerta de entrada: el ocio, el estar en nada... Pregunto: Además, ¿hay alguna causa, algo que explique por qué existe este estado? La hay. Dijimos que se cae en vacío. La causa de la complacencia es la preexistencia de ese vacío. Roy: Sí. Esta claro.

- 188 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

¡No señor! ¡No está nada claro!... Hiciste una pregunta y no la sostenés. Tu mente no está donde debe estar. No es completa la respuesta, si no se explica cómo y por qué se hace ese vacío. Roy: ¡Cierto! Perdón. Pregunto nuevamente: ¿Cómo y por qué se forma ese vacío? Pongan especial atención en lo que voy a decir: Cada cosa que no observamos, cada estado del cual no somos concientes y que queda en el plano de lo subconsciente, va formando un agujero. Muchos agujeros hacen un pozo, un gran pozo abre un gran vacío abismal. Vanita: ¡Ah! Ahora entiendo por qué nadie se salva del estado de complacencia... ¡Es un problema imposible de evitar! ¿Quién puede saber todo lo que tiene su subconsciente? Andrés: ¡Me encantó! ¡Esto es espectacular!... ¡El vacío está lleno de todas las cosas que uno ignora de sí mismo! ¡Ahora entiendo por qué en ese estado hay muy poco nivel de observación, ninguna definición y grandes cúmulos de gelatina... ¡Todo cierra perfectamente! Vanessa: Entonces también tiene relación con el nivel intelectual. A menor cultura, más grande el pozo... No. Todo lo contrario. Una persona sin excesivos pájaros intelectuales tiene mucho mejor acceso a su interior, que otro que está lleno de conceptos. Observen por experiencia propia: A mayor claridad interior, menor estado de complacencia... Roy: O sea. Si nosotros seguimos con el trabajo de auto conocimiento, es posible que en algún momento, ya no caigamos en ese vacío... Si llegara el hipotético día en que supieras todos tus “desde dónde” y “para qué” de todos tus movimientos intelectuales y emocionales, todavía quedarían en la oscuridad, no solamente los del plano instintivo, sino aquellos que a la fecha, se ocultan irremediablemente en ese pozo. Si no podés observar ¿Cómo pensás sacarlos? Roy: ¿Entonces? Ese no es el método. Lo común es que en algún momento “se salga” de ese agujero, de la misma forma en que “se entró”: sin saber por qué, ni cómo, ni donde, pero eso así, no sirve. No hay conocimiento, por lo tanto, habrá recaída. Lo peor es que, cada recaída, profundiza más ese vacío, hasta que, finalmente, se hace un “nocivo hábitat”.

- 189 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Diego: ¿Existen casos tan graves? Busquen, miren, observen. ¡No busquen respuestas de catálogo! ¡Claro que está lleno de casos tan agudos! Vanita: Si caemos en ese abismo, sin darnos cuenta y porque no sabíamos que estaba, entonces... ¡No tenemos culpa! Eso que dijiste, se llama auto justificación. Culpa, no. Responsabilidad, sí. Es el engañador el que nos dice que no es nuestro y que no nos ocupemos de él. Durante el tiempo que el agujero se hacía pozo y el pozo se ensanchaba en abismo... ¿Qué hacíamos nosotros? ¿Dónde estábamos?... ¿Idiotizados con la computadora? ¿Absortos en la caja boba? ¿Evadidos en la telenovela de la tarde? ¿Qué método de evasión habíamos elegido? Andrés: Si ese vacío no se puede observar porque el Ego absorbe la mayor parte de la atención, si no se pueden emplear yoes para evitar caer ahí, porque es un estado de ausencia de contenidos de personalidad... Si no se puede sacar lo que estaba, porque no hay forma de develar el misterio... Por otro lado, se ignora cómo se entra y de qué manera se sale... El intelecto y lo aprendido no se puede aplicar, porque no sirve... La voluntad queda paralizada y el Propósito de vida, borrado. Entonces ¿Qué queda?... ¿Hay alguna fórmula para no caer en ese estado de estupidez? No tengo fórmulas. Si te digo que para evitar ese estado, la fórmula es darte tres baños diarios de inmersión con naftalina... lo vas a hacer, sólo para aplicar el auto tranquilizador interno, pero no tendrás ningún resultado. Primero hay que darse cuenta que ese estado está y que no es un invento. A partir de comprobarlo, hay que aprender a llenarlo, aprender a poner adoquines en cada caída, de manera tal que, cada vez, sea menos profundo. Andrés: ¡Bien! ¿Qué son esos adoquines y como se construyen? Es un proceso difícil y doloroso, imposible de realizar si no hay un Foco cierto, una convicción profunda y genuina. Justamente porque no se puede salir de ese estado utilizando la auto observación, dado que la atención está absorbida por el Ego, debemos ceder parte de ese Ego a Dios, con abnegaciones. Vanessa: ¿Qué hay que abnegar? Todo. El placer y el displacer producido por la complacencia, la obnubilación, el desgano, la necesidad de abandonarse... Vanessa: Es decir, hacer un gran esfuerzo por salir.

- 190 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

No, todo lo contrario. Eso sería ponerte en dualidad estado, y en esa compulsa, seguro que te gana él. Hablo de ofrecer a Dios, desprendiéndose de todo protagonismo, calificación, pretensión de salir de allí. Aceptarlo como merecida y ofrecer el estado en inmolación...

con el sufrir y deseo, prueba

Andrés: Si pudiéramos hacerlo ¿ya no volveríamos a caer? ¡Ojalá fuera así!... No, cada vez que realizás y lográs esa abnegación, lo que hiciste es formar un adoquín y colocarlo en el agujero. Así el abismo será unos centímetros menos profundo. A lo largo del tiempo, adoquín por adoquín, en ese vacío se construye la escalera de Jacob. Diego: ¿Adonde conduce esa escalera? Exactamente a la puerta del Paraíso Perdido... Vanessa: ¿En serio? Tras la caída de la primera pareja, la humanidad es castigada con la pérdida de la “visión de Dios”, es decir, pierde conciencia objetiva y se activa el árbol de la subjetividad. En ese estado, “nada es”, pero todo “podría ser”. En esa confusión se pierde claridad y lo que debería ser consciente, pasa a ser subconsciente... Roy: ¡Y todo lo que no vemos y queda allí, forma el agujero de la complacencia! El desafío es desandar ese camino, construyendo la escalera de Jacob donde ahora hay un abismo. Cada escalón, es un acto de incondicionalidad hacia Dios. Andrés: ¿Cuándo se termina de construir esa Escalera? Cuando toda tu complacencia, está en Dios. Ese es el punto extremo óptimo de la No complacencia: La complacencia en Dios. Vanita ¿Cómo es ese estado? Toda esa base sobre la cual se fundamenta la vida del hombre egoísta, esa cámara de nutrición, se abnega totalmente a la Fuente de Creación. El máximo Ego ofrecido a Él. ¡Es un espectáculo maravilloso! Esa entrega incondicional, explica los estados de éxtasis que alcanzan los santos y también explica el primer plano que ocupa en ellos los Valores y Principios del Alma, ante los

- 191 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

cuales, ninguna vida tiene más valor. La auto complacencia no interfiere, y eso posibilita que los atributos esenciales brillen con todo el esplendor. Roy: Traducido, es una entrega total. Es el único cofre de caudal que tenemos, para pagar el boleto de regreso al Paraíso. ¿Qué otra cosa puede dar el Hombre a Dios?... Bien, no sé por qué hay tanta preocupación por detectar el síntoma afuera, cuando cada uno de ustedes manifestó conocerlo desde adentro. Vanessa: Sí, pero como estados momentáneos. Después pasan... Eso es lo que se cree. Pasa hasta que deja de pasar y se queda. Ya no son estados esporádicos, sino que se encarna como estado permanente. ¡Ese es el riesgo! Porque es ahí cuando se pierden totalmente los atributos del alma, y ese pantano es el lugar de fermento de todos los entes y del Descalificador. Vanita: ¿La cuna del Descalificador? Sí, ahí nace. Desde ahí convence a quien gobierna, que todo es una gran masa informe, que nada existe superior a sí mismo, que se nace para gozar y nada más, que la única ley es la ventaja, la ironía, la burla. Desde ahí se corroen los cimientos de todo cuanto tiene valor: el amor es una pavada, la pureza un complejo de inferioridad, la virtud algo pasado de moda, la bondad es estupidez. Reduce, rebaja, minimiza todo a su pequeña altura. No permite que nada sobresalga, no reconoce autoridad alguna. Desacraliza, mastica lo esencial, devora el sostén espiritual, la moral genuina. Desde allí, el odio, la venganza, el resentimiento, la degradación, tienen campo libre para manifestarse. La misión es resquebrajar, romper la unidad del hombre consigo mismo y la del hombre con Dios. Lo grave es que, cuando ese engendro de la complacencia termina la obra destructiva con su progenitor, se lanza sobre otras personas para devorar todo aquello que tenga belleza, amor, sabiduría y paz. Roy: Frente a todo esto, tengo la sensación de ser un mosquito, tratando de escalar el Aconcagua... ¿Con qué herramientas se hace todo eso? La convicción exige que uno esté incorruptible, inconmovible y agudos y cortantes (lo que es, es). El Paradigma no admite auto compasión. Si tu convicción es Dios, lo lograrás.

- 192 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

CIERRE DEL CAPÍTULO Espero que hayan logrado recorrer el capítulo resistiendo a la tentación de buscar encasillar. Porque, como se habrán dado cuenta, nos encontrábamos frente a un despliegue exuberante de manjares para ser devorados por nuestras teóricas y comparativas mentes. Al menos para aquellos que padecemos esa costumbre y solemos caer en los encantos de esta complacencia... La primer invitación al banquete es la referida a los Valores y Principios. Y están escritos con mayúscula porque es necesario diferenciarlos de las morales y costumbres que puede tener cada cultura. Éstas (morales y costumbres) nos convierten en pensantes animales domesticados o, si preferimos otra analogía, algo así como máquinas adaptadas. Se nos recompensará o castigará (o nos recompensaremos y castigaremos) por los grados de adaptación que cumplimos y, de esta manera, creeremos que en eso consiste y termina la vida. Entonces, viviremos encarnando personajes permitidos y aceptados por la sociedad y cultura de turno o, como consecuencia de la disconformidad, podremos adoptar personajes que se rebelan a lo esperado y valorado positivamente. Por supuesto, cada uno en su "lata", nos complacemos por lo "bueno que somos" o por lo "rebelde e inconformista" en una lucha contra el "matrix" que nos duerme cotidianamente. Para todos existe un envase, y si no, se construye rápidamente. Y el sellado del envase se compone de autocomplacencia. Dime en que lata estás, y te diré de que te complaces... El Paradigma nos dice que hay otra zona, poco transitada, y que desde ella en cada uno de nosotros, operan Principios y Valores, leyes con carácter inmutable. "Lo que es..." . Y para descubrirlas, es necesario salir de la condición de "como si" en la cual estamos complacientemente asentados aunque, por supuesto, estemos convencidos de que eso les pasa a los demás; “a un esclarecido e iconoclasta como yo, instalado más allá del bien y del mal,... por supuesto que no..." podrían pensar algunos que, por supuesto, deben considerarse formando parte de la selecta minoría de algún "club de esclarecidos". Así es como se van formando las diferentes asociaciones y clubes de la verdad, con sus usos y costumbres, reglas de admisión y pertenencia, conformismos, rebeliones y culpas por infringir el dogma correspondiente al ego ideal esperado en cada condición. La culpa llamada "negativa" está formada por no adecuar nuestro ego a las normas que indican que podemos sentirnos tranquilos y complacidos porque estamos ejerciendo una buena adscripción. Y por lo tanto, somos reconocidos por los demás como admirables miembros del club al cual pertenecemos. Como verán, la primera trampa no está en la sociedad o en la cultura frente a la cual hay que rebelarse. Está en la complacencia en cada uno de nosotros frente a la cual hay que resistirse. Y esta resistencia es un trabajo personal, que puede sostenerse con los otros; (cada uno pelea en su ring,

- 193 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

y los otros ayudan y alientan desde fuera). Y para que puedan existir otros como tales, es necesario trascender esa autocomplacencia. Amar al prójimo como a uno mismo... Conócete a ti mismo... vuelve a estar presente como regla de oro del paradigma. Descubrir el "desde dónde y para qué actuamos", las respuestas que pueden sacarnos del juego de cajas chinas en el cual estamos sumergidos. El camino a transitar, es agudo y fino como el filo de una navaja. Ni hacia un lado ni hacia el otro, ..nada en demasía... (nada en complacencia). Porque podrán comprobar que basta encontrar y saborear el gusto de alguna vuelta ganada para que ella, la complacencia, busque cristalizarse en lo que popularmente se conoce como "dormirse en los laureles" o "creérsela". A partir de ese momento, el camino ya está allanado para cualquiera de los estados conocidos como Pecados Capitales con la consecuente pérdida de alegría, amor, capacidad de asombro y de aprendizaje. Síntomas que, si estamos atentos, nos permiten en forma rápida, poder detectar su presencia. No es tarea fácil, sobre todo cuando estamos tan acostumbrados a convivir con ella y crear autojustificaciones para "embellecer" y hacer más tolerables las imágenes que construimos de nosotros mismos, o sea las imágenes aceptadas para los miembros del club al cual adscribimos. Esta perspectiva nos puede acercar a entender lo que realmente significa cargar nuestra cruz, sin disculpas y con alegría. La meta para lograrlo sólo puede estar puesta en el propósito de "conocerse para salir de ese estado", si fuera otra sólo sería una nueva invitación a la complacencia. Espero que, para muchos que creen que la abnegación y cosas tales como someterse a privaciones o sacrificios son pura expresión de conductas masoquistas, puedan redimensionar el alcance de tales actos y encontrar que, por ejemplo sufrir o no sufrir, no hacen especialmente al estado de complacencia, ya que éste reposa como gran telón de fondo de nuestras vidas ocupando el lugar del "gran desde dónde" operamos nuestros actos y sentidos. Algo así como el "Windows" del Ego, en donde todo lo que se graba son programas diseñados y manejados algorítmicamente para cumplir un propósito, autocomplacerse y replicarse. Si el desde dónde es la complacencia, no importa lo que seamos o hagamos, el para qué siempre va a ser el mismo y sus consecuencias se expresarán en la pérdida de libertad y dependencia de los más profundos y reales tiranos, aquellos que nos privan de estados como los de Amor, Alegría, Paz, Piedad, Humildad, Sabiduría, enjaulando nuestra alma y alejándonos de lo más humanamente genuino y esencial. El trabajo de descubrimiento y salida de este gran tirano requiere mucho coraje y dedicación permanente. El mayor esfuerzo es el de descentramiento al cual debemos someternos, o sea desidentificación de todo aquello en lo cual nos rotulamos y nos decimos "esto soy yo" o "así soy yo".

- 194 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

Una de las más difíciles trampas que he encontrado es aquella del club formado por personajes "espirituales". Estos se complacen en su pureza lograda en estados de relajación y tranquilidad en donde todo aparece como un "no me saquen de este estado de flotación".... "Dios me ama y está para complacerme en esta vida"... . Esto sería una de las formas de un Dios para la autocomplacencia, que suele confundirse con la complacencia en Dios. La persona se encierra en sus personajes resonantes a esta cosmovisión, se centra en su "armonía" y "transmisión de la paz" al resto del mundo, que traducido a los términos de la complacencia se puede entender como: anestesiar al resto para que no le traigan complicaciones que la sacan de su autoencantamiento. Por lo general, algunos indicadores de que estamos en complacencia se pueden detectar en la primer reacción que nos sale ante alguna demanda del medio: como por ejemplo el tradicional "ufa" o alguna forma de "puff"... . También en casos como puede ser el desafío de autoconocimiento, un: ..."si pero..., esto es muy difícil"... "me complica la vida, es muy rebuscado, la vida es más sencilla"... . Le siguen, por lo general, una serie de justificaciones para continuar en ese estado. Una de las más recurrentes suele ser la que lleva la forma de : "no puedo" que esconde un: "yo me merezco"... "por lo tanto voy a esperar" , que continua con algún "pobre de mí"... "yo no me merezco lo que me está ocurriendo...". A partir de aquí, la mente se encargará de encontrar quién es el deudor de ese merecimiento injustamente no retribuido, que suele tener como último destinatario a Dios, después de pasar por todos los mortales y santos que estén a mano y que, por supuesto, no supieron escuchar ni comprender . "El castigo está en el pecado mismo". Y si miramos detenida y descarnadamente aquello que nos sostiene en esta visión de la vida, encontraremos que es algo así como la promesa (ilusión) de que: llegará el día en que se cumpla y seremos felices. Que claramente lo que está fallando es que no nos complacemos bien, no lo hemos logrado hacer bien y que, por supuesto otros sí, para quienes la vida es seguramente más fácil o tuvieron suerte. De esta manera nos llenaremos de autojustificaciones, autoconsideraciones, identificaciones y proyecciones de culpas, conocidas como los cuatro venenos o jinetes del Apocalipsis. Todos ellos pavimentarán el camino hacia la desesperanza y el llamado vacío existencial. Frente a este dilema la opción se presenta en decidir si lo seguiremos llenando con más complacencia y sobredosis de ilusiones (para lo cual la cultura ahora globalizada nos ofrece renovadas opciones hasta con formato místico), o buscamos el otro camino, el olvidado. El que nos plantea que la salida sólo se logra con esfuerzo intencional, observaciones imparciales, propósito y perseverancia. El camino de la gracia y la resonancia en Dios es doloroso, porque todo cambio de estado conlleva un dolor, una especie de desgarro. El dolor es

- 195 -


ESTUDIO DE LA COMPLACENCIA

inherente a nuestra condici贸n humana y el miedo su anuncio desesperanzador. Desde el Paradigma Olvidado las opciones ante las cuales debemos decidir se presentan con total claridad, o buscamos rescatar lo m谩s preciado de nuestra existencia para recuperar la resonancia en Dios, o vivimos para intentar llenar nuestra vida de complacencia ante la angustia del vac铆o que conlleva esa falta, recorriendo desesperadamente las interminables variaciones del mismo juego, una y otra vez. De cada uno depende esa decisi贸n.

- 196 -


EL DESCALIFICADOR

CAPÍTULO X El Descalificador

- 197 -


EL DESCALIFICADOR

Sinceramente, creo que nadie merece estar habitado por esa termita... ni siquiera el mayor pecador del mundo... Y no es exagerado lo que digo, tomen en cuenta que la persona que ha traspasado los límites de la crueldad, insensibilidad y aberración humana, “casualmente” no está afectado de auto descalificación. Andrés: Sí, puede ser... A ver... Tomemos un asesino a sangre fría, de esos que pueden clavar un cuchillo en el intestino, sin parpadear, sin el menor sentimiento ni conmiseración... ¿Creen que podría hacerlo, si dentro de ellos estuviera auto descalificado?... ¡no! Ese hombre está sostenido por una muy fuerte convicción, carece de dudas, de cuestionamientos... se califica mucho más que a su víctima. Diego: Pero... ¿Qué clase de convicción tiene? La de estar haciendo lo que debe hacer... aunque, por supuesto, dentro de sus propios códigos y parámetros, absolutamente incomprensibles para nosotros. Vanita: Sí, pero lo que hace, su... digamos “convicción” nace desde lo patológico. No midamos ahora esos parámetros. Últimamente, demasiadas aberraciones se justifican detrás del cartel de “enfermedad” a lo que sucede inevitablemente, un exigido y obligado “pobrecito”. Obviamente es un enfermo. Pero eso, no explica todo. Lo que pretendemos ahora es entender la diferencia entre ese señor, absolutamente unido a su motivación, versus el personaje del cual hablábamos... un ser que vive aleteando, porque no le dejaron ni una convicción en pie, y por lo tanto no sólo carece de lugar de apoyo interno, sino que además, en esa terrible sensación de debilidad, vive tratando de sostenerse en alguien externo, infructuosamente. Diego: Eso es lo que hablamos desde el comienzo de las charlas ¡No se puede andar prendidos a los otros como ventosas! ¡Sí se puede, pero no se debe! Primero porque en el fuero interno, nadie puede hacer nada por nosotros. Puede dar un consejo, ceder su tiempo, consolar, regalar sus bienes, pero “realizar” dentro de uno... sólo puede ser la conquista de uno mismo. En segundo lugar, nadie puede realizarse estando cargado a mochila de otros. Y finalmente, el sostén al que se aferra al auto descalificado, es mucho peor que su misma situación.

- 198 -


EL DESCALIFICADOR

Andrés: También hay que agregar el hecho de que la gente se cansa de llevar personas a cuestas, en especial, cuando constatan que es el cuento de nunca acabar... siempre están prendidos a algo, nunca se sueltan... ¡Tal cual! Ese es otro factor por el cual, la persona auto descalificada siempre crea una imagen de soledad. Los palotes humanos que la sostienen temporalmente, giran en su entorno, luego se cansan y desisten y ahí se repite la historia. Nuevamente el desasosiego, el aleteo inútil... Así se ve desde afuera... Lo terrible es lo que pasa adentro... ¡Eso sí es dramático! Vanessa: A través de distintos trabajos de observación, tengo bien en claro las consecuencias. Es como que se vive en un tembladeral. No hay nada en firme, como vos decías recién, todo adentro es inestable, inseguro, móvil o destrozado. ¡Sí, eso es! Se está como en una habitación arrasada por vándalos... uno mira pedacitos, cortes, retacitos y ni siquiera se atreve a enojarse, porque tampoco se tiene permiso para enojarse... Eso es interesante. Ni siquiera tenés permiso para enojarte ni para abandonarte al dolor redentor. Solo está ese dolor sordo de estar despedazado, triturado... Y si te atrevieras a levantar el dedo acusador contra quien te está comiendo, al dolor sordo se sumaría la culpa y tras de ella, más descalificación... más dolor. Diego: Lo asombroso de esto es que, por lo menos en mi caso, no me daba cuenta, no era conciente de estar atrapado. ¡No sé cómo explicarlo!... Si bien me sentía en inferioridad de condiciones con respecto al resto del mundo, para mí eso era lo normal, lo mío, mi condena... Roy:... El sector de lo que “No se protesta” porque “es así”. Diego: Sí, eso... Lo tomaba como que era mi defecto lo que la gente veía, mi limitación. No algo que venía de lo externo, sino que era mío y que por eso había que ocultarlo. Pero, detrás de esa culpa infligida, no sabía qué debía corregir, ni donde estaba mi error. Eso es exactamente la misión que tiene este enemigo común, llamado Descalificador. Quiere que te sientas lo peor, pero que jamás sepas qué es lo que te hace tan peor. De esa manera, no tenés certeza de nada y siempre te mantiene sentado arriba de un barril de pólvora. Roy: Yo lo pude ver y definir como la sensación de que alguien, con un revolver cargado, apunta a tu cabeza todo el tiempo. Cuando comento esta sensación, la gente se reconoce al instante. Se nota que es mucho más común, de lo que sospechaba.

- 199 -


EL DESCALIFICADOR

No tengo forma de realizar una encuesta y por no tener un elemento concreto, no podría afirmarlo, pero creo que el 90% de la población del mundo, se divide entre descalificadores y descalificados. Andrés: Desde que salió este tema, lo estoy observando entre los pacientes de mi consultorio, y hasta ahora, me encuentro con uno u otro personaje indefectiblemente. Lo que me asombra es la velocidad con que la gente lo entiende, lo toma, como si uno lo único que tuviera que hacer, sería descorrer un telón y mostrarlo. Al instante, la gente dice -“Sí, es eso”- Y empieza a desenrollarse sólo. Roy: A mí me pasa lo mismo, pero en otro orden. Cuando encuentro una chica o un chico con los síntomas típicos de ser víctima del Descalificador, y le hablo de qué se trata, al toque producen un cambio interesante. Es increíble, no me canso de comprobarlo. Lo que dicen es muy oportuno. Justamente el hecho de ser un rasgo tan generalizado y de que la gente descalificada vea rápidamente y sin dificultad el panorama de su situación, confirma varias cosas. Por ejemplo, que no es un problema meramente de la máquina psicológica, sino un fenómeno. En segundo lugar, que se expande como una epidemia y tercero, que actúa como si tratara de un fenómeno hipnótico, del cual la gente comienza a despertar ni bien se chasquean los dedos. Vanessa: Uno se da cuenta al instante, pero sacárselo de encima, es otra cosa. Esos “despertares” de la hipnosis, es lo más importante. Lo que queda después, es reconstruir lo destrozado y el desligarse de la costumbre de estar sometido. En ambos aspectos, cada cual debe realizar el mayor esfuerzo. Lo que puedo dar fe, es que al cabo de este trabajo, de esa influencia no queda ni el recuerdo. Vanita: Vos decías que hay una mayoría de personas que, o encarnan al descalificador o están descalificadas, sin embargo, yo noto que ambas coexisten... ¡Por lo menos lo vi así! Lo viste bien, sólo que te falta diferenciar algo importante. A medida que la persona se va disolviendo por efecto de la acción de la descalificación, le surge la necesidad de aferrarse a algo para no sucumbir... de tomarse de una soga para subsistir. Es ahí cuando comienza a descalificar a otros, a aceptar la consiga de su victimario: “sin nada, debo convertir en nada a los otros” Vanita: O sea que... ¿uno deja el papel pasivo y adopta el activo?

- 200 -


EL DESCALIFICADOR

Así es. El mártir que se trasgredió y blasfemó, y se convirtió en el bando contrario, digamos. Vanita: ¡Pero eso es horrible! ¿Me estoy convirtiendo en un bicho de esos? (Risas y comentarios) ¡Pensé que la observación que comentaste, era sobre terceros! (Risas) Vanita: Pero... ¡Yo descalifico muchas veces! Es lo común, y ya sabés que hay que trabajar duro con eso para no hacerlo... Veamos el tema desde otro lugar. Vanita: puedo decirte ahora –“Te quiero mucho”- en un tono que te esté diciendo “-Te desapruebo”- y con la profunda intención de producir un efecto “X” en vos, que no se relacione con ninguno de los aspectos anteriores. ¿Podés percibir esos tres movimientos simultáneos? Vanita: Sí. Creo que sí. Hay gente que está muy mal consigo misma, que no se da cuenta de eso, y desde esa ignorancia proyecta ese mal en todo y en todos. Son las personas que siempre te encuentran pálida, con cara de enferma, o que presuponen que estás pasando algo terrible y que no querés decirlo. Vanita: Sí, entiendo... Otras personas, en cambio, no proyectan subconscientemente sobre vos, sino que necesitan sacarse un poco del veneno con que se alimentan todos los días, para no rebalsar. Son las típicas y legendarias harpías, repletas de frustraciones. La intención que las mueve, es sacarse veneno, nada más. Este personaje no va a decir que te ve enferma, sino que va a comentar con la vecina: “-¿Viste que ojeras tiene Vanita?... ¡Vaya a saber de donde vino!”. (Risas y comentarios) Existen otras personas que expelen comentarios a través de la envidia. Son las que, si no encuentran el “diente negro” de alguien, esa noche no duermen. Otras, utilizan la crítica para reemplazar la ausencia de temas interesantes para conversar. Están los que catalogan desde la soberbia, y rebajan para poder sostenerse en el sueño de que están arriba... los que lo hacen desde la extrema rigidez moral o religiosa, los que adoptan esa costumbre, para

- 201 -


EL DESCALIFICADOR

quedar “graciosos” delante de sus pares... y podríamos seguir, días de días, descubriendo distintos “desde donde” la gente descalifica. Ninguno de los mencionados produce un efecto mayor a un dolor de estómago, debido a la rabieta contenida. ¡No estamos hablando de esa gente! Vanita: Yo me di cuenta que descalifico como un arma de defensa, porque siempre espero que la gente me dé un palo por la cabeza... aunque esa persona no tenga la menor intención de hacerlo. Ese es el producto de la indefensión, y ahí sí, que estamos en una de las consecuencias que deja el bicho. Muy al margen de cualquier comentario que recibas, tu tamiz, el filtro donde pasan las palabras, es ese temor subyacente de sentirte indefensa. Y más aún, nada de lo que te diga sirve, para que evites tamizar todo por allí. Diego: Podríamos decirle “bicho” para diferenciarlo, ¿no? Roy: ¡Andá!... ¡Eso da para cualquier interpretación!... (Risas y comentarios) No hay problema. Si lo desean, le ponemos sobrenombre, así todos están contentos. Lo vamos a llamar: D.K. Vanessa: ¿Por qué la “K”? Andrés: Dejalo ahí, Vanessa. ¡Suena bien y punto!... Sigamos con el tema. A diferencia de los casos que vimos, el D.K. tiene muy en claro cual es su misión: destruir al otro. Diego: Así... ¿Sin vueltas? Roy: ¿Qué vuelta querés darle?... Andrés: Podríamos decirlo más en fino: Su propósito es masticar y deglutir al otro. Vanessa: Pero ellos ¿saben lo que están haciendo? ¿Son conscientes? Lo son, en el mismo grado que cualquier persona, es conciente de estar manejado por un ente de personalidad. Andrés: O sea...

- 202 -


EL DESCALIFICADOR

Algunos lo perciben más y otros menos... En su momento, tuvimos aquí una lamentable experiencia en cuanto a que, cuando se practica autoconocimiento, ese personaje pasa a un primer plano y muestra su rostro nada agradable. Esa persona estuvo a punto de solucionar su problema, pero no quiso, argumentando que el D.K. “le proveía fuerza”. ¡Fue una pena! Diego: ¡Fue una elección! Es cierto... Lo concreto es que, si no existe ese trabajo interno, la percepción es muy leve y fugaz. En estos casos, la persona “cree” que es mala, dañina y, para su dolor, día a día se entrega más a la tarea de destruir. Vanita: Alguien que personifica al D.K. ¿Puede cambiar? Se puede despertar, como cualquier otro hipnotizado. El problema es que “cree que es así” o que ese triturador le proporciona una fuerza especial, y no quiere renunciar. Contra esa convicción, nadie puede. Vanessa: A mí me da la sensación de que es una posesión... Si entendemos por “posesión” el imperio de una actitud que genuinamente no nos pertenece, que es contraria u opuesta a nuestro carácter esencial, se puede ver así. La maldad no es una ficción, pero estoy en la seguridad de que es uno, quien la elige a ella y no al revés. Si no... ¿Qué sentido tendría el Libre Albedrío? Diego: O sea que, posta, el objetivo que tiene el D.K. es, ni más ni menos, que provocar la destrucción del otro... Me interesa profundizar la diferencia que existe con las personas criticonas y descalificantes que actúan desde un lugar, digamos, más sano. El D.K. no arremete contra lo visible, contra las actitudes de su víctima, sino que ataca lo esencial, lo mejor, lo más prístino del hombre. Socava las columnas del ser, de ahí su extrema peligrosidad. Vanita: Es decir que la cosa no pasa por acomplejarte, con hacerte creer que sos fea, ignorante, o inútil, sino que dirige sus dardos a algo más profundo... Pero no veo qué pueda ser más profundo... Ataca al navegante, no a la cáscara. Resquebraja ese factor tan sensible que se llama dignidad... ultraja y denigra no la utilidad de la persona, no lo que hace o deja de hacer, sino la calidad de la persona...

- 203 -


EL DESCALIFICADOR

Diego: Por ejemplo cuando alguien dice: -“Este es un negro de m...” ¡Nada que ver! Quien habla así, lo hace desde que cree a pie y juntillas que la gente se evalúa por el color, raza y condición social. Una persona así, no tiene la menor idea de qué hay adentro de la cáscara... ni siquiera de la propia. ¿Cómo puede atacar algo que no sabe que está? Diego: Entonces sigo confundido... Es muy complicado... El descalificador común, pondrá de manifiesto que sos torpe para estudiar, o para bailar... El D.K. muy por el contrario, siempre halaga el ego, te hace sentir que te aprueba en todo... pero... y ahí está la trampa, que es el único que te acepta, no porque tengas valor alguno, sino porque te ama. Te hace el beneficio, la dádiva de amarte, aunque seas en todo un desastre completo. Crea a tu alrededor la sensación de que tu vida depende de él, que sin su ayuda, te ahogarías en un charco... El D.K. debilita, consume por dentro... y no te podés defender porque lo que manifiesta, es lo contrario de lo que hace. Andrés: Hay un doble mensaje... También triple, cuádruple... No va a tener reparos en enviar millones de canales de comunicación con tal de debilitarte. Vanessa: Busca que seas dependiente de él... Sí, pero no para usarte o manipular tu vida. No es que te rebaja, para después ordenarte tareas humillantes. ¡Esa no es su finalidad! El objetivo es debilitarte en todo lo que te sostiene. Cuando consigue su objetivo, te inmoviliza... Ahí ya no te sentís apta, ni para ir al supermercado sola. Andrés: ¿Algún síntoma de fobia? No. Las consecuencias no están en ese orden. Las consecuencias son bloqueo psíquico o emocional, debilitamiento físico, sensación de incapacidad generalizada, confusión mental, ineptitud que se manifiesta en el entorpecimiento de todo intento de realización personal. La misma actitud mental, es causa de fracasos de todo orden, afectivo, laboral, etc. Resquebrajado en toda convicción, la víctima va perdiendo paulatinamente el contacto con todo valor, principio, o impulso genuino. Cuanto más lejos está de esos elementos que podrían salvarlo, más cerca está de las fauces de la serpiente.

- 204 -


EL DESCALIFICADOR

Roy: ¡Vaya! ¡En serio!... ¡Es como estar bajo un poder hipnótico! ¡Son los mismos síntomas! ¡Es un poder hipnótico! Roy: Y cómo se chasquean los dedos para despertarse... ¡caray! ¿Cómo se despierta a un hipnotizado? Roy: Con un gatillo hipnótico, o sea un comando previamente inducido en la persona que aclare que, cuando uno haga una acción, el otro debe despertar, por ejemplo, el chasquido de dedos. La otra sería que se despierte solo... Pero no se como aplicarlo a esto... Desde ya, el D.K. no va a hacer nada para el otro se despierte ni tendrá la precaución de dejar gatillo previo alguno. Eso sería contradecir su misión... Que salga del trance solo, sería todo un acontecimiento excepcional. Lo que resta es lo que hacemos aquí: Crear un nuevo gatillo hipnótico. Andrés: Claro. Por eso la gente sometida a ese poder reacciona rápidamente cuando se le hace notar que está en estado de trance... El problema es que después, no puede mantenerse despierto, y a cada rato regresa al foco magnético... como si estuviera imantado... Y uno tiene que volver a empezar la tarea... Roy: Machacando continuamente la nueva consigna, digamos “el antídoto” finalmente se lograría despertar... Eso no es suficiente. Eso produce mejoría, pero no sanación. Si nos quedamos allí, la persona en vez de sentirse obnubilada, sabrá que está sujeta a un magnetismo, pero no podrá despertar del todo. La llave consiste en procurar que esa persona se dé cuenta, en todos sus niveles, que está bajo trance. No es una tarea simple, ni que la pueda usar eficientemente cualquiera. No hay que poner a la persona en contra del D.K. No hay que condicionar su cerebro nuevamente, porque se lo dañaría. Lo único que sirve es con todo amor y paciencia, demostrarle que esos pedazos rotos, a los que él llama “yo”, no existen, que eso sólo es un sueño y que todo lo que tiene que hacer para estar libre, es despertar del trance. Diego: Si te das cuenta que alguien te sonó la vida desde siempre... ¡Cómo no lo vas a querer matar! En el momento que entres en esa alternativa, el D.K. te ganó, no la batalla, sino la guerra. Por eso es un trabajo muy delicado. Nunca hay que alentar a la venganza ni al odio, ni directa ni indirectamente.

- 205 -


EL DESCALIFICADOR

Vanita: perdoname, pero no entiendo por qué decís eso. Es inhumano y es imposible pensar que alguien que se da cuenta de haber estado sometido a semejante aberración, pueda evitar sentir odio y venganza hacia su victimario. ¡Yo le pongo una bomba! (Risas y comentarios) El odio es una herida sangrante, del mal amor a sí mismo. Más sano es el buen amor. Roy: A mí me pasa lo mismo. Me pone loco la pasividad, eso de poner la otra mejilla... Conmigo no va. Si ya terminaron de exponer sus sabias razones, tal vez tengan deseos de escuchar algo... Ninguno de ustedes preguntó qué pretende el D.K. porqué actúa de ese modo... Andrés: Porque es un hijo de mala madre... Los entiendo, pero traten de escuchar sin tanta intervención de las pasiones, así esto será más eficiente. Dijimos que el D.K. reptea, ingresa por la vía de los meta mensajes, primero le baja toda columna interna, todo posible sostén, después le demuestra su indefensión, el paso siguiente es constituirse en su sostén, en su única fuerza... cuando logra esta confianza, anida en los complejos, traumas y debilidades propias de su víctima. Cuando llega ahí, carcome como un cáncer galopante. Lo posee, pero no lo usa, no lo manipula en beneficio propio... Vanessa: Eso no lo entiendo ¿Por qué no lo usa, si lo tiene agarrado? Porque si lo hiciera, sería una forma de decirle que sirve para algo... Entonces: ¿Qué pretende? Vanessa: Vos lo dijiste: destruir Sí, pero ¿para qué? Vanessa: ¡No tengo ni idea! Supongo que por el afán de hacer daño, por pura maldad. Esa posibilidad no existe. En todo hay un motivo, una causa, un objetivo y una consecuencia. El objetivo del D.K. es pura y exclusivamente: Replicarse. Roy: ¿Clonarse?

- 206 -


EL DESCALIFICADOR

Es un modo de decirlo... El triunfo del D.K. es que su víctima, cuando llegue a la fase final, se “convierta” en otro D.K. y de esa manera, asegurar su vigencia a través del tiempo. Ese es su por qué y su misión. Justamente por eso, salir de su dominio, implica salir absolutamente “limpio”, sin nada de lo que caracteriza a este personaje: ni odio, ni violencia, ni venganza... y por supuesto, cero descalificación. Cualquier sentimiento negativo que uno se permita hacia él, “confirma” el mensaje destructor que dejó, y ahí sí: de regreso a la cárcel, al sometimiento, hasta que él gane y su víctima se transforme en otro D.K. Roy: Si entendí, dijiste que después que te sonó la vida, ¿te tenés que alejar como un duque y regalarle bombones? ¡Eso dije! ¡Muy bien! Roy: ¡Ni loco! Es tu elección. Ahora entenderán por qué, de las garras de ese bicho no sale cualquiera. Es necesario tener ciertas aptitudes personales. Andrés: Creo que estás hablando de perdonar al opresor, y para eso hay que tener una preparación espiritual muy especial. “Perdonar” es la palabra que va después de haber tenido claridad sobre el error que hay en una circunstancia. Si no existe esa claridad, es solo una palabra más. En lo personal diría que lo que hay que tener, es un buen nivel de comprensión. Ese D.K. es una réplica de otro y nosotros bien podríamos estar ahí. Desde esa perspectiva, podemos hacer nuestras aquellas Divinas Palabras: “Padre perdónalos, porque no saben lo que hacen-”... ¿En serio creen que “si supieran lo que hacen”, lo harían? La conciencia guarda conocimiento suficiente acerca de qué sucede, cuando se daña a otro... Andrés: Una de las cosas que siempre me impactó mucho, es justamente todo ese escarnio sin nombre que se hizo con Jesús. Más allá de que fuera aceptado o no como el Mesías... ¿Con qué necesidad se le hizo tanto daño? ¿Qué mal hizo Él, para merecer tanta burla, descalificación y ultrajes? La primera respuesta es, que estaba escrito y que fue necesario. La segunda, es que marca el camino a seguir, si uno quiere llegar al Altísimo. Desde otro punto y este, muy personal, tan generoso y sublime Amor debía ser compensado, equilibrado, con tanto horror y miseria. Tal vez, y esto dicho solo como una apreciación, el D.K.

- 207 -


EL DESCALIFICADOR

surgió ahí como el opositor, como anti dignidad, como un anti Cristo. Vanita: Puede ser ¿no?... Fijate que una víctima de D.K. siente que está sucia por dentro, aunque sea la persona más correcta del mundo. Siente que Dios, cualquiera sea el nombre que le de, jamás atendería a alguien tan bajo. A partir de esto, la auto exclusión de la religión, de la moral, de la búsqueda del Bien o la trascendencia... desde allí, la desacralización interna y externa. El perfil, da. Andrés: Por lo que hablábamos hoy, todo descalificado ve en su victimario a su dios, el que lo va a salvar, el único que puede ayudarlo... Ahí también hay una pista. Eso es cierto y nos lleva a otra cuestión relacionada. Es del todo inútil que intentes que una víctima del D.K. admita que posee nada positivo. Todo lo que resaltás como un valor apreciable, la persona lo minimiza sintiendo que lo decís por compasión, por halago, para ayudarla, pero que nada es cierto. Recuerden que ya le grabaron que todo reconocimiento no es objetivo, sino sólo una manifestación de la benevolencia del D.K. Su convicción es ser un desastre. Ninguna aprobación, ningún logro le llega como suyo. Nada que de ella provenga, tiene en sí ningún valor. Lo único que desea, lo único que la motiva, es lograr la aceptación real del D.K. Su admiración. Vive para ser aceptada por él, aunque ya sabemos que eso no va a ocurrir nunca. Vanessa: ¡Qué relación tan extraña!... Por un lado, se siente descalificada, por otro, necesita imperiosamente la aprobación de quien lo descalifica... ¿Cómo es posible que uno no se dé cuenta que está en esa situación? Ya dijimos que se maneja mucho con el halago, de otra manera perdería la presa. Lo interesante es que elogia y estimula, lo que “no” hay en esa persona, la virtud que no tiene... Roy: ¿Convence a un ciego, que su mejor virtud es su vista de lince? Algo así, pero mejor planteado. Frases como –“Vos que sos tan inteligente, y nadie te reconoce”... cuando el motivo del fracaso, es la timidez, por ejemplo. Ahí la víctima se siente incomprendida, y en vez de procurar resolver su apocamiento empleará todas sus energías y tiempo disponible, en sufrir su mala suerte. Andará por ahí con cara de héroe incomprendido, en vez de intentar resolver la causa de sus problemas. Naturalmente, el resultado de esto, es aumentar la sensación de descalificación y la evidencia de que “no

- 208 -


EL DESCALIFICADOR

tiene salida” salvo, la “comprensión” de su torturador. El D.K. no miente, porque quedaría en evidencia, pero jamás dice la verdad. Andrés: Si, está claro, Toma una verdad y la adapta a sus fines. ¡Qué crueldad! El motivo de vida de la víctima, es colmar las expectativas del D.K. de ahí su constante estado de ansiedad. Se desespera por “superarse”, por “demostrar” algo que le implique el reconocimiento de quien descalifica, pero siempre en una meta errónea. Si el D.K. aplaude, no importa que el resto del mundo abuchee... Lo triste... lo que pasa, es que él nunca aplaude y si lo hace, el sonido de sus palmas tiene aire de “comprender la monadita que hizo el inepto” y jamás el vibrante sonido de reconocer un valor. Andrés: Sí, ahí vienen comentarios como. “¿Vos hiciste estoooo?”... Que traducido sería algo así como: “-Siendo tan tarado, como fue que lo lograste”- ¿No? (Risas y comentarios) Se darán cuenta ahora, lo importante que es, para la víctima, el hecho de que no quiera contradecir el mensaje, sino que se dé cuenta que el mensaje en sí mismo, es una trampa. Diego: ¡Claro!... Si contradice el mensaje, va a parar a cualquier lado. Vanita: ¿Más o menos en qué edad, uno empieza a ser sojuzgado por ese personaje? Generalmente, recién nacido. Alguna vez les dije que, la cuna de este fenómeno, es el estado de complacencia. Pues bien, es debido a ella que muchas personas, aún pensando y queriendo tener hijos, desde el estado de complacencia, los rechaza porque “molestan” algo: la pareja, una oportunidad de viajar o laboral, o simplemente el ritmo de sueño. Aquí volvemos al doble mensaje, uno que está en la conciencia de vigilia “Quiero un hijo” y el otro que emite fuertemente desde el subconsciente “Este hijo me molesta”. Conociendo un poco la psiquis humana: ¿cuál de los dos mensajes creen ustedes que el bebé recibe y acepta desde el momento de nacer? Vanessa: Obviamente el de rechazo... Así es. Lo complicado es que los padres no se dan cuenta que tienen complacencia, cuanto menos, que desde ese estado descalifican la vida recién llegada. Con el tiempo ¡Sorpresa!

- 209 -


EL DESCALIFICADOR

Aparecen síntomas inequívocos de que el niño está minado y no saben cómo ni por qué. Vanita: ¿Todos los padres son así? No. Hay gente que pone el corazón entero en cada hijo, el problema está que, para evitar que el pequeño se infecte, ambos progenitores deben coincidir. Si uno de ellos rechaza esa nueva vida, es suficiente para infectarlo. Aquí es importante recordar que el pequeño es una cinta de grabación hiper sensible, que llega al mundo totalmente en blanco. Absolutamente receptivo, carece de parámetros para comparar, razonar, explicarse qué es lo que está sucediendo. Graba sin filtros y el mensaje de “No sos oportuno” es demasiado fuerte y lo minará a lo largo de toda su vida. Diego: El tema no pasa por el abandono, el castigo, ni nada de eso... es algo mucho más complicado de ver... Ni siquiera se puede decir que faltó afecto... Aquí cabe aplicar aquello de “La primera impresión es la que vale”. La única constancia que tiene el bebé, es que no fue bienvenido, que su presencia entorpeció algo más importante, y que por lo tanto, “está demás”. Como durante el período de inocencia, no actúan mecanismos como la proyección de culpa, ante ese rechazo, el pequeño “firma” su descalificación. Andrés: Aquí no hay un victimario... Es diferente a lo que estábamos hablando. No es un personaje siniestro, sino alguien desprevenido e ignorante que cayó en su propia trampa. No, Andrés: Es el mismo personaje... Es el señor D.K. en tarea de aprontes. Con el tiempo, será un D.K. adulto. Alguien que no es capaz de anteponer el significado de la vida, a su propia comodidad... ¿Qué otra cosa es, sino un descalificador de vidas? Ese progenitor que no puede conectarse con emociones sublimes, que se justifica en el cansancio, el trabajo, la necesidad de proveer alimentos, o lo que sea que “moleste” su complacencia, de ahí en más verá reflejada su obra. A medida que crece, el veneno ingerido se manifiesta. El chico se sentirá el “más feo” del aula y actuará en consecuencia, recibiendo la desaprobación de todos sus compañeros. Se sentirá el “más torpe” y desde allí, será una máquina de hacer torpezas. Se considerará el “más desagradable” y desde allí, hará lo imposible para confirmar esa convicción. Y allí comienza la retroalimentación: El D.K. progenitor tendrá causas, motivos para sentir que ese pequeño, no cumple ninguna de sus expectativas, y la descalificación hacia él, irá en aumento año tras año, hasta llegar al punto que estábamos viendo.

- 210 -


EL DESCALIFICADOR

Roy: Es en ese momento, cuando viene aquello de “Sos un desastre, pero te beneficio con mi amor”. ¡Eso es! El progenitor D.K. queda apabullado ante la evidencia de que ninguna expectativa quedó cubierta. -¿En qué fallé?- se preguntará, pero no podrá evitar el sentimiento de decepción. Sobre protegerá al “producto fallado” y desde una negativa compasión, lo incentivará a realizar lo que el hijo no puede hacer. Andrés: Como que hay algo biológico, ancestral que ama, literalmente cubierto por una gran desaprobación que no desea confesar. Vanita: Lo que no entiendo es ¿porque no lo incentiva de manera correcta? En principio, si fuera capaz de hacer eso, no sería un D.K. Además, ya explicamos que todo D.K. se inició como víctima, por lo tanto carece de claridad. Es un hipnotizado agresor, pero también en estado de trance. Si no pudo con su vida ¿Podría orientar otra? Se trata de una persona que, ante el milagro de la vida, es incapaz de emocionarse genuinamente y reacciona “sobreponiéndose a la molestia” en vez de horrorizarse ante su propia aridez... A esa altura ya no hay “calidad de persona”. Vanita: Entonces: ¡es culpable de lo que hace! No. Repito: Ese progenitor D.K. es la consecuencia de otro de igual tenor. Lo único que hace, es continuar la consigna, es decir, replicarse. Roy: ¡Bueno!... ¡Vayamos contra el abuelo, entonces! (Risas y comentarios) ¡Imposible! No sería justo, porque el abuelo, es producto de la descalificación del bis abuelo, así hasta llegar a Adán y Eva. Chicos: no busquemos culpables. Ya sabemos que eso de crear culpas, para lo único que sirve es para ser menos persona que el agresor. Es necesario comprender el fenómeno y desde esa comprensión, impedir que siga causando tanto dolor al mundo. Si la “culpa” la tiene mamá o papá, yo me constituyo en víctima y ¿Qué gano con eso?... Gano el ser además de auto descalificada, una persona vengativa, llena de odio y de auto consideración. Es decir, termino de destruirme y gano el título de D.K. Con eso, lo único que hacemos es volver a empezar el círculo vicioso. Aquí lo que pretendemos, es cortarlo.

- 211 -


EL DESCALIFICADOR

Vanita: No quiero ni imaginar lo que sucede con los chicos que, concientemente, no se desean tener... Les cuesta comprender que un bebé no entiende las palabras, sino que sólo capta las impresiones. Para él es el mismo efecto una mamá que no desea tener un hijo, que una mamá que se siente “desagradada” porque durante el embarazo, perdió su esbeltez... Lo que se graba es el rechazo, no el motivo de él. Para el estado de inocencia, no hay diferencia entre estas situaciones y la del padre que sonríe para la foto familiar, mientras que, con el corazón, detesta la situación “incómoda”de allanarse a cosas que no le interesan. La complacencia tiene un millón de justificaciones, pero siempre produce el mismo daño. Vanessa: En esos casos, creo que lo mejor sería evitar tener una familia... ¡Pero Vanessa! Si así lo hicieran... ¿Qué diría la gente?... ¿Cómo quedaría la imagen?... ¿Qué pensarían los familiares y amigos?... ¡A ver si todavía piensan que uno es estéril o que la pareja no funciona! (Risas y comentarios) ¡No emparchemos! Hay que procurar soluciones de fondo, no de forma. Si ustedes se limpian de esa porción de D.K. que llevan dentro, sus hijos tendrán abierta la posibilidad de no transgredir el sí mismo, su deber ser. Tendrán la oportunidad de no perder el tiempo vida, corriendo detrás de un sueño hipnótico y en vez de “sentirse descalificados” (que es una pérdida de oportunidad vida y que en concreto no sirve para nada), procurarán estar todos los días más cerca de la verdad, lo genuino, lo sano... lo que corresponde a cada uno... ¡No lo perfecto! Sin calificarse ni descalificarse, ser aptos para abrir la puerta del ser, de la realización personal. Diego: ¿Por qué tiene más fuerza en el chico, la desaprobación de uno de los progenitores, que la aceptación incondicional del otro? Porque no es igual que te acaricie con una pluma, a que te pegue con un adoquín en la cabeza. La primera impresión está en el terreno de lo sutil. La segunda deja huellas. Además, el descalificado a través de toda su vida, minimiza al que lo acepta. El mensaje sería “Me ve bien porque me quiere, o porque no es inteligente”... o “lo bueno que dice de mi no es un reconocimiento, sino un consuelo, o una forma de darme ánimo” por lo que sea, pero lo cierto es que no aceptará la voz que aprueba, sino que quedará esclavo y pendiente de la que desaprueba. Te digo más: el

- 212 -


EL DESCALIFICADOR

auto descalificado, descalifica a quién lo califica. Su “misión en la vida” (por decirlo de alguna manera) será lograr la admiración, la aceptación de quien lo degradó. Sin esa aprobación, la persona “No puede ser”... al menos así es el estado hipnótico. Diego: Y si el progenitor D.K. se muere antes de que la víctima logre despertar del trance ¿Qué pasa? Igual que con la distancia física, con la muerte no se corta el estado de trance. La víctima no saneada seguirá buscando descalificadores en los amigos, las parejas, en el ámbito del trabajo... Siempre admirando y tratando de subyugar al D.K. aunque cambie de rostro. Vanessa: ¿Por qué motivo, el cortar con la relación física, no aporta ninguna solución? Como no es una situación concreta a la que se puede apelar con documentos en la mano, la persona bajo trance, por un lado carece de certezas y por el otro, se siente en deuda hacia el D.K. Tomar una actitud de alejamiento físico, es llevarse el problema con él. Lo correcto, es resolverlo internamente y de manera tal, que, si el corte es necesario, que sea sin lastres, sin resentimiento, sin daño. Huir no es la solución. Roy: ¿Qué diferencia hay entre sentirse descalificado y sufrir un complejo de inferioridad? El descalificado, está atacado en su esencia, en su razón de vida, en su valor como dignidad viviente. Lo que se inicia como una experiencia emocional pasa a convertirse en una nociva percepción esencial de sí mismo, por eso se trata de un problema que sobrepasa lo psicológico y se relaciona con lo espiritual. La persona está cuestionada por “lo que es” y no por “cómo se presenta” o “como lo hace”. Desde ahí, siente que no tiene lugar en el mundo, que es una nada circulando por casualidad, gastando oxígeno sin permiso. Siempre incómodo, nunca logra un lugar donde descansar, es decir, una satisfacción capaz de inscribirse en el libro de la vida. Andrés: ¡Ese es el punto!... No es una cuestión de calificaciones ordinarias. No es un programa mental. La sensación de minusvalía no se centra en considerarse, por ejemplo, menos inteligente, o más gordo... la descalificación ataca la esencia, la condición humana... el sustrato de lo que la persona “es” originariamente. Una situación diferente, es la que tiene alguien conflictuado por carecer de algo o estar diferente en algo, con respecto a la

- 213 -


EL DESCALIFICADOR

generalidad. Por ejemplo, el que tiene complejo de haber nacido muy bajito, conoce cual es su problema, y si es inteligente, tratará de compensar eso, con la simpatía, por ejemplo. La estatura no lo va a privar de estar asentado en otras columnas, por lo que, con ayuda externa o sin ella, el hecho de ser petizo no le impedirá tener la percepción de sí mismo, de ser una “persona”. Diego: Tampoco se siente demasiado apegado, o pegado de una manera irracional a quien le señala que es petizo, por ejemplo. Es interesante lo que dijiste. El descalificado traslada todos sus bienes a la persona del enemigo y él se queda con todo lo malo, sucio, bajo, pecaminoso. Su posesión, su convicción es ese “algo” que está mal. La única manera de aliviar esa percepción de sí, es estar bajo el ala de su verdugo. El apego irracional, más allá de cualquier distancia física que los separe, es la deuda que nunca llegará a pagar: la deuda de ser “en sí mismo” una decepción. Roy: Es parecido al sentimiento que te crea un prestamista usurero. Vanita: ¡Es cierto! ¡Cuando la deuda la tenés con un Banco, el sentimiento es de otra clase! (Comentarios varios) Roy: Mi duda es el porqué. A ver, explicá mejor tu duda. Roy: Me refiero a lo que está en el fondo... A donde nace esa sensación de deuda... ¡No le encuentro la raíz! ¡Al sentimiento que inspira el usurero, tampoco! No es difícil de entender: el Descalificador lo borró como persona, lo anuló, y la víctima lo busca para que aceptándolo, le devuelva la vida. Es una búsqueda desesperada, una triste solicitud de identidad propia. Roy: ¡Lo vive como un dios! ¿Recordás lo que estuvimos hablando? El sentimiento de descalificación lo atribuyó a una falta grave de sí mismo, un castigo merecido, que crea la eterna “deuda”. Una materia pendiente que jamás será aprobada. A partir de ahí vivirá “en falta” y reconocerá incondicionalmente el “poder” (aunque eso no exista, así lo vive) de su verdugo. Entiendan esto: es el único “poder” que pueden ver. ¡Esa es la hipnosis!

- 214 -


EL DESCALIFICADOR

Andrés: ¡Pero en el fondo, seguro que lo odia! Sí, es cierto. Un nexo absolutamente ambivalente. Ese odio solapado, es la nodriza del futuro D.K. Y aquí viene otro aspecto interesante. La persona que no está sufriendo esta situación, acepta y rechaza conforme a su subjetividad. A esto dice “si”, y a aquello dice “no”, aunque después pueda cambiar de opinión, y si se equivoca, aceptará su error y adelante. En cambio, el mecanismo del auto descalificado, es tortuoso. Todo es “si-no” a la vez. Carente de convicciones, llegar a la esquina y tomar a la derecha o a la izquierda, puede ser un conflicto. Necesariamente opta, pero segundos después cuestiona la opción y se siente inmediatamente culpable, de haber decidido mal. Vanessa: Haga lo que haga, está incómodo, inseguro. Sus propios logros, sus valores particulares, su óptica de vida, sus aciertos, están desvalorizados ante sí mismo. No los ve. Así fuera un genio, jamás se daría cuenta, atribuyendo los resultados a la suerte, la temperatura, o la ayuda recibida. Con esto quiero decir que una persona sin este problema, va marcando su rumbo conforme a prueba y error de su experiencia, en cambio, el descalificado no encuentra su propia huella, y va de un lado al otro, sin ton ni son, permeable siempre a sus miedos y a la última voz que le hable. Diego: Pero ante un resultado puntual, donde se demuestre que la opción o la capacidad es buena... ¿Por qué no acepta el triunfo?... Me cuesta entender esto. Repito: porque el único desafío cierto que tiene en la vida es conquistar al Descalificador. “-Sin ti muero y contigo me muero”ese es su lema. Todo lo demás no tiene valor. No satisface. Andrés: ...Con el agravante de que el enemigo y el objetivo, son intangibles. Curiosamente, la misma dependencia que tiene la víctima con el opresor, la siente éste con su víctima. Se forma en el D.K. la compulsión por mantener apresado al otro, y en el extraño y complejo proceso, el D.K. justifica su vida, se auto aprecia, se compensa de su anterior rol de víctima, siendo el justiciero del otro. Sin esta relación, la vida del D.K. carece de sentido, entra en vacío existencial. ¡Créanme! Conozco casos de D.K. que estuvieron a punto del suicidio, cuando la presa se liberó.

- 215 -


EL DESCALIFICADOR

Diego: También hay vergüenza en ser un descalificado... Digo, vergüenza ante sí mismo... como si uno fuera su propio enemigo... “alguien” que no se desea encontrar ni ver. Vanessa: ¡Eso no debe ser así, porque la persona no es culpable! Culpable no, responsable sí. La mosca no es culpable de caer en la leche, pero patalea para salvarse hasta que no puede más o hasta que a causa de su pataleo se forme un gramo de manteca que la sostenga. El hombre es un ser mucho más completo que una mosca. En todos los ordenes de la vida, cuando tiene la percepción de que algo no funciona como debiera, hay que resistir, patalear como la mosca hasta que se forme un terrón de manteca, capaz de sostenernos a flote. Vanessa: En este tema puntual. ¿Qué sería “patalear como una mosca”? No permitir que gane la sensación de descalificación. Cuando eso sucede, al instante que comienza (de lo contrario, no funciona) es útil repetir, con la insistencia y el tono de voz que utiliza un hipnotizador, la consigna de “despertar”, enviando el mensaje hacia adentro de uno. Eso significa que el “desde donde” sea como una orden suave y sugestiva y no como la repetición de una canción que se quedó grabada en algún mecanismo. Vanessa: Con ese ejercicio ¿baja la sensación? Sí, si está bien hecho. Otra cosa que es necesario hacer, es localizar puntualmente a qué se refiere la descalificación. ¿Es hacia mi oreja? ¿En hacia mi modo de pararme, de hablar...? ¿A qué apunta concretamente, esa sensación?... Andrés: ¡Claro! Como se trata de una sensación que abarca y no puede definirse, esto obliga a detectar que es nada o que es algo... Sí, señor. La cuestión es que, si es “algo” hay que poner manos a la obra y cambiarlo, modificarlo. Si no es nada... ¿Qué estás haciendo ahí? Diego: En la sensación de auto descalificación, hay cosas que son torpezas de uno mismo, como por ejemplo timidez, estar fuera de ambiente, no saber cómo ni qué temas tratar para ser interesante... ¿Qué se hace con ese tipo de situaciones? Ganarle la batalla al D.K. Todo lo que mencionaste, son las voces propias de ese bicho. Si adentro de uno hay Alguien, no un nudo retorcido, y ese Alguien es rector de tus pensamientos, acciones y

- 216 -


EL DESCALIFICADOR

sentimientos, no hay motivo, no hay inquietud alguna de justificarse, ni de estar haciendo malabares para que alguno te de una galletita. Si estás en lo correcto, no vas a tener necesidad de salir de lo correcto. Ahora, si el Alguien interno está borracho, drogado, o sugestionado, si quien imprime la valoración de tus actos es el “quedar bien”, “ser aceptado”, “hacer lo de la mayoría” o “que te aplaudan”... y vivís ansioso en busca de recompensas, en este caso, lo primero que hay que hacer es parar la máquina, buscar la convicción más allá de sí mismo y darle un café al borracho interno. Roy: No se si será una cuestión de edad, pero es de difícil a imposible tomar una postura individualista, sin que influya la opinión de las personas sobre mi. Primero: Si es una “postura” no sirve, lo que no es genuino y sincero no hay que ni intentarlo. Segundo: No es necesario tener muchos ni pocos años para encontrarse con el Alma y aprender a escucharla. Tercero: “Postura individualista” es una forma elegante de definir a un egocéntrico narcisista, que cree haber hallado la piedra filosofal y que desde allí, desprecia, subestima e ignora a la humanidad. Esto ¿Tiene que ver con todo lo que hablamos durante años? Roy: ¡No! ¡Es un disparate! Me parece que no distingo bien eso de estar en uno mismo, sin olvidar a los demás. ¡Es muy simple! Si lograste una verdad, no la cambies por un plato de lentejas. Si tu convicción es la virtud, no la trasgredas a cambio de no quedarte solo. Si el Alguien interno, te indica que lo que vas a hacer es negativo, no lo hagas manejado por la soberbia. Si tenés Fe, no la ocultes por temor al “que dirán”. Si tenés valores y el exponerlos y defenderlos te hacen sentir distinto o fuera de moda, no te rindas por la opinión de los demás. El “desde donde”, el motivo desde cual no debe importarte ni alterarte lo que hacen los demás, es desde la genuina convicción del Alma y nunca, jamás, desde la soberbia, la sobre valoración, o el desprecio. Roy: Quedó claro... Ese “no me importa lo que digan o hagan” ha de estar referido a no renunciar a tu Deber Ser. Eso no significa “-Que hagan lo que quieran, total yo estoy a salvo” muy por el contrario: sin fanatismo ni prédicas absurdas, muestra tu verdad... tal vez alguien necesita escucharla, y si te la devuelve y no la quiere, no insistas, guárdala sin resentimientos, pero también sin desvalorizar tu bien.

- 217 -


EL DESCALIFICADOR

Diego: Y de pronto, en esa forma de ser ¿uno no corre el riesgo de ser un antisocial? Un antisocial, es alguien que impone su aura individual, su propio círculo, atropellando consignas o derechos adquiridos de una persona o de un grupo de gente. No sólo el ladrón, el asesino y el inmoral es un sujeto antisocial, lo es también, quien te impide elegir, discernir, quien obstruye tu realización, bajo la consiga de “Todos lo hacen” o “Todos lo dicen”. Son los que obligan, bajo condena de rechazo o burla, a que te allanes a aceptar lo inaceptable, a decir lo que no dirías, a vestir lo que no usarías, a tomar lo que no tomarías, si pudieras elegir libremente y sin presiones. Diego: Hacer y dejar hacer... ¡Suena bien!... Cada cual en su lugar y todos conviviendo. Eso es lo que se dice ahora, pero creo que no se practica. Vanita: No estoy de acuerdo... Elegir podés, tenés todas las opciones del mundo y nadie te dice nada. Lo que está prohibido, es desechar. Ni bien vos decís que no vas a un lugar o que no querés amistad con alguien porque te parece que la onda que tiene, no va con vos, te señalan de todos lados como si hubieras cometido una atrocidad. Andrés: (con voz grave y señalándola con el dedo) ¡Estás discriminando, Vanita! (Risas y comentarios) Vanita: ¡En serio! A veces me tengo que bancar cualquier cosa, porque si sugiero que no estoy de acuerdo, se me vienen todos encima. Esas son consecuencias de una discutible Ley Antidiscriminatoria... Como ley jurídica supongo, que tiene fundamentos, pero el nombre es confuso. Discriminar es establecer diferencias, si cualquier ley me impide establecer diferencias, obstruye mi derecho a elegir. ¿Cómo puedo elegir, si no estoy facultada para establecer diferencias? ¡Es absurdo! ¿Eso no contradice la Constitución de cabo a rabo?... Veamos: si alguien es director de un monasterio de varones, tiene el derecho y la libertad de contratar varones para determinada labor, por ejemplo, para que cocine, y dentro de la misma línea, tiene el derecho a rechazar a cualquier varón que no sea coincidente con el dogma de ese monasterio, que tenga ideas contrarias a la prédica que allí se hace, o que por su vida privada, denote ser opuesto a los postulados. En otras palabras, ese supuesto director, discriminó todo y tiene fundamentos para hacerlo, porque si esas pautas no se cumplieran, la finalidad de su tarea, su objetivo, sería

- 218 -


EL DESCALIFICADOR

evidentemente perjudicado. Según lo que se interpreta de la ley, ese derecho no lo puede ejercer, porque inmediatamente, sería juzgado por “discriminación”. ¿Tiene algún sentido? Diego: Bueno, pero el tema pasa más por las actitudes racistas... Discriminar a la gente por su color, su raza, o su creencia... Supongamos que el director del monasterio del ejemplo fuera musulmán... ¿Aceptaría un cristiano o un judío como cocinero? Diego: No, porque tendría miedo que los envenene... (Risas y comentarios) Y es una reserva razonable. ¿Por qué no puede ejercerla? Al discriminar, no está degradando, sino empleando criterio conforme a su objetivo. Diego: En ese caso, tal vez, por una razón política... Pero lo que procura la Ley es que a todas las personas se les de las mismas oportunidades y derechos, partiendo de que todos somos iguales y que nadie tiene derecho a prejuzgar. ¡Ahí estás donde quería! La ley tiene sentido, si apunta a que NO SE DESCALIFIQUE a una persona, por el hecho de pertenecer a determinada raza, credo, condición social, o sexo. No debe inhibir mi derecho a elegir, discriminar, pero debe impedir que esa elección, sea peyorativa, prejuiciosa, atentatoria de cualquier derecho y respeto que cualquier hombre merece, por el simple hecho de ser humano. Por eso, debería llamarse Ley Anti descalificadora y toda réplica que de ella surja, sin duda, servirá para el bien de todos. Les dejo un trabajo para la próxima: pongan especial atención en detectar qué esta prohibido discriminar, y qué está propiciado descalificar. ¡No queden con lo visible! ¡Piensen!

- 219 -


EL PARADIGMA REFLEJADO EN LA POESIA

ANEXO I El Paradigma Reflejado en la poesía

Reflexiones de: Vanita Ferrari sobre el “Si” de Rudyard Kipling

- 220 -


EL PARADIGMA REFLEJADO EN LA POESIA

SI (Poema de Rudyard Kipling) SI GUARDAS EN TU PUESTO LA CABEZA TRANQUILA CUANDO TODO A TU LADO ES CABEZA PERDIDA. SI TIENES EN TI MISMO UNA FE QUE TE NIEGAN Y NO DESPRECIAS NUNCA LAS DUDAS QUE ELLOS TENGAN. SI ESPERAS EN TU PUESTO SIN FATIGA EN LA ESPERA. SI ENGAÑADO NO ENGAÑAS. SI NO BUSCAS MÁS ODIO QUE EL ODIO QUE TE TENGAN. SI ERES BUENO Y NO FINGES SER MEJOR DE LO QUE ERES. SI AL HABLAR NO EXAGERAS LO QUE SABES Y QUIERES. SI SUEÑAS Y LOS SUEÑOS NO TE HACEN SU ESCLAVO. SI PIENSAS Y RECHAZAS LO QUE PIENSAS EN VANO. SI CONSIGUES EL TRIUNFO, Y LLEGA LA DERROTA, Y A LOS DOS IMPOSTORES LOS TRATAS DE IGUAL FORMA. SI LOGRAS QUE SE SEPA LA VERDAD QUE HAS HALLADO A PESAR DEL SOFISMA DEL ORBE ENCANALLADO. SI VUELVES AL COMIENZO DE LA OBRA PERDIDA AUNQUE ESTA OBRA SEA LA DE TODA TU VIDA. SI ARRIESGAS EN UN GOLPE Y LLENO DE ALEGRÍA TUS GANANCIAS DE SIEMPRE A LA SUERTE DE UN DÍA Y PIERDES Y TE LANZAS DE NUEVO A LA PELEA, SIN DECIR A NADIE DE LO QUE ERES Y ERAS. SI LOGRAS QUE TUS NERVIOS Y EL CORAZÓN TE ASISTAN AÚN DESPUÉS DE SU FUGA DE TU CUERPO EN FATIGA Y SE AGARREN CONTIGO CUANDO NO QUEDE NADA PORQUE TU LO DESEAS, LO QUIERES Y MANDAS. SI HABLAS CON EL PUEBLO Y GUARDAS TU VIRTUD. SI MARCHAS JUNTO A REYES CON TU PASO Y TU LUZ. SI NADIE QUE TE HIERA LLEGA A HACERTE LA HERIDA. SI TODOS TE RECLAMAN Y NADIE TE PRECISA. SI LLENAS EL MINUTO INOLVIDABLE Y CIERTO DE SESENTA SEGUNDOS QUE TE ELEVEN AL CIELO TODO LO DE ESTA TIERRA SERÁ DE TU DOMINIO Y MUCHO MÁS AÚN SERÁS HOMBRE, HIJO MÍO.

- 221 -


EL PARADIGMA REFLEJADO EN LA POESIA

El “Si” que acaban de leer, y que fue escrito por Rudyard Kipling, ha sido elegido como cierre de nuestro libro. Algo así como una especie de broche dorado que reúne los diversos y tan relacionados temas abordados en cada uno de los capítulos. Decidimos incluir este poema, porque en él se manifiesta verso por verso, la síntesis de todo lo que significa ser Hombre según el Paradigma que les presentamos. Aquí se ponen de manifiesto aquellas condiciones que en el Ser Humano debieran habitar, como ser la serenidad, la búsqueda de emociones positivas, la sinceridad, la perseverancia, la Fe, la espontaneidad, el esfuerzo, la convicción y tantas otras que fueron señaladas páginas atrás. Recomendamos amigos lectores, que mediten sobre cada uno de los enunciados, buscando encontrar las constantes relaciones entre éstos y todo lo dicho en las diferentes conferencias. Daremos algunas pistas, para dejar luego el desafío en ustedes:

- En un momento tan caótico como el que enfrentamos no sólo a nivel nacional, sino mundial. Donde ahora más que nunca todo es cabeza perdida, y el desorden ha tomado las riendas, se hace necesario, imprescindible, no ceder a la tentación de la desesperanza y la confusión. Mantenerse en el eje propio, sin identificarse ni perderse en el tumulto exterior. Que más allá de las olas producidas en la superficie, nuestro interior permanezca calmo y firme a la vez, manteniéndose en una línea de conducta propia frente a los cambios externos. - Siempre abiertos a las dudas que los demás nos puedan plantear, sin aceptarlas como la verdad ni descartarlas como imposibles. Sólo tomarlas y trabajarlas desde allí, desde una duda positiva, sin que ello signifique la pérdida de mi fe y mi confianza. La única vía es dudar sobre la duda misma. - ¿Acaso aquello que me han dicho me ha ofendido? La herida que no llega a herir es posible solamente cuando se llega a estar tan limpio en lo interior, que no hay ni el menor resabio de aquello con lo cual se nos acusa. Para llegar ahí, hay que aprender a observar qué toco en nosotros ese puñal clavado, que fue lo que tanto nos molestó. La práctica de ese espejo que nos refleja, nos conducirá invariablemente, a no reaccionar al odio con más odio, buscando la revancha y la venganza, sino a "comprender" y allí, a pasos estaremos de amar. - El ser bueno y no fingir más de lo que se es, nos instruye acerca de que no basta la actitud externa para ganarse el cielo. Eso que llamamos moral de costumbres, poco y nada sirve para el verdadero autoconocimiento. Cuando el hombre se limita a ser un conjunto de actitudes aparentes, termina pareciendo y no siendo lo que debe ser.

- 222 -


EL PARADIGMA REFLEJADO EN LA POESIA

¿Cómo saber si estoy siendo o fingiendo bondad? El Desde dónde, el Para qué y Para quién, nos darán la clave. - El tema de arriesgar todo, perderlo y volver a la pelea, nos recuerda a la Plataforma de la que se habló en algún capítulo anterior. En el Trabajo interno, significa tener reunidas un conjunto de observaciones lo suficientemente interesantes de manera tal que cuando uno vacila y cae, cuenta con la fuerza y el empuje para no irse al vacío, sino que desde esa plataforma, uno regresa a la pelea. - Ser reclamado y no precisado, no es más ni menos que ayudar a los demás a crecer, a ser por sí mismos, sin convertir al otro en un apéndice ni a uno mismo en un gurú imprescindible. Enseñar el camino de la libertad interior sin construir el camino de la dependencia paralela. - “...y mucho más aún, serás Hombre, hijo mío”. El poema no dice “serás mejor hombre” o “más hombre”, ni siquiera habla de “super hombre”. Lisa y llanamente habla de Hombre, no como algo implícito en nosotros, sino como un estado a alcanzar. Trata de la esencia de lo que es Ser Humano (ya sea hombre o mujer). No trata de utopías o imposibles, sino que nos pone en contacto con aquello puro, sano, esencial, que estamos llamados a ser. Este libro no ha sido más que el anhelo de acercarles ese rayito de luz que les transmita la esperanza y motivación de saber que existe la manera de desandar todo ese berenjenal al que llamamos “yo”, que el sentido de la vida está y existe, sólo hay que salir a buscarlo, para que algún día cuando se nos pregunte quién somos, podamos llegar a decir con la cabeza erguida y el semblante tranquilo “¡sólo un Hombre!”

- 223 -


CARTA AL LECTOR

ANEXO II Carta de M贸nica para sus alumnos

- 224 -


CARTA AL LECTOR

Queridos todos: Les escribo desde una pequeña colina, y recostada sobre un grueso y frondoso árbol. Desde aquí, puedo tener una vista panorámica de lo que fue mi vida... ¡No parece una, sino mil vidas! Puedo ver una niñita tímida, en franco y confiado diálogo con Dios, a quien le confiaba el temor que le producía la gente. Puedo ver una adolescente conflictuada por sus kilitos de más y a una jovencita atrevida y audaz, capaz de llevar el mundo por delante. Veo una mujer fuerte y decidida pegada a otra sensible y dulce, como las dos caras de una misma moneda. Veo una mujer en error, proyectada en su sombra de virtud. Veo la necesidad detenida por el orgullo y puedo sentir cómo el frío de la desolación, se combina con la tibieza de la ternura... Ahí está el día en que descubrí mis manos... ¡Qué maravilla! Y también el día en que me di cuenta que estaban vacías. ¡Cuánto dolor!... Desde aquí puedo recorrer despaciosamente todos los pasillos del templo interior. Olor a humedad de ausencias... Aromas de encuentros sabios y profundos. Todavía está mojado el rincón de las lágrimas inútiles, de las esperanzas egoístas y avaras... Todavía hay ecos de las risas buenas y de las otras, de la sonrisa cómplice y de la maliciosa. ¡Todo está igual!... pero ya no me pertenece. Las escenas se superponen como fotos tiradas al viento. No fue más importante llorar que reir. Tener que no tener. Llegar o partir. Todo en su momento tuvo la intensidad apropiada, tanto las pérdidas como las ganancias. Puedo sonreír: Todo fue necesario. Me veo entrar y salir cien veces del mismo lugar... Un laberinto para ratones y yo era quien quería salir. Veo a ese intento obcecado e incesante de Ser, actuar como energía rompe hielos o pala cargadora de ensueños. ¡Qué loca carrera!... Hay ojos que reprochan, brazos que quedaron laxos y otros rebosantes de ternuras, labios interrumpidos en la mitad de la palabra o del beso... Corazones desalentados, gestos de sorpresa, oportunidades regaladas o tiradas al abismo como pertrechos inservibles. Hay huecos, ausencias grandes y pequeñas, mías y de otros, cráteres de ilusiones de las que sólo queda una pequeña marca seca. Instancias fotografiadas, pero ya inexistentes. Las imágenes tienen ahora sonidos. Hay muchos “Por qué”... ¿Por qué hay más orejas que gente si nadie escucha nada?... Por qué a mí, por qué yo, por qué él... y aquellas otras incógnitas gritando todavía más fuerte: ¿Qué es la vida? ¿Por qué se nace? ¿Para qué se muere? ¿Quién soy?... ¿Por qué?... ¿Qué? ... ¿Para qué?... de tantas cosas... de todo... Las preguntas forman una partitura y reconozco su música. Está inscripta, pero ya no es mía...

- 225 -


CARTA AL LECTOR

Entre errores garrafales y aciertos pequeños, entre emociones saltarinas, vibrantes y dolores que traspasan de lado a lado, hay texturas de amores y de odios. Son retazos de una tela vieja, que lucen un monograma inexistente. Puedo ver la huella amarillenta del tiempo, puedo oler el perfume añejo del recuerdo, pero se van girando por el aire, en remolinos de desaliento por que ya, no tienen dueña. Desde esta colina puedo ver que lo que fue importante...sólo “lo era”. Veo que lo bueno y lo malo, lo lindo y lo feo, se saludan como viejos amigos. Acaso ¿No eran oponentes? Como el actor cuando baja el telón, asistí una vez más a la escenografía donde se desarrolló un personaje, el más importante: El mío... Sin embargo, yo estoy afuera, en la platea. El personaje quedó allí, mientras que yo estoy acá. De a uno, ustedes vinieron a preguntarme -¿Dónde está el río?... – ¿Cuáles son las uvas que no envenenan?... -¿Cómo se llega a la posada?... Con las pupilas agrandadas de ansiedad, repetían “aquellas” (mis preguntas) como si fueran el eco de otros tiempos. Me vi en cada uno de ustedes, en cada error, en cada ansia, en cada esperanza... Acaso ¿volvía yo misma con otros rostros y otras presencias? Si era así, podía ahorrarles camino, les diría donde están las trampas, cual es el sendero que se corta, como reconocer los pantanos, evitar entrar en cuevas de reptiles. Al fin, tanto cansancio serviría para otros; para marcar un camino, acelerar el tiempo, facilitar la llegada... Así nacieron las charlas sin nombre, la enseñanza sin marca registrada, el curso que no es curso y que no se sabe como definirlo. Mi búsqueda, compartida. Mis huellas, ofrecidas como señales. ¡Fue y es hermoso! Pensé que eso era todo. Ahora me piden publicar algunas de esas charlas... me dicen que les hizo bien y que otros pueden necesitarlo. Me muestran rostros sedientos y almas quebradas y me dicen que esta experiencia puede ayudarlos... Sentada en esta pequeña colina con la espalda sostenida por un viejo y frondoso árbol, oigo los ecos de esos encuentros. Como fotos superpuestas los rostros de ustedes reviven en el amor, el dolor, el miedo, la sorpresa, el ansia, la rebeldía, el surco que se abre, la semilla que se desecha... Todo lo vivido ¡Ya es de ustedes! ¿Permiso? ¿Para qué?... Sólo quiero decirles una cosa. En este peregrinar tantas veces inútil tomando atajos equivocados, enfrentada a peligros inminentes, cansada de girar en círculos viciosos, lo único que tengo, lo único que me quedó de esa travesía, lo único que es mío y que no puedo dar a nadie, es mi Verdad. La guardo en el puño de mi mano y me iré con ella cuando llegue el momento. ¡No es que quiera retacearla! Quisiera darla, pero es imposible, no la recibirían ni ustedes, ni quienes lean esas páginas... La verdad es algo que uno debe procurar por sí mismo, con fatiga, sangre,

- 226 -


CARTA AL LECTOR

sudor y lágrimas, caminando por el filo de la navaja y perseverando sin desmayos. Una vida que parece mil vidas, fue canjeada por una sola verdad. El secreto que descubre todos los misterios, el foco que ilumina toda oscuridad, la llave del constante comprender, hace rato que está inscripta en una piedra y se resume así: “Amar a Dios por sobre todas las cosas, y al prójimo como a nosotros mismos.” ¡Eso es todo! El desafío está en llegar ahí. Los ama Mónica 21 de septiembre de 2003.

- 227 -


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.