Revista Occidente Nº 527 Mayo 2022

Page 40

LAS CALETAS DE CHILE:

NO HAY MAR QUE POR BIEN NO VENGA POR EDUARDO GÁLVEZ ASTORGA, NICOLÁS CORNEJO DURÁN, Periodistas LORENZO MELLA, Fotografías

¿Puede acaso competir un bote de madera con un buque pesquero? Fuimos al litoral central para preguntarle a los pescadores cómo es trabajar y vivir en el mar, ese mismo mar que tranquilo nos baña y que, a pesar de todo, sigue prometiendo un futuro esplendor.

P

ara algunos el planeta Tierra debería llamarse Agua: más del 70% del globo terráqueo está compuesto por H2O y en su conjunto forma lo que llamamos hidrósfera, en cuya totalidad podemos encontrar los ríos, océanos y mares, siendo estos últimos los de mayor presencia en nuestro país. Y cómo no, si Chile tiene una costa de 6.435 kilómetros que va de Arica a Magallanes, prácticamente, una longitud que baña la totalidad del territorio nacional, y que la gente suele visitar en temporada estival para descansar en las playas. Pero la actividad en el borde costero no es algo propio del verano y los turistas. Durante todo el año podemos encontrarnos con los pescadores y su trabajo en las caletas pesqueras, el lugar por excelencia donde se desarrollan las actividades vinculadas a la pesca artesanal, es decir, a la extracción, la venta y el consumo de los distintos productos marítimos. De acuerdo a datos entregados por el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, son más de cuatrocientas cincuenta caletas a lo largo de todo Chile y más de ochenta mil personas inscritas para ejercer este oficio que año a año logran desembarcar en la costa cientos de miles de toneladas de pescados y mariscos, cifras que suenan desorbitantes, pero que terminan siendo ínfimas al lado de las grandes pesqueras.

MAYO 2 0 22

CALETA QUINTAY, UNA PESCA FAMILIAR La vista que asoma antes de bajar la pendiente y llegar a la Caleta Quintay, es la antesala de un secreto, de esos que uno solo quiere compartir a medias para que pueda perdurar en el tiempo. Ubicada en la comuna de Casablanca, a ciento veinticinco kilómetros de Santiago, Quintay, además de su caleta, tiene una de las playas más extensas del litoral central. Su historia nos dice que fue fundada alrededor de 1900 y que en los años cuarenta se construyó una de las balleneras más grandes del país. Hoy por hoy, con la ballenera como museo y su caleta como centro activo de comercio, también es reconocido por las buenas condiciones que presenta para practicar buceo. Allí mismo, en uno de los talleres donde se imparten clases, nos encontramos con Roberto Sepúlveda (53) pescador artesanal con más de treinta

38

R E V I STA OCC I DE N T E


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.