La maldición de los Montpensier. Francisco Robles. Algaida

I I P R E M I O I N T E R NAC I O NA L D E N OV E L A SOLAR DE SAMANIEGO

Dosier de Prensa

Hay maldiciones capaces de cambiar la historia de un paĂ­s y la vida de un hombre

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Dotado con 25.000 euros, el Certamen busca consolidarse como referente de la literatura en castellano. El jurado ha estado presidido por Luis Alberto de Cuenca e integrado por Soledad Puértolas, Jesús Ferrero, José María Merino y Luis del Val, ganador de la anterior edición con La transición perpetua.

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FRANCISCO ROBLES, (Sevilla, 1963), licenciado en filología Hispánica y profesor de literatura, es además un periodista de dilatada trayectoria en prensa escrita, radio y televisión. Actualmente destaca su labor como columnista de ABC y su participación en el programa radiofónico de Herrera en COPE. También es autor de más de una veintena de títulos sobre historia, literatura y tradiciones populares, así como de novelas como El aguador de Sevilla, una intriga histórica sobre la figura de Velázquez. Con La maldición de los Montpensier acaba de obtener el II Premio Internacional de Novela Solar de Samaniego.

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HAY MALDICIONES CAPACES DE CAMBIAR LA HISTORIA DE UN PAÍS Y LA VIDA DE UN HOMBRE La enigmática muerte del escultor Antonio Susillo es el último eslabón de la cadena de maldiciones que sufrió la infanta María Luisa Fernanda de Borbón —hermana de Isabel II— desde que se estableció con su familia en el palacio de San Telmo de Sevilla, convertido en verdadera Corte Chica del reino de España durante una generación. Su mirada femenina nos adentra en un siglo agitado y tumultuoso, plagado de revueltas, pronunciamientos y conspiraciones a los que algunos casos no fue ajeno su propio esposo, el duque de Montpensier, eterno aspirante al trono. Estas memorias apócrifas desvelan la clave de aquellos acontecimientos sucedidos en el siglo XIX y que sin embargo —como si de otra maldición se tratara— han marcado la historia de España hasta nuestros días.

15,40 x 23,00 cm 400 páginas Cartoné ISBN 978-84-9067-688-2 CÓDIGO 2963075

€ 20,00 EBOOK 978-84-9067-689-9

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ENTREVISTA FRANCISCO ROBLES Si tuviera que definir La maldición de Isabel II. Disfrutó en Sevilla con la los Montpensier, ¿con qué género no- Corte Chica que se montó alrededor de los Montpensier y sufrió muchísivelístico se quedaría?

Creo que no es una novela de gé- mo como madre. nero, sino una mezcla. Contiene intriga, misterio, mucha carga histórica, incluso política, sin descartar el análisis psicológico de los personajes reales e imaginarios que aparecen a lo largo de la narración.

¿Se refiere a ese sufrimiento cuando titula esta novela La maldición de los

Porque vivió un siglo fascinante, como es el XIX, desde un lugar privilegiado y estratégico. Fue hija, hermana, nuera y madre de reyes o reinas. Estuvo siempre en primera línea durante las conspiraciones que tramó su esposo. Asistió en primera persona a la revolución que destronó a Luis Felipe, el rey de los franceses, en la revolución de 1848. Huyó sola tras un abandono que le costaría mucho a su esposo, y fue rechazada por la reina Victoria de Inglaterra y por su propia hermana, la reina

«MONTPENSIER FUE UN PERSONAJE CONTRADICTORIO. TAL VEZ, EL REY QUE AQUELLA ESPAÑA HUBIERA NECESITADO»

Montpensier?

En buena parte sí. María Luisa Fernanda de Borbón, duquesa de Montpensier por el título que osten¿Por qué ha elegido a la duquesa de taba su marido, perdió siete de los Montpensier como narradora de una nueves hijos que tuvo. Una auténtiparte de la novela?

ca tragedia personal que llevó con entereza gracias a una fe que sus adversarios o enemigos tildaban de beatería. Su personalidad contrastaba con la de su esposo, un ilus-

trado que no ocultaba su admiración por Voltaire y que no comprendía las prácticas piadosas de su mujer y del pueblo español en general.

«SUSILLO PUDO HABERSE CONVERTIDO EN EL RODIN ESPAÑOL, PERO UNA MALDICIÓN QUE LLEVABA DENTRO SE LO IMPIDIÓ…»

Antonio de Orleans, el benjamín del rey Luis Felipe, aparece en su novela como un conspirador nato. ¿Hasta qué punto llegó el duque de Montpensier en su ambición por el poder?

Hizo todo lo que pudo para derrocar a su cuñada Isabel II, desde financiar la revolución de 1868 que la desalojó del poder, llamada La Gloriosa, hasta comprar periódicos y voluntades con un dinero que salía de su propio bolsillo. También se hizo con el favor

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del pueblo gracias a las obras de caridad que hacía junto con su piadosa esposa. Pero como eso no era bastante, llegó hasta el extremo de enfrentarse con el general Prim hasta las últimas consecuencias porque lo traicionó, según el duque, tras La Gloriosa: en lugar de cederle el trono a María Luisa Fernanda, infanta de España, prefirió buscar reyes por Europa en un episodio con tintes sarcásticos, hasta convencer a Amadeo I de Saboya. Además, se batió en duelo con un infante de España que era primo de su esposa y de la reina. ¿Quién da más?

y que protagoniza el arranque el palacio de San Telmo… de la novela.

La muerte de Susillo, un artista que vivía su plenitud profesional, es la confirmación de que algo está maldito en ese palacio de San Telmo que compraron los Montpensier en Sevilla y que les sirvió para instalar la Corte Chica. Susillo fue uno de los grandes artistas españoles del XIX. Triunfó en París, pudo haberse convertido en el Rodin español, pero una maldición que llevaba dentro se lo impidió…

Algo parecido le sucedió a Bécquer, ¿Montpensier fue un conspirador que también tuvo relación con o algo más?

Fue un personaje contradictorio.

Tal vez, el rey que aquella España hubiera necesitado. Hay que destacar su cultura y su mecenazgo.

Le encantaba proteger a los artistas.

Uno de esos artistas fue Antonio Susillo, escultor sevillano que murió en trágicas circunstancias

«AL ESCRIBIR LA NOVELA HE COMPRENDIDO QUE SOMOS LOS HIJOS DE ESA ÉPOCA. LAS DOS ESPAÑAS VIENEN DE AHÍ. Y AHÍ SEGUIMOS»

Estudió allí cuando se quedó huérfano. Hay lugares que marcan las historias, y en esta novela se demuestra. La duquesa busca esa maldición al final de su vida. Y la encuentra.

¿Qué perfil lector es el más adecuado para esta novela?

Alguien que quiera meterse en una intriga policíaca -hay un personaje muy interesante que es un inspector de policía de la época- con raíces y derivaciones históricas, y que al mismo tiempo sienta la necesidad de comprender el tiempo que vivimos gracias a las claves que nos ofrece el siglo XIX. Al escribir la novela he comprendido que somos los hijos de esa época, y que por muchos adelantos tecnológicos que nacieran entonces y que se hayan desarrollado hasta nuestros días, seguimos pensando exactamente igual, tanto en lo personal como en lo colectivo. Las dos Españas vienen de ahí.

Y ahí seguimos.

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