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OTTI BERGER
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Una de las tantas mujeres que realizaron importantes aportaciones al mundo del textil fue Otti Berger, considerada como una de las mejores estudiantes de la Escuela de la Bauhaus donde años más tarde se convertiría en la jefa y encargada del Taller de Textiles a inicios de la década de los 30 del siglo XX. También patentaría varios de sus diseños que pueden apreciarse hasta la fecha que seguramente en alguna ocasión habrás visto. Te presentamos parte de la vida y carrera de Otti Berger, la jefa del Taller de Textiles de la Bauhaus que pa-
FORMACIÓN ACADÉMICA Y TALLER DE TEXTILES
Nacida en Zmajevac (hoy Croacia) el 4 de octubre de 1898, Otti Berger se desempeñó como tejedora y artista textil. Su formación académica comenzó en el Collegiate School for Girls, posteriormente asistió a la Real Academia de Artes y Oficios en Zagreb (hoy conocida como Academia de Bellas Artes de la Universidad de Zagreb) en 1922, culminando sus estudios ahí en 1926. En ese año acudió a la Escuela de la Bauhaus que en esos entonces, su director era nada más y menos que Walter Gropius, arquitecto alemán y fundador de dicha institución.
En 1927, decidió inscribirse en un curso preparatorio de estudios en Vorkus, el cual iba ser impartido por el fotógrafo y pintor húngaro Lászlo Mohloy-Nagy en la Bauhaus, con quien entabló una amistad. Además, Otti estuvo presente en conferencias impartidas por Wassily Kandinsky y Paul Klee. En 1929 culminó sus estudios, siendo la mejor de su clase y matriculándose en el Taller de Textil. Durante su estadía en la institución hizo grandes amistades, entre una de ellas era su colega de profesión Gunta Stözl, quien además fue una de sus colaboradoras que dejó la dirección del Taller de Telas, siendo Otti quien la sustituyó en 1931. En compañía de Gunta Stözl y Anni Albers comprendieron la función de los textiles como artesanías femeninas, ideología que replicó para explicar sus trabajos pictóricos y fotográficos. Asimismo, redactó un tratado acerca de las telas y una metodología en la producción textilera que lamentablemente nunca se publicó. Incluso, desarrolló un enfoque experimental de los textiles en
la Bauhaus. Ha sido la única tejedora y diseñadora que patentó sus diseños. Durante su estancia en el taller que dirigió de manera independiente, tenía como propósito hallar nuevas soluciones en el que hacer del textil al adentrarse en las necesidades de la industria. En esa época creó su propio plan de estudios. Sin embargo, a pesar de cumplir con todas las normas pedagógicas de producción y prácticas establecidos en el programa escolar, nunca se le concedió un nombramiento oficial. Cuando el arquitecto Mies van der Rohe asumió la dirección de la Bauhaus, ordenó que la diseñadora Lilly Reich asumiera el puesto de Otti en el taller en 1932, ocasionando que se convirtiera en su adjunta.
SURGIMIENTO DE SU PROPIO ESTUDIO DE TEXTILES EN BERLÍN
Luego de los eventos que ocurrieron, decidió abandonar la Bauhaus en 1932, pero esto no representó ningún impedimento para que prosiguiera en su carrera al abrir su propio estudio en Berlín que nombró “‘Atelier for Textiles”. Gracias a los conocimientos que adquirió en la Bauhaus, realizó obras modestas abstractas y expresionistas. De igual manera, mandó a patentar muchos de sus patrones y diseños. Constantemente innovaba al implementar nuevos materiales en sus trabajos, lo que le permitió colaborar diversas empresas textiles que se dedicaban a fabricar componentes que brindaban soluciones innovadoras. Lamentablemente, cerró su estudio debido a que en aquellos entonces Alemania estaba siendo dominado por el nazismo. Integrantes nazis le dijeron que no contaba con los permisos correspondientes para su función por tener raíces judías.
ESCAPE DE LA ALEMANIA NAZI Y MUERTE EN AUSCHWITZ
Al sentirse que estaba en un inminente peligro, escapó de Alemania rumbo a Londres para viajar a los Estados Unidos con el fin de encontrarse con algunos maestros de la Bauhaus, incluyendo a su prometido Ludwig Hilberseimer. En 1938, pudo comunicarse con László Moholy-Nagy, la invitó a que se uniera al New Bauhaus en Chicago, pero ella no contaba con la visa. Por un tiempo esperó a que se le asignara el visado. Mientras tanto, comenzó a buscar un trabajo en Inglaterra, aunque no pudo encontrar uno porque los ingleses la rechazaban al considerarla una “alemana” en tiempos de pre-guerra. Frustrada ante la difícil situación y al enterarse que su madre estaba muy enferma, regresó a Zmajevac para cuidarla. Tiempo después, fue deportada junto con su familia al campo de Auschwitz, uno de los campos de concentración más despiadados durante la Segunda Guerra Mundial. Falleció ahí en 1944 antes de que los rehenes fueran liberados. Gracias a sus contribuciones, es considerada como una de las mejores en su rama al dejar un impresionante legado que aún perdura en estos tiempos.